Se sentó de golpe. Paso una de sus manos por detrás de su cabeza, nervioso. ¿Le había pegado a su Hyung? Entre avergonzado y enojado consigo mismo recordó “…lo que le hiciste a Jaejoong”… ¡A eso se refería!
Changmin no lograba entender como es que ahora se venía a dar cuenta de lo hecho hace unos minutos. Y no sólo le había pegado, también le había dicho cosas horribles.
- Demonios – Gritó tomando una almohada de su cama para después lanzarla con fuerza hacia quien sabe donde.
No iba a contenerse. Sabía que estaba solo en la casa, y necesitaba llorar. De pena, de vergüenza, de rabia…
<<Jaejoong me debe odiar…>> Pensó desconsolado mientras las saladas gotas de agua se iban acumulando en sus ojos. ¡Maldita entrevista! Maldita reportera, maldita envidia, maldita rabia, al demonio todo.
El chico se levantó como pudo, las lágrimas corrían desde sus ojos, y se perdían en su rostro. Abrió la puerta de su pieza pesadamente y se dirigió a la cocina. Iba a comer. O a beber. Lo primero que se le presentara. No sabía porque. Quizás era porque comer era algo que disfrutaba, o para pensar en otra cosa, o simplemente por copiarle a la chica de la novela de la semana pasada, que comía helado para ahogar las penas. Tal vez funcionaba con el también.
<<Esto es lo que dejó preparado Jaejoong>> Fue lo primero que se le pasó por la mente al abrir el refrigerador. Había muchas cosas, pero una destacaba. Era una tarta de frutas que lucía realmente deliciosa. Por un momento pensó en tomarla y comérsela toda, pero se arrepintió, tomó una lata de cerveza y cerró la puerta.
Ya iba en su sexta lata. Y su llanto aún no cesaba. <<Tonta chica, tonta novela>> Se quejó. No estaba funcionando. Además de la cerveza, había comido tres frutas, los restos del almuerzo, un pan con quien sabe qué y unas pocas galletas. Todo esto sin darse cuenta.
Gula
- ¿Por qué?- Se preguntó. Su voz quebrada y sus ojos hinchados, además de mojados. Ya habrían paso unos veinte minutos, y lo único que había logrado era comer, comer, y comer. Su pena, su rabia, su vergüenza, seguían tan presentes como las lágrimas en sus ojos.
Estaba concentrado en si mismo, y en buscar respuestas, que no escuchó cuando la puerta de entrada se abrió.
- ¿Estás bien? – Peguntó Yoochun a su compañero. Ya iba por su tercera caída.
- Si…- Respondió. Obviamente era una mentira.
- Oye, si sigues así te vas a terminar lastimando.- Le dijo su líder.
- Lo sé, lo siento…Es sólo que…-
- Yo sé lo que te pasa. Estas aquí pero tu cabeza esta en otro lado ¿No?- Yoochun siempre daba en el clavo – ¿Es por él, no?
-S..Si…-
-Entonces vete ¿Qué esperas?- Le dijo Yunho. El caído se levanto, y con una leve sonrisa se fue corriendo, dejando a tres chicos preocupados – Pobrecito…-
- ¿Crees que estará bien?- Preguntó una voz de delfín-
- Esos dos tienen mucho de que hablar.- Sonrió para si el líder.
Changmin lanzó la séptima lata de cerveza contra la pared. Era increíble, se seguía sintiendo sobrio. Ni si quiera sentía los efectos del alcohol.
-Minnie…- Lo llamó una voz tras él.
-Hyung…- Pronunció sorprendido al darse la vuelta.
Frente a sus ojos, entrando por la puerta de la cocina estaba Jaejoong. El mismo Jaejoong al que había golpeado, el mismo al que había gritado duras palabras. Estaba ahí…
- Pobrecito, mírate estás llorando…- Dijo preocupado. Como si nada hubiese pasado.
- Hyung yo…- Iba a decir algo, pero el mayor lo calló poniendo su dedo índice sobre los labios de Max –
- ¿Qué te pasa?- Preguntó con preocupación en sus ojos.
Pasó sus manos por el rostro del menor, secando sus lágrimas. Changmin estaba sorprendido. ¿Por qué? Si el lo había agredido, lo había tratado de una manera horrible.
- Jaejoong, no…- Dijo el más alto. Se alejó de su Hyung como pudo.- ¿Por qué? Yo…Yo te golpee. – Miró la mano aún inflamada del rubio.
- Minnie…Es verdad que en ese momento, tuve miedo. Y me dolió…-Le dijo con voz suave- Nunca te había visto tan enojado… Cuando nos fuimos a ensayar, no pude concentrarme…- confesó, acercándose gradualmente a su compañero- ¿Es mi culpa que estés así no…? Algo te hice…Changmin, por favor. Dime.
- No puedo…Yo…-
- Por favor…-
- ¿Para qué quieres saberlo? No fue tu culpa, fue mía, con eso basta- Le dijo, no quería confesarle aquello que llevaba guardando todo este tiempo-
- Me preocupas- Respondió. Ahora el rubio acorralaba a Changmin contra la pared de la cocina
- Esta bien, esta bien…Hyung…- Era difícil, pero era aún más complicado decirle que no a Hero, cuando esos ojitos bellos lo miraban rogándole que lo hiciera.- Yo hoy día en la entrevista…Esa fea y tonta mujer no paraba de mirarte y tocarte…Y hacerte cosas que yo jamás podría hacerte. Eso me sacó de quicio.
- Min…-
- Te amo.- Dijo, casi al borde de las lágrimas. Pero se contuvo. No iba llorar por segunda vez en el día, y menos frente al rubio.
Jaejoong quedó en estado de shock – por segunda vez en el día- Max acaba de decirle que lo amaba…
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K fuertes declaraciones o.O y se lo dijo así no más, directo y conciso... xd, uno debe aprender de lso fics, jajaja
ResponderEliminarpore Changmin tan impulsivo y sensible. ¿Qué dirá Jaejoong?