Hotel room service

Titulo: Hotel room service
Autor: Mily_Yun
Pareja: HoMin
Género: Slash / Lemon
Extensión: Oneshot
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El sonido que produjo el timbre de su departamento indicaba que alguien llamaba a la puerta. Hacía tiempo que estaba esperando esta oportunidad… no la desaprovecharía. Oportunamente su novio tuvo que salir de la ciudad por asuntos de trabajo durante algunos días. Simplemente la ocasión perfecta.

Durante algunos meses atrás un muchacho del servicio de mensajería iba casi todos los días a su departamento, le llevaba cartas, regalos y hasta flores de admiradoras… cosa que le agradaba por ser cantante, actor y modelo famoso, sin embargo… con el transcurso de los meses los obsequios pasaron a un segundo plano, ahora lo que le llamaba la atención era quien se los llevaba…el joven mensajero, aquel que posee un rostro tan bello, tan angelical a su parecer, buen porte y… buen cuerpo. Cada vez que el moreno abría la puerta al joven castaño, de quien hasta ahora no sabia el nombre, este se ponía nervioso y colorado a la vez, entregaba los paquetes y se retiraba en seguida… cosa que no paso desapercibida para el dueño de los obsequios. Él sabía que el muchacho sentía algo por su persona… y lo más asombroso es que él mismo muy en su interior también, lo deseaba, deseaba saber cómo sabían esos labios aparentemente vírgenes… quería saberlo. No es que no ame a Jaejoong, su novio, sino es que aquel joven castaño despertaba en él un deseo incontrolable, desconocido, excitante. Y justo es hoy el día en que cumplirá sus deseos… los haría realidad… lo tendría para él.

El timbre volvió a sonar por segunda vez, el moreno se levantó de su cama aún en pijama y emprendió el rumbo hacía la entrada. Lo primero que notó al abrir la puerta era como siempre, a su bello castaño y cajas de obsequios… ocasión que aprovechó.

-B-buenos días señor- dijo haciendo una venia el castaño.
-Hola- respondió con una sonrisa sexy; al instante notó el sonrojo que causó en el otro.
-Aquí tiene - emitió entregándole una carpeta para que firme.
-Hmm… puedes ponerlas adentro?- dijo mientras firmaba.
-Cla-claro- respondió aceptando.

El mayor le cedió el paso gentilmente al joven que era un par de centímetros más alto y acto seguido cerró la puerta. Conforme se adentraba algo dentro de él despertaba… y eso no era bueno. El joven castaño puso los paquetes sobre el lugar indicado, hecho eso estaba dispuesto a marcharse pero el moreno actuó rápido…

-Espera... quieres algo de beber? Debes estar cansado… Agua, té, lo que sea
-Gracias… un poco de té estaría bien.

Contento con la aprobación, el mayor fue de inmediato a la cocina para traer la taza de té que le había pedido. El silencio invadió todo el lugar, el joven castaño estaba realmente nervioso, miraba a su alrededor y no entendía ni por qué había aceptado la invitación. Las manos le temblaban, miró a un lado y observo sobre el pequeño buró adyacente a él una foto, miró más de cerca y pudo apreciar al moreno y a otra persona… era su novio Jaejoong… se estaban dando un beso. Al instante el joven mensajero se puso colorado y ahí es cuando el moreno dejó notarse. Le ofreció la taza de té pero al momento de recibirla las manos del castaño fueron algo torpes y dejó caer la taza sobre sí mismo, el té estaba algo caliente por lo que dejo salir un grito y se paró al instante.
-Ausch!
-Estás bien? No fue a propósito
-No no, fue mi culpa. Rayos está caliente…- prosiguió sacudiéndose y al instante se quitó la camisa sin pudor alguno-… Lo siento tengo que irme.

Su cuerpo fue descubierto en su totalidad, tenía unos músculos bien definidos. Esto era lo último que faltaba, el moreno no podía esperar, necesitaba hacer algo y ya, lentamente se fue acercando al joven y se apegó a él sosteniéndolo por la cintura, causando sorpresa en el otro que intentó alejarse, pero el moreno lo impidió uniendo sus labios en un acompasado beso que luego se volvió pasión pura porque sorprendentemente el más joven era quien se apegaba más. Ante esto, el moreno no se inmutó y de un solo movimiento camino hasta el sofá y se dejaron caer quedando él encima del muchacho. Nadie dijo nada, las palabras pasaron a un segundo plano, solo con la mirada se indicaban el siguiente paso.

El moreno comenzó a besar el torso ajeno ya desnudo desde el cuello hasta la pretina del pantalón causando un audible y agradable gemido. Dócilmente el mayor prosiguió a sacar la molestosa prenda y en pocos segundos lo dejo tal y como llegó al mundo. El más alto no pudo evitar ruborizarse, el otro lo miraba con mucha lascivia y deseo a la vez… esto simplemente era pasión pura. El experto moreno volvió de nuevo a los labios ajenos para besarlos mientras que con su propia mano empezó a bombear la previa erección del castaño. Los gemidos que emitía el joven eran ahogados en aquella exquisita cavidad que no dejaba tregua a nada, estaba llegando al orgasmo muy pronto y en reacción a la impotencia que sentía por tocar la piel ajena el joven castaño como pudo fue desgarrando el pijama que vestía el moreno y no contento con eso le araño la espalda… derramándose en la mano ajena.

-Auch- el moreno sorprendido por la reacción dejo salir un leve gemido, mas no se amilanó, prosiguió besándolo… ya era adicto a esos labios.
-Lo siento- susurró sobre sus labios
-No importa… quieres que siga?- preguntó vacilante, mas como respuesta, el castaño entrelazó sus piernas alrededor de la cintura ajena e hizo el contacto aún más intenso.
-Si…- susurró mientras sus piernas se mantenían en esa posición-…Pero aún tienes puesto el pantalón… no es justo- hizo un tierno puchero a la vez que sus traviesas manos bajaron hasta la pretina del pantalón del moreno y con su ayuda logró despojarlo de todo… ahora los dos ya se encontraban totalmente desnudos y sensibles ante cualquier roce proporcionado.

La posición les era favorable, el castaño cogió sin previo aviso los dedos del otro y empezó a lubricarlos con su propia saliva… simplemente excitante. El moreno lo besó otra vez y al instante simuló una penetración con dos de sus dedos, la reacción del otro no se dejo esperar, soltó un gemido sonoro mas no se resistió; su compañero prosiguió e introdujo un tercer dedo… haciendo encorvar de dolor al castaño.

-Hazlo ahora- pidió cerrando los ojos. El moreno sintiéndose triunfante no tardo mucho y antes de que se diera cuenta ya lo estaba embistiendo salvaje, ondulante y preciso. Los gemidos del mas alto retumbaban en aquella habitación, el sudor perlaba sus cuerpos, sus alientos se entremezclaban… sus deseos secretos se hacían realidad.

El mayor aún no podía creer lo que estaba haciendo, ni en sus sueños más húmedos había imaginado que aquel muchacho fuera tan exquisito y singular, incluso estaba sintiendo muchas más sensaciones que cuando lo hacía con su novio… y eso ya era decir bastante.

El joven castaño se aferraba a la espalda ajena y escondía su rostro en el hueco que se formaba entre el hombro y el cuello del moreno, sus gemidos se ahogaban ahí, su respiración sonaba entrecortada… pronto llegaría al orgasmo. Ante esto su compañero lo tomó por las caderas y lo embistió más fuerte, los gemidos eran más sonoros cada vez que tocaba ese punto en especial, estaban llegando al mismo cielo.

-Ahhmm- gemía entrecortadamente- Ra…rápido… más rápido- pedía inconsciente.
-Como de…desees…- dijo el moreno aumentando el vaivén, mas luego se detuvo de repente. El castaño lo miró confundido-…Pero… primero dime… dime tu nombre- susurró. El joven castaño esbozó una sonrisa y apresó sus labios.
-Te lo diré… cuando me dejes satisfecho- le susurró en el oído
-Entonces…- prosiguió con sus movimientos-…Será… rápido, señor desconocido…- lo penetró duro.
-HM… ahí… vuele hacerlo ahí- gimió besándolo ahogadamente. El moreno acató al pedido y dio un par de estocadas más en ese lugar, de pronto sintió un conocido hormigueo en su parte baja… llegaría pronto… y no sería el único. Dos estocadas más y el castaño se vino en sus vientres por el constante roce de ambos, pero aún no acababa, él se acercó a los labios de su anfitrión y los lamió con lujuria excitando todavía más al moreno que al instante soltó un gemido grave, sentía como se venía dentro de la cavidad del mensajero.
Los espasmos le recorrieron por toda la espina dorsal… se dejó caer encima del joven castaño.

-Eso… eso fue asombroso- jadeó
-Ahora… me dirás tu… nombre?- preguntó el moreno cerrando los ojos.
-Claro… mi nombre es Ch…-

-Yunho?- preguntó un joven rubio sentado al borde de la cama acariciándole los cabellos
-Te llamas igual que yo? –Abrió los ojos y al instante palideció- Jae! Q-que… –se sentó y miró a los lados como buscando algo
-Sucede algo mi amor?
-No… -se talló los ojos; estaba sorprendido-…Cu-cuando llegaste
-Hace apenas unas horas…- se puso de pie-…Yunnie te sientes bien? Estás pálido
-Si… estoy bien JaeBoo- musitó recostándose y poniendo su cabeza encima de su almohada- “Así que… todo fue un sueño? No puedo creerlo
-Voy a preparar el desayuno, amor estás bien?
-Claro JaeBoo… que bueno que llegaste
- Yunnie…- dijo acercándose al moreno-…Te extrañe mucho…- le besó los labios dulcemente.
-Y yo a ti Boo- pronunció esbozando una sonrisa. El rubio contento con eso fue a la cocina como lo planeó antes- “Que tal imaginación la mía… rayos soy un pervertido… aunque todo fue tan real…- el moreno cerró los ojos y lentamente al momento de estirarse deslizo sus manos por debajo de la almohada-…Qué es esto- pensó mientras sacaba un pedazo de papel
- Q-QUÉÉÉ????- gritó
-Yunnie que sucede!?- preguntó asustado desde la cocina a su novio
-N-no nada Boo
-Hoy estás raro mi amor.

El moreno se quedó de piedra al leer el pequeño mensaje que contenía aquel trozo de papel…


“Eres muy bueno en lo que haces. Me dejaste satisfecho.
Mi nombre es Shim Changmin… un verdadero placer conocerte.
Nos veremos de nuevo… Yunho”

-Con que… después de todo fue real… Changmin…- musitó en voz baja a la vez que dibujaba en su rostro una sonrisa cómplice.

Lo que sucedió aquella noche nunca nadie lo supo; solo que cada vez que Jaejoong viajaba al extranjero por negocios… Yunho sabía que no estaría solo...
Adivinen con quién…
Lo dejo a su pervertida imaginación…



F…i…n.n…