Por la noche.
Después de tantos intentos durante cada receso, la miserable grabación se reprodujo de nuevo “Deje su mensaje después del tono”.Estuve a nada de destrozar el móvil. Solo me quedo torcer la boca y poner cara de fastidio.
Su actitud esquiva, mas el calor en el set, están acabando con mi paciencia.
—Mierda —Todo el día tratando de localizarlo no hay rastro de él. A lo mejor le encontraría mas rápido si se origina un nuevo chisme entre una artista de la compañía y yo.
Aunque darle celos pueda ser mi sentencia de muerte segura.
—Maldición — Hable con nadie, desde la mañana llevo maldiciendo estos escalofríos.
No tengo ni idea de lo que esta pasando solo sé que me esta ocultando algo, eso me revolvio las tripas ¿Será un mal augurio?.
Apenas tomo esa mala manía de consultarme sus problemas al ultimo, ya sean algo relevante o no sabe que tengo el tiempo del mundo para él. Pero musita “No quiero preocuparte son cosas sin importancia” mientras me abraza fervorosamente regalándome mas dolor.
Consulte con Junsu y Yoochun, no tienen idea de lo que pasa tampoco están alarmados solo creen que Jaejoong armo una nueva rabieta. Trataron de apaciguarme me sentí algo estupido, creí quedaba algo de confianza.
Comprobé que ,si, existió algo entre nosotros quedo olvidado en el abismo y nadie tenía ni el mas mínimo interés en recuperar aquello.
Eso hizo que mi corazón se volviera a agitar.
—¡Santo cielo, ¿Por qué estas tan sudoroso?!—Ella con una apariencia y estatura promedio acompañada de sus pelos color zanahoria desalineados se acerco para ponerme presentable.
Tenia unas gafas gruesas, un maquillaje ligero que apenas le cubría las pecas y vestía unos leggings que ni siquiera combinaban con la sudadera fluorescente.
La mayoría del personal la critican por su apariencia tan vulgar o relajada y actitud hiperactiva. A ella no le importa un carajo a todos sigue sonriendo sin tomar represarías. Por eso su presencia siempre me relaja.
—Creo que me siento mal
Ella parpadeo 3 veces algo se atoro en su garganta y se limito a pasar el algodón sobre mi cara. Jugueteo con la bola de caramelo que traía en la boca supongo que pensando en que decirme.
Solo deje escapar un suspiro, mi cuerpo se esta poniendo muy pesado y sofocado y las piernas temblando del miedo. Sí eso debe ser.
Tengo miedo.
Sin dobles intenciones puse mi mano sobre su menudo hombro. No importo si las miradas de repente están sobre nosotros, Haneul dio palmadas en mi espalda.
—Vamos , Jung Yunho jamas es un holgazán ni tampoco deja las cosas a medias ya falta poco ¿Quieres que hagamos ejercicios de respiración? pueden ser nervios.
—No son nervios se trata de él… —Pobrecilla su cara quedo estupefacta y después sonrío de medio lado. Luzco demasiado patético. Por que ella se preocupo con una cara tan lastimera y con cariño roza mi mejilla.
—No logro concentrarme ¿Hay remedio para eso Haneul?
—No lo hay—Pico mi pecho— ¡Pero tenemos este trabajo ahora y una vez que lo acabes podrás irte! Piensa en la recompensa —Sonrío juguetona las pupilas le vibraban y me regreso el reflejo de una cara abatida.
—Apúrate estas muy lenta —Inflo los cachetes. Entre dientes menciono cosas y termínanos riendo sin ninguna razón. Con la brocha, me cubrió de lleno la cara, luego algo de brillo labial, y cepillo mis cejas
— Anímate— Susurro con los pulgares arriba antes de alejarse y dar lugar a que la otra estilista se hiciera cargo de mi peinado por demás tieso.
Se esta filmando la escena donde solo se necesita que un carro se estampe conmigo y yo salga volando por los aires.
No acepte un extra, lo pedí de ultimo momento sería una gran oportunidad, si, algo malo pasará Jaejoong esta obligado a aparecer.
Que miserable pensamiento.
¡Lo se! pero a este punto ya cualquier cosa parece buena idea.
Intentos mas tarde, lo único que conseguí fueron moretones a mis costados, algunos raspones, mas la gente del staff mirándome con reproche mal disimulado.
No cumplo con sus expectativas soy un novato caprichoso que les esta retrasando el trabajo. Entonces mis manos empezaron a sudar frío. Las miradas son muy duras.
Me asqueo; desecho todo mi desayuno y Haneul espera con una toalla fuera del baño.
—Tomate tu tiempo ¿Quieres que te traiga algo?
—Estoy bien … —La verdad no estoy algo pálido probablemente por el esfuerzo involuntario que acabo de realizar.
Si, contestaras , si, no tuviera esta maldita corazonada; no estaría enfermo.
En un lapso de 5 minutos ya estoy listo con unos jeans desgastados y una polera blanca.
—Me dijeron que te tomaras un descanso —Acomodo mis ropas y las sacudió minuciosamente—Esos malditos no entienden nada —Su voz se quebró, y frunció el ceño, la pequeña Haneul estaba afectada mucho mas que yo.
—No seas tonta, esos malditos pagan tu sueldo —Jale sus cachetes y me reprendió con un manotazo.
Esta furiosa. Tanto que esta temblando. Se que no es el mejor momento para estar de gracioso pero no puedo hacer nada con sus sentimientos, solo soy un idol, se supone que soy de plástico.
—Tengo que irme Haneul regresa antes de que encuentren un motivo para despedirte … —Sonreí sin embargo ella no volteó, le ofrecí palmadas a su espalda tal como hizo conmigo. Apreso sus labios entre sus dientes.
—¡Lárgate ya! —Grito.
_____________________________________
“…mensaje después del tono”
—¡Carajo, ¿Qué esta pasando?! — Un remolino de luces a mi alrededor y el aire que se cuela por la ventana logra mantenerme sensato y espabilar de la tremenda jaqueca.
Es curioso todos los semáforos están en verde .Por primera vez en el día la suerte debe estar de mi lado.
— Te necesito …— Hice el cambio a quinta presiento que si no me apresuro te perderé.
Somos dependientes el uno del otro; incluso compartimos esta anormal conexión. Si, yo estoy triste él puede sentirlo y viceversa.
A veces no logro conciliar el sueño por las noches …
Su dolor es muy agudo.
Encontré la sala vacía a lo mejor debido a la hora, 22:30 era el momento para empezar con mis practicas, nadie me distraería tampoco me sentiría intimidado. Antes de iniciar con el calentamiento, ellos llegaron con una persona detrás, le dicen “Preséntate”
¿¡Que hace él aquí!? ¡Yo te conozco! Pensé. No logre articular palabra, es que yo recordaba su cara llena de cortes, raspaduras y moretones; hizo una reverencia y sonrío.
Sabía que las cosas no irían bien.
La puerta estaba entreabierta, solo se escucha el silencio y el burbujear de algún caldo, me sedujo el olor esparcido por toda la estancia.
Las luces no iluminaban en su totalidad. Es tenue por las constantes jaquecas.
Todo esta en orden cada pequeña cosa, los hábitos de un hombre meticuloso que ni siquiera deja arrugas sobre su ostentosa sala de piel negra.
Es cuando me adentro me sorprende un árbol en la sala y Jijji (su gato) sale detrás de el colgándose a mis piernas.
—¿Jaejoong no te dejo salir? — El maúlla. Pone una cara tan conmovedora mientras se deja mimar me acompaña a hacer el recorrido.
¿Dónde esta tu dueño? ¿Qué esta haciendo?
Sobre el comedor dos vasos, uno de ellos derramando agua y una de las sillas tirada en el suelo.
Hay dinero esparcido y se siente como la escena de un crimen, como si ahí mismo yaciera un cadáver, de repente hace mucho frío. Y el caldo que emerge de la olla ya se ha esparcido por la alfombra.
—¿Jaejoong?— Mi voz se distorsionó; otra vez sentí una sacudida
Tengo los nervios de punta y muy mala espina.
—¡No, no lo muevas! — Jaejoong gimió .No pensé que fuera posible pero esta mas pálido de lo normal con la frente perlada de sudor. Ruega y espera a que haga algo.
Yo dudo estupefacto por sus grandes ojos temerosos.
Se que duele. Las manos de él se aferran a mi chamarra.
—No tiembles — Me pide y sonríe sacándome de mi trance es un gesto tan singular pero tan brillante y enternecedor. Que logra cautivarme.
—Se hincho muy rápido iré por la enfermera —Nervioso jalo de mi pantalón.
—¡NO! T… Tu puedes arreglarlo —Trago saliva y asintió con la cabeza. — Solo es un esguince —Mordió sus labios — Hazlo Yunho.
Después recuerdo lo fuerte que mordió el pedazo de tela entre su boca y lo roja que se puso su cara.
Lo encontré en su dormitorio de espaldas a mí con un suéter enorme que le cubría hasta los muslos y le resbalaba por los hombros, podía ver tanto el inicio de los tatuajes como los huesos de la espalda, es lo mas hermoso que he visto desde mi existencia.
Pero algo anda mal.
—¿Jaejoong?— Salto sobre su sitio retiro algo de su cara , espero un par de segundos antes de hacerme frente y al fin se atrevió. Apenas y logro esbozar una sonrisa.
—Yunho me espantaste no te escuche entrar ¿Cuándo llegaste?— Maldigo mentalmente por décima ocasión en el día, mientras juguetea con sus pies, aprieta los puños y con su flequillo trata de ocultar los ojos llorosos.
Suspira y tuerce la boca.
Te deje solo y paso de nuevo.
—Perdóname — Le suplique con un nudo en la garganta Jijji escapo de mis brazos, Jaejoong negó con la cabeza dando un par de pasos hacia delante. Rasca sus brazos y se remanga. La piel se le empieza a pigmentar rojiza , lo esta conteniendo tanto que se le ha inflamado una vena en el cuello. Después me mira.
“Por supuesto que lo nuestro no es un error”… respondí a una pregunta muda.
— ¡No te quedes ahí parado entonces! —Extendió sus brazos y rompió en llanto, uno silencioso, uno que me hundió y me debilito mientras que su enardecido cuerpo me ahoga.
Cada gemido de él me esta destrozando. Así que empapo su hombro.
Pasaron un par de minutos antes de que recuperara el habla.
—Perdón — Solo atine a decir mientras trataba de sostenerme en pie.
—¡No es tu culpa, entiéndelo! — Grito y luego trato de calmarse , de tragarse todo esa impotencia.
No lo puedo ver a los ojos. Ya te he fallado varias veces.
—Mírame Yunho — Sostuvo mi renegada cabeza — ¡Hazlo por que esto solo nos hará mas fuertes!
Soy fanático de esa mirada energizante. Podría cometer cualquier locura o creer cualquier cosa si me la dice con tal determinación. Puedo sentir que nuestra sangre esta hirviendo y es debido a toda esa fuerza brotando de sus seguros ojos.
Eres un Ángel. No tienes por que pasar por esto.
Sigo pensando y diciendo que quiero lo mejor para ti .Aveces dudo si soy yo.
—S…Solo …— Balbuceé, esto es vergonzoso —Solo quiero que dejen de hacerte daño
—Soy un hombre fuerte —Sonrío limpiando sus mejillas con el antebrazo y retirando después las mías con sus pulgares. — Esta bien mientras llegues… —Acaricio mi barbilla
—Mientras me levantes después.— Le costo demasiado trabajo decir aquello esta nervioso.
—Avísame enseguida la próxima vez …—Le pedí besando sus pulgares que ascendieron juguetones. El se sorprendió parece haber olvidado la perseverancia de mis padres y después asintió y me apretujo con sus brazos.
Constantemente muestra lo fuerte que es por nuestra relación.
—Tuve miedo …— Le confesé. Se quedo quieto y aclaro su garganta
—No tienes por que nadie me convencerá jamas — Su rostro volvió al color natural y se colgó de mi cuello — Solo necesitan mas tiempo para entender.
Tenia los labios inflamados de tanto morderlos con sabor a cobre.
Cuando al fin logre besarlo mi jaqueca desapareció y todo a mi alrededor se desvaneció; olvide tiempo y espacio .
Se sintió casi como nuestro primer beso, una oleada de emociones que desesperaban por salir.
Fue un beso aborazado y húmedo que robo el aliento de ambos. Lo acerque mas a mi y él me alejo.
—No — Trago saliva—Podrían regresar lo mejor será que no pase nada …— Jaejoong retrocedió me robo el aliento y cubrió la cara con las palmas de sus manos. Luego acomodo su cabellera roja hacia atrás. Ambos con la respiración agitada yo aún sintiendo el rose de su cuerpo
—No me digas que no, no puedo parar. — Me acerque a él. Y él se escabullo me regalo una sonrisa vacía.
—De verdad no puedo — Titubeo
—No me importa si vienen y nos ven haciendo el amor — No era necesario pero subí la voz en muestra de mi frustración, me acerque a él e hizo lo mismo escapo.
—¡Pero a mi si! ¿Quieres parar? — Se sulfuro. Por supuesto todavía estaba con los nervios de punta.
—Ven acá —Lo lleve de la mano al armario. Se jaloneo.
—¿Qué estas haciendo? — Nos llevamos una chamarra una cobija y algo de ropa al azar.
Parece ser que capto rápido mi idea.
—¡¿A dónde, un Hotel , tu apartamento. No crees que es demasiado obvio Yunho?! —El se sonrojo al instante que me vio sonreír con picardía
—Yo estaba pensando en una gasolinera o al campo libre o en medio de la carretera.
—Maldición — Gruño.
—¿Qué?
—Por eso me encantas…
No entendi muy bien, pero yunho hiere mucho a jaejoong?
ResponderEliminar