El chico Nuevo cap 19

Tomé el primer taxi que apareció rumbo a mi casa, le entregué la dirección al chofer y le pedí que no se detuviera hasta llegar. Lloré todo el camino, cuando llegué Mizato estaba esperándome en la entrada de mi casa, era tarde y hacía frío.

- ¿Qué haces aquí? –le pregunté sorprendido.
- Tu madre me llamó para decirme que habías vuelto –me respondió.
- Pero yo no les dije que vendría aquí.
- Lo sé, pero tenía la esperanza de que vinieras –la miré y la abracé.

Entramos en silencio, nos fuimos a la cocina y Mizato preparó café para los dos.

- Tú madre también me dijo que tu padre recuperó su empleo con una generosa suma de dinero en compensación, el Sr. Nakamura prácticamente le rogó que volviera –me contó, la noticia no me sorprendió- ¿y encontraste lo que buscabas?
- Si, lo hice –le respondí- pero desgraciadamente no sé qué hacer ahora que sé que fue lo que realmente pasó. Durante estos dos meses creí que no podría seguir adelante con el corazón roto, pero me sorprendí a mi mismo enfrentando la situación y superándola en cierto sentido. Pero ahora, todo vuelve a mi pecho, recuerdos de momentos maravillosos, y otros horribles –no pude seguir.
- Entiendo –suspiró mientras calentaba sus manos con la taza de café- ¿y qué vas a hacer ahora?
- No lo sé –dije, sentí mi celular sonar y recé para que no fuera Junho.

Changmin era el que me llamaba:

- Jae!, que bueno, creí que no te volvería a ver –dijo emocionado- Yunho me llamó para contarme que había regresado, también me contó toda la historia.
- ¿Él te pidió que me llamaras? –le pregunté algo enojado.
- Por supuesto que no, no tengo intención alguna de ayudar a Yunho, te entiendo perfectamente. Te llamaba para saber si puedo ir a verte hoy, tú y yo necesitamos hablar con un amigo y yo te considero mi amigo Jae.
- De acuerdo, toma nota de mi dirección.
- Gracias Jae, de verdad necesito hablar con alguien.

No tardó mucho en llegar. Lo invité a pasar y lo llevé a mi habitación en dónde estaríamos más cómodos para hablar, Mizato nos llevó café y nos encendió un calentador para que mi habitación no estuviera tan fría, se despidió y se fue a acostar a su cuarto. Changmin miró mi habitación con atención, era obvio que la suya era doblemente más grande y además, la mía estaba casi vacía, lo único que quedaba era mi cama.

- No tengo mucho para ofrecerte Changmin, no tenía planeado volver –le dije sentándome en una esquina de la cama, Changmin se acomodó al otro extremo.
- No te preocupes –me dijo sonriendo- y bien ¿cómo estás?
- No estoy seguro –le respondí- ¿Qué tal tú?
- No muy bien, no creí que las cosas serían tan complicadas con Yoochun ahora.
- ¿Por qué lo dices?
- El día del accidente me di cuenta de que ya no sentía rabia por él, incluso cuando despertó y me miró sentí mucho amor por él. Le pidió a los demás que nos dejaran solos –me miró un momento luego tomó su café- me miró mucho tiempo antes de hablar y lo primero que dijo fue “perdóname”. No supe que decirle, tal vez yo estaba muy asombrado por su franqueza y verdadero dolor. Cuando lo sorprendí contigo en el baño, me encerré con él, lo miré con odio tirado en el suelo, le tomé su rostro y sin ningún afán de ocultar mi rabia le dije que me daba asco –pareció afectado por el recuerdo- No creí ser capaz de volver a mirarlo y no sentir eso. Cuando me pidió que lo perdonara no pude negarme, sin embargo, cuando me pidió volver y a pesar de que lo deseaba no fui capaz de hacerlo.

* Historia de la reconciliación de Changmin y Yoochun*

- Changmin yo te amo, lamento tanto lo que pasó –dijo mirando a Changmin con profundo amor.
- Ahora que estas aquí y que casi te matas podrías abusar de eso para hacerme volver, pero no te lo puedo dejar tan fácil –le respondió Changmin- estoy herido Yoochun, pero si me das tiempo, tal vez pueda volver a estar contigo.
- Con eso me basta por ahora, no voy a presionarte, sólo quiero que te quedes a mi lado, te necesito.

Yoochun estuvo una semana en el hospital, lo fue dado de alta, Changmin no se separó de su lado, y a pesar de que Yoochun intentó más de una vez besarlo, pero Changmin se negaba. Pasó otra semana y Changmin lo visitaba con frecuencia, incluso lo ayudaba a bañarse para que no mojara el yeso de su pierna y tampoco la moviera mucho. En esos momento Yoochun no podía dejar de sentirse excitado por el rose constante de las manos Changmin y la esponja. Changmin intentaba no tomar en cuenta las erecciones de su amado, porque él mismo se sentía excitado tocándolo. Luego lo recostaba y dejaba que Yoochun se relajara.

- Changmin… ¿Cuánto tiempo más? –le preguntó Yoochun tratando de ocultar su deseo.
- No lo sé Yoochun, no pienses que yo no lo deseo, pero simplemente por ahora no lo puedo hacer –dijo Changmin y por primera vez después de dos semanas Changmin accedió a besarlo.

Fue un beso simple y sin mucha pasión, pero eso le bastó a Yoochun para sentirse feliz. Pasaron otras dos semanas y a pesar de que volvían a besarse, Changmin no le permitía llegar más lejos. Yoochun ya no soportaba el fuego entre sus piernas, esperaba a que Changmin se marchara para darse placer y satisfacer en parte el deseo incontrolable que sentía, y que ahora le causaba dolor. Un día cuando Changmin ayudaba a Yoochun a ponerse un pijama limpio, Yoochun comenzó a llorar desesperadamente dejando a Changmin asombrado.

- Yoochun, ¿Qué sucede?, ¿te duele algo? –preguntó Changmin asustado.

Pero Yoochun lo tomó con una fuerza sobrenatural y lo tumbo en la cama apoyando su cabeza en el pecho de Changmin sin dejar de llorar.

- Ya no puedo Changmin, te necesito tanto…

Se acercó a su rostro y lo miró, Changmin no fue capaz de moverse o decir algo, jamás imaginó ver Yoochun tan afectado. Lo besó con lentitud para intentar calmarlo. Yoochun se aferró a sus labios y se adueñó de su respiración, lo acarició con lentitud, temeroso de ser rechazado, pero Changmin no lo rechazó. Changmin lo abrazó y lo volteo para quedar sobre él. Besó su cuello, sabía que eso volvía loco de placer a Yoochun, mientras su mano bajaba hasta su vientre. Masajeó con insistencia su miembro febril, sin dejar de besar su cuello, Yoochun gemía incontrolablemente excitándolo. Se quitó la camiseta y los pantalones mientras Yoochun lo miraba con absoluto deseo. Changmin lo desvistió con cuidado de no dañar su pierna inmovilizada. Se subió sobre él dejando que su miembro desnudo lo rozara una y otra vez aumentando su placer. “Te amo”, le dijo Yoochun, Changmin no le contestó, simplemente se quitó la última prenda y dejó que Yoochun lo penetrará. Se movió sobre él primero con lentitud. Luego aumentó el vaivén así como sus gemidos. Hacía mucho tiempo que no sentía esa electricidad de placer en su cuerpo, cubriéndolo de deseo y lujuria. Podía sentir a Yoochun vibrando debajo de él. Yoochun tomó el miembro de Changmin y comenzó a masajearlo, el placer de Changmin aumentó al instante y Yoochun lo sintió por que las embestidas eran cada vez más profundas. Ambos llegaron al clímax con un último gemido de satisfacción completa. Changmin cayó sobre Yoochun respirando trabajosamente mientras éste lo abrazaba.

- ¿Te siente mejor? –le pregunto Changmin en un susurro.
- Si, muchísimo mejor –le respondió- no sabes cómo te deseaba, te extrañaba como no tienes idea.
- Creo tenerla Yoochun – se levantó y caminó con dirección al baño- ahora tendré que volver a bañarte –dijo Changmin cansadamente. El deseo se volvió a encender en los ojos de Yoochun- no te entusiasmes mucho Yoochun, por hoy basta.
- Lo sé, hoy tuve suerte y valoro lo que hiciste por mí.

A pesar de que Yoochun y Changmin continuaron haciendo el amor casi con la misma regularidad que lo hacían antes de haber terminado. Yoochun no se sentía feliz, porque Changmin aún no le decía que lo amaba. Lo mantenía inquieto y sobretodo triste a pesar de que lo disimulaba, sabía que si Changmin no lo amaba no accedería a hacerle el amor.

* De regreso a la pieza de Jae*

- Lamento haber sido tan explícito al momento de contarte todo esto –se disculpó Changmin- pero te lo cuento porque hay algo que me inquieta Jae, no soy capaz de responderle a Yoochun que lo amo cada vez que él me lo dice.
- ¿Entonces aún no lo has perdonado? –le pregunté.
- Tal vez no, pero sé que lo amo y que no quiero estar lejos de él.
- No dudo del amor que le tienes Changmin, y tampoco dudo del amor que te profesa Yoochun, sé que cometió un error, el asunto aquí es que si decidiste volver con él, entonces ya no deberías pensar en el pasado –le dije pensando en mi mismo- date tiempo, todo va a estar bien.
- ¿Y tú que harás ahora?, Yunho no se va a dar por vencido, te va a buscar y no descansará hasta que regreses a su lado –me dijo Changmin.
- Lo sé, pero no estoy seguro de querer volver con Yunho. Mientras escuchaba la historia de todo lo que había sucedido, sentí que mi corazón latía con fuerzas, muchas cosas se aclararon en mi mente, pero no pude dejar de pensar en la cantidad de besos y caricias que Yunho compartió con Iku. Fue horrible vivir todo eso, ni siquiera puedo decir que sentí celos, era algo mucho más grande que eso, era dolor, un dolor intenso –me levanté de la cama y caminé hacia la ventana, afuera las estrellas cubrían el cielo- no sé si seré capaz de olvidar todo eso.
- Quisiera ser capaz de poder ayudarte, pero la verdad no sé qué decirte. Tú situación es complicada. Yunho te ama, y sé que él también debió pasarla muy mal, saber que al hacer todas esas cosas delante de ti con Iku, debió partirle el alma, porque sabía que con eso te estaba perdiendo. Ni siquiera puedo imaginarme estar en su posición y la verdad es que creo que no tenía más opciones en ese momento –lo miré y noté que Changmin estaba muy triste- Yunho es mi amigo, también fue mi rival en algún momento, porque Yoochun estaba enamorado de él y a mí ni siquiera me miraba. Pero él siempre supo cómo llevar las cosas para que ninguno de los dos fuéramos lastimados. Al final guió nuestras vidas y logró hacer que Yoochun me amara.

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