Sin alas que protejan - Cap. 30

El salir de aquella casa fue un alivio total. Inhalar y Exhalar aire fresco nunca se sintió tan bien como en ese momento.

Jaejoong ya hacía recargado en la pared de enfrente de la casa con la cabeza agachada y su mirada hacía el suelo.

Changmin le miró de lejos y sonrió. Aquel frente a sus ojos debía ser algún tipo de ángel, aparte de convertirse en su compañero y padre de sus hijos le estaba eternamente agradecido. Sacarlo de su infierno fue lo mejor que pudieron hacer por él. La noticia de que su padre estaba fuera del país le tranquilizaba del todo, ahora ese hombre ya no podrá hacerle daño en absoluto.

Se acerco a él lentamente sin quitar su sonrisa.

-Jae-

El mencionado levantó la mirada y al observarlo le devolvió la sonrisa.

-¿Qué a pasado?- Preguntó. -¿Te dijo algo?-

-Si... Pero nada importante realmente-

-¿Lo hiciste?-

-¿Eh?-

-¿Te pidió perdón, cierto?- Dijo.

-¿Pero... Como sabes?- Dijo curioso.

-Bueno ¿para que otra cosa te buscaría tu madre?- Preguntó Jae, sintiéndose un “sabelotodo”. -¿La perdonaste?-

Changmin se quedó serio unos instantes y volvió a sonreír.

-La respuesta no importa, con una conversación me basto para cerrar este horrible ciclo-

Jae soltó una pequeña y nada discreta risita.

-Eso es un “¿Que te interesa, Jaejoong?” ¿Eh?- Preguntó con tono de broma.

Changmin se sonrojo.

-¿Eh? No, claro que no solo digo que...-

-Jeje, no importa- Puso su dedo índice en los labios del menor. -Se a lo que te refieres- Acto seguido le besó como quien esta enamorado. -Te amo, Minnie.... Mi niño-

-Yo también te amo-

Pegaron sus frentes y sonrieron.

-Regresemos a casa- Dijo Jae.

-De hecho, quería ir por los bebés e ir a otro lado-

-¿Eh? ¿A donde?-

-Ya lo veras- Sonrió.

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-Entendido-

-¡Quiero que ese trabajo quede terminado antes de finalizar la semana! ¡¿Me escuchaste?!- Dijo un molesto Junsu. -Por el dinero no te preocupes, te pagaré bien-

-No se preocupe, a más tardar mañana queda-
-Eso espero- Y colgó sin más. Bufó y empezó a reír. -Ahora si vamos a ver quien gana, Shim- Dijo para sí.

Escuchó la puerta de la entrada abrirse, sabia de quienes se trataban.

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Changmin se acercó a sus hijos.

-¿Como se portaron mis angelitos?-

Los bebes solo sonrieron y movieron sus manitas y piecitos de emoción.

-¿Adivinen que?- Dijo. -Hoy los llevaremos a conocer a alguien muy especial-

Tomo a los bebes y los puso con cuidado en la carriola doble.

-Vamos, Jae- Dijo. -Toma la pañalera-

Y salieron de nuevo de aquella enorme casa. No caminaron mucho antes de detenerse en lo que parecía ser una acogedora casa.

-¿Qué hacemos aquí, Changmin?- Preguntó Jaejoong, curioso de lo que observaba.

-Solo mira- Sonrió.

El menor se acercó a la reja de la cochera y timbro un par de veces.

La puerta se abrió y una mujer apareció en la entrada, en cuanto reconoció a Changmin se acercó a él con una sincera sonrisa.

-Buenas tardes, Señora Park-

-Changmin, que gusto que hayas venido-

Yeeun abrió la puerta para que pudieran pasar sus invitados.

-Señora Park, le presento a mi pareja, Kim Jaejoong-

-Mucho gusto, Señor Kim- Estrechó su mano.

-Y bueno- Continuó Changmin. -Aquí esta uno de los motivos de mi ausencia- Dijo refiriéndose a sus hijos.

La Señora Park se agachó hasta quedar enfrente de los bebés y sonrió aún más.

-Son hermosos- Dijo. -¿Como se llaman?-

-Ella se llama Melody y El se llama Jaemin-

-Que bonitos nombres- Expresó. -Y se parecen mucho a usted, Señor Kim-

Jaejoong soltó una pequeña risa un poco sonrojado y sintiéndose alagado.

-Señora Park- Dijo Changmin. -¿Está Jun?-

-Si, esta adentro haciendo su tarea de la escuela con mi esposo- Respondió. -Vamos entren- Invitó gustosa.

La pareja la siguió.

-Jun, cariño. Tienes visita-

-¿Visita?- Se escuchó la voz del pequeño.

Al ver de quien se trataba el pequeño corrió con los brazos abiertos hacía Changmin envolviéndolo en un fuerte abrazo.

-¡Changmin!- Gritó emocionado. -¿Porqué ya no habías venido? Te extrañe demasiado-

-Perdón, Jun- Se disculpo. -Pero...- Dirigió su mirada a los bebés.

Jun le siguió después. Se sorprendió ante los infantes.

-...-

-Jun, no podía venir por que estaba ocupado en unos asuntos, aparte de que tenía que cuidar de ellos antes de que nacieran-

-¿Quieres decir que... Ellos...?-

-Si, Jun ellos son tus hermanos-

El niño se hinco para ver mejor a los bebes. Sonrió.

-Mis hermanitos- Dijo sin dejar de observarlos. -¿Como se llaman?-

-Melody y Jaemin-

Jun no les quitaba la vista a los bebés frente a él.

-Jun- Le menciono Changmin.

El chico volteó.

-También quiero que conozcas a Jaejoong- Dijo señalando al muchacho junto a él.

Jun se levantó e hizo una reverencia.

-Mucho gusto-

-El gusto es mio- Contestó un poco apenado.

-Jae, él es de quien te hablé- Dijo. -Jun, también es mi hijo-

Jaejoong cambio su semblante a uno tranquilo y comprendió.

-¿Uh?- Expresó Jun.

-¿Qué pasa?- Pregunto Changmin.

-¿Él es el papá de mis hermanos?-

-Si, así es-

-Jeje, bueno es que se parecen a usted-

La pareja Park observaba a su hijo feliz, Jun jamás les dijo que quería la compañía de un hermano pero se notaba demasiado que la deseaba y se sentían mal por eso. Ahora por cosas de la vida tenía a dos.

Jaejoong por su lado, curioso observaba al pequeño, desde que Changmin le dijo de la existencia de ese niño siempre se preguntó como es que sería. En su opinión, el parecido con Changmin era más que evidente. Sentía mucho gusto que su novio se reencontrara con el niño, a pesar de la forma en que fue concebido.

Las horas pasaron, las dos parejas platicaban mientras bebían café, los bebés quedaron dormidos y Jun los observaba en el acto, feliz.

-Bueno, creo es momento de irnos- Dijo Changmin.

-¿En serio? ¿Tan pronto?-

-Si, bueno, es que se hace tarde y últimamente a estado haciendo frío. No quiero que los bebés se enfermen-

-Ok- Dijo Yoochun. -Pero promete que nos visitaran más seguido-

-Prometido, Señor Park-

-Changmin, no es necesario que nos hables de usted- Vacilo.

-Hum, lo siento- Se sonrojó. -Bueno, nos veremos pronto- Se despidió.

Yeeun, Yoochun y Jun acompañaron a la pareja y sus hijos hacia la salida y se despidieron también.

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Una vez en casa, Changmin acostó a sus hijos en sus cunas. El paseo y estancia en casa de los Park los había dejado exhaustos.

Jaejoong y Changmin estaban acostados en la cama de este último. Se observaban en silencio. Caricias en el rostro del menor le hacían sentirse relajado.

-Changmin, te amo- Dijo un sincero Jae.

-Yo también-

-¿Saldrías conmigo?-

-¿Eh?-

-Jeje, digo, se que eso ya no es tan valido como antes- Bromeó. -Pero quiero que salgamos, te invito a comer-

-Pero... ¿y los niños?-

-Vendrán con nosotros, por supuesto-

-...-

-¿Qué dices?-

-Está bien- Respondió. -Y tal vez...- Dijo.

-¿Qué cosa?-

-Bueno, es que más bien eso sería pasar tiempo solo nosotros dos, no me malinterpretes- Hizo una pausa. -Si es por un rato nada más está bien. Creo que no tendría nada de malo encargar a los bebés por un momento- Dijo.

Jae le miró y sonrió.

-De acuerdo, por mi no hay problema, además podemos confiar en los que trabajan aquí, nada les pasara ya verás-

Un tierno pero apasionado beso se hizo presente, apagaron la luz de la habitación y ambos empezaron a caer un sueño profundo.

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Junsu les había escuchado desde el pasillo y con una sonrisa triunfante se fue a su habitación.

“Te arrepentirás de tus palabras, Shim” Pensó.

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