Kim había optado por entrar en aquel club llamado “D·Vox” por curiosidad. Y lo que sus ojos un tanto inocentes veían lo dejaron pasmado. Llego a la barra con las mejillas en carmesí y una expresión de asombro total en el rostro.
Pidió un trago y el barman le sonrió con coquetería. El solo trato de sonreír gentilmente.
***
Desde su lugar tenía una buena vista de todo el club. Paseaba su mirada en busca de algún chico con quien divertirse, “vaya, parece que tendré a mi nuevo chico” mascullo Park y Jung solo rodo lo ojos mientras seguía “jugando” con su esclavo.
Park se levanto de su asiento, camino con esa seguridad y ferocidad hacia él. Al verlo, supo que daría cualquier cosa, pagaría cualquier costo por tenerlo solo para él, ahora mismo. Sus ojos ardían en deseo, su lengua humecto sus labios en un gesto demasiado sensual. Aquel chico consiguió que el pelinegro pusiera todo su empeño porque fuera él, su nuevo esclavo.
“Buenas noches” saludo con voz ronca y mirada profunda.
“H-hola” contesto Junsu sonriente y un tanto tímido. Perdiéndose en esa mirada un tanto salvaje y amenazante.
“Que hace por aquí un chico hermoso como tú, en un lugar peligroso como este?” le sonríe seductor y nota el cambio en la respiración del joven.
“Peligroso?!” exclama intranquilo Junsu, quien se siente incomodo pero atraído por aquel hombre. Park asiente y Junsu se encoje de hombros “solo… me llamo la atención” sin saber porque responde.
“vaya… Mi nombre es Park Yoochun” tiende su mano para estrecharla, a lo que el pelirrojo no tarda en responder “Kim Junsu”.
POV’S JS
Estaba nervioso, sentí una corriente eléctrica por toda mi columna cuando hice contacto con su mano. El calor lleno mi cuerpo y bebí de un trago el contenido de mi vaso.
Pero solo incremento mi sed. Evite su mirada penetrante y recorrí nuevamente el lugar con la mirada. No era tan inocente como para no saber en qué clase de club me encontraba, BDSM, pero una cosa es saber sobre ello y otra muy distinta ver personas practicándolo a unos centímetros de ti.
Su voz, esa voz profunda y cargada de deseo irrumpió mis pensamientos. “Cuántos años tienes, Junsu-ssi?” pestañe un par de veces y aclare mi garganta antes de responder. “Veintitrés, tu?” su sonrisa se amplio y mi corazón acelero su ritmo. Es escandalosamente guapo y viste muy bien. “veinticinco, quieres bailar un poco?” bailar?, me gustaría… pero estar más cerca de él… Oh diooos. Miro la pista y me sonrojo por ver como unos chicos vestidos con pantalones de cuero bailan provocativamente para su amo, quien los observaba desde su lugar.
Asiento ligeramente sin pensar mucho en ello, su brazo me rodea por la cintura de inmediato y respingo un poco, pero me acostumbro a ese toque sencillo.
La música es buena… comienzo a moverme, el calor aumenta en el ambiente notablemente, la música es tan insinuante…
****
Los roces comenzaron y Yoochun disfrutaba de esos movimientos de cadera por parte de Junsu, su miembro despertaba y ya no existía alguien más para él. Recorrió su espalda con descaro y apretó su trasero. Junsu se paralizo y lo miro inquieto “Tranquilo, baby” Yoochun no lo dejo responder, rompió toda distancia entre ellos y lo beso, de manera algo brusca y apasionada…Kim no se pudo resistir demasiado a tan demandante acción y se entrego al contacto. Se dejo arrastrar a un lugar un poco apartado de aquel bullicio. Park tomo asiento y de inmediato jalo a Kim para sentarlo en su regazo. Su intensa mirada se clavo en la color miel. Junsu quien se removió incomodo, fue retenido por las fuertes manos del pelinegro, que lo sostuvo de la cintura con ímpetu. Ataco sus labios de nuevo, con la misma intensidad y pasión que antes.
Junsu se dejaba hacer, pues estaba sumergido en una especie de hechizo. Sentía que tenía que hacer lo que el pelinegro le dijese, una corriente eléctrica lo atravesó nuevamente. Una de las manos del mayor, se perdió debajo de la camisa del pelirrojo, acariciando con fervor la piel bajo su tacto, en respuesta Kim jadeaba y mordía su labio evitando así que, los gemidos salieran de su boca.
Yoochun recorría su cuello con besos húmedos, dejando pequeñas marcas rojizas. Probaba tal cual a su presa… “Te deseo, Junsu-ah” jadeo una vez levantaba la polo del menor, siendo los montes rosados de este presa de sus lamidas y mordiscos. Kim solo se retorcía del placer que le otorgaba Park; ese hombre que apenas conoce y le ha hechizado.
Sin saber en qué momento paso, se encontraban ahora en el departamento del pelinegro. Junsu se paralizo y sus ojos se abrieron desmesuradamente. “C-como, cuando?” es todo lo que pudo susurrar, mientras Park lo llevaba de la cintura, rumbo a su habitación. “Tranquilo baby, estabas muy calladito, así que asumí que si te gustaría venir conmigo…” Con una sonrisa hermosa termino de hablar. Los pensamientos de Junsu eran todo una confusión, sus hormonas no ayudaban lo necesario, para poder pensar con mayor claridad, la cercanía de ese hombre, que de nuevo comenzaba a juguetear…no sabía si esto estaba bien o no, no quería darle tantas vueltas al mismo asunto. Así que opto por dejarse llevar por lo que su cuerpo pedía a gritos... un poco de ese placer.
“Tómame Yoochun-ah” fueron las únicas palabras que salieron de esos labios resecos, que se mostraban ansiosos y rosados. El susodicho, beso con más energía la curvatura del cuello de Kim, paseo sus manos por su espalda acariciando más allá de ella, sin pudor alguno sus manos masajeaban el trasero perfecto de ese chico hermoso; que solo podía jadear y gemir quedito su nombre.
“Solo por hoy seré vainilla solo por ti, vamos baby” Dijo y llevo a Junsu a su gran cama, lo desnudo para luego recostarlo y admirar ese cuerpo que por fin probaría, que está seguro nunca se cansaría de recorrerlo una y otra vez. “Eres… hermoso, realmente muy hermoso, lo sabías?” Mencionaba embelesado, se acerco y comenzó a acariciar esas piernas, con una lentitud que estaba acabando con Junsu. “Nunca pensé encontrarme con alguien tan perfecto como tú, Junsu ah” Kim solo jadeaba y miraba atento cada movimiento del mayor. Cuando una mano de Park, comenzó a bombear su miembro, su vista se nublo de placer, su cuerpo reaccionaba arqueándose. “Muy bien, disfruta... goza para mi” susurro lamiendo el lóbulo izquierdo del pelirrojo. Aumento la velocidad con la que masturbaba al menor, consiguiendo que llegara al orgasmo prontamente. “Aaahm Yoochuun hhmnng” Gimió al correrse Junsu, quien trataba de regularizar su respiración; Park lo beso con esa pasión que aun guardaba él. Saboreando cada rincón de esa cavidad bucal. Memorizando cada movimiento de su lengua contra la suya. Disfrutando de esos jadeos que acallaba con su boca, de esas manos que tímidas acariciaban su espalda. “Date la vuelta Junsu-ah” Murmuro contra sus labios, después de romper ese beso húmedo. Kim hizo lo que le pedía, sin mencionar algo.
Park Yoochun casi llego a su clímax, con tan solo preparar a Kim. Quien comenzaba a jadear con esas íntimas caricias. Recorrió con besos húmedos aquel pasaje estrecho, haciéndolo jadear roncamente.
Golpeo un par de veces esos blancos glúteos, haciéndolos enrojecer tenuemente… antes de introducirse en él. Junsu que estaba ya en cuatro ‘patas’ gimió alto al sentir ese miembro grande e hinchado dentro de él. Park gruño al sentir la estrechez del pelirrojo. “Ohh babyh”
Las embestidas fueron fuertes y certeras. Yoochun se aferraba de las caderas de Kim, quien solo podía entregarse a ese gran placer. Junsu quien tenía su espalda arqueada y la cabeza echada hacia atrás, llego al que sería su segundo orgasmo de la noche. Mientras Park se corría dentro de él, marcándolo como suyo. Salió de Junsu, quien se desplomo sobre la cama y el pelinegro se recostó a su lado. “Y bien, te agrado?” comento con una gran sonrisa en su rostro. “Claro, fue estupendo, Yoochun-ah” respondió igual de sonriente Junsu, mirando esos ojos profundos, que aun lucían severos y deseosos.
“Junsu-ah, me encantaría atarte… me encantaría hacer muchas cosas contigo, pero solo lo podre hacer, si tú estás de acuerdo” Susurra mirando esos ojos avellana, que lucen tan inocentes que no quiere corromper ese aura infantil, pero es ese mismo el que le ha atraído a él. Toma la mano de Junsu, dándole un leve apretón, recorre con su pulgar los nudillos de aquí para allá… y el pelirrojo se estremece. La carga eléctrica recorre su piel bajo la gentil presión del pulgar del pelinegro, enciende una vez más la corriente sanguínea y pulsa alrededor del cuerpo del menor, calentado nuevamente todo en su camino.
La respiración de Kim se hace difícil, parpadea hacia él, sonríe con timidez, sus ojos avellana lo miran en busca de alguna respuesta… pero Junsu sabe que la respuesta está en él, no hay más que su decisión. “Yoochun-ah…” su voz muestra los nervios que siente, nunca ha hecho algo así, pero es ese hombre apuesto, ese que no conocía hace apenas unas horas… ese por el que apostaría todo por seguir junto a él. “Nunca… he hecho algo por el estilo… tendrás que ser bueno conmigo” Dice en apenas un susurro con una tierna y cálida sonrisa en su rostro. Park sonríe aun mas y asiente… lo abraza y lo llena de besos cortos por todo su rostro, cuello y hombros. “Claro que seré bueno, nunca me había sentido tan completo con alguien… tenlo por seguro que nunca te haría daño, Junsu-ah” sus labios se encontraron reiteradamente compartiendo un beso lleno de ternura y pasión.
Pidió un trago y el barman le sonrió con coquetería. El solo trato de sonreír gentilmente.
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Desde su lugar tenía una buena vista de todo el club. Paseaba su mirada en busca de algún chico con quien divertirse, “vaya, parece que tendré a mi nuevo chico” mascullo Park y Jung solo rodo lo ojos mientras seguía “jugando” con su esclavo.
Park se levanto de su asiento, camino con esa seguridad y ferocidad hacia él. Al verlo, supo que daría cualquier cosa, pagaría cualquier costo por tenerlo solo para él, ahora mismo. Sus ojos ardían en deseo, su lengua humecto sus labios en un gesto demasiado sensual. Aquel chico consiguió que el pelinegro pusiera todo su empeño porque fuera él, su nuevo esclavo.
“Buenas noches” saludo con voz ronca y mirada profunda.
“H-hola” contesto Junsu sonriente y un tanto tímido. Perdiéndose en esa mirada un tanto salvaje y amenazante.
“Que hace por aquí un chico hermoso como tú, en un lugar peligroso como este?” le sonríe seductor y nota el cambio en la respiración del joven.
“Peligroso?!” exclama intranquilo Junsu, quien se siente incomodo pero atraído por aquel hombre. Park asiente y Junsu se encoje de hombros “solo… me llamo la atención” sin saber porque responde.
“vaya… Mi nombre es Park Yoochun” tiende su mano para estrecharla, a lo que el pelirrojo no tarda en responder “Kim Junsu”.
POV’S JS
Estaba nervioso, sentí una corriente eléctrica por toda mi columna cuando hice contacto con su mano. El calor lleno mi cuerpo y bebí de un trago el contenido de mi vaso.
Pero solo incremento mi sed. Evite su mirada penetrante y recorrí nuevamente el lugar con la mirada. No era tan inocente como para no saber en qué clase de club me encontraba, BDSM, pero una cosa es saber sobre ello y otra muy distinta ver personas practicándolo a unos centímetros de ti.
Su voz, esa voz profunda y cargada de deseo irrumpió mis pensamientos. “Cuántos años tienes, Junsu-ssi?” pestañe un par de veces y aclare mi garganta antes de responder. “Veintitrés, tu?” su sonrisa se amplio y mi corazón acelero su ritmo. Es escandalosamente guapo y viste muy bien. “veinticinco, quieres bailar un poco?” bailar?, me gustaría… pero estar más cerca de él… Oh diooos. Miro la pista y me sonrojo por ver como unos chicos vestidos con pantalones de cuero bailan provocativamente para su amo, quien los observaba desde su lugar.
Asiento ligeramente sin pensar mucho en ello, su brazo me rodea por la cintura de inmediato y respingo un poco, pero me acostumbro a ese toque sencillo.
La música es buena… comienzo a moverme, el calor aumenta en el ambiente notablemente, la música es tan insinuante…
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Los roces comenzaron y Yoochun disfrutaba de esos movimientos de cadera por parte de Junsu, su miembro despertaba y ya no existía alguien más para él. Recorrió su espalda con descaro y apretó su trasero. Junsu se paralizo y lo miro inquieto “Tranquilo, baby” Yoochun no lo dejo responder, rompió toda distancia entre ellos y lo beso, de manera algo brusca y apasionada…Kim no se pudo resistir demasiado a tan demandante acción y se entrego al contacto. Se dejo arrastrar a un lugar un poco apartado de aquel bullicio. Park tomo asiento y de inmediato jalo a Kim para sentarlo en su regazo. Su intensa mirada se clavo en la color miel. Junsu quien se removió incomodo, fue retenido por las fuertes manos del pelinegro, que lo sostuvo de la cintura con ímpetu. Ataco sus labios de nuevo, con la misma intensidad y pasión que antes.
Junsu se dejaba hacer, pues estaba sumergido en una especie de hechizo. Sentía que tenía que hacer lo que el pelinegro le dijese, una corriente eléctrica lo atravesó nuevamente. Una de las manos del mayor, se perdió debajo de la camisa del pelirrojo, acariciando con fervor la piel bajo su tacto, en respuesta Kim jadeaba y mordía su labio evitando así que, los gemidos salieran de su boca.
Yoochun recorría su cuello con besos húmedos, dejando pequeñas marcas rojizas. Probaba tal cual a su presa… “Te deseo, Junsu-ah” jadeo una vez levantaba la polo del menor, siendo los montes rosados de este presa de sus lamidas y mordiscos. Kim solo se retorcía del placer que le otorgaba Park; ese hombre que apenas conoce y le ha hechizado.
Sin saber en qué momento paso, se encontraban ahora en el departamento del pelinegro. Junsu se paralizo y sus ojos se abrieron desmesuradamente. “C-como, cuando?” es todo lo que pudo susurrar, mientras Park lo llevaba de la cintura, rumbo a su habitación. “Tranquilo baby, estabas muy calladito, así que asumí que si te gustaría venir conmigo…” Con una sonrisa hermosa termino de hablar. Los pensamientos de Junsu eran todo una confusión, sus hormonas no ayudaban lo necesario, para poder pensar con mayor claridad, la cercanía de ese hombre, que de nuevo comenzaba a juguetear…no sabía si esto estaba bien o no, no quería darle tantas vueltas al mismo asunto. Así que opto por dejarse llevar por lo que su cuerpo pedía a gritos... un poco de ese placer.
“Tómame Yoochun-ah” fueron las únicas palabras que salieron de esos labios resecos, que se mostraban ansiosos y rosados. El susodicho, beso con más energía la curvatura del cuello de Kim, paseo sus manos por su espalda acariciando más allá de ella, sin pudor alguno sus manos masajeaban el trasero perfecto de ese chico hermoso; que solo podía jadear y gemir quedito su nombre.
“Solo por hoy seré vainilla solo por ti, vamos baby” Dijo y llevo a Junsu a su gran cama, lo desnudo para luego recostarlo y admirar ese cuerpo que por fin probaría, que está seguro nunca se cansaría de recorrerlo una y otra vez. “Eres… hermoso, realmente muy hermoso, lo sabías?” Mencionaba embelesado, se acerco y comenzó a acariciar esas piernas, con una lentitud que estaba acabando con Junsu. “Nunca pensé encontrarme con alguien tan perfecto como tú, Junsu ah” Kim solo jadeaba y miraba atento cada movimiento del mayor. Cuando una mano de Park, comenzó a bombear su miembro, su vista se nublo de placer, su cuerpo reaccionaba arqueándose. “Muy bien, disfruta... goza para mi” susurro lamiendo el lóbulo izquierdo del pelirrojo. Aumento la velocidad con la que masturbaba al menor, consiguiendo que llegara al orgasmo prontamente. “Aaahm Yoochuun hhmnng” Gimió al correrse Junsu, quien trataba de regularizar su respiración; Park lo beso con esa pasión que aun guardaba él. Saboreando cada rincón de esa cavidad bucal. Memorizando cada movimiento de su lengua contra la suya. Disfrutando de esos jadeos que acallaba con su boca, de esas manos que tímidas acariciaban su espalda. “Date la vuelta Junsu-ah” Murmuro contra sus labios, después de romper ese beso húmedo. Kim hizo lo que le pedía, sin mencionar algo.
Park Yoochun casi llego a su clímax, con tan solo preparar a Kim. Quien comenzaba a jadear con esas íntimas caricias. Recorrió con besos húmedos aquel pasaje estrecho, haciéndolo jadear roncamente.
Golpeo un par de veces esos blancos glúteos, haciéndolos enrojecer tenuemente… antes de introducirse en él. Junsu que estaba ya en cuatro ‘patas’ gimió alto al sentir ese miembro grande e hinchado dentro de él. Park gruño al sentir la estrechez del pelirrojo. “Ohh babyh”
Las embestidas fueron fuertes y certeras. Yoochun se aferraba de las caderas de Kim, quien solo podía entregarse a ese gran placer. Junsu quien tenía su espalda arqueada y la cabeza echada hacia atrás, llego al que sería su segundo orgasmo de la noche. Mientras Park se corría dentro de él, marcándolo como suyo. Salió de Junsu, quien se desplomo sobre la cama y el pelinegro se recostó a su lado. “Y bien, te agrado?” comento con una gran sonrisa en su rostro. “Claro, fue estupendo, Yoochun-ah” respondió igual de sonriente Junsu, mirando esos ojos profundos, que aun lucían severos y deseosos.
“Junsu-ah, me encantaría atarte… me encantaría hacer muchas cosas contigo, pero solo lo podre hacer, si tú estás de acuerdo” Susurra mirando esos ojos avellana, que lucen tan inocentes que no quiere corromper ese aura infantil, pero es ese mismo el que le ha atraído a él. Toma la mano de Junsu, dándole un leve apretón, recorre con su pulgar los nudillos de aquí para allá… y el pelirrojo se estremece. La carga eléctrica recorre su piel bajo la gentil presión del pulgar del pelinegro, enciende una vez más la corriente sanguínea y pulsa alrededor del cuerpo del menor, calentado nuevamente todo en su camino.
La respiración de Kim se hace difícil, parpadea hacia él, sonríe con timidez, sus ojos avellana lo miran en busca de alguna respuesta… pero Junsu sabe que la respuesta está en él, no hay más que su decisión. “Yoochun-ah…” su voz muestra los nervios que siente, nunca ha hecho algo así, pero es ese hombre apuesto, ese que no conocía hace apenas unas horas… ese por el que apostaría todo por seguir junto a él. “Nunca… he hecho algo por el estilo… tendrás que ser bueno conmigo” Dice en apenas un susurro con una tierna y cálida sonrisa en su rostro. Park sonríe aun mas y asiente… lo abraza y lo llena de besos cortos por todo su rostro, cuello y hombros. “Claro que seré bueno, nunca me había sentido tan completo con alguien… tenlo por seguro que nunca te haría daño, Junsu-ah” sus labios se encontraron reiteradamente compartiendo un beso lleno de ternura y pasión.
pero queeeeeeeeeeeeeeee >///< omg!!!! pervertidos xDDD me gustó y ya quiero leer la 2da parte ^^
ResponderEliminarsaljshsdjh.dfhdf *0*God! lo ame!!! esta todo! tan pornoso u///////////u muero .//////////.
ResponderEliminarme encanto la historia!!! gracias por escribir!
espero el siguiente cap *OOO*! <3
noooo!!! tengo que seguir leyendooo!!
ResponderEliminaryo querer mas!!!
ResponderEliminarahhh me encaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaantaaaaaaaaaaaaaaa
*w*