-¡¡Una boda doble!!- gritó Jaejoong de repente, me mantuve sereno, no podía revelar realmente cuánto me dolía, Jaejoong me miró furioso.
-¿Jae Woong se casará con Yunho?- preguntó Hyun Joong observándonos.
Hace unas pocas semanas que comencé a “salir” con Jae Woong, por supuesto, el idiota está emocionado y derramando felicidad por todos lados, mientras que el otro idiota, me refiero a Hyun Joong, está sorprendido y en parte, “feliz por nosotros”…..y….la única persona que me importa de esta habitación, Jaejoong, se enfureció, exigió hablar conmigo, pero su padre lo ha mantenido ocupado y Jae Woong se empeña en alejarle, creo que lo entiendo, pero ahora, no será una boda la que se anuncie el día del compromiso, serán dos. ¿Cómo explicarle a Jaejoong que después de pocas semanas de salir con Jae Woong me casaré con él? ¿Cuánto tiempo salí con Jaejoong? ¿Meses? Sí, lo fueron, pero jamás mencionamos un matrimonio o algo parecido, nada.
-Sí, una boda doble, como dije- sonrió el señor Kim- Ya es hora de que mis dos hijos se casen- dijo sonriendo- y qué mejor momento que el mismo día, me estoy haciendo viejo, no quiero dejar a mis hijos solteros.
-¡¡Pero papá!!- dijo Jaejoong.
-¿Te molesta que se casen el mismo día?-preguntó su padre.
-A mí no me molesta- dijeron al unísono Hyun Joong y Jae Woong, claro que no va a molestarles.
-¿A ti te molesta, Yunho?- me preguntó el señor Kim sonriendo, Jaejoong me miró fijamente.
-No- dije con simpleza, me había dolido demasiado decir esa palabra.
-¿Ves? El único que se molesta eres tú, hijo- sonrió mientras se ponía de pie, ahora, si no les importa, tengo asuntos que arreglar con Hyun Joong y su padre- nos pusimos de pie mientras lo despedíamos.
Fuera de su estudio se creó una atmósfera pesada, una tensión que comenzaba a crecer, una tensión que estoy seguro, durará todo lo que duren nuestros matrimonios. Observamos al señor Kim y a Hyun Joong salir de la casa, suspiré cansado, mi vida se complicaba cada día más, Jaejoong chocó su hombro con el mío antes de desaparecer por el pasillo de su casa, no eres el único molesto y herido Jae, créeme.
-Bueno- sonrió Jae Woong- tengo que ir a la oficina, algunas sucursales tienen problemas ¿Quieres venir conmigo?
-No- dije cortante, que se acostumbre a eso.
-Ok, supongo que estás cansado- me dijo sin dejar de sonreír, realmente me preguntaba si era tonto o se hacía- ¿Te llevo a tu casa?
-Realmente esperas saber dónde vivo ¿Verdad?
-Por supuesto.
-Pues no, tengo trabajo que hacer- dije saliendo de la casa, con él a mi lado.
-Ya te dije que no necesitas trabajar, yo te daré todo lo que quieras.
-Y yo te dije que no soy el mantenido de nadie.
-Ahhh….-suspiró- Está bien, no me gusta que trabajes, pero si es lo que quieres hacer, hazlo, que sea como pasatiempo, no por necesidad, si quieres algo, pídemelo.
Rodé los ojos, él y su eterno “El dinero resuelve todo”, puede que sí, que haga la vida más fácil, pero no puede hacer que una persona te quiera, nunca. Al salir a la calle un auto estaba esperándolo, me miró una vez más.
-Puedo llevarte- insistió.
-Puedo caminar- dije evadiéndolo mientras daba vuelta, un ligero quejido salió de su boca, pero no insistió más, subió al auto y pasó a mi lado despidiéndose sonriendo, no le correspondí, nada de él me importa, puede sonar cruel, pero siempre he sido honesto, siempre le he dicho lo que siento con respecto a él.
Las calles de este lugar son….tan lindas y solitarias, personas con una excelente vida viven aquí, pero las casas hermosas no reflejan lo que dentro de ellas se vive, ahora lo sé, no todo lo que brilla es oro, me lo han dicho, y lo veo. ¿Cuántos padres manejarán a sus hijos con el dinero? ¿Cuántos matrimonios forzados y no tan forzados habrá? ¿Cuántos serán por interés? Ahora que lo pienso….¿Habrá incluso asesinatos entre familias? Supongo que sí, no todas, pero en alguna debe de haber. El rechinido de unos neumáticos captó mi atención, el auto había quedado frente a mí y de él, bajó Jaejoong, lo sabía, él haría algo como eso, está furioso, yo lo estoy, me quedé de pie observándolo acercarse a mí.
-Sube- me ordenó, tratando de mantener el tono de su voz.
Lo pensé un rato, si hablaba con él….no puedo decirle lo que pasa en mi vida, él tampoco lo ha hecho, no sé sus razones, pero no me deben importar, fue él quien le puso fin a esto, ahora, vivo para mi beneficio. Me mantuve sereno y con un porte firme mientras pasaba a su lado ignorándolo…para subirme al auto, cerré la puerta con fuerza, que se rompa, no me importa, Jaejoong subió haciendo lo mismo, aceleró al instante y salimos de aquél vecindario.
Jaejoong manejaba como bólido, pasando los altos, yendo en dirección contraria muchas veces, metiéndose entre camiones de gran magnitud….pero extrañamente, me sentía calmado, me sentía bien, libre.
-¿Quieres matarnos?- dije sonriendo.
-Lo estoy pensando- dijo un poco más calmado, sonriendo también- Sería la solución perfecta.
Asentí mientras miraba felizmente por la ventana, no me percaté del momento en que entramos en la autopista, no me importaba a dónde íbamos, incluso no me importaba morir ahora…porque moriría con él, moriría amándolo, moriría libre, sin estar atado a un destino que aborrezco….
-Y sería tan genial- dijo Jaejoong de repente sin dejar de sonreír.
Lo miré unos momentos, qué pasaba conmigo….qué pasaba con él….
-¿A dónde vamos?
-A ningún lugar en especial- dijo- Sólo daremos vueltas por ahí…
-Mmm…-asentí.
-¿Qué fue eso?
-¿Qué cosa?
-¿De verdad vas a casarte?
-¿Lo harás tú?- Jaejoong suspiró y apretó sus manos sobre el volante.
-¿Puedes explicarme qué pasa?
-¿Puedes tú?
-¡No me respondas con preguntas, Yunho!- dijo un poco más exasperado mientras se metía entre dos camiones.
-Al menos te respondo, tú jamás lo hiciste.
Cerró los ojos frustrado y aceleró un poco más, mientras más lo hacía, más calmado me sentía.
-Hay muchas cosas en el mundo que no puedes entender, Yunho. Especialmente si incluyen personas como mi familia y entorno.
-Aprendo rápido.
-Apuesto que sí- sonrió- pero no debes conocerlas….por tu propio bien.
-¿Cómo puedes saber si es o no por mi bien?
-¡Porque lo sé!
-Eso lo decido yo.
Volvió a resoplar molesto, incluso golpeó el volante con fuerza, lo he visto más enojado, eso quiere decir que realmente espera solucionar algo.
-Estoy pensando realmente matarnos aquí.
-Por mí está bien- respondí, Jaejoong rio divertido.
-¿Está bien?- asentí- ¿Qué pasará con tu novio?
-Puede casarse con el tuyo, después de todo, Hyun Joong quiere casarse con un Kim.
-Eso quiere….-sonrió.
El silencio reinó por varios minutos, ambos teníamos todo que decir, pero ninguno quería hablar, ninguno estaba dispuesto a sacar sus secretos.
-No te cases- dijo de pronto Jaejoong- Hablo en serio Yunho, no te cases…
-¿Qué? ¿Y ahora por qué me dices eso?
-Yunho, hay cosas que no puedo explicarte, cosas que de hacerlo…..por favor, confía en mí, no lo hagas, encontraré una solución, lo haré….dame tiempo…
-¿De qué hablas?
-Confía en mí, Yunho- dijo mirándome- Tiempo, es todo lo que pido, nada más.
Suspiré, algo le pasaba….pero algo me pasa también a mí, no puedo decirle, y parece que él tampoco.
-Me casaré- dijo- Pero eso no durará mucho, Yunho, te quiero, eso no ha cambiado en lo absoluto- me sentí feliz….y enojado- Fui honesto el día que te lo dije, por favor, no dudes de mis palabras- me pidió- Dame tiempo….
-¿Tiempo? ¿Para qué? ¿Para solucionar lo que sea que te esté pasando y divorciarte?- asintió- ¿Y cuánto supones que es eso? ¿Un mes? ¿Un año? ¿Toda la vida?
-Yunho, no….
-No me pidas que te espere Jaejoong, porque no lo haré, no si no me explicas nada de lo que te pasa, porque pareces no confiar en mí- ¿Acaso yo confiaba en él? Tampoco le decía lo que me pasaba.
-Escúchame…
-Esto no es un “Me voy al extranjero a estudiar o trabajar, espérame”, no lo es, así que no pretendas convertirlo en eso, esto es un “Me caso con otro y no te explico por qué”.
-Estás haciendo lo mismo.
-Pero no te estoy pidiendo que me esperes, no te pido nada….- me quedé en silencio unos segundos- Me dijiste….me presentaste a tu prometido…..¿Cómo consideras que me sentí en ese momento?
-Eso es…
-Y a pesar de todo….te deseé buena suerte, y lo hice sinceramente…..no te voy a negar que te odié por unos momentos, pero más que odiarte…han pasado muchas cosas, Jaejoong, y fuiste tú quien decidió que iríamos por caminos separados…
-Porque en verdad quería eso…al menos de momento, quería que no estuvieras involucrado…que estuvieras tranquilo, y cuando todo pasara, me humillaría para recuperarte….pero, de la nada, comienzas a salir con mi hermano….y ahora te casas….y no quieres explicarme nada.
-Técnicamente, tampoco lo has hecho.
-Yunho, si lo haces en venganza…si lo haces por mí…déjalo, no….
-Es por mí- dije, Jaejoong pareció dolido, pero se mantuvo sereno.
-No es por dinero, eso lo sé, porque no eres así- me dijo- Dame una razón- me quedé en silencio- Yunho, dime por….
Pero no terminó la frase, un camión nos embistió por la parte trasera del auto, haciéndonos girar varias veces, cuando por fin nos detuvimos abrí los ojos, el auto quedó de pie, pero severamente dañado, humo salía del cofre y algunos vidrios rotos estaban sobre nosotros, miré rápido a Jaejoong con el corazón en la garganta, un poco de sangre en su brazo, unas cortadas en el rostro y alguno que otro golpe, nada serio, al menos que yo viera, suspiré aliviado y dejé caer mi cabeza en el respaldo, nada me dolía, pero me encontraba casi en las mismas condiciones que Jaejoong, de repente, comenzó a reír.
-¿Qué es tan divertido?
-Ni para matarnos sirvo- dijo sin dejar de sonreír, parecía decepcionado, yo también lo estaba.
-Siempre te he dicho que eres un idiota.
-Lo soy.
Abrí la puerta del auto para bajar, aunque con esfuerzo ya que quedó destrozada y fuera de lugar, pero Jaejoong me detuvo, lo miré y él me sonrió.
-Todavía puede explotar- dijo.
-Sí, pero no planeo quedarme a averiguar- me bajé del auto y me dirigí a su lado para ayudarlo a bajar, él no dejó de sonreír. Nos alejamos un poco del auto, algunas personas comenzaron a acercarse a nosotros.
-¿Cómo explicaremos esto?
-¿De qué hablas?
-¿Le dirás a mi hermanito que estabas conmigo?
-Se lo dirás tú.
-¿Yo? ¿Por qué?
-Tengo la ligera sospecha que eso quieres- y es lo que yo quería.
-Mmmm, sí, eso quiero.
-¿Están bien?- preguntó un señor en cuanto llegó, asentí- Llamaré a una ambulancia….
Las personas nos observaban pero ninguna de ellas se acercó o algo parecido, en realidad, no quería que lo hicieran.
-¿Entonces?
-¿Qué?
-¿Te casarás?
**********************
Finalmente.
Hoy es el día.
Aquí estamos, en la gran reunión familiar, me sorprendía bastante cómo es que toda la familia Kim me había aceptado sin preámbulos en cuanto se dio el anuncio oficial, un motivo tendrán, o realmente son sus verdaderas intenciones, no lo sé, ahora, lo único que puedo pensar es en el anillo que reluce en la mano de Jaejoong…y el que reluce en la mía…anillos que no son pareja, anillos que no podrán llegar a ser compatibles….anillos de compromiso que jamás podrán ser iguales.
Jaejoong sonreía, pero yo sabía que no lo hacía, suspiraba cada que podía y miraba discretamente en mi dirección, me preguntaba día a día cómo habíamos llegado a esta estupidez, cómo de ser pareja pasamos a ser la de alguien más, pasamos a comprometernos con otra persona. La culpa la tenía el señor Kim, era un gran chantajista, él y nosotros, por no hablar de nuestros problemas….¡¡¡Es que ambos somos tan necios!!!
-¿Estás bien?- me preguntó seriamente Jae Woong, desde que estábamos juntos, jamás me dejaba solo, era desesperante, a cada segundo que pasaba, sentía que lo odiaba más, sobre todo después de enterarse que andaba con Jaejoong en su coche el día del accidente…justo después de rechazarlo a él.
Su actitud se volvió más posesiva y arrogante, me desesperaba demasiado, seguía empeñándose en ganarse mi atención, pero esta vez más seriamente, de una forma más agresiva, más hostil…como si fuera una amenaza o algo parecido, como si mi vida corriera peligro de no aceptarlo.
-Iré al baño- dije poniéndome de pie, él hizo el intento de seguirme, estaba a punto de exigirle que me dejara en paz cuando Hyun Sil, su tía abuela, habló.
-Jae Woong, querido, deja a Yunho en paz, todo el día has estado hostigándole- dijo, me quedé en mi sitio, un poco sorprendido, a decir verdad.
-¿Hostigándole? Es mi….
-Sé lo que es- dijo ella- pero estoy segura que sabes lo que es el espacio personal, dale un respiro, pareces perro faldero detrás de él- me agradaba, Hyun Sil era una de las pocas personas de la familia Kim que me habían caído bien- Yunho, cielo, ve tranquilo, yo controlo a la fiera aquí- me sonrió, sonreí de vuelta y salí lo más rápido que pude de ahí, alcanzando a escucharlos discutir.
La casa Kim siempre me ha parecido un museo, era de esos lugares en donde llegas, te sientas y no tocas nada, por fortuna para mí, era fácil hacerlo, me topé con algunos miembros de la familia en mi camino, me sonreían y continuaban su camino, todavía no puedo entender por qué tanta felicidad de que esté con Jae Woong, pero bueno, sus razones tendrán. Entré al baño y me mojé la cara, este ambiente comenzaba a sofocarme, quería volver a mi vida tranquila, quería volver muchos meses atrás, pero claro, todo lo que quiero es imposible y prohibido para mí, justo como…
-Jaejoong…-dije sorprendido, casi en un susurro cuando alcé la mirada y lo vi detrás de mí, él parecía nervioso, desvió la mirada y se acercó al lavamanos.
-Hola- susurró, abrió el grifo y se mojó la cara, parecía tan sofocado como yo.
¿Hace cuánto que no nos dirigimos la palabra? ¿Hace cuánto que no escuchaba su voz? ¿Hace cuánto que no lo tenía a mi lado, tan cerca? Demasiado, lo extrañaba, cada segundo que pasaba, cada respiro, cada parpadeo, cada todo, lo extrañaba demasiado, él suspiró y se incorporó, todavía sin verme, parecía querer decir algo, parecía desesperado, mi corazón latía fuertemente al tenerlo a mi lado, aunque sea por un momento, no podía pensar en nada más que en nosotros, nosotros y nuestro perfecto mundo. Suspiró, parecía más decidido a hablar, se giró hacia mí y me miró directamente a los ojos, por fin, iba a decirme qué le pasaba.
-Yunho, yo…
Lo besé, no me importaba lo que tuviera que decirme, sea lo que sea, que me lo diga después, ya no podía más, lo había extrañado mucho, lo extraño mucho, no iba a dejar que se fuera, no en este momento, no cuando necesito más fuerza para continuar con la farsa, lo tomé de la nuca y lo acerqué más a mí, él parecía sorprendido, pero no puso resistencia, se aferró a mi camisa y me devolvió el beso con la misma desesperación con la que yo se lo daba, me extrañaba, justo como yo. Lo pegué a la pared y me pegué lo más que pude a él, cuánto lo había extrañado, me abrazó por la cintura y subió la intensidad del beso; escuchamos voces a lo lejos, pero en lugar de separarnos y meditar sobre lo que habíamos hecho, nos aferramos más el uno al otro, pensando en lo que haríamos después.
********
-¿Has dormido con él?- me dijo Jaejoong de repente, dejé de abotonarme la camisa y me quedé congelado, qué clase de pregunta era esa.
-No- dije seriamente mientras me giraba hacia él, ya estaba vestido, limpiando su cara y arreglando su cabello un poco, un suspiro de alivio salió de sus labios, no pude evitar sentirme feliz de eso.- ¿Y tú?
-Ni en mil años- respondió sonriéndome- Te odio ¿Lo sabías?
-¿Eh?
-Desde que entraste a mi vida, nadie ha llamado mi atención, me siento tan dependiente de ti…es….- Sonreí y me acerqué a él, lo abracé fuertemente y él a mí.
-¿Cómo llegamos a esto?- susurré, él se aferró más a mí.
-Todo es mi culpa- dijo casi sollozando.
-Es culpa de los dos- dije- Pero, si le echamos la culpa a alguien, debe ser a ti- Jaejoong me golpeó en el pecho e hizo un puchero, sonreí- Es cierto que tal vez no fui muy claro contigo sobre lo que siento, pero nunca te presenté a un prometido.
-Tú eres el idiota- dijo sin quitar su puchero- ¿Por qué te comprometiste con Jae Woong?- dijo mirándome tristemente.
-¿Por qué lo hiciste tú? Ya pasamos por esta discusión, Jaejoong.
-Yo…pasó algo importante- dijo desviando la mirada.
-¿Más importante que yo?
-Lo es…-podía notar su voz de arrepentimiento, lo abracé de nuevo.
-No te reprocho nada- lo consolé, yo también había puesto otro asunto sobre él.
-Yo…Yunho, sé que te pedí que me esperaras, sé que te dije muchas cosas….estas semanas que hemos estado separados me han dado tiempo para pensar….y hoy, al ver esa horrenda cosa en tu mano…- dijo señalando el anillo-…he decidido decirte qué pasa- me miró seriamente- No te pido que me digas qué pasa contigo, si no quieres decírmelo, está bien, pero escúchame…y si aún después de oírme piensas que casarte es lo mejor…- desvió la mirada y apretó sus puños- Yo…yo te dejaré….- iba a responderle, parecía que había necesitado un poco de estrés y presión para ser sincero, supongo que yo también.
-Jaejoong….
-¡¡¡¡Yunho!!!!- un fuerte grito nos hizo separarnos al instante, Jae Woong había llegado al límite de su paciencia, ahora estaría furioso, o al menos ese grito en el pasillo me dio la impresión de eso.
Jaejoong me miró, no asustado, sino enojado y triste, nuestra burbuja se había roto por el idiota ese, le sonreí transmitiéndole confianza, lo abracé una última vez y me dirigí hacia la puerta.
-Quiero hablar contigo- me dijo con prisas, antes de que pudiera salir, yo también quería.
-Te veo donde siempre- sonreí- ¿Mañana?
-Hecho- sonrió.
Salí lo más tranquilo que pude del baño, en medio del enorme pasillo estaba Jae Woong dando vueltas buscando, apenas me vio caminó rápidamente hacia mí, sus pesados pasos me confirmaron su enojo.
-¡Se puede saber dónde estabas!- me dijo sosteniéndome fuertemente del brazo, sabía que quería gritar, pero en esa casa no se atrevía, no ahora.
-Te dije que iba al baño- dije con el mismo tono, soltándome de su agarre.
-¿Por media hora? ¿Con sudor en la cara?
-¿Qué acaso uno no puede estar estreñido y hacer esfuerzo?- Dios, qué cosa tan vergonzosa había dicho.
-¿Eh?
-Ahora resulta que no puedo enfermarme porque el señor se molesta- dije “ofendido” mientras me dirigía hacia el jardín de nuevo, con él siguiéndome, por suerte para mí mi estómago rugió en ese momento, pero de hambre, no he comido nada desde que me levanté.
-¿Te sientes bien? ¿Te llevo al médico?- su tono de voz había cambiado.
Rodé los ojos y lo ignoré llegando en poco tiempo a mi lugar, Hyun Sil me sonrió.
-¿Sucede algo, cariño? Quise detenerlo, pero ya sabes cómo es- me sonrió.
-Gracias…es sólo que…estoy un poco enfermo- mentí sobando mi estómago, me dolía, lo único que había en él era un vaso de agua y….cierta sustancia que había pertenecido a Jaejoong…pero de ahí en fuera nada.
-Oh, cielo, come esto, te hará bien- Hyun Sil me acercó un plato con algunas verduras y un jugo, le sonreí y comí despacio, con Jae Woong observándome todo el tiempo.
Como cuarenta minutos después Jaejoong hizo acto de presencia en el lugar, me pregunté qué había hecho tanto tiempo, pero esta es su casa original, seguro se encerró en su habitación un rato, vaya, veo que tiene algo de cerebro después de todo, miró hacia nosotros discretamente, pude ver felicidad en todo su rostro.
-Tienes mejor semblante, hijo- me sonrió Hyun Sil.
-Me siento mejor- Y sí, me sentía mucho mejor.
-Nos vamos- Jae Woong se puso de pie y me levantó junto con él, pero su mirada se posaba en Jaejoong, quien nos daba la espalda en ese momento.
-Pero, Jae Woong, es tu fiestas y aún es temprano….
-Lo siento, Hyun Sil- dijo cortándola- Tenemos cosas que hacer.
Y sin dar tiempo a nada más, nos sacó del lugar, durante el camino no nos dirigimos la palabra, por mí estaba bien, ya que mi mente estaba en esos minutos de felicidad en mi vida.
-Estás muy feliz- dijo seriamente- ¿Algo de lo que deba enterarme?
-Sí, que eres un idiota- dije sin mirarlo, pero con la felicidad sobre mi rostro.
-Hablo en serio, Yunho- dijo, hubo un ligero sonido cuando apretó con sus manos el volante.
-¿Qué quieres que te diga?- Dije rodando los ojos, él me miró amenazadoramente, no le respondí, él quiso insistir, pero obviamente sabía que no le diría nada.
-Lo que sea que esté pasando.
-¿Acaso no entiendes que no me siento bien?- ahora era verdad, estaba un poco mareado.
-Lo sé, pero algo más pasa- dijo.
-¿Tanto quieres saber?- dije molesto- ¡¡Bien!! Estaba en el baño cuando Jaejoong llegó, nos besamos y tuvimos un rápido hasta que llegaste ¿Contento?
-Estoy hablando en serio, Yunho- me dijo serio- Y no me gustan tus comentarios estúpidos e incoherentes, eso ya lo sabes.
Conste, que quede registrado que dije la verdad y no me creyó, hemos comprobado una vez más su nivel de idiotez.
-¿Puedes parar un momento?- le dije, él me miró enojado.
-¿Por qué?
-Sólo hazlo- Se detuvo sin reprochar, apenas lo hizo abrí la puerta con prisas y volví el estómago.
-¡¡Yunho!!- Jae Woong se bajó del auto y comenzó a frotarme la espalda, me sentía mal y no hice nada por apartarlo- ¿Estás bien? ¿Qué hago?
-Primero, podrías dejar de molestarme con preguntas tontas.
-Sí, lo siento- dijo preocupado.
-Me refiero a tu actitud con todo lo que pasa en mi vida.
-Sí…sí….
-Y también…-pero no terminé la frase, mi cara no dejó de mirar al suelo por un largo rato, él sólo me frotaba la espalda y me sostenía para no caer.
-¿Vamos al hospital?
-No- dije seriamente.
Jae Wong asintió y esperó a que me pusiera estable, apenas lo hice lo aparté de mi lado y me acomodé en el asiento tratando de normalizar mi respiración, el aire frío llegó a mis mejillas, ya estaba anocheciendo, me pregunté por qué de pronto el mareo y las náuseas, no creo que haya sido Jaejoong, ya…oh…qué pena decirlo, pero, ya estoy acostumbrado a todo lo que viene de él así que……¡¡¡El punto es que no fue él!!!
-¿Yunho?
Miré a Jae Wong, creo que fue él, sí, debió ser su cara y su sola presencia.
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owch yunho se empacho de jae por comérselo taaaaaaaaaaaaaaaaan rápido ya bes se come despacio y sin prisas para que le sepa mejor y no le haga daño JA JA
ResponderEliminarcual es el misterio?? Jae Wong,lo arruino, ahora tengo q esperar el proximo capituloo, xfavo no demores..........gracias
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