~Ex~ cap 1

~Hola… creo que así debo empezar a escribir ¿no?... con un saludo.~

El muchacho de cabellos oscuros negó con la cabeza presionando la tecla para borrar de aquella laptop en la cual se encontraba escribiendo, o al menos intentando escribir la primera entrada de su primer blog.

- ¡Ni siquiera escribir puedo!... soy todo un idiota –sujetó sus cabellos y comenzó a tirar de ellos, la histeria se apoderaba de él como de costumbre.

- Idiota es que quieras escribir eso… no veo la necesidad –otro chico, uno de cabellos castaños se encontraba recostado en la cama de aquel cuarto, observando al futuro escritor en (poca) potencia de vez en cuando.

- Quiero y ya… deseo recordar como sucedieron las cosas –volteó a ver a aquel peli-castaño, mirándole seriamente.

- Vale… ya no te interrumpo, ¿es qué acaso nunca escribiste un diario de vida?… no te preocupes de que sea perfecto, ¿cuál es la importancia si sólo lo leerás tú? –sonreía con aires de superioridad.

- Arggg… como odio esa sonrisa y ¿quién sabe si el blog que escribo llega a tener éxito y me hago más famoso que Lady Gaga? –el muchacho volvió la vista a aquella laptop, tratando de escribir una vez más.

~Como sea, ya me cansé de desperdiciar los minutos… así que aquí voy…

Esta es la historia de un pobre y patético idiota, alias Kim JaeJoong… alias yo… Sí yo, es bueno reconoser que uno es idiota… ¿era reconoser o reconocer?~

- Hey… ¿reconocer se escribe con ese o con ce? -volteó una vez más, observando al aparente bello durmiente recostado sobre su cama.

- Es con ce Einstein… con ce… -respondió el muchacho, suspirando y meditando ante la poca cultura de aquel escritor novato.

- Vale tank yu~ -le agradeció con un gesto de mano y regresó a lo suyo.

- Ya ni me molesto en corregir su mala pronunciación –murmuró para sí mismo, sonriendo con los ojos cerrados.

~Bueno… al parecer es con ce, al menos eso es lo que me dijo el nerd cerebrito que tengo a mis espaldas… así que debe ser correcto… ¿En qué iba? Ahhh, sí… en que es bueno reconocer la idiotez propia, así ya no te ofendes cuando te lo dicen a la cara.

Pues se preguntarán (sólo quienes no me conocen) ¿Por qué me defino a mí mismo como un patético idiota?, algunos dirán que soy un joven con poca autoestima, otros que no me amo a mí mismo, puede que hasta crean que me odio y que soy un emo al borde del suicidio… pero no señoras y señores, me defino así porque soy un total y completo idiota, cosa que notarán cuando comience a contarles la historia de mi primer amor… más bien la historia de mi primera ruptura, en realidad me patearon… cortaron… terminaron, me mandaron a volar y bien lejos o como sea que se diga.
Jung Yunho es el nombre de mi primer novio... ex-novio… ¿Cómo puede una palabra tan pequeñita como “ex” antes de otra como “novio” cambiar todo el contexto?, maravillas del mundo ¿no creen?... En fin, suelo desviarme mucho del tema, esa es una de mis debilidades desde pequeño, espero no hacerlo muy a menudo (ya lo estoy haciendo otra vez). Jung Yunho como les decía anteriormente, lo conocí a finales de nuestro penúltimo año de colegio, fue amor a primera vista… para mí, para él creo que fue a tercera o cuarta vista… bueno la cosa es que luego de juntar todo el valor del mundo y de que me declarara en 16 oportunidades y fuese rechazado en 15 de ellas, llegó un día, (la decimosexta vez que se lo proponía… ¡se escribir decimosexta!... se escribe así ¿verdad?), en que, por cosas de la vida, él simplemente me dijo “seré tu novio”, yo que ya estaba preparado para oír un “No... ni aunque el infierno se congele y venga Satanás con la cola congelada a pedírmelo” o uno de sus típicos “¿Me ves cara de cuidador de perros? Tendría que sacarte a pasear… no gracias”, escuchar aquel “Seré tu novio” salir de sus labios fue en extremo confuso… recuerdo que le contesté algo como:

- Perdona ¿qué dijiste? -alzando una ceja y mirándolo con algo de asombro.

- Sólo lo diré una vez, si escuchaste bueno… si no mala suerte –creo que me respondió algo así, para luego voltearse y volver a clases.

Se imaginarán que reaccioné con alegría ¿no?, bueno sí… llegó aquella alegría, pero luego de pasarme media hora tratando de convencerme de que oí bien, de que no fue una ilusión o alguna de mis fantasías… bueno fantasía no podía ser porque aún llevábamos nuestras ropas puestas (demasiada información ¿no?).

Así fue como comenzamos a salir, era tan feliz de poder decir que Yunho era mi novio, sentía que tenía mil abejas en el pecho que revoloteaban e intentaban abrirse paso y salir, (mala forma de describirlo… ya mejoraré), sabía que él no se sentía de la misma forma… cuando salíamos parecía un tanto aburrido y como si quisiese volver pronto a su casa… pero no me importaba, mientras lo tuviese a mi lado y pudiese sostener su mano me bastaba, en ese entonces sólo pensaba que si él pudiese amarme la mitad de la mitad de la mitad de la mitad de la mitad de la mitad de lo que yo le amaba sería más que suficiente, viviría y moriría feliz a su lado… empiezan a entender mi idiotez ¿a que sí?.

Ya íbamos a cumplir un año de noviazgo, lo recuerdo tan pero taaaan bien, ¿cómo olvidarlo?... Aquella noche cenaríamos en un restaurante de lujo, uno llamado “Il boun manjare” que es lo único de Italiano que sé… Pues la cita era a las 8 de la noche, llegué a las 7… no quería hacerlo esperar así que llegué una hora antes. Mi sonrisa era tan grande que podría haberme tragado a alguien, era sincera, sentía felicidad, ya llevaba un año con la persona que amaba. Comencé a jugar con las servilletas del lugar, eran de tela y con ellas formé el típico pañal de bebé, soy un tonto a veces (todo el tiempo). Me entretuve un rato con aquello hasta que miré mi reloj… ya daban las 8:30 y él aún no llegaba, sonreí y pensé que tal vez había sucedido algo urgente, que de seguro llegaría pronto. Lo esperé hasta que uno de los camareros se acercó y me informó que estaban por cerrar, aún así seguía sonriendo e inventando excusas… historias de cómo o por qué se había retrasado… ilusiones claro está, ilusiones que se rompieron en mil pedazos al recibir un mensaje de texto de su parte… uno que decía “Lo siento ya no quiero estar contigo, me enamoré de alguien más, adiós”.

¿Cuál piensan que fue mi reacción?... les daré algunas opciones:

a) Lloré como magdalena (¿las magdalenas lloran?) y me deprimí encerrado en mi cuarto hasta el día de hoy.
b) Estrellé el celular contra el piso, y furioso me dirigí hasta su casa para armarle un escándalo.
c) Fui a verlo a su casa para aclarar las cosas y que me lo dijera de frente.
d) Sonreí y me dije a mí mismo que todo estaría bien, comencé a pensar en una forma de recuperarlo y quitárselo al idiota que me lo robó.


Eso es todo por hoy, esperaré sus respuestas, ¡hasta la próxima!


8 comentarios Publicado por Kim JaeJoong en 18/6/2010 02:53:00 AM


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Nota: Si comentan respóndanle a Jae, eligiendo una de las opciones, las que ustedes crean que es verdad. Él se encargará de contestarles en el próximo capítulo ;D, cuídense y gracias por leer.

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