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How Can I Forget You?


Titulo: How can I forget you?
Autora: Ugogirl
Parejas: HeeMin {JungHeexMin} HoMin
Género:Romance / Slash / Lemon
Extensón: Oneshot
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El mejor de los estudiantes de la escuela. El chico responsable, aquel al que todos admiraban, y algunos envidiaban. Shim Changmin era el típico chico inteligente y codiciado, el chico venia de una buena familia, había aprendido un sinfín de idiomas, modales, culturas. Siempre esforzándose por obtener un buen puesto en todo lo que hacía. El más popular de todos, claro que no era como los típicos chicos cabezas huecas que solo eran unas caras bonitas. Aquellos que precisamente morían por salir con el chico Shim.
Pero claro, no todo es perfecto, y Shim Changmin ya estaba apartado para un solo chico. Ya ocho meses habían pasado desde que había iniciado una relación, el chico con el que salía era muy educado, era inteligente y sin duda apuesto. El era un chico muy bien parecido, así que tenía un sinfín de pretendientes, así como chicas que morían por una sola sonrisa de su parte.
Después de prepararse para su primer día de clases el joven subió a la limosina, normalmente solía irse en el autobús escolar junto con los demás estudiantes, pero ese día había despertado con un hambre tremenda, así que al parecer estaría ocupado por un largo momento. Después de comer todo lo que su estomago le permitió. El chico salió rumbo a su preparatoria con una gran sonrisa, desde que conociera a su novio los días eran completamente felices y llenos de brillo. Desde hace ya exactamente un año que conocía al chico, se había enamorado a primera vista del joven.

Al llegar a la puerta de la escuela y despedirse de su mayordomo que había decidido acompañarlo. El joven camino tranquilamente, tenía una reputación que cuidar y si corría al encuentro del amor de su vida, sería algo de verdad inapropiado, pero él sabía exactamente dónde buscarlo.

Todas las personas lo miraban, Changmin era un chico que desprendía glamur y seducción a la vez, era inocentemente seductor, además de que era uno de los chicos más populares de todo el recinto. Solo tuvo que andar unos pocos metros para localizar a su objetivo, en aquel momento no le importo tanto las apariencias, así que comenzó a caminar más rápido.

-¡¡YunHo!! –casi grito el chico de emoción al ver a su novio
-bueno amigo yo iré a mi locker, nos vemos en clases –dijo Yoochun retirándose con una sonrisa
-hola, Minnie –dijo el chico sonriendo cándidamente
-hola, Yun, perdón por no venir en el bus, lo perdí –dijo asiendo una cara súper tierna
-jajaja… lo supuse, Min –dijo el chico posando su brazo en la cintura de su novio, mientras que el menor hacia lo mismo
-¿no me darás un beso? –dijo el chico con un puchero, normalmente siempre hacia eso cuando se veían
-claro que si amor – lentamente tomo la barbilla del chico con su mano derecha volteándola lo suficiente para darle un dulce beso –sabes delicioso hoy –le dijo dulcemente
-hoy cambie de dentífrico, este es de té verde… ¿te gusta? – Pregunto como si de un niño se tratara
-me fascina, tendré que cambiar yo también –volvían a retomar la caminata
-a mí me gusta este sabor -dijo el joven
-jajaja… me alegra amor –tomándolo aun mas fuerte

Normalmente así eran sus días, era por demás divertido hablar de cosas triviales y en ocasiones sin sentido. Se amaban, eran muy felices. Ellos eran la pareja más popular de la escuela, la que todos envidiaban y la que se podía decir era la más estable de todo el lugar, además de la más hermosa.

YunHo acompaño al chico hasta su locker y después de eso hasta su salón de clases. Antes de entrar a este, los chicos se despidieron con otros muy dulces besos. De esa forma YunHo se fue sonriendo, ahora con solo tres libros y su cuaderno el chico entro a su propia clase.
Changmin camino hasta su asiento y se sentó, abrió su cuaderno y comenzó a escribir en algunas hojas en blanco. El chico estaba muy concentrado hasta que llego su tormento.

-hola!! Min –gritaba un chico emocionado -¿Por qué siempre pierdes el bus los lunes? -pregunto el chico sentándose en frente del moreno –eres raro –sonrió
-JungHee puedes dejar de hablarme de esa manera –dijo el castaño algo molesto por la confianza que tenia aquel joven
-perdón, es que hoy estoy algo alegre, y no le veo nada de malo a la forma en la que te hablo

El moreno ni siquiera cambio su expresión de fastidio, no tenía ni la menor idea de porque, pero aquel chico lo fastidiaba, era como su karma o algo por el estilo, aunque no tenía ni la menor idea de que era lo que había hecho mal, o porque dios lo odiaba tanto para estar soportando a un chico como ese.

-¿no me preguntaras por qué? –Dijo el chico –ahh?… -pero el otro no volvió a decir nada –pues veras, mamá se ira de viaje y como ya sabes que ahora ella y tu tío están en su burbuja de amor, pues se irá con ella y…
-¿te irás con tus padres? –Pregunto en esta ocasión con un brillo en los ojos -¿verdad? –se notaba su emoción
-jajaja… claro que no, ya sabes cómo son ellos, mamá dijo que estarían muy ocupados, así que no podrán llevarme con ellos…
-ya, lo suponía, no te quieren, mi tío solo quiere a tu mamá –dijo el moreno
-jajaja… mira que serás gracioso –comenzó a reír –bueno, que tu tío me quiera o no cosa de el, quién sabe, pero ellos convencieron a tus papás de algo… -se levanto para darle más emoción al asunto –me quedare en tu casa –soltó el joven como si nada, riendo de la expresión que ahora ponía el moreno
-… - ‘me quedare en tu casa… me quedare en tu casa… me quedare en tu casa… me quedare en tu casa’ esas palabras resonaban en su cabeza, apenas podía soportarlo en la escuela y ahora quería vivir en su casa –NOOO!!! –grito el joven. Por suerte todas estaban asiendo relajo, así que casi nadie lo escucho –no puedes, no puedes vivir en mi casa –seguía diciendo el chico aun en estado de shock
-pues en una semana llevaran mis cosas a tu mansión, el viaje será largo así que nos podremos divertir en grande… ¿no te da gusto, Min? –Pregunto el joven –será divertido –changmin seguía congelado, estaba completamente noqueado y aun no se recuperaba de aquella espeluznante noticia -¿verdad, Min? –esperaba la respuesta del chico, aun que el sabia a la perfección que no le caía para nada bien al pequeño
-muy bien jovencitos –llego el profesor al salón –les presentaremos al nuevo profesor de ciencias –de aquella manera el joven había viajado a otro mundo, sin duda era un karma, su karma… aunque claro, seguía sin saber la razón

Las clases habían pasado tranquilas. En ese momento el joven salía a la cafetería para poder alimentar a su adorado estomago. Como todos los días ahí estaba YunHo, el chico siempre lo esperaba junto a Yoochun el cual solo ignoraba a los chicos cuando se apapachaban. Los jóvenes comían en la mejor mesa de la cafetería, y nadie intentaba si quiera molestarlos.
Ese día Yoochun parecía extraño, normalmente nunca se cansaba de hablar, pero en esta ocasión no había dicho ni ‘pio’. Los dos novios iban tomados de las manos, platicando acerca de cosas triviales hasta que el joven recordó lo que hace algunas horas atrás le había pasado, así que comenzó a contarle a YunHo.

-bueno es tu primo al final de cuentas –dijo el mayor tratando de relajarlo
-pero YunHo, el ni siquiera lleva mucho siendo parte de la familia, además mi tío es un tonto al haber dejado a mi tía por la mamá de ese estúpido, y… desde cuando mis papás le tienen tanta confianza a aquel idiota para dejarlo quedarse en casa, ¿Por qué tengo que ser yo el que lo soporte? –decía algo molesto
-amor… no seas terco, además no podemos hacer nada –lo abrazo
-ya se, YunHo, solo no me dejes solito, no vaya a ser que ese idiota me viole –se aferro a su novio fingiendo estar aterrado de aquello
-jajaja… amor, es tu primo y ni se soportan, no creo que eso pase… pero aun así no te preocupes no te dejare solito –termino el chico besando su frente
-prefiero que sea aquí –dijo tocando sus labios con su dedo índice. Yunho sonrió y cumplió la petición de su amor –te amo… -menciono el chico
-yo también…

Así caminaron hasta la lonchería, felices de la vida, tomados de la mano y con una gran sonrisa.

******

De aquella dolorosa manera los días fueron pasando, Changmin besando y dándole todo su amor a YunHo e ignorando por completo a su primito, que al parecer solo vivía para molestarlo, y se preguntaba ¿lo hacia intencionalmente, o simplemente era un imbécil? Pero siendo honestos parecía ser lo primero, ya que todos decían que él era súper guay, tontos, pensaba el menor, siempre escuchaba esos ‘eres tan afortunado de tener un primo tan sexy’ o ‘me encantaría salir con el’ incluso aquellos ‘si me pidiera una noche, te juro que no me negaría’ que era lo que le veían todas y todos a ese idiota, ¿Qué no se daban cuenta de lo falso que era?

Entonces llego, había pasado una semana y por fin seria el gran día en que su tormento llegaría a su casa, para oscurecer cada día de su existencia, su gran karma como el chico le llamaba.
El moreno caminaba de un lado para otro, ya había revisado la habitación que su primo ocuparía más de 50 veces. Las cosas del joven acababan de llegar pero tal parecía que del chico no había ni rastro. Eso era bueno, le daría más tiempo para pensar en algo, o por lo menos prepararse mentalmente, pero espera, el chico se detuvo en seco, ¿hacer qué? Min tú no eres un mocoso sin educación, no puedes hacer nada de eso, no puedes, se repetía el joven, pero… no Min, es una mala idea, así que solo ve a bañarte y deja de decir tonterías, deja de decir estupideces. Porque el chico ya había pensado en algunas cosas para hacerle imposible la vida a JungHee pero como el mismo ya se había dicho, no era un mocoso y aquello era en lo menos que quería convertirse.

Paso una hora y el joven seguía desaparecido, Changmin se había preocupado, no precisamente por la salud del chico, más bien era por el miedo a ser atacado cuando durmiese y no saber ni que le había atacado, o peor aun y lo que le había dicho a YunHo se cumplía, tal vez aquel chico lo violara, eso hizo que su piel se erizara, eran pensamientos demasiado locos.
Entonces escucho como en la planta baja comenzaban a hacer ruido, parecía y si no se equivocaba, que su primito había llegado. El moreno se escandalizo un poco, después de tranquilizarse decidió salir a ver qué era lo que pasaba. El joven venia subiendo las escaleras, traía una pequeña maleta y de repente vio esa sonrisa que tanto odiaba, esa que para muchos era lo más hermoso y seductor que pudiesen ver en sus vidas.
El pelinegro fingió no darle importancia, el otro chico se paro frente a el, y rápidamente le dio un fugaz abrazo.

-bueno primo, ya estoy aquí –dijo alegremente – ¿Dónde se supone que debo dormir? –Pregunto -¿contigo? –con un tono algo pícaro
-ya quisieras pervertido… -¿por qué ese chico lo hacia enojar tan fácilmente? -te mostrare tu habitación, así que camina –dijo sin expresión
-okis, sabes Min –comenzó a hablar nuevamente el castaño. Después de caminar por el pasillo llegaron al lugar deseado –estoy feliz de estar aquí –sonrió el joven, incluso pareció diferente, pareció un chico normal
-ahh... bueno como sea, esta es tu habitación –dijo abriendo la puerta del cuarto
-y… ¿Cuál es la tuya? –pregunto curioso el chico
-es la de al lado, y ya me voy –dijo el moreno regresando por el lugar que había llegado –no quiero que me molestes –dijo antes de perderse por el pasillo
-mmm… ¿A dónde vas? –pregunto en esta ocasión ya gritando
-no te importa –fue lo último que se escucho
-hay Minmin… si vieras cuanto me importa –suspiro antes de abrir la puerta y entrar a su habitación

Mientras tanto Changmin había entrado a la biblioteca de su padre ya que era la habitación más cómoda para hablar sin ser molestado, ahora que JungHee estaba al lado de su pieza ese lugar no era nada seguro. Comenzó a marcar aquel número que sabía de memoria, pero nadie contestaba, el chico se había comenzado a preocupar. Marcaba una y otra vez pero nadie contestaba, así que decidió dejar un mensaje de voz ya que no le quedaba de otra.

-Yun… te he estado marcando desde hace horas –intentando no sonar enojado –cuando escuches esto, llámame –se sentía tan raro, no era normal que YunHo no contestara a sus llamadas y eso de cierta forma le hacia preocuparse.

Después de esa última llamada comenzó a revisar algunos de los libros que tenía su padre ahí –ah, esta es la autora de los libros que YunHo siempre lee –entonces recordó aquello que le había dicho su novio hacia no mucho “amo estos libros ya que uno de los personajes se parece a ti” así que le entraron muchas ganas de leer y ver de quien se trataba. Estuvo revisando por un momento y rápidamente identifico a aquel chico que según YunHo se parecía a él… el menor de todos.
Pasándose algunas páginas el chico comenzó a leer aquellas escenas donde salía su personaje –dios –se sonrojo al comenzar a leer las escenas lemon –dios, dios, dios, dios… -se repetía al leer aquella escena de sexo en los lockers del gimnasio

El chico ahora buscaba todas aquellas escenas subidas de tono que se encontraban en aquel libro –vaya… no creí que un chico tan sexoso pudiese parecerse a mi –se dijo al darse cuenta que aquel chico que se suponía se parecía a él, era demasiado ‘caliente’ por así decirlo –Hado Mitico –volvió a leer en la portada de aquello –dios que imaginación –entonces aquellas imágenes volvieron a aparecer en su mente... aquella tarde…

De esa manera pasaron minutos… el chico se había quedado dormido en aquel cómodo sofá rojo que siempre utilizaba para leer cuando no tenía nada que hacer. Y de aquella manera las horas pasaron sin que el teléfono sonara, lo que desde que entrase al lugar había estado esperando.

La luz del sol comenzó a iluminar la habitación, los pájaros comenzaban a cantar y a sus sentidos llegaron todos aquellos signos que anunciaban la mañana. Con un poco de flojera el chico abrió los ojos y después de algunos segundos por fin el joven pudo ver el lugar en el que se encontraba.

-¿Qué?... ¿Cómo llegue aquí? –dijo con dificultad
-hi!! Min –el chico permanecía a un lado del otro joven
-tu… ¿tú me trajiste aquí? –pregunto con dificultad
-si… te quedaste dormido en la biblioteca, me preocupe por ti y pues ya, fui por ti y te traje aquí –dijo el chico con una de esas sonrisas que le da a sus admiradores –al parecer tenias algo de fiebre y no podía dejarte en aquella habitación fría, así que ya, te cargue y te deje aquí –decía orgulloso de su acto
-¿y tú qué haces aquí? –pregunto ya que no había razón por la cual el joven tuviese que quedarse en el lugar
-te estaba cuidando… creo que tienes problemas con tus sueños Min, me golpeaste muchas veces –el moreno mostro algo de molestia, pero después cayó en cuanta de lo que el chico había hecho
-¿dormiste conmigo? –pregunto algo asustado
-pues sí, es que yo también estaba cansado, pequeño, y no quería dejarte solito… así que por eso tuve que dormir en tu cama –la sonrisa del joven cambio por completo, ahora le parecía tan maliciosa
-maldito pervertido, espero que no me hayas tocado desgraciado –decía con las mejillas algo encendidas, incluso para el pensar que ese ser lo había tocado era algo… muy penoso
-jajaja… te digo que eres súper gracioso Min, pero no, no te toque ni me aproveche de ti si eso es lo que te preocupa, con los golpes que me dabas no creo que alguien desee dormir contigo más íntimamente, pobre YunHo –su sonrisa desapareció al ver el rostro de tristeza de su moreno primo -¿pasa algo Min? –pregunto al no entender la razón de su expresión
-no pasa nada, es solo… tengo que hacer una llamada –se levanto tomo su celular y rápidamente camino a su baño. JungHee solamente observaba aquella blanca puerta esperando escuchar la conversación del joven –YunHo te he llamado más de 30 veces… -un pequeño sollozo que no creyó alguien pudiese escucharlo -por favor cuando escuches el mensaje llámame –termino la llamada sintiendo su corazón doler fuertemente
-así que era eso… -susurro el mayor de los chicos saliendo de aquella habitación. Ahora entendía la razón por la cual su primo estaba tan extraño

El lunes fue… para nada un lunes normal. Changmin había estado esperando todo el día a que su novio lo besara, pero este apenas si lo había abrazado, todo el día lo había notado distante, cada vez que intentaba iniciar una conversación las frías respuestas de YunHo eran suficientes para terminarlas. De esos días en adelante sus notas habían bajado, el director le advirtió que si no mejoraba esas calificaciones tendrían que salir del consejo estudiantil, pero como podía concentrarse si todo el tiempo pensaba en YunHo, en la razón de su alejamiento, porque aquella situación le dolía increíblemente y su mente comenzaba a hacer tantas hipótesis de lo que podía estar pasando.
Las cosas con su primo iban más o menos ‘normal’ si así se le podía decir, pero hasta ese punto no lo había molestado como él había creído que lo aria, incluso comenzó a notar que el joven se preocupaba por él, ya que todos los días le preguntaba por su día, o si se encontraba mejor… era tan extraño ese sentimiento de culpa al pensar que todo aquel tiempo lo había visto como un hipócrita, imbécil, pero no tenía sentido prestarle demasiada importancia a ese tipo de cosas.

Al pasar los meses, dos para ser exactos fue cuando le quedo claro que algo no estaba bien con YunHo, Ese día tenía que quedarse después de clases y todo el día había estado preocupado, nunca había tenido la necesidad de avisarle a su novio de eso o de las cosas que normalmente hacia porque el ya las sabia a la perfección. Solo habían pasado unos minutos después de que todos salieran de sus salones, cuando decidió ver si YunHo estaba en la misma banca de siempre. Camino un poco cuando sus ojos se toparon con una gran ‘luz’ de ‘esperanza’, Yoochun estaba ahí, así que como consecuencia YunHo también debía de estarlo. Camino hasta donde se encontraba el chico llamándolo, el joven volteo a verlo mientras el solo podía desear que le dijera a donde se había ido su novio.

-oh! Changmin
-¿YunHo está contigo? –ya quería ver a su novio y decirle que lo había extrañado hacia unos minutos
-no, el ya se fue –en ese momento sintió como algo se oprimió en su pecho
-ah… creí que me esperaría como siempre lo hace, ya le había mencionado que hoy me quedaría –Sentía tantas ganas de llorar y decirle a YunHo que era un idiota
-¿pasa algo con YunHo?
-no lo sé… desde hace ya semanas ha estado muy extraño, no lo veo desde hace mucho –y dolía tanto darse cuenta de que sus palabras eran reales
-pero ustedes siempre pasan el lunch juntos – ¿y eso era suficiente? Aquello no era nada comparado a el tiempo que habían pasado el año pasado
-sí, pero es el único momento que nos vemos, solo a esa hora… perdón, tengo que volver al consejo… nos vemos Yoochun
-nos vemos…

No pudo soportar más las ganas de llorar e importándole muy poco ser el presidente del consejo estudiantil, partió a su mansión sin siquiera pensar en que vivía algo alejado del establecimiento. El bus tenía que recogerlo junto con los otros chicos, pero simplemente nada importaba en ese momento, camino con aquellos sollozos y dolor de cabeza que no le dejaba tranquilo.

JungHee se encontraba viendo el televisor y devorando algunas frituras cuando escucho un ruido, Changmin abrió la puerta, ya era tarde y no quería ser escuchado así que con todo su trabajo trato de que sus sollozos no fueran escuchados por nadie, pero era imposible, el mayor de los chicos tenía un gran oído y le fue muy fácil darse cuenta del estado en el que se encontraba el joven, quiso detenerlo pero Changmin caminaba muy rápido, entonces escucho como su puerta era azotada y lo único que pudo hacer fue quedarse de ese lado de la habitación escuchando como el moreno sacaba todos aquellos sentimientos que tenia dentro, su corazón se sentía mal, nunca había creído ver a aquel chico de esa manera. Casi dos horas estuvo ahí hasta que ya los sollozos habían cesado, el menor se había quedado dormido y lo mejor era dejarlo tranquilo, pero claro eso no se quedaría de aquella manera.

El jueves en la escuela las cosas no fueron precisamente lo mejor del mundo. JungHee caminaba detrás de Changmin que parecía estar algo desesperado, entonces creyó saber la razón de todos los problemas del joven, vio como Min se le abalanzaba a YunHo y comenzaba a besarlo, pero él no era ciego y se dio cuenta que el mayor de los chicos no estaba correspondiendo estos, de hecho parecía querer quitarse al chico de encima, eso de verdad lo hizo enojar.
Pero Changmin siempre había sido tan necio e insistía en estar cerca del joven mientras que el solo podía pensar en que aquello lo lastimaba más, y se notaba, ya ni siquiera se molestaba cuando decía cosas que antes le hubieran puesto de muy mal humor. Tenía que hacer algo para recuperar a su adorado y enojón primito.

Días después y al ver que a cada momento las cosas se complicaban el chico decidió arreglar todo o por lo menos ayudar. Después de salir de clases el joven se quedo esperando en el segundo piso en el cual estudiaba YunHo, minutos después de espera el menor vio como aquel chico salía de su salón así que antes de que se fuera, lo detuvo. YunHo se veía sorprendido, pero el otro joven lucia decidido y serio, razón por la cual a pesar de no conocerlo demasiado, decidió quedarse a escuchar lo que se suponía tenia que decirle. Si, estaba molesto y sentía unas ganas tremendas de golpear a ese imbécil, pero a pesar de todo, a pesar de tener ese sentimiento, era educado y no podía actuar impulsivamente.

-¿pasa algo? –pregunto YunHo seriamente, como ya lo había dicho el no conocía muy bien al joven
-la verdad si –JungHee sonaba algo molesto, pero como no estarlo –mira YunHo, yo sé que no tengo el derecho a meterme en tu relación con mi primo, pero… pero si algo no soporto es ver a Changmin mal… -el mayor se le quedo viendo aun mas sorprendido que minutos antes
-¿de qué hablas? –pregunto, no sabiendo que contestar a aquello que le reclamaba
-YunHo por favor, tu y yo sabemos muy bien lo que está pasando… tu no amas a Changmin, tal vez lo hiciste, pero ya no mas…
-tú, tu… ¿Cómo puedes decir algo así?
-no soy estúpido, YunHo, Changmin esta tan enamorado de ti que no se quiere darse cuenta que las cosas cambiaron, pero tú no eres el que tiene que verlo triste o llorando… estoy arto de esta situación y es por eso que me atrevo a decírtelo… si ya no lo amas, ya no lo hagas sufrir… déjalo –soltó observando la cara de duda del moreno
-… ¿eso era todo? –pregunto el joven nuevamente serio
-sí, piénsalo bien YunHo, yo se que tú no quieres que Changmin sufra, y yo estoy arto de escucharlo llorar…

Sus pasos fueron lentos, no tenía razón para mostrarse cobardemente ante YunHo y lo que más quería en ese momento era parecer seguro ante el mayor. Después de unos minutos salió del establecimiento encontrándose con su auto que pronto arranco con dirección a la mansión de los Shim.

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Su habitación estaba completamente oscura, su mente había comenzado a pensar en la razón por la cual su novio se estaba alejando de él, tal vez ya no lo amaba, tal vez lo estaba engañado, tal vez no le parecía suficiente. ¿Cuál era la razón por la cual había dejado de estar con él?... Entonces como aquella ocasión en la biblioteca, su mente comenzó a recordar aquella tarde que había estado con YunHo.
No sabía qué hacer, se arrepentía por haberlo detenido en aquella ocasión. ¿Era acaso esa la razón por lo que ahora lo rechazaba? La duda y la culpa le carcomían el alma, tenía que saber cuál era el problema, o quien le estaba robando el corazón de YunHo. En ese momento algo hizo clic en su cabeza. Podía, cabía la posibilidad que él se hubiese encontrado a alguien que no le negase la cosa que el mayor esperaba de él.


******* Flash Back ********

Después de las agotadoras clases en la preparatoria, los chicos llegaban algo cansados a sus casas. La tortura aun no terminaba para algunos, y es que ese día el profesor de historia les había dejado un proyecto acerca de la segunda guerra mundial.
Como siempre YunHo quiso ayudar a Changmin con la tarea, claro que el chico no la necesitaba, pero le encantaba que el mayor se preocupara por él.
Los dos saludaron a la mamá del menor que se encontraba en la cocina preparando la comida. La señora conocía al mayor de los chicos muy bien, y siempre le había caído de maravilla.
La habitación de Changmin era un lugar que YunHo conocía a la perfección. Desde que eran novios los dos conocían a la familia del otro, y de hecho sus padres conocían su relación y para nada se oponían a ella, incluso les fascinaba aquello ya que sabían que el otro así como su familia eran personas de bien, e inteligentes.

Changmin sacaba sus cuadernos y algunos libros de historia que había traído de la biblioteca de su casa antes de subir las escaleras hacia su habitación, mientras tanto YunHo buscaba ciertas páginas en internet que le pudiesen ayudar con la investigación que tenían que terminar para ese mismo día.
El trabajo como siempre había sido fácil. Los dos chicos eran inteligentes así que combinaban a la perfección.

Siempre que iban a la casa del otro, que era casi todos los días, se ponían a ver buenas películas o programas de televisión, desde dramas hasta comedias. Pasar tiempo con el otro era lo que los dos chicos disfrutaban, porque se querían, se estimaban mucho, y si no se equivocaban, se amaban...

Los dos chicos se sentaron en el suelo recargándose en la cama del menor. YunHo en ese momento había pasado su brazo por la nuca del menor, lo estaba abrazando como todos las veces que se encontraban a solas, disfrutaban del calor de sus cuerpos, respirando aquel aroma a frutillas que tanto le fascinaba. La nariz del mayor se mantenía cerca del cabello del menor, mientras que sus labios tocaban la piel en la parte baja del ojo del pequeño. A Chagmin le fascinaba eso, sentir la protección de YunHo, sentirse tan seguro con él, tan amado.

Después de estar viendo el televisor por un buen rato. El menor comenzó a sentir las manos de YunHo tomar una de sus manos y con la otra tomar su barbilla, en ese momento Changmin cerró sus ojos a sabiendas de lo que iba a pasar, entonces sintió como los labios de su novio ya se posaban en los suyos. El beso comenzó dulcemente como era su costumbre, pero en un momento comenzó a sentir la lengua de YunHo dentro de su boca y no supo si fue por inercia pero el también había comenzado a mover su propia lengua de aquella manera tan desenfrenada, continuando aquella danza erótica que a cada paso iba subiendo de tono.
No era algo tan raro incluso sentir los labios y la lengua de su novio en su cuello era algo que en ocasiones solían hacer.

Las manos de YunHo calentándose debajo de su camisa, tocando su morena piel, intentando que ningún pedazo de aquella deliciosa carne se quedara sin tocar. Changmin estaba en otro mundo, se sentía tan bien sentir aquellas manos calientes sobre su cuerpo, incluso el enredo sus manos en el cuello del mayor dejando así una de las manos de YunHo desocupadas, claro solo por poco, ya que el cuerpo del mayor no tenía planeado detenerse en aquel momento.

Min estaba dejándose hacer por completo. Los besos de YunHo eran tremendamente delicioso, y todo habría estado bien y nada hubiera cambiado, pero entonces casi se atraganta con su propia saliva al sentir la mano del mayor en esa parte tan intima de su cuerpo.
Instintivamente abrió sus ojos de par en par, pero claro sin dejar los labios de su amado novio, en su estomago comenzaba a concentrarse un fuego extraño, eran como cientos de partículas viajando en su miembro, las cuales causaban que esa fricción con la mano del mayor fuera por demás placentera.

-YunHo… -susurro el joven sintiendo como esa mano se colaba por debajo de su ropa interior –Yun… -pero sus labios eran aprisionados de una manera casi salvaje –ahh… mmhh…
-Min… -no eran necesario palabras, sabía lo que el mayor le estaba pidiendo, quería eso… perdería su virginidad…

De aquella manera el menor quedo completamente recostado en aquel frio suelo. El pelinegro miraba a su pareja tirado en el suelo con aquella expresión tan inocente y a la vez tan seductora que siempre había tenido, sus mejillas sonrojadas le hacían ver tremendamente bien.

-eres hermoso –pronuncio el chico con aquel brillo en los ojos –me fascinas – y esas tres palabras eran suficientes para dejarlo en un mundo de completo fanatismo

Las caricias se incrementaban y con ello el placer, los besos sobre su cuello y aquellas manos desabrochando su blanca camisa, se sentía de maravilla, pero sentía que algo no estaba bien, la inseguridad apoderándose de su cuerpo y aquella expresión asustada del mayor al ser empujado bruscamente, logro que pequeñas gotitas de agua salieran de sus ojos.

-¿Min? –pregunto confundido
-… Yun… Yun… -ninguna palabra podía salir de su boca

Una culpa infinita comenzó a carcomer todo su ser. Changmin estaba llorando y de cierta forma sentía que era su culpa, ya que él había sido el libidinoso que no había podido aguantarse.

-Min –intento hacerle ver al chico que todo estaba bien –no pasa nada, Min –le dijo con voz tranquilizante –no llores, Min –no sabía si debía abrazarlo o no, tal vez el chico volvía a asustarse
-es que… YunHo… -seguía sollozando –es que… no lo sé, Yunnie… yo de verdad quería hacerlo pero… pero… -el menor fue interrumpido por los brazos de YunHo que se aferraban fuertemente a su cuerpo
-está bien, Min –decía mientras acariciaba sus cabellos
-no está bien, YunHo… no lo está… -oculto su rostro en el cuello de su novio mientras seguía sollozando
-Min… escucha –dijo mientras sostenía su rostro para que así el menor pudiera verlo –yo te quiero a ti y no te voy a negar, que me encantaría que mi primera vez fuera contigo… pero si tu aun no estás seguro, si tu aun no lo estas, yo puedo esperar, porque… soy un idiota y yo debería de haberme controlado…
-pero YunHo… tenemos casi nueve meses de salir y…
-pero tú eres menor que yo, Min… la cosa es que yo debo de esperar a que tú te sientas listo porque tú eres mucho menor que yo… por favor perdóname, Min…
-te amo, YunHo…
-y yo a ti, Min…


**********END FLASH BACK**********


-soy un idiota –lloraba sin detenerse –seguro que YunHo ya se encontró a otro que no le ande negando su cuerpo y yo… yo soy un completo idiota –pero en su mente ya se comenzaban a formar muchas ideas para poder retener al mayor a su lado, no iba a permitir que nadie se lo quitase y no le iba a importa hacer lo que fuera por su novio
-¿Changmin? –se escuchaba desde el marco de la puerta
-¿Qué haces aquí? –El joven se sentía muy mal y lo único que podía hacer era limpiarse las lágrimas del rostro –sal de mi habitación
-Min escucha…
-¡¡QUE SALGAS DE MI HABITACION!! –La mirada del moreno era de completo miedo –ESTAS SORDO O ¿QUE?
-Min… -la voz del chico se notaba preocupada, no podía creer que Changmin estuviese de aquella manera
-¡¡VETE!!

Aun que le dolía ver a Changmin de aquella manera, el de verdad no podía hacer nada, se sentía tan impotente, pero si Changmin no cooperaba las cosas no cambiarían. Después de salir de la habitación volvía escuchar aquellos sollozos que ya le parecieran completamente normales porque casi desde que había llegado a aquella mansión, el pequeño Min se la pasaba llorando.


Nuevamente la semana comenzaba y las preocupaciones seguían en pie, YunHo se sentía por demás acosado y sentía que se ahogaba con Changmin todo el tiempo encima de el, el pequeño creía que cualquiera de sus compañeros podía ser aquel que le estaba robando a su novio y por esa razón no lo dejaba casi ni respirar mientras que el mayor seguía alejándose cada vez más de él. Los últimos días Changmin se la había pasado irritado y no podía soportar a nadie, lo único que quería era saber que era lo que estaba pasando.

-jajaja… eres un idiota YunHo –reían Yoochun y su amigo en la entrada de la escuela
-ya déjate de idioteces… bueno amigo hoy quiero ir a tu casa –sonrió YunHo mientras ponía su brazo en el hombre del mencionado
-¿otra vez? Después de lo raro que ha andado mi umma estos días no sé si sea buena ide…
-YunHo!! –Sin querer YunHo hizo una mueca de molestia –Yunnie –llego su novio sonriendo como normalmente lo hacia
-ah… hola Changmin –dijo el mayor
-YunHo, crees que hoy podríamos irnos juntos –como si no supiese nada el menor sonrió dulcemente, siempre convencía a su novio de todo con aquella mirada y aquella voz tierna
-ah… Changmin, lo que pasa es que hoy… -pero antes de que pudiera terminar el moreno recibió un golpe de parte de su amigo
-no hay problema YunHo, anda vete con tu novio –sonrió a sabiendas de que algo no estaba nada bien en su relación
-pero…
-no te preocupes… -volteo a ver al pequeño –ya ves como es YunHo de responsable y nunca quiere quedar mal jaja… no te preocupes amigo yo me haré cargo –mentía para que el menor no se diera cuenta del fastidio de su amigo
-jajaja… si lo se Yoochun… bueno, ¿nos vamos? –y sin esperar una respuesta el menor tomo a YunHo del brazo y comenzó a guiarlo por el camino a su mansión
-nos vemos amigo… -grito Yoochu sonriendo al darse cuenta que YunHo intentaría matarlo la próxima vez que lo viera

Después de tomar un taxi que no tardo demasiado en llegar a la gran mansión de Changmin, los dos chicos bajaron de este y comenzaron a caminar hasta la habitación del menor. Los nervios del más chico eran increíbles, sabía lo que tenía que hacer y ver a YunHo de aquella manera tan incomodo lo ponían de la misma forma.

-¿pasa algo, Yunnie? –pregunto el menor temeroso
-no… nada… -YunHo aun no sabía qué hacer, estaba tan confundido por el comportamiento de su novio
-bien, entonces démonos prisa –y así los dos llegaron hasta aquel fresco lugar – ¿te gusta?
-eh?
-el olor… no crees que huele rico –sonrió como si de un niño se tratara
-pues si… -mintió ya que ni siquiera se había dado cuenta y no tenía ni la menor idea de lo que hablaba el chico
-YunHo… quiero hablar contigo –el menor se sentó en la orilla de su cama esperando que el otro también lo hiciera
-dime…
-yo… Yunnie yo… bueno en realidad lo que tenía que decir es… siéntate, YunHo –entonces el mayor hizo lo que su novio le había pedido –esto… yo… Yunnie…
-vamos Min… ¿Qué pasa? –y sin más el menor se lanzo a los labios de YunHo devorándolos por completo.

El mayor de los chicos no sabía ni que hacer, tenía a Min tan encima de él y la forma en la que el chico se movía desesperadamente era demasiado sofocante. Sin esperar mucho tiempo el menor de los chicos comenzó a desabotonar la camisa de YunHo, estaba tan ansioso por demostrarle a su novio que él podía ser completamente suficiente que no se detenía ni un solo segundo.

-Yunnie… tócame… -pedía el chico mientras su lengua se paseaba por el cuello de su novio –por favor…- pero era imposible hacer que el mayor reaccionara, estaba tan sorprendido por lo que Changmin estaba haciendo que no sabía ni que decir ni hacer…

Segundos más tarde y viendo que YunHo no hacia nada, el menor comenzó a quitarse su propia ropa; sin esperar mas el chico ya tenía la camisa desabrochada, claro que aun la tenia puesta porque deseaba que su moreno novio se la quitara, sintiéndose muy ansioso comenzó a desabotonar su pantalón dejándolo abierto y a la disposición del moreno.

-Yunnie… -suspiraba sobre el pecho del joven mientras lamia una de sus tetillas

Y no fue hasta que el mayor de los chicos sintió una de las manos de su novio en su sexo que reacciono. Changmin se quedo estampado cuando sintió las manos de su novio en sus hombros, el chico lo había rechazado y el no podía más que temblar del placer que había estado sintiendo.

-¿yunnie? –pregunto confundido
-¿Qué estás haciendo, Changmin? –pregunto el joven acomodando su camisa
-¿Qué estoy haciendo? YunHo que no es obvio… quiero hacer el amor con mi novio… YunHo házmelo –dijo el chico con la respiración agitada mientras se volvía a lanzar al chico esta vez acariciando su miembro sin contemplaciones
-NO, CHANGMIN –grito el chico esta vez aventando a Min con un poco mas de fuerza
-… -los ojos del menor comenzaron a cristalizarse, entonces sus sospechas eran ciertas -¿Qué DOMIOS TE PASA, JUNG YUNHO? –Grito ya arto de todo lo que estaba pasando –ME ESTOY ENTREGANDO A TI, TE ESTOY PIDIENDO QUE ME LO HAGAS Y… y tú me estas rechazando –las lagrimas comenzaron a salir inevitablemente de sus ojos, sentía como todo su mundo se desmoronaba –ME DIJISTE QUE ESPERARIAS A QUE ESTUVIERA LISTO… PUES YA ESTOY LISTO, YUNHO…
-Changmin…
-YA NO LO SOPORTO MAS, YUNHO… POR FAVOR DIME… solo dime que es lo que está pasando… -rogo sabiendo que lo que fuera que el chico dijese, no le agradaría
-Changmin… yo… esto me duele mucho, Min, pero… pero yo… yo ya no te amo, Min… -soltó el chico casi en un susurro, le dolía tanto ver a Changmin de aquella manera
-… no… no puedes decirme eso… -y no sabía si su voz había salido de su boca ya que esos sollozos casi no se lo permitían –tu me amas… me amas, Yunnie…
-no, Changmin… yo te ame, de verdad que lo hice, pero… pero las cosas ya no funcionan…
-mentiroso… las cosas si funcionaban, tú eras feliz y yo lo era… dime la verdad, YunHo… es por alguien más, ¿cierto?...
-Changmin…
-SOLO DILO…
-sí, Min… si hay alguien más… -y ya no pudo seguir ni un momento más ahí al ver como el menor comenzaba a llorar fuertemente sollozando y ahogándose con sus propias lagrimas…

El mayor de los chicos salió al sentir que se ahogaría en aquella habitación, la presión de ver de aquella manera a Changmin y mas la presión de lo que le estaba pasando, era demasiado. Sus pasos eran rápidos, le dolía tanto lo que estaba pasando, pero sabía que era lo mejor, debía ser lo mejor para ambos ya que ninguno de los dos merecía sufrir. Entonces sin previo aviso sintió como alguien lo tomaba bruscamente del brazo sacándolo de todo su trance y haciendo que voltease a ver a aquella persona.

-JungHee… -dijo el joven algo asustado
-¿Qué haces? –pregunto el menor al verlo tan agitado y con aquella cara de preocupación en el rostro
-yo… eso no importa, JungHee… será mejor que me vaya, prometo que no volveré a molestar solo… solo ve con Changmin, está en su habitación –y eso fue lo último que se escucho antes de que el joven saliese casi corriendo de la mansión del que hacía unos minutos fuese su novio
-y este que… -se dijo a sí mismo al no entender el porqué de su comportamiento, pero entonces recordó que el moreno había mencionado a Changmin

Rápidamente el chico subió las escaleras, aquella mirada de YunHo no le había dado buena espina y su preocupación se intensificaba al acercarse a esa habitación escuchando esos sollozos que cada vez se hacían más fuertes. Su respiración se detuvo al entrar y ver como el menor lloraba desconsolado con toda la ropa descolocada y si no fuera porque el moreno ya había salido de la casa; juraba que en ese momento lo mataba a golpes. El pantalón de Min estaba desabrochado y su camisa estaba completamente suelta, casi caía de sus hombros… ¿Qué era lo que podía pensar de eso?

Aguantando sus ganas de romperle el cuello a YunHo, el chico camino lentamente hacia el centro de la habitación, sus pasos eran por demás silenciosos, Changmin no se encontraba en un muy buen estado y no quería que sufriera algún accidente, pero… pero no podía dejarlo ahí, no podía dejarlo así. Sintiendo su corazón oprimirse, el chico logro sentarse en aquella gran cama, quería hacer tantas cosas en aquel momento pero lo único que atino a hacer fue poner su brazo en el hombro del pequeño logrando con eso un brinco de parte del moreno. Changmin lo observo por unos segundos, su rostro estaba completamente bañado en lágrimas y podía sentir como temblaba; entonces antes de lograr hacer algo sintió como los brazos del menor se aferraban a su espalda sin querer soltarlas.

El mayor de los chicos no pudo más que abrazar a aquel chico de igual manera porque sabía que debía de estar tan dolido, sabía que su mundo debería de estarse rompiendo en aquel preciso momento. Y así como si de un niño pequeño se tratara, el menor duro por más de tres horas seguidas llorando, estaba tan cansado pero en cuanto recordaba todo aquello que había pasado con su ex-novio, sentía como aquellas ganas de seguir llorando sin detenerse, aparecían. Tantas cosas que había tenido con YunHo para que el mayor llegara y así de fácil terminase con el…

-Changmin… -intentaba mover el cuerpo del menor pero al instante se dio cuenta que aquel chico ya había caído rendido –se quedo dormido –susurro al ver su rostro demacrado y aquellas gotas ya casi secas en sus mejillas – ¿Qué demonios paso? –Se preguntaba al recordar la forma en la que había encontrado al chico y la actitud tan extraña de YunHo cuando salió de aquella mansión –espero que no sea lo que pienso –hablaba para sí mismo mientras intentaba acomodar a Changmin en aquella cama sin que el menor despertase

Minutos después y al ver que el menor seguía profundamente dormido, el chico decidió dejarlo solo para poder atender sus asuntos, claro que intentaría regresar lo más pronto posible porque no confiaba en lo que en aquel momento le estaba pasando a su primo o más bien no confiaba en su primo ya que conociéndolo, el chico podía hacer cualquier tipo de estupidez.


***

Durante aquellos días, el menor no había ido a la escuela, sus padres estaban de viaje así que nadie se preocupaba en gran manera por aquel ‘berrinche’ que le había agarrado al chico, claro que JungHee sabía que aquello no era un simple capricho porque ya se comenzaba a rumorar en la escuela lo del rompimiento de los dos chicos, todos lo habían notado desde días antes de que aquello pasase, tal vez el único que no había querido verlo había sido Changmin, y las ganas de golpear a todos se incrementaban cuando escuchaba a esas personas estúpidas diciendo cosas sin sentido como que, Changmin le había engañado o que YunHo lo había hecho, cosas como que Changmin no merecía a YunHo ya que el chico era demasiado para un niño como él… Nada más que gente sin corazón… pensaba el chico.

JungHee intentaba llegar pronto a casa para así corroborar que su primo se encontraba en perfectas condiciones y no podía evitar que su pecho doliera intensamente al verlo en aquella cama sollozando o simplemente mirando a la nada, el chico estaba en otro mundo y el otro chico temía que algo malo le pasase. Ese día se había tardado un poco en la escuela, tenía unos asuntos que atender en el club deportivo y aunque no quisiese debía de quedarse, después de terminar con aquello decidió regresar a casa, pero se encontró con algunos amigos que hacia mucho no veía, así que sin pensarlo las horas habían pasado rápidamente hasta que se dio cuenta que el sol ya se había metido y daban mas de las 9 de la noche, así que sin esperar más se dirigió a la mansión de los Shim.

Todo hubiera estado bien a no ser de aquel gran ruido que escucho en el segundo piso, algunas de las sirvientas bajaban las escaleras apresuradas mientras que la ama de llaves intentaba llamar a los padres del menor. JungHee se apresuro a subir hasta donde se escuchaba el ruido, tal parecía que aquella conmoción venia del estudio de su tío, así que esperando calmar a los empleados del lugar, les pidió que lo dejaran encargarse del moreno.

-¿Changmin? –pregunto el chico mientras abría la puerta de aquel lugar
-dije que me dejaran solo –grito el chico aventando nuevamente otro florero a la puerta
-¿Qué demonios estás haciendo, Changmin? –y es que había una botella de vino en el suelo casi vacía, aunque podía darse cuenta que también había parte de aquel liquido en el piso de aquella habitación
-¿Qué haces aquí? LARGATE… -decía molesto al ver la cara del joven, nunca le había caído bien y en el estado en el que se encontraba las cosas estaban aun peor
-no me ire –su voz sonaba decidida y sin esperar más el chico camino adentro del lugar, cerrando la puerta detrás de él –Changmin tienes que calmarte –pero a cambio solo logro que el chico comenzara a aventar cosas sin importarle lastimarlo o no, el cual sin ningún problema esquivo
-QUE TU NO ENTIENDES… TE ESTOY DICIENDO QUE… -pero el lugar ya casi estaba completamente vacío, todas las cosas que podía tomar ya habían sido arrogadas
-no me iré, Changmin –esta vez su voz sonaba relajada, intentaba calmar al chico no hacerlo enojar mas, así que muy lentamente iba acercándose al moreno
-no te acerques… -y no entendía la razón de porque su cuerpo comenzaba a retroceder intentando esconderse de aquel joven que poco a poco se acercaba a el
-ven… vamos Changmin… acércate –decía intentando abrazar al joven para así calmarlo y poder llevarlo a su habitación
-… - así el menor fue acercándose al otro chico con los pasos algo torpes por la cantidad de alcohol que había bebido
-así es, Min… -dijo esta vez ya teniendo al moreno entre sus brazos y sin esperarlo comenzó a acariciarle el cabello
-… -el menor levanto el rostro levemente para así poder ver al otro chico directamente a los ojos, pero en lugar de eso lo único que logro ver fueron los labios de aquel chico, un my extraño cosquilleo comenzó a formarse en su estomago y no era por lo borracho que se encontraba, era otra cosa muy extraña, algo que… algo que encontraba muy similar a cuando estaba con YunHo
-escucha, Min –el chico comenzó a hablar sin darse cuenta que aquellos ojos no dejaban de ver sus y porque no decirlo, tentadores labios
-jung… Hee… -susurro el chico llamando la atención del mayor de los chicos
-Min…
-… -y unos cuentos segundos fueron suficientes para que el menor levantara su cuerpo levemente colocando su rostro frente al otro -¿Por qué eres tan bueno conmigo? –dijo aun con la voz algo incoherente
-porque… porque tú eres muy especial para mí, Changmin… tu eres… -pero las palabras se quedaron ahí cuando los labios temblorosos del menor se posaron en los suyos más que asustando, sorprendiendo al mayor

El aroma a alcohol fue invadiendo sus sentidos, pero a la vez sentía la tibieza de aquellos labios que comenzaban a quemar los propios, sentía que debía de detener aquello pero, aquellos labios eran tan deliciosos que al sentir la lengua del pequeño acariciando sus labios no pudo evitar abrir estos para dejar que la lengua del moreno explorara su cavidad. Las manos del más pequeño habían llegado hasta el cuello del otro haciendo que aquel beso fuese más profundo y apasionado, JungHee estaba completamente fascinado con aquel acto, sin muestra de resistencia por parte del pequeño bajo sus manos hasta llegar a la cadera del chico para así atraer sus cuerpos a un toque más intimo.

-ahm… -se escucho un gemido de parte del moreno al sentir como su ahora caliente miembro era restregado con el sexo del otro chico –ahhm…

Aquellos sonidos eran por demás excitantes, el cuerpo del mayor estaba despertando casi involuntariamente, pero para ese entonces era demasiado tarde, ya que el menor se encontraba acariciando su semidespierta erección por encima de aquellos estúpidos pantalones, que en aquel momento odiaba con todas sus fuerzas.

-hhm… Changmin… -el menor estaba siendo demasiado atrevido, su lengua se encontraba devorando el cuello del mayor y aquellas manos traviesas intentaban rápidamente quitar todas aquellas ropas de ese bien formado cuerpo
-quítame la ropa –y apenas podía entender lo que trataba de decirle ya que aquella voz agitada era tan poco clara –tócame… ahmm… vamos, tócame… -y al momento de llegar aquellas palabras a sus oídos el chico comenzó a hacer lo que el menor le había pedido

Cada vez que sus manos tocaban la caliente piel del moreno, este no podía más que gemir sintiendo el gran placer que aquellas manos le provocaban. Entonces aquella voz que le decía que Changmin se encontraba en un estado de ebriedad y que de seguro no sabía lo que estaba haciendo, todo aquello se iba a la fregada cuando aquel chico succionaba su sensible piel dejando aquellas rojizas marcas en cualquier lugar a su alcance.

Pronto su pecho había quedado completamente desnudo dejando así al menor de los chicos explorar aquel lugar con más libertad, las caricias del moreno eran desesperadas pero a la vez eran tan placenteras que lograban aquella excitación en el cuerpo del mayor y aquellas ganas por no dejar que Changmin hiciese aquel trabajo solo. Entonces sus manos comenzaron a jalar la camisa del más chico rasgándola sin preocuparse de nada mas, lo único que quería era explorar aquella deliciosa piel hasta dejarla completamente mojada.

Pasaron minutos de estarse desnudando cuando los dos chicos ya estaban sin ni una sola prenda sobre sus cuerpos, a pesar de eso el mayor no había podido apreciar debidamente el cuerpo del más chico, ya que este no quería ni despegarse un segundo de su caliente miembro. La fricción que sus sexos ejercían era tan satisfactoria que el moreno se dejaba hacer por completo de aquellas manos que lo tocaban con devoción, procurando no dejar ni un solo lugar sin besar y lamer, ni un solo lugar escapaba de sus lujuriosas manos. Indispuesto a seguir sin conocer ese hermoso cuerpo, el mayor de los chicos separo a Changmin un poco de el obteniendo algunas quejas por parte del menor, eso no importaba, lo único que quería era conocer y grabar cada una de aquellas líneas que formaban aquella hermosa figura. Changmin se notaba caliente, algunas gotas de sudor bajaban por su cuerpo asiendo de aquella escena algo por demás sensual y erótico. Entonces al sentirse completamente duro el mayor de los chicos comenzó a recostar al otro en aquel sofá en el cual sus cuerpos cabían a la perfección.

-eres hermoso… -susurro el chico al ver aquel cuerpo temblar mientras su boca permanecía ligeramente abierta gimiendo y jadeando ante los pasados toques
-¿te gusta? –dijo mientras tomaba su caliente miembro en su mano y se acariciaba logrando aquella fricción que provocaba el masturbarte –tómame… -y aquel ‘haz lo que quieras conmigo’ se quedo en el aire cuando sintió la boca del mayor lamiendo su mandíbula bajando poco a poco por su pecho, lamiendo su ombligo y mirando fijamente aquel miembro que seguía siendo acariciado levemente por la mano traviesa del menor
-yo lo haré –dijo quitando la mano del moreno y llevando aquel delicioso pedazo de carne a su boca, porque aunque nunca le hubiese hecho aquello a alguien más, el sabia a la perfección cuales eran los mejores lugares para tocar –yo te hare sentir bien –dijo en el momento en el cual su boca se separo de aquel delicioso sexo

Las lamidas comenzaron despacio, el chico intentaba acostumbrar al menor a aquella sensación placentera que recorría su sexo, invadiendo todo el cuerpo del chico. Sus piernas se encontraban contraídas y el menor no dejaba de cruzar los dedos de sus pies cuando cada lamida le provocaba aquellos sonoros gemidos. El mayor de los chicos agradecía que aquel lugar fuera altamente seguro porque si no fuera así estaba seguro que los empleados del lugar ya lo hubiesen escuchado.

Sus manos tocaban las piernas del menor haciendo que su piel se erizara con cada uno de aquellos toques, su boca al poco tiempo se lleno por completo de aquella embriagadora semilla que ya comenzaba a salir del cuerpo del moreno. Entonces sintió como las manos del menor eran colocadas en su cabeza y como estas lo empujaban, para que así pudiera hacer el trabajo más rápidamente; no le iba a negar nada al chico, así que sin esperarlo comenzó a mover su cabeza más rápidamente haciendo de aquel un ritmo por demás desenfrenado y placentero. El sexo de Changmin se movía casi como si este tuviera vida y el no podía más que probar aquel ya bien mojado y delicioso pedazo de carne.

-ahm… mmh… hmm… ahm… -gemía sin control al sentir aquellas lamidas tan placenteras

La sensación era completamente desconocida para el chico, no es que nunca se hubiese masturbado, pero aquello era otra cosa, sentir la lengua de su primo sobre su sexo era algo que no podía seguir aguantando, sentía que llegaría rápidamente al clímax si las cosas seguían de aquella manera. Solo tardo unos minutos más antes de venirse en la húmeda boca de su ‘adorado’ primo.
El mayor de los chicos sintió aquel líquido llenar su boca y derramarse de esta, dejando parte de sus labios sucios. Rápidamente y sin querer que aquel liquido se derramara mas sobre su cuello, el mayor de los chicos trago todo lo que pudo, lamiendo lo que quedaba en la comisura de sus labios. Dejándolo sorprendido, el menor de los chicos aun con el cuerpo temblando, jalo al mayor hasta besarlo y así probar de aquello que el otro tragaba tan entretenidamente.

-sabe extraño –dijo después de separar aquellos labios de los suyos
-ese eres tú, Min –sonrió al ver la cara tan tierna que ponía el chico cuando probaba de su propio semen
-me dejaras probar el tuyo… -¿Por qué tenía que ser tan endemoniadamente sexy? Se preguntaba el mayor al ver como aquel chico comenzaba a bajar su mano hasta llevarla a su sexo
-claro… -susurro al sentir los nervios volviendo a su cuerpo

El menor no se detenía ni un solo segundo, estaba tan ansioso que rápidamente ya se encontraba frente aquel miembro duro y erecto que pedía a gritos ser atendido. Su lengua comenzó a temblar una o dos veces antes de poder tocar aquel pedazo de carne que tenía un sabor por demás extraño; era parecido a lo que había probado con el último beso que le dio a JungHee.

-ahmm… -se escuchaba de la garganta del menor que no dejaba de probar aquello como si de un dulce se tratara –sabe bien… -fue lo único que pudo pronunciar rápidamente cuando su cabeza se acomodo en una posición más cómoda
-ahhmmm… Changmin… hmm… -y al escuchar los gemidos que podía provocar en aquel cuerpo, el menor comenzó a lamer con más fuerza llevando al chico a un mundo de completo placer

Al igual que el menor, el otro chico no pudo soportar mucho antes de venirse y derramar toda su semilla en la boca del moreno. Changmin trago de aquello como su primo y al igual que él, le dio a probar de aquella salada esencia.

-me gusto más la tuya –se atrevió a decir
-a mi me gusto mas esta… -sonreía viendo como el chico aun temblaba por el pasado orgasmo

Unos cuentos besos fueron suficientes para que los chicos volvieran a tomar aquel ritmo apasionado de hacia unos segundos. Pocas caricias fueron suficientes para que los dos chicos volvieran a ponerse calientes y para que sus miembros volvieran a despertar inevitablemente al sentir las manos del otro sobre aquel pedazo de carne.

-Changmin… -susurraba el mayor en el oído del otro chico
-hazlo –dijo el moreno al saber lo que el chico trataba de decir
-pero, Changmin…
-por favor… si no lo haces te odiare toda mi vida –amenazo el chico retirando las manos del joven que se encontraban aun en su miembro
-no… no quiero que… -porque de repente recordaba que el chico había estado tomando y lo que le había pasado con su ex-novio
-por favor… solo hazlo…

Eso fue suficiente para que el mayor comenzara a besar el cuello del otro chico volviendo a acomodarlo en aquel sillón. No era necesario que el chico volviese a tocar al joven, este estaba tan caliente que lo único que quería era hacer suyo a ese hermoso cuerpo que gemía y jadeaba sin detenerse. Rápidamente comenzó a chupar unos de sus dedos hasta que estos estuvieron completamente húmedos listos para prepararlo sin contemplaciones, introdujo su dedo índice en la entrada del chico que rápidamente se tensaba al sentir aquello dentro de el, un segundo dedo entro en él cuando el mayor se estaba acomodando en la entrada del moreno dispuesto a adentrar su miembro en aquella cavidad.

-ahm… date prisa… -pidió el chico más que agitado
-espera –decía mientras se acomodaba en el lugar exacto para así penetrar al chico sin ningún impedimento
-AHHMMM… -se escucho un gemido cuando el chico se adentro en aquella caliente entrada
-hhmm… -gimió de igual forma al sentir aquel calor que le provocaba aquella pequeña cavidad

Los dos se encontraban por demás mojados, sus miembros estaban envueltos en aquel semen casi invisible y aquello les ayudaba a los dos a hacer de aquel acto algo mas fácil y rápido. El mimbro de JungHee entro rápidamente en aquella cavidad ya que su sexo estaba lubricado con su propio semen.

-ahh… Jung… Hee… duele –pronuncio el menor sintiendo aquel gran pedazo de carne en su pequeño agujero –duele mucho… ahhmm… -se quejaba con el ceño fruncido
-¿Qué puedo…? –se lamentaba el mayor al ver el rostro de su primo, se veía muy adolorido
-ahhh… -seguía quejándose
-Changmin…
-muévete… -pidió a tan solo segundos de que aquel joven hiciera la intromisión
-pero…
-ya estoy bien… -dijo mintiendo en realidad…

El chico movió su cuerpo ligeramente hacia atrás logrando que su miembro saliese de Changmin casi completamente, mientras que el otro se mordía el labio inferior tratando de no dejar salir aquellos gritos de dolor que moría por expresar. Igual de lento, el chico volvió a empujar su cuerpo para así volver a introducirse en el chico que inconscientemente cerraba los ojos intentando contener las lágrimas que ya habían salido mojando sus sonrojadas mejillas.
Y llego la segunda embestida, y la tercera… en pocos minutos el dolor que aquel prominente sexo le provocaba iba desapareciendo cambiando a un extraño placer que invadía todo su trasero y vientre recorriendo sus piernas e incluso llegando a sus brazos. En un momento el mayor de los chicos comenzó a moverse más rítmicamente provocando ahora gemidos en Changmin. El menor sentía el miembro de JungHee salir y entrar de su entrada a una velocidad no muy apresurada, llegando hasta los rincones más profundos de su ser.

-ahhmm… hm… ahh… hmm… -gemía mientras su cuerpo se movía conforme aquel sexo entraba y salía de su interior
-Changmin… -gemía de igual manera sintiendo aquellos espasmos que lo aturdían



Los minutos fueron pasando mientras aquellos chicos se quitaban la vida mutuamente con el mejor sexo que alguna vez uno de ellos pudiese experimentar, incluso pensamientos como si así hubiese sido con YunHo llegaban a la mente del pequeño. La sensación de estar en aquel lugar, con su primo, haciendo aquello tan íntimo era algo que le proporcionaba una lujuria indescriptible.

-ahh… hmm… hha… mmh… -seguía gimiendo cuando sentía como aquella sensación que había experimentado minutos antes comenzaba a abordar su cuerpo, estaba seguro que en pocos minutos llegaría y quería que aquel chico le proporcionara la mayor cantidad de placer

El moreno comenzó a tocar su sexo que seguía sin atenciones en ese momento, JungHee entendió al momento lo que el pequeño trataba de decirle y sin más tomo el miembro de su primo entre su mano masajeándolo y moviéndolo al mismo ritmo que sus embestidas, las cuales ahora eran prácticamente frenéticas.

Poco después los dos chicos llegaron al clímax al mismo tiempo, derramándose entre jadeos, gemidos, sudor y el cuerpo de aquella persona. Los dos se desparramaron en aquel sofá, descansando junto al cuerpo del otro que seguía temblando e intentando recuperarse del pasado y por demás placentero orgasmo.

Y casi como si de un castigo o algo para que su culpa incrementara, el mayor de los chicos noto como algo de sangre bajaba por su sexo dándole a entender que aquella era de Changmin y que el muy descaradamente había tomado la virginidad de su enojón primo. Pero no tenía sentido atormentarse con algo que ya había pasado, los dos chicos cayeron rendidos en un sueño muy profundo.

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La mañana había llegado y los dos chicos seguían durmiendo en aquel mundo donde nada podía molestarles, los empleados del lugar se habían retirado a sus labores aquella tarde cuando creyeron que las cosas se habían tranquilizado ya que nada se escuchaba desde el otro lado de aquella bien reforzada puerta.

JungHee comenzó a mover su cuerpo adolorido por la incomoda posición en la que había dormido, aquel sofá apenas si podía mantener a una persona y ellos estaban ahí descansando abrazados con sus cuerpos completamente desnudos y algo sucios por toda aquella sustancia que había caído en ellos la noche anterior. Al abrir sus ojos se encontró con el rostro del menor, seguía tan hermoso y perfecto como siempre, quiso despertarlo en ese momento pero la duda comenzó a invadirlo, que le diría al pequeño, solo esperaba que el chico recordara lo que había pasado entre ellos, ya que por el licor que seguía tirado en el piso podía creer que el moreno lo había hecho inconscientemente.

-Changmin… -respiro profundo antes de llamar al chico para que este abriera los ojos -despierta… -y aun con flojera, el chico comenzó a abrir sus ojos viendo el rostro de su primo que lo veía algo preocupado
-Jung… Hee… -pronuncio el chico –que… -pero como de alguna clase de arma, miles de imágenes comenzaron a llegar a su mente, las caricias y besos, las suplicas y todas las cosas penosas que le había dicho a aquel chico, a su primo… -ah… -intentaba controlarse y no caerse de aquel lugar, estaba tan impresionado de lo que había hecho, porque según recuerda, el había sido el causante de todo aquello y podía sentir aun aquel sabor en su boca…
-Changmin… yo…
-… donde… -decía mirando a todos lados buscando algo entre todas aquellas cosas tiradas –mi ropa… -y ahí estaba enredada entre la ropa del mayor

El chico comenzó a vestir su cuerpo rápidamente… estaba tan confundido que no sabía cómo actuar ante aquello. Entonces sintió como algo se encajaba en su pie haciendo que cayera al piso al momento. JungHee se levanto de donde estaba rápidamente importándole muy poco su desnudez y rápidamente ayudo al otro a ver lo que le había pasado, era un vidrio que se había enterrado en su piel, pero afortunadamente era muy pequeño.

-ten cuidado… -dijo sin mirar al chico a los ojos, estaba tan avergonzado por su acto pasado

Y sin ni una sola explicación, el moreno comenzó a llorar fuertemente, ¿Por qué el otro era tan bueno con él? Se sentía tan extraño, él sabía que JungHee había caído ante sus encantos, porque él lo había enredado la noche pasada, todo aquello había sido su culpa y no podía molestarse con el otro.

-perdón… -sollozaba
-solo es un vidrio Changmin, no te paso nada… mira… -intentando que el chico viera la herida que ya había dejado de sangrar
-perdón… -volvió a repetir –soy de lo peor… -en ese momento el otro chico entendió a lo que se refería el chico…
-Changmin… escucha, lo que paso, paso por mi culpa, tú estabas un poco mal, yo debí de detenerme pero…
-pero yo no te deje… -le interrumpió –si yo no te hubiera dicho y… -recordando aquellos toques y besos que le había dado –todo fue mi culpa… soy un, soy un…
-un niño muy lindo… -sonrió al ver el rostro del chico –como ese niño pudo haber hecho todo aquello –el menor se pregunto si quería hacerlo sentir mejor, porque con aquello solo lo empeoraba
-perdón…
-yo no me arrepiento, Changmin… -el menor sorprendido volteo a verlo –por favor… por favor, Min… déjame curar este corazón tan maravilloso que tienes –sus manos comenzaron a tocar el pecho del chico en el lugar que se encontraba aquel órgano tan importante –déjame recompensar todas esas lagrimas…
-¿Qué estás diciendo? –Pregunto algo dudoso el menor –tu…
-yo… te amo… -soltó esperando la reacción del otro chico
-… -el chico se había quedado sin movimiento, su primo debía de estar bromeando, no podía decir algo como aquello
-por favor… solo permíteme reunir esos trozos de tu corazón…
-Jung…Hee… -susurro al ver aquellos ojos… aquella, ¿bondad?
-te amo, Min… yo se que tu no sientes lo mismo, pero… por favor, déjame intentarlo…

“DAME UNA OPORTUNIDAD…”

------

-¿Por qué no tenemos una cita, Min? –sonreía el chico mientras abrazaba a su primo
-¿cita?... ¿A dónde?...
-vamos a la playa…
-pero… recuerda que mis tíos llegaran de sus vacaciones, además mis padres también llegaran pronto –decía el chico resistiendose a aquella boca que no dejaba de morder y lamer su oído
-entonces vamos al parque… o al mall… o a un karaoke, o a un restaurant… no importa, solo tengamos una cita…
-…
-…
-ok, vamos al parque de diversiones…
-OK!! Let’s go!!

FIN…

4 Comentarios:

  1. SHECCID1/04/2010

    QUE BUENO QUE MIN ENCONTRO EL AMOR AUNQUE FUERA CON SU PRIMO ASHHH YUNHO TONTO ME DIO CORAJE CUANDO RECHASO A MIN PERO LO BUENO ES UE MIN TERMINO FELIZ GRACIAS POR EL FIC.

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  2. pero no entendi, bueno si entendi pero m quedo duda, Yunho rechazo a min x q no se entrego a el cuando el quiso?
    Pobre min, llorar tanto es muy doloroso, lo bueno s q estaba su primo, si no no se que habria sido de min

    ResponderEliminar
  3. Anónimo4/05/2011

    me dolio cuando min llora
    pero encontro el amor al final no importa q sea kon su primo
    me gusto bastant este fic

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