Words

Titulo: Words

Autora: Kimmi Ann

Pareja: MinChun

Género: Slash/Lime

Extensión: Oneshot

Advertencia: Incesto

NA: Un reto para mí este tema, espero que el fic sea de su agrado, saludos y cuídense y siempre gracias por leer.

Hay palabras que no deberían ser dichas…..  palabras que no deberían ser escuchadas ….. y esas definitivamente no debían haber sido  dichas y menos escuchadas.

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Las 11:50 de la noche, el clima era frio, los copos de nieve descendían de el cielo lentamente llenando las calles de esa fría blancura parecida a las  nubes, el cigarrillo en sus dedos se consumía mientras se encontraba recargado en la pared.

-Estúpido- dijo antes de llevar el cigarrillo de nuevo a sus labios finos y resecos  cerrando los ojos dejando que el humo ingresara a su organismo, mientras su memoria lo hacía recordar.

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Flash Back

-¿Cuánto falta ya? ¿Una? ¿Dos semanas? –Miro al pelinegro al otro lado de la mesa de su cuarto mientras servía tranquilamente vodka en un par de vasos- ¡¡Yoochun que te estoy hablando!! –dijo mas alto para ser escuchado.

-¿Me pregunto cuando fue que me empezaste a dejar de llamar querido hyung? –sonrío de lado al levantar la vista y entregarle su vaso a Changmin- cuando me hablabas con respeto – y dicho eso se llevo una mano a la frente fingiendo indignación- los niños de ahora – rio mas fuerte- una semana Changmin, una semana –y dio un sorbo a su vaso.

Los ojos de Changmin rodaron a escuchar la palabra niño – y ¿no estás nervioso? – pregunto al beber de su vaso un pequeño sorbo, ese tema no era un tema fácil para el, pero debía hablar de ello.

-No realmente, Yunho es el que está más nervioso – levanta sus hombros sirviendo nuevamente vodka en ambos vasos- pero ya me veré el día de la boda, seguro andaré hecho un mar de nervios –y se bebió de un sorbo el contenido de el vaso sin que sus negros ojos vieran a Chagmin mientras bebía-.

Changmin apretó su mano fuertemente en el vaso, podría romperlo si se lo propusiera, pero es que simplemente escuchar la palabra boda le hacía hervir la sangre, su cuerpo le pedía alcohol y tomo la botella bebiendo directamente de esta.

-Oye Changmin! –dijo bajando la mano con la cual el menor bebía- ¡no bebas solo! que hay para los dos – le sonrío y quito la botella para beber su contenido el mismo, no le gustaba que su hermano menor bebiera de esa manera.

-Ya no soy un niño Yoochun deja de preocuparte tanto pareces mi madre –ríe y se estira en el piso tomando un par de botellas mas y poniéndolas en la  mesa- ¿competencias? –propone porque esa es la única manera que encuentra para poder estar frente a Yoochun y hablar de su boda a tan poco tiempo ya, porque solo se iba a poner borracho hoy para después volver a fingir .

                                                            

Yoochun suspiro desganado no iba a poder detener a Changmin si quería beber, por lo que tomo la botella y prefirió acompañarlo que hacerlo enojar y que el otro se enojara y se fuera- de acuerdo, pero no podre conducir a casa y me quedare aquí – sonrío y empezó a beber.

A Changmin no deberían hacerlo feliz esas palabras, en cambio su sonrisa no estaba presente, el tiempo transcurría y las botellas vacías se acumulaban a los costados de las mesas, los hermanos Shim habían empezado a hablar incoherencias ya, pues después de 4 botellas cada uno era normal tener  consecuencias del alcohol, hablaban de cosas vergonzosas como cuando  Yoochun al ir al doctor se puso a llorar como nenita cuando le sacaron sangre, o como Changmin se había asustado tanto al no encontrar su osito de peluche el cual lo estaban lavando;  después de mucha burla entre ambos se  habían comenzado a hacer cosquillas, Changmin sobre el cuerpo de Yoochun lo había tomado de sus manos apresándolas sobre su cabeza.

-Debes aceptar que soy más guapo y sexy que tu – y no sabía cómo habían llegado a esa conversación y el porqué estaban en esa posición pero Changmin no veía nada claro ya, solo los labios de su hermano, esos labios finos y  tentadores-

-Changmin – dijo Yoochun en tono bajo viendo a su hermano fijamente.

-¿Ya lo aceptaras? Eh eh – se acerco mas Changmin a Yoochun apretando más sus manos, todo su autocontrol se venía abajo-

-Changmin-lo llamo de nuevo Yoochun.

-Si si así me llamo Yoochun ¿Qué ahora se te olvido hablar? –río un poco, Changmin era el mejor actor sin duda alguna.

-Changmin hazme el amor – le dijo con voz profunda decidida casi, se podría jurar que no había una gota de alcohol en su sangre.

Fin del flash back

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Changmin… Changmin!! –se escucho una voz conocida la cual le había despertado de su recuerdo, tiro el cigarrillo a la nieve donde se apago instantáneamente –¡¡ ya voy!!! –grito entrando  al lugar.

Su segunda pasión era la música,  Yoochun era la primera, su primera, oculta y enfermiza pasión, porque estar enamorado de su hermano no era sano.

Las 12:15 era la hora que todos los sábados la  banda de Changmin tocaba, llevaban ya más de 6  meses como grupo, Jonghyung, Yonghwa, y el. El lugar era uno muy famoso   y como no serlo si era nada  más ni menos que de Kim Junsu, el famoso cantante y  uno de los más grandes empresarios en todo Corea, Junsu después de Yoochun y Yunho eran de los más  reconocidos. Siempre eran ellos tres en las noticias, en los periódicos. Aunque no solo ellos llamaban la atención del mundo, también Changmin aparecía en ellas, los periodistas lo llamaban “la oveja negra “, la razón era porque no siguió el  mundo de los negocios y lo cambio por la música, pero ¿que si su sueño era cantar? Changmin no le veía nada de malo pero al parecer su familia si, por eso huyo de casa cuando tenía solo 16 años y ahora a sus 18 ya era un cantante reconocido,  no tan famoso puesto que no tenia patrocinador, y no es que no tuviera ofertas más bien Changmin era demasiado selectivo.

-¿Listo Changmin? –le dijo Jonghyun mientras le pasaba su guitarra y el resto de la banda tomaba sus instrumentos.

-Estoy listo- dijo Changmin serio, porque necesitaba tocar, y lo necesitaba ahora más que nunca, porque la música lo era casi todo para él, lo desconectaba del mundo y ahora necesitaba olvidar ciertas palabras o iría en búsqueda de Yoochun y lo haría suyo como borracho su hermano lo había pedido.

Las luces de los reflectores en el rostro de Changmin le hacían que cerrara un poco los ojos mientras entraba, simplemente el publico al verlo entrar no  podía evitar mostrar su interés, el dueño de aquel pequeño lugar sabia lo mucho que gustaba ese grupo, lo mucho que gustaban de Changmin.

Una vez que Changmin llego al centro, sonrío y dio un pequeño toque a su guitarra y ahí se perdía, ya no sabía mas, no había nada más para él, solo la música en sus oídos, las cuerdas en sus dedos y esas notas roncas salir de su garganta mientras cantaba, ni si quiera escuchaba a el público, el solo tocaba por placer, por el éxtasis que le provocaba tocar.

Así era él y no importaban las veces que cualquier mujer u hombre tratara de llamar su atención, el sonreía al escenario pero no los veía eran simplemente sombras, objetos que no existían y esa maldita indiferencia era lo que volvía locos a todos.

Sus dedos se movían comenzando con  la tercera canción,  su vista por primera vez fue a la puerta del lugar, la cual se había abierto dejando pasar a un joven y sus ojos se abrieron “Yoochun” dijo entre sus pensamientos, pero no  era Yoochun, su mente le había jugado una mala partida, el que había entrado era un joven de piel blanca como la  nieve, labios rojos posiblemente por el frio que hacía ya que era invierno, entraba quitándose ese abrigo negro largo, dejándolo en una de las sillas, una copa en sus manos le fue entregada y bebía lentamente cuando lo vio y sus ojos hicieron contacto, definitivamente se parecía a su hermano, ladeo la cabeza para sacar esa idea de su mente, pero la voz de Yoochun llego a su cabeza de nuevo “hazme el amor”, sus ojos se volvieron a  encontrar con los de el desconocido y una idea insana se le ocurrió.

Parecía como si las miradas hablaran porque fue como un acuerdo en silencio, la criatura blanquecina como la nieve había aceptado lo que su mirada le había propuesto y unos minutos más tarde de que  su presentación acabara, el desconocido ya se encontraba ahí en su camerino con una copa en sus manos, volteo a ver a sus amigos y estos solo rodaron los ojos pero lo dejaron solo.

-Kim Jaejoong –se presento dejando la copa en el tocador y se acerco al más alto de los dos, Changmin era sin dudas más joven que él.

-¿Kim Jaejoong? –Changmin no pudo evitar soltar una risa mientras con su mano cerraba la puerta con seguro y tomaba la fina cintura del contrario-

-Si – dijo Jaejoong mostrando una fina sonrisa con sus labios.

-Así que el esposo de Junsu – cuando dijo eso Changmin volteo a el mayor pegándolo a la pared con algo de fuerza, porque lo que él quería no era sexo normal él quería descargarse, olvidarse de su hermano.

-¿Así que me conoces? – dijo Jaejoong en el mismo tono que había utilizado el contrario y lo tomo del cuello uniendo sus labios en un beso demandante.

Changmin creyó que la conversación ya había sido suficiente, porque él no quería saber a qué se dedicaba el contrario, que le gustaba o que era lo que quería,  el solo quería cumplir una de sus fantasías, su pierna derecha se coló entre las de Jaejoong aprovechando su altura y rozando descaradamente la entrepierna sobre los pantalones.

Unos pequeños gemidos reprimidos salieron de los labios rosas de Jaejoong mientras sus manos acariciaban la espalda de Changmin misma que se encontraba con una capa de sudor haciéndole más fácil la tarea, bajo a su cintura para pasar a el abdomen e ir subiendo esa playera negra estilo rock que llevaba el menor, Changmin levanto sus brazos para ayudarle en la tarea y dejar a su vista su bien formado cuerpo, que aunque no se notara estaba en buena forma.

Los ojos de Jaejoong recorrían el cuerpo desnudo de Changmin esa piel morena cubierta con esa capa de sudor le hacía querer lamer cada gota, Changmin no tuvo compasión de los botones de la camisa de Jaejoong abriéndola de una intensión y algunos de ellos salieron volando por la habitación.

-Ash! –Se quejo  Jaejoong  ya que el  ama la ropa – me debes una camisa – le dijo entre el beso mientras de un pequeño salto enredo las piernas en Changmin, el tampoco jugaría a hacerse el inocente, era claro lo que quería y lo que recibiría.

-Solo para aclarar, esto pasara porque me recuerdas a alguien por lo que diré otro nombre mientras te la meto – dijo Changmin sin  darle vueltas al asunto y la risa del contrario provoco que su mirada se fijara en Jaejoong.

-Solo para aclarar, esto pasara porque me quiero vengar de mi esposo, así que has un buen trabajo y disfrutemos los dos – dijo Jaejoon descaradamente imitando el mismo tono que el menor había utilizado, moviendo  su cadera provocando un pequeño rose con la entrepierna de Changmin.

La espalda de Jaejoong pegada a esa pared fría hacia que la piel se le erizara, pero las manos calientes de Changmin calentaban el lugar por donde pasaban, la cadera de Changmin comenzó a cobrar vida, ahí prisionera entre las piernas de el mayor se comenzó a frotar a él, su entrepierna ya ligeramente despierta estaba cobrando vida debajo de su ropa interior buscando la entrada de Jaejoong, tomándolo con ambas manos de el trasero Changmin se llevo a Jaejoong a lo que era uno de los sillones, lo bajo y su voz ya grave por la excitación le ordeno que se bajara los pantalones.

Jaejoong frunció el ceño al escuchar el tono en que le hablaba el contrario pero no iba a negar que le excitaba, desabrochando con mucho cuidado su pantalón negro lo dejo caer por sus piernas mostrando lo blancas que estaban, sintiendo inmediatamente las manos de Changmin en sus piernas delineándolas subiendo por sus muslos y acariciando su trasero, sin evitar que un gemido saliera de sus labios, Changmin se deshizo de la ropa interior blanca que portaba Jaejoong e inclinándolo un poco haciendo que las manos del mayor se apoyaran en el sillón se apego a él bajando su  pantalón con todo y ropa interior y pegando su hombría a el trasero de Jaejoong mientras su mano derecha tomaba su entrepierna.

Un pequeño ronroneo salió de los labios de Jaejoong y sintió el aliento de Changmin en el lóbulo de la oreja mientras este era lamido- di “Changmin hazme el amor” – y sintió como el agarre en su entrepierna se había cerrado provocando un gemido más fuerte.

Changmin pensaba que la similitud de Jaejoong y Yoochun era sorprendente incluso a sus manos se sentían de la misma talla, por eso pensaba que podía engañar a su mente; un pequeño empujón  y su entrepierna quedo presa en el trasero de Jaejoong el cual bajo dijo lo que sus oídos querían escuchar, lo que su mente intentaba bloquear y lo que todo su ser quería gritar – te amo Yoochun –dijo bajo, mientras su mano libre hizo que se inclinara Jaejoong saco su entrepierna de su trasero  y la tomo con su mano empuñándola dirigiéndola hacia la entrada de Jaejoong cuando la puerta se abrió de golpe.

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20 minutos antes…

Yoochun se encontraba en la que sería su próxima casa con Yunho acomodando algunos muebles con su prometido, ya solo faltaba la cocina habían quedado que la terminarían mañana y hoy dormirían ahí, Yoochun vestido con un par de pantalones deportivos negros y una playera blanca contrastando con su piel se encontraba sentado en las piernas de Yunho recargando la espalda en su pecho mientras disfrutaban viendo una película, hasta que a Yunho se le ocurrió que la película no era demasiado interesante como la piel desnuda en el cuello de Yoochun, las caricias se habían hecho presentes y Yunho lentamente había recostado a Yoochun en el sillón poniéndose encima de él mientras besaba esa piel blanquecina y le mordía lentamente dejándole una marca, recibiendo un pequeño gemido de su prometido, entonces el celular de Yoochun en su pantalón empezó a sonar, Yunho le había pedido que lo ignorara pero esa melodía en el mensaje era conocida y definitivamente no podría ignorarla, así que tomo su celular viendo el mensaje y entrecerró las cejas- lo siento Yunnie debo salir –dicho eso beso a su prometido y se levanto acomodándose la ropa y tomando sus llaves, billetera y un abrigo al salir a toda velocidad.

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La sangre de Yoochun hervía, sus manos en el volante del  auto lo apretaban con tanta fuerza que sus nudillos se habían puesto blanquecinos, pero es que al leer el mensaje que le mando Yonghwa todo su ser ardió en llamas, porque no no y no Changmin definitivamente no podía suplantar su cuerpo con una copia.

Llegando al lugar abrió la puerta y choco con la espalda de alguien más, volteo ofreciendo una disculpa.

-Lo sien… - pero hasta ahí hablo Yoochun al ver de quien se trataba – Junsu!!! Justo a ti te quería ver – y no espero que el  nombrado contestara cuando ya lo había tomado de los hombros y llevado adentro a su discoteca.

-Normalmente las personas saludan Chunnie – dice Junsu mientras era llevado y levanta su ceja – ¿a dónde vamos? –pregunta con curiosidad ante las acciones de el otro.

Era bien sabido que Yoochun era amigable por lo que aunque todos los empresarios normalmente son competidores y rivales él era amigo de casi todos, por lo que no era de extrañar la cercanía con Junsu.

Yoochun había llevado a Junsu frente a la puerta de el camerino de Changmin y había intentado en vano abrir la puerta, Junsu lo vio extrañado y se acerco a probar pero un sonido lo hizo abrir los ojos y se hizo unos pasos para atrás y con su pierna abrió la puerta de una patada, comprobando lo que su oído había captado, esos eran los gemidos de su querido esposo Jaejoong.

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La puerta se había abierto chocando escandalosamente en la pared y eso los había hecho saltar a Jaejoong y Changmin volteando rápidamente tapando como podían su cuerpo.

La vista furiosa de Junsu estaba sobre el cuerpo de su esposo acercandose rápidamente lo tomo de el brazo y lo pego a su cuerpo.

-Pero que crees que estás haciendo Kim Jaejoong!!! –dijo sobresaltado como no muchas personas lo habían visto.

Pero Jaejoong lo conocía bien, demasiado bien y Junsu a el por lo que tomo sus labios en un profundo y lascivo beso.

-Ojo por ojo diente por diente- le dijo Jaejoon al separar el beso, pues meses atrás había encontrado a Junsu con Jonhyun el compañero de banda de Changmin en su oficina engañándolo.

Junsu sonrío y sin importarle que estuvieran presentes Yoochun y Changmin tomo a Jaejoong de la cintura y lo empujo al sillón fuertemente, sin duda su esposo era el mejor, porque si ambos tanto Junsu como Jaejoong estaban enamorados el uno del otro, pero su manera de amar era extraña ninguno cedía nunca al otro.

-Te deberé enseñar que Kim Jaejoong solo le pertenece a Kim Junsu – le dijo Junsu mientras se deshacía de sus saco de diseñador.

-Entonces yo debo recordarte que Kim Junsu solo es de Kim Jaejoong –dijo Jaejoong tomando a Junsu del cuello y acercándolo a su cuerpo mientras sus labios rosas se unían a los de su esposo para comenzar una lucha de pasión.

Porque si bien ambos habían hecho algo malo, en sus mentes no era tan malo porque ahora haciendo el amor de esa manera habían llegado a un acuerdo y ellos lo sabían, Junsu y Jaejoong  sabían que ahora serian fieles.

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Al momento que vio Changmin entrar a Junsu como alma que lleva el Diablo a la habitación se subió el pantalón cubriendo su entrepierna y sonrío hasta que sintió que lo jalaban de la oreja y lo sacaban de ahí.

-¡Joder! –Dijo zafando su oreja y viendo al causante de ese pequeño dolor, los ojos de Changmin se abrieron como platos – Yoo…chun – dijo con nerviosismo.

-Si soy yo –dijo frio y serio Yoochun mientras lo tomaba de la mano y lo sacaba de ahí, no le importo que Changmin no llevara nada puesto en su parte superior ni que el frio afuera era inminente, lo subió al auto y condujo.

Después de unos minutos el auto de Yoochun se detuvo en su casa, Changmin bajo sin decirle nada y cerró la puerta dejando a su hermano ahí, porque sabía que Yoochun estaba enojado y seguramente le soltaría un sermón de lo que debía y no hacer, de el sexo seguro, de el sexo con casados, abrió la puerta de su casa y la iba a cerrar cuando la mano de Yoochun lo empujo y cerro detrás de esta.

-Ya ya Yoochun –rodo los ojos Changmin pero sintió los labios de su hermano sobre los suyos, pero que caraj… pensó mientras su cuerpo no concordaba con su mente, porque Yoochun se encontraba prisionero entre la puerta de su casa y su cuerpo.

Y es que Yoochun ni si quiera lo había pensado al ver la actitud que tomaba su hermano menor sentía de nuevo hervir su sangre por eso su esfuerzo de más de 10 años se había visto roto, porque no dudo en besar esos labios resecos de Changmin para borrarle las huellas de Jaejoong sobre estos, porque lo celos jamás le habían hecho tantos estragos antes, porque el controlaba siempre todo, para eso había metido a Yonghwa al grupo para que le informara que hacía o que no hacia su querido hermanito. Porque siempre pensó que lo tendría y nadie más lo tocaría, nadie más podría solo él, porque Changmin era suyo y nadie podía competir contra él.

Changmin había tomado a Yoochun y cargado hasta su habitación donde lo acostó sin cuidado en su cama aventándolo al colchón.

-¿Con que derecho te crees? Eh  Yoochun!! – dijo Changmin subiéndose a la cama y posicionándose sobre el cuerpo más débil de su hermano- jugar así, de esa manera conmigo – niega y le abre el abrigo negro que tenia Yoochun - ¿que acaso no me eh alejado ya lo suficiente de ti? Dejado que vayas y te revuelques con Yunho – y presiono la marca que horas antes le había hecho Yunho a Yoochun en su cuello, porque esa marca era la primera cosa que había visto Changmin cuando vio a Yoochun, porque esa misma marca era la causante que su mente no pensara y dijera todo lo que había estado guardando hace 6 años.

Porque Yoochun había  pensado que saliendo con Yunho, casándose con Yunho esa obsesión insana por su hermano por su pequeño Min se le olvidaría, estaba equivocado, porque ahora viendo a Changmin perdiendo el control de esa manera, con sus emociones a flor de piel y la boda a dos días, Yoochun no dudo y tomo a Changmin de las mejillas.

-¡Te amo! Te amo Changmin tu hermano te ama como no debería – le dijo desesperado.

Yoochun no se imaginaba lo que causarían en Changmin esas palabras, y moría de nervios por su reacción pero esos nervios fueron acallados por los labios de su hermano sobre los suyos, en un beso lento sin prisas.

-¡Idiota! –Dijo Changmin mientras pego sus frente- te amo Yoochun –dijo mientras sus labios se volvían a juntar a los de su hermano, porque simplemente con esas palabras había olvidado todo, porque su amor prohibido y enfermizo por Yoochun era correspondido.

Y el tiempo se detuvo para ambos porque aun cuando en su mente estaba la idea de que esto era algo prohibido, de que Yoochun se casaría pronto, de que no deberían hacer lo que harían no les importo.

Las manos de Changmin se deslizaron lentamente por el abdomen de Yoochun sintiendo como este se estremecía ante su tacto, se inclino a él uniendo sus labios mientras sus agiles dedos desabrochaban botón por botón de su camisa, viendo con admiración el pecho de su hermano, sus manos sin perder la oportunidad acariciaron su abdomen permitiendo que la camisa que cubría la blanca piel de Yoochun quedara fuera aventándola a un lado de la cama.

¿Este era uno de sus  sueños? Se preguntaba Changmin pero si era uno entonces no quería despertar, finalmente sus cuerpos se sentían en uno al otro, las manos de Yoochun lo habían apegado a él para que ambos pechos se sintieran, no hacían falta palabras pues si eran dichas tal vez romperían el encanto del momento, o les harían aparecer la conciencia que en estos momentos había desaparecido.

Sus labios otra vez se hallaban juntos  y lo que había comenzado como un beso lento, se había convertido en uno demandante, apasionado con todo el deseo impreso en el, ambos labios ya rojos se entreabrían solo para tomar aire y volver a los de su hermano.

Las manos de Changmin habían creído que la ropa les estorbaba, por lo cual había bajado el pantalón de su hermano aprovechando de tocar cada centímetro de su piel en el acto.

“Absolutamente hermoso” pensó Changmin mientras su dedo índice dibujaba una serie de círculos sobre la ropa interior negra de Yoochun, sintiendo bajo su dedo la hombría de su hermano palpitante, cautiva, jugó un poco en ella acariciándola sin acariciarla hasta que su mano se coló entre la ropa interior y empezó el gran placer a sus oídos, esos pequeños y  graves gemidos de la boca de Yoochun, eran simplemente adictivos.

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Yoochun se removía inquieto en el colchón apretando con sus manos las sabanas de la cama de Changmin al sentir como su hermano lo masturbaba  “por Dios que era su hermano” “su Min” el que lo estaba llevando a los lugares más inimaginables y con solo un toque de manos, entonces como seria después se pregunto.

Cuantas noches había estado deseando esto estar bajo su hermano, sus manos acariciaron la espalda bien marcada de Changmin pasando a su pecho donde las yemas de sus dedos jugaron con los ya endurecidos pezones de este, rodeándolos con la yema de los dedos para después darle un pequeño apretón, recibiendo como premio su nombre de los labios de Changmin.

Había sido suficiente el juego en sus pezones y bajo sus manos al cierre del pantalón de Changmin bajándolo lentamente, Changmin le ayudo un poco puesto que los nervios en sus manos estaban presentes y se asombro al ver el tamaño del miembro de su hermano aun debajo de su ropa interior,  instintivamente su lengua lamio su propio labio inferior preguntándose qué sabor tendría su este.

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El cuerpo desnudo de Yoochun era un deleite a los ojos de Changmin por lo que al quitar la ultima prenda que tapaba a el amor de su vida dejando su virilidad a su vista no dudo en bajar y darle un beso en su punta, sintió a Yoochun temblar ante eso y su sonrisa se amplio, su boca se abrió y le dio  una pequeña lamida solo a la punta de la entrepierna de Yoochun , el cual se removía en la cama, los dedos largos de Changmin comenzaron a delinear el labio inferior del mayor dándole a entender que necesitaba que los lubricara.

Changmin no podría estar más excitado pues sus dedos eran lamidos de una manera única, su boca hace unos segundos que ya se encontraba cubriendo toda la extensión de Yoochun jugando con su lengua, cerrando un poco su boca para sentirlo más, de Yoochun solamente se escuchaba su respiración y los gemidos que habían comenzado a ser entrecortados ahora.

Changmin había tomado la cadera de Yoochun mientras este había entrelazado sus dedos en su cabello informándole del ritmo que le satisfacía, arriba abajo la boca de Changmin se deslizaba por su entrepierna provocando un sonido lascivo al momento en que su boca y entrepierna tenían más contacto, los gemidos y sus respiraciones eran lo único que se escuchaba ya en esa habitación.

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Los dedos de Changmin que tenia Yoochun en su boca lo abandonaron solo para sentir como Changmin lo acostaba un poco mas y abría sus piernas mientras la boca de su hermano lo estaba llevando al orgasmo, sintió una pequeña corriente eléctrica cuando el dedo de Changmin tanteo su entrada abriendo sus piernas mas y temblando porque su hermano no había esperado y había metido su primer digito en busca de él calorcito que proyectaba.

Si bien la intromisión le provocaba dolor no era nada comparado con el placer que sentía en su entrepierna, los dígitos de Changmin lo preparaban de adentro a fuera circularmente dilatándolo mientras su boca la boca de su hermano le  daba la mejor felación de su vida.

-Aagh yo yo.o llegare –dijo Yoochun y en ese mismo instante su esencia se derramo en la boca de su hermano el cual se separo y bebió hasta la última gota, eso había provocado un sonrojo en Yoochun y le tomo del mentón levantándolo para besar sus labios y probarse el mismo.

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Los dedos de Changmin abandonaron la cavidad de Yoochun mientras el beso se llevaba a cabo, su miembro ya completamente despierto le pedía atención, le pedía penetrar a su Yoochun por lo que no lo hizo esperar más y tomo a Yoochun de la cadera y lo penetro de una sola estocada, tal vez había sido brusco y había escuchado a Yoochun quejarse pero en verdad ya no podría aguantar más.

-Joder!! Changmin!!!!!!!! –dijo Yoochun en voz alta mezclada con placer.

Changmin se encontraba feliz porque al fin sus cuerpos se habían juntado se habían vuelto uno mismo y era el quien se encontraba en el interior de Yoochun fundiéndolos en uno en un vaivén de caderas cuando Yoochun se acostumbro sintiendo como su miembro era apretado, succionado, por esa estrecha cavidad de su hermano.

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Yoochun sencillamente sentía que Changmin lo partía en dos, que lo mataba y revivía a la vez y es que tanto amor reprimido entre ambos estaba provocando el mejor de sus placeres, y se sintió duro de nuevo tomando con su mano su propia entrepierna siguiendo el ritmo de las estocadas casi frenéticas de Changmin en el.

-Te amo- dijo Yoochun y recibió un te amo de Changmin también mientras se corría en su interior y él en su misma palma de su mano.

Changmin había caído rendido sobre Yoochun después del orgasmo y besaba sus labios repetidas veces.

-Te amo te amo –decía Changmin desde el fondo de su corazón, porque ese te amo era tan cierto desde hace 6 años que empezó a ver a Yoochun con otros ojos, desde que empezó a sentir celos de cada persona que se acercaba a su hermano desde que empezó a soñar a su hermano gimiendo su nombre, se había dado cuenta que le amaba, y más aun que le deseaba.

-También te amo Minnie – dijo Yoochun y lo abrazo a el, su amor reprimido por 10 años al fin lo sentía completo, su pequeño, rebelde hermanito lo había enamorado con su sencillez con su calidez con su manera de ser.

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Porque Changmin y Yoochun habían descubierto que hoy habían aprendido a hacer el amor, el verdadero amor, era una sensación tibia, única, adictiva, extasiante, todas y cada una de las sensaciones presentes.

Porque sabían que nunca más podrían hacerlo con ninguna otra persona que no fuera su propio hermano, no podría ser Changmin sin Yoochun ni Yoochun sin Changmin.

Pero también sabían que Yoochun se casaría en dos días y que eran hermanos……

Pero ya pensarían mañana que harían, ahora solo sabían que se amaban y que ese amor era correspondido…..

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Entonces Changmin ahí abrazado a Yoochun descubrió “que esas palabras que no debían haber sido dichas ni escuchadas ahora eran las que lo habían hecho la persona más feliz”; sonrío y decidió que no importa como lo hiciera, él se robaría a su hermano.

Fin…