All I’ve got - Parte 2

Entrada 1,315

Jaejoong-ah. Yiseul dejo un montón de porquería en mi puerta hoy. Tu no estabas aquí, gracias a Dios. Te prometo que fui educado con ella, aún cuando lo único que quería era romper su rostro de un golpe. Ahora lo único que tengo que hacer es convencerte de que no veas ninguno de los objetos que alguna vez le regalaste.

~

Había tres de ellas. Tres cajas apiladas en la sala, cada una perfectamente cerrada con cinta de embalaje. Jaejoong se sentó en el sillón y comenzó a abrirlas. Se detuvo cuando en una de las cajas encontró un álbum de fotografías, paso suavemente los dedos por sobre una foto en sepia de el y Yiseul en la portada del álbum. Volteo las paginas lentamente, con Yunho mirando por detrás de su hombro.
Ahí estaba Jinae caminando lentamente arrojando flores, los otros cuatro miembros de pie junto a Jaejoong, Yoochun como el padrino, los padres llorando, casi la mitad de la industria de entretención coreana cantando y aquel beso que según Yunho fue “innecesariamente largo”.

Jaejoong lo cerró de golpe. “Debería quemar esto” dijo el, riendo y dejándolo de lado.

Yunho descanso su mentón en el hombro del cantante. “El siguiente.” El le propuso.
“Me esta gustando este rápido progreso.”

Jaejoong hurgó entre los caros regalos que le había dado a esa mujer, más fotografías, cartas sentimentales y diarios.

“Ella es una estúpida por haberte devuelto todas estas cosas.” Yunho dijo. “Desearía poder golpearla. Fuerte. Justo en la boca.”

“Ella probablemente no quería lidiar con esto.”

“No significa que te los tenía que devolver.”

Jaejoong asintió con su cabeza y se dirigió hacía la siguiente caja. Más regalos, más cartas, mas mierda. La tercera caja era lo mismo, pero Jaejoong sacó un CD lleno de canciones que había escrito solo para ella. “Las volveré a escribir, las mejoraré.”
Dijo mientras guardaba lo demás en la caja. “Talvez se las muestre a Junsu a ver si quiera alguna. Alguien debería obtener provecho de todo esto.”

Se sentó nuevamente en el sofá junto a Yunho, con el CD entre sus manos.

“No fue tan malo como pensé que sería” Yunho dijo, pasando su brazo por sobre los hombros de Jaejoong. “Estoy positivamente impresionado”

“Me he dado cuenta que debo olvidarla” Jaejoong le contestó. “Aún hay muchas cosas que quiero hacer, con ella o sin ella. Estar deprimido por siempre no es algo inteligente. A veces puedo ser un tonto, pero no siempre.”

“Yo no creo que seas un tonto.” Yunho dijo, preguntándose en que momento había comenzado a mecer a Jaejoong y este había empezado a dormitar.

Jaejoong soltó un suave ronquido.

“Entonces, ¿Cuáles son esas cosas que quieres hacer?” Yunho le dijo, despertándolo.

“Viajar, obviamente” Dijo un adormilado Jaejoong. “y aún quiero tener hijos.”

“Puedes tener uno de los míos.” Yunho dijo, medio en broma. “No creo que pueda con los 25”
Ellos rompieron en carcajadas.

“Podemos viajar si quieres. Adonde desees ir.” Dijo Yunho.

Jaejoong se volteo hacía el interrogante, Yunho se mantuvo estático, temeroso de que al menor movimiento sus labios podrían rozarse. “¿De verdad?”

“Por supuesto”

“¿Paris?” Jaejoong preguntó y Yunho asintió. “¿Londres? ¿New York? ¿Venecia?”

“Donde tu quieras. Incluso a la Antártida.”

Jaejoong soltó una carcajada. “¡Pingüinos!”

“Nos robaremos uno” Yunho prometió. “O dos, así ellos podrán hacer bebés pingüinos y nosotros podremos tener una pequeña familia de pingüinos.”

Jaejoong río con más fuerza aún; Yunho no entendía que parte era tan graciosa, pero el estaba tan feliz de ver a Jaejoong reír que siguió hablando, planeando las habitaciones, la comida e incluso la ropa que les pondrían a los pequeños animales.

“¿Qué pasó contigo?” Jaejoong le pregunto aún riendo. “Tu-tu nunca fuiste así de chistoso. Tu nunca fuiste así-así como sea que eres ahora.” El sonrío y tomo la cara de Yunho con sus manos.

Yunho se tensó. Su corazón corría a miles de kilómetros por hora. Jaejoong se inclino y le dio un beso en la mejilla. “¡Hey!” el líder le reclamó. Su cerebro había dejado de funcionar.

“Me la debes” le dijo Jaejoong, levantándose y tirando el CD a la caja aún abierta. “¡Vamos, los platos sucios!”

“Pensé que querías ese CD” Yunho le pregunto levantándose del sillón.

“Nah” dijo Jaejoong haciendo una mueca, mientras comenzaba a caminar en dirección a la cocina. “No creo que escuchar esas canciones se una decisión inteligente.”

Yunho cerró la puerta del cuarto. Mientras una sonrisa surcaba su rostro, exuberante, como aquel beso que se hundía profundamente en su mente. Corrió un poco y alcanzo a Jaejoong y le dio un fuerte abrazo de oso, girándolo por la habitación, mientras ambos reían. Nunca en su vida, había disfrutado tanto lavar los platos como aquel día.


Entrada 1,319

Jaejoong-ah. Sonreías de forma muy extraña esta mañana. Si al volver del estudio has quemado el departamento, estaré muy molesto.

Yunho volvió del estudio esa tarde y al entrar a su departamento había un delicioso aroma a comida casera. “¿Jaejoong?”

“¡Cocina!” se escucho el grito en respuesta, seguido por el sonido de agua corriendo y chocar de ollas contra la estufa.

Yunho bailaba con la música en su cabeza, satisfecho del progreso de sus alumnos el día de hoy. Se deslizo hacía la cocina, con la intención de atrapar a Jaejoong en un abrazo. Jaejoong se había vuelto extremadamente cariñoso últimamente y eso no era algo que el quisiera desalentar. Se detuvo en seco al notar que la cena no era la del local a domicilio que pedían normalmente.

“Hola” dijo Jaejoong con ojos brillantes y en las manos unos palillos de cocina.

Yunho ahogo un sonido en su garganta.

Jaejoong río.

“Tu-tu cocinaste” Yunho finalmente pudo decir.

“Estaba cansado del Ramen” Jaejoong se encogió de hombros y se volteo hacia las ollas. “Así que se me ocurrió hacer la cena. ¿Alguna queja?”

“No” dijo Yunho mientras negaba con la cabeza vigorosamente.
“Nunca. Estoy tan feliz. ¡Jaejoong estas cocinando!”

Envolvió a Jaejoong en un apretado abrazo. Sus ojos amenazaban con soltar las lágrimas contenidas. “Estas cocinando” el murmuro nuevamente, negándose a soltar al cantante, quien incluso jalaba su cabello.

“Si bebé llorón.” Jaejoong le dijo. “Ahora déjame ir o todo se quemara”

Yunho disfruto de otro breve momento de su cuerpo contra el de Jaejoong y luego lo dejó ir, tomo un pequeño trozo de carne antes de comenzar a caminar hacia el baño.
“¡Ducha!” grito antes de entrar. Su corazón estaba cerca de estallar.

“¡Límpiate con fuerza!” Jaejoong gritó. “¡Apestas!”


Entrada 1,327

Jaejoong-ah. Han sido muchos días desde que dejamos de ordenar comida a domicilio. Creo que mi estomago estará muy feliz si te quedas a vivir conmigo por siempre. O talvez sea mi corazón. No te sabría decir.
No se que es lo que se ha apoderado de ti, pero no voy a quejarme por la inmensa cantidad de abrazos y deliciosa comida que se ha apoderado de mi vida. Estoy en un permanente estado de felicidad y todo es tu culpa.

~

Honestamente, Yunho nunca había sido tan feliz como ahora. Quería decírselo a Jaejoong, pero el exceso de alcohol consumido hasta el momento no le ayudaba a formar frases entendibles. Jaejoong se abrazaba a el con fuerza, un indicador de que el también estaba muy ebrio.

¿Por qué no hicimos esto antes? Yunho se pregunto sonriendo. Jaejoong jugaba con las manos de ambos, trazando las líneas de las venas del líder y sonriendo como una colegiala sonrojada.

“Lindas” el dijo. “Lindas manos”

“Siempre te han gustado las manos” Yunho dijo, apoyando su rostro en el cabello del cantante, tomando el aroma proveniente de el.

Jaejoong se volteo hacía el sonriendo y tratando de enfocar su mirada, señal de que no recordaría mucho de esta noche la mañana siguiente.

“Tus manos” el susurro, como si fuera un secreto nacional.

“Si, estas son mis manos” Yunho río y acaricio la cabeza de Jaejoong. “Bien dicho”

Jaejoong miraba a Yunho como si este ultimo fuera estúpido, y el líder lo miraba tratando de entender que se había perdido. Pero Jaejoong giro en dirección a la pantalla de televisión enfocándose nuevamente en la película y apoyando su cabeza en el hombro del moreno. Sus manos aún estaban enlazadas.

¿Por qué me haces esto? Yunho pensó, incapaz de impedir que su cabeza se posara sobre la de Jaejoong, incapaz de detener el rápido latido de su corazón al escuchar cada respiración del cantante. El pensó que era solo su imaginación el que Jaejoong presionaba su cuerpo aún más contra el suyo y apretaba su mano un poco más fuerte.

Justo cuando empezaba a quedarse dormido, porque la verdad la película no podía ser más aburrida, sintió algo tocando su mejilla. Por el rabillo del ojo pudo ver el dedo de Jaejoong delineando la cicatriz bajo su ojo.

“Jaejoong” se quejó, tratando de sacar la mano del cantante.
Jaejoong se río y comenzó a rosar con sus labios la cicatriz muy suavemente.
“¿Jae?”

Era difícil respirar. Yunho no podía pensar en nada más que en los labios que rozaba su rostro. En el aroma y el calor de Jaejoong.

“Jaejoong” jadeó Yunho. Alejándose de el con urgencia. Podía sentir como su cuerpo respondía al acercamiento, sus manos temblaban cuando Jaejoong comenzó a usar su lengua para trazar la línea del tejido dañado.
“Jae-Jaejoong” suplicó Yunho. Sus narices rozándose, sus frentes juntas, sus labios tocándose ligeramente.
Yunho no pudo detenerse, sus manos viajaron hasta la espalda de Jaejoong dando un agarre firme.

“Di algo” demando Jaejoong. “Di algo además de mi nombre”

Yunho se sentía en el paraíso cuando Jaejoong presiono los labios de ambos para besarse nuevamente, esta vez de forma más profunda. Pasó su lengua por los labios de Yunho antes de separase nuevamente. Yunho tomo un momento para poder respirar.

“¿Qué…qué haces?” Se pateó mentalmente al haber dicho esa frase al ver que Jaejoong se tambaleaba hacia el otro extremo del sofá.

“Yoochun…” Jaejoong dijo mientras lo miraba “Yoochun dijo…”

Yunho se congelo.

“El dijo” Jaejoong sonaba un poco en pánico.

“¿El dijo que?” Yunho pregunto. Pensando en que podía hacer para que Jaejoong volviera a su lado. Preguntándose si todo aquello era un sueño. Preguntándose si era posible morir de felicidad. El extendió su mano hacía el cantante frente a el.

“El dijo…” Jaejoong gimió al tropezar con sus pies al intentar levantarse. “nada…solo…no es importante. Cama. Estaré en la cama…¡Durmiendo!”chillo la última palabra y salio corriendo, muy inseguro.

“Jaejoong” Yunho gimió. Pero la puerta de la habitación ya había sido cerrada.
“¿Pero que demonios?” el le pregunto al personaje principal de la película, quien estaba llorando en la torre de Tokio. “¿Qué acaba de pasar?”

Como era de esperar, el personaje no le respondió y siguió llorando mientras la cámara hacía una toma en movimiento.

El sintió las ganas de unirse a la protagonista en el llanto.

~

Yunho despertó con un fuerte dolor de cabeza y una serie de recuerdos de los labios de Jaejoong. Pensó que había sido un sueño hasta que se dio cuenta que había dormido en el sofá y que el cojín de esté estaba cubierto de las lágrimas que había derramado hasta quedarse dormido.

Suspiro.

El menú del DVD seguía en la pantalla. Buscó el control remoto y lo apagó antes de lanzarse al sofá. ¿Qué hacer?

Reflexiono sobre varias opciones, ninguna de ella tenía un final agradable, siguió en eso hasta que sintió un golpe proveniente del cuarto. Puso sus pies en el piso y se dispuso a caminar hacia allá. Antes de salir del sofá apareció un muy desconcertado Jaejoong.

“¿Yunho, dormiste aquí?”

El aludido volteo su rostro con una sonrisa. “Eso creo”

Jaejoong asintió y pasó una mano por su cabello. “Luces como la mierda” el comento.
“Supongo que bebimos demasiado.” El suspiro. “¿No hice nada estúpido, cierto?

Yunho solo pudo pensar en sus labios contra los de Jaejoong.

“No” el dijo. “No que yo recuerde”

“Bien” Jaejoong sonó aliviado. “No puedo recordar mucho”

“Estuviste bien” Yunho le aseguró, sintiéndose como si quisiera vomitar.

“¿Café?” Jaejoong preguntó.

“Si, por favor.” Yunho le contesto ya de pie, con la intención de ir al baño a darse una ducha, que borrara de su cuerpo todo vestigio de la noche anterior.

Es mejor si el no recuerda, Yunho se dijo, mientras el agua caliente impactaba su espalda desnuda. Es mucho mejor.





Entrada 1, 332

Jaejoong-ah. Pensé que lo habías olvidado.

~

No ha habido cena cacera en una semana, Jaejoong no sabia como explicarlo y Yunho se cansó de preguntar. Su nariz estaba desesperada por no oler ningún aroma a comida cuando entro al departamento.

“¿Jae?”

No hubo respuesta, pero Yunho encontró a su compañero de banda en la cocina, calentando un trozo de carne.
“Hola”

Dijo en voz baja Yunho. Jaejoong levantó la cabeza para ofrecer una sonrisa. Yunho se acerco para abrazar al pelinegro, pero este se alejó antes de que se pudiera tocar su hombro. Yunho no pensó que aquello fuera a propósito, pero no podía estar seguro. Y por lo tanto no podía estar enfadado por ello.

"¿Fue un buen día?" Jaejoong preguntó, y él parecía feliz, a pesar de las apariencias.

“Sí. ¿En qué puedo ayudar? "

“Arroz” Jaejoong señalo en dirección a las cajas de cartón en la despensa. Yunho se acerco a Jae en busca de los palillos y aspiro profundamente el aroma de su compañero, solo en caso de que alguna vez lo fuera a olvidar.

Comieron en un casi absoluto silencio. Yunho se burlo un par de veces de la consistencia del arroz y Jaejoong respondía burlándose de su mal gusto.
Yunho se imagino que para cualquier persona que los mirara, verían una imagen perfecta. Tal vez incluso, estereotipada, pensó, mientras Jaejoong ponía mas arroz en su plato, y tal vez lo era. Pero honestamente daba igual, Jaejoong había sido suyo durante este tiempo y eso era lo único que le importaba.

Limpiaron sin contratiempo todo, hasta que Yunho se acerco a Jaejoong agitando una caratula de DVD. Se sentaron a verlo.

Jaejoong no se acurruco contra Yunho, ni dejo sus manos entrelazadas. Yunho trato de acercarse a el, pero Jaejoong se alejo abruptamente. El bailarín sintió su corazón romperse, pues no se suponía que debía ser así la reacción del pelinegro.

El no tenía idea alguna de lo que trataba la película, había pasado casí toda su duración en intentos fallidos de tocar la mano de Jaejoong, quien solo lo evadía. Honestamente, estaba esperando cualquier indicio, una mirada, una sonrisa, lo que fuera que significara que había habido un progreso.

Los créditos estaban en pantalla, y ninguno de ellos se acerco al control remoto para tratar de apagar la TV.

“¿Porqué estas haciendo esto?” Yunho finalmente pregunto.

“No se de lo que estas hablando” Jaejoong dijo mientras apagaba la TV y el DVD.

“Jaejoong, hablo enserio. ¿Qué paso? ¿La viste? ¿Escuchaste el CD? Contéstame.”

“¿Qué? No-no, yo no, Yunho. No.”

Yunho vio impotente, como Jaejoong salía de la habitación hacia la cocina. El sonido de las tazas tocándose unas a otras se podía apreciar.
Yunho fue tras él, determinado.

“Ella no volverá” Yunho dijo desde la puerta de la cocina, cruzando sus brazos contra su pecho.

Jaejoong lo vio, mientras cerraba de un portazo la puerta de la alacena.

“Tienes que seguir adelante Jaejoong. Ella ya no te ama. Tú tienes que detener esto. Tienes que detener esto porque te estas matando.” Estas matándome, quiso agregar desesperado en su cabeza Yunho. Deseando que sus palabras pudieran ser escuchadas por el subconsciente de Jaejoong.

“Yo no…” Jaejoong siseo.

“Jaejoong, por favor.”

“Yo se que ella se ha ido.” Jaejoong le gritó. Lanzando la tasa de te hacía la pared, donde se quebró.

“¡No tienes que recordármelo! ¡No tienes que restregarlo en mi rostro!”

“¿Entonces que es?” muy cerca de comenzar a gritar también.

“¡¿Entonces que diablos es Jaejoong!? Estabas bien, estabas cocinando, componiendo, saliendo de casa… ¿Qué mierda paso?”

Jaejoong lo miro, tragando varias veces.

“No es nada. Nada importante. Solo olvídalo.”

“¿Cómo se supone que lo olvide? ¿Cómo puedo olvidar, si al verte puedo saber que aun estas herido?”

El puño de Jaejoong se estrello contra el mesón de la cocina. Haciendo que Yunho saltara por la abrupta reacción.

Yunho se acercó y tuvieron una pelea pequeña antes de ser capaz de posar con éxito sus manos sobre los hombros de Jaejoong.

"Ya basta" dijo con fuerza:

"Cualquiera que sea la mierda, debes ponerle fin. Porque no puedo soportar verte así otra vez."

Jaejoong puso distancia entre ambos y de dirigió hacia el dormitorio de Yunho, cerrando la puerta con fuerza. Yunho se sintió estremecer, dio un par de respiraciones antes de dirigirse a la sala de estar.


Se quedó dormido en el sofá, fingiendo que no escuchaba a Jaejoong llamar por teléfono a Yoochun, llorando.


Entrada 1,333

Jaejoong-ah. Cuando me desperté esta mañana, te habías ido. Pensé que tal vez ibas a volver, pero Yoochun se presentó y me golpeo en la cara y me di cuenta de que te habías ido para siempre. Me pregunto si es así como te sentías. Creo que ahora entiendo por qué no querías hielo.

Dios me duele, Jae. Es jodidamente doloroso.

~

"Eres muy tonto. Lo sabias, ¿verdad? Quiero decir, que eras bastante impresionantes como un líder y todo eso, pero eres realmente la persona más estúpida que he conocido jamás."

Yunho se cubrió aún más con las cobijas e hizo un puchero, a pesar de que sabía que Changmin no podía verlo a través del teléfono.

“Changmin, solo dime si el está bien. Sé que esta con Yoochun.”

"Para que lo sepas, a causa de tu idiotez me he visto en la obligación de pedir a Yoochun que sea el padrino de mi futuro hijo. Si mi pequeño resulta ser un pianista EMO, será tu maldita culpa."

Yunho sostuvo el teléfono lejos de su cara he hizo una morisqueta de burla.

“Changmin…¿está bien o no?”

Yunho escucho un largo suspiro a través del teléfono.

“ Aish…ok. Si, el está a salvo, pero no, no está mejor, de hecho esta peor. Y eso es porque tu eres una horrible persona. Me tengo que ir mi bella mujer está tratando de hacer la cena y me temo que puede quemar la casa.”

“Adiós.” Dijo Yunho débilmente y la única respuesta que obtuvo fue:

“No, mi amor, no toques…” y la línea se corto.

Yunho estuvo unos cinco minutos mirando su celular hasta que se decidió en marcar a Junsu.

“Eres un imbécil”

“Hola Junsu.” Yunho fingió no haber escuchado el reproche inicial de Junsu.

“¿Cómo esta yendo tu tour?”

“Todo estaba bien, hasta que Jaejoong me llamó llorando. ¿Cómo puedes ser tan imbécil con el, después de todo por lo que ha pasado?”

“Pero, yo no le he hecho nada.” Se lamentó Yunho, y procedió a dar vueltas en su cama durante unos pocos segundos. Había momentos en los que echaba de menos ser un niño. Los berrinches siempre hacían todo más fácil.

"Jaejoong no lloraría horas por nada. Tu le hiciste algo, grandísimo idiota, y es que lo entiendas pronto."

“¿Por qué es así mi vida?” Yunho se quejo.

Hubo un momento de silencio hasta que Junsu hablo.

“¿Estas comiendo bien?”

“Si comida a domicilio es comer bien, entonces si, estoy comiendo bien.” Yunho contesto hundiendo su cabeza en la almohada, sin importar si Junsu escuchaba o no su respuesta.

"Lo extraño mucho, Junsu. Han pasado dos semanas. Extraño sus comidas y sus sonrisas y el regresar a casa y escuchar su canto y la música del piano y... Dios, Junsu, esto está matándome."

Junsu no dijo nada.

A falta de otra cosa que hacer y habiendo alcanzado su punto máximo. Yunho se largo a llorar. Lloro cerca de diez minutos hasta que sintió a Junsu cantar suavemente para el. Su voz no era la misma a través de la línea telefónica, pero para Yunho resultaba igual de tranquilizadora, así que se quedo dormido mientras la escuchaba. Física y emocionalmente agotado.


Entrada 1,345

Realmente te habría llevado a Paris. Tienes que saberlo.

~

Tres semanas, cuatro días, cinco horas, y unos pocos minutos había pasado desde que Jaejoong lo hubiera dejado y Yunho tuvo una epifanía. Se dio cuenta de que a lo largo de todo el divorcio, se había quedado al lado de Jaejoong, lo había abrazó, consolado, le permitió beber hasta el olvido, todo el tiempo esperando que Jaejoong lo viera.

Yunho había visto que Jaejoong era soltero una vez más, que no estaba casado y que por ello, tal vez U-know Yunho tenía una oportunidad de luchar. Pensó que tal vez podía hacerse un camino hacía el corazón de Jaejoong ahora que su esposa no existía más.
Solo que ella no se había ido y el aún así intento forzar su entrada a ese herido corazón.

Y ahora, Jaejoong se había ido y Yunho no podía hacer nada al respecto.

Yunho deseo poder volver todo hacía atrás.

Sacó su teléfono y envió un largo mensaje de texto a Changmin, Junsu y Yoochun, explicando que tal vez había descubierto lo que había hecho mal.

Todavía eres un imbécil, le contesto de inmediato de Changmin, junto con una foto de Jinae frunciendo el ceño con desaprobación hacia él. Junsu le envió un emoticón :/ , que Yunho encontró extraordinariamente inútil. Y grosero. Los párrafos de texto merecían párrafos de texto a cambio. Yunho tuvo que esperar varios minutos para la respuesta de Yoochun, y cuando llego, Yunho casi lloró.

Eso no es lo que hiciste, idiota. Pero ahora que lo señalas, pienso que eres un imbécil aun más grande que antes. A ver si alguna vez te dejo estar cerca de Jaejoong de nuevo. Ten una vida agradable. Adiós.

Yunho tiró el teléfono contra la pared en desesperación absoluta.


Entrada 1,348

Jaejoong-ah. Es tan solitario aquí. Sigo pensando en ti. Sigo viéndote en todos lados, donde sea que volteo. ¿Recuerdas cuanto tiempo dormías en tu lado de la cama? Bueno, ahora es mio. No he cambiado las sabanas de la cama, porque no quiero que pierdan tu esencia.

Sigo esperando que vuelvas. Sigo esperando por ti, a pesar de que tu no lo sabes, soy un idiota, pero no puedo evitarlo.

¿Es así como te sentías por ella? Ahora te entiendo un poco más que antes. Por esto mismo, me he dado cuenta lo inadecuado que he sido…lo siento tanto. Desearía que me dieras la oportunidad de decírtelo, lo arrepentido que estoy.
Dios, Jaejoong estoy tan …

~

El lapiz cayó de la mano de Yunho cuando oyó una llave en la cerradura de la puerta y fuertes pisotones a través de la cocina, y luego en la sala de estar.

Él apenas había logrado levantarse de su escritorio cuando Jaejoong irrumpió en la habitación, con las manos en las caderas, sopló cabellos lejos de su frente con las mejillas enrojecidas.

"Tu", comenzó.

Yunho parpadeó.

"Tu eres un grandísimo idiota", dijo Jaejoong, apuntándolo con un dedo,

"Un completo y total imbécil y te odio."

Yunho se irguió. "Yo…", comenzó, y luego pasó la lengua por sus labios y trató de pensar en una respuesta.

"Además," Jaejoong continuó: "Eres un ciego".

Yunho quería decirle que podía verlo. Frente a el. Todos acalorado y sudado y malditamente sexy.

"¿Realmente tengo que decirlo en voz alta?" Jaejoong exigió, con sus manos en las caderas nuevamente.

"¿De qué estás hablando?"

Yunho preguntó, confundido porque Jaejoong estaba enojado con él y se supone que no quería hablarle. Y Yoochun se suponía que los mantendría separados. Yunho no daba más de confusión.

"¡Eso!" Jaejoong casi gritó: "¡Tu despiste! ¡Tu terquedad! Tu piensas que nadie entiende cómo te sientes, tu completo idiota".

Yunho reconocido, con una inclinación de cabeza, que era un imbécil de primera clase.

"¡No estes de acuerdo conmigo solo porque estoy molesto!"

"Yo no…", intentó decir Yunho levantando sus manos a la defensiva.

"Tienes razón. Yo he sido un idiota contigo. Lo siento."

"Oh, Dios mío," Jaejoong rechino sus dientes.

"Vine aquí porque Yoochun dijo que eres un estúpido y yo esperaba que a lo mejor al verme te volvieras más inteligente, pero aquí estoy y tu sigues siendo igual de estúpido. Jung Yunho, ¿Tengo que hacer todo yo? "

Yunho lo miró.

Jaejoong se acerco a el y las células cerebrales de Yunho detuvieron su trabajo por completo cuando lo beso de lleno en la boca. Yunho sintió su corazón salir de su pecho. Besar era mucho mejor cuando no estabas ebrio hasta el culo.

"Eres un idiota", reiteró Jaejoong cuando rompió el beso, excepto que su tono de voz era suave y afectuoso.

Yunho sólo podía mirar. "Tu eres un idiota y te amo tanto por eso."

"Me besaste." Yunho dijo, mientras tomaba las mejillas de Jaejoong con sus manos, sorprendido que después de todos estos años su piel fuera igual de perfecta.

Jaejoong apretó los brazos de Yunho lo suficiente para dejar marcas.

"Eso es lo que obtienes."

"¿Represalias?"

Yunho le preguntó, sin comprender en absoluto cómo había sucedido esto, pero sin importarle realmente,

"Dime lo que he hecho, para poder hacerlo de nuevo."

"Los pingüinos. Debido a que tu dijiste que podíamos tener pingüinos",

Jaejoong explicó:

"Porque dijiste que me llevarías a París y Roma. Porque escribimos una canción juntos y porque…" su voz se quebró y Yunho se irguió,

"Porque tu me amabas tanto y yo no lo vi, porque me hiciste comer cuando yo quería morir de hambre y porque me dejaste beber hasta que me desmayé, porque te reíste de mí y me abrazaste y me dejaste usar tus camisas como pañuelos por meses y meses... "

Un poco de esperanza se encendida en el pecho de Yunho, por lo que tuvo que contener la respiración.

"Porque cuando te besé, me di cuenta de que realmente lo deseabas,"

Jaejoong apenas susurró,

"y eso me asustó tanto… yo no quería, no quería volver a caer... no quería perderte... Pensé que si me alejaba de ti yo te olvidaría, tu me olvidarías... " Hizo una pausa para tragar un poco de aire, mirando hacia cualquier parte, menos a la cara de Yunho.

"Tu", Yunho empezó, "¿Te lo recuerdas?"

Jaejoong asintió con la cabeza

“pensé… que no lo querías pensé…"

Se pasó una mano por el pelo,

"tenía miedo" finalmente continuó:

"Estaba tan asustado… Sé que pensabas que yo seguía destruido por lo de Yiseul”

Fijo sus ojos a los de Yunho y la culpa comenzó a acumularse en la boca del estómago de Yunho

"Pero no se trataba de ella. No de ella, Yunho"

Si esto hubiera sido un espectáculo de variedades, o un drama, Yunho estaba seguro de que una bombilla amarilla de animación habría aparecido sobre su cabeza.
Jaejoong lo había dejado no porque estuviera pensando en su mujer, sino porque el estaba pensando en ...

"Soy un idiota," Yunho susurró, horrorizado consigo mismo.

"Como dije," Jaejoong asintió con la cabeza y golpeó el brazo de Yunho de forma dulce.

"Soy un completo y absoluto idiota", se reprochó Yunho.

"Lo eres".

"Lo siento mucho", dijo Yunho. Preguntándose si debería postrarse a los pies de Jaejoong.

"Dime qué decir. Dime qué hacer para enmendarlo."

Jaejoong acortó la distancia entre ellos para presionar otro beso en su boca,

"Podrías comenzar respondiendo mi beso", murmuró, rodeando lentamente el cuerpo de Yunho con sus brazos.

Oh. Cierto.

Esta vez, Yunho lo besó correctamente. Apretó a Jaejoong contra si fuertemente y se maravilló de cómo el otro hombre se sentía contra él, tan diferente de todas los otros abrazos que había compartido. No hubo lágrimas, no había tristeza, no había otra razón para sostener de ese modo a Jaejoong que no fuera que ambos lo deseaban. Y maldita sea, esa era la mejor sensación del mundo.

El cosquilleo en el estómago de Yunho, comenzó a difundirse lentamente por todo su cuerpo, haciéndolo estremecerse por la emoción, incapaz de separar sus labios de los de Jaejoong.

"Mi corazón", finalmente susurró:

"Dios, Jaejoong, ¿qué le estás haciendo a mi corazón?"

"Cosas buenas", contesto Jaejoong, besando sus mejillas, sus párpados, y todo a su paso.

"Debo estar soñando," Yunho susurró, tratando de calmar su pulso acelerado. Apretó el agarre de Jaejoong, temiendo que este fuera a desaparecer en cualquier momento.

"No lo estas", prometió Jaejoong, con una sonrisa.

El hormigueo que sintió Yunho, comenzó en los dedos de los pies hasta llegar a su cabeza donde dejó escapar un sollozo y apretó con más fuerza a Jaejoong.
Cada herida que cicatrizaba en su corazón, cada palabra que había escrito, finalmente significaban algo, todas las emociones que había reprimido…
Jaejoong lo quería, tal vez incluso, lo amaba. Podía haber gritado, si no hubiera estado llorando en silencio.

Jaejoong simplemente lo abrazó con fuerza.


Entrada 1349

Jaejoong-ah. Creo que soy el hombre más feliz del mundo.

~


"¿Qué estás escribiendo?"

Yunho cerró su diario con rapidez.

"Nada."

"Mentiroso", Jaejoong le dijo haciendo pucheros.

"Vi mi nombre en el encabezado de la pagina."

Yunho dudó:

"Yo no quiero decírtelo aún."

El puchero no desapareció y los ojos de Jaejoong se redujeron sospechosamente. Yunho no podía ni siquiera imaginar lo que Jaejoong podría estar pensando.

"¿Por favor?" Insistió Jaejoong.

"No"

"Pero tengo curiosidad."

Yunho se irguió.

“Muy bien. Es un diario o algo así ¿Contento? "

Jaejoong se sorprendió,

"¿Llevas un diario?"

Llevaba, pensó Yunho, porque ahora que podía hablar con Jaejoong de todo no había necesidad de escribir sobre ello,

"Más o menos, sí. ¿Feliz? "

"Quiero leerlo."

"No vas a leer mi diario, Jaejoong".

"¿Por favor?"

Yunho se preguntó cuántas veces tendría decirle que no. Empujó el librito en un cajón y cogió la mano de Jaejoong.

“¿No se supone que estabas preparando la cena? "

"¿No se supone que nunca me volverías a ocultar cosas de mi?" Jaejoong contestó.

"¿No es un secreto?" Yunho se hizo el inocente.

Jaejoong rodo los ojos y tiró de él hacia la puerta,

"Que sea a tu manera, entonces", se quejó Jaejoong.

Yunho sonrió, tomando el trasero de Jaejoong y empujándolo hacía la pared, porque oh, sí, a el le encantaba a su manera.



Entrada 1,350

Yunho-yah. En primer lugar, no puedo creer que escribieras todo esto. En segundo lugar, eres un tonto porque nunca haberme dicho nada de esto. En tercer lugar, Te amo.

En cuarto lugar.

Mierda. Yo no soy un escritor. Solo tiene que venir y hablar conmigo.



~


Jaejoong estaba durmiendo cuando Yunho arrastro sus pies en la habitación después de una práctica particularmente agotadora.
Se fue a la cama para besar distraídamente la mata de pelo que asoma de un montón de almohadas antes de sentarse en su escritorio. No tenía energía, pero que quería escribir una entrada más.

Revolvió sus papeles alrededor antes de recordar que él había metido en un cajón el diario, lo abrió, sacando el diario y buscando un lápiz mientras voltea las páginas.

Comenzó a escribir la entrada antes de 1351 y se dio cuenta de que la escritura a mano en la parte superior de la página no le pertenecía. Parpadeó, con la esperanza de que si miraba el tiempo suficiente, desaparecería.

Jaejoong. El nombre surgió con bastante facilidad. Leyó la entrada cinco veces antes de entender que Jaejoong había leído su diario. Todas sus dudas, todas sus frustraciones, todas sus dudas, todas las veces que decía Te amo.

Solo tiene que venir y hablar conmigo.

Yunho suspiró. Bueno. No había forma de evitarlo.

Se puso de pie al mismo tiempo que apagaba la luz. Se quito su ropa en un tiempo récord y se deslizó bajo las sábanas, envolviendo en un abrazo a Jaejoong y presiona otro beso en la parte superior de su cabeza.

"Hola".

Jaejoong no se movió y Yunho de repente supo que había estado despierto todo este tiempo.
Yunho acaricio el cuerpo de Jaejoong sugerentemente hasta que este se movió incómodo.
Yunho tomó aliento para gritar su victoria, pero por casualidad una pluma llego a su nariz haciendo que estornudará hasta que no pudo respirar correctamente.

Pero estaba bien. De alguna manera, Jaejoong con ataque de risa, Jaejoong tirando de él para darle un beso, Jaejoong jadeado su nombre, Jaejoong en todas partes, no era solo correcto.

Era simplemente la forma en que tenía que ser.