Por qué, por qué, por qué...
El viaje fue de dos horas, le hubiera tomado treinta minutos menos pero en su estado era mejor conducir despacio. Cuando estacionó el auto ya no estaba llorando, pero sus ojos lo dejaban en evidencia. Resignado pasó a la casa de Seung Ri.
-Hola, desgraciado -Saludó a su amigo cuando le abrió la puerta, entró sin preguntar-.-Adelante -se burló Seung Ri-.
No podía decir que conocía la casa a ojos cerrados, pero sí la había visitado un par de veces. Saludó a los abuelos y partió al baño, casi sin hablar con su amigo.
-¿Has traído todos los papeles? -Le preguntó a Jae mientras se lavaba la cara-.
-Si...-Suspiró- hoy...cuando me llamaste estaba con Min. Creo que nunca habíamos peleado así Seung...Quizás todo esto no valga la pena..
-Naaaaaaaaada de eso -interrumpió- Anda, rápido antes de que pierdas la hora...no te doy tiempo de dudar -lo empujó asta sacarlo de la casa- Luego me cuentas como te fue. Adios!
----------------------
-¿Por qué andas con esa cara, enano? -le preguntó Kumi cuando abrió la puerta-
-Por nada -cortante-
-Peleaste con Jaejoong?? -se burló- Procura ponerte en la buena, si no quizás ni te vaya a despedir al aeropuerto. -sonrió hacia un lado triunfante al lograr que la inmutable expresión de su hermano cambió-.
-Estamos perfecto, Kumiko. Gracias por preguntar. -dijo calmado.
Pero la verdad era que estaba a punto de explotar de histeria, ¿Cómo era que Kumi sabía siempre dónde apuntar? Se encerró en su pieza y se puso a fumar por la ventana. Cosa que le relajaba mucho...aunque en estos minutos el humo le recordaba mucho a Jae. Vagó por sus pensamientos hasta que alguien entró a su pieza.
-Me iré con Yunho este fin de semana, volveré el lunes. Prepara tus cosas que queda menos de una semana para irnos. ¡Y cuidado con quemar el piso enano vicioso! -Lo último lo escupió antes de salir-.
Kumi llevaba insoportable la semana entera. Seguramente eran celos o algo por el estilo, pero Min tenía claro que nunca admitiría nada...Por suerte no estaría el fin de semana.
No se dio cuenta cuando ya eran casi las doce e iba en el sexto cigarro.
Sonó su celular, era un mensaje de..<<.JAE!?.>>.
"Estoy en la puerta de tu casa... "
Aunque si primera idea fue dejarlo esperando hasta que se aburriera y se fuera, no pudo hacerlo. A los dos minutos le estaba abriendo la puerta. <<.Aaaarg!!.>>.
-Hola...
-Minnie, -le costaba hablar, y más aun por la expresión seria que tenía el menor- ¿te...quieres ir conmigo a la playa?
Si, demasiado directo. A Min le entró la rabia. ¿Acaso no se acordaba de lo de esa tarde? ¿Cómo creía que podía preguntarle algo así y luego esperar un "Si"?. <<.Estas loco...>>.
Jae sentía que el corazón le subía a la garganta y luego le bajaba hasta los pies cada vez que Min exhalaba sin responderle.
Lo que tenía que hacer era muy sencillo: "No Jae, no quiero salir contigo" y cerrar la puerta.
Tomó aire para decirlo, pero cuando estaba a punto una puntada en la boca del estómago lo hizo detenerse. Lo intentó de nuevo, pero le pasó nuevamente...Entonces entendió.
-Esta bien...-contestó con una mano masajeándose la cien con los ojos cerrados. No podía entenderlo, <<.por qué, por qué, por qué.>>. A pesar de todo no podía decirle que no, y en el fondo del corazón tenía la esperanza de que las cosas pudieran arreglarse con este viaje.
-Gracias Minnie!! No sabes lo feliz que me hace escuchar eso –dijo Jae hiperventilado, sentía que pesaba por lo menos 10 kilos menos – Si quieres…podemos irnos ahora, yo…pasé por mi casa antes de venir y traje todo…
Jae pensó que quizás el tener las cosas listas le molestaría a Min, se esperaba un “Aah, o sea que estabas seguro que iría?? Já que confianzudo, ya no voy contigo”. Pero a cambio de eso el pequeño asintió en silencio y en media hora ya habían partido.
--------------------------
-Puedes dejar tu bolso en la pieza de la izquierda –dijo el mayor cuando ya habían llegado- Yo dormiré en la pieza de al frente.
Obviamente no le diría que durmieran juntos en la cama de dos plazas por mucho que quisiera, para que todo resultara bien tenía que ir despacio.
Casi a media noche se sentaron a cenar. En la casa había de todo para preparar –las veces que Chunnie invitaba a Junsu iban no precisamente a comer- y Jae se lució con unas pastas. La conversación no fue muy fluida, sólo hablaron de algunas materias y de que Kumi no estaba en casa y por eso había podido ir a la playa. Cuando le contó que Yunho había salido con Kumi por el fin de semana a Min le pareció ver un brillo algo extraño en la mirada del mayor pero no fue capaz de descifrarla. El pequeño se ofreció a lavar los platos mientras Jaejoong terminaba de arreglar sus cosas. Cuando terminaron los dos se tiraron al sillón, ni cerca ni lejos y mirando ambos al frente.
-¿Estas muy cansado? –preguntó Jae.
-Mmmh, no, ¿por qué?
-Quisiera mostrarte algo…serán sólo cinco minutos en auto.-Tenía planeado que fuera al otro día en la mañana, pero la distancia con Min lo estaba matando y necesitaba explicarle algunas cosas- Lo prometo
-Bueno, vamos.-lo dijo frío, pero la verdad es que sí le emocionaba de cierta manera lo que pudiera ser-.
----------------
Jae paró el auto frente a una casa.
-¿Y de quién es la casa?- Preguntó el pequeño cuando el auto se detuvo.
- Ahí no tarado, es aquí- Apuntando por su ventana.- Es esta plaza, es mi favorita y te la quería mostrar.
Min recordó y entonces miró por su ventana pero sólo se encontró con más casas. Jae sacó unas llaves de su guantera y le hizo una seña para que lo acompañara. Min no comprendía de qué se trataba todo eso...lo siguió atento.
La casa era pequeña, había un aroma muy dulce y la iluminación le daba un toque muy acogedor. Era de madera y todos los muebles estaban en un tono naranjo pastel -casi blanco- que combinaba perfecto con los sillones. El living-comedor daba a un ventanal gigante desde dónde se podían ver las rocas en las que chocaban las olas. Por sobre uno de los sillones estaban colgados algunos dibujos, Changmin reconoció unos que había visto en la pieza de Jae esa vez que se había quedado esperándolo…ahora si que necesitaba saber qué era lo que pasaba y cuál era “esa” sorpresa. Miró al mayor con cara de “me explicas??”.
-Mmmmh, no entiendo, ¿en la casa de quién estamos?...-le preguntó al mayor cuando ya habían entrado.
-En la nuestra…o sea nuestra desde la próxima semana –expectante esperó la reacción de Min-.
-…QUE!?
voy a morirrr!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminar"nuestra casa" que lindoooo!!!!!
continualooo!!!!!!!!!!!!!
Que cosas tan romanticas ase jae por min por tal de que su amor no desaparesca ahhhhhhh que romantica porfavor min di que si te quedas con jae no lo ajas sufrir.
ResponderEliminarespero el siguiente capitulo y gracias esta muy emocinante no te tardes.
q wenuuuuuuuu >o< !!!!! siguelo....muero x saber lo q sigue...xD
ResponderEliminarOh mi diossss q sorpresita le.... dio Jae
ResponderEliminarjaajajajaj
siguelo esta muy bueno