Destinos Forzados cap 1

Uno de dos, porque esto me tiene que pasar a mí?

- ENCONTRAMOS DONANTE! LLEVENLO A QUIROFANO RAPIDO! –Gritaba el Doctor Rain, las enfermeras se movían rápidamente llevando la camilla de aquel joven que nunca…


Nunca pensó que a sus 19 años tendría que pasar por esto.

-Tenemos que internarte - el doctor rompe el silencio que se había formado en aquel consultorio.

- ¿Cómo? Doctor no puede ser, es solo un dolor estomacal, no creo necesitar encerrarme en un hospital por eso –

Jaejoong era su nombre, un joven de una belleza rara vez vista en un hombre, ojos grandes, nariz pequeña, cabello suave y negro, un joven amable pero con carácter.


Un joven que se creía completamente sano.

- Jaejoong toma asiento – el joven obedece aún extrañado por la repentina declaración de su doctor de cabecera.

- Lo que tienes no es solo un dolor estomacal Jae… no me mientas, lo que me muestran los análisis no es algo que tenga como síntoma solo un dolor estomacal – Rain, su doctor, en toda su carrera había atendido a Jaejoong, podría decirse que lo conocía más que su propio padre.

- yo…

- Te duele el pecho de vez en cuando ¿cierto?, te ha dado temperatura últimamente y no has venido a verme porque si no lo recordaría, has bajado 6 kilos Jaejoong y no es por un dolor estomacal que según tu empezó ayer.

El muchacho se quedó callado, sabiéndose descubierto.

- ¿Por qué no me dijiste de todas estas cosas? – Rain estaba preocupado por él, porque lo que tenía que decirle era algo que le duele, porque de todos hubiera deseado que no fuera este joven que veía como a un hijo.

-Las razones no importan Rain ya dime que tengo que me quieres encerrar aquí – Jaejoong lo miró fijamente esperando que su interrupción lograra parar el interrogatorio del hombre frente a él.

- Hay una enfermedad sin nombre… que solo ha tenido una persona y eso fue en 1980 cuando la ciencia aun no estaba nada desarrollada –

- Corta los rollos Rain dime que mierda tengo – Jaejoong odia las vueltas de tema
Rain lo sabe, por eso sonríe con una sonrisa que no llega a sus ojos y asiente.

- Tus espermatozoides están envenenando tu cuerpo, ya acabó con todo tu sistema genital masculino y…

- ¿Entonces no podre tener hijos?... –

- Jaejoong… déjame continuar – Rain veía el estado de shock del joven frente a él y deseó que esa hubiera sido la peor parte del diagnostico.

- No solo no puedes tener hijos Jaejoong… las células que deberían ser tus espermatozoides están formando una toxina que no es detectada por tu sistema inmunológico ya que se forma dentro de tu cuerpo y solo se sabe de ella hasta que empieza a dañar, esa toxina poco a poco irá quemando las arterias y las venas que hacen que todos tus órganos funcionen bien, la toxina hasta ahora solo ha afectado tu sistema genital interno pero está empezando a debilitar tu sistema inmunológico, por eso te ha dado temperatura y te ha dolido el pecho, tu corazón esta bombeando más de lo normal para mover con mayor rapidez tus glóbulos blancos a los lugares que está atacando la toxina.

- ¿Esta cosas me van a matar?, algo que se supone debe dar vida… ¡¿me va matar el hecho de ser hombre?! – Jaejoong golpeó con sus manos el escritorio de Rain, levantándose de su asiento.

- Jaejoong tranquilízate

- ¡¿COMO QUE ME TRANQUILICE?, NO ME PIDAS ALGO TAN ESTUPIDO RAIN! – su voz varios tonos mas arriba de lo normal se ahogó al verse siendo abrazado por su Doctor.

- Necesito que te tranquilices para poder decirte lo que haremos, no dejaré que esto te mate Jaejoong – el joven temblando se dejó guiar de nuevo a la silla por ese hombre que consideraba un padre. Tardó 15 minutos en calmarse por completo y poder poner atención al Doctor que lo esperó con paciencia.

- Jaejoong sé que creerás que esto es imposible pero la única forma en la que podemos eliminar la toxina de tu cuerpo es trasplantarte un útero sustrayendo todos sus órganos genitales, el único que quedaría en tu interior serian tus vesículas seminales, cuando tu eyacularás un semen sin espermatozoides, algo así como plasma seminal.

Jaejoong estaba mudo, tratando de asimilar la enfermedad y la solución a esta, tratando por todos los medios no pensar “Por qué a mí...”

- todo estará bien Jaejoong, pero te tengo que internar para retener lo más que pueda el avance de la toxina.

- Creo… creo que debo ir a casa y preparar algunas cosas y contarle a nana– estuvo a punto de salir cuando la voz de Rain lo detuvo.

- ¿No prefieres hablarle a tus padres Jaejoong ah? – Rain sabía que los padres de su más querido paciente viajaban mucho pero debían saberlo.

- ah… mis padres si, también tengo que avisarles a ellos, mínimo tienen que saber porque su único hijo puede llegar a morir – una sonrisa forzada y la puerta cerrándose lentamente fue lo último que vio Rain de Jaejoong esa mañana.

De eso solo había pasado un mes y la toxina ya había destruido prácticamente todo el sistema inmunológico de Jaejoong, lo único que la mantenía alejada de los órganos vitales eran los medicamentes fuertes que se le suministraban vía intravenosa, pero que por consecuencia lo había dejado sin fuerza ni para los ojos.

Jaejoong estaba atrapado en su propio cuerpo.

Solo bastaron 40 minutos para preparar todo, Rain, otros doctores y enfermeras se esforzaban el 110% para que todo saliera bien, Rain especialmente agradecido por la bendición que era ese órgano femenino.

1 hora…

Los débiles y peligrosos latidos del corazón de Jaejoong se aceleraron poniendo en alerta a toda la sala.

5 horas…

La presión de Jaejoong siendo monitoreada, el episodio del corazón había sido controlado milagrosamente.

14 horas…

Y los padres de Jaejoong que apenas hace una semana regresaron enterándose de la terrible noticia veían el cuerpo de su hijo salir del quirófano con Rain a su lado.

La madre lloraba desconsolada y el padre…

El padre recargado en la pared viendo e-mails en su celular.

Había sido una noche pesada para Rain y la madre del bello joven, pero agradecidos con Dios porque después de las horas criticas, después de la cirugía el corazón de Jaejoong latía como debía y la toxina estaba en un 90% eliminada de su cuerpo.

Pero Jaejoong aun no despertaba…

Pasaron dos meses y Jaejoong seguía durmiendo, Rain les dijo a sus padres que se debía a que su cuerpo estaba gastando todas sus energías en desarrollar nuevos glóbulos blancos, teniendo como defecto la incapacidad de Jaejoong para despertar.

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El padre de Jaejoong, hombre serio de negocios, preocupado más por el dinero que por cualquier cosa, de pocos amigos pero muchos aliados por conveniencia.

Ese tipo de hombre que la mayoría odia.



- ¡Kim Hyun que bueno verte! – saludó con un abrazo masculino el Sr. Shim, hombre amable y amoroso con su familia pero estricto e inteligente en los negocios.

- Lo mismo digo hombre. ¿Cómo has estado? – Ambos caballeros toman asiento esperando que tomen su orden, aquel restaurante era el favorito del Sr. Kim para hacer negocios.

- pues en negocios excelente, pero en casa hay uno que otro problema – el Sr. Shim ha estado por años haciendo negocio con Kim Hyun llegando a entablar una fuerte amistad.

- ¿Sigues discutiendo con tu hijo sobre casarlo? –

- Ya me rendí con eso de casarlo, mi muchacho es muy inteligente y supo salirse con la suya, ayer hablamos con él en un último intento por convencerlo pero puso punto final a la discusión diciendo que si lo obligábamos a casarse con una mujer no se haría cargo de los negocios, y tú y yo sabemos que el único que puede manejarlos es él .

- ¿Nunca le has dicho a tu hijo que lo único que quieres es que te de un nieto?

- No… no soy tan cruel como para hacerlo casarse por cumplir mis deseos, lo de casarlo era conseguirle una mujer que él pudiera amar-

- Pero es gay y si se llega a casar sería con un hombre y no cumpliría tu deseo – el Sr. Kim tomó un poco de su copa de vino que acaban de traerles.

- Lástima que los hombres no podemos tener bebes… - comenta el Sr. Shim.

Y ese fue el último comentario sobre el tema en el transcurso de esa comida combinado con una mirada ligeramente melancólica en sus cansados ojos.

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Un mes más y Rain verificaba los signos vitales de Jaejoong cuando este empezó a hacer gestos arrugando la nariz y parando trompas, haciendo reír al doctor.

- ¿Estás despertando Jaejoong ah? – su sonrisa enorme mostraba su felicidad al ver como lentamente Jaejoong abría los ojos intentando acostumbrarse a la blanca luz del cuarto.

- Siento como si un camión me hubiera pasado por encima 500 veces – su voz ronca por la falta de uso y un amago inútil de querer sentarse.

- Tranquilo hombresote que tu cuerpo no se ha movido en 3 meses así que tómalo con calma.

- ¡¿TRES MESES?! – ahora sí que abrió los ojos viendo en el calendario que estaba al lado de su cama. -¡¿OCTUBRE?! ¡¿YA ES OTOÑO?! ¡PERO SI YO ME INTERNÉ EN JULIO Y ERA VERANO! –

Jaejoong sintió que su garganta ardía por gritar tan de repente y solo infló sus mejillas.

Y la risa de Rain no se hizo esperar.

El momento emotivo terminó para dar comienzo a los exámenes que darían el resultado de tan extraña operación. Cuando los resultados llegaron a sus manos entendió que era preferible decirle a los padres de Jaejoong el diagnostico, sintiendo que era algo muy fuerte para el joven muchacho.

Hubo que esperar solo una hora para que la Sra. Kim y su esposo llegaran a su consultorio tomando asiento frente a él.

- Me complace decirles que su hijo estaba fuera de cualquier peligro, la toxina dejó de ser producida y su cuerpo aceptó excelentemente bien el útero implantado.

Kim Yura, hermosa mujer de 40 años de edad, lo único que pudo hacer fue llorar de alegría dándole con su voz entrecortada gracias con toda su alma al hombre frente ella.

- Hay otra cosa… que no sé cómo se lo tomará Jaejoong al saberlo pero, espero ustedes puedan tomarlo lo mejor posible y decirle por el bien de su hijo qué hacer con esta información.

- ¿Pasa algo malo con mi hijo Rain? – pregunta Yura con una mirada preocupada limpiando sus mejillas.

- Nada malo Sra.Kim, lo que tengo que decirles es que… Jaejoong puede quedar embarazado – al no ver reacción más que una mirada fija del Sr. Kim y una sorprendida de su mujer continuó – claro que si Jaejoong llega a embarazarse sería por medio de inseminación artificial ya que no cuenta con trompas de Falopio… tendría un embarazo de alto riesgo pero con los cuidados correctos, podría pasar como un embarazo completamente normal - la explicación terminó y el Sr. Kim levantándose hizo una reverencia educada y salió del consultorio.

El número se lo sabía de memoria y una sonrisa un tanto terrorífica llegó a sus labios.

-Shim Yesung, tengo un trato que ofrecerte...

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