Extra 1. Recuerdos de Saipan
Llegaron a la isla paradisiaca, Sol, arena y mar, lo que necesitaban para llenar de aire puro sus pulmones, para “relajarse” un poco, pese a que estaban ahí solo por cuestiones de trabajo, pero daba la casualidad que aunque fuese el trabajo, estar juntos lo hacía todo más divertido. Incluso aunque tenían que escuchar a Changmin constantemente quejarse del calor, afortunadas las fans que no tendrían que soportarlo tras la edición del DVD
Las actividades comenzaron desde el inicio, la primera fue justo antes de llegar al Hotel, aunque el staff ya los había registrado. Jugaron y se divirtieron, finalmente terminaron llegando al Hotel y después ahí hicieron más actividades, la última de la noche incluyó a ellos eligiendo. Luego, cuando la cámara se apagó, hubo unos instantes de silencio
— Oye, ya basta ¿no crees? No te tocó dormir aquí —regañó Changmin a Jaejoong, que dormía a su lado, pegado a él, poniéndolo nervioso
Jaejoong era la clase de persona cariñosa y hostigosa que Changmin tanto despreciaba, odiaba que invadieran su espacio personal, pero con él era distinto, aun así siempre trataba de quitárselo de encima, de pegarle, de espetarle que no lo tocara, pese a sus deseos frustrados y ocultos, a Changmin le gustaba Jaejoong, pero antes que admitirlo y dejar de lado su orgullo, prefería apartarlo
— No dormiré afuera, hace frío —respondió preocupado— Sabes que cuido mucho mi piel
— Excusas, salte de mi cama, gané limpiamente —regañó otra vez, aventándolo, pero el otro se aferraba a él, traviesamente
— Ustedes dos, dejen dormir —dijo Yunho con voz autoritaria— Jaejoong, si quieres puedo dejarte el sofá
— ¿Y tú dormirías con Changmin? —preguntó sorprendido, escuchando las risas de los demás
— No, dormiré donde te tocó a ti, Changmin quiere dormir solo —respondió
— No, Changmin quiere dormir con alguien que no lo manosee todo el tiempo —se metió en la plática Yoochun, haciendo reír a todos
— Sí, deja de tocarme ¿Cuántas veces debo decirte que no me gustan los hombres? —reprendió, tratando de mostrarse molesto
— A mí tampoco, solo me gustan ustedes —respondió juguetonamente
— Deja de decir tonterías —dijo mientras lo empujaba, podía sentir el miembro de Jaejoong muy cerca de su pierna y cada vez se sentía más nervioso e inquieto
— Duérmanse ya —dijo Junsu enojado— Mañana nos levantarán muy temprano
— Solo que Jaejoong deje de tocarme, quítate —usando más fuerza lo empujó, pero Jaejoong lejos de apartarse solo se levantó para aprovechar la oscuridad y montarse sobre él de bruces, sujetándole los brazos, dejándolo helado
— Vamos Changmin, déjame darte amor mientras dormimos —rio por lo bajo
— Ya, haz lo que quieras —respondió nervioso y sin moverse ni un poco, Jaejoong comprendió que el juego había terminado, de nada servía si Changmin no ponía resistencia
— Que aburrido —dijo sin ganas y se bajó de él, pero quedándose a su lado en la cama— Ahora sí, pasen buenas noches
— Al fin —dijeron Yoochun y Junsu al mismo tiempo
De nuevo el silencio, esta vez fue largo, Changmin no podía dormir, a su lado aun sintió el calor del cuerpo de Jaejoong, se levantó de la cama, puso sus sandalias y salió con cuidado de la habitación para no despertar a nadie. Era muy tarde, ya no había trabajadores del Hotel rondando por ahí, así que Changmin salió y fue hacia el mar, la brisa acarició su corto cabello, cerró unos instantes los ojos y luego se tiró sobre la arena
Luego de un rato se sentó, mirando hacia el mar, con las piernas encogidas, sintió un poco de frío pero no le importó, a su alrededor solo había calma y tranquilidad. Suspiró largo y recordó lo de minutos atrás, Jaejoong montándose sobre él y aprisionando sus brazos, aquello le dio mucho miedo, porque su cercanía lo puso ansioso, aturdido, porque le gustaba cada día más y tenía miedo
— ¿Qué haces aquí solo? —escuchó la voz del mayor de sus compañeros, la piel se le erizó
— Trato de relajarme, no puedo dormir —respondió suavemente, junto a su voz, la brisa tranquila del mar. Jaejoong se sentó a su lado derecho
— Tampoco pude dormir, sentí que te levantaste —confesó apenado— Te seguí, soy tu stalker Changmin —dijo en broma
— No hagas esas cosas hyung —regañó avergonzado
— Hyung —repitió el mayor— Es raro que me llames así, eres un chiquillo irrespetuoso conmigo —rio divertido—
— Mejor volvamos
— No —se opuso enseguida, colocando su mano sobre la pierna de Changmin, él volteó y sus miradas se cruzaron, el corazón del menor latió de prisa— Solo un poco más, quiero sentir esta brisa —sonrió
— Está bien —respondió pasivamente y miró hacia el frente, Jaejoong se acercó un poco más hacia él y cerró los ojos, apoyando su cabeza en el hombro del menor, Changmin volteó, lo miró desde ahí, su blanco y hermoso rostro, su corazón comenzó a latir fuertemente
— ¿Sabes Changmin? —musitó y el otro no dejó de observarlo— A tu lado siento que el tiempo no pasa —confesó avergonzado, Changmin creyó que hablaba en broma y sonrió
— No seas ridículo —regañó apenado. Jaejoong levantó su cabeza del hombro de Changmin y lo observó fijamente, sus ojos se encontraron de nuevo— ¿Qué pasa? —preguntó nervioso
Jaejoong no respondió, levantó su mano derecha y la llevó al rostro de Changmin, acariciándole la mejilla, el menor se sonrojó y apartó la mirada
— ¿Por qué…?
— Mírame —pidió con suavidad, Changmin obedeció. El instante que se miraron a los ojos fue eterno, el sonido del mar acallaba sus respiraciones
Changmin no lo soportó, se acercó lentamente a él, Jaejoong cerró sus ojos y poco a poco se aproximaron uno al otro, el menor miró los labios entreabiertos del mayor y se puso nervioso, pero los deseaba, hacía meses que no besaba a nadie y hacía muchos meses más que añoraba tomar posesión de aquellos. Olvidó todos sus prejuicios y cerró también sus ojos, terminando de acercarse, sus labios se tocaron unos instantes, fue como un choque eléctrico, sin abrir los ojos, esperaron unos segundos antes de volverse a tocar
Jaejoong deslizó su mano de la mejilla a la nuca del menor, inclinando un poco más sus cabezas, entregándose a un beso profundo, lento pero necesitado. Changmin cerró el puño con fuerza, entre la arena, estaba temblando, pero no se intimidó, buscó un mayor contacto, con su mano libre lo tomó por la cintura
El frío desapareció, el miedo también, la ansiedad, la melancolía, los prejuicios, el orgullo, todo; en aquel escenario que solo eran ellos dos, un par de corazones latiendo al mismo ritmo, un par de bocas acariciándose con la misma urgencia. El tiempo se consumió en una eternidad y cuando sus bocas se soltaron Changmin abrió los ojos, frente a él los párpados cerrados de Jaejoong, su nariz tan cerca de la suya, sus labios aun entre abiertos, respirando acompasadamente, como si despertara apenas de un sueño
— Changmin —susurró Jaejoong y los labios le temblaron
— Tengo miedo —respondió Changmin avergonzado, el mayor abrió los ojos, la mano en la nuca del menor se movió nuevamente, otra vez a su mejilla
— ¿Por qué? —preguntó nervioso, temiendo que dijera algo que lastimara su corazón. Acarició su labio inferior con el pulgar— Dímelo
— De quererte más de lo que debo —respondió Changmin— De enamorarme de ti —confesó avergonzado, sin dejar de mirarle a los ojos, Jaejoong bajó la mano de su mejilla y el menor sintió frío sobre su piel
— ¿Cómo es apropiado quererme? —preguntó confundido— ¿Es malo si te enamoras de mí? Porque yo Changmin… yo no temo esto que siento por ti
— ¿Qué sientes por mí? —cuestionó Changmin con el corazón cada vez más acelerado
— Te quiero, me gustas… Te deseo —confesó sin vergüenza— Y si lo que sigue es amarte, estoy preparado para ello
— Jaejoong —susurró sorprendido, aunque él era cariñoso todo el tiempo, aunque lo toqueteaba sin pudor alguno, jamás imaginó que algo así albergara dentro de él
Changmin estaba confundido, preocupado, pero en ese momento no le importó nada, sujetó a Jaejoong con ambas manos y tiró de sus mejillas hacia él. Se dieron un segundo beso y el momento volvió hacerse eterno, solo ellos dos, entregando sus labios a la pasión, al deseo, ya no existía aquel secreto entre los dos, sabían que algo comenzó con aquello, y aunque sentían miedo del futuro, en ese momento no importó
Al terminar se abrazaron, en aquella semi oscuridad, con el mar de fondo, se hicieron una promesa en silencio, comenzaba el secreto y el destino les tenía preparado algo maravilloso que jamás, ni en sus más nítidos sueños, hubieran podido imaginar
Nota de autor: Hola, este es una especie de Extra :p un capítulo para que sepan como comenzaron, habrá más de estos entre los capítulos normales, espero les haya gustado, dejen comentarios! :)
Este capítulo fue muy tierno, creo que mi favorito hasta ahora
ResponderEliminarOwww su primer beso 🙈
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