KINGDOM TVXQ!

CLOSE 2U
Arualthings

Don’t cry my lover cap 11

La campana que marcaba el fin de un agotador día de escuela había sonado hace muy poco. Y en el patio trasero del colegio, abrazados bajo el gran árbol, se encontraban Changmin y Jaejoong. Aquel lugar era su escondite secreto. Nunca nadie se paseaba por allí, y así podían estar solos, aunque sólo fuese por unos minutos. Se separaron y se miraron a los ojos.

- ¿Y ese abrazo porqué?- Rió el moreno.
- No lo sé…- Se sonrojó el pequeño- Sólo te extrañé mucho. Necesitaba abrazarte Hyung.
- Eres un amor. ¿Lo sabías?- Le dijo mientras lo tomaba por las mejillas.
- No es cierto…-
- Si lo es tontito.- Sonrió al juntar su nariz con la del castaño, jugando un poco.- Te quiero.

No esperó más para depositar un tierno beso sobre los finos labios del menor. Ambos mantenían sus ojos cerrados, respirando la dulce fragancia del otro. Changmin no tardó en pasar sus manos por detrás del cuello del moreno, y este reaccionó rodeando la cintura del pequeño con las suyas. Mordió el labio inferior de su dongsaeng, quien respondió de inmediato abriendo su boca para darle paso a su traviesa lengua, que exploraba la húmeda cavidad con ansias, impregnándose de ese exquisito sabor a menta. De pronto el castaño dio un paso hacia delante con intensiones de intensificar la caricia, pero Jaejoong estaba en otro mundo, extasiado.

Paff

Irremediablemente cayeron al piso, y no pudieron evitar reírse ante su torpeza. Se miraron a los ojos una vez más, Jaejoong habiendo quedado bajo el menor. No necesitaron decirse nada, pues ya sabían lo que escucharían salir de la boca del otro: ‘Vaya forma de arruinar el momento’. Changmin se sentó en las caderas de su Hyung, apoyó amabas manos en su pecho, y sonrió con picardía.

- Me gusta verte desde aquí arriba.- Le dijo.
- Y a mi me gusta como te ves tú allí arriba.- Rió el moreno. Llevó sus manos hasta las caderas del menor, y colocó una a cada lado.- No sabes lo sexy que te ves…- Lamió su labio inferior, de forma tentadora.
- Eres un pervertido.- Le sacó la lengua.
- Tú me provocas, subiéndote en mi de esa forma- Le respondió, su rostro con una sonrisa seductora.- Cualquiera diría que estás buscando llevarme a la cama.- Bromeó.
- ¡No digas esas cosas!- Le dijo golpeándole en el brazo. –
- Ouch, pero que bruto- Soltó con fingido dolor, y acto seguido se levantó para empujarle al suelo, ahora él estaba sobre el menor- Tú te lo buscaste.-
- Ni creas que me ganaste, Hyung.

Entre risas y suaves golpecitos, los dos jóvenes comenzaron a rodar por el pasto, jugando como niños del Kinder Garden. Y eso era lo más lindo de su relación. Podían jugar, molestarse, golpearse, pero como una forma más de demostrar cariño. Finalmente terminaron de rodar, quedando Jaejoong sobre Changmin. Se miraron intensamente, y al mismo tiempo se sonrieron. El menor se apoyó en sus antebrazos, quedando así unidos nuevamente en un beso. A medida que se intensificaba, el moreno iba apoyando sus manos en el pecho de su dongsaeng, recostándolo sobre el pasto, que cada vez les parecía más cómodo.

- ¡Chicos!- Gritó entonces la voz Yunho, quien se acercaba corriendo hacia ellos.- Oh, lo siento.- Dijo casi sin aliento cuando estuvo lo suficientemente cerca como para notar lo que sucedía.- Yo…-
- ¿Yunnie?- Soltó Jaejoong sonrojado, separándose de inmediato del menor.- No…-
- Lo siento Hyung- Dijo Changmin, al mismo tiempo que el moreno se levantaba y le extendía una mano para ayudarle.- Nosotros…
- Tranquilos, no pasa nada.

Ambos suspiraron, sus rostros teñidos de rojo. A pesar de que Yunho sabía muy bien lo que pasaba entre ellos, pero aún así, era bastante embarazoso que los encontrara en esas condiciones: Recostados uno encima del otro sobre el pasto, cabello revuelto, mejillas rojas, labios hinchados, y corbatas desordenadas.
- Bueno, vamos. Que si no corremos a mi auto en este instante, llegaremos tarde al trabajo.- Dijo Yunho, los chicos sólo asintieron, y corrieron tras el chico.

Ninguno de los tres notó que estaban siendo observados meticulosamente desde la ventana de la enfermería.


<<.Lo sabía… >>


Pensó el rubio mientras se sentaba, sorprendido, pero a la vez satisfecho, luego de haber visto semejante escena. Changmin y Jaejoong estaban juntos, como pareja. ¿Y Yunho lo sabía? Sintió que la sangre le hervía, y podría jurar que su fiebre le había subido. No podía ser cierto, no podía estar pasando. Pero era real, no estaba soñando, y de alguna manera, sentía como si siempre lo hubiese sabido.

- ¿Junsu, estás en pie ya?- Soltó la alegre voz de su querido amigo Yoochun- ¿Te sientes mejor?
- ¿Chunnie?- Se dio media vuelta para encontrarse con el moreno apoyado en el marco de la puerta.
- ¡Junsu!- Gritó desesperado al ver el estado en el que se encontraba su amigo.

Estaba pálido, tenía unas ojeras terribles, las mejillas y nariz rojas como un tomate maduro, sus ojos entre cerrados y claramente estaba sudando. Notó que temblaba, su ceño estaba fruncido, sus labios secos. Al parecer el joven frente a él ni siquiera se había dado cuenta de lo grave que estaba. O al menos no lo supo hasta que intentó caminar, y cayó desmayado al piso. Yoochun reaccionó de inmediato tomándolo antes de que se golpease.

- Dios mío.- Soltó, tomando al chico entre sus brazos- Junsu, por favor reacciona.
- Chu…Chunnie…- Lo llamó, abriendo apenas sus ojos. Al parecer lo que tenía era más que un simple enfriamiento.- Yo…-
- Shhh…- Le dijo- No hables. Sólo cierra tus ojos y descansa ¿vale? Yo estoy contigo.-
- Yo…

No dijo más y se rindió, su cabeza le dolía demasiado y todo le daba vueltas. Cerró sus ojos y no supo más del mundo.



Cocina del restaurante

Ya serían pasadas las seis de la tarde, y dos apuestos jóvenes se encontraban trabajando arduamente en la cocina del restaurante, lavando platos, uno tras otro. Ambos traían las mangas recogidas hasta la altura de los codos, y para no mojar- u ensuciar- sus camisas de colegio, traían puesto un delantal blanco. El más bajo de los dos miró al castaño que se paraba a su lado. Estaba concentrado en su trabajo, sus antebrazos bañados en la espuma que dejaba el detergente. Tarareaba una canción con una hermosa sonrisa en su rostro, perdido por completo en su propio mundo. Al verle así, lo primero que se le vino a lamente – además de lo hermoso que se veía- fue jugarle una pequeña bromita. Sonrió para si mismo, y sin previo aviso le lanzó agua al chico, mojando – por suerte- su delantal por completo.

- ¡Hyung!- Se quejó el menor- ¿Porqué hiciste eso? Se muy bien que fue a propósito.- Preguntó mirándole a los ojos, inflando sus mejillas y frunciendo el ceño. Pero aún seguía lavando los trastes como le correspondía.
- Lo siento Changminnie- Le respondió- Sólo quería jugarte una broma. A ver si con eso volvías al planeta Tierra, y dejabas de una buena vez tu mundo de fantasías.
- ¿Cómo dices…?
- Minnie, estabas totalmente perdido en tu propio mundo. Así como la “típica chica enamorada” de los Doramas que pasan por la tele.- Se burló.
- No es cierto. – Se defendió el menor- No es nada de eso, sólo estaba tarareando esa canción porque me gusta mucho, eso es todo- Dijo, volviendo su vista a la loza.
- ¿Ah, sí?- Preguntó, una sonrisa en sus labios- Yo pensé que pensabas en mi, pero era sólo una simple canción.- Lo miró, y pudo ver como el pobre temblaba, probablemente pensaba que le había herido de verdad. Evitando soltar una risita de victoria, volvió su vista a la esponja de su mano, y a los platos que refregaba.- ¿Y cómo se llama esa canción, que tanto te gusta?- Preguntó haciendo énfasis en eso último.
- H—Hyung, no digas estupideces- Dijo intentando no sonar afectado. No estaba seguro si Jaejoong realmente se sentía ofendido o no.- La canción se llama “I Still”.- Soltó, y no pudo evitar que una sonrisita iluminara su bello rostro.- La interpreta ´Lee Hong Ki´.
- ¿No es ese un chico con un rubio imposible? Uno que aparece en ese Dorama que tanto te gusta.
- Sí, ese es Hong Ki – Dijo Changmin, su vista fija en su deber, más en su rostro un leve sonrojo.
- ¡Minnie!- Se quejó Jaejoong, ahora estaba sinceramente ofendido. Sólo un poco, pero lo estaba. Con su dedo índice (cubierto de espuma) le dio un rápido toque al castaño en la mejilla, ensuciándolo.
- ¿Y ahora qué, Jae Hyung?- Preguntó, soltando los trastes para mirarlo de frente, su rostro luciendo un tierno ( y casi irresistible) puchero. El mayor sólo lo imitó, y luego acercó su rostro al del pequeño, lo que provocó que el chico diera un paso hacia atrás.-
- Te gusta – Dijo, su rostro a una distancia mínima.
- ¿Qu—Qué?- Parpadeó, intentando no poder la calma. No estaba seguro si era por lo que acababa de decir su Hyung, o por lo cerca que estaban sus rostros, pero estaba segurísimo de que estaba más que nervioso.
- Te gusta, el chico del Dorama.- Rió, y con eso dejó al menor completamente descolocado. Se alejó de él, y volvió al trabajo.- Eres tan tierno, Minnie. Hubieses visto tu cara, tus mejillas estaban rosadísimas.
- ¿Eh? N—No, yo… Eso no es cierto Hyung, yo…- Intentó defenderse, pero era inúltil. Nunca había sido bueno mintiendo de todos modos- Quizás si me gusta un poco…- Confesó rendido.
- Ahá, lo sabía- Sonrió el moreno, pero luego recayó en algo importante.- Espera un segundo… Ese chico es rubio… Y tu me dijiste que te gustaban morenos…¿No?

Era verdad. Changmin le había dejado muy en claro en una ocasión, que le gustaban los chicos con el cabello oscuro…

- Que milagro, saliste del trabajo antes que yo- Dijo una conocida voz tras él.- ¿Qué pasó Changminnie, ya no te necesita el asistente ese?- Preguntó con un dejo de enojo en su voz, también lanzando sus cosas despreocupadamente a la cama.
- Hoy día no había mucho que hacer, Hyung. No había muchos clientes tampoco.
- Yo no sé porqué dejas que ese idiota te haga salir tan tarde todos los días.-
- ¿Idiota?- Preguntó Changmin sorprendido por la actitud de su Hyung.
- Sí. Yo creo que ese tipo es un completo idiota.- Se quejó el rubio- No entiendo como puedes pasar tanto tiempo con él todos los días. Es un pesado, creído, y encima el ‘grandulón’ ese es feo.
- Yo pienso que DaHao Hyung es muy simpático.- Dijo extrañado, la descripción que le daba su Hyung era totalmente opuesta a la realidad.- Y no creo que sea feo. La verdad tiene muy buen físico, y es casi tan alto como yo… También tiene un cabello lindo, me encanta el cabello negro…


Había sido aquella vez, hace tiempo, cuando DaHao y Changmin eran muy cercanos. Recordaba perfectamente que esa vez incluso se habían terminado pelando por culpa de sus celos. E incluso, había sido justamente por esa misma razón, que optó por teñirse el cabello negro otra vez, tal y cual lo tenía cuando era más joven. Y fue al recordar aquello, que la pequeña e inocente atracción que sentía Changmin hacia el actor y cantante dejó de ser graciosa. ¿Qué tenía ese rubio oxigenado que él no tuviese? Era ridículamente rubio, antinatural. Incluso, podría apostar que había visto al famoso Hong Ki con su cabello color naranja en una ocasión. Sí, era alto y atractivo, y a lo mejor esos colores si le quedaban pero… ¿No era Jaejoong así también? No era justo… ¿Porqué el rubio si? ¿Qué le hacía falta? ¿Por qué rayos estaba tan enojado? ¿Cómo podía una cosa tan mínima molestarle tanto?

- Hmp, no importa- Soltó con notoria molestia el mayor, mientras tomaba un paño seco, e intentaba secar los platos con desgano.
- ¿Qué sucede Hyung? ¿Me decías algo?- El castaño lo miró, pero el chico a su lado optó por solo fijar su vista en los trastes, e ignorarlo.
- No es nada Min, olvida lo que dije.-
- ¡Hyung!- Le dio un leve golpecito, y se acercó un poco - ¿Estás celoso?- Le preguntó con un tono burlón, era la hora de su venganza. Y juraría que vio como las facciones del moreno se tensaron unos segundos.
- ¡No lo estoy!- Se defendió de inmediato, casi gritando.
- ¿Y entones porqué ese mal humor? Tu reacción te delata, Jae Hyung-
- ¿P—Pero que cosas dices?- Respondió sonando tan poco natural, que Changmin no pudo evitar sonreír para si mismo.- No estoy de mal humor, sólo estaba siendo curioso. Y es que, yo pensé que te gustaba los moreno (y por eso teñí mi pelo nuevamente de color negro), pero él….Ese oxigenado. ¿Qué tiene él que yo no haya teni—?

Se cortó a si mismo, sonrojándose a mas no poder. ¿Qué demonios acababa de decir? ¿Por qué no pudo cerrar la boca unos segundos antes? Ahora se sentía más que avergonzado. Era realmente embarazoso el haber confesado sus infantiles celos, de una manera aún más infantil. Ahora sólo podía escuchar a Changmin reírse, su hermosa voz resonando en su cabeza una y otra vez. Y luego, sintió un leve golpecito en su hombro. Miró a su lado, sus mejillas rosadas. El menor le sonreía tiernamente, y sin previo aviso, le robó un corto beso en los labios. Y eso lo dejó pasmado, perplejo. Lo tomó completamente por sorpresa.

- Tonto.- Le sonrió el pequeño, y le lanzó un poco de agua al mayor. – Yo sólo te quiero a ti.
- Mira como me dejas- Soltó entre risas Jaejoong, no sabiendo si se refería a su delantal mojado o a su sonrojo.
-Y es cierto que Lee Hong ki es rubio. Pero, como parece que no me escuchaste la última vez que hablamos de esto.- Se acercó a el, hasta quedar a sólo centímetros del rostro del moreno.- Tu me gustas como sea Jae, con el pelo naranja, rosa, negro, azul, morado o castaño.
- Minnie…- Lo tomó por las mejillas, enternecido.
- Y creo que fue muy tierno que te tiñeses por mi.- Sonrió.

Y el tiempo se detuvo para ellos, ni si quiera notaron en que momento todo se volvió silencioso, en que momento sus respiraciones y sus acelerados corazones pasaron a ser lo único que se oía, ni tampoco se dieron cuenta que habían dejado el agua corriendo. Sólo importaban ellos, sólo importaban las manos del castaño alrededor de la cintura de Jaejoong, cuerpos cada vez más juntos, sus labios cada vez menos lejos…

- ¿Chicos, alguno de ustedes sabe donde esta la crema pastelera? No la encuentro en la bod—Lo siento, lo siento…-
- ¿Yunho…?- Soltó Jaejoong separándose de Changmin al instante.
- Creo que…Mejor le pregunto a Yoona, yo…

El pobre no sabía como reaccionar. Estaba allí, parado, apenas y apoyado en el marco de la puerta. Sus manos sudaban por los nervios, sus mejillas sonrojadas ante la escena, su mente gritando maldiciones. ¿Por qué siempre que llegaba, lo hacía en mal momento? O los interrumpía, o lo encontraba en una situación incómoda. Los chicos sin embargo, actuaban como si nada, como si no les incomodase, todo para no hacerlo sentir fuera de lugar.

- No te preocupes, no es tu culpa Yunnie.- Le dijo Jaejoong- Nosotros no deberíamos estar haciendo esas cosas, gracias al cielo eras tu….-
- Sí…- Dijo Changmin.- Ah, este…La crema pastelera está guardada en la parte de arriba, cerca de la puerta.
- Gracias.- Le sonrió Yunho.- Ahora me voy, ustedes sigan con lo suyo…-
- Espera.- Lo detuvo el mayor.- ¿Qué haces aquí a esta hora?-
- ¿Porqué?- Lo cuestionó.
- ¿No ibas a juntarte hoy con Yoochun para estudiar para los exámenes?- Le preguntó curioso, Yunho nunca faltaba a un compromiso, a menos que fuese estrictamente necesario.-
- Hyung, si es por el permiso yo puedo cubrirte- Ofreció el menor.
- No, no…- Los tranquilizó- No es eso. Lo que sucede es algo un poco más grave. Junsu está enfermo, con fiebre y en cama, y Yoochun lo está cuidando. Dice que se desmayó y se golpeó fuerte la cabeza, por eso sigue dormido.
- Pobre Junsu- Soltó el moreno.
- Deberíamos ir a visitarlo un día de estos.- Dijo Changmin.-
- Si, podríamos juntarnos en la semana e ir a darle una sorpresa. Podemos coordinar con Yoochun. Creo que a Junsu le servirá vernos a todos preocupados por él, quizás se mejore pronto.- Dijo el castaño.
- Me parece bien.



Habitación de Jaejoong y Changmin, 20:00pm


- No más, por favor…-

El castaño suspiró cansado, y se dejó caer boca arriba sobre su cama, rendido. Llevaba a penas media hora de estudio, pero podría jurar que se le había hecho tan largo como sus 16 años de vida. Su cabeza le dolía, sus dedos se quejaban de dolor, y su conciencia le suplicaba un descanso. Jamás pensó que estudiar para los exámenes fuera tan difícil, y tampoco se imaginó que la ayuda de su Hyung fuese casi como estar en el servicio militar. Era muy estricto, y sabía mucho.

- No creo que pueda volver a abrir un libro de álgebra en mi vida sin sentir ganas de vomitar- Soltó el pequeño.
- Y eso que estás apenas en segundo medio.- Le dijo el moreno sentándose a su lado.- Si estás así ahora, que no se te pase por la mente tomar Matemática avanzada el año que sigue.
- Créeme, Hyung. Ni por si acaso voy a tomar Matemática, no después de esto.- Rió un poco, sólo para relajarse.- Pero creo que con esto estoy bien para el examen. ¿No?- El moreno a su lado asintió.
- Ahora deberíamos repasar Biología, tenemos hasta las 22:00pm para prepararte.- Le dijo y se levantó para sacar de su mochila un pesado libro y un cuaderno.
- Jae, estoy cansado. No creo que pueda hace un resumen más. – Se quejó.
- Está bien, te daré un pequeño descanso. ¿Vale?

Changmin apenas y suspiró un ‘Sí’. Cerró sus ojos un momento, aprovechando que ahora podría relajarse un poco. Tenía muy claro que no podía dejar el estudio de lado. Su promedio había mejorado muchísimo desde el primer semestre, pero necesitaba notas sobresalientes en los exámenes finales para pasar bien de curso. Y su Hyung se había comprometido a ayudarle costase lo que costase. Además, no sabía de lo que sería capaz su tío si repetía un año, sólo tenía claro que nada bueno… Ese hombre odiaba a Jaejoong, y probablemente le echaría la culpa de todo a él.

- Minnie-ah… Min…- Escuchaba la voz del moreno a lo lejos.- Changminnie…-
- Mmng.- Se quejó, y se giró sobre la cama, acurrucándose contra la almohada.- Hyung…- Sentía como el mayor le acariciaba la cabeza, sus suaves dedos enredados en sus cabellos.
-Arriba bebé, vamos…-

Jaejoong suspiró, y frunció el ceño. Llevaba unos cuantos minutos ya tratando de despertarlo. Había bajado a preparar un poco de comida para su pequeño, pero al volver se encontró con la linda – literalmente- sorpresa de que Changmin estaba dormido.

- Bello durmiente…-Lo movió un poco, pero era inútil. -¡Shim Changmin!- Gritó, y eso bastó para despertarlo.
- ¿Hyung?- Casi gritó, levantándose de golpe. Parpadeó, y luego miró al moreno, que lo miraba con las mejillas infladas y el ceño fruncido. - ¿Me…Me quedé dormido…?- Preguntó nervioso, el mayor sólo asintió. -Lo siento…No me dí cuenta en que momento, yo sól—
- Ya, está bien. Tranquilo ¿Vale?- Le sonrió.- ¿Quieres que estudiemos Biología ahora, o prefieres que mejor te deje descansar?
- Yo puedo, en serio.- Le devolvió la sonrisa, y miró el reloj: Casi las nueve. ¿Tanto se había dormido? ¿Cómo es que su Hyung no lo despertó antes?-
- ¿Seguro? Si te vuelves a dormir no voy a poder despertarte.- Le dijo dándole un pequeño golpe en el brazo- Te ves demasiado hermoso cuando duermes.-

Changmin se sonrojó, y miró hacia a otro lado, sin saber que responder.

- Aish, sonrojado te ves hermoso también.- Rió.- A ver, tengo una idea Minnie.-
- ¿Qué? ¿Idea para qué?- Lo miró extrañado. El mayor buscó los cuadernos y libros que utilizarían y se sentó a su lado, sonriente.
- Para ayudarte a estudiar, tontito.- Le sacó la lengua, y le guiño un ojo.- ¿Qué te parece si por cada cierto número de respuestas correctas te doy un premio?-
- ¿Un premio…?- Lo miró, sus preciosos ojos color chocolate brillando, sentía mucha curiosidad ahora. Definitivamente el moreno era un genio, porque las ganas de estudiar biología que tenía en estos momentos, eran realmente un mensaje divino, un milagro del Señor.
- Si, ya verás.- Le dijo, y se acercó nuevamente a su cómoda para tomar dos platos de Pie de Limón.- Pero primero, debes comerte esto- Le entró uno de los platos.-
- ¿Lo hiciste tú?- Preguntó examinándolo.
- Claro que si, por eso me tardé un poco.- Le dijo, llevándose un trozo a la boca- Quería sorprenderte, pero para cuando llegué estabas dormido.

Changmin lo miró, sintiéndose un tanto culpable, pero el mayor no tardó en acariciar su mejilla e indicarle que por favor comiese. Y como siempre, a penas degustó el primero bocado, sintió que fue a parar al Cielo y volvió. Y es que, como era de esperarse, estaba delicioso – como todo lo que Jaejoong cocinaba para él- Luego de comer en silencio (Lo cual no significaba que el moreno hubiese perdido la oportunidad de darle de comer a Changmin como si fuese un bebé, y menos, que perdiese la oportunidad de ensuciar sus dedos con merengue sólo para lamerlos frente a su pequeño después, disfrutando del sonrojo que adornaba sus mejillas), los dos jóvenes hicieron a un lado los paltos vacíos, y se focalizaron en el temario del examen.

- Bien.- Comenzó Jaejoong- Aunque no lo creas, este examen no es tan difícil, si sabes en que puntos concentrarte. Puedo decirte con certeza que debes conocer muy bien el Ciclo Ovárico, así que comencemos con eso. ¿De acuerdo?
- Está bien.- Dijo el castaño asintiendo.
- Veamos, ¿Cómo se le denomina a la primera menstruación?-
- Menarquía- Respondió el joven rápidamente.- O “Menarca”.

Y así siguieron las preguntas, cada vez más difíciles. Y cada vez, el menor se sorprendía más y más al darse cuenta de que su Hyung era realmente más inteligente de lo que demostraban sus pruebas. Poco a poco el cansancio lo atacó, sus respuestas ya no eran tan rápidas y dudaba. Le dolía muchísimo su cabeza, pero debía seguir. No sabía cuanto más aguantaría, cuando más sabía, cuanto más faltaba para que necesitase mirar su cuaderno. Tampoco sabía si realmente podría recordar las correcciones que le había hecho el moreno.


- Muy bien, ¿La producción de óvulos comienza en…?- Preguntó, y pudo ver a Chamgmin dudar.
- Este…Comienza en la edad fetal, y luego queda detenido en ¿Profase II?- Dudó, y pudo ver como su Hyung negaba con la cabeza.
- Mal.- Le respondió.- En Metafase II.
- Oh, cierto.- Comentó, y tomó su lápiz al mismo tiempo que abría su cuaderno en una página en blanco, para anotarlo todo.-
- Creo que necesitas más motivación, bebé.- Le dijo acariciándole la cabeza con cariño.- Sé que estas muy cansado, pero aún nos queda media hora, y tu examen es mañana.
- Quizás debí haberte pedido que me enseñases Biología primero- Dijo cabizbajo, frustrado. Había respondido ya más preguntas erróneas que correctas, y eso no era una buena señal.
- Nada de eso, tu puedes Changminnie.- Le sonrió.- Ahora pasaremos a ‘Mutaciones Genéticas’.
- Hyung, no sé nada de eso, voy a sacar pésima nota mañana.- Se quejó deprimido.
- No, no… No digas esas cosas- Hizo un lindo puchero.- Venga, sigue intentando. Por cada respuesta correcta te daré un premio. ¿neh?
- Es cierto, eso me dijiste antes…- Comentó al recordar lo que le había sugerido su Hyung antes de que empezaran a comer.
- ¿Probemos, si?- Preguntó, y el menor sólo asintió.- ¿El Síndrome de Down es producido por una ‘trisomía’ en el par…?
- Par 21 – Respondió al instante.-
- Muy bien.- Le dijo, y le dio un corto beso en la mejilla, Changmin lo miró extrañado.- ¿Qué es ’Mosaicismo’?
- Este, es una alteración genética… Es cuando un individuo presenta dos poblaciones distintas de células con… genotipos distintos. ¿No?
- Perfecto.- Sonrió el moreno, y sin previo aviso, tomó el rostro del pequeño y juntó sus labios con los de él.

Changmin se sorprendió pero no tardó en cerrar sus ojos, para dejarse llevar, perderse en el beso. Los suaves labios de su Hyung tenían un leve gusto a merengue. Poco a poco lo fue recostando sobre la cama, quedando sobre él. Jaejoong sonrió al sentir como el castaño mordía su labio inferior, sin duda le gustaba, pero tenía otros planes.

-Neh, ¿qué crees que haces Minnie?- Le preguntó rompiendo el beso, sin embargo, sólo alejó al menor unos pocos centímetros.-
- Hyung…- Se quejó, sonrojado. Podía sentir el exquisito aroma a fresas que despedía el cabello del moreno, el dulce sabor del merengue aún en sus labios.
- Tienes que responder otra pregunta si quieres seguir.- Y una pícara sonrisa adornó su rostro.- ¿Cuál es el cariotipo de una persona que sufre del ‘Síndrome de Klinefelter?- Preguntó, sus labios casi rozando los del castaño.
- 46—
-No, Minnie. –Lo cortó.- Piénsalo otra vez.- Susurró en su oído.- ¿Qué otro nombre recibe esa enfermedad…?
- Síndrome de XXY…- Soltó entendiendo su error.- ¿47 XXY?
- Ahí si.- Respondió, y acercó el rostro del menor al suyo.

Mordió el labio inferior del castaño, y este no dudó en dejar salir un suspiro, permitiendo que la cálida lengua del moreno se adentrara por completo en su boca, y se enredara con la suya propia. De a poco, Jaejoong logró cambiar sus posiciones ahora él sobre su querido dongsaeng. Se separó -en busca de aire- intentando controlarse, se supone que debía ayudar al pequeño. Sin embargo, no pudo evitar morder el labio inferior de su pareja tentativamente.

-¿Porqué me haces esto?- Se quejó el castaño.
- Porque tienes que ganártelo, bebé.- Sonrió.
- Entonces escupe la maldita pregunta de una vez.- Dijo, rodeando con sus manos el cuello del mayor, sus labios casi rozándose.- No quiero seguir esperando.
- Creo que te gustó mi idea. ¿No es así?-
- ¿Tu que crees, Joongie?



A la mañana siguiente…

Los tenues rayos de sol que lograban colarse por entre las cortinas fueron suficientes para traer al pequeño Changmin de vuelta a la realidad- Muy a su pesar, puesto que estaba disfrutando mucho perdido en su mundo de fantasías.- Suspiró, sin querer levantarse todavía, estaba cómodo y calentito, su cuerpo desnudo abrazado firmemente al de Jaejoong, su cabeza descansando en cu escultural pecho, sus manos alrededor de su delgada cintura.

-Buenos días Minnie.- Lo saludó el mayor, despertando también.
-Buenos días Hyung- Sonrió, acurrucándose, sin querer soltar al moreno.
-¿Listo para tu examen de Biología?- Preguntó.
- No estoy seguro.- Respondió, un tanto decaído.- Estoy nervioso, no sé nada.- Mintió, no queriendo hacer sentir mal a su Hyung, pues la verdad no sentía que ayer hubiesen estudiado mucho…


Suspiró agitado al mismo tiempo que el mayor lo despojaba de su camisa, y comenzaba a dar cortos besos en su abdomen, una de sus tersas manos jugando con su pezón. Hacía bastante ya que habían tirado los cuadernos a un lado -sin embargo, y quien sabe como, habían logrado repasar más de la mitad de la materia-. Poco a poco el moreno fue bajando, aún posicionado sobre Changmin, hasta toparse con el cinturón que sostenía los molestos pantalones del menor.

-Ush, ¿Por qué es tan complicado sacar esta cosa?- Se quejó Jaejoong sonrojado al darse cuenta que no lograba retirar el bendito cinturón.
- Ya te ayudo Hyung…-Dijo el menor, y lo desabrochó rápidamente.
- No sabes como me está molestando tu pantalón en este preciso momento-
Soltó de forma pervertida.

En un solo movimiento, y con la ayuda de su dongsaeng, logró retirar la prenda, junto con su ropa interior. El castaño no pudo evitar que su rostro se tiñese de rojo, su cuerpo temblando un poco por el nerviosismo. Las manos de su Hyung tomaron su intimidad, masajeándola lentamente. Cerró sus ojos ante las caricias, y arqueó la espalda. De pronto, Jaejoong bajó su rostro, y descaradamente lamió la punta de su miembro.

-H—Hyung…-Gimió, abriendo a penas sus ojos.- E—Eso…
- ¿No te gusta, Minnie…?- Preguntó mientras lamía toda su extensión.
- No es … eso- Comentó, su cuerpo reaccionando ante las caricias.- Es sólo que …Nnnn—Eso, es tan…Sucio….Me da vergüenza.-
- No tienes que avergonzarte por sentir placer Changminnie.-
- Pero…Ah—

No pudo decir nada más. El mayor introdujo todo a su boca de una sola vez, disfrutando al sentir como el cuerpo de su adorado pequeño se estremecía, como jadeaba, como mordía su labio inferior para reprimir gemidos, sabía que para el era embarazoso tan bien como sabía que le gustaba. Eso lo alegraba, pues era la primera vez que lo hacía – también estaba nervioso-, y quería hacerlo bien, quería que Changmin lo disfrutase. Poco a poco aceleró su ritmo, y el sabor de las primeras gotas de pre-semen inundó su boca.

-Jae, no sigas….O yo…- Advirtió, sintiendo que su cuerpo se tensaba, en placer aumentando cuando Jaejoong optó por masturbarlo con una de sus manos también.
- Changmin…-Soltó, al sentir como el pequeño se corría en su boca.-
- L—Lo siento tanto, yo…Me corrí…Y—
- Eres delicioso Minnie…-


Cerró sus ojos avergonzado al recordar eso. Su temperatura elevándose a medida que revivía las escenas vividas anoche. Las cosas, sin embargo, las cosas no habían pasado a mayores. Se limitaron a entregarse felaciones mutuamente.
- Tranquilo Changminnie, yo sé que te irá bien.- Dijo tomándolo por las mejillas, para darle un corto beso en los labios, y luego un besito en su frente.
- Eso espero.- Suspiró.



En la escuela, hora del almuerzo.

Estaba agotadísimo. El examen acababa de terminar, y se sentía – cansado, obvio- increíblemente seguro de todo lo que había respondido, más que satisfecho. Jamás había rendido tan bien en una prueba como esa, lo más gracioso, es que estaba seguro que reprobaría debido al extraño método de estudio que le había propuesto su Hyung, pero al final, resultó de maravilla. Ahora se paseaba por los pasillos de la escuela, buscando la sala del mayor para poder agradecerle de buena manera. Estaba por doblar en la escalera cuando se topó con cierto castaño.

- Hola Changminnie, justo te estaba buscando- Le dijo Yunho contento.
- Hola Hyung.- Lo saludó.
- Joongie me dijo que por favor lo disculparas, que estaría un tanto ocupado.-
- Oh, ya veo…- Bajo la mirado un tanto decepcionado-
- La profesora de Química en serio tiene algo en contra de él, eso es seguro. No había visto jamás que un profesor fuera tan mala leche con un alumno.
- Sí, algo así me contaba Jae Hyung la otra vez.- Rió un poco, tratando de disimular su decepción.
- Sé que no soy la persona que deseabas ver, pero ¿quieres que almorcemos juntos?

Changmin asintió, y ambos jóvenes se dirigieron al casino. Yunho le hizo entrega de una linda caja de almuerzo al menor, cortesía de Jaejoong, por supuesto. El más joven sonrió, sus mejillas sonrosadas ante el cariñoso gesto.

- Te quiere mucho. ¿no?- Le preguntó a penas se sentaron en una de las mesas más apartadas sólo por tener un poco más de privacidad.
- Eso creo…- Sonrió.
- Créeme, que eres la persona con la que ha llegado más lejos.- Le dijo.- Y además, es la primera vez en años que lo veo tan feliz.
- Gracias por decir eso.- Soltó, sus ojos con un extraño brillito.- Pero, hablando de otra cosa… ¿Han sabido algo de Junsu Hyung?-
- Nada la verdad. Yoochun nos dijo que lo fue a dejar a su casa luego de su desmayo. Pero para cuando se tuvo que ir, el pobre aún no había despertado. Parece que está muy mal.
- Espero que se mejore pronto…




Días después…

Yoochun tocó el timbre un tanto nervioso. No hacía más de 20 minutos que había recibo una llamada por parte de la madre de Junsu avisando que el joven ya había despertado. Se supone que esperaría a Yunho, Changmin y Jaejoong para ir a hacerle una visita todos juntos, pero las ansias de saber como se encontraría el rubio eran incontrolables.

- ¿Si?- Preguntó la voz de la señora Kim a penas se abrió la puerta de entrada.- Oh, eres tú Yoochun. Pasa cielo, adelante.- Lo invitó a entrar enseguida.
- Gracias- le sonrió, y entró a la casa.- ¿Cómo sigue Junsu?
- El está mucho mejor, despertó poco antes de que te llamara.- Respondió- Gracias por preocuparte tanto por mi hijo.-
- No hay de qué, para algo estamos los amigos.-
- Eres muy buen chico.
- No sólo yo, señora.- Rió nervioso.- Los demás van a llegar más tarde, yo salí apurado porque hoy es mi día libre, los demás trabajan hasta las 5- Miró su reloj, casi las cinco de la tarde.
- Que modesto.- Le acarició la cabeza- Mi bebé esta en su cuarto, puedes pasar a verlo. No te entretengo más.

Se adentró en la casa, subió por esas escaleras que ya conocía de memoria. Y entró a la primera habitación a la derecha. Allí, se encontró con un rubio que yacía recostado en su cama, que a penas lo vio entrar, en incorporó.

- Tiempo sin verte Chunnie.- Le sonrió.- Gracias por pasar a verme. Mamá me dijo que venías a diario….
- Oh…Pues, no es na—nada.- Dijo, sonrojado.
- Que vergüenza. No recuerdo haberte visto, probablemente por la fiebre.- Rió - Me viste todo sudado, rojo y ojeroso, que mal…
- Créeme que eso fue lo que menos me preocupó Junsu. Me diste un buen susto el otro día en el colegio. Pero, ¿Ya estás mejor?
- Me siento mejor, incluso recuperé el apetito, y ya no me duele tanto la cabeza.
- Esa es una buena noticia.

Hubo un corto silencio, mientras tanto, Yoochun caminó hasta sentarse en el borde de la cama, al lado del rubio.

- Está bien, dime la verdad. ¿Cuántos exámenes me he perdido?- Preguntó, fingiendo desesperación.
- Tres, y probablemente no vayas mañana, así que cuatro.- Dijo, y Junsu fingió un paro respiratorio. No faltó mucho más que ambos se largara a reír.
- No puede ser, moriré.-
- No lo digas ni en broma.- Lo miró con seriedad.- En todo caso, sabes que yo siempre estaré allí para darte unas buenas clases particulares.
- Of course- Soltó en inglés, su pronunciación horrible.
- Y de paso te puedo dar unas clasecitas de inglés, no te harían nada mal, eso te lo aseguro.- Rió.
- Pesado.- Se quejó inflando sus mejillas y frunciendo el ceño. Le propinó un palmetazo en el brazo al moreno.
- Que bruto.- Se quejó- Menos mal estás enfermo, porque el día que estés sano, no vivo para contarlo.

Volvieron a reír, esta vez con más ganas. Hacía tiempo que no hablaban, y aunque ninguno de los dos quisiese admitirlo, les había hecho muchísima falta. Yoochun iba a decir algo, pero enseguida, su celular vibrando en su bolsillo lo detuvo. Miró la pantalla, “Yunho”. Se disculpó y contestó de inmediato.

- Sí, dime.- Dijo- Ya veo, está bien. ¿Vienen todos? Oh, bueno, nos vemos.
- ¿Era Yunho…?- Preguntó en dueño de casa.
- Sí, llamaba para avisar que vendrían todos. Al menos el, porque Jaejoong y Changmin se fueron juntos al trab—
- Ni siquiera me hables de esos dos.
- ¿Qué…?
- Jaejoong y Changmin…. Esos mentirosos….
- ¿Junsu, de qué hablas?


1 Comentarios:

Deja tu comentario \(*O*)/ ♥ ♥
o más bien... deja tus pensamientos pervertidos grabados en esta entrada XD