Llevaba más de cuatro horas allí dentro, afuera se había hecho un caos por tratar de sacarlo, y yo estaba que me llevaba el diablo, estaba por demás molesto, y ¡claro! ¿Cómo no estarlo?, sus estúpidas acciones estaban acabando con lo poco que quedaba del grupo, todos caminábamos en un hilo pero ¡por Dios!, nadie de nosotros hacia lo que él.
-¡sal de una maldita vez!- gritó Yunho resoplando, porque había perdido la cuenta del número de veces e intentos llamándole en vano, gastándose la saliva a lo tonto y golpeteando a la puerta solo perdiendo fuerzas.
-Yunho ¿sabes qué?, ¡déjalo allí dentro! ¡Que se mate si quiere! Solo estamos haciendo lo que él busca – le dije sin chistar, cruzado de brazos y lo mas hastiado posible, lejos de la escenita de todos los días.
-ya deja de hacer tus comentarios que no ayudan a nada ¿ok? – me miró por encima del hombro y dejó salir un suspiro largo y cansado, regresó su mirada a la puerta y de nueva cuanta comenzó a tocar, ¿hasta cuando iban a estar así?, no sé quién era más patético, ¿ellos por querer sacarle desde hace cuatro horas?, o yo, ¿por estar perdiendo mi tiempo en ver?
Mientras yo divagaba en averiguar ese enigma, Junsu caminó directo a mí apuntándome con el dedo índice, con el ceño fruncido y queriendo levantar el tono de voz, claro que por ser él, era totalmente imposible que se molestara en serio -¿ayuda si?, esto fue tu culpa después de todo – luego se quedó en silencio al ver mi ceja arqueándose en señal de desaprobación, regresó a la puerta de inmediato, sabía que lo que había dicho no era correcto.
Me recargué en una de las paredes cerca de allí, miré al frente y estaba Yoochun en la misma postura que yo, pero con los brazos cruzados, desvió su mirada de mi cuando se dio cuenta que lo observaba, quien sabe que estaría pensando.
Todos quedamos en silencio cuando la voz del otro lado de la puerta expuso sus estupideces
-¡¡NO PIENSO SALIR ESTA VEZ!!¡¡ LARGUENSE!! –
Di un tremendo suspiro de fastidio, carajo, no era posible que fuera mayor que yo, era tan infantil, ¿encerrarse allí solo porque le dije que me valía un pepino lo que hiciera con su vida?, finalmente me acerqué con pasos pesados y cruzado de brazos me recargue en esa puerta, miré a Yunho frente a mi haciéndome señas y susurrándome –no lo hagas – pero me valía un carajo lo que me dijera, yo sabré lo que puedo o no puedo hacer, todos eran tan considerados con él, por eso mismo ocurrían este tipo de cosas, ¡ciegos!
-¡sal de una bendita vez de ese lugar! ¡No eres un maldito niño pequeño! – grité, y Yunho se llevó las manos a la cabeza revolviendo su cabello y se dio la media vuelta totalmente molesto, pero a saber.
-¡NO! ¡Tú ni deberías dirigirme la palabra! – Jae tenía unos hábitos tan extraños, como tomarnos fotos por todas partes como un paparazzi desempleado, ese era el motivo de mi molestia –no me hagas reír ¡el que debería estar molesto soy yo! ¡Bendito enfermo! – Luego de sentirme estúpido gritándole a una puerta, me gire para toparme con caras amargas -¡¿qué?! - les pregunté desafiantemente, y ellos no me dijeron nada, por las mismas razones por las que no le decían nada al otro idiota que estaba dentro –me largo a dormir, no quiero saber más de esta basura – y sin decir nada más, muy a pesar de los reclamos de Junsu por mi comportamiento avancé por el pasillo a mi cuarto.
-Minnie no te enojes – alcancé a escuchar que Yoochun decía, pero no me detuve y finalmente azoté la puerta, no prendí la luz, me tiré en la cama y esperé en silencio para escuchar lo que los demás hacían.
Casi de inmediato escuché que la puerta del baño se abría, un montón de gritos y finalmente un portazo, ya podía imaginarme la escena, seguramente Jae vio que como nada de lo que hacía me interesaba, se dio por vencido, salió, se enfado, discutió con Yunho, que tampoco es novedad y finalmente tomó su chaqueta, las llaves del coche y salió a mil a vagar por las calles para embriagarse y quedar como estúpido en un bar.
¡Maldita sea! Me pregunto si ¿yo también soy tan predecible?
Y a los pocos minutos, lo que me temía
Alguien llamando a mi puerta
-¿si?- contesté fastidiado, llevándome los brazos a la cara y cubriendo mis ojos
-Changmin. ¿Podemos hablar? –
Aquí viene de nuevo, otro sermón estúpido del líder, ¡¿¿a mí porqué tiene que sermonearme???! ¡¡No fui yo el que se encerró como nenita en el baño a llorar!!
-claro pasa- si, si mi mente imagina muchas cosas, pero solo se queda en eso, “imaginar cosas”, pero algún día saldría el verdadero Changmin y entonces me conocerían de verdad.
Finalmente la puerta se abrió, sentí el lado derecho de mi cama ladearse, así que supuse que se había sentado -¿de qué quieres hablar? – pregunte aún en mi postura
-ya sabes a lo que vengo, quiero saber porqué diablos Jae se puso así, se honesto y dime todo, que mira sé cómo es él, pero no se puso así de la nada –
Di un suspiro y luego dejé salir una risa sarcástica – a mí ya se me pasó – aunque yo sabía que mi respuesta era demasiado altanera y que Yunho estaba luchando por no gritonearme, igual esperé a su contestación, negó con la cabeza y dejó salir un siseo –Changmin… dime por favor ¿qué fue lo que pasó? Sabes como yo, que el grupo no necesita más de esto, la despedida será pasado, y lo que menos ayudaría ahora es que nos fuéramos molestos entre nosotros – allí estaba de nuevo, hablando como una gran madre, queriendo darme un discurso cursi de la amistad y esas estupideces, finalmente me compadecí, me senté a su altura y comencé a contarle con cierto tono de aburrimiento, no entendía ¿si siempre hacía lo mismo? ¿Por qué me preguntaban una y otra vez lo que había pasado? ¡Aburrido!
-Lo que pasó fue que yo estaba durmiendo y el llegó con su maldito celular a tomarme fotos dormido…eso no me molestó…es decir, ¿qué importa que invada mi espacio personal y me bombardee tomándome sus estúpidas fotos? –así es, estoy hablando con sarcasmo, puse mis manos a los lados, apoyándome para inclinarme un poco hacia atrás –pero el colmo de su infantil comportamiento fue cuando saliendo de mi ducha, llegó corriendo y me arrebató la toalla de la cintura, para luego tomarme fotos- ese maldito degenerado con sus extraños comportamientos de lolita.
-Flashback-
Caminando por el pasillo, luego de una ducha de agua caliente, pensando en lo que sigue después de todo esto, asfixiándome con preguntas como ¿qué hago si ya no tengo al grupo?, tan patético por sentir que esto se ha convertido en una necesidad en mi vida y la maldita incertidumbre del ¿qué me espera en el futuro?, de pronto me topo con una sombra que dobla de la izquierda del pasillo, pasa corriendo a mi lado y cuando me percato, me doy cuenta que he quedado totalmente expuesto, lo miro a punto del colapso nervioso, tratando de contener mi explosivo carácter, el sonríe victorioso, presumiendo la toalla que ahora yace en sus manos, me estoy enojando, primera por haberme sacado de mis tortuosos pensamientos y en segundo por hacerme pasar el ridículo, veo con claridad que levanta su mano derecha con su nuevo modelo de celular color rojo, una lucecilla verde se enciende y el sonido de un clic hace que yo explote en rabia.
-¡quiero que borres esa foto! ¿Me has escuchado? ¡Bórrala ya! – Mis gritos parece que lo asustan porque da un paso hacia atrás, me mira fijamente totalmente azorado –no, es mía – me responde con tranquilidad, le arrebato la toalla para colocarla en su lugar -¡¡Bórrala!! ¡No estoy bromeando! ¡Maldito enfermo! – entonces las cosas comienzan como de costumbre
-¡No soy un enfermo! ¡Tú eres un niño amargado! –
-¡Ja! ¡¿Amargado yo?!¡¿Porque me molesta que me tomes fotos desnudo?! ¡¿Y no eres un enfermo?!...- comienzo a apuntarle con el dedo, golpeándole en el pecho - ¡¡Te puedo asegurar que a ningún tipo le gustaría que una foto de ellos desnudos apareciera en el celular de otro tipejo!! ¡¡ASI QUE BORRALA O TE JURO QUE!! – mi puño se acomodaba amenazadoramente frente a su cara, sentía que me hervía la sangre, era un maldito desgraciado.
-¡¿QUÉ?! ¡¿O qué me harás?! ¡¿Vas a golpearme?! ¡¿Eh?! ¡Hazlo, pero no pienso borrar el último recuerdo de ti! – aunque no se mostraba igual de enojado que yo, tenía claro que lo estaba, llevó el celular a su espalda lejos de mi alcance, sus razones para tomarla, eran las más estúpidas que había escuchado, me di la vuelta y avancé a mi habitación, gritándole cosa tras cosa, expresando mi enojo -¡Quédatela! ¡Me importa un maldito pepino para que la uses! ¡¡Maldito enfermo!! –
Antes de azotar la puerta pude escuchar una última cosa salir de sus labios -¡Eres un imbécil Changmin! –
De pronto resultaba que la víctima era él, maldito loco, algo si me quedaba bien claro, no extrañaría eso.
Fin del Flashback
Pude notar que al terminar de contar mi relato, Yunho movía la cabeza negativamente, como si estuviera en conflicto consigo mismo, su mirada que hasta hacia unos minutos estaba perdida en el buro al lado de mi cama, se clavó en mi –Pero Changmin ¿por qué le seguiste el juego?, total, es solo una foto – como si su voz retumbara en mi cabeza y me hiciera hervir la sangre, me dejé ir de espaldas sobre la cama, y permanecí en silencio porque si estallaba nadie me detendría, respiré hondo y sentí como Yunho colocaba una de sus manos en mi abdomen –Min, cálmate…cuando regrese te prometo que haré que borre esa foto, solo no te alteres, de nada sirve ponerse al nivel de los locos – seguramente se resignó al no obtener respuesta alguna, pero estaba demasiado molesto, sentí cuando la cama se movía y escuché sus pasos dirigiéndose a la puerta, alcé mi voz –que bueno que aceptas que Jae está loco, en algo estamos de acuerdo – cerré mis ojos y le di la espalda, en efecto, mi comentario era para molestarlo, pareció quedarse unos segundos antes de salir de allí, escuché su respiración agitada y un breve balbuceo salir de su boca, al final no me dijo nada más y salió de la habitación.
No tenía noción del tiempo que llevaba en mi habitación, tampoco de la hora en la que me había quedado dormido, me giré lentamente para ver si mi compañero de cuarto estaba dormido, pero me sorprendió ver que estaba vacía su cama.
Se me ocurrían dos explicaciones, la primera que aún era muy temprano, y la segunda que había ido a buscar al causante de nuestros desvelos los últimos seis meses.
Yoochun se había pegado mucho a Jae, quizás era porque se entendían a la perfección, yo qué sé, dicen que los locos se entienden…
Sentí pesadez en mis parpados, se me había olvidado revisar el reloj, mis ojos se nublan, y finalmente me vence el sueño.
La brusquedad del sonido de un golpe hace que abra mis ojos con rapidez, miro de un lado a otro allí tumbado sombre mi cama, tratando de ubicar en donde me encuentro, relajo mi respiración, giro a mi derecha, mi compañero sigue sin aparecer, al lado izquierdo hay un reloj que dice que son las 2:30 de la mañana, a un lado mi móvil parpadeando incesantemente, eso significa que alguien estuvo llamándome, con pereza me enderezo sobre mis codos, y luego de recobrar mi visibilidad estiro mi brazo izquierdo para tomar el aparato.
12 llamadas perdidas de Yunho y un mensaje que dice “salimos a buscar a Jae, si llega al departamento llámanos” fastidiado lanzo el celular que golpea contra el reloj, ¡maldición otro desvelo! Ese un desconsiderado, toda la vida haciendo que los demás se preocupen por él, ya esta grandecito, puede cuidarse solo, ¿¡por qué diablos siempre siguiéndolo de izquierda a derecha si algo anda mal con el?! No quiero desobedecer a Yunho, pero estoy demasiado cansado…
…como los últimos meses…
Así que me tumbo sobre la cama, espero no volver a despertar porque seguramente mis ganas de dormir se esfumarían por los siguientes días…
Lentamente mis ojos se abren, como si me alertaran de algo…
Fijo la vista en una extraña y sombría silueta frente a mi, no podría decir con seguridad si estaba parado o no porque se tambaleaba de un lado a otro, el olor a alcohol inunda de golpe el cuarto, no puedo evitar poner cara de asco.
Me enderezo recargándome sobre el respaldo de la cama
-¡¿Jae?! ¿Le has dicho a los demás que estás aquí?...eres un desgraciado siempre preocupando a los demás…ya va siendo hora de que…-
Mis palabras se atoran en mi garganta cuando veo como lanza la botella que trae en la mano derecha al suelo…
…el estruendo de los cristales contra el piso me hace dar un pequeño salto imperceptible para quien está frente a mi totalmente perdido…
He de confesar que nunca he tratado a Jae en ese estado, pero he escuchado cómo se pone de difícil…
-Voy a llamar a Yunho para decirle que has llegado…y encima en ese estado…debería darte vergüenza, y llamarte mayor que yo…- no se movía ni un milímetro de donde estaba, busqué mi móvil entre el buro, lo había lanzado y seguramente había caído tras el mueble, maldije mi suerte…
-¡maldición! …iré por el de la casa… ¡y limpia esta porquería!, el cuarto apestara a alcohol toda la semana que ¡asco!…- le decía mientras me colocaba unos zapatos y dirigirme a la sala cuando sentí como Jae tomaba mi brazo con fuerza al grado de causarme dolor…
Le dirigí una mirada serena y en tono seco le exigí que me soltara
Sentí como se acercaba a mí, más de lo normal, sin duda me estaba comenzando a incomodar -¡¿qué diablos quieres?! –
-tu… ¡siempre crees que eres perfecto! ¿No? – apenas si podía hablar, era penoso verlo en esas condiciones, tan ido de la realidad…
-¡estás borracho! No digas idioteces…- no me creía perfecto, pero era más racional que muchos en ese departamento
-Tú siempre me tachas de mal ejemplo, te burlas de mi como tu mayor… ¡estoy harto Shim Changmin!... ¡HARTO! –
-¿estás harto?...¡¡entonces compórtate como mi mayor!!… - mi sarcasmo estaba comenzando a fluir, me estaba pidiendo a gritos que le partiera la cara.
Su agarre fue perdiendo fuerza y zafó mi brazo, eso dejaría un moretón, ¡maldito!
-… ¿Por qué?... – apenas puede escuchar su pregunta, lo había dicho con un hilo de voz, tan quebrado, aún así yo estaba demasiado molesto por sus fachas…
-¿Qué? –me limite a preguntar
- ¿dime por qué me odias tanto?- levantó la cara con los ojos cristalinos, llevándose una mano al pecho y arrugando su camisa.
-solo escúchate… no sabes lo que dices… nunca he dicho que te odio…- no lo odiaba, al contrario, lo admiraba…lo que odiaba era en lo que se había convertido…eso si lo odiaba, aborrecía al Jae que estaba parado frente a mi…
-entonces demuéstrame que no me odias…-
No pude evitar dejar salir una risa burlona, me giré por completo para quedar frente a el -¡¿Qué te demuestre que…?! –
Mi ojos se abrieron de par en par cuando Jae se dejó ir con todo su peso sobre mí, había chocado contra la pared, el golpe resonó por toda la casa…
¡¿Qué demonios?!
Jae había apretado sus labios contra los míos…
El olor de su cabello a cigarro, y esa colonia cara que siempre usaba, junto con el del alcohol, se revolvieron causando estragos en mi estomago…
Una infinita ira se apoderó de mi, empujé a Jae contra la pared, apreté mis puños enterrando mis uñas en mis palmas casi cortándome….
-¡¡ESTO!!.... – no sabía cómo externar mi ira y mi rabia, ¡maldita sea! ¿¡Por qué tenía que ser así?! ¡¡ ¿Por qué?!
Lo miraba fijamente, como si mis ojos quisieran arrancarle la respuesta a su acción, tenía tantas ganas de destrozarlo, de hacerlo sentir todo lo que estaba sintiendo en ese momento…
…tomé vuelo y le di un golpe a la pared justo al lado de su cabeza…
Me miró destrozado, como si le hubiera hecho un daño irremediablemente profundo….
EL DAÑO HABIA SIDO CONTRA MI… ¿¡por qué me miraba así?!
Me alejé con trabajo como si la furia en mis adentros pesara toneladas…
-…Minnie…- escuché que susurraba
-¡NO! – levanté mi puño cerca de su cara, era sínico o ¿qué diablos? Llamarme tan informalmente después de lo que acaba de hacer…. -¡no me vuelvas a llamar así!...¡¡ ¿QUEDO CLARO?!! – y sin más me encerré en mi cuarto, colocando llave, estaba al borde del colapso…
Comencé a temblar y me eche en el piso abrazando mis rodillas, llorando a los gritos
Solo quería salir de allí…
Quería desaparecer… y no tener que cargar con lo que estaba sintiendo…
Esta interminable impotencia…
Este asco…
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
ToT no minnie pk eres tan malo y desgraciado, sabemos que jae esta loco,lo ha estado siemrpe, pero comprendelo tu vuelves loca a cualquier persona cuerda xD waa me dieron risa algunos comentarios de minnie, jeje no quiero terminar odiandolo asii que espero que mejore su actitud n.ñ
ResponderEliminaresta muy interesante continuare con la histotia katyna
ResponderEliminarAhhh...esto tiene que terminar en Jaemin...amor apache siii...como se nota que fue escrito por un hombre...bueno...de algun modo espero que continue!!!
ResponderEliminara lo escribio un hombre? 0.0 wow! genial! xDD me encanto *0* sigue sigue sigue X3
ResponderEliminarwow o.o primer capi y toy super guindada
ResponderEliminarese min está amargo porq ama a jae y no qiere aceptarlo,ne?
Wooow o.o se sentia tanto odio y malestar en las palabras - palabrotas (?) - de Changmin que me senti enojada y todo xD que locura!
ResponderEliminarNo tengo idea de que va esto, y me da la impresión de que habran lágrimas sueltas ._.
Seguire leyendo a ver que pasa *-*
Gracias por el fic n_n
wow apoco esta escrito por un hombre???
ResponderEliminaro.O esta muy bueno y eso que solo es el principio
aaaa como me gusta el jaemin
continuare leyendo >_<