Love...For Real? cap 7

Los preparativos para la boda se habían llevado a cabo durante varios días; era una ceremonia simple, nada muy costoso, por lo que no necesitaron mucho tiempo para tener todo listo. JaeJoong se había ofrecido varias veces a ayudar, pero siempre recibía la misma negativa por parte de su familia. Él era un invitado, así que no tenía por qué preocuparse de preparativos.

Varias veces pensó si debía ir solo o con los chicos. Por supuesto a su hermana no le molestaría si llevaba a los demás, él problema era si todos querrían ir. Ya lo había hablado con ChangMin, y no había problema, YooChun aceptó después de pensarlo un poco y JunSu le dijo que lo acompañaría adonde fuese. Pero YunHo… aún no se atrevía a hablar con él, por varias razones. Primero, aún debía estar enfadado por lo de la cena el otro día. Segundo, porque no sabía si hablar con YunHo fuera la mejor idea…

Por qué?

Porque ya habían pasado varios días desde que volvieron a Korea, y su enojo hacia el líder se había diluido día tras día, dando paso a una idea que le rondaba la mente: Hablar con YunHo y dejar que de su explicación.

Por más doloroso que le resultara, una parte de sí deseaba oír la explicación de YunHo, y quería profundamente creer que YunHo le quería, y solo deseaba estar con él.

Pero otra parte le decía que ya había sido suficiente humillación, y que era mejor no escuchar excusas.

Además estaba JunSu, que se había portado maravillosamente con él los últimos días. No podía decir que estaba enamorado de JunSu ni mucho menos, pero en sus besos sentía una dulzura que su corazón ansiaba fervientemente, y en sus acciones veía que lo único que deseaba era hacerlo feliz.

JaeJoong ya le había dicho muy sinceramente a JunSu que, a pesar de todo, su corazón aún seguía con el líder, y eso difícilmente iba a cambiar de un momento a otro, y la respuesta de JunSu siempre era la misma: “No te pido que me quieras. Sólo te pido que aceptes mi cariño”. Y ante eso no podía negarse.

Con la cabeza hecha un lío se acostó en su cama, mirando el techo. Necesitaba estar solo y pensar, aclarar sus ideas, tomar una decisión… pero no lograba realizar nada de eso.

Cerró los ojos con fuerza y se tapó la cara con ambos brazos, rememorando los eventos recientes, y escuchó vagamente como alguien entraba a la habitación, y segundos después el inconfundible aroma a YunHo llegaba a su nariz. Intentó ignorarlo y seguir en sus pensamientos, pero de un momento a otro sintió la cama hundirse un poco al tener más peso sobre ella, YunHo obviamente se había sentado en su cama a su lado. Ahora la pregunta era qué pretendía.

-Perdóname –fue lo único que dijo el líder, tomando una de las manos de JaeJoong en ña suya- Todo esto me supera… No se cómo afrontarlo

La sinceridad en las palabras de YunHo, así como la aflicción en su voz, tocaron el corazón del mayor, y pronto se encontró mirándolo con una expresión tan perdida como la que éste llevaba.

-Yo tampoco sé cómo, Yunnie-ah. Pero no por eso huyo como si nada hubiera pasado… -no había resentimiento en sus palabras, sino ansias de respuestas, y eso fue lo que animó al líder a hablar.

-Lo que pasó… fue demasiado para mí. Estábamos ebrios y todo, pero he pensado mucho en ello y creo que sobrios o no, terminaría sucediendo igual. Nada de lo que te diga va a ser excusa suficiente para enmendar el hecho de que me fui y te deje solo; como un cobarde huí de la situación como si fuera tan fácil borrar todo -tomó aire para continuar, notando la mirada atenta de JaeJoong- Descubrí que no puedo huir de esto, porque es más fuerte que yo. No sé que es, tal vez es amor, no sé… pero quiero averiguarlo contigo.

El mayor ahogó un jadeo de sorpresa, y su corazón comenzó a latir rápido en su pecho. La suave voz de YunHo resonando en sus oídos como si fuera una promesa de algo que su corazón anhelaba.

La mano libre de YunHo se posó suavemente en la mejilla del mayor, acariciándola como si su vida dependiera de ello, y JaeJoong ya no podía más. Lentamente se acercó al cuerpo del líder y apoyó su rostro en el pecho de éste; y como si le leyera la mente, YunHo rodeó su cuerpo con sus fuertes brazos.

-Quiero creerte…-comenzó diciendo el mayor con voz dolida…de verdad quiero creerte, YunHo, pero… de verdad no quiero sufrir más –una pausa en la que respiró profundo, captando el aroma de el perfume de YunHo- Necesito volver a confiar en ti…

Cada palabra de JaeJoong parecía presionar contra su pecho con una fuerza increíble. Se sentía basura; se sentía la peor persona del mundo por hacer sufrir a ese ser tan etéreo que tenía entre sus brazos.

-Perdóname… -dijo de nuevo, ésta vez ahogando sus palabras entre las hebras del cabello de su amigo.

-No necesitas pedirme perdón… no me sirven las palabras, Yunnie-ah… -sus ojos se tornaron vidriosos y un nudo en la garganta le obligó a tomarse un poco más de tiempo antes de continuar- Sólo me sirven los hechos…

Esa lágrima que pugnaba por salir y que tanto había tratado de reprimir por fin salió, rodando por su mejilla hasta caer al cobertor de la cama, luego de que JaeJoong se hubiera separado del cuerpo del líder para decir sus últimas palabras. YunHo observó todo esto con el corazón aún apretado, doliéndole cada fibra de su ser cuando el cuerpo de Jae se alejó del suyo.

Y tomando el ultimo atisbo de fuerza que le quedaba, el mayor salió de la habitación; no quería ceder, no quería simplemente olvidar… el miedo a sufrir de nuevo lo mismo era demasiado. Tenía que volver a confiar en las palabras de YunHo…


~~


La televisión estaba prendida en la sala más que nada para hacer ruido, pues nadie estaba prestándole atención. ChangMin estaba ocupado con su laptop en el comedor, y YooChun dormía tirado en el sofá. En cuanto a JunSu… para ser exactos estaba más que nada mirando la nada, sentado en la alfombra a unos pasos del dormido YooChun.

Todos los sucesos recientes le parecían una locura; y sus reacciones a éstos eran lo que mas le sorprendía. Nunca, en la vida se imaginó sentirse atraído por JaeJoong, y sin embargo aquí estaba, aparentemente en lo que se convertiría en una relación seria. La idea le hacía ponerse nervioso. Quería ver a Joongie contento, sonreír de nuevo, y sobretodo no permitir que YunHo lo dañara de nuevo.

YunHo… el sólo hecho de recordarlo le daba rabia. Cómo alguien podía siquiera pensar en dañar a JaeJoong? Lo peor de todo es que YunHo no sólo lo había pensado; lo había hecho.

JaeJoong era demasiado preciado, demasiado importante para él como para permitir que lo basurearan de esa forma. Si YunHo no sabía como hacerlo feliz, entonces que se alejara de él.

Éste tipo de pensamientos eran los que le sorprendían; nunca se consideró una persona posesiva, pero con JaeJoong sentía la necesidad de cuidarlo, de hacerlo sonreír, y de abrazarlo cuando quisiera llorar. Necesitaba sentir que estaba bien…

No era un deseo físico, aunque a veces tenía sus deslices y deseaba a JaeJoong más que como a un amigo; pero más que nada era un cariño más profundo.

Por un momento cerró los ojos, recordando lo suaves que los labios de JaeJoong se sentían contra los suyos… Quería probarlos en ese mismo instante…

Como por arte de magia JaeJoong apareció en el living, visiblemente afectado, y con pasos decididos se sentó junto a JunSu en la alfombra.

-Hyung…

-Abrázame, JunSu… -el menor obedeció inmediatamente, rodeando a Jae con sus brazos y acercando sus labios a la mejilla del otro para depositar un suave beso.

-No te preocupes, hyung… yo estoy contigo…

La camiseta de JunSu comenzó a mojarse con los sollozos de JaeJoong, y aunque éste trataba de reprimirlos, no podía. No quería amar tanto a YunHo, pero tampoco podía dejar de hacerlo…

Y JunSu… era tan tierno con él que le hacía sentirse culpable de amar a YunHo y no poderlo amar a él…

Una mano del menor subió hasta las suaves hebras del cabello de Jae, acariciándolas con paciencia, curvándolas entre sus dedos mientras esperaba que su amigo se calmase. El tiempo no le importaba, podía estar así un siglo si era necesario, con tal de que JaeJoong le mostrara una sonrisa.

YooChun de pronto despertó, escuchando la voz de JunSu cerca de donde él dormía. Al abrir perezosamente un ojo vio como JaeJoong y Su estaban abrazados, ambos sentados en el suelo. Y lo más importante: JaeJoong parecía estar llorando.

Rápidamente se levantó de su improvisada cama y se situó al lado de sus amigos, poniendo una mano sobre el hombro del mayor. Sus dedos se tocaron con los de JunSu una fracción de segundo, que pareció durar una eternidad. Ambos se miraron; no habían tenido oportunidad de hablar desde que… bueno, desde que llegaron del viaje. YooChun quería entender las razones de JunSu para estar con JaeJoong, pero realmente no entendía nada y fallaba cada vez que quería preguntarle. De verdad le gustaba JaeJoong?

Quería alegrarse por su amigo; después de todo esa noche en que había pasadoeso que había pasado entre ellos, era para ayudar a JunSu a darse cuenta si su atracción era hacia todos los hombres o solo hacia JaeJoong. Y si ya lo había descubierto él debería sentirse feliz por JunSu.

Sin embargo no lo estaba. No podía estar contento, y por más que buscaba el por qué, siempre terminaba con estúpidas razones que no convencían a nadie, menos a su mente.

La mirada de JunSu se desvió de nuevo a JaeJoong, y YooChun decidió mirar al mayor también.

Lo que sea que tenga que hablar con JunSu, ya lo haría después. Ahora tenían alguien a quien tratar de alegrar.

~~


El menor de los 5 cerró la llave del agua caliente, viendo como el vapor ya había invadido todo el baño. Estiró el brazo para alcanzar la toalla con la que se cubrió de la cintura hacia abajo, amarrándola firmemente a ella, y se miró en el espejo. No estaba 100& satisfecho con su imagen, a pesar de lo que los demás pudieran decir. No le gustaban sus labios, ni su cabello, pero intentaba no hacer mucho caso a eso, para no convertirse en un JaeJoong casi obsesionado con su imagen.

Unos leves golpecitos en la puerta del baño, y la inconfundible voz de YooChun diciéndole que se diera prisa, le hicieron finalmente abrir la puerta para salir.

Ahí estaba YooChun, vestido con la camiseta roñosa que usaba para dormir y solo un par de boxers. Su expresión de sueño no tenía precio.

-Buenos días… -dijo en un murmullo, pasando a ChangMin y entrando al baño.

-Buenos días, hyung -el menor se quedó mirándolo con diversión en la mirada. YooChun había tomado su cepillo de dientes e iba a tomar la pasta, pero en vez de eso tomó la espuma de afeitarse. ChangMin suprimió una carcajada.

-Qué me miras? -sin voltearse, el mayor puso la supuesta pasta dental en el cepillo y lo metió en su boca, sintiendo de inmediato el sabor desagradable.

Entonces Min no pudo aguantar la risa, y estalló afirmándose en la pared y sosteniendo con la otra mano la toalla alrededor de su cintura.

-Es que me gustas, hyung, por eso te miro –y así el menor se fue, riendo sin parar de la estupidez de su amigo, pero sabiendo que de todas maneras YooChun no se enfadaría con él.

-Buenos diasssss –le saludó JunSu con una sonrisa de oreja a oreja, él vestido también con su ropa de dormir, que consistía en un pijama con dibujos de delfines, regalo de las fans.

-Buenos días, JunSu hyung –ni siquiera sabía por qué se molestaba con las formalidades. La costumbre, quizás.

En el dormitorio YunHo aún estaba en su cama, al parecer durmiendo. Sin importarle mucho, se vistió para ir a desayunar, dejando al líder descansar. Después de todo, debió haber sido una noche dura para él…

Su estómago ya estaba haciendo ruidos extraños, y al ver la comida que preparaba JaeJoong creyó que hasta comenzaría a babear. JunSu estaba en un estado similar, abrazado a la cintura del mayor.

-No me dejas moverme, JunSu-ah~

.Perdón, Joongie~

‘Awww… que tierno…’ pensó el menor, con un poco de sarcasmo. Tal vez eran cosas de la edad, tal vez el hecho de ser menor le daba otra perspectiva de las cosas, pero a su parecer sus amigos se complicaban demasiado con las cosas.

Por qué?

Porque, a su parecer, YunHo y JaeJoong deberían dejar de lado el melodrama barato y juntarse de una vez, JunSu debería dejar de ver a JaeJoong como una princesita que no puede moverse sola siquiera, y YooChun… no, YooChun no tenía remedio ya…

ChangMin sonrió sólo con sus pensamientos. Le encantaba molestar a YooChun, casi tanto como le gustaba golpear a JaeJoong o comer su comida. YooChun era su compañero de meriendas nocturnas, la persona con la que podía bromear cuando estaba aburrido, con la que podía molestar a los demás, especialmente a JunSu, y con la que podía hablar de cosas relacionadas con el corazón.

Sin menospreciar, porque también hablaba mucho con JaeJoong y YunHo, pero ellos siempre parecían evadir ese tema. En cambio YooChun decía las cosas por su nombre, y no tenía miedo de hablar abiertamente con él. Lo que le gustaba de YooChun era que lo veía como un adulto, no como el bebe del grupo. Con él podía de verdad sentirse mayor, sentirse tratado como un igual.

-Tengo hambreeeee –JunSu habló con tono penoso, mirando con expresión hambrienta la comida.

-Anda a despertar a YunHo y cuando vuelvas estará todo listo, lo prometo.

JunSu dudó un momento, pero la sonrisa en los labios del mayor disipó cualquier duda, y contento como estaba caminó hasta la habitación, abriendo la puerta sin importarle si causaba mucho ruido.

-Hyung. Levántate, vamos a desayunar –YunHo no mostraba signos de querer moverse de su cama, así que JunSu se acercó más y le habó cerca del oído- DESAYUNO…

En cámara lenta el más joven vio como el líder abría los ojos, y una mirada de profundo resentimiento se fijaba en él. Para colmo, su cabeza le dolía; no acostumbraba llorar, pero la noche anterior no había podido evitarlo cuando las palabras de JaeJoong, su tono de voz dolido y su mirada se repitieron en su mente, por casi toda la noche. Y se habían repetido durante todas las noches, desde que tuvieron esa conversación, hace poco menos de una semana. Por eso, su cabeza dolía inmensamente, se sentía agotado. Por más que le daba vueltas al asunto, no sabía como demostrarle a su Joongie que no volvería a hacerlo sufrir…

Y todo se complicaba más aún teniendo a JunSu en medio, echándole más carbón al asunto.

-Joongie tiene el desayuno listo. Me mando a despertarte… -el menor habló normalmente, sin ningún tipo de rencor; YunHo en cambio quería levantar su puño y dejárselo estampado en la cara a JunSu.

-Ok –fue lo único que dijo antes de levantarse y salir de la habitación, vistiendo sus pantalones cortos que usaba para dormir solamente.

En el comedor ya estaba todo servido, y ChangMin ya estaba devorando su comida. JaeJoong lo miró con una expresión que no pudo describir, y luego le sirvió su desayuno, sentándose a su lado en la mesa, como siempre.

-Todos recuerdan que hoy el el matrimonio de mi hermana, cierto? –los demás asintieron.

-A qué hora?

-A las 5. Después hay una pequeña fiesta…

-SookJin nuna se ve tan joven, es difícil imaginarla casada… -comentó ChangMin haciendo una pausa en su comida.

-Bueno, pero está enamorada… Cuando estás enamorado lo único que quieres es estar con la persona amada – ‘…no huir de esa persona…’dijo el mayor, omitiendo la última parte, sin mirar a los demás. YunHo sintió que su corazón se apretaba de nuevo

De pronto el teléfono del departamento sonó, y YooChun se levantó a contestar. Cuando hubo termindo de hablar, avisó a los demás que su manager los quería en SM en una hora para un enayo de una canción nueva.

Así todos se dieron prisa en el desayuno, para poder ir a vestirse.


~~


-JaeJoongie!!! – SookJin exclamó corriendo a los brazos de su hermanito, casi tropezándose con su vestidote novia, el cual tenía una larga cola, a pesar de que la ceremonia no era la de la iglesia, sino el matrimonio civil.

-Nuna! –una sonrisa sincera se formó en los labios del chico, estirando los brazos para abrazar el delgado cuerpo de su hermana. Hace mucho que no la veía…

-Estás más grande! Te vi en televisión la otra noche…

-De veras? No sabía que íbamos al aire… Tal vez era sólo un programa antiguo…

-De todos modos; que grande estás! Me parecen siglos desde la ultima vez que te ví… casi no tienes vacaciones…

-Nuestras fans tampoco descansan, así que no podemos hacerlo nosotros…

-Y donde están los demás –la chica miró atrás de JaeJoong, donde sólo estaba JunSu, mirando alrededor con ojos curiosos, vestido con un traje formal, al igual que JaeJoong.

-Están por ahí… se me perdieron al entrar, pero creo que saben como llegar…

-JunSu! Como has estado?

-Bien bien –dijo con su típica sonrisa, y abrazó también a la chica, felicitándola.

-Bueno, pasen!

La gente que estaba invitada a la ceremonia era realmente muy poca. Algunos familiares, otros conocidos, y los 5 chicos de TVXQ. Los familiares de JaeJoong al verlo lo abrazaban y lo felicitaban por el éxito del grupo, y comentaban sobre lo bien que se veía o cualquier cosa. JunSu lo seguía a través de la multitud, sonriendo encantadoramente, saludando con la mano cuando veía a alguna de las demás hermanas de JaeJoong, o a sus padres.

Minutos después YunHo, ChangMin y YooChun se les habían unido, y todos estaban en un rincón esperando que comenzara la ceremonia.

-Joongie-ah~

El mayor se volteó a la fuente del sonido y se encontró a la menor de sus hermanas, SunHee, quien lo abrazó también.

-Nuna, como estás? Ha sido mucho tiempo…

-Si… bien, estudiando –los ojos de la chica recayeron inmediatamente en la persona al lado izquierdo de Jae: YunHo, y un leve sonrojo adornó sus pálidas mejillas- YunHo… -fue todo lo que pudo articular como saludo.

-Nuna, que bueno verte! –YunHo mostró su radiante sonrisa, y la chica creyó que se desmayaría. Y cuando el líder se acercó a abrazarla, se le olvidó como respirar por unos segundos.

JaeJoong miró esto con un poco de aprensión; no es como si no supiera que a su hermana le gustaba YunHo. De hecho, ella misma se lo había confesado un día, pidiéndole que la ayudara a cercarse a él. Por supuesto JaeJoong había declinado la oferta. Le parecía gracioso, porque la mayoría de sus hermanas sabían, o al menos sospechaban que él sentía algo por YunHo, pero no SunHee. Ella parecía tener ojos sólo para YunHo, obviando todo lo demás.

-Que bueno que hayan podido venir… -SunHee dirigió la pregunta casi exclusivamente al mayor, mirándolo con ojos embobados.

-Por supuesto que vendríamos a acompañar a Joongie –casi instintivamente el líder pasó un brazo por alrededor del cuerpo de Jae, acercándolo al suyo. JaeJoong se tensó sólo un momento, pero el calor de su amigo siempre lograba calmarlo, a pesar de todo. Tenía que admitirlo, era muy débil con YunHo…

SunHee pareció ni siquiera notar el abrazo, solo pendiente de YunHo, y esto se prolongó hasta que la madre de JaeJoong anunció que daría comienzo la ceremonia.

A pesar de que JaeJoong sentía necesario zafarse del abrazo de YunHo, no podía. Su cuerpo se lo pedía demasiado, le pedía estar cerca de YunHo, pero su corazón dolía… Con una expresión perturbada bajó el rostro, al tiempo que sentía una mano enlazarse con su mano derecha. Disimuladamente volteó el rostro para ver a JunSu sonriéndole cálidamente.

‘Yo estoy contigo…’

Siguiente