Realidad cap 3

[Tan real como que juro a Dios que YunJae es algo *guiño guiño*]

Tres semanas desde esa vez en el parque con Junsu. Yoochun estaba satisfecho consigo mismo, nunca antes había durado tanto con alguien.

Pero Su no es “alguien”, pensó con unas de esas sonrisas de enamorado de la vida. Pero de cierta forma parecía que él daba más de lo que Junsu.

-¡No importa!

Jaejoong abrió los ojos bien grandes ante el arrebato de rabia de Yoochun-¿Qué pasa, Yoochun?

Se arrodilló al lado de él para echarle un vistazo. Los demás estaban en los bebederos de SM recargando energías.

-¡Es el primer receso, anímate!

Sus intentos de reanimar a Chun fueron en vano, el cantante no se movía un centímetro, seguía con la mirada fija en el otro extremo del salón. Parecía muy concentrado en algo así que Jae no quiso molestarlo más.

Yoochun quedó solo en el salón, más bien se sentía abandonado… ¿Dónde estaba el mamífero acuático/animal de granja Junsu?

-Chunnieah, ¿Qué es esa cara larga?

El solo hecho de escuchar su voz lo animó un poco. A Junsu no podía negarle una sonrisa matadora, ¿o sí?

-No soy una de tus locas fan girls para que intentes convencerme con una de tus sonrisas-miró a los lados, por si veía a alguien antes de sentarse al lado del mayor. Quería… ¡quería pinchar sus mejillas! Eran tan redonditas y…

-¿Su?

Despertó de su trance al ver el hermoso rostro de Yoochun lleno de preocupación.

-Me gustaría hablar de ciertas cosas contigo.

**^**

Llevar a Junsu a un restaurante era como la cita numero 1782345451, así que no tenía valor de cita.

Estaban en… algo así que tenían que definir la relación o nada. El hecho de tan sólo hablar sobre el tema con Junsu lo aterraba, pero optando por lo bueno tendrían que discutirlo sí o sí.

Yoochun había reservado el restaurante sólo para ellos dos. Junsu tenía derecho a sentirse importante. Estaba profundamente preocupado por el mayor y la ansiedad lo carcomía cada vez que se preguntaba sobre qué quería hablar Yoochun.

Un mozo los guió a su mesa y desapareció al rato. Ahora sí, Junsu estaba nervioso. Completamente solo con Park Yoochun y no habia forma de evitarlo.

-¿De que querías hablar?-preguntó yendo directo al grano.

Yoochun lo observó con una expresión serena que tan sólo lo hizo enervarse más.

-Junsu-necesitaba toda la atención del menor en él, quería estar seguro que Junsu lo iba a escuchar-Esto quizás te desconcierte pero poco me importa lo que hagas o digas después.

Mentira, mentira, mueres si te abandona.

-Te amo-agregó sin más. Todo se resumía a esa frase dejando sus labios, y si Junsu no reaccionaba de la forma que esperaba… Se resignaba a hacer algo.

No sabía si mirarlo a los ojos o desviar la mirada a algún lugar seguro como su plato. Junsu era indeciso pero a veces demasiado impulsivo, y por esta vez necesitaba pensar antes de actuar.

-Yoochunah, hace siglos que deseo oír eso.

Yeah, todo estaba bien en sus vidas.

**^**

Park Yoochun era un hombre feliz. Últimamente tenía lo que más deseaba en el mundo entero, ¿y que es? Kim Junsu, por supuesto.

-¿Enserio piensas que podremos hacer esto?-le preguntó un día Junsu en medio de una entrevista.

Estaba claro que se refería a la relación que llevaban, Yoochun no necesitó preguntar.

-Estoy seguro.

Esas simples palabras lo convencieron por completo. Yoochun lo dijo con tal seguridad que Junsu se limitó a asentir ligeramente; algunas cosas no se cuestionaban por nada del mundo.

Fin