Las reglas las pongo yo cap 7

Yoochun

Desde aquella noche en que lo había hecho con Changmin me sentía diferente. Como si realmente ahora lo tuviera todo y no me faltara nada.
Todas las noches venía para mi casa y allí lo devoraba, como si cada beso fuera el primero, como si cada caricia fuera la última… realmente ese niño me volvía loco.
-Señor ¿?...señor ¿?
-Siii….¿?-le contesto a mi secretario desde mi cuarto.
- Es hora de que vaya al trabajo…-dice desde detrás de la puerta.
-Sii- miró hacia mi lado. Allí el cuerpo desnudo de Changmin, durmiendo como un bebé y con una sabana tapando sus partes. Me encantaba verle dormir, era tan inocente, tan vulnerable…y esa cara de niño bueno que esconde a un chico súper inteligente que es capaz de engatusar a la gente con sus palabras y conseguir todo lo que se proponga. Una máscara perfecta.- nee…pequeño…-le doy unas palmaditas en la espalda.
-Mmmm…..-se despierta poco a poco.
-Es hora de trabajar-le susurró al oído. Vuelve su cara hacia mí.
- Ya¿?
- Si…
- Ok- me besa en los labios y se levanta de la cama. Mientras se encamina hacia el baño yo disfruto viendo su hermoso cuerpo desnudo pasearse por delante de mí.
Se oye el agua de la ducha correr…y al poco rato sale Changmin empapado secándose el pelo.
-Neee…mi ropa?¿- me mira.
-Hay en la silla…
-Gracias…-va hasta la silla. - nee para de mirarme tan fijamente…me da vergüenza
-Ok ok-salgo de la cama y me encaminó al baño. Noto su mirada fija en mi… devorándome. Me meto en la ducha.
- Chunni!! Me voy ya.
- OK!!! Nos vemos allá.
- Vale.-escucho la puerta abrirse y cerrarse. Ya volvía a estar solo.
A los 10 minutos salgó de la ducha y voy hasta mi cuarto vacio, pero, ya no sentía ese sentimiento de soledad…y eso me agradaba mucho. Me vestí rápidamente, vi encima de la mesita las pulseras de Changmin y sonreí. Salí del cuarto con una amplia sonrisa…la verdad, no sabía el motivo.
-Señor ¿?
-Dime-le mire sonriente.
-Ha llamado el Jefe.-el Jefe(el encargado de todos los clubs nocturnos y él que proporciona el dinero a Yoochun, el jefe de Yoochun para entendernos.)..Que querrá.
- Qué quiere ¿?
-A dicho que necesita unos cuantos camareros para un club en el centro de Seúl.
- Muy bien pues mándaselos.
-Señor ¿?
-Si…-su rostro me preocupo. Me extendió una hoja.
- Quiere también al señorito Changmin.
- Qué…¿?- mire la hoja. Y si allí aparecía su nombre.
Monte en la limusina totalmente ido…no me podía creer lo que…dios!!!
Porque Changmin de tantos camareros que tengo y lo quieren a él.
El mundo parecía venírseme encima…la depresión, el sentimiento de soledad, la angustia, la tristeza…todo. Pero no podía hacer nada, debía mandarlo con mi Jefe. Era el destino ¿?
Cuando llegue a la puerta de Club Purple Line, como siempre, una cola que doblaba la esquina. Subí hasta mi despacho y hice que llamara de uno en uno a cada uno de los camareros. Llegó el turno de Changmin, y fui yo personalmente a buscarlo.

Changmin

Mi vida parecía un sueño. Cada día parecía que flotaba que nada podría ir mal…
La primera persona que me quito la virginidad, Chunnie, la persona a la que quería con tanta fuerza. Y que él sentía lo mismo por mí, eso creo yo. Cada noche que pasaba con él era como estar en el paraíso, y pensar en que cada noche volveré a besar esos hermosos labios, a tocar ese cuerpo, a sentirle dentro de mí…hacia que el tiempo fuera más lento y la espera más excitante.
-Changmin…-oigo a alguien llamarme y me doy la vuelta. Era Chunni.
-Si jefe ¿?-que raro que me hablara en el trabajo.
-Ven conmigo. Necesito hablar contigo.
- Pero estoy trabajando…tengo que servir unas mesas.-frunce el ceño.
-Sirve esas mesas…te espero en el vestuario.- y entro por la barra y se metió en el vestuario. Me estaba preocupando.
Serví rápidamente esas mesas y entre en el vestuario. La puerta trasera estaba abierta por lo que Chunni estaría fuera.
-Chunni¿?
-Aquí…-se dio la vuelta y me miro.
-Qué pasa ¿?
-Mañana te marchas de aquí, para un Club en el centro de Seúl llamado Wrong Number. Uno de los mejores.
-Pero por qué ¿?-no entendía nada de nada.-porque…
-Porque mi Jefe lo ha decidido así, eres uno de los 4 camareros que ha escogido.
-Pero no se puede hacer nada…no le puedes decir que no puedo que ..yo que se.-me acercó a él-me siento tan a gusto aquí trabajando..no me quiero ir..-me mira ..me pareció ver lágrimas en sus ojos.
-No no puedo hacer nada.- fue hasta la puerta- dicho esto vuelve al trabajo. Después cuando acabas acuérdate de venir a mi casa…quedaron cosas tuyas allí.
Pero…que es lo que ocurre… porque a mí.

Cerca de las 5 cerramos el local, fui a mi habitación y hice la maleta. Tampoco es que tuviera mucha ropa y demás así que acabe rápido. Llame a un taxi y fui hasta la casa de Chunni.
Me abrió la puerta el secretario, quien tenía una cara apenada. Fui hasta el cuarto de Chunni, entre y cerré la puerta tras de mí. No atendí mucho al sonido de la ducha y fui directo a por las pulseras que divise en la mesita. Miré por todos los sitios pero nada, entre en el baño silenciosamente para mirar si me quedará algo, y fui cuando lo oí. Chunni estaba llorando.
Deje mi móvil y el resto de cosas en la mesita de noche. Me desnude y fui hasta la ducha. Abrí la puerta de la ducha y entre.
-Si ya lo cogiste todo vete por favor.-Me dolía tanto verle llorar, escuchar su voz cebrada… me acerque más a él y le abrace por la espalda, mientras el chorro nos mojaba a los dos.
- ….te …quiero.- al decir esto, sentí miedo. De que me apartara, de que se alejará de mí. Pero me equivocaba.
Chunni se dio la vuelta y me abrazo también, apoyando su frente con la mía. Ahora le podía ver la cara… sus ojos rojos de tanto llorar, las lágrimas que resbalaban por sus mejillas y que se camuflaban con el agua de la ducha.
Me miró, con sentimiento de tristeza en sus ojos.
-dímelo otra vez…quiero oírlo de nuevo.-acerco sus labios a los míos, sintiendo así su aliento en mi piel.
- Te quiero, Chunni.- me besó apasionadamente. Y esa misma noche hicimos el amor, esta vez, realmente, cada beso, cada caricia,….sería la última.

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