Business Affairs - Cap. 16

“- Y yo estaba como “hey! ¿No eres ese tipo de Tick Tock, es Cock'o'Clock? ¿Has visto el porno por cierto? Es increíble, el forma en que inclina su cuerpo... "

Yunho llegó a trabajar diez minutos más temprano y, como de costumbre, Jaejoong ya estaba allí, con su café esperándolo.

- Buenos días - Saludó Yunho alegremente, inclinándose para besar a Jae en la mejilla sin realmente pensar en ello.

- Um, hola - Devolvió Jaejoong con la cabeza inclinada. - ¿Cómo estás?

- Estoy bien, ¿y tú? - Preguntó Yunho, tomando asiento detrás de su escritorio.

- Sí... Sí, estoy bien. - Respondió. Movió sus pies, demorándose más de habitual.

- ¿Ocurre algo malo? - Preguntó Yunho, ladeando la cabeza hacia un lado.

- No, es que… - Comenzó Jaejoong. Hizo una pausa y tosió para aclararse la garganta. - Sí. Voy a estar aquí si me necesitas.

Las cejas de Yunho se fruncieron mientras la puerta se cerró detrás de Jaejoong. ¿Qué ocurre con él?

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A lo largo de la mañana, el ambiente en la oficina fue tenso. Jaejoong estaba extraño, evitaba a Yunho y trataba de no mirarlo a los ojos. Y como si eso no fuera suficiente, Yunho no podía evitar la sensación de que estaba siendo vigilado. Su paranoia llegó a tal punto que en realidad tuvo que cerrar todas las persianas de su oficina.

Aish... Debo estarme sobreexplotando con el trabajo.

Alguien llamó a la puerta y él casi saltó fuera de su piel. - Entra. - Dijo. La puerta se abrió y Jaejoong entró, cerrando la puerta detrás de él.

- Un fax de la Corporación Choi. - Le dijo Jaejoong mientras cruzaba la habitación y ponía unos papeles sobre la mesa, con los ojos mirando sus pies.

- ¡Espera! - Exclamó Yunho, poniéndose de pie y agarrando el brazo de Jaejoong cuando éste se estaba dando la vuelta para irse. Jaejoong lo miró, casi con miedo. - Jaejoong... ¿Qué pasa? - Le preguntó en voz baja.

Jaejoong suspiró, llevando una mano hacia su frente. - No es nada, de verdad.

- No me mientas. Dime - Exigió Yunho. - ¿He hecho algo mal? ¿He…

- No es eso. - Murmuró Jaejoong, llevando su mano al agarre de Yunho. - Es sólo que... Es lo de anoche. Yo... Bueno, ya sabes, hubo ese incidente y yo probablemente te asusté y yo sólo...

Yunho se movió de detrás de su escritorio y le cortó las palabras a Jae con un abrazo. - Tontito - Le murmuró al oído. - No fue nada.

Jaejoong suspiró, su cabeza sobre el hombro de Yunho. Sí, no fue nada, ¿no? pensó con amargura. Mi confesión no significó nada.

Aun así, no pudo resistirse cuando Yunho lo tomó de la barbilla y presionó sus labios suavemente. Sus brazos colgaban a sus costados cuando Yunho agarró la parte posterior de su cuello, deslizando su lengua más allá de esos labios carnosos.

- Ánimo, ¿de acuerdo? - Sonrió Yunho, alejándose. - No quiero verte triste.

Jaejoong sonrió débilmente. - Está bien.

Salió de la oficina y Yunho volvió a sentarse en su silla, la sensación de estar siendo observado era más fuerte que antes.

Realmente, realmente me estoy sobreexplotando con el trabajo.

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- Y yo estaba como: Hey! ¿No eres ese tipo de Tick Tock, es Cock'o'Clock? ¿Has visto el porno por cierto? Es increíble, el forma en que inclina su cuerpo...

Changmin suspiró, su bibimbap  de repente parecía mucho menos apetitoso. - ¿Por qué acepté almorzar contigo otra vez? - Le preguntó.

- Porque me amas y quieres tener mis bebés. - Dijo Yoochun.

Changmin levantó una ceja. - Sí, algunos problemas con eso. Uno, no te  amo. Dos, uh, no sé, ¿tal vez el hecho de que soy un hombre? Y la última, los hombres no tienen útero.

- Nunca dije que ibas a tener mis bebés - Señaló Yoochun. - Yo solo dije que los querías. ¿Y qué pasa con eso de que tú no me quieres? Jaja, por favor, no me haga reír.

Changmin rodó los ojos, incapaz de luchar contra una pequeña sonrisa. - Vaya, me has pillado. Estoy loco por ti.

- ¡Lo sabía! - Exclamó Yoochun en victoria.

- Eres un perdedor. - Se rio Changmin.

- Sí, pero soy tu perdedor. - Sonrió.

Changmin gimió. - ¡Oh, sí! ¡Es tan cierto!

Se rieron juntos por un momento antes de que se hiciera un silencio entre ellos. Yoochun jugueteó con sus palillos durante unos minutos y luego habló. - Con toda seriedad, Minnie... ¿Qué piensas de mí?

- ¿Qué pienso de ti? - Repitió Changmin frunciendo las cejas. - Creo que debes sufrir con un corte de pelo poco fiable en donde tu córnea está oculta un promedio de veinticuatro/siete.

Yoochun parecía herido. - Mi pelo no es tan malo, ¿verdad?

- Confía en mí, lo es. - Respondió Changmin con gravedad.

Yoochun resopló. - ¡Ese no es el punto! Quise decir... ¿Qué piensas de nosotros?

- Hmm… - Murmuró Changmin, frotándose la barbilla, pensativo. Miró la expresión de preocupación de Yoochun y sonrió, decidido a incomodarlo un poco. - Creo que nunca he pensado en ti y en mí como un nosotros.

- Oh, está bien. - Dijo Yoochun, su cara cayendo sólo un poco. - Sí, jaja, yo tampoco. Es raro, ¿verdad?

Changmin se rio. - ¡Estoy bromeando, Yoochun! - Sonrió, golpeando a Yoochun en la frente. - Eres mi mejor amigo, idiota. Te quiero y no podría vivir sin ti.

Una sonrisa se ​​dibujó en el rostro de Yoochun. - Yo tampoco.

Changmin se comió un bocado de comida con una mirada contemplativa en su rostro. Cuando lo hubo tragado, habló. - Oye, Chun. ¿Tú... Alguna vez has pensado acerca de nosotros como…

- Disculpen señores. - Interrumpió la voz de un camarero. - ¿Éstas son sus comidas, correcto?

- Sí, gracias. - Asintió Yoochun y Changmin suspiró.

- ¿Qué estabas diciendo? - Preguntó Yoochun, volviendo a mirar a Changmin.

- Oh, nada. - Murmuró.

- Está bien, entonces -  Dijo Yoochun fácilmente, levantando su copa. - ¿Por nuestro bromance?

Changmin se rio a medias y le tocó el vidrio a Yoochun. - Por nuestro bromance.

Y de alguna manera, Yoochun no pudo evitar desear que brindaran un bromance sin la “b”.

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Cuando Yunho llegó a casa, se encontró con Sooyeon esperándolo en el vestíbulo. Le echó un vistazo y se dio cuenta que era obvio que algo andaba mal. Muy mal.

- Um, hola. - Saludó torpemente.

- No me saludes como si nada. - Le espetó.

- ¿Qué hay de malo, cariño? - Le preguntó, dando un paso vacilante hacia ella.

-¡Como si no supieras! - Gritó, y él se apartó.

- ¡Yo... No lo sé! - Protestó. Una pequeña voz en el fondo de su mente susurró Jaejoong.

- ¿En serio? Entonces dime, ¿quién estaba durmiendo en nuestra cama ayer por la noche?

- ¿Qué quieres decir? Yo dormí ahí. - Mintió Yunho.

- ¿Tú solo? ¿eh?

- Sí. ¿Quién más estaría allí? - Se rio.

- No lo sé. - Respondió con dureza. - ¿Tu secretario tal vez?

Yunho se resistió. - ¡¿Q-qué?!

Oh, Dios lo sabe, lo sabe, lo sabe.

- ¿Tratas de jugar inocente? - Gruñó. - Ya lo sé, no intentes mentirme ahora.

- Cariño, yo nunca... Nunca… - Tartamudeó.

- Contraté a un detective privado. - Le dijo ella, con una sonrisa cruel en su rostro. - Ya los vi besándose.

- Nosotros... Yo...

- No puedo creerlo. - Gritó, lanzando sus manos al aire. - Honestamente, ¿a un hombre? ¿Estabas tan desesperado que lo hiciste con un chico? Supongo que es porque es bastante femenino.

- ¡No hables así de él! - Gritó Yunho, sus puños cerrados.

- ¿Qué? ¿Te ofendiste? ¿Cómo crees que me siento, ah? Engañando a tu esposa, deberías estar avergonzado de ti mismo. Y esta probablemente no es la primera vez, si esto es lo que estás haciendo con un chico, entonces fue una buena idea el despedir a tu última secretaria.

- Yo nunca hice nada con ella, ¿de acuerdo? - Exclamó, suspirando profundamente. - Jesucristo... Sí, tuve sexo con Jae - Admitió. - Pero él ha sido el único.

- Mira, estoy dispuesta a perdonarte por esto. Sólo una vez, ¿me oyes? Este es la única oportunidad que tienes. Despídelo mañana y me quedaré. Pero te juro por Dios, la primera vez que no estés en casa a las seis y me voy. - Dijo Sooyeon como advertencia.

- ¿Por qué te molestas en darme una oportunidad? - Murmuró Yunho. Estaremos mejor si terminamos con esto ahora.

Sooyeon se encogió de hombros. - Soy una buena persona. - Yunho tuvo que contener su resoplido. - Tal vez no pongo tanto como te gustaría, pero déjame decirte ahora que esto no significa que podremos tener más sexo. En todo caso, quiero decir que tendremos cada vez menos. De todos modos, el punto es que me has engañado porque como hombre, tenías deseos y puedo perdonar eso.

- ¡No fue así! - Dijo Yunho. - Fue...

- No quiero oír de eso, francamente. Solo despide a esa puta de tu oficina. - Dijo Sooyeon con un gesto desdeñoso con la mano.

- ¡No me estás escuchando! - Gritó. - No se trata solo de sexo, yo...

Yunho hizo una pausa, los ojos como platos al darse cuenta de lo que estaba a punto de decir. Puso una mano en su boca.

- ¿Qué? - Preguntó Sooyeon, levantando una ceja.

Yunho negó con la cabeza frenéticamente, empujando a Sooyeon para salir corriendo, no podía pensar con claridad debido a la descarga de palabras que sonaban en su cabeza.

Yo lo amo. Amo a Jaejoong.

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