¿Dónde estás?, esa es la pregunta que me hago todas las noches cuando me siento en la alfombra del salón y solo me alumbra la luz de las velas que están sobre la mesita.
Hace ya tiempo que te vi marchar entre la multitud de gente que llenaba el aeropuerto… las lágrimas, el dolor, el miedo… esos sentimientos me inundaban entonces… y aún sigo sintiéndolos como si fuera hoy el día en el que marchaste.
Durante todo este tiempo intenté hacer desaparecer todos los recuerdos físicos que tenía de ti… nuestras fotos, los regalos, la ropa que dejabas en mi casa cada vez que pasábamos la noche juntos. Todo, todo fue guardado en una caja que se perdió en el fondo del armario, y que ahora… me he tomado la libertad de abrirla de nuevo, no me preguntes por qué.
¿Por qué tuviste que marcharte? ¿Por qué tuvimos que separarnos aquel día?... te extraño. Extraño tus caricias, tu mirada… tu sonrisa… tu aroma. Extraño el calor que dejaba tu cuerpo en las sabanas de la cama, y en el cual me refugiaba cada mañana cuando te marchabas. Extraño el despertar con el aroma de esos magníficos desayunos con los que hacías cada mañana. ¿Por qué? ¿Por qué no fuiste capaz de decir que “si” en aquel momento? ¿Tan difícil era decir que me amabas? ¿Tan difícil era para ti enfrentarte a todos?
Aún recuerdo el momento en el que te vi por primera vez. Fue al comienzo del curso. Tú eras el nuevo profesor de la escuela, y ahí estabas sentado junto a los demás profesores en el salón de actos dando la bienvenida a todos los estudiantes que comenzábamos un curso nuevo. Desde ese primer día, no pude separar mis ojos de tu figura, me impactaste tanto… aún me estremezco recordando cada de talle de ti, ¿por qué no puedo dejar de sentir lo que siento?. Aquel día que descubrí que ibas a ser mi tutor, me puse tan nervioso que no fui capaz de presentarme y decir mi nombre, cosa que te causo gracia… y que hizo que tuviéramos nuestro primer contacto físico, una caricia en la cabeza.
Recuerdo que poco a poco, me fui acercando a ti… pero aún no recuerdo cuando nuestra relación pasó a ser de tutor – alumno, a bueno… ya sabes, a ser pareja. Solo sé que desde aquella noche que me escapé de casa, aquel día que llovía muy fuerte… y que se me ocurrió acercarme a tu apartamento… desde ese día toda mi vida cambió, desde aquella caricia… desde aquella mirada… desde aquel beso que me diste entre la luz de las velas que adornaban el salón… desde aquella noche que pude sentir tu calor junto al mío… aquella noche que dormí acurrucado en tu pecho… desde esa noche, te amo… te amo Jaejoong.
Dentro de una semana empezaré la Universidad… otra nueva etapa de mi vida… y que se me está haciendo difícil de afrontar sin ti. Estoy desesperado… no puedo vivir más sin verte, te necesito… vuelve!! Vuelve por favor… no ves que no puedo más… ¿por qué me haces sufrir así? ¿Si tanto me amabas por qué no estás aquí conmigo?... ¡¡Idiota!! Te odio tanto…!! No te mientas Changmin… es imposible que odies a la persona que amas… simplemente te estás volviendo loco soñando con que algún día volverá y todo será como antes, pero jamás ocurrirá hazte a la idea… jamás.
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esta mas o menos...NOOOOOOO ESTA DE LO MEEEEEJOOORR ..
ResponderEliminar*coro*que lo sigan,que lo sigan,que lo sigan,etc,etc...
waaaesta muy bueno, se siente el dolor de minnie por favor pon la continuacion... bye bye
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