Maze - Cap. 9

Jaejoong no sabía exactamente que sentía, no sabía si estaba enojado, decepcionado, o incluso celoso, quizás solo se estaba preocupando demasiado, pero sentía algo de seguro y no era muy agradable.

Cuando aceptó esta cita con Yoochun, todo lo que quería era complacer a su amigo, para pasar más tiempo a solas con él, ya que el otro parecía un poco desanimado últimamente y no se veían con tanta regularidad como antes. Pero Yoochun al parecer pensó que su tan agradable noche de diversión era pasarla bailando con alguna zorra, entonces que así sea.

Así, Jaejoong abandonó la pista de baile en la que se encontraba para ir al nivel más alto del club donde sonaba un estilo de música distinto, más agitado, y como la música, los cuerpos bailando alrededor estaban tan agitados que eventualmente lo llevaron hasta la pista y se encontró con alguien con quien honestamente no esperaba encontrarse tan pronto.

"¿Jaejoong?" preguntó el otro, mostrando una sonrisa de oreja a oreja.

"¿Yun…Yunho?" Jaejoong no esperaba que al decir que “quizás nos encontraríamos de nuevo” fuera tan pronto, estaba bastante sorprendido.

“¡Wow, pero que interesante cosa, justo estaba pensando en ti hace unos segundos!” Yunho gritaba por la fuerte música que sonaba y gentilmente guía a Jaejoong del medio de la pista a una esquina más ‘privada’.

“Realmente interesante… fascinante…” Jaejoong murmuró un poco avergonzado por estar ‘atrapado’ en una esquina por Yunho.

“¿Estás solo aquí?” Como la música estaba muy fuerte, Yunho tuvo que inclinarse muy cerca de Jaejoong, lo que creó cierta proximidad que Jaejoong encontró de cierta manera incómoda.

“Hmm… no exactamente, ¿y qué hay de ti?” Jaejoong preguntó, retrocediendo un poco.

“Estoy con unos amigos, hoy es el cumpleaños de uno de ellos, estamos festejando.”

“Que bien…” dice Jae, ahora molestado por la mano que decide aterrizar en su cintura.

“Entonces decías que estás solo…” Yunho continúa.

“No lo estoy.” Jae responde rápidamente, mirando a la terca mano ahora en sus caderas.

“¿No lo estás?” Yunho mira a su alrededor. “No veo a nadie.” Dice con una sonrisa en sus labios.

“Yo tampoco.” Jaejoong responde en tono irónico, finalmente alejando la mano de Yunho de él.

“¿Oye, por qué no bailamos?” Yunho le sugiere.

“Hmm, no soy un buen bailarín cuando se trata de canciones rápidas.”

“¿Enserio? Son mi estilo favorito. Te puedo guiar, ¿quieres?”

“No gracias, solo estaré mirando.” Jaejoong sonríe, sacando un puchero de Yunho, pero no parece funcionar con Jaejoong puesto que él solo sonríe y apunta hacia la pista de baile alentando a Yunho a que vaya solo.

“¿Acaso vas a huir?” Yunho pregunta un poco nervioso.

“¿Por qué habría?” Jaejoong sonríe recostándose contra la pared, haciendo una sexy pose. Así, Yunho le devuelve la sonrisa ya dirigiéndose a la pista de baile, sin quitarle los ojos de encima en ningún momento, posicionándose en un lugar donde podría observarlo y ser observado.

Una canción de pesado ritmo empieza a sonar, Yunho moviéndose en perfecta sincronía, de seguro era un extraordinario bailarín; definitivamente se veía sexy desde ahí bailando mientras miraba a Jaejoong intencionalmente. Jaejoong estaba impresionado con aquella habilidad; él en verdad no se había esperado que fuera un chico tan interesante.




----- X -----




“¿Por qué me empujaste?” Yoochun pudo escuchar la irritante voz de la chica con quien estaba “bailando”, la miró, sus manos estaban en sus caderas y tenía una expresión de furia en su rostro, como si fuera la mejor galleta del paquete y nadie pudiese negarse a ella.

Yoochun la ignoró completamente y fue en busca de Jaejoong con la esperanza de alcanzarlo, pero la chica lo siguió. Yoochun la miró, con una cara de “salte de mi vista eres simplemente patética” pero ella no se movió un centímetro.

“¿A dónde vas? ¿Acaso no vas a bailar conmigo?” la chica preguntó en un tono inocente.

“¿Desde cuando yo estaba bailando contigo?” Yoochun cruzó sus brazos.

“¡Oh, claro que estabas!” movió sus caderas a modo de protesta.

“No, tú estabas bailando sola, porque ninguna persona en su sano juicio querría bailar con una chica como tú.” La chica abrió su boca en un intento de decir algo para defenderse, pero fue interrumpida.

“Pero yo, yo estaba bailando, con alguien que vale mucho más que tú, cuando de repente una ‘cosa’ apareció y se metió en el camino, es más, la forma en que ‘bailabas’ solo te hace ver desesperada y… espera eso es correcto, estás desesperada, quizás puedas encontrarte alguien más apropiado a ti en la calle, ahora discúlpame.”




Haciendo gesto de despedida con la mano, Yoochun deja atrás a la chica, sin habla y corre a buscar a Jaejoong.

Luego de buscarlo por varios minutos, finalmente Yoochun ve a Jaejoong recostado contra la pared, y al parecer perdido en sus pensamientos. Luego Yoochun se acerca a él.

“¡Jae!” dijo Yoochun colocando una mano sobre el hombro de Jaejoong quien lo miró de vuelta.

“¿Por qué me dejaste solo?” Jaejoong responde levantando una ceja.

“Jae, pensé que esta noche seria solo para nosotros dos…” continuó Yoochun.

“Yo también pensé eso, pero parecías pasarla bastante bien con esa chica.”

Jaejoong concluye con la mirada fija en la nada, ya que Yunho había desaparecido entre la multitud.

“¡No, no es así!” exclamó Yoochun sujetando más fuertemente los hombros de Jaejoong.

“Pero la tonta sonrisa en tu rostro decía que sí era así.” Jae lo miró intensamente.

“Esa sonrisa no se debía a esa estúpida chica…” Yoochun sonríe y siente sonrojarse al recordar la verdadera razón.

“¿Entonces por qué?” preguntó Jae y Yoochun dudó justo antes de responder con otra pregunta.

“Jae, tú y yo… bailando… ¿qué fue eso?” la mano que sostenía el hombro de Jae se desliza ahora hasta su brazo.

“Err… ¿cómo es eso? Fue simplemente tú y yo… bailando, ¿qué otra cosa?” Jaejoong intenta ‘sacar’ algo de su amigo al preguntar eso.

“Eso no es exactamente lo que yo llamaría un baile normal…” Yoochun siente su rostro arder.

“¿Entonces cómo lo llamarías?” sin darse por vencido, Jaejoong continua con las preguntas, no podía entender por qué él no podía ser honesto sobre lo que sentía, sabía que había algo detrás de todos sus ‘inocentes’ juegos y quería que Yoochun terminara toda esa ‘falsedad’.

Luego de pasar un momento sin decir nada, Yoochun una vez más se deja vencer por el miedo.

“Yo… yo… yo no sé…” bajó la cabeza en señal de derrota.

“¿No lo sabes?” Jae preguntó sintiéndose indignado.

“¿Tú lo sabes?” Por qué siempre tenía que pasar la pelota, ¿era tan difícil para él decirlo?... Jaejoong finalmente decide dar fin al juego.

“Bueno, lo sé, yo lo llamaría…” antes de que Jae terminara la oración, Yunho se interpone en el camino.

“¿Oye, Jaejoong?” Yunho le echa una mirada a Yoochun, el otro hace lo mismo.

“¿Quién es ese?” Yoochun pregunta a Jaejoong, visiblemente perturbado.

“Este es Yunho, un amigo…”

“…” Yoochun lo sigue observando.

“¿Viniste con ‘él’?” Yunho preguntó en tono burlón. Ambos se miraban fijamente, si fueran dibujos animados tendrían rayos saliendo de sus ojos y colisionando en el medio del aire.

“Err, Yunho, ¿querías preguntarme algo?” dijo Jaejoong rompiendo con la incómoda atmósfera.

“Ah sí, como te dije es el cumpleaños de un amigo, e iremos a festejar a otro lugar, más reservado tú sabes, y quería saber si ¿quisieras ir ‘conmigo’?” Yunho hizo énfasis en su última palabra, haciendo a Yoochun crisparse.

“No sé…” Jaejoong mira a Yoochun y pregunta. “¿Qué piensas? Podríamos ir a casa y quedarnos ahí… pero desearía no tener que negarme a la invitación de una buena fiesta sin una buena razón…” Jae decide que es momento de que Yoochun haga su movimiento ahora o nunca, una simple pregunta que podría responder si estaba dispuesto a abandonar sus temores.

“Si quieres ir no te detendré…” ¡BAM! ¡Respuesta equivocada! Jaejoong suspiró decepcionado y miró a Yoochun por un momento antes de que sus ojos se desviaran hacia el suelo.

“Muy bien, me encantaría ir Yunho.” Jaejoong sonríe, Yunho también, una forma de anunciar su ‘victoria’. Yoochun dice adiós y abandona el lugar. Yunho pide a Jaejoong que espere un momento mientras va por sus amigos.

Jaejoong observa a Yoochun marchándose dejando un gran peso en su consciencia. Deseaba no tener que haber llegado hasta ese punto.

“Vamos.” dice Yunho acompañado por sus amigos quienes se mataban de la risa y cantaban fuertemente, obviamente afectados por el alcohol.

“Err… sabes, Yunho, en realidad estoy muy cansado y, ¿por qué no dejamos esto para otro día? Jae sonríe, Yunho suspira.

“¡Yunho, vamos hombre!” uno de sus amigos, colgándose de otro, gritó por Yunho.

“Está bien entonces… ¿otro día? ¿Me lo prometes? ¿Puedes darme tu numero?” Yunho preguntó esperando poder conseguir su número esta vez.

“Nos vemos, Yunho.” Jaejoong dice, pero antes de irse, da a Yunho un beso en la mejilla. Yunho aunque no pudo conseguir su número, quedó completamente feliz y risueño, llevó su mano hasta el lugar donde había recibido el primer beso de ese ángel.

“Oye, nos vamos a perder del reventón” gritó uno de los amigos de Yunho, riendo y corriendo detrás de los otros.




----- X -----




Yoochun se sentía como la peor persona en el mundo, ¿cómo pudo haber sido tan estúpido? No estaba seguro, pero lo que había ocurrido hace rato fue una gran oportunidad para expresar lo que sentía por Jaejoong, no solo de su parte el otro parecía responder perfectamente, todo ocurriendo como siempre había querido que fuera y él simplemente se había negado a dejar a un lado su maldito temor que lo hacía rendirse cada vez que estaba cerca de Jaejoong.

¡Y no solo había tenido una oportunidad de hacerlo sino que varias! Yoochun gritó con todas sus fuerzas al instante en que había abierto la puerta de su casa y puesto un pie dentro. Colapsó contra la pared y lloró como si no lo hubiera hecho por mucho tiempo.

Sacó fuera toda su frustración y se prometió a sí mismo al momento en que sus puños golpeaban contra el piso de que no volvería a fallar, se prometió a sí mismo que cuando Jaejoong llegara a casa le confesaría sus más puros sentimientos incluso aunque le costara su amistad.




----- X -----




Jaejoong no se dirigió directamente a casa luego de negar la oferta de Yunho. Simplemente comenzó a vagar alrededor de la ciudad, sintiéndose ridículo por lo que había hecho. No quería lastimar a Yoochun pero fue exactamente lo que vio en sus ojos, dolor. ¿Pero él otro tenía que hacer las cosas tan difíciles?

Luego de caminar por horas, Jaejoong finalmente va a casa, esperando encontrar las luces apagadas y a un muy cansado Yoochun dormido en la cama. Pero al abrir la puerta, ve bolsos en el piso y a un cansado Yoochun empacando.

La desesperación se apoderó de su cuerpo y corrió y abrazó a su amigo muy fuertemente.

“Yoochun, ¿qué paso? ¿Por qué te vas?” dijo Jae con sus ojos ya rojos.

“¿Irme? ¿Qué? No… no es lo que…” Yoochun se veía confundido.

“Entonces por qué…”

“Recibí una llamada poco después de haber llegado a casa, mi madre estaba…”

“¿Qué pasó? ¿Acaso tiene algún problema?”

“No, no ella… mi tío, él no está muy bien. ¿Recuerdas cuando te conté que ya había tenido un mal año, yendo y viniendo del hospital y los doctores sin encontrar una cura?” Jaejoong asintió. “Bueno, ha empeorado, de hecho se encuentra ahora en el hospital entre la vida y la muerte…” Yoochun masajeó sus sienes.

“Oh Dios mío, Chunnie, lo siento.” Jaejoong consoló a su amigo.

“Toda mi familia irá a visitarlo, tomare el primer vuelo hoy. Heechul me llevará hasta el aeropuerto, estará aquí en unos minutos.”

“Bien, entonces iré a empacar mis cosas.” dijo Jaejoong.

“¿A dónde vas?” Yoochun lo atajó agarrándolo de la mano.

“Bueno, iré contigo, no te dejaré solo en un momento como este.”

“Jae, lo aprecio, pero sabes lo que mi familia piensa de ti…”

“¡No me importa, iré contigo!”

“Jae… no me sentiré bien sabiendo que estarás incomodo, y sabes que lo estarás. Volveré pronto, lo prometo.” Luego de un gran puchero, Jaejoong suspiró en señal de derrota.

“¡Okay, pero será mejor que me llames todo el tiempo!”

“Pero claro. No puedo vivir sin escuchar tu voz.” Luego todo estuvo en silencio, ambos se observaban, agarrados de las manos…

“Jaejoong…” Yoochun susurra llevando una mano al rostro de Jaejoong, Jae cierra sus ojos. Yoochun se aproxima, sus ojos también cerrados, podía sentir el caliente aliento en sus labios…

Aquel momento fue interrumpido por el estúpido sonido de una bocina sonando repetidamente. Ambos ojos abiertos, las manos de Yoochun aun en el rostro de Jaejoong.

“Te extrañaré.” Yoochun suspiró.

“Te extrañaré aún más…” Jae sonríe, poniendo sus manos por sobre las de Yoochun. La bocina continuaba. “Es mejor que vayas antes que Heechul tenga que bajar del auto, entonces estaremos bastante muertos.” Jae bromeó, Yoochun rio, y se dirigieron afuera.

Jae lo ayudó a poner sus bolsos en el auto, saludó a Heechul quien tenía una cara de fantasma como alguien que acaba de despertarse. Se despidió de Yoochun y esperó en la entrada a que arrancaran.

Desde el auto Yoochun se despide con sus manos de Jae y cuando ya se están moviendo, sin perder contacto visual, susurra…

“Te amo…”

Siguiente