Underground cap 13

Hasta entonces, y buenas noches.

Se despertó acurrucado entre sus sábanas con el olor de Junsu en la almohada, mientras, tanteaba la cama en busca de aquel precioso ser.
Levantó un poco la cabeza hacia arriba y abrió los ojos.

- ¿Junsu?... – reprochó haciendo un puchero.

Jaejoong se enredó con las sábanas como un niño y se sentó a la orilla, refregó sus ojos con el puño para luego estirarse y tirar un largo bostezo, había sido una larga noche. Una sonrisa se dibujó en sus labios ante el recuerdo y abrió los ojos encontrándose con la silueta de Junsu frente al espejo acomodándose la corbata.


- Bueno, yo me voy a trabajar, ya es tarde. – se acercó a la cama.


Se rió viendo al doctor, acomodó unos cabellos de su flequillo y lo besó en los labios.


- Escúchame, - busca el maletín – báñate, cámbiate, y ándate a trabajar, mi vida.

- ¿Ah?

- ¿No entendiste? – seguía buscando por la habitación.

- Si, si… - se levantó teniendo las sábanas para pasarle el maletín. - ¿Me dijiste… - lo tomó de la cintura acercándolo – mi vida?

- Sí. – lo tomó del mentón y le dio otro corto beso – Bueno me voy, - se marchó por el pasillo abriendo la puerta del departamento – ah, después me contás como es eso de que tu padre tenía problemas con el alcohol. – cerró la puerta.


Crack. Volvió a caer sentado sobre la cama.

~

11:58
Oficina sepelios Jung.


- ¡Llegue!

- Llegas tarde Junsu, ¿más problemas con tu novio?

- No necesariamente problemas. – deja el maletín a un lado de su escritorio

- Así que ya son novios.

- Eh… Me cagó. Algo así.

- … Oh, pero que maleducado, él es Changmin, de la familia Shim, ¿recuerdas a los Shim no, Junsu? – lo miró de reojo.

- Por supuesto… Nuestros mejores clientes. – extendió su mano a la persona de espaldas sentada por arriba de su hombro.

- Mucho gusto. – se paró dándose vuelta para sacudir su mano con una gran sonrisa. - ¡Oh! Usted es…

- Un empleado de aquí. – lo miró seriamente acallándolo con esa aclaración. – Bueno, Changmin ya se iba.

- Cierto, - saludó a Junsu y a Yunho y se acercó a la puerta – luego nos vemos socio.

Socio. Socio. Socio.



- ¿Te sucede algo Junsu?

- ¿Ah? - volvió en sí – Ah… eso. Tenía algo que decirle…

- ¿Qué cosa?


Apretó el puño y lo golpeó en la cara haciendo que Yunho quedara en el suelo sangrando por la nariz.


- Era eso.

- ¡¿Qué mierda te pasa?! – se quitó un poco de sangre con el puño.


- Habíamos quedado, como amigos que éramos, - sacudía su mano ante sentir un leve dolor – que nunca más harías este tipo de cosas.

- C-Como… ¿Cómo te enteraste?

- Yo también tengo mis contactos, Yunho. – lo observó levantarse del suelo.

- Sabes… hablaremos esto otro día. Ahora me voy al hospital, estoy seguro que me has roto la nariz. Quiero que notes… - abrió la puerta de la oficina – que no me he rebajado a tu nivel. Empleaducho.

- Mira quién habla…– se exaltó al sentir el portazo frente suyo.


Unas horas después Junsu recibió un mensaje de texto.

“Trabajaré hasta tarde. No me esperes. Cuídate ~”


~


Jaejoong se despertó un poco desorientado, apenas notando que estaba anocheciendo y estaba tendido sobre el suelo. Y tenía frío, y un mal presentimiento.
Lo único que recordaba era estar corriendo la cortina para ver a su próximo paciente mientras escribía un mensaje a Junsu para que se preparara para esa noche, y luego, luego… Intentó razonar y lo único que recordó fue el olor a cloroformo sobre su nariz y que luego caía lentamente sobre los brazos de alguien.

Me secuestraron. ¿Me secuestraron?

Levantó unos centímetros del suelo su rostro para ser ensuciado con más tierra, después volvió a caer para tomar fuerzas luego y salir corriendo de donde estuviese. Pestañeo varias veces y reconoció el lugar… era, ¿un cementerio?
Se retorció un poco para tener una mejor amplitud de vista de su alrededor, encontrándose con una figura oscura y algo borrosa debido a los débiles efectos del cloroformo, que estaba cavando a unos cuantos centímetros de él, mientras tarareaba una canción que no lograba reconocer. De repente escuchó como clavaron la pala en la tierra y unos pasos se acercaban hacia él.


- Al fin despertaste… bello durmiente.

- Argh… - trató de levantarse usando de apoyo su brazo - ¿Y-Yunho?

- Él mismo. ¡Ha! No tienes idea del honor que se te ha concedido… - se hincó en sus rodillas mofándose en su cara - Enterrarte con mis propias manos. ¿Sabes? Todo esto no hubiera ocurrido si no te metieras donde no debes, doctorcito.


Yunho se puso de pie, sacudiendo sus manos, luego colocándolas cada una a un lado de su cintura para observar a Jaejoong con aire de superioridad. Rió un poco, para luego juntar un poco de tierra con su zapato. Lo pateó sin descaro en el estomago, varias veces, haciéndole salir sangre por su boca. Paró en seco, sonrió de costado y tomó a Jaejoong del brazo arrastrándolo por el suelo llevándolo frente al hoyo para sentarlo.


- No te preocupes, yo le daré el beso de las buenas noches a Junsu.


Se colocó de cuclillas y lo empujó por sus hombros precipicio abajo, escuchándose un golpe seco.
Yunho tomó la pala y comenzó a llenar el pozo con tierra, mientras hacía oídos sordos a los lamentos y gritos de Jaejoong.

Gatillo. Disparo. Impacto.
Dos disparos. Impacto.
Ultimo disparo. Impacto.

Cayó de rodillas dejando la pala a un lado para tomarse el pecho observando cómo brotaba la sangre de su camisa sucia.

- No creo que sea su hora, aún.

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