Changmin vs Max... cap 10

Aun cuando eran vecinos y trabajaban en el mismo lugar, Jae y Min no se habían visto desde hacia una semana. Situación que a Jae tenía muy consternado… solo sabía del menor por medio de Chun, pero no era lo mismo. Por más que su deseo de verlo crecía cada minuto, lo reprimía, pues no quería presionar… simplemente decidió esperar el tiempo necesario.

Una noche, la espera había terminado. Jae caminaba de regreso a casa, cuando de pronto, se detuvo en la orilla del puente… su mirada se llenó de nostalgia al instante, pues recordó cuando Min y él se encontraron por primera vez en ese mismo lugar. En su mente se repetía una y otra vez: “Quiero verlo”… después de un momento de pensar, continuó con su camino y al llegar a la mitad del puente se llevó una gran sorpresa… ahí estaba él…

-Changmin!... – una felicidad inmensa lo invadió al ver al menor, parecía como si lo hubiera estado esperando…
-Hola… - dijo con voz suave, y una mirada melancólica…

Teniéndolo frente a él, Jae solo quería correr y estrecharlo entre sus brazos, pero algo se lo impedía… la expresión tan fría que tenía Min, le hacía pensar que no quería que se le acercara…

-¿Qué pasa?... – preguntó el menor seriamente… - ¿Me tienes miedo?...
-No!... no es eso... – respondió, mirando hacia el piso… - Es solo que… no sé qué es lo que deba decir ahora…
-No tienes que decir nada. Acércate… - Min lo miraba fijamente… el rostro del mayor lo enterneció tanto que, sin pensarlo, fue él quien lo abrazó con fuerza… - Debes estar molesto conmigo, ¿no es así?... – le decía mientras acariciaba con ternura su cabello…
-Sé que no debería estarlo, pero… yo quería disculparme y aclarar las cosas con Max, fue muy cruel lo que le dije aquel día. Y ahora ya no podre hacerlo…
-Si puedes…
-Qué?... – dijo el mayor, apartándose un poco… - Pero creí que…
-Me refiero a que, aquel día Max y yo estábamos experimentando el mismo dolor… y aun está aquí… - tomando la mano del mayor la llevó hasta su pecho en dirección a su corazón…
-Perdóname… no debí decir eso…
-Solo dijiste lo que sentías…
-Aun así, necesito escucharlo…
-Y qué es lo que quieres escuchar?...
-Que no me odias…
-No seas tonto. Por supuesto que no te odio… al contrario. No sabes cuánto te extrañé…
-No más de lo que yo a ti…

Después de tanto tiempo, sus labios volvieron a fundirse en un tierno beso. Estrecharon sus cuerpos con dulzura pero al mismo tiempo con fuerza… permaneciendo así, uno junto al otro, sin pensar en el correr de los minutos, sintiendo su calor.

-Siento como si estuviera soñando… - la voz del mayor rompió el silencio… - ¿Esto está pasando en verdad?...
En respuesta, Min acaricio suavemente su mejilla… - ¿Sientes esto?... – le preguntó en un susurro…
-Si…
-Y esto?... – le preguntó nuevamente, dándole un gentil beso en la frente…
-Si…
-Entonces no es un sueño… Estoy aquí…
-Necesito sentirte más cerca… - Jae lo tomó de la mano y comenzaron a caminar en dirección a su casa…
………………………….

La habitación estaba siendo iluminada por una tenue luz que provenía de una pequeña lámpara. Aun tomados de la mano, los dos se acercaron hasta la orilla de la cama… se miraban fijamente, convenciéndose Jae de que no se trataba de un sueño.
Jae pasó su mano junto a la mejilla de Min casi rozándolo, acción que provocó que el menor tomara esa mano y la besara… Jae se sonrojó al sentir los suaves labios en su palma. Sin decir una palabra, Min lo tomó de la cintura y lo acercó lo más que pudo a su cuerpo, por su parte, Jae se refugió en su cálido regazo.
Como si el tiempo se hubiera detenido, el abrazo continuó hasta que Min levantó al mayor en sus brazos y lo recostó suavemente en la cama… no apartó ni un segundo su vista de aquel cuerpo que deseaba a morir, solo la ropa le impedía contemplarlo como de verdad quisiera, así que, con la autorización del mayor, fue desasiéndose de ella prenda por prenda.
Por fin, esa blanca piel fue descubierta por completo. En las mejillas de Jae un color rojizo apareció, a causa de la penetrante mirada del menor, pero no quería quedarse atrás y levantándose le ayudó a despojarse de sus prendas también… se recostaron en la cama, uno al lado del otro, y lo único que hacían era mirarse, algo que posiblemente para otros resultaría una pérdida de tiempo pero para ellos era todo lo contrario.
Su intención era disfrutar del momento con todos sus sentidos, anteriormente la vista, y enseguida el tacto… sus manos recorrían el cuerpo de su amado lentamente, delineando cada parte, centímetro a centímetro… el rostro, el cuello, los brazos sin dejar de lado las mismas manos, las piernas y por supuesto entre las mismas.
El sentido del oído también se hizo presente. La voz del menor pronunciaba “Jaejoong”… “Jaejoong”, una y otra vez… mientras que el mayor, entre suaves gemidos, decía el nombre del menor.
Finalmente el gusto y el olfato. Jae besó el cuello del menor, embriagándose con su sabor y aroma… un aroma que no había olvidado desde la primera noche, solo que esta vez era más el cuidado con el que lo capturaba. Min, inquieto, tomó al mayor del rostro y lo besó tiernamente, recibiendo a cambio una tímida sonrisa…

-Changmin, abrázame… - pidió el mayor con un tanto de desesperación… petición que fue cumplida de inmediato…
-No pienso separarme de ti otra vez…
………………………….

-Buenos días!!!... – un Su eufórico saludó a Jae en cuanto lo vio entrar a la pastelería… - Wow, estás radiante… - le dijo al notar una permanente sonrisa en su rostro…
-Estoy muy feliz, Junsu… muy feliz…
-Eso se nota. Y… ¿se puede cual es la causa de tanta felicidad?... Oh!, no, no me digas. Regresaron!...
-Sí…
-Quienes regresaron?... – preguntó Chun…
-Tu quién crees?!... – exclamó Su… - Por supuesto que Changmin y Jaejoong!...
-Es una gran noticia!...
-Oh, lo olvidaba… ¿Yoochun?... – dijo Jae cambiando el tema… - No habías dicho que partirías de regreso a tu casa ayer?...
-Ese era mi plan, pero… - decía mientras se acercaba a Su y lo abrasaba, de la cintura, por detrás… - No puedo separarme de Junsu… - frotando su mejilla contra la de Su… - ¿Verdad que es un encanto?...
-Sí, lo es…
-Yoochun eso duele!... – se quejaba… con las expresiones de Su, nuevamente las risas se escucharon en la que antes había sido una lúgubre pastelería.
-Por cierto! Dónde está Changmin?... – le preguntó Chun… dejando de molestar…
-Está hablando con Yunho… - dijo el mayor forzando una sonrisa…
-Estás de acuerdo con eso?... – Su sabía que a su amigo si le afectaba…
-Confió en Changmin. Estoy bien…
………………………….

-No creo que haya mucho de qué hablar, Changmin… - dijo después de sentarse en el sillón…
-Estoy de acuerdo. No puedo ocultar lo que siento por Jaejoong y creo que te lo he dejado muy claro…
-Si solo me ibas a decir eso, entonces… - Yun se puso de pie pero el menor no lo dejó dar un paso…
-Aun no termino… Sería muy cruel de mi parte pedirte que seas amigo de Jaejoong. Pero te pido que no dejes de verme a mí como tu amigo…
-Entiende que no me puedo conformar con solo ser tu amigo. Aun si lo intento… no podre… Lo siento…
-Te irás?... – le preguntó Min con una voz entristecida…
-Eso sería lo mejor, ¿no piensas igual?...
-Aunque no lo creas, entiendo cómo te sientes…
-No, tu no entiendes!!... – exclamó Yun tomando al menor por la fuerza, empujándolo hasta atraparlo entre la pared y su cuerpo…
-Yunho…
-No lo entiendes… - la voz de Yun se quebró… - No puedo amarte… tampoco me permito odiarte. Me pides que sigamos siendo amigos y que no me vaya… ¿te parece justo que siga a tu lado y te vea al lado de otro?...
-Perdóname… - dijo el menor abrazándolo con fuerza… - Por favor…
-Me complacerías un último deseo?...
-De que se trata?...
-Bésame… - Min quedó asombrado ante esa petición… - Un último beso y me iré…
-No puedo hacerlo…
Yun al escuchar la respuesta se apartó del menor… - Sabia que dirías eso… - una triste expresión se dibujó en su rostro pero una ligera sonrisa apareció… - Necesito pensar… tal vez regrese. No te aseguro nada… - y tomando la maleta que estaba junto a la puerta, se fue…
………………………….

Como siempre, Min y Jae se encontraron en su lugar favorito, el puente.

-Estás bien?... – le preguntó el mayor…
-Quisiera estarlo… pero no…
-Yunho se fue?...
-Si… y ni siquiera dijo “adiós”…
-Eso quiere decir que lo volverás a ver… - le dijo mostrándole una gentil sonrisa…
-No lo sé… honestamente, espero que así sea…
-Dicen que el tiempo cura las heridas…
-Pero la herida que le hice tomará mucho tiempo en sanar…
-Lo sé… y yo esperare contigo…
-Gracias. Tus palabras significan mucho… ¡Te necesito a mi lado!…
-Jamás me iré… te lo prometo…
-Te amo…
-Y yo a ti… - dijo, recostando su cabeza en el hombro del menor… - Te amo…

La imagen de ellos, juntos observando el atardecer… un ejemplo de amor puro…

Fin