A/N: Algunos eventos estuvieron conectados con el pasado, así que les sugiero releer capítulos previos especialmente el capítulo 5b si sienten como que olvidaron algo XD
(“¿Qué clase de tipo era él? ¿Por qué lo amas tanto incluso después de lo que te hizo, Changmin?”)
Durante sus años de secundaria, Yunho era popular por su record en maratones, ganándose el apodo de 'piernas de acero' gracias a su velocidad y resistencia. Ocho años pasaron, y finalmente se presentó una oportunidad de poner el título a prueba, la cual surgió en forma de un paralizante Kim Jaejoong de cara contra la almohada, sobre sus faldas, por casi 2 horas ya. Los dedos del pianista se sentían adormecidos, necesitaba ahuyentar esa compasión excesivamente sentimental suya y hacer la cabeza del otro joven a un lado, o de lo contrario tendría un par de piernas necróticas. Considerando que iba a tener un recital el día de mañana, eso podría no ser bueno.
Para empeorar las cosas, un desfalleciente Kim Jaejoong no era el único cúmulo de emociones con el cual debía lidiar. Simultáneamente algunos extraños mensajes de texto comenzaron a aparecer en su teléfono, claramente tipeados por un cierto alguien que no estaba en su estado más sobrio, confundiéndolo si lo mejor por hacer era discutir o no discutir el contenido con el tipo sobre su regazo.
-Yunho Hyung, cuorazoonciitooooooo. Me dejé llevar y te traicioné. Soy un putito dongsaeng.-
-Llévatelo. Llévatelo. Lo que sea. Llévatelo antes de que yo lo haga. Hazlo desaparecer. Poor faavoorrr-
"Jae..." Escarbaba en el lío dorado que era el cabello de Jaejoong. "Creo que él solo está confundido..."
"Ese fue absolutamente un rechazo." Jaejoong insistió.
"Bueno, aún así, los sentimientos pueden cambiar. No es como si la oportunidad fuera de cero...anímate, ¿si?"
"Estoy animado."
"Pero estás tan animado como un pescado muerto..."
Jaejoong frotó sus ojos, tan adorablemente que hizo a Yunho contener el aliento para continuar estable. "Solo...Déjame estar así por un rato, ¿está bien? No es como si lo hiciera muy seguido..."
"ah no, n-no es eso, no me importa, de verdad..."
¿Cómo podía rechazar a Kim Jaejoong apoyando la cabeza en su entrepierna? No importa cuánto su cerebro le dijera que esto no era bueno para su salud mental. Hería profundamente el no poder hacer nada por el asunto sin hacerlo parecer como que ocultaba un ulterior motivo (así que sí, llevar a Jaejoong a la cama y besarlo apasionadamente no podían ser tomados en cuenta). Como terapeuta siempre podía encontrar un modo de consolar y animar a sus clientes, incluso intercambiar bromas con ellos, pero frente a Jaejoong, esas habilidades se olvidan.
"Tal vez una taza de té, con leche y ¿un montón de azúcar?" ofreció. Jaejoong solo hizo la cabeza a un lado y reacomodó su posición, ronroneando como un gato faldero.
"Acaricia mi cabeza."
"Ah...Está bien..."
Pobre Yunho, siempre recibía las migajas al final. Sin embargo hizo como le pedían.
"Siento no habértelo contado antes, Yunho..." Jaejoong no le había dicho nada en realidad, entró intempestivamente gimoteando acerca de su amor no correspondido hacia Changmin y eso fue todo. ¿Cómo podía escupir los hechos y detalles jugosos? Ni siquiera lo referente a la foto del beso que comenzó todo, la cual finalmente había sido borrada para bien una noche antes. Le costó un mar de lágrimas hacer eso, de hecho.
Jaejoong se dio la vuelta para encarar a Yunho, aún descansando sobre la almohada. Este último tragó silenciosamente viendo esos agacelados ojos y piel sin mácula mostrándose en todo su esplendor bajo su cuerpo.
"Está bien, ya intuía algo de todos modos."
"Fui así de obvio, ¿eh?"
"No solo tú, él mencionó tu nombre muchas veces y dijo-"
"No me des falsas esperanzas solo para hacerme sentir bien."
"¡L-lo siento Jae! N-no quise decir eso..."
Jaejoong apartó su mirada de Yunho, ocultando el rubor que se deslizaba a través su rostro. "¿...Qué dijo?"
Yunho sonrió, ensortijando algunos mechones del cabello de Jaejoong.
"Bueno, él siempre trató de emparejarme contigo...Él te elogiaba un montón, a decir verdad. ¿Recuerdas como ustedes dos repentinamente se hicieron amigos? Pensé, que era él en realidad quien estaba interesado en ti..."
Jaejoong rodó sus ojos.
Él te engañó, mi inocente y confiado Yunnie... No puedo creer que estudiaras psicología.
Yunho hizo una pausa por un momento, considerando si continuar lo que estaba por decir o no. "Podría ser que...¿se sintiera reticente por mí?"
"...Bueno, me molestaba un montón, pensaba que te habías fijado en mi y viceversa...Ese idiota."
El pianista mordió su labio inferior.
"...Pero créeme, no fue por eso. Él no está interesado en mí, eso es todo." Jaejoong añadió. "Por cierto, siento el hacerte perder tu tiempo libre Yunho..."
"Jae..." Yunho seguía diciéndole a su mente que resistiera la tentación. "La próxima vez solo llámame y estaré allí...no arriesgues tu vida caminando por la calle con la cabeza hecha un lío, ¿está bien?"
"Te preocupas tanto por mi...Mientras yo soy tan desconsiderado..." Jaejoong hizo un puchero, mas bien enojado consigo mismo. "Se supone que debo atesorar a un verdadero amigo más que a un flechazo cualquiera. Hablando acerca de flechazos, ¿sabes que tuve un flechazo contigo en la secundaria?"
El color abandonó el rostro de Yunho, su cerebro se congeló. "¿Ah...? N-no lo sabía...Pensé que tuviste un flechazo con ese tipo japonés ¿Keita?"
"Keita también. Hyunjoong también. Tú también. Tuve un montón de flechazos."
Su cerebro se descongeló.
"Entonces prepara algo para tu ex-flechazo. Estoy hambriento."
El malhumorado joven se deslizó de las faldas de Yunho, aliviando las piernas del pianista de la presión, salvándolas del inminente peligro de una amputación por necrosis. "Prepárate. Esto va a ser pecaminosamente delicioso."
Yunho se quedó mirando la esbelta figura mientras esta arrastraba sus pies a la cocina.
Ah, Jae...Yo nunca, nunca te dejaré saber...
*
*
Cuando Jaejoong finalmente estuvo de vuelta en su apartamento por la noche (Perder el tiempo con Yunho todo el día era realmente una terapia, Dios lo bendiga) lo que lo sorprendió fue un tipo, inclinándose hacia su puerta al mismo tiempo que metía un alambre en el ojo de la cerradura. Habría llamado un policía a gritos si dicho tipo no fuera alguien que reconociera. Depresivamente, el rostro del tipo no mostró ni pizca de sorpresa o culpa a pesar de ser atrapado con las manos en la masa actuando como un ladrón.
"¿Q-qué está haciendo, Junsu- sshi?"
"Hola. Como puedes ver, tratando de colarme en tu apartamento por la fuerza..."
La otra razón por la que Jaejoong no llamó a la policía fue probablemente porque creyó que iba a recibir el soberano cachetadón que merecía por seducir al novio de alguien más.
"Te llamé pero el teléfono estaba apagado. No esperarás que me quede aquí afuera con este tiempo, ¿cierto?" Junsu cruzó los brazos sobre su pecho de modo demandante.
Jaejoong avanzó hacia la puerta y buscó la llave dentro de su bolso. "Uh..." Esta no era la primera vez que confrontaba dicha actitud de Junsu así que como que estaba acostumbrado. "De todos modos ¿cómo sabes mi...?
"Un Changmin ebrio es facil de sonsacar. Ahora abre la puerta odio el frío."
"Okay..." Jaejoong obedientemente sacó la llave y abrió la puerta. Junsu entró primero y cómodamente se desplomó con los brazos totalmente estirados, en el primer sofá que pudo encontrar.
"Vengo a pedir disculpas en nombre de ese idiota."
"...de qué estás hablando, yo debería ser el que se disculpara..." Jaejoong frunció el ceño ante la inesperada declaración.
"¿Por qué...?"
"¡...es tu novio!"
"Ah…Aquí, sentado."
Jaejoong hizo como lo dijeron, mentalmente se maldijo a sí mismo, por qué diablos le permitía a un dongsaeng ordenarle qué hacer en su propia casa.
"No soy su novio." Junsu reveló el tan esperado hecho, finalmente.
El mayor alzó sus cejas con incredulidad. "¿¿Eh?? Así que tú no eres...Espera, pero esa mañana ustedes chicos lo hicieron y todo..."
"Joongie, la idea de tener sexo con él solo me da dolor de estómago, por no mencionar hacerlo. No hay manera de que yo pueda ser su novio. Aggg."
"Oh..." Jaejoong sintió un casi imperceptible y minúsculo soplo de aire fresco correr a través de sus pulmones, ignorando cómo Junsu aún se negaba a usar el honorífico. "Yo pensaba...que viniste a hacerme puré o algo..."
"Tarado."
Jaejoong mordió sus labios, reprimiendo las ganas de darse de cabezazos contra el suelo.
¿Joongie? ¿¿¡¡Tarado!!??
"De cualquier modo, también vine a llevarme esa pintura que te dije que le quitaras. A menos que quieras conservarla por siempre."
Gracias a Dios.
"No. Llévatela."
Jaejoong se apresuró a encontrar la pintura, la envolvió con un pedazo de tela y se la entregó a Junsu. Con eso, ningún rastro de Shim Changmin quedaría en su casa. Podría estar en paz.
Pero de alguna manera el más joven fijó su mirada en los ojos de Jaejoong mientras aprisionaba la muñeca del mayor en lugar de al lienzo en su agarre.
"Y vine a llevarte de paseo."
Jaejoong ni siquiera evidenció sorpresa. "¿Qué plan hay dentro de tu cabeza?"
"Ninguno. De repente me dio ganas de helado, eso es todo."
El más joven tiró de la muñeca de Jaejoongy enlazó un brazo con el suyo, antes de hacerse camino a la puerta de entrada. Jaejoong solo se quejó y murmuró algo como 'ustedes chicos son unos bichos raros' mientras se dejaba arrastrar con fuerza.
Finalmente llegaron al Ferrari de Junsu en el estacionamiento (el cual Jaejoong se quedó mirando descaradamente boquiabierto y babeándole encima). Junsu abrió la puerta para el Hyung y suavemente lo empujó dentro.
"Solo quiero hacerte saber, por lo general soy muy agradable y sociable, pero ahora estoy nervioso así que disculpa mis malos modos."
Junsu entró por la puerta opuesta y encendió el motor. Si Jaejoong no estuviera así, estaría saltando y chillando a grito pelado 'Mami me subí a un Ferrari', parloteando acerca de cuán agradable era el sonido y literalmente violado el tablero.
Pero no lo hizo, eso era lo que la gente llamaba cambio de comportamiento post-corazón roto.
"¿A dónde estamos yendo?" Jaejoong preguntó mientras inspeccionaba el lindo interior.
"Uno de mis apartamentos."
"¡Dijiste que solo íbamos por helado!"
"El helado está allí."
"...Disculpa, pero aprendiste este método de forzar a la gente de un cierto alguien, ¿o ese cierto alguien lo aprendió de ti...?"
"Aprendimos uno del otro."
"Oh..." Jaejoong interrumpió la conversación al tiempo que Junsu empezaba a concentrarse en el camino. Le echó una ojeada al más joven desde la comisura de su campo visual, observando los ojos rasgados y suaves facciones silenciosamente. Ambos Changmin y Junsu eran impredecibles, pero este último era un poco más...intimidante. Sabía que la razón por la que Junsu lo había secuestrado no era por el helado.
"¿Qué...?" Junsu notó que Jaejoong había estado observándolo.
Jaejoong se arrellanó más cómodamente contra el asiento del coche. "Nosotros solo nos hemos reunido dos veces y cada uno de esos encuentros duró menos de un minuto, así que estoy observándote. ¿Te importa?"
"No, adelante. ¿Qué encuentras?"
"Eres lindo."
"Lo sé, ¿correcto?"
Jaejoong no tenía ni idea de qué tipo de conversación estaban entablando.
El resto del viaje fue en su mayoría silencioso especialmente después que una animada canción fuera reproducida -Torawareta kimi wa boku no fantasy~~' Solo algunas pocas preguntas fueron proferidas una vez cada cierto tiempo, y estas eran en su mayoría cuchicheos sin sentido.
Después de una hora de tortura la cual se sintió como una eternidad, llegaron a un enorme y lujoso condominio donde montones de coches Europeos entraban y salían por el portal, y para asombro de Jaejoong cada trabajador de allí reconocía a Junsu y se inclinaba cortésmente hacia él.
"Si tienes un lugar como este, ¿por qué te quedas en el de Changmin?" Jaejoong preguntó curiosamente, aún admirando cada rincón de la edificación mientras entraba al ascensor y se dirigía al piso más alto.
"No lo hago, esa fue solo una pijamada."
"¿...pero por qué desnudos?"
"No lo estábamos, solo estás imaginando cosas, pervertido..." Junsu rodó sus ojos y le dio una ligera palmada al trasero de Jaejoong.
"Ahora sé de dónde obtuvo Changmin ese inapropiado comportamiento..." El mayor suspiró, habituándose a la humillación.
"Nah, al contrario, yo aprendí ese hábito de él. Ese cerdo."
"¿¡Le gusta darte palmadas en el trasero!?"
"Con su pie bien calzado, seee. Yo solo lo modifiqué a fin de hacerlo menos rudo para ti..." Junsu hizo una pausa, pensando. "...Oh Dios, no le digas que lo hice, seré pepperoni."
Jaejoong no pudo ocultar un amago de sonrisa.
Salieron del ascensor y se encaminaron hacia cierta puerta. Junsu tomó una llave de su bolso y abrió la puerta, su mentón apuntando en dirección a la habitación a fin de dejar que Jaejoong ingresara por delante de él.
El rubio se quedó boquiabierto y con los ojos brillándole al contemplar la vista ante él, una enorme sala con montones de pinturas de varios tamaños y colores dispuestos primorosamente sobre el muro. La sangre de un amante del arte aún corría por sus venas después de todo, no importa cuán alejada su actual profesión estuviera. Olvidando lo extraño, incómodo y torpe que pudiera parecer la situación, recorrió lentamente todo el muro, admirando los trazos de las obras de arte con fascinación. Sus dedos avanzaban poco a poco por sí mismos a fin de tocar la increíblemente hermosa superficie con sumo cuidado.
"Estos son..."
"Son los trabajos de Changmin."
Jaejoong observó más de cerca. Algunas de las pinturas estaban firmadas por 'Fiasco' en la parte inferior mientras el resto estaban sin nombre.
"¿Esas son las que tomaste mientras estaba drogado?"
"Algunas de ellas. La mayoría de ellas las obtuve con su permiso creo, o dadas a mí por propia voluntad. Las que pintó en su sano juicio, me refiero."
"No sabía que había hecho tantas..."
"Muchas más que estas en realidad, pero vendí algunas."
Los bocetos eran de diversos temas, pero generalmente consistían de colores claros, emitiendo calidez, algo que Jaejoong no creía pudiera provenir de alguien como el ex-adicto. Uno de ellos, aquél que Jaejoong estaba tocando, por ejemplo, era el boceto de una pareja jugueteando con agua, con un verde paisaje de arbustos y flores como fondo. El cielo estaba tenuemente coloreado. Jaejoong estaba tan deslumbrado que olvidó pestañear.
"Esta es tan romántica..."
"Ah, él bosquejó esa en el parque que está cerca al lugar donde vive. Se quejó de cuán desagradable la pareja era, pero al final la dibujó. Solo estaba celoso después de todo..."
Jaejoong no pudo ocultar una sonrisa, de nuevo. No sabía que el conocer ese otro lado de Changmin resultaría tan estimulante para su corazón.
Cerca a la pareja retratada estaba la imagen de una fuente. Esta era incluso más hermosa. No muy lejos de la fuente, un muchacho que llevaba uniforme de secundaria estaba sentado sobre el verde césped. Junto a él, un perro de pelaje color blanco yacía cómodamente con los ojos húmedos y brillantes. El chiquillo tenía una expresión afectuosa, su mano se alzaba acercándose para acariciar la oreja del perro.
"Este chico se parece a ti..." Jaejoong comentó, sus ojos pasando de la pintura a Junsu, comparándolos ambos y a la diferencia en cómo ellos dejaban salir sus expresiones.
"Ah...Esa es..."
Jaejoong juraría haber captado la misma gentileza destellar por algunos milisegundos a través del rostro de Junsu. Era la primera vez que lo veía sonreír sinceramente.
“Ni siquiera sé cuando hizo esa cosa…” Junsu puso el mismo rostro severo de vuelta.
"Ustedes chicos son realmente cercanos. Envidio eso." Jaejoong procedió a ver la siguiente pintura. "Quiero decir...Yo no lo comprendo, en lo absoluto."
"Bueno, él ha cambiado un montón desde la primera vez que lo vi. Solía ser tan débil y sensible.”
La siguiente imagen era un escenario de otoño, con muchos animales jugando entre las hojas caídas. Este era un poco más cómico.
"¿Cómo se conocieron?" Jaejoong preguntó.
"Fui yo quien lo metió en las drogas."
Jaejoong quedó completamente boquiabierto ante la confesión demasiado franca. Quería preguntar más, pero percatándose de cómo Junsu volvía la mirada, decidió que no era un tema el cual debiera investigar más a fondo.
La siguiente pintura era una aún sin terminar. Un tipo de cabello ondeado y piel pálida, estaba arruinado por furiosas y negras pinceladas. Jaejoong se tomó algunos segundos para observar la pintura con el ceño fruncido. "Este es..."
"El primer cuadro que hizo bajo la influencia del ácido."
"¿Quién es él...?"
"Mmm...Yoochun, supongo..." Consiente de que su respuesta no podía explicar nada, Junsu continuó, "No conozco los detalles, pero una vez Changmin se vino abajo por causa del alcohol, escupiendo la historia oculta tras el tipo. Él era su hermanastro y el amor de su vida, antes que el lunático lo violara y lo vendiera."
Los ojos de Jaejoong se abrieron a todo lo que daban, no pudiendo creer lo que acababa de oír. Junsu acababa de revelar un fragmento del pasado de Changmin que era demasiado dramático para ser real, en un tono ligero como si no fuera nada. Para empeorar las cosas, él nunca habría, nunca habría supuesto cuán empañado estaba el pasado del pintor por la tragedia, aún así el joven podía reír y perder el tiempo como si fuera un adolescente cualquiera con las complicaciones que llevaba una vida disoluta. Jaejoong nunca había notado con qué tipo de persona estaba lidiando, hasta ahora.
"¿Estás shockeado?" Junsu acarició su mano.
"¿Por qué estás contándome esto...?"
"...Creo que necesitas conocerlo más antes de juzgarlo como un bastardo o lo que sea…además de preocuparte por él y viceversa.” Jaejoong no respondió, pero por la forma de mirarlo con total atención, Junsu decidió continuar revelándole los hechos. “Changmin lo vio en su alucinación.”
La información lo golpeó, los ojos de Jaejoong comenzaban a escocer así como el descubrimiento lo alcanzaba poco a poco. Recordaba cómo Changmin se disculpó y le suplicó una y otra vez entre lágrimas, cómo lo besó desesperada y apasionadamente. De hecho era a este tipo Yoochun al que estaba viendo.
“Ah…así que ese es el por qué no deja de usar el ácido…quiere ver a este tipo tanto así…”
¿Qué clase de tipo era él? ¿Por qué lo amas tanto incluso después de lo que te hizo, Changmin?
Junsu no notó como el mayor mordía su labio inferior, luchando contra el dolor.
“No solo eso. A decir verdad...es algo complicado. Changmin es...bueno, de alguna manera olvidó su pasado, y creyó que esas alucinaciones que veía bajo la influencia del LSD le revelarían algunas partes de él. No soy quien para juzgar nada acerca de eso, pero este pasado del que habla sucedió antes que cumpliera los siete así que…quiero decir, esto ciertamente no vale la pena el sacrificar su cuerpo y su salud por algunas memorias de la infancia. Solo quiero que siga adelante y sea feliz con el presente…”
Jaejoong no podía comprender apropiadamente lo que Junsu trataba de explicar, pero su corazón palpitaba por aquella razón que desconocía. Una cosa fue capaz de registrar: Changmin no recordaba su infancia.
Trató de recordarse a sí mismo que su Changmin estaba muerto, y no había forma en la que su olvidada infancia tuviera algo que ver con él.
“Ah, esta fue otra que hizo bajo la influencia del ácido...se la robé. Esta te hará sonreír todo el día, realmente, realmente linda…” Junsu señaló una cierta pintura bastante alejada de la anterior.
Jaejoong observó la pintura y esta vez, nada pudo evitar que su cuerpo se estremeciera vigorosamente así como las lágrimas escapaban de sus párpados. Perdió la capacidad de hablar, solo su mano, temblando, se acercó a fin de rozar el lienzo con sus dedos.
Era la vista posterior de un par de conejitos, sentados lado a lado sobre el tejado, contemplando el cielo estrellado por encima de ellos. Uno de los conejitos alzaba su mano al cielo, parecía como si tratara de alcanzar una estrella fugaz.
“Algo infantil pero he ahí el encanto, ¿no?" Junsu dejó su fascinación evidentemente mostrada. "Como esas ilustraciones de cuentos para niños…realmente bello…”
¿Cómo podía Jaejoong olvidarlo? Era el ridículo dibujo del cual tan fácilmente se mofó, mientras un niño llamado Shim Changmin puso todo su esfuerzo y deseo en la hechura. Esta actual pintura ante él era ciertamente diferente, bien acabada y no la descuidada obra de arte de un niño de 6 años de edad, hecha de lienzo y óleo, y no de papel reciclado y crayones. Una cosa sin embargo él sabía con certeza: No había forma en la que otro Shim Changmin pudiera hacer esto.
"Junsu...Necesito encontrarlo. Ahora."
*
*
*
El entorno de Jaejoong se hacía borroso mientras ascendía por cada peldaño a través de las escaleras del apartamento de Changmin. Cada pulgada se sentía tan lejana cuando las ganas de lanzarse sobre su querido amigo de la infancia estaba ya en la boca de su garganta, todos esos anhelos lo torturaron a lo largo del camino. Estaba más que ansioso por abrazarlo, besarlo, darle un puñetazo, y decirle lo mucho que lo había echado de menos. Habían demasiadas cosas por confesar.
Sin embargo sus previamente determinados pasos se quedaron en su sitio casi al mismo tiempo que posaba su mano en la superficie de la puerta. La voz de una mujer era audible desde el interior. Curioso, abrió la puerta que no estaba cerrada con llave para poder entrar.
Decidió detenerse en el pequeño espacio con graffiti hecho a mano sobre el muro, permitiéndole escuchar furtivamente la conversación sin ser atrapado. Dio un respingo cuando Changmin alzó la voz, seguido por los sonidos de objetos siendo estampados contra el piso.
"¿¡Qué clase de ridícula broma es esta!?"
"No estoy bromeando...Por favor, Changmin-ah...Créeme..." Una voz de mujer, llena de súplica. Jaejoong acercó sus pasos para escuchar mejor. Su pecho palpitaba fuerte contra su pecho como las siguientes declaraciones le hicieron darse cuenta de la situación que él estaba encarando.
"Él me vendió. Se aprovechó de mí y me hizo a un lado después..."
"Changmin-ah..."
"¿¡Cree que sigo siendo el mismo mocoso, tan fácil de engañar!?"
Jaejoong oyó más golpes y sonidos de cosas rompiéndose. Se asomó por detrás de la pared, preparándose para ser descubierto. Afortunadamente ellos estaban demasiado absortos en la discusión para notarlo. Changmin estaba sentado a un lado de su cama, mientras dicha señora estaba de pie justo frente a él.
"¿Quién crees que luchó para que puedas ser puesto en libertad? ¿Pagó por tu fianza y rehabilitación...? ¿Piensas que los adictos son automáticamente enviados a rehabilitación...? Piensa, Changmin-ah, ¡¡piensa!!" La dama gritó débilmente.
Changmin dejó caer su cabeza en las palmas de sus manos, despeinando su cabello, como si le doliera escuchar más. "Ya basta…Esas son mentiras..."
"Era un abogado, ¿olvidas eso? ¿¡Por qué debería cambiarte por dinero cuando ya tenía un montón!? ¡Él nunca dependió de sus padres para empezar...!"
"Eunjung noona, por favor..."
Jaejoong vio al par de hombros sacudirse. Cómo deseaba correr hacia Changmin y ponerlo a salvo dentro de su abrazo.
"Él vio por ti desde lejos, Changmin-ah...Él no dejó que lo supieras...Pero no puedo quedarme callada por siempre, especialmente ahora…"
Changmin aún se negaba a alzar la mirada. "¿…Dónde está él ahora...?"
"...Un hospital en Busan. Por favor, ve allí. Él está…“ Eunjung estrechó su bolso de mano haciendo más presión. “Él está muy enfermo..."
Los ojos de Changmin parecían querer salirse de sus cuencas momentáneamente antes de que se precipitara a la puerta de salida, perdiendo la habilidad de permanecer bajo control.
"¡Cálmate, te llevaré allí!" imploró Eunjung, pero Changmin no se habría detenido si no fuera por causa de Jaejoong, bloqueando su camino.
"Llévame contigo..." El mayor demandó firmemente.
Changmin quedó congelado por algunos segundos al ver a tan inesperado visitante, antes de resoplar y con señas hacerlo a un lado. "Métete en tus propios asuntos.” Lo rechazó fríamente. Sin embargo esta vez Jaejoong no solo estuvo mansamente de acuerdo. La siguiente declaración fue dirigida a Eunjung.
"Iré así el esté de acuerdo o no.”
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ahhhhhhhhhhhhhhhh!! AMO ESTE FIC!!!
ResponderEliminarJJ ya lo sabe! >.<
Y ahora reaparecera yoochun?!
>.< que pasara??
jaemin forever!!! ♥
kontiiiiiii T.T
este fic esta demasiado genial!!!!
por fin preciosaaaaaaaaaaaaaa!!
ResponderEliminarpensé que nos habías abandonado T_T
(como umeboshi_heart T.T)
amo este fic, pero no podia esperar a leerlo en español <3 amo tu traducción
besos
DIOOOOOSSS!!!!!!! omg!!!!!! siguelo prontoooooooo!!! yae ya se dio cuenta...no gusta micky malo...no...nop...porfa que alla amor entre jae y min
ResponderEliminarcuando vi actua de este fico fui tan feliz jejej OMG!!!!! por fin jae se dio cuenta de que es su minnie waaaaaaa se quedo muy bueno
ResponderEliminaroh diosss!! cuando creo que ya nada mas puede venirsee....aparece el maldito de yoochun de vuelta en el plato
ResponderEliminarO___________________O
amo este fic lo he dicho ya???
pues lo amooo!!!
*corre a leer*
ooohhh Dioooooooos!!!....como puede ser este fic tan genial es estupendo es es toda una Obra de Arte!!!..(como las pinturas de Min jeje)... pero en verdad me mantiene al borde de una ataque a cada momento en verdad esta cardíaco todo esto....q pasará (seguiré leyendo)....
ResponderEliminarDeby
Oooooooh!!! Por Dios!!!! WTF!? Jae ya lo reconocio ahora solo falta que Changmin lo recuerde y siiiiiiiii JaeMin juntitos de nuevo ooooooow!!!!! XD
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