Singin' in the rain cap 5

Lo que quiera mi hyung…

Y después la lluvia
Cesó por ti…
Y en éste día
El tiempo despertará…


Otro día más sin dormir bien….
Bueno, hoy parecía que no habría lluvia…

¿Por qué últimamente todo se me hacía tan difícil? Todo era por esa constante incertidumbre que me causaba JunSu hyung. Pero no podía culpar a JunSu de todo lo que me pasaba, al fin y al cabo, el no tenía conciencia de la guerra infernal que se libraba en la mente de su ‘pequeño’ Min. Y es que todo estaba tan fuera de lugar, que sentía que pronto estaría caminando sobre el techo…
Ah… ¿Cómo podía ser todo tan difícil? Y no podía evitar sentirme totalmente inestable en ese momento, tan frágil en la visión de mi mismo. Hyung… ¿Qué se supone que haga? Instantáneamente el sentimiento de incertidumbre me invade hasta la médula de los huesos, en cualquier momento… En cualquier lugar. Ya no me sentía a gusto ni en mi propia habitación, ni siquiera en mi propia cama.
Ahora, que al fin me había dado cuenta de qué era lo que me hacía falta todo este tiempo, ahora que encontraba que el motivo para deshacerme de toda mis dudas era él… Me veía dudando del siguiente paso a dar.
Recordar la noche anterior era divertido, hasta que llegaba al punto en el que JunSu me había besado nuevamente… Era totalmente inquietante. Nunca antes había experimentado el beso de un hombre, no es que quisiera… No encontraba a ningún hombre atractivo. Siempre me habían gustado las mujeres, pero JunSu era la excepción total a la regla que me había regido hasta hoy. No podía evitar sentirme atraído hacia él desde que me había besado bajo la mirada de su propia habitación… Era un sentimiento constante de desear más.

*Flashback*

YunHo había vuelto a eso de las 12:00 a.m. y se había ido directo a dormir. Como teníamos una semana de descanso, ni se preocupo por mandarme a mi habitación, así que aproveché y me quedé disfrutando de la sala. JunSu no había vuelto a salir de su cuarto, supuse que estaba demasiado cansado, así que lo dejé dormir.
Pasé tres horas sin moverme, el sillón era bastante cómodo, y aunque no durmiera, me relajaba estar haciendo nada y el silencio que reinaba en el departamento era exquisito. Hasta que…

Escuché risas provenientes del otro lado de la puerta principal. Esta se abrió y escuché pasos entrando y risitas.
-Ssssh~ Chunnie, los vamos a despertar. -La voz de Jae sonaba torpe y alcoholizada, y la de YooChun no se quedaba atrás.
-No queremos eso, ¿verdad hyung? -Y más risas.
Me removí en el sillón para que notaran que estaba ahí, pero sin ‘despertarme’.
-Hay alguien en el sillón… -Dijo Jae.
-Se le ven las piernas, es Min. -YooChun se rió, pero Jae le dio un zape.
-No te burles, mi bebé, es alto, pero es lindísimo~ -Jae se acercó al sillón.
-Creció rápido ¿no? -Dijo YooChun.
-Mucho. -Dijo Jae con voz maternal. -Demasiado, diría yo…
-¿Te vas a poner sentimental, omma? -La risita de YooChun era tonta.
- No soy tu omma… No harías con tu omma lo que hiciste conmigo…

¿Escuché bien?

YooChun rió entre dientes y después los escuché marcharse hacía las habitaciones.

¿JaeChun?

Me quedé pasmado un rato… Con razón últimamente pasaban tanto tiempo juntos, tenían una relación a escondidas… A nuestras espaldas. ¿Acaso creerían que no nos enteraríamos? Yo ya lo había intuido, pero nunca pensé que mis estúpidas conclusiones fueran ciertas.
Pero… ¿JunSu lo sabía? ¿Acaso era por eso qué se mostraba tan inestable? ¿Por eso jugaba conmigo? Eso era… Yo era una simple escapatoria… JunSu en verdad quería a YooChun, y yo no podía hacer nada en contra de ello. No podía luchar contra la voluntad de JunSu, simplemente no podía. Aún cuando sabía que todo era un juego, aún cuando sabía que JunSu deseaba a YooChun en vez de a mí… Aún así, estaba dispuesto a que hiciera de mí lo que quisiera.

Lo que quiera mi hyung…

*Fin del flashback*


Después de tanto pensar me encaminé a la cocina, escuché voces… Ya todos se habían levantado. YunHo miraba la televisión en la sala, YooChun, Jae y JunSu estaban en la cocina, estos últimos cocinaban y YooChun simplemente los miraba. Podía ver su sonrisa de complicidad hacia JaeJoong.
JunSu seguía con su pijama puesta y tenía harina en la cara y el cabello. Que imagen más tierna daba JunSu cuando me sonrió… Toda la noche de desvelo valió la pena, para sólo lograr mirarlo una vez más. Despertar solo y desamparado cada mañana no significaba nada comparado con el JunSu sonriente que estaba frente a mí.
-Buenos días. -Dijo Jae sonriente desde la estufa. -Ya casi está listo, así que vete a lavar para que comamos todos juntos.
-Aish~ hyung, no soy tu niño…
-Lo eres, y siempre lo serás Min, aprende a vivir con ello. -Me apuntó con la espátula, como si de un arma se tratase.
Sonreí… Jae siempre era así…
-No me queda de otra. -Me encogí de hombros.
-Buenos días Min. -La voz de JunSu con su dulzura me golpeo sutilmente. –Hago tu desayuno.
-¿Pretendes envenenarme hyung? ¿Es qué todos están en mi contra hoy? -Usé mi tono melodramático.
-Nada~ te lo vas a comer, JunSu se levantó especialmente a prepararte algo de comer. -La voz de Jae sonó a mamá regañona.
-Resígnate, nunca les ganaremos Min. -YooChun se puso de pie y me dió una palmadita en el hombro.
-Pues ya qué~

Después del bien merecido desayuno, todos se dedicaron a hacer diferentes actividades, YooChun se encerró en el estudio a componer, mientras YunHo se dedicaba a ensayar algunas coreografías en la sala. JaeJoong y JunSu estaban con YunHo mirándolo bailar y yo estaba sentado en la barra de la cocina bebiendo jugo y leyendo un libro. Todo pasaba lentamente, y el día transcurría tranquilo, pero aunque trataba de no pensar mucho en lo referente a cierto hyung que me robaba mis preciadas horas de sueño, no podía evitar alzar la vista de las páginas para observar a JunSu desviar la vista hacia otro lado. Hyung… Aquí estoy… Mírame…


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De vez en vez podía sentir los ojos de ChangMin sobre mí, y eso me ponía nervioso. Tal vez pensaba que yo era un acosador por lo que había pasado la noche anterior. No quería presionarlo, pero ya no podía callarme más, ni siquiera podía alejarme mucho de él. Tal vez estaba siendo demasiado obvio en cuanto a mis intenciones hacia él. Pero… ¿Qué sentiría él al respecto?
No me había dicho nada, ChangMin nunca decía nada en cuanto a lo que sentía, y eso me frustraba, ahora más que nunca necesitaba una señal para saber si debía de seguir en mi misión de acercarme a él.
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Ah~ hyung tonto, se da cuenta de que lo miro, pero no dice nada. Estúpido hyung.
Odié el sonido de la voz de YooChun llamándolo al estudio.

-JunSu yah~ Necesito que me ayudes con esto. -Park había aparecido en la sala para llevarse a JunSu.
-Si Chunnie, ya voy.
¡Estúpido hyung! ¿Con qué le iba a ayudar exactamente? ¿Acaso jugaría con él a algo? ¿Después de que la noche anterior había hecho quién sabe que cosas con Jae?
Pero, ¿qué cosas estaba diciendo? ¿A mí que me importaba que JunSu y YooChun hicieran lo que quisieran?
Pero me carcomía la ira. Ni siquiera pude ocultar mi enojo al cerrar el libro de forma ruidosa y bajarme de la barra. Jae me miró un poco asustado, pero después su expresión cambió por una sonrisita. Jae sabía… Él sabía.
Huí a mi habitación y me encerré ahí. Estaba tan enojado y era tan difícil canalizar mi enojo. Pateé unos zapatos que estaban en el piso y golpearon la puerta del clóset, me tiré en la cama me puse mis audífonos y me desconecté del mundo.
Estaba a punto de hiperventilar… Estaba tan enojado que me dolía la cabeza. Cerré los ojos con fuerza y me cubrí la cara con las manos.
Sentía ganas de gritar y de romper todo. ¿Por qué? Hace unas horas había pensado que todo sería fácil, que yo querría a JunSu aún cuando el quisiera a YooChun… Pensé que podría soportarlo. Pero era tan difícil… Saber que él estaba cerca de mi hyung… ¡MI HYUNG!
Sentía mis ojos arder, mi pecho caliente, mis ganas de JunSu ardiendo dentro de mí… Sin respuesta alguna, con dolor y desesperación palpitantes.
¿Celos, ChangMin?
¡Qué estupidez tan grande! Actuaba como un niño tonto de secundaria. JunSu no me pertenecía, no tenía derecho sobre él… Pero, ¿él si tenía derecho sobre mí?
¡Y que más daba! Al infierno yo y mis reglas, JunSu era lo único que importaba en este momento… Y aunque me doliera aceptarlo, él prefería a la rata… Idiota, mil veces idiota…
Idiota…
Idiota…

Sudor sobre mi frente… El sabor dulce en mi boca… Caliente… Su piel caliente sobre la mía…
-ChangMin ah~ -La voz jadeante de JunSu junto a mi oído… Seductoramente desesperante….
Sus manos sobre mí… El olor de su cuello dulce y amargo al mismo tiempo. Que bello… que horrible… que tierno… que perverso… un ángel… y un demonio…
-ChangMin ah~

Me desperté sobresaltado… Estaba oscuro y encontré a JunSu mirándome desde la puerta.
-ChangMin ah~ ¿Me llamabas? -Me dijo con cara asustada y un tanto sonrojado.
-N…No~ -Le dije sentándome en mi cama. ¡Que incómodo!
-Escuche mi nombre. -JunSu entró a la habitación.
Yo rogaba porque no se acercara demasiado…
-Ah~ Estaba dormido. -No pude mentir en un momento así.
-Lo siento… te desperté…
JunSu hablaba bajito y estaba totalmente sonrojado. ¿Por qué tenía que ser tan tierno?
-No te preocupes hyung… -Me senté en la orilla de la cama, apoye mi cabeza sobre mis manos que descansaban sobre mis rodillas, me sentía un tonto.
-¿Estas bien? -JunSu cerró la puerta tras entrar a la habitación.
-Estoy bien, no te preocupes…
Pero mentía… No estaba bien. Estaba totalmente desesperado, esperando y buscando algo que estaba fuera de mi alcance… JunSu se sentó junto a mí y me pasó un brazo por los hombros. Oh… No hagas eso…
-ChangMin… Estás caliente…
-Sí… Esto… Estaba soñando… Creo que me sobresalté un poco…
Prácticamente eso fue una confesión… Sólo me faltaba gritárselo: “¡Si hyung, estaba soñando perversiones contigo!”.
-Ah~ ¿quieres qué te traiga algo? -Dijo separándose un poco de mí y alejando su brazo de mi hombro.
-Estoy bien, gracias…

El incómodo silencio se dejó caer sobre nosotros, como queriendo aplastarnos. Yo estaba sofocado, tenía tanto calor, a pesar de que afuera hacía mucho frío, las nubes seguían en el cielo, pero la lluvia no caía más. Tanto calor… Y JunSu junto a mí… como esperando, como golpeándome con su mirada.
-¿Qué hora es? -Le pregunté al mirar por la ventana que estaba al lado de mi cama. Afuera estaba oscureciendo.
-Las siete… Dormiste todo el día.
-Era de esperarse, anoche no pude dormir nada…

JunSu me miró como adivinando la razón. Si hyung, por tú culpa…
Todo es por ti…


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Él bajó la vista y suspiró… Seguro pensaba que yo era un total idiota al comportarme así. Pero lo había oído… Mi nombre de su boca, mientras dormía. ¿Qué escondes ChangMin?
Me levanté de la cama y me encaminé a la puerta, alejándome del ChangMin cubierto de sudor y jadeante. Lo volteé a ver antes de cerrar la puerta. La luz del crepúsculo entraba por su ventana y caía sobre su espalda desnuda y brillante. Casi me ahogo ante esa imagen.
-Mejor levántate Min, JaeJoong quiere que salgamos en familia…
-Familia eh… ¿A dónde? -Se levantó y me dió la espalda, dirigiendo su vista hacia la ventana.
-A un club… Ya casi están listos…
-Esta bien, hyung. -Dijo sin voltearme a ver.
No supe qué responder, así que salí de ahí, casi corriendo, sintiendo la hostilidad de ChangMin hacia mí. Crucé el pasillo rápidamente, y entré a la habitación de Jae sin tocar.
Jae estaba en boxers escogiendo su ropa para salir.
-¡Hey! ¿Dónde quedo mi privacidad? -Dijo el ahora rubio cubriéndose su plano pecho con las manos.
-Joongie para que te tapas las bubis… ¡Ni tienes!
-Ya Su… ¿Qué querías? Tiene que ser algo importante como para interrumpir a tu omma mientras se viste.
-Aish~ ya, ya. -Dije y me senté en la cama. –Creo que ChangMin me odia… -Dije sin poder contener mi tristeza.
-No digas eso Su… Sólo esta confundido. Estoy seguro que siente algo por tí, hubieras visto como se fue de la cocina al ver que te fuiste con Chunnie al estudio… -Jae se sentó a mi lado y me abrazo.
-Pero yo no quiero que me odie Joongie~ -Me recosté sobre el pecho de Jae y suspiré.
-Lo sé, Su, lo sé… ChangMin piensa que sientes algo por Chunnie… Porque dijiste su nombre cuando… Bueno, cuando lo besaste. Pero, ¿Quién no pensaría eso en su situación Su? Ahora a tí te toca darle a entender que no es así, que se equivoca, ¿sí? -Dijo acariciando mi cabello.
-Esta bien… Jae, gracias por todo. -Dije mirándolo y dándole un beso en la mejilla.
-¡Huy! ¡JaeSu! -La voz de YooChun nos interrumpió.
-Calla, amor. -Dijo Jae levantándose.
-¡Yayis! ¿Todavía no estas listo?
-No ChuChu~, pero ya casi.
-Cursis. -Dije saliendo de la habitación.
-Pero así quisieras estar con Min. -Dijo YooChun casi susurrando.
Yo lo mire sonrojado.
-Bien que lo sabes… -Cerré la puerta tras de mí y me encaminé a mi habitación, deteniéndome un momento frente a la puerta de ChangMin, que se encontraba cerrada. Recosté mi frente sobre ella y suspiré. ChangMin, ¿Porqué tenemos que complicarlo tanto?... ¿Porqué?
-Su, ¿qué haces ahí? O______o;; -YunHo me miró extrañado, saliendo de su habitación, que estaba frente a la de ChangMin.
-Ah… Yo… Nada, me mareé un poco y me recosté… Hehehe.
-¿Te sientes mal? -YunHo se acercó a mí y me tocó la frente.
-Sí, no te preocupes Yunnie, estoy bien. ¡Vaya! Qué guapo te ves. -Dije notando su ropa y su cabello arreglado.
-¿A que sí? -Dijo el mayor dándose una vuelta para que lo admirara.
-Entonces, yo también tendré que ponerme guapo para competir contra ti en el club, Yunnie.
-¡Hahaha! Corre pues, Min ya casi sale del baño, para que estés listo rápido.
-S…sí
Después de tomar mi toalla me planté frente a la puerta del baño, decidido a esperar a ChangMin para hablarle. ‘Idiota, pensará que quieres violártelo o algo’ Demonios…
Me senté en la sala a esperar. Cinco minutos, diez minutos, quince minutos… ¿De cuándo a acá Min se tardaba tanto? Me estaba empezando a preocupar… ¿Qué estará haciendo?
Me acerqué a la puerta del cuarto de baño y esperé un minuto. Escuchaba ruido adentro, pero la puerta era gruesa y no lograba distinguir ningún sonido, quería saber qué estaba haciendo ChangMin. ¡Dios! Ya parecía mujer metiche… No, ¡no! Simple y sencillamente, me preocupaba por mi dongseng que estaba dentro… (¡Sí, ajá!, lo que pasa es que te mueres por él y por saber que tanto hace, JunSu, acéptalo)…
A veces las voces internas, o a lo que llamamos conciencia, suelen ser bastante molestas…
Y ahí estaba yo, con mi mejilla contra la puerta de madera, tratando de escuchar que pasaba ahí dentro. Escuché pasos… Cercanos, muy cercanos. El sonido de unos pies arrastrando sus pasos por el piso. Y de repente… La puerta me empujó y quedé tirado en el piso, con la toalla en la cara y las piernas en el aire.
-¿Hyung?
‘Demonios… Es ChangMin’
No quería quitarme la toalla de la cara, tenía mucha vergüenza. Pensaría que soy un acosador, un pervertido… Pero, ¿Acaso mi necesidad de ChangMin no me había llevado a esto? Me encontraba realmente perturbado… ¿Qué le iba a decir? No encontraba ninguna excusa que se escuchara lo suficientemente convincente.
Pero entonces lo hizo, él me salvó. ChangMin empezó a reírse como loco.
-Ah~ hyung babo~ ¡Hahahaha! -La voz de Min no paraba y yo sentía mi cara arder de la pena.
Asomé un ojo por entre la toalla y lo miré parado frente a mí, en su diminuta toalla, (DIOS MÍO), con el pecho descubierto y las manos en su estómago, riéndose estilo Papá Noel.
-Aish~ -Me quejé.
Él se arrodilló frente a mí y me miró con una sonrisa en los labios. Yo no podía estar más sonrojado, y es que ChangMin me quitó la toalla de la cabeza y después me pasó la mano por el cabello, con su sonrisa matadora y sus mejillas encendidas.
-Hyung, a veces puedes ser tan tierno…
Y estúpidamente, me quedé mudo. No podía ni moverme, simplemente estaba ahí, mirándolo. Paso su mano por mi mejilla rozándola brevemente, como queriendo detenerse, pero no lo hizo. Se levantó y me extendió la mano.
-Levántate hyung.
Yo me aferré a ella y él me puso de pie como si nada. ¿De cuando a acá era tan fuerte?
-Gracias…
-¿Qué hacías ahí tirado, hyung? -Estaba esperando a que no lo preguntara, pero era Min, obviamente tenía que saber qué estaba pasando para encontrar a su hyung en el piso.
-Sólo pasaba… Y abriste la puerta… Y ¡zaz! ^^;; -Dije haciendo ademanes para no darle importancia.
-Eres tan extraño, hyung…
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…‘Pero así me gustas’…
Mis pensamientos me traicionaban en ese preciso momento. JunSu sonrojado frente a mí, con cara de inocencia y perturbado por lo sucedido.
¿Acaso me estabas espiando hyung?
Quería pensar lo contrario, pero al saberme buscado por JunSu me sentía bien… ¿Qué me estaba pasando? Cada vez que echo un vistazo a mis pensamientos, los encuentro más extraños que el día anterior.
Devastado… Mi mente era un Apocalipsis, pero, ¿qué más me quedaba?
-¿…Min…? -JunSu me devolvió a la realidad.
-¿Eh?-
-¿Te vas a mover de la puerta? Necesito bañarme, si no estoy listo pronto, Jae me va a matar, y bien lo sabes.
-Ah… sí.
Dejé pasar a JunSu y lo ví encerrarse en el baño.
¿Qué tan difícil podía ser? Decirle en su cara todo lo que llevo dentro de mí… ¿Qué tan difícil?

Dos horas después arribábamos al club lleno de gente. Nadie se nos acercaba, pero nos miraban… Claro que sabían quienes éramos. Las gentes del club ya nos conocían, pues Jae y Chun eran clientes asiduos, y por supuesto que nos daban un trato especial. Pronto estuvimos acomodados en un gran sillón de la zona V.I.P., y los tragos estaban sobre la mesa, JunSu tenía un vaso de jugo en la mano, no podía olvidarse de su poca resistencia al alcohol.
-¡Ah! YunHo sshi, te estaba buscando. -Una chica muy alta y guapa se acercó a nosotros sonriéndole al líder.
-YangAh sshi. -YunHo se levantó sonriente. –Y aquí es donde desaparezco… No me esperen. -Se perdió entre la gente mientras tomaba a la chica de la mano sonriente.
-¿Es la chica con la que sale? -Pregunté curioso examinando mi vaso de cristal.
-Si, Yunnie siempre ha tenido suerte con las mujeres guapas, incluso cuando éramos traineers. -Dijo Jae sonriendo, como si recordara algún suceso divertido.
Pasó media hora y seguimos hablando y bebiendo, claro que Jae y YooChun llevaban gran ventaja sobre mí, sólo llevaba un vaso y ellos ya iban por el tercero. ¿A dónde se les iba el alcohol? No se veían para nada afectados por beber tan rápido.
-Vamos JunSu, bebe algo de verdad. -Dijo JaeJoong sirviendo un vaso más.
-No, hyung, sabes como me pongo cuando bebo…
-Por eso mismo te estoy dando esto. -Dijo entregándole el vaso. -Solo necesitas un pequeño empujoncito… Y Jae hyung te lo dará.

No supe como interpretar lo que Jae le decía a JunSu, pero temí que tenía que ver algo con cierto ratón que se encontraba perdido en la barra del bar. ¿Para qué necesitaba un empujoncito? Mi mente empezaba a sacar sus conclusiones sobre ese triángulo amoroso tan extraño…

*Flashback*

- No soy tu omma… No harías con tu omma lo que hiciste conmigo…

*Fin del flashback*

Las palabras de Jae resonaban con fuerza en mi cabeza. Ya no entendía nada… Si él estaba con Chunnie, ¿por qué le decía a JunSu que sólo necesitaba un empujoncito para ir a con él?
Todo era muy confuso… Pero no pretendía indagar más en ello, sólo esperaba que JunSu no saliera lastimado de esta.

La noche pasaba lenta ahí en el club. Todos bailaban y socializaban, y yo estaba aplastado contra el sillón con un vaso nuevo y lleno en mi mano. El sabor del alcohol en mi garganta era sublime, y me ayudaba a ver todo desde un ángulo más acogedor. Jae y JunSu en la pista de baile se movían habilidosamente. YooChun estaba sentado junto a mí observándolos… No es que YooChun y yo habláramos mucho, pues teníamos muchas diferencias, pero el silencio entre nosotros en ese momento no era molesto, más bien era como si no quisiéramos molestarnos y nos dedicáramos solamente a ver a los dos chicos bailando.
-Que bien se ven, ¿verdad? -Dijo después de darle un largo sorbo a su vaso.
Yo solo asentí… ¿Acaso YooChun trataba de sacarme algo?
-En especial JunSu… -Su voz sonaba como si buscara algo.
Dos sentimientos me ahogaron de repente: el coraje y la admiración.

Aquél comentario me hizo ruborizar como un idiota, y al mismo tiempo me causó una chispita de coraje… ¿Porqué hablaba de JunSu, si él estaba con Jae? ¿O no era así?
Todo aquello me provocaba una profunda confusión, era desesperante y asfixiante. ¿Qué pretendía YooChun?
Como si de un resorte se tratase, YooChun se levantó del sillón y se volvió a perder en la barra.
‘Genial, completamente genial’ Pensé sarcásticamente al quedarme solo en aquel sillón negro, con la cabeza dándome vueltas y mi vaso medio vacío en la mano. Tenía tantas ganas de ir a con YooChun y gritarle en la cara que se alejara de JunSu, que lo dejara en paz, que me lo diera… Pero JunSu no era de mi propiedad, no tenía ningún derecho. Claro que eso no evitaba que yo hirviera en coraje cada vez que el ratón hiciera un comentario sobre él.
-Mis hyungs son tan estúpidos. -Dije entre dientes empinándome el vaso.
-¡ChangMin ah~! No hables de tus hyungs a sus espaldas. -La voz de JaeJoong me sorprendió y lo ví sentarse frente a mí con un JunSu un poco perdido a su lado.
-¿Porqué dices que somos estúpidos, Min? -JunSu me preguntó con tono serio mirándome fijamente.
No pude soportar su mirada asustada, su voz expectante, como temiendo a que le dijera algo horrible. Esa voz que sonaba con un hilo de alcohol me taladraba el cerebro como queriendo asesinarme. ¿Qué quieres de mí?
-Porque lo son, maldición. -Dejé mi vaso con un sonido fuerte sobre la mesa. El alcohol me inundaba, y me hacía decir y descargar cosas que tenía reprimidas.
Me levanté con el ceño fruncido y empecé a alejarme de la mesa. No volteé a ver al sillón en donde dejé a JaeJoong y a JunSu totalmente confundidos. Me dirigí a la salida y me topé con YooChun en la barra. Ni siquiera lo miré, pasé de largo cuando sentí que me detuvo por el brazo.
-¿A dónde vas? -Me preguntó alejando un cigarrillo de sus labios.
-A casa… Estoy harto, los esperaré allá. -Empecé a caminar y YooChun me sostuvo con más fuerza.
-¿Qué te pasa Min? ¿Te hicieron enojar?
-Al demonio. -Dije soltándome de su agarre y caminando rápidamente hasta que salí del club y lo dejé atrás.
No quería saber nada, estaba fuera de mí. Enojado, sediento, rabioso, desesperado…
Caminé una cuadra y le hice señas a un taxi para que se detuviera. El departamento me quedaba bastante lejos como para caminar hasta allá.
-¡ChangMin ah! -Escuché a JunSu llamándome a lo lejos.
Me giré y lo ví corriendo en mi dirección, no tenía planes de esperarlo así que abrí la puerta del auto.
-¡ESPERA! -Dijo gritándome con desesperación. Se detuvo frente a mí, recostando sus manos sobre sus rodillas, doblando su cuerpo y respirando con mucha dificultad. -Es…pe…ra… -Dijo entre jadeos.
-¿Qué quieres hyung? -Dije sonando más molesto de lo que pensé.
-No te vayas… -Me dijo recuperando el aliento e incorporándose, sosteniéndose las costillas con la mano izquierda, parecía que le dolía por su expresión.
-¿A qué me voy a quedar hyung? ¿A que hagas espectáculos con Jae? ¿A escuchar los comentarios de YooChun? ¡No quiero! ¡Ya no sé qué hacer hyung! -Dije explotando con rabia sobre mí mismo, mirando como JunSu me escuchaba con los ojos como platos.
-Yo… No quería que te enojaras… Jae me hizo hacerlo, quería ponerte celoso…
-Pues, ¿está feliz? Su estúpido juego dió resultado… Estoy CELOSO. -Dije golpeándome mentalmente.
-ChangMin… Yo…
-No hay excusas hyung, ustedes me usaron… No sé que quieren probar con esto… -Cerré la puerta del auto.
-¿Va a subir o no? -Me dijo el conductor enojado.
-ESPERE, POR FAVOR. -Dije entregándole un billete. El hombre se quedó contento y prendió la radio haciendo oídos sordos a la extraña conversación que librábamos.
-Yo no te usé ChangMin… Nunca te usaría, no quiero hacerte sentir mal...
-Pues lo lograste, no hay más hyung… ¿Ahora te arrepientes? Seguro te estas burlando interiormente de mí, sé que soy un idiota por enojarme por lo que pasó… Pero no sabes… NO TIENES IDEA DE LO QUE ME PASA. -Dije apretando los dientes y llevándome las manos a las sienes.
-Dime que te pasa… No puede ser tan difícil, quiero saberlo… -La voz de JunSu sonaba preocupada, pero ni siquiera lo miré, me encontraba tan enojado que no me atrevía a mirarlo.
-¿Quieres saberlo? Está bien… Pero prepárate… -Tomé aire y no esperé la respuesta de JunSu. -Día tras día me carcomen los celos hyung, al saber que YooChun ocupa toda tu mente, siempre piensas en él, incluso cuando estas conmigo, incluso cuando el otro día me besaste, dijiste su nombre… ¿Qué se supone que debo hacer? ¿Reírme? ¿Actuar como si nada? Sería fácil si no me importaras hyung… Pero no puedo, ¿entiendes? No puedo hacerlo… Porque cada día que te veo, cada vez que oigo tu voz, no puedo evitar llenarme de felicidad. Espero por tí en cada esquina, no puedo evitarlo, te busco en mis propios ojos hyung, y aquí estas, siempre… -Dije apuntándome la cabeza con el dedo. -Y no puedes salir de ahí, no puedes. Le doy vueltas al asunto, día y noche, y no encuentro una forma mejor de explicártelo. Me lo he callado por miedo, pero ahora lo diré con enojo hyung… ESTOY CELOSO DE YOOCHUN PORQUE TE QUIERO PARA MÍ. -La cara de JunSu se quedó en blanco. –Y no me importa si lo quieres a él, no me importa si lo prefieres a él… Aquí estoy yo, esperándote siempre… No me importa si lo deseas a él, si cuando estas conmigo piensas en él, ¡Al demonio con eso hyung! Acéptame, por favor, toma un respiro, regálame un momento y mírame… Aunque pienses en él… Por favor, finge que me quieres un poco, y que te importo aunque sea la mínima parte de lo que te importa él...
-¡IDIOTA! -JunSu me gritó apretando los ojos con fuerza. –Eres un idiota ChangMin… No sabes cuánto. -Se acercó a mí y tomó mi cara con delicadeza entre sus suaves manos.
-No me importa YooChun, en absoluto. Él y Jae son novios, entiéndelo. No hay nadie más aquí. -Dijo posando una mano en su pecho. –Más que tú… Y tú no te das cuenta de que te quiero ChangMin, te quiero tanto que me duele…
Escuché un trueno en el cielo...
-Te quiero tanto que me duele...
Las gotas de lluvia se precipitaron sobre nuestras caras y JunSu se acercó a mí entre la lluvia... Ví sus pómulos sonrojados y brillantes con gotas de lluvia. Pude verlo cerrando sus ojos mientras sentía su respiración sobre mi boca...


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