EL Vino de la Pasión cap 4

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- Jajajaja, ya se, te asuste pequeño jajaja pero no me negaras que lo disfrutaste…oh ya entiendo, piensas que soy una clase de vampiro sexy verdad, jajajaja.

- ò///ó Tonto, como voy a pensar eso, es que creí que te querías comer mi boca.

- Eso es precisamente lo que quiero

YunHo se abalanzo de nueva cuenta a los labios del menor casi salvajemente, le necesitaba, esos tres meses en América fueron una tortura, cada noche soñaba con volver a tocar esa exquisita piel, sentirle temblar con cada toque, escucharle gemir bajo su cuerpo, quería sentirlo ya, Ming trataba de corresponderle lo mas que podía, la habilidosa lengua del mayor lo dejaba atrás tomando el control de aquel asfixiante beso, paso a paso comenzó a dirigirlo a la cama hasta que Max quedo sentado sobre esta, YunHo busco rápido la manera de deshacerse de los estorbos que le impedían tocar la delicada piel de su ahora amante, sin más, arranco la camisa del pequeño en un acto desesperado, Ming le alejo un poco cortando el beso.

- Que pasa pequeño.

- Es que…en serio lo haremos…y aquí…yo…y si alguien nos...


- Umm…ya veo, acaso prefieres en el corredor o el jardín es mejor, por mi no hay problema, siempre quise hacerlo al aire libre, anda vamos n_n


Hizo ademan de levantarlo


- ò////ó NO yo no dije eso…yo…ERES UN PERVERTIDO!!! Y exhibicionista… como que al aire libre!!!.


- no finjas que no te gusta mi “pequeño pervertido” ¬_¬*


U-know hizo énfasis en esas últimas dos palabras, consiguiente un lindo sonrojo acompañado de una protesta.


- pequeño…pervertido…si tú eres el uni…


un nuevo beso invadió su boca, sintiendo como su cuerpo era recostado, sus quejas fueron cayadas tan fácilmente, y era obvio, pervertido a o no lo amaba, solo que los nervios comenzaban a invadirle, y si hacía algo mal? sus caricias comenzaron a volverse torpes, YunHo sintió como el pequeño se tensaba con cada avance, comenzó esparcir caricias por todo su abdomen y pecho, tomo entre sus dedos los rozados botones que se exponían tan deliciosamente, acerco su boca a uno mientras comenzaba a pellizcar el otro, las caricias pasaron de lentas a rápidas, cada rocé se hacía más fuerte y la tortura era mucha, tantas sensaciones se arremolinaban en la castaña cabeza del menor, sensaciones que no entendía, su respiración comenzó a volverse agitada, los suspiros se volvieron rápidamente en gemidos, pero que era esto, cuando estaba con Jae nunca se sintió así, su única tarea era complacerle, exactamente con YunHo pasaba lo mismo, era más dolor que placer, solo se preocupaban por si mismos encerrados los tres en esas cuatro paredes, pero ahora, estando en las mismas condiciones, el mayor era tan diferente con él, sus caricias eran más “agradables”

Su respiración se detuvo por unos instantes cuando la mano de U-know acaricio su vientre bajo trazando figuras sobre este, Ming comenzó a sentir una sensación extraña que bajaba desde su pecho hasta su entrepierna, acaso así se sentía estar excitado, tan placentera sensación nunca fue descubierta por él hasta ese momento, se sintió como todo un viejo pervertido, trato de controlar sus nervios, no podía creer que ese pensamiento haya cruzado por su cabeza, YunHo al notar la reacción de su ángel acaricio su mejilla mientras le obligaba a mirarle.

- Pareces un viejo pervertido, que tanto fantaseabas eh ¬o¬*

- O////O yo…yo…

- Lo sabía!!!, eres un pequeño p-e-r-v-e-r-t-i-d-o ¬_¬*

No podía defenderse, le había descubierto, es que aparte de guapo leía la mente, Max solo se limito a sonreírle que mas podía hacer, tal vez si era un pequeño pervertido y aunque la vergüenza era mucha, trato ahora de iniciar el contacto, dirigió su mano al pecho del mayor tratando de desabrochar la camisa dejando expuesta a esa blanquecina piel, tan perfecto pensaba Max, inconscientemente acerco sus labios a esta y deposito pequeños besitos sintiendo como un fuerte olor a uvas dulces inundaba sus sentidos, tan delicioso aroma recordaba haberlo sentido antes, era una dulce fragancia, era…los mayores le llamaban “vino” sí, no podía estar equivocado, unas cuantas veces pudo observar como se lo servían a sus amos en los días especiales, (solo ocasiones especiales por qué recordemos que el vino es poco conocido =D) siempre tuvo la inquietud de saber cómo se sentía beber de ese embriagante licor, Jae le decía que era un suave pero intenso sabor, consistente, se sentía como resbalaba por tu garganta dejándote extasiado con tan sofisticado sabor, aspiro un poco mas sintiendo como el cuerpo de U-know se estremecía, sin saber por qué su lengua comenzó a lamer dicha zona, U-know se sintió tan excitado al sentir la temblorosa lengua de Ming paseándose por todo su pecho, ya no pudo mas, su autocontrol se acabo, ya quería sentirlo, volvió a recostar a Max mientras le besaba con desespero, sin esperar un segundo más despojo al pequeño de los estorbos que aun quedaban y el mismo se libero de esas cadenas de tela, Ming sintió un poco de temor, YunHo al notar esto se detuvo un momento, tratando de contenerse el mismo y darle un poco de tranquilidad al pequeño.

- Me excitas. (no creo que con eso se tranquilice ¬ .¬#)


- O/////O?


- Déjame sentirte mas, déjame pegarme más a tu cuerpo, por favor…déjame hacerte el amor.

- Tonto, no tienes que pedir permiso, este cuerpo y este corazón ya son tuyos, no te detengas mi adorable pervertido.

YunHo se sintió tan feliz, su niño en verdad lo amaba y se le estaba entregando de una manera tan sincera, antes de continuar le abrazó fuertemente, por fin, solo para él, sin necesidad de compartirlo, sin necesidad de ver otro par de manos acariciar lo que ya es suyo, su amor, su ángel, su pequeño pervertido estaba ahí enteramente para él.

- Definitivamente los ángeles existen.

- Tonto… solo continua... u////u

- Aunque este ángel posiblemente sea un sexy demonio disfrazado. ¬_¬*

- ÒWÓ

Antes de quejarse se fundieron en un apasionado beso.

*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

- Donde esta YunHo

- Está hospedado en la última habitación del tercer piso.

- Y esta solo…

- No…

Hero corrió lo más rápido que pudo, el miedo comenzaba a invadirle, solo esperaba que sus pensamientos estuvieran equivocados y que lo que encontrara en esa habitación no le destrozara el corazón.

A cada paso que daba sentía que su corazón se estrujaba, acaso sus temores serían acertados, no, no podía ser, Chan Ming nunca le traicionaría, era cierto que no tenía plena confianza en el mayor, pero el pequeño sin duda alguna era diferente, nunca le había fallado, además conocía sus sentimientos hacía él, pero que era esa molesta punzada que provenía de su pecho.

Solo bastaron minutos para llegar al tercer piso, sus pisadas comenzaron a volverse pesadas, no quería llegar y ver como las dos personas que mas amaba le traicionaban, de repente se detuvo de golpe, sus ojos se llenaron de lagrimas y una rabia descomunal se dejaba ver en todo su rostro, apretó los puños con tal fuerza que sus nudillos adquirieron un color blanquecino, sin duda alguna lo que estaba tras esa puerta era la cruel verdad, el inconfundible sonido de la traición se dejaba escuchar tan claramente.

- Aahh!!...ahh...ahhh…Yu…Yun…YunHo…te amo…te amo...te amo aahhh!!!

- Ahhh!!! ahhh yo también pequeño…perve…ahh!!!

Hero ya no lo soporto mas, la ira comenzó a acumularse, ya no le importaba nada, llegaría ahí y detendría eso a como diera lugar:

Solo se burlaron de mi, maldición!!!

Toco enérgicamente lastimándose en el acto, pero sin obtener respuesta, busco entre los bolsillos una llave, al parecer una réplica de la llave maestra de la casa y rápido la introdujo, sin perder tiempo giro la perilla y lo que encontró sin duda alguna era lo que había temido, como odiaba tener la razón en momentos donde solo hubiera querido estar equivocado, YunHo y Ming se detuvieron al escuchar el estruendo proveniente de la puerta, sus mirada se centraban en esa figura tan conocida por ellos, la tensión invadió la habitación casi asfixiándolos por toda la ola de sentimientos que estaban a punto de estallar, Hero les encaro apuñalándolos con la mirada.

- Son unos…como se atrevieron, FUERA DE AQUÍ!!!

*~*~*~*~*~*~*~*~*Momentos antes en la habitación*~*~*~*~*~*~*~*~*

La cama comenzaba a moverse, las embestidas eran cada vez más fuertes, fundiéndose en cuerpo y alma, una deliciosa música inundaba la habitación, sus respiraciones y gemidos iban en aumento, se devoraban con la boca sentían que pronto terminarían, Ming se aferro un poco mas sintiendo una intensa oleada de placer mientras pequeñas gotas de sudor resalaban por todo su cuerpo, un intenso calor clamaba por ser apagado.

- Aahh!!...ahh…ahhh…Yu…Yun…YunHo...te amo…te amo...te amo aahhh!!!

- Ahhh!!! ahhh yo también pequeño...perve…ahh!!!

El ritmo era incontenible, tan sumidos estaban en su burbuja de placer que no se dieron cuenta de la jugada que les tenía preparado el destino; Uno, dos tres golpeteos volvieron en si a Max.
- Ahha…ahh…ahhh espera…espera YunHo…detente un momento si… alguien… AAAAHHH!!!

- No…no ah…no me detengas...ahhh… ahora solo importas tu y yo…ah ah ah!!!

La puerta se abrió, Max y YunHo quedaron petrificados mirando hacía el umbral, una figura se dejo ver por esta, el temor, el engaño, la desilusión, la confrontación, tantos y tantos sentimientos comenzaban a reunirse, que hacer, es definitivo, sin duda alguna no puedes huir de lo inevitable
- Son unos…como se atrevieron, FUERA DE AQUÍ!!!

Los dos cuerpos sobre la cama se tensaron, Ming comenzó a llorar, se sentía tan mal, YunHo lo noto y rápido envolvió a Ming en una sabana mientras le abrazaba.
- Primo por favor tranquilízate, esto no es necesario.

- Que me tranquilice, tú…maldito, TE ODIO!!!, dijiste que me amabas, me engañaste y jugaste conmigo

- Yo nunca te engañe, desde un principio te aclare que sentía algo por Chan Ming, y ese algo se convirtió en amor, no era un capricho mas, tu solo sabes reclamar, nunca te fijas en los sentimientos de las personas, solo te importa tú y mas tú como querías que me enamorara de ti.

- Cállate, ya no quiero escucharte!!! Yo en verdad te amaba, eres tu el que no entendía.

- Mentiroso, tú no sabes amar.

Jae quedo en silencio por un momento, acaso esa era la realidad, tú no sabes amar las palabras de U-know comenzaban a girar en su cabeza, un gran nudo se formo en su garganta, a Jae en realidad no le importaba si se habían acostado, lo que en verdad le dolía eran las mentiras “disfrazadas” quizá pudo decirlo y defenderse pero eso no importaba ya, solo quería que todo terminara, inmediatamente giro su vista hacía Ming, su traición lo había dañado más profundo de lo que había esperado.
- Y tú…tienes algo que decirme, sin duda alguna eres el peor, en verdad llegue a pensar que me amabas, que idiota fui, ese teatro de las rosas no fue más que un engaño.

- No, no es cierto, yo en verdad…mis sentimientos eran sinceros, y al principio tú eras el único, solo que me di cuenta que lo que siento es mas como un amor fraternal, te admiraba, eras tan hermoso e inteligente que yo…estaba confundido con todo lo que sentía y al final lo comprendí, ya no podía engañarme, perdóname, yo no quería que te enteraras de esta manera…lo siento.

- Ya no me importa lo que sientas.

- Perdón…sé que no tengo excusa, lo mejor es que me vaya, pero…la verdad es que yo no quiero separarme de ti y no quiero dejar de amar a YunHo, por favor Jae.

Hero camino hacía a la cama pausadamente, se acerco un poco mientras tomaba la barbilla de Ming, sus ojos comenzaban a llorar inmediatamente al contacto, le miro unos segundos más, no podía hacer nada, el pequeño no mentía, decía la verdad y no podía correrlo, mucho menos separarlo de YunHo, trato de acomodar sus ideas, no podía descargarse con el pequeño por qué no era su culpa, todo era culpa de YunHo, por lo menos eso fue lo que logro entender, seguramente lo había engañado y ahora estaba prendado de él, sí, todo era la culpa de su lujurioso primo, sin más se acerco a Ming hasta que sus labios se tocaron, lo estaba besando ante la atónita mirada de YunHo, Ming no comprendía nada, acepto aquel beso, se sentía tan cálido, tan inocente, un mar de intensos sentimientos, quizás…se estaba despidiendo, no, no quería eso, no podía ser así, Jae se separo mientras acariciaba sus castaños cabellos.
- Mi adorado Ming, no te preocupes, no te despediré y podrás estar al lado de mi prim...de YunHo, solo…ya no te preocupes, recuerda que me gustas más cuando sonríes…

- Jae…es enserió, soy tan feliz pero….

- Pero nada, prométeme que no volverás a llorar.

- Está bien ^_^

- En cuanto a ti.

Jae golpeo fuertemente a YunHo, la fuerza fue tal que cayó de la cama, Ming se alarmo eh inmediatamente fue en el auxilio de su amado.

- No te separare de YunHo por qué yo seré quien me vaya, cuídate mucho pequeño, adiós…

Jae salió lo más rápido que pudo de la habitación, puso llave al salir por qué seguramente trataría de detenerle y ya no quería, tenía tantas ganas de llorar, sentía un terrible dolor en el pecho, sin duda alguna su corazón se había roto, pero, ya no mas lagrimas, con paso firme fue directo al despacho de su padre, azoto la puerta y le encaro.
- Ahora mismo nos vamos a Francia!!!.

- Que dices…

- Lo que escuchaste, si no es hoy no será nunca, tú decides.

- Por supuesto que nos iremos hoy pero tengo curiosidad…que te hizo cambiar de parecer.

- No es de tu incumbencia, me retiro padre te veo en media hora en la entrada.

- Te aseguro que no te arrepentirás.



*~*~*~*~*~*Ese mismo instante en Francia.*~*~*~*~*~*


La luz de una habitación se dejaba ver en lo alto de una gran mansión, un joven se encontraba sentado en el ventanal mientras degustaba su tercera copa de vino, su semblante era serio, antes de dar otro sorbo miro el contenido por un largo rato, contemplaba melancólico el reflejo de la luna en el elixir que estaba a punto de beber, perdiéndose en sus pensamientos.

Xiah…

Siempre era lo mismo, cada noche se perdía en el recuerdo de su único amor, pero que podía hacer, no podría cambiar sus sentimientos por más que intentara, su vida siempre estaría ligada a él y al vino que era su único consuelo, pero para su desgracia también era su perdición.

“Yoochun…sabías que el vino es una bebida que hace despertar tus sentidos, te encapsula en un trance maravilloso, te hace sentir vivo, como si pudieras ver, oír, escuchar, sentir a través de él”

- Como podría olvidarlo Xiah si estos tres malditos años me han hecho sentirte, olerte, acariciarte, desearte como nunca antes, cada vez que bebo una copa de vino puedo recordar tus apetitosos labios, el liquido comienza a deslizarse por mi garganta, tan delicado, tan sutil, tan delicioso, recordándome tus manos, esas caricias tan suaves…tu cuerpo, que sabor tan embriagante, tú eras mi perdición, y aun ahora aunque no estés conmigo solo basta una copa de vino … y me puedo sentir cerca de ti…

Las lágrimas no se dejaron esperar, cada noche recordándolo, viviendo en el pasado, tratando de rescatar los recuerdos que aun se mantenían frescos en su menoría.

El evidente enojo hizo que el contenido se derramara, los cristales comenzaron a incrustarse en la delicada piel mientras unos cuantos se precipitaban al piso, el vital líquido salía a raudales, un escozor se hacía presente, pero que importaba ya, si su amado Junsu ya no estaba a su lado.

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