POCIÓN DE AMOR
Un roce de labios puede ser considerado un beso?
Junsu retrocedió con las mejillas sonrojadas de un no menos avergonzado Kenryu que sintió la mano de su amigo soltarse de la suya. Para luego quedarse hundidos en un incómodo silencio. El pelirrojo había soñado tanto en tener su primer beso con Yoochun, que no podía evitar sentirse decepcionado por eso; no que culpara al castaño por haberse atrevido a tal contacto con sus labios, cuando él mismo no se había apartado; después de todo, tal vez sea momento de dejar de soñar con ese imposible.. con Park Yoochun.
- no tienes que hacerlo, Junsu ah, no tienes que renunciar a él y conformarte al estar conmigo… - <.que acaso le había leído la mente.>… - solo, quiero que me des la oportunidad de quererte, no te pido que me ames porque sé que siempre lo amarás a él, pero déjame estar contigo… - su mano fue a la mejilla del pelirrojo, acariciando suavemente su piel…
El joven Kim podía sentir esa caricia y cierto alivio cubría su corazón, la mirada del castaño le hacía sentir un ligero cosquilleo en la boca del estómago… y aunque en su mente, corazón y alma seguiría por la eternidad su Yoochun, no podía esperar por alguien que seguramente nunca llegará. Su mano izquierda cubrió la que está sobre su mejilla y sonrió… una dulce sonrisa que hizo muy feliz a Kenryu, pero que no ocultaba la tristeza reflejada en los ojos opacos del pelirrojo.
…………………..
- Micky?... – Mimi posó su mano en la mejilla de su novio, ese contacto sacó al pelinegro de un repentino ensimismamiento que lo atrapó misteriosamente… - pasa algo? Te quedaste callado…
- no, estoy bien… - tomó la mano de su novia y entrelazó la propia con la de ella… - se me vino algo a la mente, pero no es importante… - sin embargo, acababa de ser invadido por una sensación que no podría explicar, había sido como cuando pierdes algo importante que tal vez nunca puedas recuperar. Pero así como llegó se fue, cuando su novia lo besó suavemente.
- iremos al partido este sábado, hay que apoyar al equipo de fútbol, además, Mayuko y las chicas presentarán una nueva coreografía para amenizar el ambiente… - Mimi sonrió con alegría.
- por supuesto que iremos, espero que Junsu ya juegue, tengo ganas de verlo jugar… - una sonrisa amplia se curvó en su boca al hablar del pelirrojo, y la chica se dio cuenta, sintiendo un poco de incomodidad ante eso, pero pronto lo olvidó cuando otro beso fue depositado en sus labios.
………………….
La oscuridad caía desde la alta colina y descendía por el accidentado y maltrecho camino surcado por viejas casas y salpicado por charcos de agua en los que la luna se reflejaba tan solo de vez en cuando cada que las gruesas nubes la dejaban al descubierto en la bóveda celeste. Al final del sendero se erguía una mansión en la que los árboles nunca florecen y cuyas ramas lucen tétricas aun a luz de día.
La mayoría de las habitaciones estaban desocupadas y oscuras, todos los muebles cubiertos por sábanas cubiertas de polvo. La lujosa estancia era la única en la que resplandecía una luz originada por la chispeante llama ardiendo en la chimenea. El sofá más cercano, a lado de ésta, ocupado por un chico de no más de 16 años, su vista al frente sin mirar nada en específico, pupilas dilatadas y un respirar agitado.
- te lo dije, no puedes usar magia para intentar escapar de mí, consumes tu propia vida en cada ocasión… - un muchacho de unos 27 años, alto, atractivo, gallardo, grandes ojos azules, cabello oscuro desaliñado y una voz grave, se dirigía a él mientras pasaba una hoja más de aquel libro con papel de pergamino y escritura antigua… - Yoo Hwan, eres poderoso, pero muy joven aún…
- no me importa morir, sea o no yo o mi hermano a quien buscas, no tendrás lo que deseas… - la voz del chico sonó segura, aunque claramente aún tenía dificultad siquiera para respirar. Su interlocutor simplemente sonrió.
…………………………
La semana se fue más rápida de lo que muchos esperaban, el estadio de fútbol estaba repleto de jóvenes, familias y grupos que sin haberse conocido antes, ahora formaban barras (porras) para apoyar a uno u otro equipo. El enfrentamiento era contra uno de los institutos más reconocidos de la ciudad, y por ello era una especie de clásico regional en el que se competía por el orgullo de la escuela que se representa.
En los vestidores, ambos equipos nerviosos pero con la disposición y seguridad de llevarse la victoria.
Junsu no formaba parte de la escuadra titular, pero sabía bien que el once que saltará a la cancha dará lo mejor de sí. Incluso Yunho estaba lo suficientemente concentrado, a pesar de no resolver aún ese repentino alejamiento con Jae, quien le huye cada que está cerca de él.
El rumor de un pleito entre los tres amigos ocasionado por el noviazgo de Yoochun con Mimi se había asentado desde el segundo día, cuando al comenzar la jornada escolar ninguno de ellos arribó como solían hacerlo. Micky había llegado con Mimi, ambos radiantes y tomados de la mano causando la euforia y descontento entre gran parte de la población estudiantil, chicas y chicos que habían soñado con ellos. Jae y Yunho, cada uno por su lado, serios, sin dirigirse la palabra, sin mencionar más que saludos o respuestas cortas al pelinegro. Reuniéndose durante los almuerzos con otras personas, la rutina había sido modificada como nadie esperaba, salvo aquel primer lunes en que todos compartieron mesa…
En fin, volviendo a los momentos previos de dar inicio al partido, Kenryu escuchaba atentamente las últimas explicaciones del entrenador, siempre más emocionado que sus compañeros, como quien lleva la pasión por el balónpie en las venas.
Finalmente, ambas escuadras salen al campo de juego. El equipo de porristas liderado por Mayuko sale moviendo los pompones y dando gritos de apoyo que enardecen las tribunas. Los equipos toman su lugar y aguardan el sonido del silbato indicando el inicio.
En las tribunas, en primer fila, Micky y Mimi sentados juntos, con la casaca de su equipo, con pequeños banderines y gorras para cubrirse del sol. No muy lejos de ahí; Jae, vestido casual, presente por apoyar a su hermano aunque no esté jugando. Y más allá, Minnie, observando a Yunho, tratando de descifrar qué es realmente lo que siente por él.
El primer tiempo inicia y se desata una lucha por el dominio del balón que pateado a lo largo y ancho de la cancha, es manipulado con técnica por uno u otro jugador. Los arqueros tienen poca participación, las líneas defensivas haciendo un gran trabajo impidiendo que los delanteros los rebasen. El sector del mediocampo peleado con ahínco. Fue cerca del minuto 30 cuando el oponente consiguió hacerse del dominio del encuentro, el equipo comandado por Yunho se ha visto obligado a retroceder más allá de la media cancha. A cada intento de salir, ya sea por despeje o en corto, el equipo contrario se apodera del esférico y los pone en aprietos para impedir una anotación en contra. El entrenador observa inquieto desde el área técnica, mirando detenidamente cuál es el problema con su escuadra. Kenryu dirigiendo adecuadamente la defensa, Yunho bajando para apoyar, intentando él mismo avanzar hacia el área chica contraria y poder armar una jugada peligrosa que lo acerque al gol esperado.
Ahn Jung (entrenador) sabe que su contrincante ahora le está dando una cátedra de cómo se juega fútbol, sus muchachos parecen intimidados al saberse recluidos en su propio sector del campo. Las tribunas han comenzado a llenarse de un silencio abrumador por parte de los seguidores de la escuadra capitaneada por el moreno. Mientras que el resto de los presentes no para con cánticos y apoyo para el equipo rival.
Por fin, el silbatazo se escucha y el descanso del medio tiempo llega en el mejor momento, Ahn Jung habla con sus muchachos en los vestidores, reestablece el acomodo de cada jugador, da nuevas indicaciones. Afuera, Micky, a pesar de no gustar particularmente de este deporte, se siente también algo apesadumbrado, no solo por su amigo Yunho (aún cuando poco se han hablado esta semana), o por Kenryu a quien le tiene estima, sino principalmente por el pelirrojo, ese delfín que no paraba de moverse ansioso por su banca, haciendo ademanes frustrados cada que su equipo perdía el balón, o el equipo contrario sacaba un disparo que casi entraba en la portería de su equipo.
Jae en las tribunas hasta se mordía las uñas, demasiado inquieto por el desempeño de su Yunho, es decir, del moreno. Se ha maldecido más de una ocasión porque presiente que en parte es su culpa que, aunque haciendo un buen desempeño, no está dando el 100% al que están acostumbrados. Minnie… él solo espera al resultado final.
Las porristas salieron a la cancha a realizar su rutina y buscar mantener al público (a los que apoyan a su escuadra, por supuesto) animado, en ambiente, lograr que sigan con sus porras, con sus cánticos, con sus gritos de apoyo.
Mayuko y sus compañeras desplegaron una sexy coreografía al ritmo de “Girlfriend” de la cantante Avril Lavigne (n/a si no la conocen les recomiendo que la escuchen xD) Entre los camarógrafos que buscan capturar los momentos más impactantes de lo sucedido durante el partido, incluyendo tomas de las tribunas y las porristas; se encontraba un chico de 1.80 de estatura, delgado, atractivo, cabello oscuro desaliñado, ojos oscuros, cejas tupidas bien definidas, labios gruesos en una sonrisa coqueta, y mentón partido que le daba un toque varonil demasiado atrayente; su nombre, Mizushima Hiro.
Mayuko ha estado enamorada de él desde hace algún tiempo, y en ocasiones ha sido ella quien más se ha intentado acercar a él de una y mil maneras, justo como ahora, con los pasos de la coreografía de una porra que se supone va dirigida a público en general, pero que ella solo realiza esperando que el chico se de cuenta de que hace esos sexys movimientos, dejando ver sus largas piernas que esas diminutas faldas con micro shorts no cubren, así como el vientre plano saltando a la vista con el pequeño top que compone la parte superior del traje de porristas. Pero Hiro solo tomaba las fotos, sin parecer especialmente interesado en una de ellas, pasando luego a las tribunas, haciendo caso omiso del contenido de la letra de la canción que tan minuciosamente había seleccionado la porrista.
Hiro tiene una novia, una chica de último grado, que siendo sinceras, no es tan bonita, ni inteligente, ni… bueno, Mayuko le encuentra todas las fallas habidas y por haber, porque ella es quien quiere ser novia de tan guapo chico. Y está segura, no importa cómo, que Mizushima Hiro será su novio.
Segundo tiempo, minuto 18, cae el primer gol en contra, el equipo de Yunho se desanima, el entrenador resopla frustrado, habían estado haciendo un mejor trabajo, pero aún no habían podido contener el ataque del contrario. Y un gol en contra…
- Junsu, calienta… -
- sí, señor… - el pelirrojo comenzó con los ejercicios indicados, no perdiendo de cualquier manera el curso del juego, su corazón le latía ansioso por ingresar, sabía, sentía que podía hacer algo por ayudar a su equipo. Y su entrenador lo sabía, porque Junsu es uno de esos jugadores con la llamada visión de campo, la capacidad de tener mente fría, de ordenar al equipo aun en las peores circunstancias, de conducir el balón y manejar al equipo contrario para desarrollar jugadas de peligro.
En las tribunas, el pelinegro se alegró cuando vio al delfín calentar a lado de la cancha, se veía realmente bien con el uniforme del equipo, ahora que lo observa detenidamente…
- mierda, porqué estoy pensando estas tonterías… - un ligero carmesí apareció en sus mejillas, y algo en su espalda le generó un extraño calorcito. Mismo calor que sintió Junsu justo cuando se encontraba en la línea de la media cancha esperando porque el árbitro le permitiera la entrada.
Su participación le dio un nuevo giro a su equipo, ahora él los organizaba desde la banda lateral, su posición en el medio campo lo volvía quien dirige la batuta, su velocidad para correr y moverse con balón dominado lo volvía un rival escurridizo con muy buenas ideas para sumarse al frente. Junsu comenzó a separar las líneas del equipo contrario acomodando a sus compañeros y animándolos a lanzarse al frente.
La línea del fondo (defensa) segura y cobijada por el mando de Kenryu, ha adelantado quince metros, tranquilos porque su portero es de los mejores, y ahora, como todo el equipo, está mas confiado e incluso retador a que disparen contra su arco. Junsu sabe que Yunho solo necesita una oportunidad de un buen balón filtrado al área chica y el gol será seguro. Necesitan el empate pronto para poder desplegar el ataque que les permita ir por la victoria. Faltan escasos 10 minutos para que el encuentro termine, el equipo se ha mantenido atacando la puerta rival, llegando ya en un par de ocasiones, mismas en las que el balón ha sido desviado por milagro antes de incrustarse en la portería. Finalmente, en una descolgada que tomó por sorpresa a la defensa rival, el moreno pasó entre ellos dejándolos atrás y perfilándose hacia la portería, desde donde el arquero esperaba listo para detener su disparo. Un tiro potente disparado desde su pierna izquierda, un efecto que llevó al esférico a colarse justo en la esquina superior del arco, haciéndose por fin del gol del empate que fue celebrado con algarabía por sus compañeros y la gente en las tribunas.
Se tuvieron más confianza aun, siguieron con el ataque, Junsu seguía moviendo a sus compañeros, cual piezas de ajedrez, moviéndose de tal forma que, sin temor a exagerar, era como ver al futuro Zinedine Zidane en el campo de juego. Un centro perfecto, Yunho se alzó por sobre los defensas, cabeceando con fuerza hacia el extremo contrario, ahí donde el arquero no consiguió llegar por mas que se estiró, consiguiendo el segundo tanto a favor. Ese que les dio la victoria cuando minutos mas tarde el árbitro silbó el final del encuentro.
Naturalmente, hubo quienes salieron con sendas sonrisas y expresiones de felicidad del estadio, otros que, pese a haber ido ganando, se tenían que tragar ahora una derrota. En los vestidores, los chicos estaban súper contentos por el gane. Cuando ya todos se hubieron duchado y cambiado, cada quien comenzó a retirarse, con el acuerdo de reunirse mas tarde para celebrar.
- hiciste un magnífico trabajo, Junsu, realmente me alegra que estés de regreso… - el moreno le desordenó el cabello, y bastante animado por el momento, salió con una sonrisa en el rostro. Ya afuera, mientras caminaba por el pasillo con el bolso de su equipo deportivo al hombro, Minnie le salió al encuentro tirándosele encima como lo haría una auténtica pareja a su novio.
- felicidades Yunho!!!!... – el menor se le colgó del cuello, y por vez primera le vio sonreír con un sonrojo instalado en sus mejillas.
- gracias, Minnie… - el moreno le tomó los brazos para que lo soltara, tratando de no parecer demasiado grosero al separarlo de él, pero, realmente, no le resultaba cómodo que el menor hiciera eso, podría prestarse a tantas malas interpretaciones.
Justo como la que tuvo cierto pelioscuro que venía caminando y se quedó de piedra al ver el efusivo abrazo entre esos dos. Jae trató de pasar de largo, ignorar ese ardor en el estómago y la incomodidad de su corazón latiendo apresurado en su pecho. Pero Yunho al verlo, y dejando a Minnie con toda palabra en la boca, tomó a Jae del brazo y lo condujo hasta un modesto cuarto donde se guarda equipo de mantenimiento del estadio.
Lo empujó tal vez con demasiada fuerza contra la pared porque escuchó un quejido salir de la garganta de su amigo. Se miraron a los ojos con un rencor instalado en ellos que ni siquiera tenía razón de ser, tan sencillo que sería todo si simplemente hablaran.
- se puede saber que te pasa… - cuestionó con tono ronco el pelioscuro, tratando de salir de ahí, pero el moreno lo había impedido acorralándolo contra la pared, sus manos flanqueando su rostro, su cuerpo demasiado pegado al suyo.
- se puede saber qué te pasa a ti… - regresó el moreno, sintiendo un calor quemarle en la boca del estómago…
- no se de qué hablas… -
- déjame te refresco la memoria, el lunes por la tarde dijiste que yo te gustaba, luego de eso me dejaste de hablar, que mierda te pasa Jae!...
- yo te dejé de hablar? Fuiste tú quien me ignoró olímpicamente cuando llegaste el martes a la escuela…
- se te ocurrió pensar que tal vez fue porque estabas que echabas chispas por los ojos cuando viste a Yoochun con Mimi tomados de la mano…
- yo no…
- mira, si es él quien te gusta, no tenías porqué mentir diciendo que te gustaba yo para sacártelo de encima… diablos Jae! Sabes lo confundido que he estado estos días por eso… - el moreno se separó, pasando sus manos por su cabello en un gesto de desesperación.
- porqué habría yo de estar interesado en ese ratón idiota… - molesto, el pelioscuro encaró a su amigo, acercándose ahora él al moreno… - lo que pasa respecto a su relación con Mimi es algo personal que en realidad… no te interesa… - se mordió el labio inferior, casi se iba de lengua larga y le contaba a Yunho sobre el enamoramiento de Junsu.
- no me interesa? Creía que éramos amigos… - indignado, el moreno se acercó al pelioscuro, sus cuerpos nuevamente casi pegados, sus rostros muy cerca… ambos respirando agitadamente… - se que me pediste que no te preguntara más, pero… - su rostro se inclinaba un poco, buscando los labios de su amigo… - entonces, porqué dijiste que yo te gustaba…
- porque… - el aliento del moreno se mezclaba con el suyo, ambos a punto de besarse… - porque…
- perdón si los interrumpo… - Minnie abrió violentamente la puerta, dando un portazo e interrumpiendo ese momento, ambos chicos se separaron con un respingo por la sorpresa… -
……………….
Entre tanto…
- te luciste hoy, Junsu ah, y eso que yo pensaba que no podías jugar mejor… - el castaño esperaba por su… no puede decirse que sean novios, son mas bien como… pretendientes, porque Kenryu sabe que se tiene que acercar a él de a poco, ir ocupando un lugar en el corazón del pelirrojo, después de aquel roce de labios hace unos días, nada mas ha vuelto a pasar entre ellos, si bien se sonríen y buscan un contacto mas personal cada que se encuentran juntos.
- no digas eso… - murmuró apenado, los halagos hacia su persona siempre lo hacían sentir avergonzado… - jugué simplemente con mucha energía… - ya con bolso al hombro, ambos eran los únicos que quedaban por abandonar los vestidores, Junsu se había tardado porque el calor del tatuaje en su espalda le había estado molestando y controlar esa sensación mientras se duchaba le había dado trabajo, suerte que las duchas son individuales, sino, ni siquiera se habría bañado ahí, no se pensaba arriesgar a que nadie mas viera su tatuaje.
- Junsu?... – el castaño lo detuvo antes de que saliera…
- mh?... – el pelirrojo se arrepintió de cuestionar ese monosílabo, Kenryu lo miraba como aquel día, se acercaba para besarlo, y él… él quería salir corriendo, pero al mismo tiempo quedarse y comprobar si un beso de verdad lo podría hacer olvidar a Yoochun, por lo menos lo suficiente para no sentir esa herida en su corazón profunda y sangrante.
Sus labios se encontraron por segunda vez, el castaño sintió ese agradable cosquilleo recorrer todo su cuerpo, el pelirrojo sentía que el tatuaje ardía. Pero se dejó llevar, Kenryu atrapó sus labios con suaves movimientos, moviendo sus bocas en un beso inexperto y nervioso. Hasta que fue tomando confianza y Junsu participó mas activamente de éste, abriendo su boca para que la lengua del castaño saludara a la suya con gentileza.
- oh!... – escucharon una voz conocida por ambos, haciendo que se separaran abruptamente… - perdón, no sabía… - Yoochun cerró la puerta, sonrojado por haber visto a dos chicos besándose, sintiendo una molestia y un ardor en su espalda por haber notado a Junsu como uno de los participantes de aquella muestra de amor. Salió casi corriendo de ahí, volviendo con su novia que le esperaba en el estacionamiento.
- los encontraste?... – le preguntó Mimi con una sonrisa, recargada en la puerta del auto que ella conduce…
- eh... no… - aun se sentía aturdido, y la espalda no dejaba de arderle, pero no era un ardor doloroso, incómodo un poco, pero por alguna razón, no era que le molestara del todo, era como… una cosa inexplicable que le recordaba al delfín, a sus sonrisas, a su mirada llena de vida, a…
- Micky!... – su novia lo sacó una vez mas de su ensimismamiento…
- vámonos ya… - subió al auto de su novia, pero que él conduce cuando andan juntos. Tratando de sacar a Junsu de sus pensamientos, de ignorar esa sensación de desazón cada que la imagen del beso entre el castaño y el pelirrojo vuelve a su mente.
Mimi vio en la expresión de su novio algo que no le gustó, porque sentía que eran secretos a los que no tenía acceso pero que de alguna manera terminarían por alejarlo de su lado.
………………………………
Una semana después…
- que quieres hacer qué cosa! – Mimi gritó sorprendida, sentada con su amiga en la cama de su habitación…
- ay, Mimi, tranquila… - Mayuko se tapó los oídos, como si el grito de su amiga en verdad le hubiera lastimado, pero claro, solo estaba bromeando… no así con lo que había mencionado… - qué tiene, somos brujas después de todo…
- pero, pero… una poción de amor? – Mimi la miró con susto… - sabes que las pociones de amor nunca dan amor de verdad, y que si la utilizas puede ser contraproducente si es que estaba destinado que ustedes dos se unieran en el futuro…
- pero… Mimi, tú no entiendes porque Yoochun ya es tu novio, yo en cambio… - puchero, abrazo de oso a un cojín… - Hiro ni siquiera me voltea a ver, y su novia… - el cojín podría perder su relleno en cualquier momento por la fuerza con que es apretado… - odio a esa tipa…
- ni siquiera la conoces… - suspiró resignada la chica de cabello castaño, siempre era lo mismo, y Mayuko decía odiar a la novia de Hiro por el simple hecho de ser su novia…
- no importa… - mirada desafiante… - me ayudarás o no?...
- de acuerdo, pero no vayas a terminar por dar la poción a la persona equivocada, por favor, eso siempre suele ser todo un problema….
- gracias amiga… - la chica de cabello teñido con colores rubio, castaño y cobrizo, abrazó a la castaña contenta por su plan…
……………………….
Día jueves…
Mayuko llegó más temprano que de costumbre a la escuela, Mimi igual, aunque para apoyar a su amiga no haya podido llegar acompañada de su querido ratón. Se fueron directo al aula del periódico escolar donde Hiro seguro está como todas las mañanas, sabía la chica peliteñida (sin ofender) que Hiro es comúnmente el primero en llegar a trabajar en el número de la semana.
Sabía también que su novia no andaría por ahí, y que el chico se tomaba una tasa de café mientras trabajaba, así que la idea era… verter la poción en la cafetera antes de que el muchacho tome su primera tasa de café.
Qué iban a saber ellas que ese día las cosas se darían diferente, que… Hiro no sería el único en tomar su tasa de café… y… qué demonios hacía Yoochun ahí con él… cosa que descolocó por completo a la castaña. Qué hacía su novio ahí!
El ratón había ido para pedirle personalmente a Hiro que le diera un juego de fotografías de… sí, adivinaron, del delfín mientras jugaba… era algo que no había podido evitar, no se lo había podido sacar de la mente desde el sábado anterior… le daba un vuelco el estómago cada que veía a Kenryu y Junsu juntos, regalándose miraditas, y no podía evitar pensar en que se besaban cada que los perdía de vista durante los almuerzos, y desde entonces asistía a los entrenamientos para observarlos, cosa que Mimi ya sabía y que le hacía sentir mas que mal, decepcionada, engañada, porqué era que de repente, así de la nada, Micky se comportaba de esa manera.
Como fuera, el caso es que ambos chicos habían bebido ya del café con poción de amor, ahora, para que diera resultado, se supone que basta con robar un beso, cosa que Mayuko encantada de la vida iba a hacer en ese momento, de no ser porque Yoochun estaba ahí. Así que, habría que esperar la oportunidad idónea.
- oye, porqué no entras y sacas a tu novio de ahí y ya…. – escondidas tras la puerta del pequeño almacén de material de imprenta.
- y qué se supone que diga para explicar que salgo de acá, eh… - hablaban en voz baja…
- somos brujas, salir de este aprieto debería ser de lo más sencillo…
- cierto… - se miraron y decidieron usar su magia, pero justo cuando la castaña iba a comenzar un hechizo verbal para confundir a los chicos mientras salían de ahí y podían luego fingir llegar desde fuera, Yoochun tomó un sobre que Hiro le ofrecía y salió de ahí… - no es necesario ya, ahora, date prisa y haz lo tuyo… - empujó a su amiga, y ésta salió tropezando de su escondite…
- hola… - saludó torpemente al chico que la miraba con clara interrogante marcada en su expresión. Pero ella decidió que era ahora o nunca. Se acercó rápidamente a él y le robó un beso. Aprovechando esa distracción, Mimi salió de su escondite y fue en busca de su novio, no fuera a ser que alguien se lo besara.
Por suerte, y digo suerte, porque si lo hubiera presenciado, tal vez las cosas serían peores. Mimi llegó a encontrarlo ya cuando las clases iban a comenzar. Y cuando quiso saludarlo con un beso, él se giró un poco así que su beso terminó en la mejilla del pelinegro. Y parecía bastante confundido, con la vista perdida y un sonrojo que no salía de su rostro.
……flashback……
Yoochun y Junsu se habían dado un beso.
Cómo había ocurrido tal cosa? Bueno, todo fue un accidente en realidad, pero uno que no iba a traer nada bueno para nadie. Junsu venía caminando pensando en cierto pelinegro con quien justamente fue a chocar. El asunto es, que sus labios se unieron porque, al resbalar el ratón con el piso mojado (al otro lado del pasillo se podía ver al conserje trapeando felizmente) se llevó en el acto al delfín, cayendo sobre él, y por la inercia de la caída se habían dado ese beso. Después de ese primer contacto, la poción de amor hizo efecto y, tal vez impulsados por ese algo mas que sienten, claramente definido en el delfín como amor, incomprensibles celos y atracción por parte del ratón, habían terminado besándose con un poco mas de entusiasmo.
Cuando se separaron (y misteriosamente nadie los había visto), el pelirrojo estaba fuertemente sonrojado, pensando en que era uno mas de sus sueños y que en cualquier momento despertaría al caer de su cama. El ratón se puso de pie, confundido por lo que acababa de pasar, pero extrañamente contento, sintiendo deseos de volver a probar esos labios.
Y luego, cuando Junsu se puso de pie por cuenta propia, descubriendo que no despertadaza y que ese beso había pasado de verdad, chicos y chicas comenzaron a llenar los pasillos llegando para iniciar el día. Así que ni siquiera habían tenido oportunidad de hablar, el pelirrojo se fue corriendo hacia su aula, mientras el pelinegro iba a la suya con muchas ideas pasando por su cabeza.
……flashback……
QUE BUENO QUE YOOCHUN YA SE ESTE DANDO CUENTA QUE AMA JUNSU PERO NO CREO QUE SEA POR LA POCION PORQUE YOOCHUN YA SENTIA SELOS DE EL OTRO CHICO SOLO ACIA FALTA ESE BESO PARA QUE SE DIERA CUENTA.
ResponderEliminarESTA MUY INTERESANTE PORFAVOR QUIERO LA CONTINUACION
OHHH!!
ResponderEliminarQue lindo, me encanta, aunque quisiera saber que pasara con el hermano de Yoochun.
esperare por el siguiente.
T.T buaaaa! por favor quiero ver como sigue!! me lei los 5 cap en muy poco tiempo y ahora me quede con ganas de mas.
ResponderEliminarMe parece que esa pocion va a hacer mucho lio!! pero espero que no sea muy grave!
Espero que pronto se sepa quien es que tiene a yoonhwan!!
Please conti!!! T.T
yo quiero contii!! y si jeje a esta hora sigo leyendo fanfics me faltaba algo de drogajeje
ResponderEliminarQuisiera hacer un pedido a las escritoras de estos hermosos fic
ResponderEliminarHay un actor llamado Ji Chang wook,pienso que seria una excelente pareja para mi dulce JAE,carezco del don de escribir por eso mi atrevimiento en éste pedido, desde ya gracias. M
Quisiera hacer un pedido a las escritoras de estos hermosos fic
ResponderEliminarHay un actor llamado Ji Chang wook,pienso que seria una excelente pareja para mi dulce JAE,carezco del don de escribir por eso mi atrevimiento en éste pedido, desde ya gracias. M
Yo creo que Yoochun ya sentirá algo por Junsu y después de lo que hizo Junsu lo a hecho sentir inconcientemente por este y lo que ha terminado por acercarlo es el hechizo que hizo .
ResponderEliminarGracias!!!