Our Destiny - Cap. 15

Amor a primera vista

-Ya llegue- grito Yoochun saludando a sus empleados- ¿están mis papás en casa?

-Su madre llego hace poco, creo que está en el despacho con un invitado.

-Ohh…tengo una noticia genial, ven esto- dijo emocionado señalando un documento- es una beca, me dieron una beca, necesito contárselo a mamá.

Yoochun corrió hacia el despacho fingió tocar y abrió la puerta de golpe.

-Mamá yo…-y no fue capaz de decir una frase más, lo que vio lo dejo anonadado, salió disparado hacia su cuarto.

-Eso no es cierto, no es cierto- susurraba- mamá no puede ser así, ella no- sollozando.

-Hijo abre tenemos que hablar- tocando la puerta.

-No quiero…

-Hijo por favor tienes que entender…

-Que quieres que entienda- grito abriendo la puerta- que…que eres una g…

-No te permito que me hables así.

-Cómo quieres que te llame entonces-sollozo- como puedes hacerle eso a papá.

-Yo no soy perfecta hijo, yo me equivoque ¿Por favor no le cuentes nada a tu papá?

-Quieres que me vuelva tu cómplice.

-No hijo, solo podrías fingir que no viste nada, algo como esto no volverá a ocurrir nunca más.

-Pues no te creo nada y por supuesto que se lo voy a decir a papá.

La traición de Back Hee y ahora el engaño de su madre fue demasiado para Yoochun, él simplemente empezó a odiar a las mujeres como un mecanismo de defensa antes de que jugaran con él, él se volvió un casanova.

[…]

La reputación de Yoochun era la más conocida en toda la escuela, era conocido como el mayor casanova de la historia contaba en su haber con 40 novias por año, es decir una novia por semana, debido a eso era muy aclamado por sus amigos y compañeros.

Jaejoong, su mejor amigo, era el único que desaprobaba su comportamiento.

-¿Por qué te haces esto Chunnie?, tu puedes encontrar a una mujer que te amé de verdad si te das la oportunidad de amar.

-No amigo, tú eres el único que se ha ganado la lotería con Mariah

-Eso ya lo sé, pero aun así no te cierres al amor Chun.

-Dejemos el tema ahí, y más bien cuéntame porque estas cancelando todos los planes que tenemos.

-Mi hermano llego de visita, ya sabes solo viene 9 días al año así que quiero estar con él, no te pones celoso verdad- dijo sacudiéndole el cabello.

-Por supuesto que no, sin embargo como es que soy tu mejor amigo y aun no conozco a tu hermanito.

-Porque no quiero que lo perviertas- rio.

-Malo, has herido mis sentimientos- haciendo un puchero.

-Neeee…ya veremos si este año se da la oportunidad- agarrando su mochila del césped- ahora regresemos a clases.

-Cúbreme unos minutos con el profesor yo voy a…-mirando de reojo a una pelirroja que acababa de pasar- de caza- guiñándole el ojo.

-Yoochun por favor, deja de ser tan imbécil quieres- refunfuño.

Yoochun alcanzo a la chica a pocos metros del lugar donde estaba y trataba de conseguir su número cuando de pronto…

-Hyung, hyung, espera- gritaba un chico de hermosos ojos cafés, carita redonda, con hoyuelos preciosos, mirada tierna que jadeaba mientras corría.

-Ehhh- giro Jaejoong al escuchar la voz de Chagmin y sonrió al verlo correr hacia donde estaba- ¿Qué haces aquí Min?- desordenándole el cabello.

-Olvidaste tu trabajo- dijo jadeando y tratando de recuperar la respiración.

Yoochun se quedó estático por unos momentos, dejo de prestar atención a la pelirroja que ahora parecía interesada en él. Se quedó babeando sin darse cuenta por largo rato, nunca había visto a un chico tan hermoso y nunca se había sentido tan desconectado de la realidad como ahora.

No entendía completamente lo que le había sucedido, desde ese momento no volvió a ser el mismo, seguía saliendo con chicas a diestra y siniestra pero eso ya no lo reconfortaba sino que cada vez iba sintiéndose más y más vacío. Paso un año más sintiéndose completamente solo.

El cumpleaños de Jaejoong estaba cerca pero Yoochun no tenía ánimos de ir sin embargo Marianh lo obligo a comprar un regalo y el mismo día de la fiesta se encargó de arrástralo hasta ahí. Cuando Yoochun llego la casa de Jaejoong estaba atiborrada de gente, el cumpleañero cantaba en la tarima, junto a Marianh lograron llegar a la tarima luego de muchos empujones saludo a su amigo y cuando se disponía a irse Jaejoong lo detuvo.

-Busca a mi hermano por favor- grito debido a la música- quiero cantar con él.

-Ok- asintió sintiendo a su corazón latir más fuerte- desde la primera vez que había visto a Chagmin logro averiguar algunas cosas a través de su amigo, no sabía que vendría por lo que la sorpresa lo emociono.

Subió al segundo piso tratando de ubicarlo, pasó más de media hora cuando al fin le pareció divisar su figura perdiéndose en la terraza. Corrió hacia el lugar lleno de ansias.

-No es bueno que llores; al menos no en una fiesta- dijo tratando de ocultar la emoción.

-¿Qu…quien eres tú?

-Park Yoochun, mucho gusto- dándole la mano- y tú debes ser el precioso hermano de Jaejoong.

-Ehh- ruborizándose- si

-Tu hermano está buscándote, quiere cantar contigo- sin dejar de perderse en ese rostro encantador.

-Pero hay much…

Yoochun lo abrazo por el hombro con una mano y con la otra se encargó de mover a las personas para poder llegar a la tarima, lo dejo con su hermano sin dejar de verlo en ningún momento y después de que cantaran juntos se encargó de animarlo durante toda la fiesta evitando que huyera. Se quedó junto a Chagmin toda la noche sintiendo en su corazón una calidez que nunca antes había sentido.

Dos años después la reputación de Yoochun seguía siendo la misma, a pesar de que él ya no salía tan seguido con chicas, solo lo hacía cuando Jaejoong lo animaba, tenía miedo de decirle a su amigo que le gustaba su hermano e incluso tenía más miedo de que Chagmin lo rechazara. Ese año Jaejoong su mejor amigo se fue a cursar cocina internacional en el extranjero por más de seis meses, se comunicaban por internet constantemente.

Ese día en especial estaba aburridísimo cuando le llego un mensaje a la Tablet.

Amigo yo sé que tienes muchas cosas que hacer pero por favor podrías tomarte algunas horas de tu tiempo para ver a mi hermano, el acaba de llegar y se va a sentir solo en casa, hazme ese favor pleasse.

-Esta es mi oportunidad- se dijo a si mismo saltando en un pie y alistándose para ir a la casa de los Kim.

Al llegar tuvo que esperar más de media hora para que le abrieran la puerta y al ver a Chagmin con los ojos llorosos, lo saludo y no pudo evitar coquetear con él.

-¿Por qué vendrías a verme a mí?- cerrando la puerta.

-Porque no quería que esos ojitos preciosos- limpiando las lágrimas con un pañuelo- volvieran a llorar- acunándolo en un abrazo- perdón por llegar tarde.

-Tu no…-sonrojándose- debes preocuparte…

-Claro que si- poniendo su dedo índice en los labios de Chagmin- …

Ese día jugaron videojuegos toda la tarde y no queriendo despedirse de Chagmin logro convencerlo de ir a su apartamento por unos días. Se encargó de que todos los días de Chagmin a su lado fueran especiales, le pidió que durmiera en su cuarto pues quería después añorar su aroma cuando se fuera, todos los días le llevo el desayuno a la cama, hizo sus mejores esfuerzos en ejecutar algunas recetas de Jaejoong.

Los días siguientes lo llevo a cuanto lugar se le ocurrió que si al zoo, exposición de arte, museos, cine, restaurantes desconocidos, a bailar, de viaje, etc. Trataba de complacerlo en absolutamente todo y  al mismo tiempo no podía evitar mostrar sus celos tomándole de la mano constantemente, abrazándolo y  evitando que alguien se le acercara.

Yoochun sabía que Chagmin solo se quedaba 9 días según lo había escuchado por boca de Jaejoong por lo que deseaba que el último día fuera más que espectacular. Ese día llevo a Chagmin a pasear al rio Han; caminaron mucho hablaron de sus pasatiempos y cuando cayó la noche juntos tomados de la mano se quedaron a las orillas para ver el espectáculo de los fuegos artificiales. Yoochun aprovecho entonces la distracción de Chagmin para tomarlo por la cintura girarlo levemente y besar sus labios de manera delicada, el beso fue mucho más espectacular de lo que hubiera imaginado; en ese momento fue cuando se dio cuenta que esta vez sí estaba irremediablemente enamorado.

Siguiente