03 de Octubre de 2008
Yunho shi,
Recientemente se ha decidido que Dong Bang Shin Ki se traslade a Japón. Estaremos allí durante 4 meses. El avión Internacional de Seúl sale el 29 de Octubre a las 9:45 pm. Todos tendrán apariciones en programas de entrevistas, harán vida de espectáculo y realizarán algunas sesiones fotográficas. Asegurasen de prepararse para la mudanza. Su equipo será entregado en su nuevo departamento dentro de una semana. Permanecerán en un hotel hasta que el departamento sea arreglado.
Recientemente se ha decidido que Dong Bang Shin Ki se traslade a Japón. Estaremos allí durante 4 meses. El avión Internacional de Seúl sale el 29 de Octubre a las 9:45 pm. Todos tendrán apariciones en programas de entrevistas, harán vida de espectáculo y realizarán algunas sesiones fotográficas. Asegurasen de prepararse para la mudanza. Su equipo será entregado en su nuevo departamento dentro de una semana. Permanecerán en un hotel hasta que el departamento sea arreglado.
Manager Choi Yoohwan.
“¿Por qué debemos irnos así de repente?”, se quejó Changmin mientras arrojaba sus cuatro maletas en la sala, junto a la pila de sus compañeros.
Yunho rodó sus ojos. “Nos dieron un aviso de 26 días. Fuiste tú el que no hizo su equipaje hasta esta mañana.” Se apartó del miembro más joven, “¿Todos están listos? ¿Dónde está Jaejoong ah?”
“Ya voy, ya voy.” Se escuchó llegar una voz exasperada manobriando un montón de maletas. “No es fácil cargar solo con todo esto, tu sabes”
Yoochun y Junsu se rieron de la exageración del mayor. “No nos ausentaremos por tanto tiempo hyung.”
Jaejoong suspiró molesto porque ninguno de sus amigos parecía entender lo amplio que su guardarropa podía ser.
El viaje fue relativamente tranquilo. No se tardaba mucho viajar de Corea a Japón de todos modos. La mayoría de ellos durmieron. Por suerte no había nada que hacer al día siguiente. Los managers habían planeado un día para recuperarse y establecerse. Por lo general, una vez que aterrizaban los miembros tenían, tal vez, 4 ó 5 horas para dormir antes de ser despertados para una sesión fotográfica o algún otro evento. Fue un buen cambio.
El hotel en donde la furgoneta se detuvo era realmente grande. El vestíbulo estaba iluminado. Candelabros colgaban del techo y los cristales brillaban como estrellas. Había un piano de cola sobre una plataforma y asientos de cuero rodeaban el exquisito instrumento.
“Ok, tenemos 4 habitaciones. Una para el personal y ustedes compartirán los otros 3. Jaejoong y Yoochun, pueden ubicarse en la habitación 415, Yunho y Junsu estarán en la 419 y Changmin y yo estaremos en la habitación 406.”
Los miembros estuvieron de acuerdo pero los ojos de Yoochun volaron hacia una pareja en particular y aunque no le gustaba optó por callarse. Oró en silencio para que nada sucediera mientras estaban en Japón. Echó un vistazo y pudo ver cómo Yunho depositaba la llave de la habitación en la mano de Junsu. Sus dedos demorándose en dejar los del otro.
*****
Jaejoong se echó sobre la cama, hundiéndose en el colchón. La habitación era tan grande como grande era la cama. Había un aparador, un televisor plasma y un escritorio con un gran y lujoso candelabro colgando sobre él. El baño era tres veces más grande que el de su propio departamento, con un espejo en la ducha y bañera de hidromasaje.
“Yoochun ah, ¿qué quieres hacer mañana?”, preguntó el hombre mayor acomodándose en la cama y apoyándose en sus codos. Vio cómo el compositor abría una de sus muchas maletas y sacaba una camiseta y unos pantalones de algodón.
Yoochun se desabrochó la camisa y la dejó caer sobre el suelo antes de ponerse la nueva prenda. “No lo sé. Sólo quiero dormir Jaejoong”, respondió con una sonrisa cansada mientras deslizaba sus piernas en los pantalones. “¿Qué te gustaría hacer?”
El mayor se encogió de hombros. Se apartó. Se quitó la camisa y los jeans y luego se arrastró de nuevo a la cama en calzoncillos. “Quiero ir a un par de tiendas que no llegamos a visitar la última vez que venimos.”
Yoochun sonrió ampliamente. Por supuesto, siempre el comprador. “Ok, bueno, supongo que mañana lo veremos. Nunca se sabe, el manager podría darnos una sorpresa.” Subió a la cama al lado de Jaejoong y se rió por lo bajo cuando el mayor bostezó exageradamente. “A dormir Jaejoong ah.”
Yoochun apagó la luz que estaba de su lado y la habitación se quedó a oscuras. El silencio le permitió pensar libremente y ver imágenes de Junsu y Yunho en la portada de un periódico ambos en los brazos del otro. Cerró los ojos y se obligó a despejar su mente de esos pensamientos.
*****
Al final del pasillo, Junsu se echó a reír nervioso al ver una sola cama. No era como que él tuviera miedo de compartirla con Yunho sino que temía por lo que podría pasar en esas sábanas blancas, además la visión que tenía del líder no estaba ayudando mucho a dominar su imaginación. El mayor estaba inclinado sobre una de sus maletas buscando algo para cambiarse. Junsu honestamente podía jurar que no tenía ni la más mínima intención de moverse. Era una especie de suerte horriblemente retorcida que ambos terminaran en la misma habitación pero si se oponía hubiera parecido muy sospechoso y le había prometido a Yoochun que no volvería a pasar nada entre ellos. Se negó a romper esa promesa.
Junsu decidió tomar una ducha. Se sentía cansado pero a la vez un poco sucio. Siempre lo hacía cuando volaba. El agua de la ducha cayó caliente en su espalda y se relajó al instante. Debió haber hecho algo terriblemente horrible en su vida pasada. Transcurrido un tiempo, pensó que ya estaba lo suficientemente limpio y después de dejar que el agua alivie sus músculos por 20 minutos, salió de la ducha para secarse. Ató una toalla libremente alrededor de sus caderas y abrió la puerta, dejando escapar el vapor hacia la habitación.
Yunho estaba acostado en la cama, con los brazos cruzados detrás de su cabeza, viendo algún espectáculo nocturno. Las sábanas retiradas hasta su cintura, revelando su pecho desnudo y sus sólidos abdominales. Junsu se ruborizó un poco y miró hacia otro lado antes de ser descubierto mirando. Hurgó en una de sus maletas y sacó su ropa interior. Miró al hombre mayor y viendo que los ojos de éste se cerraron rápidamente, dejó caer la toalla y se colocó su bóxer, pero al dar la vuelta, pudo ver un leve rubor en las mejillas del líder por lo que suspiró avergonzado. El colchón se hundió un poco cuando Junsu subió a él. Se aseguró de tener su cara lejos de Yunho, sólo para asegurarse de no caer en la tentación de tocar o besar cualquier parte del cuerpo del mayor.
“Buenas noches Junsu”, dijo Yunho en voz baja.
El joven sintió que su espalda le ardía cuando el brazo del líder rozó ligeramente su piel. “Buenas noches Yunho.”
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario \(*O*)/ ♥ ♥
o más bien... deja tus pensamientos pervertidos grabados en esta entrada XD