Soul Fighter Storm cap 5

Changmin se tomaba su trabajo en serio tanto o más que el resto de los miembros. Y notaba que el remolino de sentimientos que le zarandeaba, le estaba afectando en su trabajo. Junho no tenía que decírselo para que lo supiera.

Tan apenado estaba por el hecho, que hasta había conseguido acallar los recuerdos sobre Jae la mayor parte del tiempo. Otro sentimiento había quedado tras su involuntaria y privada rendición del otro día.

Ya no encontraba forma de escapar de ello. Y resolvió que tan sólo había sido la novedad...quizá.

Estaba seguro de que se le pasaría, en cuanto las cosas que había experimentado con Jae dejaran de ser nuevas para él.

Todo en esta vida tenía una solución más sencilla de lo que parecía.






Jaejoong le observaba y observaba en silencio, deseando acercarse y animarle, pero no lo hacía.

Quizá por miedo a su reacción.....pero veía que al final Junsu como siempre, acababa haciéndole reír. Y volvía a retraerse.

Quizá Changmin ya había crecido del todo, quizá ya no le necesitaba.
Quizá esto había servido para que finalmente Chanming se alejara de él por completo y comenzara a vivir una vida en paralelo a la suya, por su propia cuenta. Una en la que él no estaría, y no sería lo más importante nunca más.

Una en la que él no sería su héroe.

Y el dolor apenas le permitía respirar.





Últimamente Junsu y Changmin pasaban mucho tiempo como hosts en su programa de radio Bigeastation.

Y quizá precisamente por ello, estaban teniendo más audiencia que nunca.

Para Changmin era muy sencillo y cómodo estar con Junsu.
Agotador, pero.... Junsu era tan sumamente inocente que le costaba saber cuando a alguien le pasaba algo, no era que no lo notase... pero no solía hablar de ello, aún cuando sabía algo, de modo que era la persona más adecuada para tener a tu lado si querías dejar algo atrás.

También porque su estado de ánimo era terriblemente contagioso. Y pocas cosas ensombrecían su carácter.

A veces Changmin al mirarle sonreír le envidiaba. Aquella actitud que podía ser fácilmente interpretada como superficialidad, en realidad era muy sana.

¿Se podía vivir aún más sanamente que Junsu, estando a la vez tan colgado?

Sus pensamientos le traicionaron y soltó una risa a cuento de nada.

Junsu lo escuchó.

- Cuéntame el chiste.- Le dijo Junsu desde su silla al otro lado de la mesa de grabaciones. Aún estaba pensando en como mejorar el guión. Changmin suspiraba porque realmente... lo preparaba tanto y luego no lo seguía!
Bueno, realmente el pequeño no se quejaba porque la verdad es que los programas salían mejor así.

Aún quedaban 3 horas para el programa. ¿Qué hacían allí? Pues prepararse porque ambos sabían que podrían estar perdiendo el tiempo en casa jugando a la play un rato o haciendo algo de ejercicio, pero, sin esa dedicación a lo que hacían... dejarían de ser quienes eran.

De todas maneras Changmin pensaba que no necesitaban tanta preparación, siempre salía mejor improvisar.

Yoochun llegaría justo para la grabación, ya se había leído el guión el día anterior... total para nada, porque Junsu lo acabaría cambiando casi por completo.

Junsu comenzó a canturrear de nuevo inmerso en su mundo, y Changmin comenzó a jugar con el bolígrafo. Tenía hambre. En ese momento se abrió la puerta del estudio. Sólo Changmin se giró.

-Hola niños.- Dijo la más familiar de las voces. Como siempre Junsu no se giró ni se enteró.

Changmin al verle dejó el boli encima de la mesa y se giró en su dirección.

¿Estaba consiguiendo esconder su expresión de sorpresa? Si Jaejoong había ido allí sólo podía ser por una razón...


- Os he traído comida.- Dijo quitándose las gafas de sol. Changmin no necesitaba preguntarle lo que había cocinado para ellos. Podía olerlo.– Junsu ah!


-.....♪♪♪♪♪♪raaiin in my heaaaart♪♪


Changmin rió al ver aquella escena tan habitual que traía a Jaejoong por el caminito de la amargura.

-JUNSU AH!- gritó de nuevo, solo para él, proyectando su voz como sólo Jaejoong sabía hacerlo.

- eh? ^.^ Oh! Jae-hyung.. cuando has llegado??- perguntó con un tono adorablemente inocente.

Jaejoong le miró con odio.

Min: lol

Jae: ~.~ brrr

Junsu ignoró la expresión de Jae y notó el aroma a comida que llegaba de algún lugar indefinido. Aunque él también sabía que si jaejoong había venido aquí, había sido solo por una razón.

- Has traído comida!!? ♪Ue kyong kyong♪- Dijo en reafirmación comenzando a reír mientras me miraba.

- Está en la sala de descanso contigua.- Contestó Jae sonriendo.

- Voy yo primero que si no este se lo come todo y no me deja nada, el capullo!!- dijo mientras corría fuera de la sala dejando los papeles sobre la silla.

Changmin y Jae se sonrieron mientras veían salir a Junsu corriendo. Al cabo de unos segundos Changmin apartó la mirada.

Jaejoong se acercó distraidamente a Changmin y se sentó en el borde de la mesa a un lado frente a él, arrugando la espalda como siempre. Changmin miró de reojo su gorra nueva. Era de punto y con una visera. Pronto se la robaría. Cuando se cansara de ella, lo que ocurriría pronto también. Jaejoong se acababa cansando de todo.

Resopló recordando una de las cosas que no entendía de Jae. Se la quitó, y se la puso él.

Jaejoong sonrió levemente y se pasó una mano por el pelo, pero no dijo nada.

Al mirarle, con su estropeado pero limpio pelo lacio, cayendo sobre su frente. No le habían peinado los estilistas hoy. Tenia un aspecto tan distinto.... mientras sus ojos recorrían su conocido rosotro, no pudo evitar fijarse en la marca de su boca.

Se encogió levemente en la silla de ruedas tapizada de cuero por la impresión.

Su labio superior, estaba levemente amoratado, cerca de la comisura izquierda. Quizá aún doliera, pero Jae sonreía. Con esa sonrisa débil y dulce que sacaba cuando estaba más agotado.

No se alejaba de su imagen el aspecto de un pequeño perrito abandonado. Le impresionaba lo mucho que podía Jaejoong impresionar o conmover con su aspecto, según fuera la manera en la que estaba.

Changmin apartó la cara bruscamente y juntó los labios con fuerza. Los mordió.

Las manos en su regazo, entrelazadas se apretaban entre sí.

Sabía que Jaejoong conocía sus gestos. Seguramente supiera como se encontraba en ese momento.

Las palabras dolorosas de Yoochun volvieron a él: “¿qué le has hecho?”.

Tenía muy claro que Jae no era una víctima, pero.....

Era la segunda vez que veía marcas en el cuerpo de Jae por su causa.

¿Por qué le hacía tanto daño verle así?

Por qué a la vez le.... turbaba tanto.....?

No era como si nunca se hubieran dejado marcas el uno al otro peleándose......

Pero estas marcas ....eran marcas muy distintas a las de antes....

cerró los ojos para borrar la imagen que segundos antes había visto de esa parte del labio escarlata de Jae, amoratada....por su mano....

Algo se revolvía en su interior....... por qué le dolía tanto de pronto hacerle daño? porqué le turbaba profundamente esa visión.......

¿Qué demonios te pasa Shim CHangmin?

Que alguien me lo diga...

Suplicaba en su mente.

Recordaba con fastidio que al final, sólo Jae se había disculpado. Y mientras los segundos se escapaban en un silencio cortante, Changmin seguía con su mirada pegada a la pared sin poder mirarle de nuevo.

- Min..- Le llamó. Sabía cuánto le dolía a Jaejoong que le ignorasen.- Min...- llamó de nuevo impaciente.

Terminó por volver la cara con recelo. Sabía que tenía sus sentimientos pintados en la cara.

- ¿No tienes hambre?- Preguntó con esa mirada tierna, la que ponía sin querer.

- Claro que sí...- Murmuró tan bajo que apenas pudo oírse a sí mismo. Le miró de reojo de nuevo, dispuesto a levantarse y salir de allí. Pero al intentar incorporarse, la mirada curiosa de Jaejoong le atrapó de nuevo.

Le miraba, con esos ojos cuando esperaba atención de él.


Jaejoong ya sabía bien lo difícil que le era negarle algo. Darle la espalda. No mirarle. Lo sabía, y normalmente contaba con ello para manipularle cuando quería.

Aún así, Changmin era siempre quien más se había mantenido ajeno y frio ante sus manipulaciones. El único. Quizá por eso Jaejoong se esforzaba mas, se ofendía mas y le pegaba mas, cuando no conseguía de él lo que quería.

Pero, Jaejoong no sabía....que cuando le negaba e ignoraba, solo era una pura manipulación por su parte para atraer su atención.

¿sabría Jaejoong eso?




Sin darse cuenta él mismo, hacia ya un rato que Min le miraba fijamentea los ojos, sin decir nada.

Changmin solía hacer eso. Y Jae era el único al que no incomodaba su penetrante y directa mirada, arrogante para muchos. Podría decir que incluso le gustaba que le miraran así. Con aquella seguridad y franqueza que sabía nunca podría igualar.

Jaejoong se quedó también en silencio devolviéndole la mirada. Sólo que Changmin ahora ya no le miraba a los ojos. Su ojos se habían escapado hasta esa pequeña zona amoratada de su boca.

- Te.. te he hecho lo que a ti te....-Tartamudeó JAejoong sin notar como de insegura había salido en realidad su voz.

- Ya lo sé.-Le interrumpió Changmin levantando una mano hacia él. Jae miró a los lados sin mover la cabeza.


El pulgar de Changmin rozó la comisura de su boca. Y presionó levemente. Jaejoong torció su labio con molestia. Dolía un poco. Sólo un poco.

- Lo siento.- Le dijo en un tono de voz muy tenso. Jaejoong abrió la boca para decir algo. El roce de los labios de Jae le estaba quemando la piel de sus dedos.- No tendría que haberte dado en la cara.

Jaejoong no dijo nada. Sabía que Changmin se disculpaba muy pocas veces. Sólo recordaba que se hubiera disculpado la friolera de 2 veces desde que le conocía. Siempre intentaba no tener por qué hacerlo. Cuando Jae se estaba disculpando miles de veces al día.

Pero aun así, Jae ardía de ganas de responderle mil cosas:

”Ah, muy bonito, ¿Y dónde sí hubiera estado BIEN darme, eh?” “¡Es que no vas a admitir que te pasaste??” “¿no te arrepientes de darme en absoluto?”

era lo primero que se le pasaba por la cabeza.

Pero no podía moverse, ni podía pronunciar palabra, con los dedos de Min rozando su boca.

- Supongo que realmente todo es culpa mia.- Dijo como si pensara en alto, con pesadumbre.

La cercanía no hostil de Changmin, con su mano aún sobre el borde de sus labios tenía cautivo a Jaejoong, quien en su interior clamaba por recibir uno más de sus besos.

Seguramente su tacto era inocente, pero Jae no lo sentía así. Se detenía para no dejarse llevar y abrir sus labios para atrapar sus dedos. Besarlos. Cuando sintió que lo haría de un momento a otro Changmin le miró de nuevo a los ojos.

Changmin entonces, quien sólo pensaba en como se podía haber evitado llegar a una situación en la que quisiera pelearse en serio con Jae, descubrió de pronto, como la mirada de su hyung volvía a ser... aquella de nuevo.

Esa que nunca debería haberle dirigido, esa mirada tan íntima, tan entregada...

Vio de nuevo sus párpados entrecerrarse frente a él de esa manera tan desvergonzada.

Su corazón le había traicionado y durante dos latidos le había hecho querer acercarse a él.

Jaejoong notó como Changmin se alejaba de él y se dirigía hacia la puerta. Jae se incomodó y se colocó de nuevo su gorra, que Changmin había dejado sobre la mesa.

- Por cierto hyung... muchas gracias por la comida. Tenía hambre.

Jaejoong no le miraba, sólo miraba al suelo.

- Pero espero..... que no creas que algo de aquella noche se volverá a repetir.




Jaejoong seguía sin mirarle. Probablemente esperando a que se fuera. Changmin se quedó mirándole unos segundos antes de salir, aunque realmente no quería que le dijera nada.

Salió de la sala, giró por el pasillo y vió la puerta de la sala de descanso. Pero a dos pasos, se detuvo.

Le había salido del corazón decir esa última frase hace escasos segundos. Porque por unos momentos, al verle así.... se había sentido vendido.

Como si recibiera ese afecto de Jae a cambio de otras cosas que esperaba de él.

Más claramente, como si Jae esperara un beso de recompensa por hacer algo bueno por él.

Había sido su mecanismo de defensa en que había soltado esas palabras al sentirse atrapado por su insinuación, durante aquellos interminables momentos en los que había tenido que frenarse para no darle lo que le pedía con aquella entrega.

Era la pura verdad lo que había salido de sus labios....

Entonces.... que alguien le explicara....

¿¡Por qué?!

¿Por qué entonces se sentía tan miserable?

¿Por qué se le había abierto el pecho en dos al verle con su gorro de lana, cabizbajo y en silencio, apoyado en aquella mesa?


Se echó la mano a la boca intuyendo la verdad. No era la primera vez que Jae se presentaba en el trabajo donde alguno de ellos estaba con su comida hecha en casa, para darles una sorpresa, una alegría. Porque sí.

¿Por qué su mente se empeñaba en asociar las cosas de esa extraña manera?

“¿Qué le has hecho?” (atacó en su mente esas palabras de nuevo)

¿Por qué tenía la sensación de que se equivocaba una y otra vez sin poder evitarlo, sin darse cuenta?

¿Por qué se le encogía el estómago cada vez que sentía que le hacía daño?



Sabía perfectamente cuánto le dolía a Jaejoong el rechazo. Por eso, a veces, solía jugar con ello. Por eso jugaba a arrebatarle su propia atención. Para él era tan suya, que resultaba embarazoso decir la verdad. Imposible.

Siempre se había negado a darle a Jae lo que quería en bandeja. No quería ser para él uno más y que no le valorase, que no le respetase a pesar de ser su donsaeng.

Pero...el auténtico rechazo, sabía que ha Jaejoong le dolía tanto como a él el fracaso.

Jaejoong solía fracasar en muchas cosas casi cada día pero seguía adelante.

Si él mismo fracasara en cosas importantes.... como ya había ocurrido....

¿Y quién estuvo allí para sacarle de la desesperación?

Respuesta: La sonrisa de ese idiota descarado que había dejado solo en aquella sala sintiéndose......

Se giró sobre sus talones. Cogió aire y empezó a moverse dispuesto a entrar en aquella sala de nuevo y.... y.....

- Min, ¿no entras?- Preguntó Junsu a sus espaldas abriendo la puerta.

- Si, si claro.- Respondió inseguro sin poder moverse del sitio.

- Soy idiota, si llego a saber que ibas a tardar tanto no te dejo nada.....*ue kyong kyong*

- Como si te pudieras comer todo eso tú solo.... aparta!- Le dijo riendo intentando entrar en la sala donde esperaba la comida.

- No, para ti no hay!!- Decía Junsu riendo mientras le impedía el paso.

Changmin no pudo evitar sonreír también. Se sentía aliviado de algún modo...

¿Qué había estado a punto de hacer......realmente? Le agradecía a Junsu el haberle detenido sin saberlo.

¿Realmente qué podía hacer él para hacer sentir mejor a Jae?

¿Volver a hacer algo de lo que arrepentirse?

Darle lo que.... quería?


¿No le haría eso aún más daño?

Igualmente no quería saberlo. Mientras reían, Min se moría de ganas de agradecerle a su loco hyung que hubiera abierto esa puerta a tiempo.

Y le abrazó. Y así le giró y le sacó de la sala quedando él dentro.

- Bueno, te dejo entrar, sólo porque yo solo no me lo puedo comer todo que si no...- Dijo Junsu entre risas al verse atrapado.

- Gracias Babo.- Le dijo con cariño.- Me muero de hambre....

- Oye! Que son esos modales!!

- Gracias... Babo-hyung!!- Dijo Changmin para hacerle de rabiar sin soltarle. Pero en ese momento miró hacia fuera.

Ahí estaba la figura de Jaejoong mirándoles, sintiéndose a parte. Intentando sonreír de cualquier manera. Nadie se dio cuenta de que Yoochun había llegado hasta que habló.

-Bueno Min, aquí cuando no puedes dar a Jae le das al “baby”?- Dijo Yoochun riendo, dándole una palmada en el hombro como saludo a Jae al pasar al lado de él.- Si le das a alguien dale sólo a él , el 90% del tiempo se lo merece..- Dijo uniéndose a Min, dando coscorrones en la cabeza de Junsu.

- ¿ Y Tú que haces aquí tan pronto?- le dijo Junsu con tono acusatorio entre los brazos de Min.

- Cómo?? Yo que vengo a veros con todo mi cariño para que no os aburráis solos....y así me hablas....- Dijo en tono de profunda ofensa.- No ha tenido nada que ver con que supiera que Jae había traído la comida.....- Dijo con una sonrisa pícara.

- Ah claro claro.... interesado!- le acusaba Junsu entre risas.

- Min ha dejado algo?- preguntó Yoochun asomándose a la sala de descanso.

- Si ni siquiera he empezado!- Se quejó el aludido.

Min podía advertir en la actitud forzada de Jae que tenía ganas de irse de allí.

- Oh, entonces mas vale que me de prisa.- Dijo Yoochun dejando la bolsa en la entrada y andando de forma cómica.- Uhi!- dijo al acordarse, volvio sobre sus pasos y le plantó un sonoro beso a Jae en la mejilla.- Gracias por la comida!

- Aggg baboso....- se quejó Jae limpiándose la mejilla.

- Bueno a ti quién te ha dicho que puedes comer antes que yo?- preguntó Min soltando a Junsu para alcanzar a Yoochun.

- La edad!!!- Dijo Yoochun a quien se le escuchaba ya con la boca llena.

- Por eso!! Los menores primero!!- Decía Changmin.- Soy tu pobrecito donsaeng “hum hum” , tengo que crecer y alimentarme!

A Yoochun ya solo se le escuchaba comer.

- ¿Te tienes que ir ya?- preguntó Junsu a Jae cuando se quedaron solos en el pasillo.

- Sí... tengo cosas que hacer esta tarde.- le dijo seriamente pero con cariño.

- ¿No te quedas a comer algo? Es tuyo!

- Nono, yo ya he comido.- mintió.

- ¿Todo bien con Min?- preguntó Junsu tímidamente. Siempre le costaba preguntar cosas que el suponía asuntos de los demás, aunque se preocupara por ellos. Sobretodo a Jae.

- Ah.. si si, hasta me ha pedido disculpas por lo del otro dia!- Contestó Jaejoong intentando parecer animado.

- Wow.- Exclamó Junsu que sabía lo poco que se disculpaba Changmin.- Me alegro de oír eso. Me asusté mucho el otro día.

- Bah, no te preocupes. Todo está como siempre.- Le dijo Jaejoong con una mano en su hombro.

Antes de que dijeran nada más sonó el teléfono movil de Jae. Junsu se despidió con la mano. En menos de 2 seg Jae había contestado.

- ¡Amor mio!!- Saludó Jae con entusiasmo.

- ¿Con quién crees que hablas? Soy yo.- Dijo la voz de Junho al otro lado del tlf.

- Te echo de menossssss~♥ - Siguió diciendo Jaejoong.

- No por mucho tiempo, bobo, al fin tengo decididos los equipos de promoción.

- Ah si? Como no estemos juntos sabes que te mato.- dijo con tono amenazante sin perder la sonrisa.

- Calla. Junsu tendrá que ir por su lado.- Dijo Yunho algo preocupado.

- En serio?- Jaejoong abrió la puerta de su coche, ya había llegado al garaje. Dejo de hablar mientras se metía dentro y se quitaba el abrigo.- Menos mal que no me ha tocado a mí. Estará bien?

- Seguro que si, ya cuidaremos de que sí. Changmin y Yoochun irán juntos. Bueno, irán a Sapporo, pero Yoochun irá algo más tarde. Tu y yo a Osaka y seguiremos por aquí.

- Wooow! Comida comida comida.- Jaejoong le interrumpía. Escuchó a Yunho resoplar al otro lado.Yunho odiaba que le interrumpiera cuando le hablaba de cosas importantes, pero a Jaejoong le daba igual.

- Por cierto, ¿has llevado la comida al estudio?
- Sips, estoy saliendo de ahí.
- ¿Estás conduciendo?
- Aha. Saliendo del garaje.
- Pues cuelga, idiota, es ilegal conducir hablando por tlf.
- Pero es que te echaba de menos ssss ~~
- Pero si nos vamos a ver ahora!!
- Pero meaburroooo tengo que conducir media hora más lo menos....
- Bueno, creo que hay atasco
- AAArrggg
- Te cuelgo ya
- Nooooo
- Que tengo que hacer cosas!! Date prisa!

- Junho ah...! Junho ah!! ¿Me has colgado?? ¿ Me has colgado?? – Jaejoong cerró el teléfono móvil y lo tiró al asiento del copiloto.- Pues te vas a enterar!! El viernes ya no hay estofado! Ni sopa el domingo!! Lo juro!! Ay! nonono atasco no no no....


Minutos después.

*bibibibiiip* marcación rápida

- Chunnie!!
- Jae?? Donde estas?- preguntó Yoochun a través del tlf.
- En una mierda de atascoooooo
- Nosotros ya hemos comido estaba bien bueno, pero no queda nada ya.... Junsu!! Aparta tu cuchara de mi postre!!
- Hazme casooooo chunnieeee
- Oye, que tenemos que ir entrando, el programa empieza dentro de nada.
- Noooo chunnieee esto es muy aburrido dime algoooo
- Qué dices?? Que tengo que empezar el programa! Quieres que este haciendo el programa contigo al telefono??
- Sería original....buena idea!!
- Que no te digo! Voy a colgar...
- Que lo digo en serio!!! Oye!!

......Bip bip bip bip



Minutos después.

*bibibibiiip* marcación rápida

- ¿Por qué no me cogías el tlf?
- Para qué me llamas ahora?
- Pero qué borde...
- Estoy a punto de empezar el programa, qué quieres?- decía Changmin en voz baja.
- Hablar contigo...
- Pero de qué?
- Es que... ya han hecho los grupos de promoción.... al final nos van a separar a todos... no te parece injusto???
- Pero me lo tienes que decir ahora? Ya me lo cuentas luego!- Exclamaba Chnagmin susurrando.
- Pero qué malo eres... después de cómo me tratas no puedes hablar conmigo??
- Cómo?? Pero si estoy a punto de empezar el programa! Te tengo que colgar ya
- Nonono no seas malo Minnie!!! Me has tratado muy mal hoy!! Encima que te llevo la comida!!Con todo mi cariño y mi amor....
- Mira no te enrolles ostia, ya hablamos luego...
- Pero CUANDO luego?? Siempre me dices igual...Dime que me keresss♥
- que tengo que colgar ya, adiós.
- Aggh..! Min!

Bip bip bip bip










Los primeros días al comienzo de la promoción fueron algo duros. Junsu estaba completamente desangelado sin sus compañeros, con el corazón encogido y sintiéndose solo demasiado a menudo.

Changmin salió el primero hacia Sapporo. Y estaba encantado de la vida. Quería mucho a Yoochun, pero por él se podía quedar al lado de Junsu que le hacía buena falta, él estaba bien contento de estar a su bola. Así no le iría mangoneando todo el rato.

Un viajecito él solo, le iba a venir estupendamente. Desde que Jae había empezado la agenda con Junho él se sentía mucho mejor. Jae parecía muy contento.

Changmin necesitaba por fin distanciarse de todo aquel asunto. De los golpes, los suspiros, y todo lo demás. Mirando el cielo claro desde el avión todo aquello parecía muy atrás.

Pero cómo no, nada mas llegar a Sapporo, recibió un email de Jaejoong, le contaba lo que se estaba perdiendo, su Okaasan que les hacía ramen rico rico.

Changmin le respondió que no le daba envidia ninguna.

Sonrió al imaginar la cara de frustración de Jae cuando lo leyera.

A veces no sabía si era peor estar cerca de Jae o lejos, porque cuando estaba lejos, no dejaba de asediarle con mil emails.... y lo de ignorarlos no era una opción.

Por desgracia sus contestaciones cortantes y escuetas no le hacían desistir.

Al fin se acomodó en el hotel. Aún quedaban unos días hasta reunirse con Yoochun. Haría cosas por su cuenta primero. Changmin estaba seguro de que este viaje le vendría bien. Se tiró sobre la cama de la habitación y suspiró relajado.










Jaejoong y Junho iban en el shinkansen en el camino de vuelta a Tokio.

- Jaejoong que haces?- Preguntó viendo como Jaejoong marcaba las teclas en su telefono movil sin descanso. Le ponía nervioso cuando hacía eso.

- Estoy preocupado por Changmin. Hace días que no me contesta.

- Normal... con lo pesado que eres....-rió mientras se acomodaba en el asiento.

- Pero es que las llamadas tampoco me las coge....

- Le tendrás harto..- Le dijo Uknow riéndose de nuevo.

- No, changmin no es como tú, él siempre me contesta...

- Porque no contestarte es peor!!- se quejó Yunho ofendido.

- Pero llamale Junho, estoy preocupado....

- Ahora?- Le interrogó sorprendido.

- Si, venga- le obligó Jae marcándo el telefono de Min de memoria en el movil de YUnho.

- Oye oye espera... Que es a Sapporo y pago yo!!!- Jae le paso el teléfono ya llamando.

- Anda calla, que poco te importa llamar a JUnsu cada día....(favoritismos oppa?) -Se quejó jae diciendo la última linea en un susurro.

-Porque JUnsu está en Tokyo!!!!- Le gritó Yunho sin poder creer que Jae fuera tan idiota.

- Si lo coge me lo pasas eh?-le ordenó ignorando el grito de Yunho.

- Si si...

Durante unos interminables segundos Yunho esperó al teléfono. No había respuesta.

- ves? Ves? No contesta?? Y si le ha pasado algo?- le decía Jae angustiado.

- Humm hombre, no creo.. está con..- Decía Junho un poco inseguro. Marcó el telefono de Junsu.

- Ye?- Contestó una jovial voz.

- Junsu ah? Has hablado con Changmin?

- Cómo! Me llamas para preguntarme por él....vaya Hyung! Y yo qué? No kieres saber qué tal estoy?

- Dímelo, estamos preocupados porque no nos contesta, has hablado con él?

- Si, hoy mismo, hace un rato. Con Yoochun y con él, ¿Por qué? Ha pasado algo?

- Nono, solo Jae.. que es un paranoico, como siempre....- Jae le golpeó en un brazo.

- Ah bueno...pfff todo parecía ir bien. Le notaba un poco cansado, pero bien.

- Ok ok, por cierto tengo MUY buenas noticias. Nos van a dar al final los 10 dias de vacaciones. Antes de las grabaciones y el comienzo de la gira. Bueno diez que serán en realidad 5.....y no seguidos....pero menos da una piedra.

- En serio?? Wohh upps... a Yoochun no le va hacer gracia ninguna... ya es demasiado tarde para hacer los planes que él quería*ue kyon kyon* mejor diselo tú...jajaja

- Ok. Venga, descansa nosotros llegamos en un rato. Nos vemos luego.

Antes de que Uknow colgara, ya Jaejoong estaba marcando el tlf de Changmin de nuevo. Seguía sin contestar. Ni siquiera cabía otro mensaje más en su buzón de voz.
Yunho resopló desdeperado por su incansable actitud. Jamás se acostumbraría.

- ¿Qué mas te da Jae? Si igualmente le vas a ver pasado mañana.

- Pasado Mañana? No estará esta noche?- preguntó Jae confundido y alarmado.

Yunho se pegó un susto con ganas de gritarle: "Y todo este follón y piensa que le verá esta noche????"

Yunho puso en blanco los ojos y suspiró hondo antes de hablar.

- No.. al parecer a Yoochun y a él les salió algo de última hora, y querían aprovecharlo.

- ¿Cómo es que no me has dicho nada?- Le preguntó Jae más relajado y con esa mirada dolida y acusatoria que Yunho no podía aguantar.

- Pero si yo me he enterado esta tarde! -se defendió el líder.-Han estado trabajando hasta ahora, tienen que estar terminando ya....

Jaejoong se quedó con la mirada fija y en silencio. Yunho sabía que eso no era nada bueno.

- me voy a Sapporo esta noche. –Anunció Jae de pronto.

- ¿En serio? No estás cansado?- Preguntó con cautela, pero escandalizado por dentro. Aunque sabía que Jae haría eso y más por cualquiera de ellos.


- Yunho.- COmenzó sacándole al interpelado de sus pensamientos.- Tu, al igual que yo, querrás que Min y yo dejemos de dar problemas verdad?- Le dijo al ver que el lider no estaba por la labor de acceder a otra de sus tonterías.

- Aún no habéis terminado con eso? Venga...- Preguntó Uknow desilusionado.- pero irte a Sapporo para estar un dia y poco?

Uknow seguía oponiéndose pero Jaejoong leía en su mirada que le preocupaba mucho más que la situación de mal rollo entre ellos se alargara, que el billete de avión.

Era la primera vez que Jaejoong al menos admitía que sí tenían problemas y hacía algo por su parte para solucionarlo.

Sin decir nada más, Yunho abrió su tlf movil y le hizo una reserva del vuelo de ultima hora que salia de narita a Sapporo. Jaejoong suspiró.














Changmin se dejó caer una vez más sobre la cama de su habitación de hotel.

Sabría que aquella noche tampoco podría dormir.

Las ojeras eran kilométricas, pero gracias a dios este último trabajo de mañana era en la radio.

Con miedo pero impaciencia, sacó su movil del bolsillo del pantalón. Lo había desconectado de nuevo desde que había hablado con Junsu esa misma tarde.

Tal y como pensaba..... había veinte mil mensajes de Jae, y llamadas... e incluso una llamada de Yunho.

Suspiró y dejó el movil sobre la cama, sintiendo como todo se le echaba encima.

No sabía que contestarle ni sabía qué podía hablar con él si le cogía el teléfono.

Desde que llegó allí, Cada noche, cuando dormía.... en sus sueños, volvía corriendo a la sala de grabación, y le abrazaba.

Ese no era el peor sueño de todos.

En el resto.... Jaejoong estaba en aquel sofá blanco del photoshot, con aquella misma ropa....sólo que.......comenzaba a quitársela lentamente.

Veía en primer plano, cómo las propias manos de Jae se colaban por debajo de aquella fina camiseta de rayas, mostrando su plano y suave vientre, coronado por el brillo de aquél metal que atravesaba su piel. Lentamente movía sus hombros sin incorporarse del todo; hasta que la chaqueta negra liberaba su redondeado hombro, tirando del cuello de la camiseta para mostrar su clavícula y más superficie de su irresistible pecho, tensando su cuello para apartar la chaqueta por completo de su cuerpo, dejando escapar aire por la pequeña abertura de sus labios.

Y cuando se comenzaba a desabrochar el pantalón, por alguna inexplicable razón él ya estaba allí, y veía sus propias manos unirse a las de él, colándose entre medias de la cremallera abierta, saliendo de nuevo, las cuatro manos tirándo suavemente de las telas.

Jaejoong le miraba así.... con esa mirada que hubiera querido no ver nunca.

Gimiendo como sólo él podía....


Incluso despierto podía oírlo.

Cada mañana se despertaba... empapado en sudor y.... pura vergüenza.



Y ya sólo le quedaba una pregunta....

¿Se trataba de algún tipo de fijación por Jaejoong?

¿O es que él siempre había sido así....y nunca lo supo?


No le hacía falta respuesta para la segunda pregunta. Él lo sabía. Nunca se había sentido así.

Pero entonces....

¿donde terminarían estos estúpidos efectos secundarios.... esta agobiante obsesión por él?

Se levantó de la cama de golpe intentando sacar esos pensamientos de su mente, y se quitó el abrigo. Miro la hora, era pasada la medianoche. Decidió conectar el portátil y distraerse por internet, cuando llamaron a la puerta.




Y ahí estaba.




Calado de agua de arriba abajo, sin paraguas, sin ninguno de sus sombreros, con su pelo color trigo pegado a su cara, jadeando.


Por unos instantes Changmin pensó que se lo estaba imaginando.


- ¿Me vas a dejar entrar?- Preguntó Jaejoong tiritando un poco, mientras se acercaba a la puerta. Changmin le abrió paso y Jaejoong comenzó a quitarse la bufanda y el abrigo. En la habitación había bastante calor.

- ¿Qué demonios estás haciendo aquí?- preguntó Changmin en un hilo de voz.- ¿has venido solo?

- Si.- Contestó Jaejoong quitándose también la sudadera que llevaba. Se había calado hasta los pantalones.

- ¿A qué has venido?- Le preguntó completamente desconcertado.

- Creo que lo sabes bien.- Le contestó mirando hacia el movil que estaba abierto sobre la cama.

Changmin no contestó.

- Changmin....

- Lárgate!- le gritó interrumpiendo, temblando para controlar sus nervios.

- No!- Replicó Jae subiendo el tono de voz.- ¡Dime qué es lo que tengo que hacer....!

Changmin se sobresaltó al escuchar la fuerte voz de Jaejoong en sus oídos, resonando en las paredes de su habitación.

Realmente estaba allí.

-Estoy haciendo mi mayor esfuerzo, pero no esta dando resultado.- continuó Jaejoong con una fiera mirada bajo esos mechones de pelo empapados.- Estoy haciendo mi mayor esfuerzo para dejarte tranquilo, que esta tormenta pase..... pero lo único que siento es que estamos más lejos.. y no soy capaz de soportarlo.

- Deja de decir bobadas Jaejoong, ¿Has venido en plena noche hasta sapporo, cuando vamos a volver en 1 dia, solo porque no te he contestado unos e-mails??- le preguntó Changmin con todo el desdén que pudo exteriorizar para intentar que Jae no continuara con ESA conversación.
Jae le miró fijamente más intensamente que cualquiera de sus miradas hasta el momento. Changmin supo que no le detendría.

- Si nunca te ha importado lo que ocurrió..... ¿Entonces por qué parece que no puedas olvidarlo y dejarlo atrás?? ¿Por qué no puedes perdonarme entonces?- paró para recuperar el aire, no había bajado el volumen de la voz en ningún momento.- ¿Tu puedes estar así? Dime! ¿Puedes?

- ¿ y de quién es culpa todo esto eh??- Changmin se pensó de nuevo esas palabras después de decirlas. Estaba implicando que Jaejoong era el culpable de todo.... pero.... ¿realmente podía decir eso?

Aprovechando el silencio, le miré por completo por primera vez desde que había entrado. La camisa blanca que llevaba, se pegaba a su cuerpo y se transparentaba. Como siempre, llevaba desabotonados los primeros botones. Sólo llevaba encima aquella estúpida camisa.

Su pelo estaba empapado, de las puntas doradas caían gotas de agua una detrás de otra que rodaban por su cuello y se perdían por su pecho y su espalda. Quería mirar hacia otro lado pero no podía. No podía.

- Pensé que me odiarías, que lo olvidarías... tú que eres más rápido que nadie para olvidar lo que no te gusta.... - dijo Jaejoong recuperando su tono normal de voz.-Haz lo que creas que debes hacer..... pero acaba con esta situación de una vez.... - volvió a mirarle de nuevo a los ojos, pero era como si Changmin ya no estuviera allí. Su mirada le confundía, parecía perdida en algún punto indefinido de su persona.Jaejoong ya no sabía qué mas podía hacer.-Si quieres pegarme hasta que te quedes a gusto, si quieres no volverme a hablarme y quieres que me vaya de la casa, o incluso...... si quieres que me disculpe por lo de aquella noche, lo haré, aunque no me arrepienta.... pero


- Calla!!- Le ordenó Changmin. Esas últimas palabras de Jaejoong le habían hecho temblar como si estuviera tan empapado como su hyung.






Changmin entonces de improviso me acorraló entre sus fuertes brazos y la pared que tenía detrás. Yo miraba a algún punto perdido más allá del hombro de Changmin, al fondo. Sin entender áún qué estaba pasando.

Estaba nervioso. Podía sentir la mirada de Changmin sobre mí, quemando mi piel. Pero me tenía completamente desconcertado, no me atrevía a mirarle a los ojos. Atrapado entre su cuerpo y la pared, le escuchaba respirar deprisa frente a mí, parecía tomar mi ofrecimiendo de desahogarse dándome una buena paliza y liberar su odio.

- Si... crees que te ayudará en algo.... haz lo que creas conveniente. – Le dije. Ya no sabía por dónde podía salir. Si deseaba estrangularme, gritarme, golpearme, disculparse... no lo sabía.

Por eso, cuando en un abrir y cerrar de ojos pasó toda su lengua desde mi hombro hasta mi oreja, sin prisa pero sin pausa, me estremecí de arriba abajo por la sorpresa.

Intenté balbucear una palabra, una exclamación, pero él se quedó con la cabeza gacha, junto a mi cuello, respirando rápido por la boca, a través de sus dientes, saboreando las gotas agua que había recolectado de mi piel. La fuerza de su aliento movía mi pelo.

-Min....- Susurré confundido mirándole de reojo. Se echó sobre mí sujetando mi cabeza con las manos, y una vez más, mordió con sus dientes la piel de mi cuello. De aquella manera que nadie me había hecho en mi vida. Ni siquiera me dejó aliento para gemir.

Al fin le sujeté por los brazos, y le coloqué frente a mí para hacer que me mirara. Notaba que no quería mirarme a los ojos. Evitó mi mirada, él sólo veía mi boca. Antes de que dijera una palabra, atrapó mis labios entre los suyos, lamiéndolos de una comisura a otra. Gemí.

Mi Changmin se mordió los labios frente a los míos al escucharme. Eso le gustaba.



Y me detuve ahí, tratando de respirar frente a su boca, tratando de frenar los mil impulsos que me invadían y me harían comer cada parte de su piel.
Quería probar el sabor de cada gota de agua sobre su tibia piel.

Pero no quería dejarme llevar de esa manera. Odiaba la sencillez con la que él liberaba esta parte de mi que no imaginaba que existía. No quería saber de lo que era capaz.

-Jj.....- Murmuré sin poder continuar. No era capaz de pronunciar su nombre mientras hacía algo como aquello. No podía conectar lo que había sido hasta hace poco nuestra amistad, nuestra vida, a parte de la nueva dimensión que aparecía cuando cruzaba esta línea prohibida.

Él aún me sujetaba de los brazos. Con fuerza. Sabía que ya no me dejaría ir.
Me miró con descaro y bajó sus manos hasta la cintura de mi pantalón.



Quería ver hasta donde podía llegar, no estuve tan seguro de lo que yo mismo quería hasta aquél momento... quería verle caer caer caer.... quería volver a disfrutar de esa mirada nueva en sus ojos....

...... necesitado de mí, con esa mirada suplicante, brillante de deseo. Atrapado. Mío.

Y en un solo gesto, junté con firmeza sus caderas contra mí, para dedicarle uno de mis mejores movimientos. Le miré curioso de ver su reacción. No se hizo esperar; aprisionó su cuerpo contra el mío lentamente, hasta dejar mi espalda en completo contacto con la pared. Hizo algo que nunca había hecho hasta ahora. Aún mirando sólo a mis labios, tímidamente pero con fuerza apretó su cuerpo contra el mío.

Presionó con fuerza y lentamente, enganchando los botones de nuestros pantalones con el roce. Humedeciendo su camiseta con la mía. Un profundo suspiro se le escapó de los labios, y se perdió en mi boca.

Y la satisfacción de haber ganado de nuevo recorrió mi cuerpo, juntándose con el resto... haciendo aparecer esa sonrisa en mis labios.

Y por fin, ahí estaba esa mirada. Sólo para mi.



Quería estar más y más cerca... acercarme hasta dejarle sin aire en el cuerpo, hasta que sólo le sintiera a él. Notaba como mi ropa se iba humedeciendo, como las gotas que rodaban desde su pelo caían por mi cuello, por mi mejilla.... y entonces sus labios.

Recogió con su boca una gota de agua que caía por mi mandíbula. Después una en mi cuello... y otra y otra y otra más. Y supliqué en mi mente que liberara su lengua sobre mi piel. Y así lo hizo.

Sintiéndome...como cuando ni siquiera puedes explicar con palabras lo mucho que necesitabas una sensación. Cuando los suspiros se agolpan en tu pecho y no te dejan respirar.

No se cómo una de mis manos fue hasta su nuca. Sabía que no le gustaba pero revolví su pelo. Quería decirle que no se apartara de mí. Quería que las luces de aquél lugar se desintegraran, y a la vez quería que me llenaran de lucidez. Si las sombras ocultaban mi cuerpo una vez más no sabía lo que podría llegar a hacer.

El sonido de unos gemidos desconocidos llegaron a mis oídos. Eran míos.

Nunca había escuchado así el sonido de mi propia voz.

Jadeaba como aquella noche, como se me hacía vergonzoso recordar.

Gemía de un placer que yo no controlaba...

Noté unas manos frías y húmedas bajo mi camiseta. Aquellas sensaciones que recordaba, las sentía ahora más fuertes, más reales.
Sin dejar de besar mi cuello, notaba como aquellas curiosas manos recorrían mi espalda, no pude evitar sentir escalofríos....de excitación.
Mi sexo hervía bajo mis pantalones, presionando dolorosamente contra la cremallera.

¿qué estaba haciendo?

¿Estaba en otro de esos sueños?

Jaejoong me desabotonó la camiseta que se abría sólo hasta la mitad. Y sin miramientos apartó la tela de mi pecho y hombros, para clavar sus pequeños y suaves labios allí.
Traté de reprimirlo hasta aquél momento, pero mis caderas se movieron sin poder evitarlo. Cuando él lo notó, bajo sus manos hasta mi trasero y lo apretó contra él.

Y yo necesitaba que el roce fuera continuo. Jadeando sin descanso, volví a aprisionarle contra la pared. Y él no dejaba de tocarme, no paraba. Mis roces se hicieron cada vez más violentos. Podía notar su erección, paralela a la mía, rozando en un costado. Y bajé tímidamente una mano hasta su cintura, y logré colarla debajo de la camiseta para tocar su piel húmeda y fresca, como un bálsamo para el ardor que sentía. Seguramente el notó lo que pasaba antes que yo por mis gemidos.

Cuando me quise dar cuenta, estaba apretando los dientes mientras sacudía mis caderas con fuerza contra él.
COn mi frente sobre su hombro húmedo y descubierto, movía mis caderas desesperado contra las suyas sin descanso, jadeando como un sinvergüenza contra su piel, escalando con mi mano sobre su pecho, una de mis manos presionando su nuca para sentir con mas fuerza sus labios sobre la piel de mi cuello que él besaba sin descanso, hasta que noté sus jadeos justo sobre mi oído, cuando mordió el lóbulo de mi oreja.

Mi cuerpo tembló y apreté más los ojos ya cerrados, sus manos apretaban mi trasero contra él, ayudando con fuerza en mi frenético movimiento contra su cuerpo.
Él susurró mi nombre contra mi oído cuando notó que mi cuerpo se tensaba.
Ahogué mi profundo gemido llenando mi boca con la fresca y trémula carne de su hombro, mordiéndolo y saboreándolo en éxtasis mientras notaba los labios de Jae besando suavemente la piel de detrás de mi oreja

Yo intenté recuperar el aliento, profundamente sorprendido de lo que acababa de suceder, abriendo los ojos como platos y realmente no viendo nada. Mientras notaba sus manos recorrer dulcemente mi espalda encorvada.

- Changmin... tú.- Murmuró Jaejoong cuando comencé a separarme de él. Quizá había notado esa cálida humedad entre nosotros. Sus manos volaron hasta mi pantalón pero le aparté.

- NO.... mejor ahora no toques...- le pedí. Él aún sorprendido se alejó de un paso al lado, para dejarme el camino libre al baño.

Sin pararme un segundo a mirarme, me saqué la ropa de una vez y me metí de un salto a la ducha. Dentro ya, el cansancio se me vino de golpe encima. El agua estaba helada, se me había olvidado regularla, pero apenas la sentía. Notaba como el agua limpiaba mi cuerpo de la capa de sudor que la había ensuciado en tan sólo minutos...y de algo más...ni siquiera quería mirarme.

¿Qué acababa de hacer?

¿Cómo iba a salir yo ahora del baño??

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