-¿Qué
es lo que quieres decirme? –preguntaba Junsu con una enorme sonrisa.
-Terminamos.
–Changmin se levantó de su asiento y comenzó a caminar, dejando a Junsu desconcertado.
¿Había
hecho algo mal? ¿Por qué lo dejaba sin explicarle? Junsu se levantó y corrió
para detener al mayor.
-¿Por
qué? –pequeñas lágrimas comenzaban a salir de su rostro, Changmin ni siquiera
lo miraba.
-Hay
cosas, que deben de terminar en algún momento. Nuestro momento llego.
-Pero…
tú dijiste que… -Junsu respiraba algo agitado. Su corazón dolía demasiado, y su
mente procesaba poco.
-Nos
veremos luego… tal vez. –Changmin se alejó lentamente de ahí, sin mirar atrás.
Junsu
cayó de rodillas al suelo, mientras intentaba calmarse y procesar todo lo que
había pasado.
~Something~
-¿Por qué? –Junsu miraba detenidamente a
Changmin. Esta vez si no se escaparía de sus preguntas.
-Mi padre iba a descubrir todo, había
sido aceptado en una escuela de arte, pero en Jeonju, y fue entonces que él se tomó
de ello para alejarme de ti.
-¿Por qué no me lo dijiste? –pregunto
más tranquilo, aunque aún sentía molestia.
-Indirectamente me amenazo si yo decía
algo… -Changmin suspiro, recordando.
-¿Por qué no me olvidaste? –Changmin lo
vio sin entender. Creía que tendría otro tipo de preguntas de su parte.
-¿Cómo?
-Si. Pudiste haber conseguido a alguien
más, en 8 años pueden suceder muchas cosas. Conocí a alguien… -Changmin lo vio
algo asustado. –Solo siento algún tipo de deuda contigo… por todo lo vivido.
–lo miraba serio.
-Entonces… -Changmin, mentalmente se
golpeaba y se decía un sinfín de cosas por haberse ido.
-Lo siento Changmin… -Junsu cerró sus
ojos, lentamente.
~Something~
-¿Ya
tienes todo? –el padre de Changmin
preguntaba desde la puerta de la habitación de este.
-Si.
–respondió sin ganas.
-Espero
todo lo que tenías aquí lo hayas terminado. –se cruzó de brazos, molesto.
-No
te preocupes, padre. –Changmin guardaba lentamente su ropa y suspiro.
-En
una hora nos iremos. –se fue de ahí.
Changmin
dirigió su mirada hacia su ventana, que daba hacia la habitación de Junsu, y se
preocupó al no ver siquiera una luz encendida, en señal de que el menor estaba
ahí.
Suspiro.
Y
se hizo una promesa mentalmente antes de salir de su habitación con sus cosas.
“Regresaré
por ti, Junsu.”
Apago
todo, y se fue hacia la sala.
~*~*~
La
lluvia cada vez se hacía más fuerte, pero eso a Junsu poco le importaba.
La
persona a la que tanto ama le había dicho que entre los dos no podía haber nada
más. Ese era su final, y lo que más deseaba, era una explicación, algo que le
dijera a su corazón que eso había acabado para siempre.
Lentamente
se levantó del suelo y comenzó a caminar, sin rumbo aparente.
Los
autos pasaban de un lado a otro, ignorando totalmente el estado actual de aquel
chico. Un auto paso a su lado, justo cuando iba pasando a un lado de un gran
charco, logrando que este le salpicara todo encima, aunque, realmente no le
importo, ya estaba totalmente empapado, al final de cuentas, por lo que siguió
caminando.
Dentro
de aquel auto iba Changmin con su familia, que, al notar de qué se trataba de
Junsu, no dejo de mirar por donde este había pasado, grabando en su memoria aquella imagen. Como
si fuera en cámara lenta, la espalda de Junsu, caminando bajo la lluvia, como
si su vida no le importara.
-¡Changmin!
–lo llamo su padre, haciendo que este quitara su vista del menor.
-¿Eh?
–lo vio confundido.
-El
camino está al frente. Deja de mirar hacia atrás. –Changmin se sintió molesto.
Pero asintió. Su madre y hermanas los miraban extrañados, sin entender nada.
Changmin
dio una pequeña mirada hacia atrás, encontrándose con la nada. Suspiro pesadamente
y se acomodó en su asiento.
Cerró
sus ojos y repetía a cada momento su promesa en su mente. Aunque le llevara
tiempo, y aunque le costará, regresaría por Junsu.
~Something~
-Ya veo… -Changmin se había acercado
hacia la puerta del camerino de Junsu, pero se detuvo antes de abrirla. -¿Nada
queda? –Junsu no decía nada. Esperó.
-Changmin… -el mayor escucho como este
se levantó del lugar y se colocaba detrás de él.
-¿Ya nada queda? –volvió a preguntar,
pero viéndolo directamente a los ojos.
-Yo... siento que tú me debes algo y…
-no continúo, ya que Changmin lo detuvo besándolo apasionadamente.
Al terminar el beso, los dos se quedaron
viendo, hasta que Changmin se fue rápidamente del lugar, dejando a Junsu con el
corazón herido, confundido y algo de rabia.
Pero decidido a lo que haría.
~Something~
Meses
más tarde, Junsu era el mismo de antes, aquel chico alegre y soñador de
siempre, había logrado entrar a la escuela de arte de Seúl, por lo que eso lo
hacía muy feliz.
Jaejoong
y Yunho habían entrado al mismo lugar que él, por lo que todos los días se
encontraban a la hora del almuerzo (ya que ellos estudiarían una carrera aparte
de la de Junsu). Con el pasar de los años, y la graduación de cada uno, para
todos, Junsu ya no tenía algún sentimiento de tristeza en su corazón.
Hasta
que se enteró de que Changmin pronto debutaría. Y junto a ello, Jaejoong y
Yunho trabajarían con él, ya que ellos habían entrado a trabajar como compositor
y coreógrafo, respectivamente.
Y
aunque no les dijo nada, sintió un gran golpe por ello. Sin embargo, siguió
adelante, dando de todo en sus pequeñas apariciones de algunos musicales.
Para
Changmin no fue muy diferente, al graduarse, un agente de una empresa lo había
encontrado ensayando en uno de los tantos salones que tenía su escuela, y le
había propuesto visitar la agencia cuando quisiera. Y lo hizo.
Cuando
llego, le pidieron que mostrara para que era bueno y fue entonces cuando los
dejo sorprendidos por el potencial que tenía. Haciendo que entrara rápidamente
a su entrenamiento para que debutara.
Para
su sorpresa, Yunho y Jaejoong trabajaban en aquella empresa. Y que por varios
motivos, terminaron trabajando juntos.
La
tensión que había entre él y Jaejoong podía sentirse, pero que con el tiempo se
quitó. Gracias a la ayuda de Yunho.
No
fue hasta que Junsu se desmayó al finalizar una de sus tantas presentaciones.
Pero, esto fue más haya, ya que el doctor le había informado a Jaejoong, que
podía ser que Junsu en algún futuro cercano, presentara depresión.
-Junsu,
cariño. –Jaejoong abrió lentamente la puerta de la habitación del menor para
entrar y el cerro de igual manera.
-Hyung…
-dijo con una sonrisa fingida.
-No
tienes que fingir para mí. –le sonrió, aunque él tampoco quería hacerlo.
-Hyung…
ya tiene a alguien… -le hablo con algunas lágrimas en sus ojos.
-MI
pequeño, esas cosas son solo tonterías. –le acaricio el cabello.
-No
parece eso, hyung… -le mostro la revista que hace unos minutos observaba. –Esta
foto dice lo contrario. –Jaejoong la tomo.
En
la foto, se mostraba a Changmin con una chica, en una cafetería. Changmin había
sido el centro de atención de muchos al momento de su debut. Su voz había
logrado captar miles de corazones, y también la atención de la prensa
amarillista.
-Esto
es tonto, debe ser por el ángulo de la cámara, Yunho y yo estuvimos ahí. –mintió.
-Hyung…
me odio por seguir sintiendo esto… -más lágrimas recorrían su rostro.
-Junsu…
mi pequeño. –Jaejoong lo abrazo fuertemente, mientras le acariciaba el cabello
y la espalda para tranquilizarlo. Todo estará bien. –le susurraba.
-No,
hyung… él ya tiene a alguien más… -sollozaba más fuerte.
-Junsu…
-Jaejoong cerró sus ojos, para evitar llorar también. Para él, Junsu era como
su hermano pequeño, lo quería tanto, casi, como un padre con su hijo.
Por
lo que se decidió ese día, en cuidar, proteger y sobre todo, amar a Junsu como
tal. Como un hijo.
Los
años pasaban, haciendo que Junsu poco a poco aceptara más lo que había
sucedido. Porque no le fue fácil, su primer amor, su mejor amigo. Lo había
abandonado. Sin explicación alguna, le había dicho que todo entre ellos había
acabado.
Pero
se dispuso a tener una mejor vida, y fue entonces cuando conoció a Yoochun. Su
maestro de actuación en uno de sus nuevos musicales. El primero en donde él
obtenía el papel principal.
Se
sentía tan cómodo con él, y al parecer, Yoochun también, por lo que, cuando
Yoochun lo invito a una cita, no dudo en decirle que sí. Y no la pasaron nada
mal. Pero por la actitud de Yoochun, su relación no duro como él había
esperado.
Pero
se sintió bien cuando el mayor le había dicho que siguieran siendo amigos,
porque él era una persona especial que no quería sacar de su vida. Y así fue.
Changmin
se encontraba realizando las actividades que un idol hace. También, intentando
entrar al mercado japonés, llevándose la sorpresa de que ya tenía una creciente
fama en aquel país.
Pero
en todo momento no había olvidado su promesa. Por lo que en cuanto podía,
buscaba las formas para poder encontrar a Junsu, y así, recuperarlo. Y aunque
en su mente se había formulado muchas formas de llegar frente a él y decirle la
verdad, todo eso se derrumbaba cuando se topaba con el fracaso de no
encontrarlo.
Pero
eso no le desanimo en absoluto. Porque siguió buscando, hasta el cansancio.
~Something~
Changmin llego hasta la entrada del
lugar, y se topó con una enorme tormenta, pero no lo pensó mucho y camino hacia
afuera, para mojarse, pensando, que así podría enfriar todo sentimiento de
rabia que corría en él.
Porque Junsu ya no lo amaba, y ya no
quería saber más nada de él. Incluso, tendría que enfriar sus sentimientos de
amor hacia el menor.
Pero no quería.
Porque él amaba a Junsu. Porque para él, Junsu tenía ese algo
inexplicable que hacía que se volviera muy necesario en su día a día.
Suspiro.
Quizá ya nunca podría enmendar todo lo
que había hecho. El decirle que siempre había pensado en él, que lo soñaba cada
vez que podía. Que anhelaba tenerlo entre sus brazos otra vez.
Pero Junsu ya lo había superado. Lo
había dejado ir hace mucho.
Y su corazón se había ido ante
imaginarse tal cosa.
Porque sentía que amaría a Junsu por
mucho, mucho tiempo más.
Pensé que el problema que los separó en el pasado, había sido de más peso, algo de fuerza mayor y no simplemente, la cobardía de ChangMin, porque simplemente no hay otra palabra lo sucedido. Si tanto amaba a Junsu debió decirle la verdad, confiar en el y no solo darle una patada de viaje al olvido, y volver muchos años después pensando que Junsu era Penélope y lo hiba a esperar por siempre.
ResponderEliminarAhora entiendo todo el enojo y rencor de Junsu, aunque sospecho que, en el fondo sigue amando a ChangMin.