Ya hace mucho tiempo que tengo esta cicatriz abierta en mi corazón, una cicatriz que por mucho que lo intente, no quiere cerrar. Simplemente, no lo hace, porque cada vez que vengo a verte toda mi alma se inunda de tus recuerdos, de nuestros recuerdos. Diste todo por mi, desde cicatrices, aunque diferentes a las mías, como ahora tu propia vida. Bueno… tu vida aún no se ha marchado del todo, pero quizás eso sea lo que más me duele, que me mantienes a tus pies esperando que un día vuelvas a despertar o esperando a la desolación que me produciría tu muerte. Pero esta espera, cada vez me consume más y más, mi alma camina varios metros detrás de mí, con mucho peso, como si llevara mil piedras a brazos, y ese peso, el peso de no tenerte, el peso de que no vuelvas, de que te estés perdiendo todo este mundo, el cuál estando contigo era maravilloso, es lo que día a día me está matando…
Flashback…
-Yunho, esta cicatriz que tiene aquí Changmin – dijo señalando a los labios de este - ¿de qué es?
-¿Está? – Respondió mientras con cuidado seguía afeitando al chico – Se la hizo el que era hasta aquel momento su mejor amigo.
-Vaya, pues debió de pegarle fuerte…
-Lo hizo, no sabes como llegó a casa… pensé que le habían tirado cristales a la cara – continuó Yunho diciendo con tono triste – Y todo… todo por mí.
-¿Por ti?
-Sí, esto le paso cuando por fin le echo valor para contarle lo nuestro a su mujer, bueno… ex.
-Pues yo creo que fue muy valiente, si yo hubiera sido el, hubiera echo lo mismo por la persona que amo.
-Sí, pero lo que más me duele, no es esta marca… me duele más todas las cicatrices internas que le produjeron durante esos días…
-Bueno, pero al final mereció la pena ¿no Yunho?
-Sí… mereció mucho la pena…
Fin del flashback…
Aquella lluviosa noche de Junio, por fin, Changmin tuvo el valor de confesar sus sentimientos a Erin aún creyendo que ella dormía, no pudo evitar contarlo, simplemente para liberarse, pero lo que el no supo es que la chica en realidad sí que estaba despierta y escuchó todo lo que Changmin había dicho durante esos minutos. Por eso, poco después de que Changmin se fuera para su oficina, la chica llamó al mejor amigo de ambos, Yoochun, que no dudó ni un segundo en ir a recriminarle lo que había echo a su amigo. Esa noche… Changmin no se defendió, simplemente porque creía que se lo merecía, el daño físico que le habían causado aquella noche, para el no era suficiente si tenía en cuenta todo lo que había echo, incluso por algunos segundos… prefirió morir… pero como siempre le pasaba en esos momentos de desesperación, su mente y su corazón se iluminó con la persona que amaba, ese chico desconocido que conoció el día de su vida y que hizo que su vida cambiara para siempre y una vez más no pudo evitar ir a refugiarse bajo los brazos de Yunho a su casa…
-Changmin… pero… ¿qué te ha pasado? – preguntó Yunho nada más abrir la puerta.
-Yo… yo… yo… - sin poder decir palabra, Changmin se tiró a los brazos de Yunho.
-Dios mío… tranquilízate, ven adentro hay que curarte.
-Yunho, ¿Quién es? – preguntó Key que bajo a ver quien era al oír llantos – Joder, Changmin ¿pero qué coño te ha pasado?
-Key tráeme gasas y las cosas para curar, por favor.
-Claro, claro ya voy… joder… pero que… - se fue diciendo para sí mismo.
¬-Changmin, anda dime que ha pasado – le dijo mientras sentaba al chico en el sofá y se sentaba a su lado.
-Yo… no podía más, no podía seguir mintiendo… Erin… pensé que dormía y bueno… yo aún así se lo dije… pero al final no dormía… y yo… Yoochun…
-¿Ha sido el quien te ha hecho esto?
-Sí… - respondió cabizbajo.
-Será cabrón… ¿Cómo ha sido capaz de hacerle esto a su mejor amigo? Si casi te manda al hospital…
-Me lo merezco… por haber consentido esto… yo me lo merezco.
-No, no te mereces sufrir así por amarme, es algo que corre de mi cargo, tu no tienes la culpa, yo fui quien apareció en tu vida.
-Pero yo fui quien quise que siguieras Yunho…
-¿Y acaso te arrepientes?
-No, pero… no quería que las cosas pasaran así…
-Bueno, creo que nadie querría mentir a los suyos… pero no te preocupes, yo lo arreglaré.
-No, no quiero que hagas nada… por favor…
-Shhh, no digas nada, ahora estate tranquilo, te curare las heridas y luego ves a dormir, no te preocupes por nada más.
Después de que Key volviera con todo, Yunho curó con cuidado a Changmin. La verdad es que lo mejor hubiera sido que fueran al hospital, pero este se negó y prefirió que Yunho le curara. Llevaba un gran corte en el labio producido por uno de los puñetazos de Yoochun, algo que seguramente después le dejaría una buena marca, pero aún así tan sólo deseaba permanecer en aquella casa. Ese era su universo aparte, todo lo que le separaba del infierno y de la realidad, cuando estaba en casa de Yunho todo su mundo estaba lleno de felicidad, era capaz de vivir al cien por cien sin que nadie se lo impidiera, podía llorar o reír como se le antojara y siempre, pasara lo que pasara, podía encontrar consuelo en Yunho y Key, que ya formaba también parte de su familia propia. Imaginarse fuera de esas cuatro paredes era lo que más abrumaba a Changmin, tanto, que hubiera deseado que se parara el tiempo en cada uno de los momentos en los que había estado allí, para no tener que volver jamás a ese infierno que tenía que vivir día a día.
Al día siguiente…
Esa mañana Yunho se levantó temprano, observó como Changmin dormía plácidamente y le pidió a Key que si despertaba no lo dejara salir de allí y procurara que comiera. La rabia le corroía por dentro y no estaba dispuesto a permitir que Changmin sufriera por su culpa, por lo tanto, decidió ir a la empresa de este para hablar con Yoochun y dejarle las cosas claras.
-Adelante – dijo Yoochun desde su despacho - ¿Y tú que coño haces aquí? – preguntó nada más ver a Yunho.
-Que qué hago aquí… ¿Qué que hago aquí? Como tienes cojones a preguntarme eso después de lo que hiciste anoche.
-Oh… vaya… lo olvidé ¿ya vienes a proteger a tu princesita?
-¿Y encima te burlas?
-¿Sabes que pasa? Que no se como vosotros… ah si eso, vosotros los gays os llamáis, como hay que mediros según el mariconeo que tengáis…
-Eres un cabrón… - Yunho se fue directo a Yoochun, lo agarró por su camisa y lo levantó hasta acercárselo lo máximo posible – pero te voy a decir una cosa, si crees que a mí me vas a humillar con tus estúpidas palabras, lo llevas claro. Y otra cosa te digo… como vuelvas a tocarle un pelo a Changmin juro que no vivirás para contarlo.
-Uhh, mira que miedo me das – dijo arrogante riéndose en su cara – No sabes el infierno que le espera, que digo… que os espera.
-Mira, vete a la mierda, quedas advertido, más te vale estarte quieto…
-Que sí, que sí, adiós chavalín, vete a cuidar a tu cachorrito.
……………
Si ese día me hubieran dicho que ibas a pasar por todo eso, créeme, quizás, con todo el dolor de mi alma y de mi corazón, hubiera preferido que no me conocieras. Sé que has sido feliz a mi lado y sobre todo, hemos sido felices, pero has tenido tan sufrimiento por mi culpa que no me merezco el haberte conocido. Ahora, no me merezco nada de tu parte, ni siquiera me merezco la tranquilidad de no tener que preocuparme por si despiertas o no. Supongo que esto es un castigo, un castigo por todos mis actos y todo el sufrimiento que he llevado a tu vida. Supongo que mi castigo para siempre es no poder dejarte ir…
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario \(*O*)/ ♥ ♥
o más bien... deja tus pensamientos pervertidos grabados en esta entrada XD