Love...For Real? cap 2

Su corazón dio un vuelco. Un doloroso e incómodo vuelco. YunHo quería hacer algo, lo que sea: dejar de mirar, salir de la habitación, decirles algo, pedir una explicación, gritar… pero no pudo más que hacer lo que menos quería seguir haciendo: mirar.

Desde la entrada de la habitación se veía claramente como la cama de JunSu estaba siendo ocupada por más de una persona, y no le costó nada distinguir a JunSu sobre Jae, besándolo. Las mantas no dejaban ver nada más, así que realmente no sabía si lo estaban haciendo o no, pero… A quien trataba de engañar? Lo tenía en frente, imposible de ignorar.

Su mirada no quería despegarse de la escena que tomaba lugar frente a él, a pesar de que le molestaba profundamente ver a JunSu y JaeJoong besándose. Sentía la imperante necesidad de apartarlos, como fuera, pues no soportaba que los labios de JunSu se posaran en los de Jae ni un segundo más.

Sin embargo no hizo nada. Solo se dio media vuelta y salió de la habitación.

ChangMin estaba en shock también. Era la escena más extraña, increíble e inesperada que había visto en toda su vida. Sin exagerar, era aún más shockeante que el primer video porno gay que vio por Internet una vez. Aún más que eso. Esto definitivamente no estaba dentro del plan. Que pasaba en la cabeza de JunSu!? En que estaba pensando?? Realmente le gustaba JaeJoong hyung?

El menor buscó la mirada de YooChun a su lado, y se encontró con que éste estaba tan perplejo cómo él.

Pero había algo más en su mirada, en su expresión. Decepción…?

Lo que fuera, no tenía cerebro para descifrarlo ahora.

JunSu y JaeJoong aún no se daban cuenta que no estaban solos, por lo que JunSu seguía degustando la boca del mayor, haciéndole emitir leves gemidos, a pesar de que seguía “dormido”, o más bien drogado.

Justo en el momento en que ChangMin iba a seguir a YunHo fuera de la habitación, la voz de YooChun se hizo escuchar por toda la habitación, aunque no le está hablando a él. Le habla a JunSu.

-Que crees que haces? –dice en un tono frío, muy raro en él.

Todos los movimientos por parte de JunSu se detienen de pronto, en el mismísimo instante que YooChun terminó de hablar.

Silencio.

Un silencio incómodo, sólo interrumpido por los jadeos que escapaban de los labios entreabiertos del mayor.

JunSu se volteó rápidamente, viendo la expresión de reproche y asombro en el rostro de Chun.

ChangMin sólo observaba, sintiendo la tensión en el aire. De verdad, él único que permanecía relajado era JaeJoong.

-YooChun… -balbuceó mirando con ojos muy abiertos, sus mejillas se sonrojaron aún más, ahora debido a la vergüenza. Al instante se separó de JaeJoong y se sentó en la cama, mirando insistentemente sus manos.

La situación era extraña. JunSu no sabía cómo explicar; él mismo no sabía muy bien cómo entender lo que había pasado, pero la frase “Dejarse Llevar” se le venía a la mente.

Sí, se había dejado llevar por la situación, por la curiosidad, y había descubierto algo preocupante: su cuerpo reaccionaba al estar con otro hombre también.

YooChun seguía observando, pidiendo una explicación con la mirada. Pero… una explicación por qué? Debía acaso JunSu darle alguna explicación? Sentía que sí; en el fondo se sentía traicionado. No sabía muy bien el por qué, pero no podía ver la situación como otra cosa que no fuera una traición.

JunSu se levantó de la cama y caminó lentamente, temerosamente hacia YooChun, quien de inmediato notó la erección de JunSu en sus bóxer, con cierto alivio de todas formas, al darse cuenta de que por lo menos no estaba desnudo. Al menos no había estado desnudo con JaeJoong.

En ese momento ChangMin dio media vuelta y salió de la habitación, de modo que YooChun, JunSu y JaeJoong quedaron solos.

-Que estabas pensando? –dijo Chun con voz firme, acercándose un poco a Su.

-No…No lo se…

-Si no lo sabes tú, entonces quien lo sabe, JunSu?!

-Lo … lo siento… Perdóname. Fue… no sé lo que fue… perdón…

Gruesas lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, sin poder evitarlas. Lloró en silencio, temblando, sus hombros contrayéndose en espasmos debido al llanto; hasta que de pronto sintió los cálidos brazos de YooChun rodearlo. Y, por alguna razón, el hecho de que lo abrazara lo hacía sentir aún más culpable, por lo que comenzó a llorar más amargamente.

Permanecieron en silencio un momento; silencio a veces interrumpido por los incoherentes balbuceos de Jae.

El llanto de JunSu poco a poco fue disminuyendo, hasta que cesó por completo. Entonces YooChun se separó y secó las lágrimas de los ojos del menor, dedicándole una amable sonrisa.

-Ya… no llores más. Mañana hablaremos de esto, si quieres. Ahora debes dormir. –hizo una pausa, mirando la cama de JunSu aún ocupada por JaeJoong. Luego agregó, dudoso- JunSu…

-Lo sé… No voy a arruinar el plan ahora –contestó sonriendo levemente- Sé que aun tengo que dormir en la misma cama que Jae, pues aun tiene que creer que lo hicimos…

Ambos chicos parecían ya no tan seguros de querer seguir el plan, pero ya estaba empezado. Había que terminarlo, y terminarlo bien.

-Mañana hablaremos… -le dijo suavemente, palmeándole el hombro- Descansa, y no llores más.

Se volteó para salir de la habitación, pero JunSu lo detuvo, tomándole la mano. Lo miró con cara de confusión, viendo en los ojos de JunSu formarse nuevas lágrimas.

-Gracias, Chunnie… -le dijo de corazón, no pudiendo hablar más debido al nudo en su garganta.

-No tienes que agradecerme nada. Ve a dormir. Y pórtate bien.

Al decir esto último indicó a JaeJoong, con expresión de burla, lo que hizo que JunSu bajara el rostro avergonzado, pero también aliviado de que YooChun al menos se lo tomara con humor. Como uno de esos graciosos errores que a veces se cometen.

Antes de irse se acercó y depositó un beso en la frente del menor. Fue instinto, y sólo después de haberlo hecho se dio cuenta que los chicos, por mejores amigos que fueran, generalmente no se daban besos en el rostro. Mejor dicho, no se besan.

JunSu no reaccionó de inmediato; de hecho, sólo después que YooChun reaccionara de su propia acción, saliera de la habitación, y cerrara la puerta tras de sí, el menor fue capaz de moverse.

Lo primero que pensó fue… No, no debería tener esos pensamientos acerca de su mejor amigo. Pero de verdad su primer pensamiento fue “Cómo sabrán los labios de YooChun?”. Besando a JaeJoong había descubierto que sus labios sabían dulce… Cómo serían los de Chun?

Al parecer el “incidente” había tenido sus consecuencias en su mente. Sentía que había descubierto un mundo nuevo, nuevas sensaciones que quería explorar… pero al mismo tiempo sentía culpa y remordimiento, pues comprendía muy bien que ese nuevo mundo era algo malo. Explorarlo era pecar, en todo el sentido de la palabra.

-Dios me perdone… -murmuró para sí mismo, cerrando los ojos y tocando el pendiente de cruz que llevaba colgando al cuello.

Apagó la luz y fue a acostarse a su cama, sólo que esta vez dándole la espalda a JaeJoong.


~~


En el living se encontraba YunHo, vaso de agua en una mano, control remoto en la otra, cambiando los canales frenéticamente. Su expresión no era de agrado, ni mucho menos. Tenía el ceño fruncido, los labios fuertemente cerrados y por sus ojos echaba llamas.

ChangMin llegó también al living, y no sabía si reír o preocuparse ante la expresión del mayor; luego de unos minutos decidió que sería mejor fingir que nada pasaba, a ver si YunHo se decidía a empezar el tema.

La mente del líder daba mil vueltas. Apenas notó que ChangMin había llegado, y se había sentado a su lado en el sofá. No tenía ganas de hablar. Sentía que si alguien le hablaba del “incidente” no dudaría en lanzar un golpe. A quien fuera.

Ignoró magistralmente al menor, pretendiendo mirar muy concentrado un canal de deportes, aunque la verdad lo único que veía era la imagen de dos de sus amigos besándose en una cama. Y esa imagen parecía no querer abandonar su cerebro, parecía querer quedarse en su subconsciente atormentándolo para siempre.

Por qué le había impactado tanto?

Podría ser porque no es común ver, de pronto, a dos de tus amigos HOMBRES besándose y haciendo quien sabe que cosa…

Podría ser porque le preocupaba que pasaría si las fans se enteraran.

Podría ser incluso que fuera homofóbico, aunque en realidad no creía mucho en esta opción, ya que la escena no le había desagradado, sino más bien, le había impactado profundamente.

O podría ser…

No.

YunHo bloqueó esa vocecita en su mente, con toda la fuerza de voluntad que tenía. Esa vocecita molesta que, de un tiempo hasta ahora, le daba ideas extrañas y trataba de convencerlo de cosas que nunca serían ciertas. NUNCA.

No había modo en que él, Jeong YunHo, fuera gay.

Si ellos lo son, por qué tú no?

Porque no. Simplemente porque una de las razones por las que vivía, por las que trabajaba tan arduamente, es porque algún día quería tener una familia: una linda esposa y muchos hijos. Y ser gay no concordaba con ese sueño.

Te estás engañando…

No. No era ningún engaño. Era sólo la verdad. Su sueño, desde niño.

Los sueños cambian.

No el de Jeong YunHo. No.

Cerró los ojos con fuerza, intentando alejar esos pensamientos de su mente, no quería pensar en eso, porque le era molesto. Muy molesto. No estaba de humor para cuestionarse su preferencia sexual ahora.

Miró a su lado, adonde debía estar ChangMin, pero sin encontrarlo. Cuando se había ido? Miró la hora en su reloj. Tres de la mañana. Tanto tiempo había estado sentado, haciendo nada, pensando estupideces? Increíble…

Se levantó del sofá y caminó hacia la habitación que compartía con JunSu y ChangMin. Las luces adentro estaban apagadas, no se escuchaba ningún ruido. Pero aún así, luego de pensarlo otros 15 minutos parado fuera de la habitación, decidió que no podía, no podía dormir en la misma habitación que JaeJoong y JunSu. Simplemente no.

Se dio la vuelta y entró a la habitación que compartía JaeJoong y YooChun, encontrando la luz prendida, y Chun acostado en su cama, mirando el techo.

-Hyung? Tan tarde despierto? Pasa algo? –frunció el ceño, pensando lo peor: tal vez JunSu y JaeJoong de nuevo…

-No quiero dormir en esa habitación hoy. Puedo dormir aquí? –dijo el líder sentándose en la cama de Jae.

YooChun abrió mucho los ojos, buscando rápidamente las palabras para preguntar. Pero YunHo notó la expresión de Chun, y se apresuró a aclarar.

-No, no están haciendo nada, por lo que pude notar. Pero de todas formas no quiero dormir ahí…

Ambos se callaron por un momento. YooChun miró analíticamente a su hyung, intentando notar en él algún rastro de que el plan estaba funcionando, pero sin notar nada. Acaso se habían equivocado al suponer que a YunHo le gustaba JaeJoong? Si era así, entonces estarían cometiendo un gran, gran error… y todo esto sería por nada.

-Bastante… raro, no? –dijo YooChun, empezando la conversación. Esa conversación que YunHo NO quería tener.

-Mmm… -asintió, quitándose los pantalones y camiseta y arrojándolos al suelo, para luego meterse bajo las mantas en la cama de JaeJoong.

-Nunca me lo habría esperado… es decir, JunSu y JaeJoong? Jamás… antes hubiera sospechado de JaeJoong y tú.

YooChun esperaba con éste comentario alguna respuesta, algo que le indicara que no estaban cometiendo un error con el plan. Y la respuesta llegó. Por suerte.

Un leve rubor subió a las mejillas del líder, quien trató de ocultarlo cubriéndose con las mantas. Sin embargo pronto descubrió que cada centímetro de la cama de JaeJoong estaba, como era de esperarse, inundaba del aroma de Jae. Un aroma que volvía loco a YunHo.

-Hyung…? Ya te dormiste? –preguntó YooChun, conteniéndose para no reír: sabía que YunHo lo estaba ignorando a propósito.

-No, YooChun, aun estoy despierto –al ver que Chun aun esperaba una respuesta verbal a su pregunta, se decidió, de mala gana, a contestar- Si, la verdad fue bastante shockeante. Tampoco me lo hubiera imaginado.

-Al principio me pareció un poco… molesto, entiendes? Como… no sé, raro. Pero ahora creo que es bastante sexy…

El menor dijo esto porque de verdad lo pensaba. Aunque aún sentía algo de molestia cuando pensaba en ello, le había parecido bastante sexy. De verdad no creyó que ver a dos chicos besándose fuera tan sexy.

-Lo sé, fue raro. Ojala no se repita – contestó con voz firme.

-Pero… y si se gustan? Y si de ahora son una pareja y—

-No –fue interrumpido por YunHo- No, eso no. A JaeJoong no le puede gustar JunSu… -su tono de voz era demasiado alterado, parecía que no quisiera creer que JunSu y JaeJoong pudieran gustarse, por lo que se apresuró a corregir- No pueden tener una relación así, el manager no lo permitiría.

-Tienes razón, pero…

-Perdón, Chun… estoy cansado, quiero dormir… -le interrumpió de nuevo.

-No te preocupes, hyung. Descansa –dijo el menor sonriéndole, muy satisfecho con la reacción del líder ante sus preguntas.

YunHo se cubrió casi completamente con las mantas, intentando alejar cualquier tipo de pensamientos de su mente, pero al momento en que intentó quedarse dormido, el aroma de JaeJoong impregnado en toda la cama lo distrajo. Ese olor, mezcla de shampoo de fresas y jabón de menta… ese aroma que bastaba sólo olerlo por un minuto para que se quedara en sus sentidos todo el día. Ese aroma que lo atormentaba por las noches; el aroma de un chico que le hacía perder la razón, olvidarlo todo, incluso sus responsabilidades. Un chico que conoció por casualidad en sus días de trainee de SM, que, cuando lo vio, supo que era especial. Ese chico que parecía muy tímido, pero que poco a poco fue ganando confianza, hasta convertirse en su mejor amigo. JaeJoong, su mejor amigo…

Cuando había empezado todo? Cuando comenzó a sentirse extraño cada vez que estaba solo con JaeJoong; cada vez que tenían que cambiarse de ropa juntos…? Cuando…?

Parecía una eternidad. Y realmente no importaba cuando. No. Lo que importaba era que la presencia de JaeJoong era fatal para él. Producía cosas que jamás había sentido antes. Cosas que no debía sentir.

Las mantas también… impregnadas a shampoo de fresas… Todo… alrededor…

-YunHo…

Al abrir los ojos se encuentra frente a frente con JaeJoong. Aún estando a unos 2 metros de él, el aroma a fresas se sentía intensamente.

-Yunnie…

…

Abrió los ojos de nuevo, y ahora veía claramente a JunSu sobre JaeJoong, en una habitación desconocida para él, ambos gimiendo desesperados. Sus gemidos parecían haber incrementado 5, 10, 100 veces, y llegaban a sus oídos tan nítidos como si no sufrieran ningún tipo de difusión por el ambiente.

-Ahhh… AHHHH…

El cuerpo de JaeJoong se arqueaba de placer.

-Ahhhh…

Sus mejillas estaban teñidas de rojo…

-Mmmm… ahhh…

Sus labios entreabiertos dejaban escapar esos sonidos eróticos que inundaban la habitación.

Los únicos sonidos de la habitación.

-YunHo… ahhh… Mmmm…

Cuando volvió a mirar, JaeJoong gemía bajo su cuerpo.

Sus caderas se movían frenéticas, penetrando el interior del mayor. Se sentía extasiado; con cada gemido que salía de la boca de JaeJoong, su deseo crecía más y más.

Las manos de JaeJoong recorrían toda su espalda ardientemente, sus caderas se movían al compás de las embestidas, sus labios buscaron la piel de su cuello, lamiendo con lujuria; su cuerpo expedía calor y aroma a fresas y menta…

-Mmmm… Jae…Joong…


Despertó de pronto, sintiendo su cuerpo muy caliente. Miró alrededor, la habitación oscura; no era su habitación….

Entonces recordó los eventos de la noche anterior. Miró la hora en su reloj, 6 de la mañana.

Cerró los ojos fuertemente y exhaló aire, frustrado.

Sexualmente frustrado.

Se sentía patético, débil; débil ante JaeJoong.

Aún con los ojos cerrados, rememoró el sueño. Todo se había sentido tan real… era tan tangible. Y era uno de los tantos sueños que le atormentaban en las noches, y por los cuales a veces le daba miedo cerrar los ojos e ir a dormir, pues sabía que muy seguramente soñaría con cosas con las que no debería soñar.

Con algo de miedo y vergüenza llevó su mano hasta la parte baja de su cuerpo, sintiendo su miembro completamente erguido.

Demonios…

Lo último que necesitaba ahora era una erección. Y lo peor de todo es que sabía que, si intentaba dormir de nuevo, soñaría lo mismo, con mejor razón ahora que dormía en la cama de JaeJoong.

Cómo te gustaría dormir con JaeJoong y no sólo en la cama de JaeJoong

Esa maldita voz de nuevo…

Exasperado, frustrado y un poco deprimido se levantó de la cama, dirigiéndose directo al baño.

Una ducha fría es lo que necesitaba ahora.

Luego que salió, dentro, en la habitación, YooChun mordía la almohada para no reírse a carcajadas.

-Eres un genio, Park YooChun. Un genio… - se dijo a sí mismo, volviendo a acomodarse para dormir. Después de todo, quien tenía el “pequeño problema” y no podría dormir era YunHo, no él.

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