El Accidente

Titulo: El Accidente
Autor: Celeste
Pareja: a la imaginación del cliente
Género: Slash, Angustia, Lemon
Extensión: Oneshot
Resumen: Cómo vivir sin la persona que amas sin poder comprar la vida y solo rogar por ella.

Nota: Es muy corto lo sé y la pareja lo dejo a la imaginación, me gusta que cada una(o) se imagine aquel que más le guste. Espero lo disfruten… ojala. Se recibe todo tipo de comentario para poder seguir aprendiendo gracias…^^
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Como explicar la angustia que traspasaba mi corazón, casi no podía respirar sentir como si una mano lo aprisionara. Mientras corría por la calle la gente me miraba y a mi me daba lo mismo solo quería llegar a tu lado, estar contigo, tomar tu mano para decirte que no me dejaras solo.

¨ Por favor ¨ gritaba en mi interior ¨ te lo suplico…¨ rogaba, mi boca estaba tan seca que no lograba pronunciar nada, solo quería estar junto a ti solo, eso si dios me lo permitía.

Como era posible que tan solo esa noche estuvimos juntos haciendo planes para nuestro futuro, continuar en el grupo, cantar por todas partes del mundo.

ESA NOCHE:

¨ Tohoshinki será el mejor… ¨ me dijiste mientras acariciabas mi cabello y yo me encontraba apoyado en tu pecho ¨ya verás seremos reconocidos en todas partes ¨ suspiré y te miré. Me acerqué y te besé. Sabía que eso te encantaba. Me puse sobre ti para poder profundizar ese beso que nos encendía a ambos, mis labios bajaron lentamente por tu pecho hasta llegar a tu tetilla la cual tomé entre mis dientes y tiré de ella. Sentí tu gemido. Te miré de nuevo tu seguías mirándome pero esta vez solo con pasión y deseo, un deseo que no se apagaba, al contrario se multiplicaba cada vez mas.

Seguí mi recorrido más abajo besando tu pecho, dejando con mi lengua un camino de saliva que después soplaba, tu gemías y te agitabas, era maravilloso verte en total abandono entregado a mí. Mi mano se acercó hasta tu boca, tú la tomaste y comenzaste a lamer mis dedos uno a uno hasta que luego de tomar uno comenzaste a chuparlo y lamerlo como si estuvieras lamiendo mi miembro. Gemí yo al imaginarme eso y mi propio miembro estaba palpitante por la anticipación, pero seguí mi camino llegando a tu propio miembro el cual tomé con mi mano y tu gritaste soltando mi mano, estabas tan duro, tan sensible que el solo tomarlo con mi mano te causaba tal dolor y placer que no podías evitar gemir y retorcerte en la cama.

Mi respiración se comenzó a agitar al verte de esa forma, te comenncé a acariciar lentamente de arriba hacia abajo, tu respiración y gemidos se hacía más rápidos mientras yo continuaba. Con mi otra mano libre me posicioné mejor para poder tomarte con mi boca, era lo que más quería, saborearte con mi lengua, tú te aferraste a las sabanas sin parar de gemir.

- ¡¡¡Mmmm!!!.... – gemías - te lo suplico…. ¡¡¡Aah aah aah!!! –gritaste cuando te soplé en la punta y luego pasé mi lengua

- ¿Lo quieres? –le pregunté

Tú gemiste más mientras tu pecho se agitaba por tu respiración entrecortada

-por favor… - me suplicaste y te miré, fue cuando me percaté que tus ojos brillaban y ya no pude contenerme más y te tomé con mi boca.

- ¡Aah aah aah aah! –gritaste y tu pecho se elevó cayendo nuevamente en la cama - ¡¡¡mmmmmm!! ….por favor…. ¡¡Aah aah aah aah!!! –me suplicaste.

Sin dejar de aferrarte a las sabanas como si estas fueran las que te mantuvieran atado al mundo del placer.

Comencé a lamerte lentamente al principió como si estuviera tomando el más exquisito manjar y para mi así era, tú seguías gimiendo, Dios como te amaba. La forma de retorcerte, la forma de gemir, tu respiración agitada, tu cuerpo, tu sabor, todo de ti.

- Aa h aah aah aah aah- tu mano se posó en mi cabeza tomando mi cabello ¡¡¡¡mmmm!! …. Por….por… favor….siiiii…aah aah aah aah!!! - no podías hablar ya que yo comencé a moverme con más rapidez de la base a la punta sin dejar de succionar. Sentía el sabor de tu pre-semen, yo sabía que en poco tiempo te correrías en mi boca pero no me importaba, quería saborearte completamente sentir ese liquido saliendo de ti.

- Aah aah aah!!!....ya….ya…no puedo más….si sigues yo… -me decías con tu voz entrecortada por la excitación. Tu cuerpo brillaba por el sudor.

Cuando sentí que ya estabas apunto de correrte te solté de mi boca con rapidez.

- ¡Aah aah aah! -gritaste con frustración y dolor por tu excitación – no pares…- me suplicaste mirándome con angustia. Yo tan solo te sonreí y tomando tu miembro con mi mano lo elevé un poco y bajé un poco mas hasta llegar a tus testículos, los cuales comencé a saborear con mi lengua. Al sentir eso tu cabeza se fue hacia atrás por el placer que sentías.

- Nooo!!!!- gritaste

Yo continúe con mi objetivo tomando uno y luego el otro. Sentir tus gemidos solo me provocaba para continuar con eso y no querer parar. Tú tan solo te agitabas y estabas completamente entregado a mí, era maravilloso verte en total abandono, si que era algo que quería ver.

Con mi otra mano me daba placer a mi mismo. Mi miembro también me dolía por la excitación, tan solo de imaginarme dentro de ti provocaba temblores en mi cuerpo pero quería ver todo de ti. Solté mi miembro y enseguida elevé tu cintura y tus piernas cayeron hacia tu cabeza exponiendo para mí esa entrada que tan solo quería penetrar. Tú gemías de anticipación. Tomé una almohada y la puse bajo tus caderas para que fuera lo más cómodo para ti y yo tuviera mayor acceso a tu entrada. Besé tus muslos y los lamí muy lentamente hasta casi llegar a ese orificio que me tenía loco de deseo, tú ya no te controlabas tan solo gritabas y gemías cada vez más fuerte para mi, era la mejor música. Luego con mi lengua comencé a saborear ese lugar tan anhelado para mi, preparándote para lo que vendría. Tus gemidos se transformaron en gritos cuando sentiste mi lengua.

- Te lo… suplico… amor… - mi pediste casi sin aliento así que sin quererte torturar más me puse en posición y tomando mi propio miembro lo fui introduciendo con sumo cuidado en ti, tú me miraste con pasión y con tu cuerpo bañado en sudor elevaste tu brazo con tu mano extendida hacia mí y yo la tomé. Nuestros dedos se entrelazaron cuando me hundí completamente en ti, tú te retorciste y te aferraste a mi mano como si esta lograba mantenerte en la tierra pero luego comencé a moverme lentamente muy lentamente mientras te veía con tu cabeza moviéndose de un lado hacia el otro y tu pecho levantándose por el placer que sentías.

Dios como me encantaba verte tan fuera de ti y completamente mío. Tomé la almohada y la retiré de tu espalda para tener acceso a su boca y poder besarte. Nuestras lenguas se movían en una danza sin control. Mis movimientos se hicieron más rápidos para darte mayor placer y darte la satisfacción que ambos esperábamos. Tu cuerpo comenzó a temblar junto con el mío, tu pecho rozaba el mío provocando mayor fricción en los cuerpos casi estábamos al borde de la locura, nuestras respiraciones agitadas, nuestros corazones latiendo al unísono, nuestros cuerpos bañados en sudor.

- ¡Mmmm!...- gemías- ¡si… si… si… más... Dios... no puedo… mas!! - gritaste

- Si… solo… ¡mío! - grité yo

Fue en ese momento de total entrega que ambos llegamos al orgasmo, mi semen dentro de ti y el tuyo entre ambos, tu cuerpo temblaba con total abandono del placer mientras el mío caía sobre ti

- Mi dios… es tan caliente… - me dijiste y besaste mi cabeza. Te abracé con las pocas fuerzas que me quedaban y de esa forma nos dormimos en total paz.


AHORA

Me encontraba en una total desesperación por no saber lo que ocurría contigo, si lograría verte con vida pero si el destino te arrebataba de mi lado yo… de una cosa estaba seguro, sin ti no sobreviviría .
Logré llegar al hospital. Ingrese por el lugar vip para no tener problemas con los periodistas que ya se encontraban allí, todos me miraban, las enfermeras, los doctores, la gente y yo solo quería encontrarte, estar junto a ti.

- ¨ Por favor no… me lo arrebates ¨ - era mi plegaría en mi mente.

Cuando me dijeron dónde estabas corrí hacia el ascensor y llegué donde esperaban los demás, todos me miraron con angustia yo solo seguí caminando, solo quería verte. Un doctor se acercó diciendo.

- Fue un accidente automovilístico, por lo que nos informaron un camión se pasó un alto, el chofer está en estado de ebriedad-

Yo miré al doctor diciendo

- Eso no me interesa… doctor… ¿Cómo esta… cómo esta … él?-

El doctor suspiró diciendo:

- Las heridas son graves, recibió el impacto en el rostro… lo… lo lamento… pero su cara no será la misma… - el hombre suspiró - y estas horas serán criticas, no podemos hacer nada más que esperar… lo lamento –

Yo lo miré fijamente y él tan solo desvío su mirada, yo con un valor que no sentía me acerqué al cuarto, a ese cuarto donde estabas debatiéndote entre la vida y la muerte.

Giré la perilla y abrí lentamente e ingresé.

No podía creer lo que estaba viendo. Mi cuerpo no pudo sostenerme por el impacto de verte así de esa forma. Caí al suelo, mis piernas no podía sostenerme y lloré. Lloré como un niño al verte así. Golpee el suelo con mis puños, no podía evitar el sentirme tan inútil sin poder ayudarte, sin poder darte mi propia vida.

¨¿Por qué?… mi Dios… ¿por qué? - me pregunté una y otra vez sin encontrar una respuesta. Me levanté como pude apoyándome en la pared y luego con todo el valor que tenía me acerqué a ti, te miré, las vendas cubrían tu rostro, tus brazos, mi dios no podía creerlo ¨ ¿ese cuerpo... ese cuerpo... era... tuyo? ¿Por qué nos tenía que pasar esto?... ¿por qué?¨ me lo preguntaba pero no tenía respuestas. Me acerqué y tomé tu mano entre las mías y la besé, luego te susurré muy suavemente.

- Amor … no me dejes .. por lo … que mas quieras… mi vida … no me dejes … - las lágrimas caían sin poderlas controlar todo en mi era dolor pero no por mí no… si no por ti, solo por ti. Los días pasaban sin piedad y tú no reaccionabas, el doctor me decía un montón de cosas que yo ni le entendía. Para mí eso no tenía importancia solo quería ver tus hermosos ojos mirándome como siempre tan solo eso, el resto no me importaba. Los chicos me decían que fuera a descansar, sabía que estaban preocupados pero a mí me daba lo mismo, sentía que si te dejaba tú jamás regresarías.

Hice de tu cuarto de hospital mi casa, no podía moverme de allí, no me importaba lo que pensaran los demás si descubrían lo nuestro tan solo sabía que no podía abandonarte. Hasta que un día fui a la cafetería como siempre recuerdo que te besé en la frente y me fui prometiéndote que regresaría yo jamás dejaba de hablarte para mi eso me mantenía unido a ti. Cuando me acercaba a tu habitación vi a las enfermeras saliendo y entrando de ahí. El vaso se deslizó de mis dedos cayendo al piso pero eso no me importó y corrí, sabía que algo había pasado. ¨ Por favor .. mí dios … ¨ rogué y al ingresar no podía creer lo que veía.

El doctor te revisaba y las enfermeras se movían de un lado para el otro y tú … tú … me miraste.
Tus ojos me decían todo tu miedo, tu preocupación, tu angustia. Así que corrí así ti y tomando tu mano y te dije:

- Tranquilo amor … todo está bien ... esto no es nada … - y te besé en la frente y vi que suspirante tomando como podías mi mano sin quererla soltar.

Pasaron las semanas los meses, cada día era una victoria más contra la muerte. Tú me sonreías y para mí era suficiente, tu cuerpo se recuperaba lentamente. Luego llegaron la cirugía plástica sabíamos que no sería lo mismo pero con tan solo verte vivo era para mi suficiente y sé que para ti también. Dejamos el grupo y lo mejor de todo es que los chicos lo entendieron, para ellos también era suficiente verte vivo, nos fuimos a otro país a otra vida pero una vida juntos y lo más importante …. VIVO.

FIN

Espero sea de su agrado ..^^