Doctor, ¿me cura? cap 1

Lo que a Changmin le llegaba a molestar la mayoría de las veces, es que nadie le tomaba en serio por tener 20 años y tener la carrera de medicina general, simplemente pensaban que todavía era el típico joven que siempre está en un club bebiendo y bailando o que se la pasaba haciendo el vago, pero no, Changmin nunca fue de ese tipo de gente, él siempre se preocupó por estudiar para ser alguien en la vida y poder ganarse la vida siendo algo que le guste y había trabajado duro por ello.

Gracias a la educación que recibió, al estudio y el haber trabajado mucho, podía decir que tenía un trabajo fijo en una escuela privada solo para chicos, lo que a él le parecía bien, ya que al ser chicos, habría más heridas que curar ya que los chicos son brutos por naturaleza, pero desde que llegó a esa escuela, lo único que ha llegado han sido las heridas típicas de caídas o roces con el suelo, la mayoría por parte de los equipos de deporte, es decir, que se pasaba las horas muertas mirando las musarañas, leyendo, mirando cosas por internet, colocando el botiquín, cualquier cosa para distraerse de la monotonía de aquel silencio que hasta llegaba a ser agobiante.

Estaba enfrascado en una lectura más o menos interesante, cualquier cosa que entretenga y haga que pasen las horas es entretenido, cuando alguien llamó a la puerta pidiendo permiso, así que dejó el libro a un lado de la mesa.

-Pase,-dijo esperando a que se abriera la puerta.
-Hola Doctor,-dijo un joven con cara risueña adentrándose en la sala,-soy Kim Junsu el delegado de 4ºA y me manda el tutor a dejar a éste chico de mi clase porque se encuentra mal y me dijo el profesor que usted lo revisara para saber si tiene que volver a casa o puede darle algo para que pueda seguir con la jornada escolar,-mientras Junsu decía esto, un joven de tez pálida, orbes grandes y pelo oscuro, se adentraba en el interior de la sala con la cabeza gacha.
-Está bien, déjelo aquí y evaluaré que hacer,-dijo Changmin levantándose de la silla dirigiéndose a los dos jóvenes.
-Muchas gracias doctor,-Junsu hizo una reverencia y se retiró del lugar despidiéndose del doctor y del otro chico, que había levantado su cabeza y se podía ver un poco más de su cara.

El lugar dónde estaban se llenó de silencio interrumpido por el aire que entraba por la ventana de la sala que había abierto para que se aireara un poco.

Changmin observó al chico que estaba frente suyo durante unos minutos, hasta que se decidió a hablar.
-Necesito hacerte una revisión rápida para saber cómo estás,-dijo Changmin dirigiendo al joven a una camilla que había en la sala.- ¿Cómo te llamas?-preguntó mientras
-Kim Jaejoong señor,-dijo sentándose en la camilla esperando instrucciones por parte del otro.
-Llámame Doctor, no soy tan viejo como para que me llames señor,-dijo sonriendo un poco de manera falsa, para que el chico no estuviera tan tenso.
Comenzó a examinarle los oídos y luego la garganta.
-Ponte esto en la axila, yo voy a secretaría, ya vengo,-Jaejoong asintió con la cabeza y se lo puso en la axila mientras veía como el doctor se quitaba la bata y la dejaba en la percha e iba con unos documentos fuera de la sala.
-“Tal vez ya acabó su turno”-pensó el chico,-“me pesa todo el cuerpo”,-pensó, sin notar como sus mejillas se ponían más rojas a causa de la fiebre,- “mejor me tumbo un rato hasta que venga el doctor”,-pensó cerrando los párpados que le empezaron a pesar.


Un chico iba con papeles en la mano dirigiéndose a secretaría aun paso algo acelerado.

-Hola YooHee,-dijo el doctor poniendo los papeles en la mesa,-están apuntados todos lo que han pasado por la consulta, los que estaban malos y querían justificantes, los que no y están castigados por el profesor y los que tuvieron lesiones durante el día,-dijo firmando esos papeles para dárselos a la secretaria.
-Hola,-dijo la chica sonriendo mientras cogía un sello y lo ponía al lado de la firma del doctor,-¿algo más Changmin?,-guardó los papeles en una carpeta roja para dárselas a los profesores.
-No nada más,-dijo comenzando a caminar, pero recordó que tenía a alguien en su consulta, así que volvió sobre sus pasos, -YooHee, tengo a alguien en mi consulta, creo que está malo y no le veo muy bien como para cruzar la calle solo, llama a sus padres y diles que vengan a recogerlo,-terminó de decir.
-Está bien,-dijo la chica cogiendo una gran agenda,-¿Nombre y curso?-preguntó la chica con una sonrisa.
-Kim Jaejoong de 4ºA,-dijo el doctor con intenciones de irse, cosa que no hizo cuando la chica río de manera sarcástica.
-¿Qué pasa?-preguntó confundido el doctor.
-No creo que puedan venir a recogerles,-dijo la chica con una sonrisa triste en la cara.
-¿Por qué dices eso?-preguntó más confundido que antes,-¿A qué te refieres?
-Aish, la vida de ese chico es bastante dura,-dijo con deje de tristeza en la voz.
-Si no me explicas no entenderé que me quieres decir YooHee, -empezó a molestarse por la actitud de su amiga la secretaria, haciéndose notar en su tono.
-Sus padres murieron en un accidente de coche cuando tenía 15 años y no tenía más familiares que esos, así que tuvo que vagar por la calle hasta que un señor que rentaba un orfanato lo encontró en la calle muerto del frío y de hambre y lo cuidó hasta que Jaejoong cumplió los 18 y decidió independizarse
-…-el doctor se esperaba de todo menos eso que le acaba de contar su compañera de trabajo,-¿y cómo sabes todo eso?,-preguntó el doctor confundido porque ella supiera tanto.
-Ese señor mayor es un gran amigo de mi abuelo y me contó la historia de Jaejoong cuando regresé de haber estado estudiando en España,-dijo la chica sonriendo tristemente,-se ve que ese niño necesita amor, siempre tiene la mirada cabizbaja o triste y eso llega a preocupar.
-¿Entonces tú y Jaejoong os lleváis bien?-preguntó curioso.
-Si, aunque solo hemos coincidido 3 o 4 veces él sabe que cuenta conmigo para lo que necesite, desafortunadamente no puedo ayudarte ahora con él porque no termino mi turno hasta las 8 de la noche, lo siento,-dijo la chica apenada por no ser de ayuda.
-No pasa nada, supongo que lo llevaré a su casa de camino a la mía,-dijo con una sonrisa mitad falsa mitad verdadera. La historia del chico le había dejado mal sabor de boca como para sonreír de manera alegre a su compañera.

Siguió caminado por los pasillos hasta llegar a su consulta y abrirla sumido en sus pensamientos, parando en seco al ver una imagen que le paralizó todos los sentidos al ver una imagen entre hermosa y triste de algún modo.

Jaejoong estaba tumbado en la camilla con las mejillas rojas debido a la fiebre y tenía su blusa con algunos botones de la parte superior desabrochada para poder tomarse la temperatura con el termómetro. Por sus labios rosados salía una respiración acompasada debido a la tranquilidad en la que se encontraba mientras que su cuerpo se veía desprotegido al ser tan delgado y de tez tan pálida. Y en esos momentos a Changmin, el principio de relacionarse lo justo y necesario con un paciente desapareció por completo, queriendo abrazar a ese chico que se veía tan indefenso a sus ojos y darle un poco de cariño aunque fuera un desconocido.

Desechando esos pensamientos caminó hacia él y cogió el termómetro de su axila.
-39º de fiebre,-dijo el doctor en voz alta mirando al chico,-Kim Jaejoong despierta, es hora de que te vayas a casa, estás muy enfermo como para seguir aquí,-dijo Changmin con un tono suave.

El nombrado entreabrió los ojos y pudo ver como el doctor le decía que podía irse a su casa, así que intentó levantarse y ponerse de pie, fallando en el intento, ya que su cuerpo le dolía mucho y no podía sostenerse en pie.
-“Como sospechaba”-pensó el doctor cogiendo a Jae, colocándolo en la camilla de nuevo, para después coger su móvil y marcar a su amiga YooHee.

-Yobuseyo?
-YooHee, necesito pedirte un favor.
-Changmin? Si, dime.
-Necesito que vayas a por la cartera de Kim Jaejoong a su clase y me la lleves donde está mi coche en el aparcamiento.
-Está bien, te veo en el aparcamiento,-dijo la chica para después colgar los dos a la vez.

Dicho esto Changmin cogió sus cosas y se las acomodó en sus hombros, mientras que en los brazos cargaba al joven enfermo hacia su coche.
Ya en el aparcamiento vio como YooHee acababa de llegar y le esperaba con la mochila de Jae en las manos, sorprendiéndose al ver como lo cargaba en brazos.

-¿Qué le ha pasado?-preguntó la chica muy preocupada.
-Solo tiene mucha fiebre y le duele todo el cuerpo, con unos días de reposo se le pasará,-dijo Changmin llegando a la altura de su compañera,-coge mis llaves de mi bolso y abre el asiento del copiloto, por favor,-dijo girándose un poco para que viera dónde estaba el bolso. La chica hizo lo que el doctor le pidió y Changmin cogió a Jae y lo sentó en el asiento de copiloto de su coche poniéndole el cinturón de seguridad por si acaso, bajo la mirada expectante de la secretaria.
-¿Qué vas a hacer?-preguntó curiosa al ver lo que hacía el otro.
-Lo llevaré a mi casa para que se cure, prefiero que esté conmigo a que esté en su casa solo sin que le cuiden,-a lo que su compañera respondió con una sonrisa.
-Gracias por ayudarle,-dijo la chica poniendo la mochila en los asientos de atrás del coche.
-Solo hago mi trabajo,-dijo en un tono algo frío, pero YooHee sabía que lo hacía porque es una buena persona.
-Me quedaré cuidándolo hasta que se mejore, si mañana no llego a venir avisa por mí en el instituto,-dijo sentándose en su asiento del coche.
-Ok, cuida de él por favor,-suplicó la chica al doctor.

El coche de Changmin arrancó saliendo de la zona de aparcamientos para empezar a recorrer las calles hasta dar con el destino del conductor.

Siguiente