El Secreto de Yunho - Cap. 1

El secreto de Changmin.

“Soy Gay”

Desde aquella extraña y repentina confesión Yunho no volvió a ser el mismo. Fue hace aproximadamente un mes, Changmin le dijo que quería confesarle algo, que no era posible que uno de sus mejores amigos no supiera aquella verdad que guardaba tan celosamente desde hace varios años. Así fue como un día el menor de TVXQ estuvo frente a él, con el reflejo de la luz menguante del sol a su espalda, mirándolo seria y fijamente a los ojos, entonces lo dijo, como si fueran las palabras más normales del mundo, como si aquello no fuera a cambiar para siempre la vida que compartían juntos como los únicos miembros restantes del legado TVXQ


¿Eh? ¿Qué dices? —preguntó confundido, sin dar crédito a lo que escuchaba


Lo que oíste —respondió Changmin casi con sigilo, pero aún decidido y tranquilo— Soy Gay, Homosexual, me gustan los hombres, como quieras decirlo —dijo en tono menos serio, mostrándose por primera vez un poco avergonzado—


¿Por qué me lo dices ahora? Tanto tiempo… —lo miró perplejo, tratando de estudiar las facciones de su rostro—


No lo sé —se encogió de hombros al decirlo, sin apartarle la mirada de encima— Tal vez sentí que no lo entenderías, que me alejarías, tal vez


Eso nunca, eres mi amigo, casi mi hermano —apresuró la explicación— Solo me ha tomado por sorpresa, es todo —sonrió, tratando de calmarlo, podía ver en la mirada de su compañero que le preocupaba su reacción y posible rechazo, pero Changmin suspiró aliviado al verlo—


¿Es verdad? Eres increíble Yunho, gracias —moderando su paso se acercó a él y extendió la mano en señal de tregua, Yunho miró el gesto y no dudó en responder—


Te acepto tal y como eres —completó su mensaje de aprobación y se encontró ante él una inocente y sincera sonrisa por parte de Changmin, él también sonrió—.


Hasta ese punto todo marchó muy bien, Yunho aceptó la homosexualidad de Changmin como todo buen amigo haría, con la frente en alto y decidido a apoyarlo, pero ese mismo día y apenas cuando él había aceptado la recién descubierta inclinación de su amigo, éste decidió soltarle una declaración más, lo que desencadenó su atrevida curiosidad, lo que más tarde se convertiría en su obsesión, su punto de mira

—Además… hyung… tengo novio —confesó ligeramente ruborizado, sonriendo con palpable inocencia, como si estuviera hablando de su primer amor—


¿Novio? —se repitió con incredulidad, mirando fijamente a Changmin—


Sí, aunque no sé si llamarlo novio, sería mejor ¿pareja? ¿cónyuge? ¿cómplice de aventuras?


Novio —repitió por segunda vez, ésta vez miró a Changmin y sonrió perplejo, Changmin lo miró con pasmo, pensando que quizás Yunho aceptaría menos esa confesión que la anterior, después de todo era como su hermano menor y no resultaba extraño que lo sobreprotegiera tanto como lo hacía con su hermana de sangre— ¿Lo conozco?


Tal vez —respondió con mirada de duda, como si no quisiera confesarlo— Pero no puedo decirte quién es, él mismo me lo ha pedido, que ni siquiera a ti —lo miró con tristeza, podía notar Yunho que Changmin se moría por confesarle también el nombre de su novio, lo que lo llevó a pensar que muy probablemente ese hombre también era artista—


Es famoso ¿no es cierto? —preguntó pero no hubo respuesta de Changmin— ¿De nuestra compañía? —preguntó en el mismo tono y ésta vez vio en la mirada de Changmin la confirmación, aunque él no respondió en sí, lo pudo ver en sus ojos, sus pupilas temblaron—


Por favor ya no me preguntes —volvió a ruborizarse y bajó la mirada— Estoy feliz si me has aceptado a pesar que soy Gay, pero no quiero hablar de mi pareja ¿de acuerdo?


Te entiendo —Yunho no tuvo más remedio que aceptar y Changmin volvió a mirarlo, sonrió e hizo una muestra de respeto—


Ahora vámonos que tengo hambre —Changmin sonrió y olvidándose del tema se alejó de Yunho, éste lo siguió mientras miraba fijamente en su espalda, con una única cosa en su cabeza, tratar de adivinar con quien estaba saliendo Changmin y por qué lo ocultaba tan celosamente, a Yunho no le cabía menor duda de que se trataba de alguien de su misma compañía—.

Así fue como Changmin confesó a Yunho su secreto, que ahora también era el secreto de Yunho, porque él también tenía que guardarlo celosamente en pro de la seguridad de Changmin, y claro, también por la del grupo. Sin embargo no fue así de fácil el asunto. Aunque había pasado un mes desde aquella confesión, Yunho aún no sabía quién era el enamorado de Changmin, la duda lo consumía desde aquel día, cada vez que miraba a Changmin cerca de un hombre de su compañía no podía menos que mantener la mirada fija en ambos, observar cómo se trataban, cómo se miraban, ni siquiera podía limitarse a los idols, era con todos, staff, managers, administradores, incluso con el personal de limpieza, para Yunho no había límites, deseaba saber con quién salía Changmin, pero él era muy discreto respecto al tema, no le contaba absolutamente nada.


¡Tsk! —chasqueó Yunho la lengua, esperaba a Changmin en el camerino, ese día presentarían para una grabación su canción Spellbound, pero su amigo no había llegado aún, desesperándolo— Nunca llega tarde, es muy puntual, seguro estará con su novio —hizo nota mental de sus sospechas y aguardó a que Changmin llegara—.


Yunho no podía llamar ‘celos’ a lo que estaba sintiendo, no veía a Changmin de aquella manera, pero el hecho de no poder saber quién era su enamorado lo estaba matando por dentro, tenía la idea en la cabeza de que debía conocerlo y aprobarlo, así como hacía con los novios de su asediada hermana. Su único interés era aquel, nada más


—Saldré a buscarlo —apenas pensó aquello y estuvo dispuesto a levantarse de su sillón la puerta del camerino se abrió, con Changmin entró una maquillista que estaba cerca de él, tratando por todos los medios de detenerlo y poder acomodarle el maquillaje de una vez por todas, pero hasta que no entró y se sentó en la silla frente al espejo la mujer pudo hacer su trabajo— Perdón —pidió disculpas sinceramente, logrando que la maquillista se ruborizara—


—Hola Yunho —saludó descaradamente y con la tranquilidad del mundo encima, Yunho lo miró desde su lugar y negó en silencio, miró a través del espejo y notó que Changmin tenía una marca roja en el cuello, lo que parecía ser un chupete, eso lo hizo sonrojar—


¿Qué tienes ahí? —preguntó en voz alta mientras se acercaba, Changmin miró su cara en el espejo y no percibió nada—


Perdón, si hice algo mal corregiré —respondió la maquillista como si se hubiera dirigido hacia ella, pero Yunho la ignoró, llegó hasta donde estaba Changmin y señaló la marca en el cuello de Changmin para que éste la viera en el espejo. Enseguida se ruborizó—


Yo, es que —miró hacia la maquillista, ella había visto también la marca y sonrojada lo miraba, los tres se quedaron callados por largos segundos que parecieron horas—


Lo cubriré —rompió el hielo la mujer y cubrió como dijo la marca, aplicando bastante maquillaje, Yunho miró fijamente con reproche a Changmin y negó en silencio, Changmin aunque estaba avergonzado solo se encogió de hombros—


Gracias —dijo Changmin cuando la mujer terminó, con discreción ella miró a Yunho para ver si le hacía falta maquillaje, al ver que no salió en silencio del camerino— Ella no dirá nada —sonrió


Ten más cuidado —Yunho miró molesto a Changmin, luego fue hacia la puerta que estaba abierta y la cerró, quedándose los dos solos sin que nadie los viera— Estabas con él —aseguró—


No quiero hablar de eso —respondió avergonzado, miró de nuevo su cuello en el espejo y la marca seguía cubierta, para su alivio—


Es Kyuhyun ¿verdad? —preguntó de pronto, sorprendiéndolo, Changmin no se limitó a verlo por el espejo, giró la silla rápidamente hacia él—


¡Por Dios Yunho! —gritó avergonzado— Solo somos amigos —explicó ruborizado—


Perdón, es el más probable —se encogió de hombros, restándole importancia a su sospecha, Changmin suspiró aliviado y luego sonrió—


Estás intrigado ¿verdad? Te mueres por saber —sonrió divertido y se levantó de la silla, acercándose a Yunho con paso seguro, logrando que Yunho diera un paso hacia atrás—


Solo quiero lo mejor para ti —aseguró—


Ajá —con aquella expresión Changmin volvió a sonreír, acercándose más a Yunho hasta estar frente a frente, con pocos centímetros de distancia— Ya dilo de una vez, te gusto —afirmó divertido, levantó la mano derecha y con el índice levantó la barbilla de Yunho, éste quedó completamente inmóvil, mirando fijamente a Changmin a los ojos—


¿Qué? No, claro que no —respondió completamente ruborizado, con la voz temblándose, Changmin se inclinó peligrosamente hacia él, casi como si fuera a besarlo, dejándolo paralizado por completo, pero Changmin no lo besó ni se acercó más, amplió su sonrisa y soltó una larga carcajada, Yunho se desconcertó—


Es broma —dijo divertido, sin dejar de sonreír, se alejó dos pasos de Yunho y acomodó sus ropas, luego fue hacia el espejo y miró su cabello, asegurándose que siguiera perfecto, Yunho lo siguió con la mirada, el corazón le latía aceleradamente y estaba sudando, el maquillaje de su frente estropeado muy ligeramente—


—De muy mal gusto —dijo enojado, Changmin lo miró de reojo a través del espejo y mostró una mueca de dolor, sintió con aquellas palabras que Yunho lo estaba rechazando por ser Gay, él siempre le había hecho bromas, pero ahora Yunho se veía realmente molesto y eso lo hirió, él solamente estaba jugando, no esperaba esa reacción—


—Es hora de salir —olvidando el tema, o fingiendo que lo olvidaba, Changmin salió del camerino sin esperar a Yunho, cuyo corazón seguía palpitando acelerado—.


Yunho miró la puerta abierta y sin prestar atención de las personas que se paseaban de un lado a otro afuera del cuarto pensó en lo que acababa de suceder, entonces se preguntó ¿Realmente solo era curiosidad el querer saber quién era el novio de Changmin? ¿O tal vez existía la muy remota pero tangible posibilidad de que si estuviera celoso? Que acaso Changmin le gustara. Yunho agitó la cabeza, convencido de que solo había sido una reacción del momento, sus nervios y el corazón acelerado eran una consecuencia y no una causa, él era Heterosexual y le gustaban las mujeres, Changmin no era mujer, aunque se veía comprometedor vestido de una, pero no lo era y a él no le iban los hombres, de eso estaba más que seguro.

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