Blind - Cap. 31

“Es…” trató de hacer alguna broma para deshacerse de la incomodidad, pero no pudo pensar en nada que decir.

“Feliz aniversario de dos meses, Yoochun,” murmuró Junsu una vez más antes de depositar un beso en la mejilla derecha de su novio.

Los ojos de Yoochun se abrieron de par en par. Junsu no pudo verlo porque Yoochun estaba sentado con su espalda recargada en el pecho de Junsu.

Yoochun sintió como los brazos de Junsu se apretaban más alrededor de su cadera y no sabía qué pensar. ¿Qué significaba esto?, se sentía tan confundido.

Entones escuchó una pequeña risita y se preguntó si estaba alucinando. Yoochun se desenredó de los brazos de Junsu para poder voltearse y estar frente a frente del hombre. “¿de qué te ríes?”

“¿Recuerdas aquella vez en la isla…?”

[F.l.a.s.h.b.a.c.k]

“¡Ese fue un desayuno asqueroso!” El Sr. Kim exclamó mientras se dirigía hacia la sala de estar.

“¿Por lo menos probaste algo?” replicó Yoochun. Ese había sido un error ya que podía ver como el humo salía de las orejas de su jefe.

“Tú…” El Sr. Kim comenzó mientras daba unos cuantos grandes pasos hacia adelante. Yoochun silenciosamente aduló al Sr. Kim por ser capaz de seguir su voz mientras caminaba hacia su amo de llaves.

Por lo menos sus oídos eran buenos.

“¡Espera, el piso está mojado!”

Muy tarde, porque el Sr. Kim gritó una maldición antes de resbalarse hacia Yoochun en el piso mojado.

Yoochun rápidamente tiró el trapeador y corrió a atrapar al hombre ciego antes de que cayera. Desafortunadamente, Yoochun se resbaló y los dos chocaron; pecho con pecho, frente con frente.

Yoochun cayó de espaldas sosteniendo al Sr. Kim del frente de la camisa. Segundos más tarde, estaba tumbado sobre su espalda mientras veía con los ojos muy abiertos al otro hombre cayendo sobre él.

La escena apareció en su mente como una escena de película, ¡esa donde sus labios se encontrarían cuando una pareja se tropieza y cae uno encima del otro!

Yoochun jadeó y rápidamente volteó su rostro para que sus labios no se encontraran con los del Sr. Kim. Desafortunadamente, estaba demasiado asustado para pensar y había volteado el rostro hacia la derecha. Esos gruesos labios encontraron la cicatriz en su mejilla derecha.

Yoochun se congeló y olvido como respirar.

El Sr. Kim alzó la cabeza un poco y sus labios se encontraron solo a centímetros de la mejilla de Yoochun.

Su famoso ceño fruncido reapareció. “¿no besé tus labios, o sí?”

“No” Yoochun murmuró, no sabía que podía alcanzar notas tan altas.

[E.n.d.F.l.a.s.h.b.a.c.k]

Yoochun sonrió, “Claro ¿Cómo puedo olvidarlo?”

“Nuestro primer besos sucedió ese día también.”

Yoochun sonrió, se giró una vez más para que su espalda descansara en el pecho de Junsu. De pronto no sintió la necesidad de seguir confundido.

Eso era lo que había estado esperando y cuando había llegado se había quedado un poco sorprendido.

Pero ya se estaba acostumbrando a ello.

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“Necesito entregarle este documento al Sr. Kim,” Yoochun informó a la recepcionista. Ella le dedicó una mirada extraña ya que estaba usando un sombrero y una mascarilla.

Entonces vio entrar a un importante (rico y guapo) cliente en la oficina y dijo a Yoochun que fuera a la oficina del Sr. Kim por su propia cuenta.

Yoochun giró los ojos a la mujer y siguió su camino para encontrar a Junsu. Dudó al principio, asustado de que alguien viera su rostro. Era un mal momento para que Junsu hubiera dejado un importante archivo en la casa de Yoochun y los otros cuatro estaban demasiado ocupados para ayudar a Yoochun a entregarle el documento Junsu.

Apretó su sombrero un poco más contra su cabeza y se aseguró de que su mascarilla estuviera en el lugar correcto.

Todos los demás estaban demasiado ocupados para darse cuenta.

“Discúlpeme, tengo un documento para el Sr. Kim” Yoochun trató de hablar a la persona más cercana de la entrada.

“Estoy ocupado, ve a preguntarle a su secretaria. Ella está por allá,” la persona lo corrió sin siquiera quitar la vista de la pila de papeles.

Yoochun entendió que estaba ocupado y caminó hacia donde estaba la secretaria. “discúlpeme, tengo un…”

“Tome asiento y espere, estaré con usted en un minuto,” le dijo la secretaria antes de salir corriendo con una pila de folders en las manos.

El bullicio de la oficina continuaba en cada sección del lugar y Yoochun seguía sin encontrar a alguien que lo ayudara. Así que fue a buscar la oficina que tuviera en nombre de Junsu pegado a la puerta.

Antes de que pudiera por lo menos tocar, la puerta se abrió y Junsu salió casi chocando con él.

“¿Yoochun?” Junsu miró a su enmascarado novio con los ojos muy abiertos.

“Olvidaste esto,” Yoochun sacó el documento.

“¡Gracias a dios! ¡Todos estábamos volviéndonos locos tratando de encontrarlo!” Junsu tomó el documento y pasó junto a Yoochu para darle el documento a su secretaria, entonces dejó que su equipo se ocupara de lo demás. El bullicio parecía haber cesado y todos parecían aliviados.

“Todo estará arreglado para las 3:30” informó su secretaria.

“¡Este contrato será nuestro de seguro!” otro aplaudió.

“Todos han trabajado muy duro para este proyecto, los invito a todos a cenar en el buffer esta noche,” Junsu sonrió. Todos celebraron.

Yoochun se quedó parado, solo, en la puerta y se sintió tan orgulloso. Entonces recordó que él de verdad no debería de estar ahí, así que silenciosamente rodeó los escritorios y salió del lugar.

“Yoochun, debes de venir…” Junsu dejó de hablar cuando volteó para encontrar a su novio perdido.

“¿A dónde se fue?”

“Lo vi caminar detrás de su espalda, ¿Quién es él, jefe?”

Junsu se sintió culpable una vez más. Yoochun se había ido en un apuro porque no sentía que perteneciera ahí. Pero entonces, Junsu siempre había sido demasiado estúpido para decirle a Yoochun que se equivocaba acerca de ello.

“¿Jefe?”

Junsu se dio la vuelta para encarar a sus empleados. Con una sonrisa orgullosa, informó, “El es mi novio.”

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“¿Qué?”

“¡Vamos!”

“¡No!”

“¿Por qué no?”

“¿Por qué lo haría?”

“¡Porque estoy invitando a todos a cenar por su duro trabajo! Tú nos ayudaste a conseguir este contrato millonario ¡así que tú también tienes que venir!”

“Pero Junsu, no quiero forzarte…”

“No me estás forzando, Yo me estoy forzando a mí miso. Tengo que hacer esto. Este es el único obstáculo en mi camino y tengo que superarlo. No tengo ninguna otra opción. ¡Perderte NO es una opción! Tú me has esperado por dos meses. Es tiempo de hacer algo para regresarte todo lo que has hecho.”

Yoochun bajó la mirada, con una mirada preocupada, de verdad quería que esto sucediera, pero al mismo tiempo, no quería que Junsu lo hiciera.

Pero sabía que a menos que resolvieran esto, siempre habría un sentimiento de engaño, desconfianza, sospecha; una dolorosa brecha entre los dos.

“¿Tienes miedo de lo que pueda suceder?” Junsu se acercó para tomar ambas manos de Yoochun.

“Si, lo estoy” Yoochun respondió sinceramente, no queriendo ver a Junsu a los ojos.

“No tengas miedo. Confía en que puedo hacer esto. Yoochun, mírame” Junsu sonrió “mira el lado bueno, no se sentirá como si me estuviera forzando porque tú estarás ahí a mi lado. Me da más miedo perderte que cualquier otra cosa.”

Yoochun sintió como sus ojos se humedecían y silenciosamente se dijo a su mismo que no fuera tan cobarde. “Okay” asintió con una sonrisa.

Junsu sonrió una vez más, suspirando aliviado. “entonces ve a cambiarte. Tenemos tiempo suficiente para detenernos a que te corten el cabello antes de llegar al restaurante.”

“¿Un corte de cabello?”

“Cariño, si no te cortan el cabello, todo el mundo pensará que soy heterosexual,” Bromeó Junsu mientras jugaba con el largo cabello de Yoochun.

Yoochun rio, porque Junsu dependía en la risa de Yoochun (en la fuerza de Yoochun) para él poder ser fuerte.

Estaba jugando y bromeando, pero Yoochun sabía que aún había un ligero rastro de duda en sus ojos. Pero eso estaba bien, porque era muy poco; al menos era menos que antes…
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:3
**Ahora la traductora se queda sin palabras porque es la cosa más bella que he leído de esta historia  :D  <.3 gracias por seguir la historia y no se pierdan los últimos capítulos .

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