Suspiró. Ya llevaba un buen rato esperando, apoyado contra la pared, a un lado de la puerta de la enfermería. Todo había pasado muy rápido, y todo se le hacía tan confuso…
Click. Escuchó el sonido de un lápiz caer al piso, probablemente tras suyo. No le dio mucha importancia, la verdad estaba concentrado hablándole al castaño que caminaba a su lado.
- ¿No crees lo mismo?-Rió un poco, Junsu también lo hizo, pero el pequeño a su lado parecía no estar-
- ¿Min, estás escuchando?- Preguntó Junsu.
- ¡Minnie!- Gritó Jaejoong.-
Lo primero que vio fue a Changmin, pálido y con los ojos entrecerrados. Y luego lo vio caer. Sin tardar si quiera un segundo, lo atrapó entre sus brazos y lo abrazó contra su cuerpo. Era tan pequeño y frágil... Sudaba frío, sus labios estaban entreabiertos, y a penas y respiraba bien.
- ¡Profesor, profesor!- Gritaba Junsu a lo lejos.
- Resiste Min, por favor. Oh Dios, estás helado…- Le decía, una y otra vez.
- Jaejoong…- Susurró el menor.
Entonces cerró sus ojos…
- ¡CHANGMIN! - Gritó Jaejoong con notoria desesperación- Por favor, abre los ojos- Su voz temblaba. Las palabras colgaban en un fino hilo que era su voz. Sentía sus ojos humedecerse de a poco- Changminnie…
- ¡Sr. Kim!- Lo llamó Lee Soo Man acercándose a el.- ¿Qué ha pasado aquí?
- Profesor, es Changmin, se desmayó…Por favor, déjeme llevarle a la enfermería. Está pálido, suda frío y casi no siento su pulso.
- Lléveselo rápido.
Estaba preocupadísimo. Luego de haber cargado a Changmin en sus brazos hasta la enfermería, no había hecho más que esperar una respuesta. La joven enfermera no lo dejaba entrar a verle. Y sinceramente eso lo estaba matando por dentro. No era cualquiera el que estaba ahora recostado en una camilla casi sin pulso. Era Changmin, su querido Minnie…
De pronto, el sonido de pasos acercándose a paso rápido a la enfermería lo sacó de su ensimismamiento. El moreno pudo reconocer que pertenecían a una mujer, probablemente usando tacones. No pasó mucho tiempo para que viese pasar frente a el a una mujer alta, de cabellos castaños, nariz perfecta y ojos color chocolate.
<<.Se parece a Minnie…>>
Pensó. De pronto sintió la puerta de la enfermería abrirse despacio y en silencio. La cabeza de la joven enfermera, Srta. Kang, se asomó. “Sra. Shim” pronunció. El chico pudo verla asentir, y la Srta. Kang la invitó a pasar. Pudo escuchar un grito ahogado.
- ¿Qué le ha pasado a mi hijo?
- Cálmese por favor. Su hijo se ha desmayado en clases.
- ¿Pero cómo…? ¿Porqué…?
- ¿Le parece si lo discutimos afuera?- Ambas mujeres salieron del cuarto- Oh, Jaejoong, ya puedes pasar. Échale un ojo mientras estoy fuera ¿Vale?- El moreno asintió.
Entró, y se sentó al borde la cama junto a su amigo. Seguía pálido, respiraba lentamente, y estaba tapado hasta los hombros con una delgada sábana color celeste. Su mirada estaba perdida en el débil castaño que tenía a su lado, pero sus oídos estaban pendientes de la conversación que estaban teniendo afuera la enfermera y la madre de su amigo.
- Sra. Shim, antes de poder responderle la posible causa del desmayo de su hijo, necesito que me responda algunas preguntas.
- Está bien.
- ¿Su hijo se alimenta bien?
- Si, siempre ha tenido buen apetito.
- Dígame, ¿a revisado la basura últimamente?
- Si…
- ¿Ha encontrado restos de comida?
- La verdad…Ayer la saqué y encontré una bolsa con comida, pero…
- Changmin come en su pieza ¿no?
- Si…Desde hace unos días.
- ¿Se acuesta temprano?
- A las 10 se va a su cuarto, y a veces se pasa por ayudar a sus hermanas. No sé si quizás tenga problemas con el sueño, porque yo a esas horas trabajo en mi pieza, porque en el día no puedo.
- Como diagnosticaba, su hijo no ha estado alimentándose bien, y ha estado teniendo pocas horas de sueño. Le haré enseguida un certificado médico, en cama al menos tres días. Venga conmigo por favor. -La enfermera entró a la habitación seguida de la madre de Changmin. Allí se econtraron con Jaejoong, de pie mirando al chico que yacía sobre la cama.
- Srta. Kang, yo debo irme ya a clases. Con su permiso.
- Si, gracias por haberte quedado esperando.
Jaejoong asintió, y en silencio dejó la enfermería, pero no sin antes echar una última mirada al menor, que aún mantenía sus ojos cerrados.
-¿Quien era ese chico?- Escuchó decir a la madre de Changmin
- Oh, ese chico es Kim Jaejoong de último año. – Respondió la Srta. Kang.- Está en Física avanzada con su hijo. No sé qué tipo de relación tenga con el pequeño Changmin, pero fue muy amable al traerlo hasta aquí el solo. Se veía preocupadísimo…
- Ya veo…-
Como el mismo ya había previsto, el día se le hizo eterno. Y encima su ánimo no estaba bien. Estaba preocupado y sentía que su estómago estaba hecho un gran nudo. Ni si quiera las bromas tontas de su mejor amigo Junsu podían despejar su mente si quiera un segundo, la salud de Changmin era todo lo que le importaba.
-Calma, se va a poner bien Jae.- Lo trató de animar Yunho mientras caminaban en dirección a los camerinos.
- Arriba esos ánimos, que ahora sólo nos queda Gimnasia y ya seremos libres.- El vicepresidente del consejo estudiantil le dijo, dándole palmaditas en la espalda.
- No puedo quitarme al pequeño Min de la cabeza chicos- Confesó el moreno Jaejoong.
- Vamos, hazlo por Minnie. Yo sé, porque lo conozco desde que era un bebito, que él odia que el resto se sienta mal por su culpa. – Intervino una voz de delfín.- Además, sé de buena fuente que a él le encanta tu risa, y que admira tu forma de ser. No lo hagas dudar – Le sonrió tiernamente.
- Pero Su…-
- Joongie, hazlo por Changmin- Le pidió Yoochun
- A nosotros también nos preocupa, pero tenemos que pensar que el va a estar mejor.- El de cabellos rojizos hablaba como todo un padre.-
Finalmente el moreno dejó un poco de lado el tema, y se cambió rápidamente a ropa de buzo. Nunca fue buen actor, pero decidió intentar por esta vez, parecer más tranquilo. Todo iba de maravilla con los chicos, excepto una que otra mirada de sospecha que le lanzaba el rubio Junsu.
A pesar de que estaban jugando fútbol en esos instantes, la mente de Jaejoong divagaba en aquella conversación que había escuchado entre la enfermera y la Sra. Shim. ¿Qué estaría pasándole al pequeño? ¿Por qué no estaba comiendo? ¿Por qué no estaba durmiendo bien?
<<.¿Qué te está pasando Minnie?.>>
Se preguntó el moreno antes sentir un fuerte dolor de cabeza. Sin entender que había pasado, cayó al suelo sentado.
- ¿Jaejoong estás bien? Te grité que iba para ti el pase, pero…-Se intentó de excusar un compañero de clase.
- Menudo pelotazo que le diste, mira si hasta cayó sentado- Llegó a burlarse Junsu-
- Oye, cállate que me duele- Respondió bruscamente el moreno, que se llevó la mano al lado derecho de su cabeza
- Tienes todo rojo ese lado- Rió el rubio.
- Ushh, como jodes-
- ¿Qué pasó aquí?- Preguntó el entrenador-
- Nada, sólo estaba algo distraído y me ha llegado un pelotazo.- Le respondió Jae tratando de ponerse de pie. Junsu le ayudo-
- Mejor vete a cambiar. Kim, acompáñalo no vaya a ser que se accidente en el camino.-
Los dos asintieron, y partieron a los camerinos. Ninguno de lo dos pronunció una sola palabra, pero Junsu no dejaba de mirar de una forma acusadora a su amigo. Cuando llegaron, Jaejoong camino hasta su casillero para sacar su toalla.
- Se te está hinchando tu linda carita.- Lo molestó el de voz aguda.
- Cierra la boca.-
- Tú no estabas sólo distraido ¿No? – Preguntó a pesar de que tenía clara la respuesta- Estabas pensando de el pequeño Min.
- Eso no—
- Jae, te conozco muy bien, eres mi mejor amigo. Ahora, ¿qué sabes sobre Changmin que nosotros no? Te dijo algo la enfermera o….-
- Junsu…Por favor no se lo digas a nadie.- Lo cortó.- Mira, oí una conversación entre la madre de Minnie y la Srta. Kang…- Junsu lo miraba atentamente- Algo le está pasando, Su…Según su madre, ha dejado de comer como siempre y quizás esté durmiendo poco.
- Eso explicaría las ojeras.
- De verdad me preocupa….
- A todos….-
- No se lo digas a los demás. Yo no tendría porqué saberlo en primer lugar...
- Está bien. Pero, si quieres hacer algo por el, podrías llevarle sus cuadernos. Sólo retiraron su mochila, pero nos han dejado tarea.
- ¿Vienes conmigo?
- No puedo… Este, digamos que su madre no acepta todavía lo que pasó con su hija…Y menos mi sexualidad-
Finalmente, Jaejoong se duchó, se cambió de ropa y media hora antes de que sonara el timbre para el término de las clases, ya estaba en la sala recogiendo sus cosas y las de Changmin. Aún tenía sus dudas. No sabía si ir solo sería una buena idea. ¿Qué pasaría si la madre del pequeño no lo aceptaba? ¿Sería una molestia?
Aún así, caminó directo a la salida, y se fue al estacionamiento del instituto. Menos mal había venido hoy en su moto- a la que tuvo que recurrir, porque si no, llegaba tarde a clases-, se subió en ella y partió a la casa del menor. Sabía donde quedaba, eran unos apartamentos a unas cuadras de la suya. Se sabía ya de memoria el camino, de todos modos, era el quien llevaba a Min a su casa luego de sus “lecciones”.
<<.Ya no hay vuelta atrás…Aquí estas Kim Jaejoong. Ahora déjate de estupideces y toca el maldito timbre. No le preguntaste a ese gruñón recepcionista el número de habitación por nada.>>
Tocó la puerta. No pasó mucho tiempo y la misma señora que había visto en el colegio lo recibió con sorpresa. Tragó saliva.
-Buenas tardes…-Saludó con nerviosismo- Soy Kim Jaejoong, estoy en la misma clase de Física que Changmin, y he venido a dejarle sus cuadernos.
- Oh, muchas gracias.- Le sonrió cálidamente la mujer- Lamento mi sorpresa, es que nunca antes había venido alguien a ver a mi hijo.
- ¿C—como sigue él…?- Preguntó
- No se ha despertado aún, pero está recuperando el color…- Respondió- Pero, ven pasa.-
El joven hizo caso. La señora lo hizo pasar, y lo invitó a sentarse en la salita que tenían como living. El lugar se parecía a su casa, pero era más cálido y acogedor.
- La enfermera me contó sobre ti. Gracias por haber ayudado a mi bebé cuando se descompensó.-
- Para eso estamos los amigos.- Respondió sonriéndole.
- Entonces si son amigos. Es raro, Min nunca ha sido de tener muchos amigos, y menos mayores. Me alegra mucho que sea alguien como tu. Pareces un muy buen chico.
- Gracias...-
- Aishh, ¿te puedo pedir un favor?-
- Si, lo que Ud. Quiera.-
- ¿Podrías cuidar de mi hijo y de la casa una media hora? Tengo que ir a buscar a mi hija al colegio y luego debo llevarla a sus lecciones de piano.
- C—claro, pero…-
- Eres amigo de mi Changmin, con eso me basta para tenerte confianza.- Dijo levantándose para luego caminar hasta la puerta.- Gracias, confío en ti.
No tuvo tiempo para devolverle la sonrisa. La señora salió disparada del lugar, dejándolo solo. Dudo un poco, pero luego se paró para buscar el cuarto de Changmin. No fue muy difícil, puesto que era la única puerta en la casa que decía “No se admiten hermanitas molestas”. Abrió la puerta, y entró en silencio. Allí estaba changmin, bajó las sábanas aún con sus ojos cerrados, pero ahora estaba sólo durmiendo. Sin saber porque, se sentó al borde de la cama, y acarició el rostro del chico de forma maternal. Aún estaba un tanto frío…
- Mmmj…- Se quejó el menor.
- ¿Changmin…?- Preguntó con un dejo de esperanza en sus palabras.
- ¿Dónde estoy…?- Preguntó el castaño incorporándose. Luego se frotó los ojos, cuando los abrió, se encontró con una sorpresa – ¡¿Jaejoong Hyung?!
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waah sjdhasjdhsj *__*! Al fin
ResponderEliminarAmo este fic xD... esperare pacientemente el sigte. capitulo *__*
...
Ya lo subiste? e_e!
xDDDDD
*w*
ahhhhhhhhh!!!
ResponderEliminarasdfasdf no puedo esperar!!
hihi JaeMin *¬*
Junsu Fighting!!
<333
me lo lei todo de un tiron =///=
ResponderEliminary me gusto muxo!!
espero que subas pronto el siguiente capitulo *___*
violalo jaejoong violalo xD!!!
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