SÉPTIMA PUBLICACIÓN
ES UNA LOCURA…
18/MARZO/2010
…
…
Alguna vez recordaré mi adolescencia y me reiré por todas las
estupideces que me sucedieron.
No, no es cierto.
Y la razón de eso, es por que desde que conocí a Kim JaeJoong,
corrección desde que JaeJoong se entrometió en mi vida, todo ha ido de mal en
peor. Es molesto, impulsivo y tiene la maldita mala costumbre de echarme la
culpa por todo lo malo que le pasa.
Son pocas veces en las que mi paciencia dura más allá de lo
necesario, y en serio, sino fuera por que cambiarme de conservatorio o de
ciudad sería excesivamente caro. En especial por que me marché de mi casa, y mi
madre a escondidas paga mis estudios, cosa en la que ella insistió, entonces
definitivamente me hubiera marchado hace mucho.
Pero ahora todo es tan complicado que gravemente me asusta, como
el hecho de tener a JaeJoong ingresando a mi departamento cuando se le de la
gana, a JunSu viniendo casi todos los días, a MinHo quejándose todo el tiempo,
a YooChun hablándome.
¡Cuando antes nada de eso sucedía!
Y de alguna manera sé, que es mi culpa. Por dejar que ellos
ingresaran a mi vida, por dejar que mis ojos y mi atención se posaran en otra
cosa que no fueran mis estudios, mi trabajo de medio tiempo, y mis gatos.
Ok, eso último sonó horrible.
…
…
—Están tan grandes, y en tan
poco tiempo.
JunSu acarició a los gatitos
que juguetones rodeaban a JunSu, mordiendo sus dedos o su ropa y jalando de
ella, él sonreía divertido, sentado en el piso de mi sala. No habíamos cruzado
palabra en al menos quince minutos.
—Estas muy callado, Hyung.
El punto observador de JunSu
llegó en acción, no me miró y continuó acariciando a Lion, concentrado en esa
ligera caricia y con un tono melancólico en la voz. Sentado tras de él, sobre
el mueble solo alcancé a ver el perfil de su rostro.
Las cosas con JunSu siempre
eran un poco más pacíficas, divertidas y tranquilas.
—Solo pensaba en el asco de
semana que he tenido.
—Todos la hemos pasado un
poco mal.
—Supongo que no soy el único
con problemas. ¿Verdad?
Ofrecer mi confianza, de una
manera inesperada y sentir por preocupación por alguien más no es algo que se
me diera con facilidad, pero de pronto estaba ahí JunSu, preocupado, triste,
ajeno a su sonrisa peculiar de todos los días.
—No es eso Hyung, es solo
que todo esto de JunHo me tiene un poco preocupado.
—¿Tu hermano? ¿Qué sucede
con él?
Para ese momento me había
sentado en el piso, mirando sus ojos, esos que de repente noté eran grandes y
expresivos como él.
—Todo es culpa de YooChun,
se que está planeando algo, pero no se que es. Y está involucrando a mi
hermano, no es justo y no sé como advertírselo a JunHo sin que piense que soy
un estúpido.
—El problema es que es más
que eso, en realidad también te incomoda su presencia en el conservatorio, lo
que no entiendo es por que.
JunSu suspiró, moviendo sus
dedos sobre una de mis manos, como si se entretuviera con aquello, esquivando
mi pregunta.
—Las cosas son muy
complicadas entre nosotros.
—Oh, cosas de hermanos. Soy
todo un experto en problemas de ese tipo.
—Hyung… ¿Tú tienes hermanos?
Su rostro se levantó,
mirándome una vez más, y algo extraño ocurrió, por que de pronto nuestros
rostros estaban cerca, el de JunSu se azoró un poco y yo en ese momento solo me
paralicé. JunSu no solo era una increíble persona. Era verdaderamente atractivo
también.
—YunHo, esto es más difícil
para mi que para ti, pero vengo con una… Oferta… De paz…
Ambos giramos, en la puerta
se encontraba JaeJoong con un plato con un pequeño pastel de fresas en las
manos. Su mirada se deslizó entre nosotros, y una sonrisa indecisa tembló en
sus labios, JunSu sencillamente se alejó un poco.
…Eso, fue demasiado extraño.
…
…
Incomodo…
Todo era sencillamente
incomodo, lo único que se escuchaba era el sonido de los cubiertos al chocar
con el plato de loza mientras comíamos un poco del delicioso pastel que
JaeJoong había traído.
—Es… Un lindo pastel, Hyung.
¿Dónde lo compraste?
—Yo lo hice.
—Oh, ya veo…
Y el intento de plática por
parte de JunSu había muerto ahí, con JaeJoong asintiendo levemente y
definitivamente yo no haría algo por mejorar la situación, por lo menos no por
el momento.
—Creo que me tengo que ir.
JaeJoong empezó a recoger su
celular y el pequeño bolso que había traído en la espalda era la primera vez
que permanecía tan callado por tanto tiempo, aún más manteniendo esa expresión
seria en el rostro. Incluso llegué a extrañar sus muecas raras.
—E…Espera Hyung. No tienes
que irte.
JunSu se levantó también,
miraba a JaeJoong de una manera extraña, como si buscara resarcir algún error.
Yo solo me dedique a cortar otro pedazo de pastel, para colocarlo en el plato.
Oh, y por supuesto también agarré una pequeña fresa.
—YunHo Hyung. ¡Has algo!
JunSu me miró, yo mastique
rápidamente, no entendía esa actitud en él.
—Pero… ¿Qué quieres que
haga?
Mi voz sonó torpe, extraña y
entre cortada, pero aún así lograron entenderme. JaeJoong arrugó el entrecejo,
caminando hacía la salida del departamento y Junsu solo suspiró sentándose una
vez más.
—Jae Hyung la ha estado
pasando muy mal desde que todo aquello de las fotos empezó. Tal vez deberías
hablar con él.
De alguna manera JunSu tenía
razón, desde que los de las fotos había empezado, nos habíamos alejado, supuse
que necesitaba un espacio, y que verme no era algo que le placiera con las
fotos no fueran mi culpa.
Pero realmente no pensé que
a JaeJoong le importara lo que un montón de idiotas dijera, sin embargo todo
volvió a calmarse prontamente, siendo JaeJoong amigo de ChangMin, y teniendo de
su lado a Siwon. Todo había vuelto a la calma.
—¿Hyung?
—Oh, disculpa Su. Estaba
pensando en lo que me dijiste.
JunSu sonrió, tan levemente
que fue apenas perceptible, luego se levantó por sus cosas tomándolas del
mueble y dándome la espalda.
—¿JunSu?
—Él te necesitaba y no sé
hasta que punto eso me afecta.
No me miró y comenzó a
caminar hacia la salida, fue un impulso. Agarre su mano y el se detuvo por un
momento, justo antes de poder abrir la puerta.
—Voy a disculparme con él,
no por que me lo hayas pedido sino por que es lo correcto y me porté quizá
inadecuadamente, pero no tienes que irte… No aún.
Y mi pecho latió
desbocadamente, las palabras que salían de mi boca no las reconocía, era
extraño que estuviera tomándolo de la mano, impidiendo que se marchara. Con sus
ojos atravesándome de repente.
—JunSu… ¿Qué sucedería si yo
te dijera que me gustas?
—YunHo Hyung tú me gustas.
La respuesta de JunSu fue
automática, desde que lo conocí, en la mitad de aquella carretera, bajo la
lluvia, ambos salvándole la vida a esos gatitos que ahora convivían conmigo.
Todo a nuestro alrededor era… Perfecto.
…Y mi corazón volvió a latir
como nunca antes.
—Pero esto no está bien.
Se soltó, tan ligeramente
que cuando agachó la cabeza solo logró pegarse un poco más a la puerta aún
cerrada.
—No está bien por que tú le
gustas a JaeJoong Hyung y…
—¡Espera… ¿Que?!
Sacudí mi cabeza y reí
levemente.
—Eso no es cierto, yo no le
gusto a JaeJoong. Solo simpatizamos de una manera extraña, pero yo no le gusto.
Quien realmente le gusta y de quien probablemente está enamorado es de YooChun.
Él entonces arrugó el
entrecejo.
—¿Es que a todo el mundo le
gusta ese idiota? Como sea… ¿Estas seguro?
—¿Por qué tendría que
mentirte?
JunSu me miró todavía con un
poco de duda, sus ojos se cerraron brevemente. Y luego volvió a suspirar.
—No lo sé, Hyung… Tengo mis
dudas.
Las cortinas de mi
departamento se sacudieron con fuerza y un rayo en el cielo llamó la atención
de ambos.
—Parece que va a llover.
Déjame acompañarte hasta tu casa.
—No es necesario, Hyung.
Tomaré un taxi. Nos vemos mañana.
JunSu se marchaba, sin darme
una respuesta y dejando toda nuestra conversación en un ‘veremos’ rodeado de
muchas suposiciones. Cuando estaba a punto de bajar las escaleras se detuvo,
apretando sus puños y repentinamente girando una vez más hacía mí.
Y me abrazó.
Con una fuerza sorprendente,
sentí su respiración en mi cuello y la manera en la que se ceñía a mi cuerpo
antes de susurrar un ligero. ‘Te quiero,
Hyung’ logrando arrancarme un pequeño suspiro luego de que se marchara.
…
…
Las siguientes dos horas.
En tanto la lluvia se
afianzó y yo logré ducharme, le di de comer a los gatos, me alimenté con más
pastel de JaeJoong y miré la televisión fueron relativamente tranquilos. Hasta
que el timbre sonó.
“¿JaeJoong?”
Me levanté rápidamente,
abriendo la puerta y encontrándome una vez más con la sonrisa y el rostro
incomodo de YooChun, obviamente criticando el modesto edificio. Esperé hasta
que sus ojos me observaran y empecé a cerrar la puerta.
—¡Espera! ¡Necesito hablar
contigo! ¡¡YunHo, abre!!
—¿Para que? Me odias, yo te
odio. Y vivimos felices en nuestro odio cotidiano.
YooChun empujó la puerta,
había olvidado que tenía una fuerza indeterminista. Su sonrisa victoriosa y él
ingresó al departamento, limpiando el polvo invisible de su abrigo negro y
haciendo una mueca al ver a los gatos.
—¿Todavía no te deshaces de
estos gatos?
—Eso no es tu problema. ¿Por
qué estás aquí?
Crucé mis brazos y él
inspeccionó una vez más mi departamento.
—Escuché por ahí que JunSu y
tu se llevan muy bien, son amigos y todo.
Sus ojos, su sonrisa. Es mi
hermano, crecí con él. Estaba planeando algo, y era algo retorcido y
destructivo seguramente.
—Si, somos amigos. Y no vas
a destruir eso.
—Oh, vamos solo quiero que
le aconsejes algo.
Me crucé de brazos, con un
bufido en los labios que le arrancó una sonrisa a YooChun.
—¿Qué cosa?
—Tu eres el mejor en baile
hermanito, yo el mejor en canto. Dime… No sería patético que llegara alguien y
te quitara tu lugar como el mejor.
—Eso a mi me tiene sin
cuidado.
—No hay nada de malo en
querer ser el mejor. Llevamos la misma sangre y te aseguró que te jodería en el
alma.
—Espera un momento, ¿Te
sientes amenazado por JunSu?
Oh, Dios… La cara de YooChun
en ese momento fue invaluable, su cabeza se movió un poco hacía atrás, y sus
ojos se abrieron, su mueca de superioridad se desbarató por completo e incluso
palideció un poco.
No lo entendía, JunSu no
podía ser tan bueno ¿O si?
—No es una amenaza para mí,
pero es mejor prevenir que lamentar. ¿Cierto?
—Estas muy asustado,
YooChun. ¿En serio JunSu te puede quitar el trono de Rey?
—Por supuesto que no…
—Su voz es maravillosa… Casi
comparada con la tuya.
La respiración de YooChun se
volvió irregular, su pecho subía y bajaba, apretando los puños, con fuerza.
Ahora estaba enojado y mucho.
—MI voz no se compara con la
de nadie, mi voz es perfecta.
Me agarró por la camisa,
amenazante y molesto. YooChun odiaba a JunSu, era palpable. Y además de todo
tenía un miedo incomprensible por el talento escondido de él.
—Será mejor que te vallas y
no te metas con él, YooChun. Te lo advierto.
—Entonces adviértale que
vuelva a su lugar como jugador de fútbol, o sino la pasará muy mal por que en
el conservatorio, quien no tiene talento para algo es ridiculizado. Y JunSu no
debe cantar.
Lo empujé, empezando a
sentir que deseaba golpearlo, pero él solo se marchó. Con la misma sonrisa con
la que llegó y arreglando un poco su cabello. No importaba, por que a JunSu no
le interesaba cantar. A JunSu más bien le gustaban los deportes.
Lo que no comprendía era ese
odio insano que mi hermano sentía por él, solo por tener talento. YooChun en
verdad, haría lo posible por destruirlo, y tal vez no sabría detenerse a
tiempo.
…
…
Estacioné la moto con
cuidado, los alumnos andaban de un lugar a otro.
Encontrar a JaeJoong fue más
difícil de lo que parecía. No había notado que en realidad había demasiado
gente en este conservatorio. Sin embargo lo vi caminar particularmente solo
hacía la entrada principal y decidí respirar profundo antes de caminar.
—¡JaeJoong!
Su cabeza giró, y de repente
sus ojos fríos fueron extraños.
—¿Si?
—Quería hablar contigo.
—Habla entonces.
Caminaba todavía, sin
mirarme y con la misma expresión vacía, estaba molesto. Y lo más eficiente era
colocarme delante de él para que se detuviera.
—No se hasta que punto
estuvo mal alejarme de ti, pero creí que necesitabas tu espacio. Sin embargo sé
que luego de la fiesta y lo de las fotos, hubiera sido necesario que al menos
nos mantuviéramos unidos, ya sé que no tuvimos sexo ni nada, pero…
—Tu disculpa es muy torpe.
JaeJoong arrugó el
entrecejo, ajustando la maleta a su espalda.
—¿JaeJoong por que siempre
tienes que hacer todo tan difícil?
—¡Por que fue muy difícil
para mi! A ti no te importa, por que tu reputación ya es mala. Pero a nadie le
gusta que anden diciendo que se anda revolcando con cualquiera solo porque bebe
de más.
Gritó, con su rostro rojo
por la rabia, y de pronto pareció exasperarse dispuesto a marcharse, pero lo
tomé del brazo, haciéndolo girar una vez más.
—¿Qué es lo quieres
escuchar?
—¡Ni siquiera yo lo sé!
…Solo déjame en paz.
Y se marchó, casi corriendo
dentro del conservatorio. Perdiéndose una vez más entre la gente.
…
…
—YooChun es un imbécil.
JunSu desbarató el pan en
sus manos y bufó con fuerza. Hoy particularmente se veía de mal humor, y es que
había tenido un enfrentamiento con YooChun antes del receso, y si, YooChun le
había dicho exactamente todo lo que me había dicho a mi.
Y había sembrado la duda en
JunSu.
—No eres tan malo, Hyung. En
realidad cantas muy bien.
ChangMin apoyó su mano en el
hombro de JunSu y él sonrió. Yo solo bebí un poco de agua, no había visto
JaeJoong desde la mañana y aparentemente estaba alejado de sus amigos, solo por
que yo estaba con ellos.
—¡Hola con todos! Bien,
escúchenme.
YooChun se había levantado
sobre uno de los comedores de la cafetería, con un micrófono en mano y sus
amigos rodeándolo, el sonido se escuchaba con fuerza a través de los parlantes
y pronto, todo el mundo enloqueció.
De algo le servía ser tan
popular.
—Mis queridos amigos que les
parece si disfrutamos de poner a ciertas personas en su lugar. Por que ya
sabemos que solo quienes tienen talento pueden agarrar un micrófono y cantar.
¿Verdad?
Todo el mundo se puso de su
parte, arrugué el entrecejo y apreté mis puños. JunSu se veía levemente
inseguro, temía probablemente que mencionara su nombre.
—Entonces… ¿Por qué no
levantamos nuestras copas?
Los aplausos y los gritos se
esparcieron, miré a JunSu, sus ojos seguían a YooChun mientras sonreía y se
paseaba por el comedor, con micrófono en mano mientras las primeras notas de la
canción se dejaban escuchar.
Bien, bien, apaga las luces
vamos a perder la cabeza esta noche
Adoro cuando todo es un
exceso y a las cinco de la mañana enciendo la radio
No te pongas tan presumido y
solo ponte a bailar. ¿Por que luces tan serio?
¿Que parte de la palabra
fiesta no entiendes? Desearía que tan solo te dejes llevar
Se deslizaba de un lugar a
otro, con la misma seguridad y la misma sonrisa de siempre, rozando el rostro
de algunas chicas. Bailando un poco y ganándose a absolutamente todos dentro
del comedor.
Y es que era obvio lo que
YooChun estaba haciendo, estaba marcando la guerra, y estaba demostrando su
superioridad antes de que incluso JunSu aceptara el reto de mantenerse en pie
de guerra.
¡Así que levanta tu copa si
sientes que estas equivocado!
De todas las formas
correctas que hay
Nunca seremos otra cosa que
no sea fuerte
Tontos, valientes, sucios
pequeños monstruos
Vengan y levanten sus copas
que esta noche vamos a perder el control
JunSu estaba ahí observando
cada movimiento en YooChun, y cuando las miradas de esos dos se encontraron,
JunSu acentuó su expresión de enojo. Él levanto su mano derecho, saltando un
poco y de inmediato casi todos lo acompañaron en el coro.
El lugar se llenó de
profesores, intentaban calmar un poco a los muchachos, pero cuando YooChun
lideraba algún escándalo, no eran pocos los que lo seguían. ChangMin sin
embargo solo se dedicó a mirar a MinHo, sentado a unas cuantas mesas de
nosotros, tomado de la mano de JoongHyun.
Así que levanta tu copa si
sientes que estas equivocado
De todas las formas
correctas que hay y no puedes más
Solo vengan, y levanten sus
copas… ¡Por mi!
YooChun terminó en el centro
del comedor.
Con el micrófono en mano,
señalando su pecho y con su enorme sonrisa en los labios, Su grandiosa voz fue
aplaudido por todos. Y casi de inmediato ubicando a JunSu caminó hacia nuestra
mesa, ante la mirada curiosa de todos.
—¿Qué dices, JunSu? ¿Cantas
también?
Estaba un poco agitado, pero
aun así, le sonrió a JunSu, lo miró solo a él, con aquella actitud superior que
a veces era tan insoportable. JunSu solo lo empujó. Susurró un ‘Idiota’ de sus labios y salió del
comedor.
Ante la mirada confusa de
todos y por supuesto, la sonrisa de YooChun se ensanchó.
…Por que había ganado la
primera batalla.
…
…
Encontrarlo fue más difícil
de lo que esperaba.
Lo encontré por los pasillos
algo desolados, debido a que casi todo el mundo se había arremolinado en el
comedor, empezaba a subir las escaleras cuando decidí apresurar el paso pero
JunHo apareció de la nada, agarrándolo por la mano y deteniendo su paso.
—Te puedes esperar un
segundo, JunSu.
—JunHo no tengo ánimos para
hablar con absolutamente nadie.
Entonces, el hermano de
JunSu arrugó el entrecejo.
—¿Se puede saber que
demonios te sucede? Desde que llegué nuestra relación solo ha empeorado y la
razón por la que me cambié a este conservatorio fue para que estuviéramos
mejor, por que es obvio que nos estamos alejando y ni siquiera se por que.
—¿Por mi? ¿Te cambiaste por
mi?— JunSu soltó una pequeña carcajada, era obvio se estaba dejando llevar por
la rabia. –Pues no lo parece, por que desde que llegaste no has hecho otra cosa
que estar junto al imbécil de YooChun.
—¿YooChun te gusta? ¿Es eso?
—¿Que? ¡No! Por supuesto que
no. Pero todo hubiera estado mejor si te hubieras quedado en tu Academia y
punto.
—Pero… ¿Por qué? Somos
hermanos y…
—¡Por que ya estoy harto de
tener que luchar contra tu maldita perfección! Por que ahora no solo tengo a
Park YooChun sintiéndose superior a mí, sino que también te tengo a ti en todo
tu esplendor, mostrándoles a todos los demás que eres mil veces mejor que yo.
JunHo abrió los ojos con
sorpresa, bajando un escalón seguramente sorprendido por las palabras de su
hermano menor, desde ese momento supe que la situación se le estaba yendo de
las manos a JunSu, por que sus ojos mostraron indicios de querer dejar escapar
lagrimas.
Y eso, no podía ser bueno.
—JunSu… Yo no sabía que te sintieras
así, yo… Lo siento tanto, no…
—No importa, ya nada
importa.
Secó la única lágrima que se
le había escapado y deslizado por su mejilla, le dio la espalda a JunHo
dispuesto a terminar de subir las escaleras. Pero antes de eso volvió a
encararlo, con su rostro aún más serio.
—Solo ten cuidado con
YooChun, por que si se entera que también cantas, entonces te alejará de su
grupo selecto de amistades y buscará la manera de destruirte y humillarte
públicamente como lo acaba de hacer conmigo.
Terminó de subir las
escaleras, JunHo se marchó, bajando las escaleras con una velocidad que me
sorprendió. Intenté pensar que dejarlo a solas a JunSu sería lo mejor, para que
pensara con calma y se tranquilizara, pero no iba a cometer el mismo error que
obviamente cometí con JaeJoong.
Todos no eran como yo, no
todos necesitaba estar solos en sus momentos de debilidad.
Así que subí a la terraza
del edificio, y me senté junto a JunSu el suelo, pasé uno de mis brazos por su
hombro y lo abracé, con mucha fuerza, con tanta que JunSu terminó por
derrumbarse ante mí, y lloró.
Susurrando de vez en cuando,
que era una horrible persona por haberle hablado así a su hermano. Y yo no
hallaba la forma de decirle que no podía estar más equivocado.
…
…
—Es raro ¿Sabes?... Que
ChangMin esté saliendo con mi hermano, es… Incomodo.
MinHo cerró su pequeño bolso
y suspiró, mirando el largo pasillo que nos conducía al salón de entrenamiento.
Las clases habían terminado, y JunSu aún me tenía preocupado. Solo esperaba no
encontrarme con YooChun. Por que en serio tenía ganas de golpearlo.
—No conoces desde hace mucho
a ChangMin, solo debes acostumbrarte.
—Es que a Siwon siempre le
ha gustado HeeChul, no quiero que esté jugando con él, ChangMin es muy buena
persona, es increíble, y…
—Y tú estas saliendo con
JoongHyun, con quien salga tu hermano no debería importarte MinHo.
—¡No lo digo en ese sentido!
Nos detuvimos frente a la
puerta, sonreí levemente ante la reacción del menor, y MinHo solo pareció
respirar profundo y olvidar mis palabras. Sin embargo las voces de JaeJoong y
ChangMin dentro detuvieron las manos de MinHo a punto de abrir la puerta.
—¿Lo ves, Min? Te dije que
si te hacías amigo de MinHo, te beneficiaría para que pudieras estar con Siwon.
—No estoy saliendo con Siwon
por MinHo.
—Pero ayudó.
—No ayudó, y deja de decir
tantas…
Las palabras de ChangMin se
vieron interrumpidas por el movimiento brusco de MinHo mientras abría la
puerta, tenía el entrecejo arrugado y apretaba con fuerza el pomo de la puerta.
—¿Te hiciste mi amigo solo
para salir con mi hermano?
ChangMin movió de inmediato
la cabeza, pero MinHo solo afiló la mirada.
—Por supuesto que no. ¿Qué
clase de persona crees que soy?
—¡De las que usan a los
demás solo para conseguir lo que quieren! ¡De las que no les importa nada más
su bienestar propio! Eres idéntico al grupito de Park YooChun, que bueno que
estás saliendo con Siwon, son el uno para el otro.
Y luego vino el golpe de
clausura.
MinHo estrelló su puño en la
mejilla de ChangMin y él cayó sentado al piso, con la mano en su mejilla y
JaeJoong solo retrocedió un poco. En cuanto MinHo abandonó el lugar, ChangMin
salió corriendo tras él.
…Hoy era un día, maratónico.
…
…
Jamás en mi vida he buscado
tanto a alguien.
Y ahora era el turno de
ChangMin y MinHo, no los encontré por ninguna parte. No estaba seguro de si
habría entrenamiento hoy o no. Pero decidí volver al lugar donde todo había
empezado, al menos JunSu y posiblemente JaeJoong estarían ahí.
—¿A que estas jugando con el
muchachito ese?
Dentro del salón, HeeChul
había acorralado a Siwon, con su mano apoyada en la pizarra, y su rostro
demasiado cerca al rostro del hermano de MinHo. Era oficial, ChangMin y Siwon
estaban saliendo, entonces ¿Por qué Siwon no lo alejaba?
—¿Estamos saliendo? ¿Qué tiene
de raro?
—Que tú nunca habías salido
en serio con nadie.
—Pues ChangMin es una buena
opción. ¿No crees?
Siwon sonrió, y HeeChul
inmediatamente arrugó el entrecejo, aparentemente muy molesto con aquella
respuesta.
—Tú y yo odiamos los
compromisos. Prometimos que si alguna vez salíamos en serio con alguien sería
entre nosotros.
—Pues tú aún no quieres
salir en serio con nadie, no por eso iba estarte esperándote hasta la
eternidad.
—¡¿Es que te gusta ese
idiota?!
—…No hables así de él.
—Solo estoy diciendo la
verdad, Siwie.
Esta vez HeeChul se alejó,
sentándose en uno de los asientos y sonriendo, tan descaradamente que me
recordó a YooChun.
—Da igual, déjanos en paz y
de una vez te lo advierto Kim HeeChul. No te metas con él, te lo prohíbo.
Déjalo en paz, quiero que esto funcione. NO TE ENTROMETAS.
Siwon no gritó, pero si se
acercó al rostro de HeeChul y acentuó cada una de sus palabras con firmeza, eso
sinceramente me dejo un poco más tranquilo.
—¡Tu me amas!
El grito de HeeChul
probablemente sorprendió a Siwon tanto como a mí. Pero de la sorpresa, Choi
pasó casi inmediatamente al enojo, agarrando a Kim por la camisa.
—¡¿Si lo sabías por que has
fingido todo este tiempo que no era así?!
HeeChul no volvió a objetar
palabra, esto estaba tomando rumbos insospechados, volví a caminar, alejándome
de aquel salón, y unos segundos después, luego de ese silencio que seguramente
HeeChul interpuso entre ellos.
Siwon se marchó. No pidió
más explicaciones.
Yo en serio empezaba a dudar
de la legitimidad de esa relación entre ChangMin y Siwon, por que siempre había
pensado que a ChangMin le gustaba MinHo, pero de repente un día ellos llegaban
de la mano, anunciando que estaban saliendo y todo el mundo se sorprendía.
…
…
—Yo creo que hoy ya no hay
entrenamiento.
JunSu se levantó del suelo,
aún con poco entusiasmo. Tomó sus cosas y sacó su celular aparentemente
revisándolo, lo observé por un momento y pensé que sería un buen momento para
que habláramos de lo que quedó pendiente.
Sin embargo JaeJoong
permanecía sentado sobre un pequeño escalón. Con la mirada fija en el suelo, y
sinceramente no sabía que era lo que le sucedía, de pronto JunSu se paró
delante de mi y sonrió.
—Hyung… ¿Nos vamos juntos?
Sonrió forzosamente, era el
momento, había el tiempo suficiente y sin embargo no podía dejar solo a
JaeJoong. No otra vez.
—Lo siento, JunSu. Me voy a
quedar un rato más sino te molesta.
—Oh, no tranquilo… Yo… Solo…
Nos vemos mañana.
Intrépidamente nervioso,
JunSu giró y se marchó, con una expresión extraña en el rostro. JaeJoong sin
embargo había parecido ausente a nuestra conversación.
Lo sabía, él estaba ahí,
sintiéndose culpable por lo ocurrido entre ChangMin y MinHo, y quizá no era el
momento, pero deseaba más que nada, que volviera a ser el mismo molestoso imprudente
de siempre, al menos conmigo.
Entonces decidí, sentarme
frente a él y tomar sus manos.
—Lo siento, no soy bueno con
las palabras, nunca lo he sido. Pero es que tú eres la primera persona que en
realidad… Bueno, realmente eres muy extraño y a veces no se como tratarte, pero
estos días, si me preguntas otra ves no lo vuelvo a decir, pero… Te he
extrañado JaeJoong.
Sus ojos me miraron,
ligeramente débiles, a punto de llorar, JaeJoong se encontraba sentado sobre un
pequeño escalón, yo en el suelo. Y a él se le ocurrió la brillante idea de
lanzarse sobre mí y abrazarme.
Caí de espaldas al suelo,
con el peso de su cuerpo cubriéndome por completo, sus brazos rodeaban mi
cuello. Mi corazón latió, no tan desbocadamente como cuando JunSu me abrazó,
fue distinto, fue como un golpe, como un solo latido.
Mi cuerpo entero se estancó,
por que de pronto tener a JaeJoong abrazándome me hizo sentir lejos de todo y
de todos. Por que de pronto su aroma me absorbió y yo cerré los ojos. Toqué su
espalda y suspiré.
Se sentía demasiado bien
abrazarlo, era sencillamente indescriptible.
Sentía que de algún modo el
tacto de su cuerpo en mis brazos jamás me abandonaría.
—Yo también siento lo que te
dije en la mañana. Y lo que te dije cuando creí que… Bueno, ya sabes lo de la
fiesta.
—…No te preocupes, JaeJoong.
Ya todo está bien.
Por un momento desee, que
ese momento durara un poco más, solo un poco más.
…
…
—Así que, ¿Qué te parece si
vamos mañana al veterinario? Ya es hora de que los gatitos tengan su primer
chequeo, además hay que ponerles nombre a los demás. Y sus vacunas, las vacunas
son más importantes. ¡Oh, cierto! Yo quiero uno, el de los ojos grandes… ¡Es
tan lindo! Le voy a poner… Mmh… Tengo que pensar en el nombre.
JaeJoong había vuelto a ser
el mismo.
Hablaba entusiasmado,
moviendo un poco sus manos mientras subíamos las escaleras hacía nuestros
departamentos. No mentí, de verdad lo había extrañado, igual de impulsivo y
espontaneo.
—¿JunSu?
Su voz fue suave, casi en un
susurro.
Y JunSu estaba ahí, sentado
en el suelo, arrimado a mi puerta y en cuanto nos vio, sonrió. Me miró y luego
respiró hondamente. Como si de pronto se sintiera gustoso con algo que acababa
de decidir.
—Hyung… Que bueno que
llegas, estaba esperando por ti.
—¿En serio? Me hubieras llamado.
¿Deseas algo?
—Quiero que hablemos… Sobre
lo que quedó pendiente ayer.
Mis expresiones cambiaron,
pude notar la mirada de JaeJoong y aún sonreí, extrañamente nervioso, las
llaves cayeron al suelo, pero de inmediato las levante. ¿Qué demonios me pasaba?
Sonreí, o al menos lo intenté. JunSu de pronto había hecho latir mi corazón
desbocadamente otra vez.
…Es que JunSu es tan… Él.
—Pero antes, quiero hablar
con Jae Hyung. ¿No te molesta?
—Eh, no… Supongo, te espero
adentro.
Él asintió, con una pequeña
sonrisa, dándome la espalda mientras miraba a JaeJoong, y los ojos de JaeJoong
me siguieron hasta que entré al departamento. Por alguna razón sus ojos me
pedían que me quedara.
No lo hice, y giré,
entrecerrando la puerta. Lo sentía, en los ojos de JaeJoong. Había una nueva
barrera que no estaba seguro de si existía o no. Pero fue como si me despidiera
de él, como si de repente lo estuviera abandonando.
Y fue inevitable, aunque va
contra lo que usualmente hago, contra mis principios, contra mi mismo. Me
acerqué a la puerta y traté de escuchar.
—Hyung… ¿Puedo preguntarte
algo muy personal?
—Claro, Su. Tu y yo somos
amigos desde hace mucho después de todo.
Casi hasta podía imaginar
una tonta sonrisa en el rostro de JaeJoong, JunSu estaba demorando demasiado.
¿Por qué no formulaba la pregunta de una vez por todas?
—Tú… Bueno, ¿A ti te gusta
Park YooChun?
—¿Ah? Bueno… ¿Qué? ¿Por qué
preguntas eso?
—Solo respóndeme.
—…Si.
Fue tan bajo, que de repente
sentí un frío desconocido en mi estómago, pero solo me quedé una vez más ahí,
escuchando atentamente. Esperando por las palabras de JunSu.
—¿Estas seguro?
—¿JunSu que sucede?
Apenas fue audible, pero
escuché un suspiró, uno que probablemente pudo haber venido de los labios de
JunSu.
—Si YunHo Hyung y yo… Intentáramos
algo, ¿Eso te molestaría?
El silencio que prosiguió a
aquello fue extenso, demasiado tal vez, no podía verlos, no podía ver el rostro
de JaeJoong, no sabía si estaba feliz, no sabía si todo estaba bien. Pero
finalmente fue JunSu quien volvió a hablar.
—¿Jae Hyung?
—¿Por qué habría de
importarme? Si ustedes están bien, no creo que haya problema alguno.
—¿Seguro?
Me apegué un poco más a la
puerta. Y cuando escuché el ligero ‘Miaw’
de Lion mis ojos se dijeron al piso, él se abrió camino por la pequeña apertura
de la puerta y salió, con sus patitas moviéndose ágil y rápidamente.
—¡Lion!
Lo agarré en el suelo, JunSu
y JaeJoong me miraron, pero debieron haber supuesto que lo venía siguiendo
desde hace un buen rato, por que al parecer no objetaron nada. JunSu regresó a
mirar a JaeJoong y él solo evitó mirarme.
—Estoy seguro JunSu, avísame
cuando suceda. Para invitarlos a comer a mi casa. ¿Bien?
De repente JaeJoong comenzó
a buscar sus llaves. Velozmente, torpemente y con la misma velocidad entró en
su casa, levanto la mano en señal de despedida y simplemente entró. Como si
vernos ya no le fuera necesario.
—JunSu…
—Hyung, vamos. Quiero que
hablemos.
Extendió su mano derecha, lo
miré por un momento y luego coloqué a Lion en mi brazo derecho y con mi mano
izquierda libre uní nuestras manos, entrelacé nuestros dedos y solo una vez
regresé a mirar a la puerta de JaeJoong.
…Pero él no volvió a salir,
no lo volví a ver hasta el día siguiente.
…
…
Alguna vez escuché que las cosas suceden por algo.
JaeJoong y yo hablábamos, él con sus locuras de siempre, con sus
tonterías y sonrisas extrañas. Pero eso era en el conservatorio, eso era de
camino a casa a veces. Incluso hasta fuera del edificio o de nuestros
departamentos.
Al final, JaeJoong nunca me acompañó al veterinario. Entre los
carteles de cómo alimentar a tu mascota, de vacunas y el resto. JunSu me
sonrió, entreteniendo a los gatitos mientras el doctor los vacunaba uno a uno.
JunSu quiso ponerles nombres, pero entonces recordé a JaeJoong y
decidí decirle que mejor lo dejemos para otro día. Por que aún esperaba por
JaeJoong, por que volviera a entrar por mi puerta, con la misma confianza de
siempre.
Sin embargo, como cada noche de los últimos días. Me quedé solo
esperando, por que JaeJoong no volvió a buscarme más.
…
…
Publicado por: Yoonho_kts
Estado: ———
esta super interesante *w*
ResponderEliminarporfa continualo ..... quiero que llege alguien y que se quede con jaeboo xD y que haga reaacionar a Junsu
att: Gisel
digo Yunho xD
ResponderEliminaratt Gisel
nooooo D: necesito leer maaas D:!!!!!!!!! que historia tan geniaaal...me encanta como se desarrolla todo y que uno tenga dudas de como van a terminar las cosas...aunque personalmente estoy cruzando los dedos para que yunho se quede con jae
ResponderEliminarwoww kiero leer mas ... please please continuala rapidito.. me encanto te esta kedando super porfis... me encanto pobre JJ seguro esta mal pobre :S
ResponderEliminarwooouu esta demasiado espectacular demasiadoooo
ResponderEliminarporfiiiisss
siiiguelaaa *.*
Por Fa Nueva Lectora Me Encanta Tu Fic Esta Muy Bueno Siguela Please :D
ResponderEliminarespero y espero... yunho date cuenta jae es el indicado para ti
ResponderEliminaruuuuuhhh yunho que dilema po que no sabe lo que siente, por que cuando ve a junsu su corazon late desforado, pero cuando ve a jae siente cosas que no puede explicar... ese yoochun me esta dando bronca, pero ojala se de cuenta y lo busque a junsu... pobre yunho de estar solo y sin amigos paso a tener muchos, con problemas y preocuparse por cada uno de ellos, me encanto segui escribiendoque y te felicito...
ResponderEliminarme gusta aunq en verdad no soy seguidora de esta pareja me gusta en este instante el hosu pero mmmmmmm yunho quiere a jae esta mas q obio porq al parecer no siempre el q te gusta es del q estas enamorado sin querer reconocerlo osea es dificil admitir q quieres al q va en contra de tu personalidad y lo q creias tu tipo ideal de persona .
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