Miradas cap 4

Aunque le estaba costando muchísimo, cada vez corría mucho más rapido por las calles de la ciudad intentando pensar en donde se encontraría Yunho. Durante unos segundos por su cabeza se pasaron todas las imágenes que recordaba de su novio y enseguida pudo reaccionar, miró su reloj y recordó que a esas horas su novio solía ir a ensayar y una corazonada le dijo que Yunho se encontraba en el sitio donde se habían conocido, así que con rapidez dobló una esquina y se dirigió hacía ‘Jum Up’.

ChangMin corría y corría hasta que de repente comenzó a llover con fuerza, su aliento se chocaba con cada una de las gotas de lluvia que caían sobre él, y después de 10 min sin parar de correr pudo ver a lo lejos el loca. Estaba oscuro y había niebla debido a la lluvia, pero aúnque estuviera lejos pudo observar que un chico estaba tirado en el suelo, sin duda, se trataba de Yunho.

- ¡YunHo! , ¿estas bien? – decía ChangMin mientras se acercaba a su chico – dios mio, Yunho...

No obtuvo respuesta… su novio estaba en el suelo, inconsciente y lleno de sangre y heridas por la paliza que minutos antes acababa de recibir. Changmin lo cogió y se lo puso a su espalda con el mayor cuidado posible para no dañarle más de lo que estaba, poco a poco una vez lo tuvo bien cogido empezó a caminar lo más rápido que pudo dirigiéndose al hospital mas cercano.

A pesar de que casi no podía con el cuerpo de su novio, puso todo su coraje y esfuerzo, mientras empezaban a caer lágrimas por sus mejillas, para llegar lo más antes posible a un hospital. Ya allí rápidamente atendieron a YunHo de urgencia, mientras ChangMin daba los datos de su chico en el mostrador e intentaba explicar lo que había podido pasar sin dar datos que pudieran perjudicarle de ninguna manera, se puso en contacto con su familia pero les dijo que no se preocuparan que el iba a quedarse allí para cuidar de el, ya que por lógica la madre de Yunho no podía dejar sóla a su hermana. Después de media hora los médicos terminaron de hacer las curas a YunHo e informaron a ChangMin.

- ¿El acompañante del señor Jung? – dijo un médico.
- Si, soy yo, ¿Cómo esta? – preguntó ChangMin.
- Verá, esta bien, ya esta fuera de peligro, pero habrá que operarle, su bazo ha sido dañado, no es una operación difícil pero hay que hacerlo para evitar arriesgar la vida del señor Jungo.
- Comprendo… ¿Y cuanto van a tardar? – volvió a preguntar ChangMin – Me gustaría poder ir a verle.
- Usted espere aquí, no llevara mucho tiempo, como máximo una hora, pero es mejor que le deje descansar un poco también, dentro de más o menos tres horas podrá entrar a verle – siguió diciendo el médico – usted tambien debería de ír a descansar.
- Muchas gracias, lo tendré en cuenta – dijo ChangMin mientras se sentaba en una silla – Dios mío, ¿por qué? ¿por qué ha pasado esto? – se dijo para sí mismo mientras se pasaba la mano por el pelo y entonces fué a llamar a Junsu y Yoochun.

Una hora después la operación había terminado y los amigos de ChangMin llegaron al hospital para acompañarle en ese momento, la verdad tenían muchísimas preguntas pero el chico no supo que responderles. Aunque en el fondo sabía quienes le habían echo eso a YunHo, pero por respeto a su novio, ya que este no había contado nada a sus amigos... prefirió ocultar aquel detalle. Los tres bajaron a la cafetería y pidieron un café cada uno, ChangMin estaba realmente nervioso, tanto que estaba apunto de volver a llorar. Junsu se sentó a su lado y le puso su mano en el hombro intentando darle el mayor de los apoyos.

- Ehh ehh, ChangMin no te preocupes, todo va a ir bien – le dijo YooChun mientras abrazaba a su amigo.
- Vosotros no lo entendéis, esto es culpa mía, si el… - empezó a decir ChangMin.
- ¿Culpa tuya? ¿Por qué?, tú no has hecho nada – le interrumpió Junsu.
- Es algo que ahora no puedo explicar chicos, lo siento – empezó a decir ChangMin – pero la verdad es que la vida de YunHo no ha sido muy feliz que digamos y ahora esto, esto le ha pasado a causa de una serie de cosas, y una de ellas soy yo.
- Bueno, todo saldrá bien – terminó YooChun.
- Sí, ahora no tienes que preocuparte por eso – continuó Junsu tras su novio – primero debemos de pensar que se pondrá bien y ayudarle en todo lo que podamos.

Minutos después ChangMin mando a casa a sus amigos, ya que no quería que estuvieran allí porque al día siguiente tenían cosas que hacer y tampoco es que ellos pudieran hacer mucho por YunHo. Los médicos por fin le dejaron pasar a verle y desde luego no se lo pensó dos veces... mientras contemplaba como su novio dormía,ChangMin cogió el sillón que había al lado de la cama, se sentó en el y tomó de la mano a YunHo.

Entristecido contemplaba como en esos momentos dormía y necesitaba la ayuda de las maquinas para poder respirar bien, se veía apaciblemente tranquilo pero las marcas por todo su cuerpo mostraban el gran sufrimiento que minutos atrás había pasado. Casi sin quererlo y sin darse cuenta, entre el hueco del pijama del hospital vio que una cicatriz se escondía debajo, a pesar de que había visto el cuerpo desnudo de YunHo aquella noche de pasión no se paro a verlo en detalle porque estaba oscuro y completamente entregado a la pasión. Esa cicatriz iba desde el centro de su pecho hasta casi la mitad del vientre, se notaba que no era una cicatriz echa por alguna operación básicamente por la forma que tenía, además de que se diferenciaba claramente con la más reciente que tenía en esos momentos debido a la operación. Se preguntó que le había pasado para tener esa marca en su cuerpo, pero mientras pasaba sus dedos por ella YunHo por fin abrió los ojos.

- Ey… cariño, ¿Cómo estas? – dijo ChangMin mientras miraba feliz a YunHo.
- ¿Dónde estoy? – preguntó este.
- Estas en el hospital, fui a buscarte cuando…
- Ah sí – dijo YunHo con voz entrecortada – Perdóname, no deberías estar viviendo una situación así.
- Han sido ellos ¿verdad? – preguntó ChangMin.
- Si, toda libertad tiene un precio y el mío está aún por pagar – dijo este mientras ponía todo su esfuerzo en lanzar una sonrisa irónicamente.
- ¿Te piden dinero? – dijo su novio – Esto es lo más bajo que podían llegar a hacer. Te voy a ayudar no te preocupes, desde este momento no vas a tener nada que ver con esa gente, serás libre para cumplir tus sueños e ilusiones, te lo prometo.
- No, no quiero que te impliques – dijo YunHo.
- Ya estoy implicado, eres mi novio, tengo que ayudarte.
- Por favor, Changmin – Yunho comenzó a toser – no hagas ninguna locura.
- Shhh, ahora debes descansar Yunho. Yo me encargaré de esto – y poco después Yunho se quedó durmiendo.

Changmin esperó unos minutos para segurarse de que su novio estaba completamente dormido. Le besó en la frente y le tapó bien para que no pasara frío esa noche. Después fué a coger su chaqueta y se la puso mientras se le quedaba mirando con preocupación. Desde el momento en que supo a que se dedicaba su novio, supo perfectamente que no iba a ser un camino fácil que recorrer. Y ahora, estaba dispuesto a todo sin importarle nada más que la felicidad del chico. Cogió un papel y empezó a escribir para después dejar el papel en su almohada. Volvió a mirar atrás antes de salir de aquella habitación, y mientras observaba como Yunho dormía suspiró en profundidad.

A la mañana siguiente YunHo despertó y observó que ChangMin no estaba a su lado, pero había una nota al lado de su almohada. ‘He ido a arreglar esto, no te preocupes estaré bien, procura descansar y reponer fuerzas, Te quiero’.

- Maldito loco – susurró YunHo – espero que no te pase nada. Por favor, ten cuidado...

ChangMin fue hacía su casa y ante la atenta mirada de sus amigos este cogió su tesoro más preciado, la guitarra que se compró con tanto esfuerzo y que había sido su mayor compañera desde hace muchos años. Esta era la única copia de una guitarra que años atrás había sido tocada por uno de los grupos más famosos del mundo, siempre pensó que eso era lo más grande que tenía, pero ahora tenía una razón más importante y esta era su novio.

Decidido fué al edificio donde se encontraba el jefe que había tenido las manos de YunHo atadas durante tantos años, con impaciencia subió las escaleras y cuando llegó hacía el recibir dos personas le observaron.

- ¿Qué quieres? – le preguntó uno de los chicos.
- Vengo a ver al jefe – dijo Changmin con toda seguridad.
- Está más arriba, si vienes a buscar trabajo, es el día indicado – entonces ambos chicos comenzaron a reír.

Como era habitual que la gente joven fuera a buscar trabajo allí no se extrañaron de la presencia de Changmin, pero la realidad era que el chico no venía precisamente a buscar trabajo, sino a dar fín a los años de exclavitud que su novio estaba viviendo en ese maldito antro. Subio las escaleras aún viendo en su mente la imagen de Yunho ensangrentado y tirado en el suelo y se odió por sí mismo por haber sido la causa de aquella situación. Pero ahora, era el momento de saldar esa deuda.

Al llegar al despacho de Wong dio una patada a la puerta y entró dentro para enfrentarse a la persona que se había atrevido a dañar física y psíquicamente a su novio. Su cara de rabia y enfado lo decía todo, pero ese día se metió en una situación de la que no iba a ser fácil salir.

- ¿Qué quieres chico? – preguntó Wong ante la intromisión de Changmin – creo que tus padres no te enseñaron buenos modales.
- ¡Silencio! – Changmin gritó enfadado dispuesto a terminar de una tajada con todo aquello.

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