Alguien
llamó a la puerta antes de abrirla, y vi la cabeza de Sooyun asomarse hacia
adentro mientras me giraba de la ventana y miraba en su dirección. Sooyun era
una enfermera de nuestro departamento, y también una infantil amiga mía, era
conocida por su brillante sonrisa y su gentil trato con los pacientes. Todos la
amaban. Le señale que entrara y ella se enderezo antes de empujar la puerta un
poco mas y saludar con una reverencia. Sostenía un portapapeles y unos
archivos, manteniéndolos presionados a su pecho.
“Buenos
días, Yunho-sshi” dijo ella, y se quedo clavada en su lugar.
“Buenos
días Sooyun, ¿qué puedo hacer por ti hoy?” Pregunte con una sonrisa mientras tomaba
lugar detrás de mi escritorio y ponía mis manos juntas.
“Yo...”comenzó
ella, dudó, y suspiró ruidosamente, negando con la cabeza hacia sí misma.
Arqueé
una ceja, curioso porque no era propio de ella actuar así. Era cierto que
nuestro departamento no era exactamente el de las risas y las sonrisas. No estábamos
en el ala de maternidad, pero aún así, nunca la había visto tan preocupada
antes. Espere pacientemente a que continuara.
“Tiene
un nuevo paciente. Está esperando por sus resultados y los doctores que lo
vieron dijeron que sería lo mejor que usted hablara directamente con él” Camino
más cerca de mi escritorio y entonces me dio los archivos y el sujeta papeles
que estaba sosteniendo, poniéndolos sobre mi escritorio con manos temblorosas.
Los
deslice más cerca de mí y comencé a observar primero el sujeta papeles, leyendo
el nombre del paciente y su información personal.
Apellido:
Park Nombre: Yoochun Edad: 18 años Diagnostico: Linfoma.
Todavía
hoy recuerdo como mis ojos se habían ensanchado después de leer su información.
Como oncólogo, eh visto pacientes jóvenes con cáncer antes, pero nunca había
tratado uno. A la edad de 29 años, apenas había pasado un año desde que salí de
la escuela, y la mayoría de los pacientes que había tratado, eran mayores que
yo. Lo siguiente que hice fue mirar el archivo con los resultados de sus análisis.
Me tomé el tiempo de leer todo y cuando cerré el archivo mire hacia arriba, y
pude ver que los ojos de Sooyun estaban llenos de lagrimas contenidas.
“¿Sooyun?”
Pregunté cuidadosamente y luego la observe mientras se sentaba en una de las
sillas frente a mi escritorio, suspirando fuertemente para tratar de contener
sus lágrimas.
“Solo
tiene dieciocho años” hipó.
“Oh
Sooyun” le dije y tome unos pocos pañuelos de la caja en mi escritorio y se los
entregue. Ella los tomo agradecida y los uso para gentilmente limpiar bajo sus
ojos. “¿Quieres que yo mismo lo llame?” Le pregunté, no diciendo nada mas
acerca de la corta edad de mi futuro paciente porque ¿que podía decir yo que la
hiciera sentir mejor?. Negó con la cabeza y se puso de pie, empujando los
pañuelos en el bolsillo de su uniforme.
“Iré
a llamarlo” anunció, y en silencio dejó mi oficina.
Durante
su ausencia, use el tiempo para poner en orden los papeles en mi escritorio, y
trate de prepararme mentalmente. Nunca era fácil anunciarle cáncer a un
paciente. Nunca sabes cómo van a reaccionar. Algunos se vuelven violentos, te
amenazan, diciendo que irán a ver a un mejor doctor, uno que sepa de lo que
habla. Otros explotan en lagrimas, pero la mayoría, usualmente se quedan
sentados allí, en shock. Salí de mis pensamientos después de escuchar otro
llamado a mi puerta, mire hacia arriba cuando se abrió.
La
primera cosa que note de Yoochun cuando entro a mi oficina, fue la manera en la
que parecía desaparecer detrás de las múltiples capas de su bufanda. Me levante
y le sonreí, indicándole que tomara asiento. Espere hasta que se hubo dejado
caer en una silla, antes de sentarme otra vez. Estaba usando una andrajosa sudadera
con las mangas deslizadas hasta sus hombros, cuando bajo su bufanda, revelo una
boca con labios agrietados.
“Hola,
tu debes ser Yoochun. Soy el doctor Jung Yunho” Le dije suavemente. Vi a sus
ojos observarme. Conocí a muchos pacientes mayores que disuadían por mi edad ya
que a la mayoría de ellos les parecía que yo no tenía experiencia. Aunque, el
modo en que Yoochun me miraba era diferente, se sentía como si el simplemente
conociera a un nuevo compañero de clases y tratara de decidir si se podían
volver amigos o no.
Asintió
después de un momento y se removió en su silla, empujándose en una mejor
posición. Tosió unas pocas veces dentro de su bufanda y pude escuchar como el
silbido cuando tomaba grandes bocanadas de aire. “Entonces” dijo después de un
momento de silencio “¿Tengo o no gripa?, Le eh estado diciendo a mi mama por
las últimas dos semanas que solo tengo un asqueroso resfriado, o gripa o lo que
sea, pero ella se sigue preocupando por mi y dijo que debía ir a ver un doctor.
Eres un doctor ¿cierto? ¿No puedes solo darme antibióticos o algo para que me
mejore y mi mama pueda volver a dormir por las noches?”.
Su
voz era grave, ligeramente rasposa por toda la tos y había un poco de la
arrogancia con la que la juventud usualmente provee a los jóvenes, haciéndolos
sentir superiores, en la cima de su juego, incluso cuando están enfermos. Tal
vez también era un poco de orgullo, no queriendo parecer débil enfrente de
otros. En otras circunstancias, me hubiera hecho sonreír, pero no ahora.
“Desearía
poder hacer eso Yoochun-sshi, pero desafortunadamente, no es tan simple”
comencé a decir y eso causo que jadeara y se recostara contra la silla,
cruzando sus brazos sobre su pecho.
“¿Vas
a decirme que necesito seguir soportando esto, y que se irá por si solo?”
Respire
profundo y luego lo mire directamente a sus orbes cafés. “Yoochun sshi, no
tienes gripa...” Incluso antes de que pudiera decir más, el ya me había
interrumpido.
“¿De
veras? Bueno, esas son buenas noticias ¿verdad?” me pregunto con una sonrisa
esperanzada, enderezándose otra vez en su silla.
Sacudí
mi cabeza, pero no baje mi mirada. “No es gripa Yoochun sshi, es cáncer...” no
me moví mientras esperaba su reacción, pero nada me preparo para el sonido de
su risa entrecortada, que de repente lleno el pequeño espacio de mi oficina.
Allí
estaba el, riendo como si le acabara de decir la cosa más graciosa que hubiera
escuchado en su vida. Su cuerpo inclinado ligeramente hacia adelante mientras
golpeaba su rodilla unas cuantas veces, y entonces, de repente se detuvo para
entrar en otro ataque de tos. Se calmo, y un poco después de eso me miro con
diversión en sus ojos.
“Muy
gracioso doc. Si tuviera cáncer, lo sabría. Quiero decir, sentiría un bulto en
alguna parte de mi cuerpo y te puedo asegurar que eh revisado mis bolas con la
frecuencia suficiente para saber que no tengo cáncer testicular, y, de veras,
todos los síntomas que eh tenido, son los de un resfriado, o una fea gripa. No
te ofendas doc., pero ¿cómo fuiste capaz de graduarte de la escuela?”
“No
todos los tipos de cáncer son tan fáciles de notar. Algunas personas aparentar
ser muy saludables cuando son diagnosticadas con cáncer. Desafortunadamente,
los síntomas que tienes, son asociados con un Linfoma, y eso es lo que lo hace difícil
de diagnosticar, a menos que el paciente venga a ver un doctor.” Le trate de
explicar de modo que supiera que no estaba bromeando con tan seria condición médica.
“Pero,
solo tengo dieciocho años.” Susurro luego de un largo momento de silencio.
“Lo
sé, Yoochun-sshi” Susurre también “lo sé”
++++
El
no lloró ese día, o si lo hizo, no fue en mi oficina, así que no me entere de
ello. Me hizo muchas preguntas, la primera fue si iba a morir. Le dije que había
muchos tratamientos disponibles para ese tipo de cáncer y que había una
oportunidad de una eventual remisión. Eso pareció darle seguridad y después de
discutirlo un poco más, se fue para ir a casa, diciendo que volvería al día
siguiente con su madre, para que yo pudiera anunciarle su cáncer a ella. Dijo
que no sería capaz de hacerlo solo, pero que no quería ser hospitalizado por
ese momento. Lo entendí y le permití irse.
Pase
el resto del día revisando a los pacientes que ya tenía, pero mi mente estaba
ausente. Cuando finalmente llegue a casa, me prepare una taza de café y la
coloque en la esquina de mi escritorio antes de caminar hacia mi librero y
tomar un par de gruesos libros, llevándolos conmigo de regreso a mi escritorio,
y colocándolos a un lado de mi computadora. Pase el resto de la noche
refrescando mi memoria sobre el linfoma.
Como
prometió, Yoochun regreso el día siguiente con su madre. Era fácil decir de donde
obtuvo Yoochun su apariencia. Le dije a su madre todo lo que le había dicho a
Yoochun el día anterior, y ella se
mantuvo asintiendo al principio, escuchado a cada palabra que yo decía. Tan
pronto como deje de hablar, ella comenzó a llorar y llevo a su hijo contra su
pecho, sosteniéndolo fuertemente y meciéndolo gentilmente de adelante a atrás,
acariciando su cabello y besando su cabeza. Normalmente, los jóvenes de la edad
de Yoochun, habrían tratado de separarse, pero el dejo a su madre abrazarlo.
Le
dije que me gustaría hacerle mas análisis para tener un mejor diagnostico del cáncer
y al mismo tiempo averiguar el estado de su desarrollo para que poder
ofrecerles un mejor plan de tratamiento.
++++
Yoochun
fue admitido por primera vez en el hospital el dieciséis de Marzo.
Los
resultados de sus exámenes revelaron que su cáncer había alcanzado la etapa
tres de desarrollo, lo que significa que el cáncer estaba mayoritariamente
concentrado en el los ganglios linfáticos por encima y por debajo de su
diafragma, pero afortunadamente, no se había extendido más lejos ni tocado ningún
órgano.
Las
malas noticias eran que el tratamiento disponible era quimioterapia y terapia biológica.
La Radioterapia también era una opción posible, yo sabía que todos esos
tratamientos tenían fuertes efectos secundarios y me tome el tiempo para
presentar y discutir cada opinión con Yoochun y su madre de antemano.
“Haré
cualquier cosa que necesite” Dijo Yoochun con una ligera sonrisa de confianza
que me tomo por sorpresa. “Confío en ti doc. Sé que no me vas a dejar morir así
de fácil ¿verdad? Quiero luchar y no me importa si termino con un cuerpo débil
en una cama de hospital, incluso si eso pasa, seguiré luchando. Tú vas a luchar
conmigo ¿verdad?
Lo
miré en silencio por un minuto y luego me encontré a mi mismo asintiendo, mis
labios se extendían en una sonrisa. “Voy a luchar a tu lado” Le asegure. “Haré
todo lo que pueda para ayudarte durante esta batalla, pero tú serás el que hará
la mayoría del trabajo. Para que estés bien preparado para esto, tienes que
dejar de fumar y un nutriólogo te va a dar una dieta especialmente hecha para
ti”
Cuando
revise su condición medica, preguntándole sobre sus historial médico y sus hábitos,
fui informado de que Yoochun había fumado por tres años hasta ahora, y supe que
tendría que dejarlo de golpe, así que me preguntaba como reaccionaria a esto,
pero pareció entender que era inevitable y era lo mejor. Lo único que hizo fue
asentir, y entregarme la cajetilla media usada de cigarrillos, y su encendedor.
“Tendrás
que conseguirme muchos chicles de menta doc.” me dijo mientras caminábamos
juntos a la habitación donde se quedaría durante su tratamiento “O paletas. ¿Me
está permitido chupar paletas? Espero que sí, porque necesitaré algo que
chupar” continuo, hablándose así mismo, aunque levanto su mirada en mi
dirección, con una sonrisa lobuna que me hizo quedarme enraizado al suelo.
Su
brillante risa le siguió, haciendo eco en las paredes del vacío pasillo.
El
primer tratamiento de quimioterapia lo debilito considerablemente y paso la mayoría
de su tiempo de recuperación en el baño, incapaz de mantener la comida en su
estomago. No pude revisarlo tan frecuentemente como hubiera querido, ya que
tenía otros pacientes que necesitaban mi asistencia y mi atención, pero las
enfermeras se mantenían actualizándome de su condición. Era temprano por la
noche cuando finalmente, tuve la oportunidad de parar en su habitación a
revisarlo personalmente. Toque a su puerta antes de entrar, solo para verlo
hacer su camino de regreso a su cama, con su bata de hospital luciendo muy
grande para su pequeño cuerpo. Miro sobre su hombro al sonido de la puerta abriéndose
y vi su sonrisa.
“Oh
hey doc., ¿qué onda?” pregunto como si no pasara nada. Trepo en su cama y se
acomodo debajo de las cobijas.
Cerré
la puerta después de mi y camine hacia su cama “¿cómo te sientes?” pregunté
suavemente, mirándolo con genuina preocupación, como con todos mis pacientes.
“¡Fantástico!
Les recomendaría esto a todos. Es ¡oh! tan divertido vomitar tus tripas cuando
ni siquiera estas borracho. A menos cuando tomas al punto de sentirte enfermo,
esperas pasar tu noche en un uno-a-uno con una dama de porcelana, pero ¿esto?
Ungh” Se quejo, y resoplo, soltando airé a su alrededor.
“Hay
una medicación especial que puede ayudar a reducir esos efectos secundarios.
Puedo prescribírtela. De hecho, creo que será mejor si lo hago. Te prevendrá de
deshidratarte mucho y con suerte, también hará el tratamiento más simple para
ti” Me moví mas cerca para revisar su temperatura y escuchar su ritmo cardiaco
entre otras cosas.
“¡Dios!,
eso sería fantástico” Dijo con un ruidoso suspiro, mientras cansadamente
cerraba sus ojos y solo seguía mis instrucciones al revisarlo “¿Doc.?” pregunto
después de un momento de silencio, lentamente reabriendo sus ojos justo cuando
me preparaba para separarme.
“¿Si,
Yoochun?”
Lo
vi abrir la boca para decir algo, pero luego algo paso por sus ojos y cerro su
boca, probablemente cambiando de opinión en cuanto a lo que quería decir, y después,
“¿No
olvidarás mis chicles de menta?
Supe
que esta no era lo que originalmente intentaba decir, pero no lo presione.
“No
lo haré” Prometí y reajuste sus sabanas, Metiéndolo en su cama antes de dejar
su habitación con una sonrisa que esperaba, le brindara seguridad, y que me respondió
con un “Gracias doc.”
+++
Los
siguientes días, se volvieron semanas y luego meses. Durante ese periodo de
tiempo, Yoochun recibió más tratamientos de quimioterapia y nos dimos cuenta de
que su cuerpo estaba reaccionando bien al tratamiento. No tenía muchos efectos
secundarios que atormentaran su estomago, lo que mejoro después de que comenzó
a tomar la medicina que le recete.
Fue
también durante esos meses que su personalidad fue rebelada, no solo a mí, sino
a todo el personal y los pacientes del departamento de oncología.
Yoochun
era alguien que seguía su corazón y también era alguien a quien le encantaba
coquetear. Las enfermeras eran su blanco favorito, especialmente las jóvenes,
pero como decía con frecuencia, él no discriminaba a nadie, así que también
halagaba a las mayores.
Con
frecuencia me encontraba a enfermeras en la estación, con las mejillas
sonrojadas, hablando de ese adorable joven en la habitación 194 y de como había
notado su nuevo peinado y lo había halagado, o de cómo dijo que el perfume de
una de ellas era como el de una rosa fresca, o como su uniforme acentuaba su
delicada cintura.
El
las llamaba a todas “Noona” incluso cuando sé que pudo haberlas llamado por sus
nombres si hubiera querido. Era educado con los enfermeros y con los otros
doctores quienes lo revisaban cuando yo
no estaba trabajando.
Odiaba
quedarse en su habitación por largos periodos de tiempo y con frecuencia iba a
visitar a otros pacientes, se sentaba en una silla a un lado de su cama y
hablaba con ellos, haciéndolos reír con sus historias. Recuerdo que cuando le
pregunte porque se tomaba el tiempo para hacer eso, el respondió:
“Doc.,
algunos de esos pacientes están solos. Nadie viene a verlos. ¿Porque querrías
luchar y vivir cuando has sido dejado atrás, abandonado, cuando parece que
nadie se preocupa por si vives o mueres? Quiero que sepan que hay alguien allí
afuera quien se preocupa genuinamente por ellos, no solo porque es su trabajo
cuidarlos, ¿sabes? No solo eso, también eh escuchado que la risa es una de las
mejores medicinas y si puedo ayudar iluminando su día un poco, entonces,
continuaré haciéndolo ¿sabes?, quiero decir, yo soy suertudo, porque tengo
gente que viene a visitarme, como mi mama, mi hermano, mis amigos también, así
que solo así parece justo...” Solo se encogió de hombros y se acaricio tras el
cuello.
Fiel
a sus palabras, Yoochun se rehusó a dejarse a si mismo deprimirse por el cáncer.
Las raras ocasiones que lo escuche quejarse era por algo que había leído o
visto en las noticias, o porque la comida de hospital estaba, ya sea fría, o
desabrida, o porque alguna chica termino con el chico que al le desagradaba en algún
drama que estuviera viendo para entretenerse a sí mismo. Nunca se quejaba por
su cáncer. Nunca lo vi llorar tampoco, hasta cierto día lluvioso cerca de los
principios de Mayo.
La
quimioterapia finalmente había causado que su cabello comenzara a caerse en
mechones que se quedarían ya fuera en su cepillo o en sus dedos en cualquier ocasión
que los pasara por sus cabellos castaños. Hasta entonces, su cabello había sido
lo largo suficiente para rozar sus hombros, pero raramente lo dejaba suelto,
siempre manteniéndolo en una desordenada cola de caballo con mechones ondulados
de cabello escapando de la liga y enmarcando su rostro.
Vi
a las enfermeras salir de su habitación más de una vez, conteniendo las lagrimas
para no llorar enfrente del y hacer todo el proceso a un más complicado de
enfrentar. Eso no era exactamente profesional que pudieras decir, pero ¿cómo
culparlas? Yoochun se había convertido en un hermano menor o un hijo para la mayoría
de ellas, así que estaban afectadas por lo que le sucedía.
Yo
había estado de pie en la estación de enfermeras, mirando el archivo del
paciente que estaba por visitar cuando vi al mejor amigo de Yoochun llegar y
preguntarle a una enfermera si era posible visitar a Yoochun.
Eh
aprendido a conocer a Jaejoong con el tiempo. El era un año mayor que Yoochun,
pero los dos, aparentemente habían sido inseparables desde el día que se
conocieron. Jaejoong visitaba a Yoochun tan seguido como podía y lo trataba
como si fuera la persona más preciosa del mundo y, yo presentía que para
Jaejoong, Yoochun era exactamente eso. Mientras que Yoochun me recordaba a una cálida
y acogedora noche frente al fuego, envuelto en una sabana sosteniendo una taza
de chocolate caliente, Jaejoong me recordaba al frio, los días tan ventosos que
podías sentir el frio hasta los huesos. Creo que era por sus ojos, de una azul profundo
por los lentes de contactos que siempre usaba, que solo parecían suavizarse y
volverse cálidos cuando estaba alrededor de Yoochun.
La
enfermera le recordó los procedimientos y el tiempo asignado para el periodo de
visita y el asintió, sacudiéndose, él y sus ropas, lo mejor que podía de la
lluvia que se había aferrado a él en su camino al hospital. Había pasado un
tiempo desde su última visita, y yo podía ver que llevaba agarrada una gran
bolsa en su mano izquierda. Debió haber sentido mi mirada sobre él, porque miro
en mi dirección y se apresuro a donde yo estaba e hizo una reverencia a forma
de saludo.
“¿Como
está el?” me pregunto, trayendo su mano derecha a su brazo izquierdo, rascando
nerviosamente su antebrazo, moviendo la tela de sus chaqueta de mezclilla de aquí
para allá.
Respire
profundamente y cerré el archivo que había estado leyendo, indicándole con
señas que me siguiera mientras comenzaba a caminar hacia la habitación de
Yoochun. Estaba en la misma dirección que la habitación del paciente que iba a
visitar. El instantáneamente siguió mis pasos a mi lado y se mantuvo observándome,
esperando una respuesta.
“El
cáncer al parecer no se ah estado extendiendo, así que es relativamente
estable, lo que significa que el tratamiento está funcionando, pero
recientemente él ah comenzado a perder su cabello” Le informe al mismo tiempo
que deje de caminar, no muy lejos de la habitación de Yoochun. Vi los ojos de
Jaejoong abrirse grandemente, y su cara perdió un poco de su color. Me empujo
al pasar, y lo vi desaparecer dentro de la habitación de su mejor amigo.
Estaba
trabajando el turno de la tarde y la noche ese día, y la primera vez que fui a
revisar a Yoochun, encontré a Jaejoong sentado a un lado del joven en su cama.
Su chaqueta de mezclilla había sido abandonada en la silla y él tenía sus
brazos envueltos alrededor de Yoochun y suspiraba contra su hombro. Yoochun
acariciaba la espalda de su mejor amigo gentilmente, sosteniéndolo tan fuerte
como podía y susurrando palabras tranquilizadora en su oído.
“Solo
es cabello Jae... va a crecer otra vez.... no tienes que llorar por esto. ¿Cuándo
te volviste un bebe llorón? Ahora podrás burlarte de mi frente aún mas.”
Pero
sus palabras solo hicieron a Jaejoong llorar aun más fuerte. Mi mirada se encontró
con la de Yoochun y él me susurró*(1) que me fuera.
“¿Estás
bien?” le susurre*(1) y el asintió.
También
le asentí, y los deje solos.
El
tiempo asignado para visitas había terminado cuando hice mi segunda ronda y
regrese a revisar a Yoochun. Creí que lo iba a encontrar dormido, pero aunque
estaba recostado en su costado, sus ojos estaban muy abiertos y su mirada fija
hacia enfrente de él, a la cama vacía a un lado de la suya.
“¿Yoochun?”
Le llame suavemente para dejarle saber que estaba allí. Sus ojos perdieron su
enfoque en la cama vacía y lentamente giraron en mi dirección, hizo un
movimiento para sentarse. “Puedes quedarte recostado, si estas cansado. No
tienes que sentarte para mi, solo vine a revisarte.”
“Está
bien” dijo, y continuo moviéndose hasta estar sentado.
Note
que había contenedores de plástico en la mesa a un lado de su cama, llenos con
comida y supe que Jaejoong los había traído para él. El mejor amigo de Yoochun,
se había dado a sí mismo la misión de hacer a Yoochun comer comida que fuera
mejor que cualquier cosa que el hospital pudiera ofrecer.
Camine
más cerca para hacer mi rutina normal de revisión, y mientras escuchaba la
respiración de Yoochun y su corazón, sentí su mano cerrándose en mi muñeca, así
que gire mi cabeza para observarlo.
“Doc.,
¿te puedes sentar conmigo un momento? Preguntó en un susurro, y dudé, pero
Yoochun lucia como si tuviera algo que decir así que me moví hacia la silla que
me permitiera sentarme a un lado de su cama, pero el jalo de mi muñeca y se
reusó a dejarla ir.
Nos
miramos el uno al otro en silencio, y de alguna manera entendí su petición
silenciosa, y me senté en su cama, girándome para poder verlo. El respiro
hondo, y soltó mi muñeca para aferrarse a las sabanas. Miró hacia abajo, y
luego hacia un lado, evitando mirarme directamente.
“Cuando
era un niño, mi mama siempre me cortaba el cabello realmente corto porque para
ella, era lo correcto. Entonces siempre tuve un corte de niño, ese tipo de
corte que es realmente muy hetero ¿sabes? Como, el tipo de corte que tendrían
los hijos del presidente. De cualquier modo, los otros niños en la escuela me
molestaban mucho. Pensaban que mi frente era enorme, y más o menos, lo es, pero
no quieres escuchar ese tipo de cosas cuando eres un niño. La primera vez que
conocí a Jaejoong, el tenia el cabello largo y cuando le pregunte porque no tenía
el corte de cabello regular para un chico, el dijo que sus hermanas tenían el
cabello largo, y el pensó que era tan bonito que también lo quiso tener largo.”
Pauso
por un momento, y yo me quede en silencio, esperando que continuara. Me miró y
sus ojos estaban brillando, llenos con lagrimas no derramadas.
“Entonces
me di cuenta de que estaba bien para los chicos tener el cabello largo, y
decidí dejar crecer el mío, y cuando mi mama decía que necesitaba un corte, Me
resistía obstinadamente o hacía un berrinche hasta que ella se rendía y me
dejaba hacer lo que quisiera con mi cabello. Desde entonces siempre eh
mantenido mi cabello largo, incluso cuando Jae eventualmente corto el suyo,
pero él dijo que amaba mi cabello largo. Que me quedaba bien y que le encantaba
jugar con él. Quizá lo mantuve largo todo este tiempo porque sabía que a él le
encantaba...”
Un
sonido estrangulado escapo de sus labios y entonces lo escuche sorber la nariz
ruidosamente. Sé que esta fue la primera vez que pase los límites entre un simple
doctor y su paciente. No debí haber hecho lo que hice, pero mirar sus paredes
comenzar a derrumbarse, realmente fue un fuerte golpe y no pude quedarme allí
sin hacer nada, así que me incline hacia adelante y envolví mis brazos a su
alrededor, halándolo hacía a mí. Sentí sus brazos envolverse el rededor de mi
cintura y su cara presionarse contra mi hombro, y entonces realmente comenzó a
llorar, su agarre se apretó sobre la parte trasera de mi uniforme. Gentilmente
acaricie su espalda y lo deje llorar.
“Es
t-tan estúpido” Hipó contra mi hombro. “Los hombres no deben llorar como las
niñas cuando pierden el cabello...”
“Eso
no es cierto. Muchos hombres se preocupan sobre su cabello. Tómame a mí por
ejemplo, Solo tengo veintinueve años, pero debiste verme cuando encontré un
cabello gris entre los cafés una mañana. Debes saber, y este es un secreto que
solo mi mejor amigo sabe, pero tuve que llamarlo y quejarme de como siendo tan
joven tenía un cabello gris, y ¿sabes lo que hizo? Se burló de mi, dijo que eso
era lo que me pasaba por preocuparme demasiado, y que era mi propia culpa estar
envejeciendo prematuramente”
“Tu
mejor amigo es algo malvado” dijo Yoochun mientras se empujaba hacia atrás
ligeramente y me miraba, limpiando sus ojos con sus manos y sorbiendo la nariz
otra vez para tratar de detener sus lagrimas.
“Lo
sé, ¿no? Eso es lo que yo pensé también” Le dije con una sonrisa, y gentilmente
apreté su hombro, no muy fuerte porque ahora, podría herirlo fácilmente, pero
suficiente para que ese gesto fuera tranquilizante, de consuelo “Esta bien
entristecerte sobre esto Yoochun. Está bien llorar”
El
se quedo en silencio, probablemente reflexionando mis palabras, y limpiando sus
ojos hasta que quedaron secos. Entonces se recostó sobre sus almohadas y vi una
sonrisa extenderse lentamente sobre sus labios hasta que ilumino toda su cara y
su expresión era algo traviesa. Arquee una ceja ante el repentino cambio y lo
mire con curiosidad.
“Doc.,
¿de verdad tienes una reacción tan fuerte al encontrar un cabello gris?”
Pregunto y note que estaba tratando de no reírse.
Hice
un show, suspirando fuertemente, dramatizando todo y volviéndolo una comedia
juguetona, alcanzando profundamente dentro de mí para sacar mis habilidades
actorales “Si” dije presionando una mano contra mi pecho y luciendo deprimido,
tratando de parecer realmente agraviado.
Hubo
otro momento de silencio y luego su risa entrecortada lleno la habitación,
levante la mirada y lo encontré dando vueltas sobre sí mismo, agarrando la
almohada con una mano y su estomago con la otra, tratando de amortiguar su
risa, pero no siendo capaz de hacerlo. Sonreí ante la visión y me levante,
acomodando sus sabanas y asegurándome de que pasara la noche cómodamente.
Ya
estaba casi en la puerta cuando sus siguientes palabras alcanzaron mis oídos.
“Gracias,
Yunho-sshi”
+
+ +
El
cuatro de Junio, Yoochun cumplió diecinueve años.
Mi
primer pensamiento fue que probablemente terminaría celebrándolo con su
familia, en un entorno calmado y sin atraer mucha atención, pero no me tomo
mucho darme cuenta de lo equivocadas que estaban mis suposiciones. Unas pocas
semanas antes de la fecha, recibió muchas visitas de Jaejoong y de algunos
otros amigos. Casi una semana y media antes, Yoochun me pregunto si sería
posible dejar el hospital solo por un día para poder celebrar con su familia y
amigos. Dude, pero cuando vi que su condición era relativamente estable, lo
permití.
Recibí
la invitación unos pocos días después de haber dado mi autorización. Me la
trajo Sooyun quien estaba tratando de contener la risa mientras me extendía el
sobre verde. Resulto que la fuente de su diversión era la tarjeta dentro del
sobre. Tenía la forma de un gato, pero un gato muy zombificado. Era bastante
asqueroso, y en la parte posterior de la tarjeta se encontraba la información
sobre el lugar de la fiesta de cumpleaños, la hora, y se pedía que se brindara
un RSVP* (2) tan pronto como fuera posible. Sooyun también recibió una
invitación y los dos decidimos asistir.
Hasta
hoy, sigo sin saber quien planeo todo eso, pero creo que esa persona se merece
el Award por planeación de fiestas.
El
lugar parecía abandonado desde afuera, pero por dentro parecía un gimnasio, sin
el equipo de gimnasio. Había mesas ubicadas en un medio circulo de frente a un
pequeño escenario. Toda la habitación parecía salida de una película de
zombies. Las telas cubriendo las mesas estaban rasgadas por algunos lugares y
parecían ligeramente quemadas en otros. Yoochun estaba sentado en la mesa
principal con su madre y su hermano. Algunos de sus amigos ya habían llegado y
estaban sentados en sus lugares asignados. No se había indicado en la
invitación usar un disfraz pero algunas personas estaban usando adorables
disfraces con horrible maquillaje de zombie. Yo estaba fascinado.
La
cara de Yoochun se ilumino cuando nos vio a Sooyun y a mí e hizo su camino hacia
nosotros y nos dio un fuerte abrazo antes de tomar nuestras manos y llevarnos a
nuestros lugares. De alguna manera, me hizo sentir que tenia dieciocho otra
vez.
Los
hielos en nuestras bebidas tenían la forma de cerebros la comida parecía salida
de el menú de Halloween de Martha Stewart. Durante la comida, vi a Yoochun
dejar la mesa más de una ocasión. Su cara se volvía pálida y de repente se
paraba y se apresuraba al baño, pero siempre regresaba con una sonrisa en su
rostro y pretendía que nada pasaba, pero para aquellos de nosotros quienes
conocíamos su condición sabíamos que solo el olor de algunos alimentos era
suficiente para hacerlo sentir enfermo. Aunque se rehusó a dejar al cáncer
arruinar su cumpleaños.
Después
de que terminamos de comer, algunos de sus amigos dieron discursos. Hablaron de
lo felices que eran al ser amigos de Yoochun y de cómo, de acuerdo a ellos, el
se estaba volviendo un anciano. Algunos de ellos trataron de compartir
historias vergonzosas sobre él, pero Yoochun fue rápido en hacerlos callar,
mucho para mí diversión y consternación de su madre.
Los
regalos vinieron después. Recibió CDs de sus bandas favoritas, un nuevo par de
audífonos, certificados de regalo, etc. Incluso recibió un juguete sexual de un
chico que exploto en risas en cuanto vio la mirada en el rostro de Yoochun
después de abrir su regalo y ver que había en la caja. Sus mejillas y orejas se
volvieron rosas y tartamudeo algunas palabras antes de llamar el nombre del
chico en incredulidad, y su amigo solo se rió en puro deleite. No pude evitar reírme
también, Solo por la reacción de Yoochun y la risa contagiosa de su amigo.
Note
que no recibió nada de su madre y su hermano, o de Jaejoong, y me pregunte si
era porque planeaban dárselo después cuando estuvieran a solas con Yoochun o si
simplemente no la habían comprado nada.
Yo
compre algo para él, se lo di con una tímida sonrisa y él me miro con sorpresa.
Obviamente no había esperado recibir algo de mi parte. Desenvolvió el regalo
enérgicamente y su boca cayó abierta cuando vio lo que era.
“¿Yunho
que…? ¡No puedo aceptarlo! ¡Es demasiado!” Exclamó, mirándome con los ojos
abiertos grandemente. Yo negué con la cabeza y sonreí confirmándole que no era
demasiado.
“Te
eh escuchado hablar tanto de la opera, y recientemente supe que vendría a la
ciudad, así que te compre un par de boletos. Puedes ir con Jaejoong si gustas”
“¡Pero
no son boletos regulares! Yunho, aquí dice VIP” continúo, poniendo los boletos
enfrente de mis ojos para que pudiera ver lo que había escrito en ellos aún
cuando ya lo sabía, ya que yo mismo los había comprado.
Claro
que dice VIP. Te conseguí los mejores lugares en todo el anfiteatro. Y antes de
que protestes otra vez, quiero que sepas que no entre en bancarrota comprando
estos boletos para ti. Pero tendré que comer ramen por un mes para poder
ahorrar dinero otra vez.” Lo moleste con una sonrisa.
Observo
los boletos otra vez y luego se movió para abrazarme fuertemente y susurrar un
gracias en mi oído.
Ese
día, Fui a casa con mariposas en el estomago, y una pieza del pastel sobrante.
Notas
de Traducción
*(1)
La palabra aquí era mouthed no hay
una traducción para ella, lo más cercano que se me ocurrió fue “susurrar” pero
en realidad mouthed mover tus labios
como si dijeras una palabra pero sin usar tu voz, de manera que aquel que te
está viendo, lea el mensaje en tus labios.
*(2)
Répondez s'il vous plaît. Es usado frecuentemente en las invitaciones, significa,
“Favor de Responder”
Mira que soy masoquista, lei la advertencia sobre la muerte de un personaje pero aun asi no pude evitar leer esta primera parte.
ResponderEliminarAunque trata de una enfermedad horrible, la historia se me hizo muy linda.
gracias por traducirla y espero pronto la segunda parte.
Yo tambien soy masoquista. Realmente una tema delicado y triste...Pero la redacción es muy buena. Me encanto... ahora seguire guardando mis lágrimas para cuando lo peor llegue
ResponderEliminarEl HoChun es mi placer culpable y esta historia capto toda mi atención.. aunque se como va a a "terminar" esta tan bien desarrollada que lo vale... estaré esperando la actualización~
ResponderEliminarAwww es taann hermoso *v* amo el 2U!!!!!
ResponderEliminarAhh las historias en que muere un personaje me parecen mas emotivas n.n
QUIERO CONTI!!!!!!!!!!!!!