Just Married - Prólogo

“Cada vez que suspiras dejas ir un poco de tu felicidad”

Todo empezó la noche de bodas de Kim JunSu y Park YooChun, si así es, estos dos chicos se habían casado.

JunSu estaba cansado, esa boda había sido...hmmm como podría decirlo... ¿rara?

Se sentó en la cama tan pronto como entró a la habitación, tembló con solo pensar en lo que los invitados de la boda pensaban que iba a pasar esa noche en esa habitación, bueno hasta él lo había pensado, claro si es que fueran una pareja normal, pero eso no era así, ellos no eran una pareja normal, mucho menos se habían casado enamorados esa era la realidad y por mucho que Park YooChun quisiera llevar a cabo la noche de bodas él ni siquiera lo dejaría acercarse, porque tendrían que hacerlo si ni siquiera lo amaba...

Park YooChun tenía tremendo dolor de cabeza, soportar a tanta gente que le felicitaba y otros chicos que se acercaban diciéndole que se había casado con un chico hermoso y que si se atrevía a hacerle daño lo golpearían hasta que no pudiera mover un solo músculo, tal vez admiradores del mocoso que ahora tenía como esposo, el cual ahora se encontraba sentado en la cama, tal vez esperando a que él lo tocará, pero no, él no quería hacerlo con ese chico o claro que no, si es que eso era lo que quería se quedaría con las ganas.

YooChun se acercó a la cama dispuesto a tomar el maletín que estaba a lado de está, si, se iba a poner a trabajar, incluso en esa noche que para él no era nada especial, se acomodó en el escritorio y prendió su laptop.

JunSu se levantó de la cama, tomó la perilla de la puerta, pero antes de abrirla se giró hacia donde estaba YooChun.

- Sabes Park YooChun eres un idiota aburrido, incluso en este día deberías de dejar el trabajo e ir a beber conmigo para por lo menos ahogar nuestras penas en alcohol.

Diciendo esto, salió de la habitación dejando a un YooChun con la boca abierta, le habían dicho idiota aburrido y en su propia cara, vamos sabía que muchos lo decían a sus espaldas pero jamás pensó que alguien se lo diría así tan de frente y a la ligera, ese chiquillo no sabía lo que era el respeto.

JunSu se dirigió al bar del hotel, quería por lo menos distraerse, no era buen bebedor ya que incluso se podría emborrachar con algo que solo tenga un 3% de alcohol, pero hoy ameritaba una borrachera, solo había pedido la copa con menos alcohol que hubiera, se permitió pensar en cómo habían llegado a esto.

Su abuelo y el abuelo de ese Park YooChun había dicho que su compromiso debía de llevarse a cabo, para que Park pudiera tomar la presidencia de su empresa, pero eso no tenía importancia para él, no, lo importante era lo que había hecho su abuelo, él había dicho que si no se casaba con Park YooChun se quedaría sin herencia bueno eso no era relevante, ya que él podía mantenerse por sí solo, sino que aparte de quedarse sin herencia, todo pasaría a manos de Lee su más odiado primo, y entre esas cosas estaba la fundación la cual, Lee la haría desaparecer en menos de una semana, y eso él no lo podía permitir, no podía dejar a familias enteras desprotegidas, no, así que por eso se había casado con Park, el cual ni siquiera conocía hasta hace apenas unas 72 horas, la boda había sido organizada lo más rápido y ni siquiera la prensa se había enterado.

Suspiro ante sus propios pensamientos.

- Cada vez que suspiras dejas ir un poco de felicidad- Se acercó un chico alto y muy bien parecido.

- Hmmm creo que mi felicidad se ha ido por completo a partir de hoy, así que, qué más da.

- Uy problemas de amor...

- No... Estaría feliz si fuera por eso...

- Te invito una copa para que ese "problemita" pueda desaparecer por un momento.

- Ok te la acepto... por cierto mi nombre es JunSu, Kim JunSu

- Mucho gusto JunSu, soy Shim ChangMin.

Y así comenzó la plática, JunSu ya estaba más que mareado, y eso que apenas llevaba una copa.

- No eres un buen bebedor ¿Verdad?

- Hmmm ¿cómo adivinaste?- Y comenzó a reírse.

- Me gusta tu risa muy contagiosa.

- Oye Shim ChangMin... me acabo de dar cuenta de algo.

- ¿De qué?

- Que eres muy guapo - Dijo JunSu alargo su mano para tocar el rostro de ChangMin - Me pregunto si tu piel es igual de suave de como se ve - Y antes de pudiera tocarlo, una mano lo detuvo - Oye me lastimas - Volteando a ver quién había tomado su mano con brusquedad.

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