ChangMin
El reloj marcaba las doce de la mañana pasadas y aun seguías a mi lado, con un expresión tranquilla al igual que tu respiración acompasada. No podía creer que había pasado, lo que habíamos echo, lo feliz que me sentía al tenerte en ese momento en mi cama. Sonreí y me abrace a tu cuerpo, quería quedarme así para siempre, tenerte de esa manera todo lo posible antes de que la magia se terminase y tuvieses que volver a tu casa con ese que decía ser tu mejor amigo.
- Maldito YooChun – murmure, cabreado, sabia todo lo que ese desgraciado estaba haciendo contigo y el porque nadie te hablaba – esto no quedara así…
Me mantuve un rato mas acostado a tu lado hasta que la llamada de la naturaleza me obligo a levantarme. Aproveche para darme una buena ducha y después preparar el desayuno de los dos. Camine hasta la habitación, mis nervios ahora estaban a flor de piel, temía, si, temía la reacción que pudieses tener ahora, que me mirases de una manera extraña o que simplemente te vistiese y te largases sin decirme nada…eso me mataría, cualquier reacción por tu parte podría matarme, y eso lo sabia bien, siempre lo supe, desde el primer momento que me hablaste.
- JaeJoong – susurre moviéndote un poquito – venga que es tarde y tenemos que comer algo – escuche unos gemidos de protestar por tu parte, adorables – dormilón – sonreí antes de volver acercarme a ti para besarte, no podía evitarlo, me gustaba hacerlo.
- Buenos días – me dijiste después de que me separase de ti – ¿Qué hora es?
- Casi la una – conteste a la típica pregunta después de un buen rollo por la noche
- Vaya…a ver que me invento por no ir hoy a clase – dejaste escapar un par de carcajadas
- Diles que yo te secuestre… - sugerí, con una voz que no parecía mía – seguro que nadie dice nada
- Claro que dirán – tu mano paso a mi cintura para ir subiendo lentamente hasta mis mejillas, que ya se habían sonrojado – me dirán que eso no es verdad, que seria al contrario…pero me da igual
- De verdad te da igual que digan de nosotros? – pregunte inocente a lo que me habías dicho
- Claro que me da igual, lo que paso anoche fue – tapaste tu sonrisa con la mano – lo mejor que me había pasado nunca
¿Cómo paso? No estoy seguro, pero cuando me di cuenta devoraba esos labios rojos con una pasión que me nacía de algún lugar muy escondido en mi cuerpo. Te sujetaba con fuerza contra mi, ¿o eras tu el que me sujetaba con fuerza contra tu cuerpo?….no me interesaba tampoco, solo quería sentirte mas y mas…hasta que nos gastásemos mutuamente. Gemí cuando tu mano se coló por debajo de la camiseta que me había puesto, volví a gemir cuando la quitaste y de nuevo se me escapo cuando apresaste mi miembro ya duro con fuerza. ¿Cómo era posible que con solo esos besos me pusieses en ese estado?
Decías mi nombre mientras me colocaba a horcajadas sobre ti, tumbándote de paso. Quería volver a sentirte y lo sabias, veía en tus ojos lo que me deseabas en esos momentos y tu lo podías ver en los míos.
- ChangMin…puede dolerte incluso más que anoche – me advertiste, pero yo te silencie, no quería escuchar que me dolería, porque lo sabía, al igual que sabia que luego perdería completamente la razón unido a ti.
No te deje protestar ni una vez mas, una sonrisa se dibujo en mi cara cuando tome tu sexo y lo introduje con cuidado en mi aun dolorida entrada, cerré los ojos con fuerza…tenias razón dolía mas en esos momentos que la noche anterior. No tardaste en volver a levantarte para abrazarme con fuerza, querías que dejase de hacerlo ¿Verdad?
Pero no…no me iba a detener, ni te iba a dejar que me detuvieses. Me moví un poquito, solo un poco y escuche un gran gemido por tu parte, me miraste suplicante, para que no continuase y volví a moverme.
Y así seguí moviéndome hasta que el dolor paso, hasta que ya no me pediste que dejase de hacer locuras, hasta que yo empecé a suplicarte por más atención, perdiendo la cabeza completamente como ya había pronosticado antes de empezar.
No era capaz de hablar, apenas podía decir tu nombre mientras aumentabas la velocidad de tus estocadas, pero lo que si podía hacer y no pensaba dejarlo era besarte, morder tus labios cada vez que tocabas ese punto que me llevaba a la perdición completa. Tu mano se adueño una vez mas de mi miembro duro, aumentando el placer que ya sentía y de esa manera en pocos minutos termine y tu conmigo.
Me costaba respirar mucho, sudaba por todos los poros de mi cuerpo, cuando yo odiaba eso, pero en ese momento no me importo lo mas mínimo, te abrace con fuerza, impidiéndote abandonar mi cuerpo, creo que reíste cuando lo intentaste y proteste, y sonreí como un quinceañero tras ese ultimo beso antes de tumbarnos en la cama.
- ¿Estas bien? – preguntaste mirándome directamente a los ojos, dejándome de paso algo anonadado
- Eh? - me cubrí la cara un poco tímido por mi reacción, pero la culpa era tuya, me eclipsabas con tan solo respirar – Si…si estoy bien
- ChangMin, no quiero que lo hagas mas así – frunciste el ceño para luego sonreír – no quiero que te hagas daño
- Creo que me terminara gustando
Me había quedado completamente dormido abrazado a ti y cuando abrí los ojos, me esperabas con la comida encima de la cama, o mas bien era el desayuno que yo había preparado algo modificado, no podría explicar bien que sentí comiendo de esa manera contigo, era algo que nunca imagine sentir, una tranquilidad que me arrastraba a estar así mas tiempo, me sentía feliz, completo y a la vez temeroso por el momento de la despedida.
Tras una ducha y un rato mas hablando te tuviste que marchar, muy a mi pesar, pero así era vivías con tu amigo desde que empezaste la universidad, un tipo que solo quería tenerte para el y te alejaba de todo el mundo solo por puro capricho. Le odiaba.
- ChangMin – escuche al otro lado de la puerta, extrañado corrí abrir encontrándote de nuevo allí parado mirándome serio
- ¿Qué pasa? – el miedo se apoderaba de mi, no podía evitarlo, en mi mente empezaron a pasar imágenes donde me pedías que lo olvidase todo
Pero cuan equivocado estaba…te acercaste lentamente, acorralándome contra la puerta del salón y volviste a besarme, abrazándome con fuerza. Y seguiste así hasta que se me escapo un leve gemido.
- Se me olvido el beso de despedida – sonreíste para luego sacarme la lengua y marcharte de la misma manera que habías entrado, dejándome totalmente descolocado y mas rojo que un tomate.
Me costo mucho recuperarme y cuando lo hice el sol se había vuelto a esconder, deje escapar un suspiro, o mas bien deje escapar uno cada vez que alguna imagen tuya se me pasaba por la cabeza.
- ¿Cómo te mirare mañana? – me pregunte a mi mismo – quizás tenga que ir y darte un beso…o lo harás tu…o guardamos las apariencias… - miles de preguntas tontas me asaltaron en ese momento y no veía ninguna respuesta apropiaba para ellas – ChangMin….eres un idiota
Cene en silencio, aun con la cabeza llena de esas malditas preguntitas de niñas tontas, mirando la televisión sin nada interesante en lo que fijarme. Estaba muy cansado y no tenia ganas de ir a la habitación y desmontar lo que ahora se había convertido en mi pequeño santuario, me acomode en el sofá y sentí tu esencia en el, y de esa manera se termino mi día.
YooChun
Desesperado.
Esa era la mejor palabra que me describía en ese momento, Jae llevaba todo el día sin aparecer, y al ser yo el único amigo que tenia no podía preguntar a nadie por su paradero, por no mencionar que el único que se ha atrevido a alejarle de mi tampoco había ido a clase.
Otra figurilla rota, ya me había cargado unas cuantas en las horas que llevaba en casa dando vueltas de arriba abajo como una fiera enjaulada. ¿Dónde demonios te has metido?
Mi móvil empezó a sonar, lo agarre por si era el, o alguien que pidiese un rescate, pero no, solo era otra de las tantas modelos a las que había llevado a la cama.
- ¿Que quieres? – me iría genial desquitarme un poco con alguien
- YooChun oppa – la voz chillona de la chica me destrozo los oídos – podríamos quedar y tomarnos algo y luego…ya sabes
- Mira guapa – reí, reí como un desquiciado al solo recordar que noche pase con esa niña – una chica que no sabe chuparla como es debido no me interesa.
- No seas cruel…yo…era la primera vez y – su tono agudo se oculto bastante, lo que le dije le afecto
- Y nada – hubiese pagado por ver su cara en esos momentos – no doy segundas oportunidades, zorrita, tirate a otro que estas fuera de la agencia.
Y sin más colgué, con un gran alivio en el pecho y quizás también algo mas tranquilo. Abrí el mueble bar y me serví un poco de alguna bebida que por allí tenia, tampoco me fije en que era.
Dos tragos mas tarde sonó el timbre de casa y podría jurar que el corazón se me escaparía por la boca del susto que me había dado, sin esperar demasiado fui abrir, encontrándote detrás de la puerta con un paquete de una pastelería que yo adoraba.
- YooChun lo siento mucho – me dijiste mientras te dejaba entrar – de verdad que lo siento
- Idiota – sonreí, todo era perfecto ahora – vamos a comérnoslos.
Por fin estaba de verdad a gusto, comíamos los pastelillos hablando del día de clase, me preguntaste de todo, y la mitad no sabia responderte pero tampoco te quejaste pues ya me conocías bastante, estaba tan contento que también te conté sobre la modelo y para variar me echaste una buena bronca porque me había pasado con la chica.
- ¿Ayer donde te metiste? – preguntaste cuando limpiabas los platos – vine pero no estabas
- Me llamaron y salí – una mentira, pero el no lo sabia - ¿y tu donde estuviste?
Te sobresaltaste y estabas nervioso, me levante de la silla en la que estaba sentado caminando lentamente hacia ti, ibas a mentirme, lo sabia bien.
- Me quede en casa de Moon Hee Jun
La tensión se podía cortar con un cuchillo, no conocía a ese tal Moon Hee Jun y no me importo pues no estuviste en su casa.
- ¿Moon Hee Jun? – me hice el inocente preguntándote por esa persona que dudaba hasta que existiese
- Es un amigo de la academia a la que fui – podría ser verdad, pero no era la respuesta que yo quería escuchar.
- Podías habernos presentado – proteste, con buena intención, o así se suponía
- En otra ocasión, es que trabaja en un bar propio y claro no tiene tiempo – sonreíste – además ahora esta con su novio y ya sabes….
- Mejor no molestar
Reímos juntos cuando solté mi graciosa respuesta, te moviste un poco mas de la cuenta con lo que tu camiseta también lo hizo, dejándome ver la marca roja que tenias en el cuello, abrí los ojos, mis sospechas se veían confirmadas, y desde luego tu amigo no era el causante de ese moratón.
- Jae… - susurre – no me mientas
- No te miento – si antes estabas nervioso ahora parecías alerta por cualquier cosa
- Tienes un chupetón en el cuello – mi voz se escuchaba agria y por dentro llena de una furia que iba creciendo por momentos.
Dejaste lo que estabas haciendo y corriste a mirarte la marca. Yo camine detrás tuya, sorprendiéndome mas cuando tu mirada era de un total cariño hacia eso que te habían echo.
- Chun… - sonreíste. Y juraría que estabas sonrojado – hoy a sido un día perfecto…creo que me gusta alguien
Mi suelo se desmorono, las paredes caían a pedazos al igual que lo hacia ese órgano vital para nosotros, te miraba asombrado, ¿Cómo era posible eso?
Siempre había alejado a todo el mundo de ti, solo para que yo fuese la única persona que ocupase tu corazón y ahora me salías con eso. Me preguntaba una y otra vez como era posible cuando ya sabia la respuesta de sobra, todo era culpa de ese chico nuevo, el que aprovechó para quitarte de mis brazos.
Te deje hablando solo y camine arrastrando los pies hasta mi cama, no quería escuchar lo feliz que eras ahora, lo bien que te había recibido en su casa o lo que habíais echo por la noche, no quería escuchar nada de ese desgraciado.
Deje caer mi cuerpo sobre la cama, hundiendo la cabeza en la almohada, para no oír más esas malditas palabras que se me habían incrustado en la memoria y en el corazón. Lloré, hacia años que no lo hacia, desde que ese otro me abandono, jure no volver hacerlo pero aun así en esos momentos no era capaz de controlarme,
No paso mucho rato cuando ya estabas en la habitación preguntándome que me pasaba, idiota, tu eras lo que me pasaba…
Te echaste un poco sobre mi para abrazarme, conseguiste girarme y yo devore tus labios, cruce los brazos por tu pecho, me aferre con todo lo que era posible a ti, y continué besándote, aun que tu quisieras resistirte, aunque en un momento del beso el sabor metálico de la sangre me inundase los sentidos.
Mire tus ojos cuando me separe, ni verte con el labio partido me dio lastima, quería dañarte mas y hacerte sufrir como lo hacías tu conmigo y mas cuando vi que aun así me mirabas con ternura.
- YooChun ¿que te pasa?
Me tratabas como siempre…
Sonreías como siempre…
Hablabas como siempre…
Pero tu corazón ya no estaba como siempre
- ¿Qué me pasa? – reí con asco – ¿y me preguntas que me pasa?
Te odiaba…te odiaba….te odiaba…y aun así te amaba como a nadie.
- Pasa que estoy enamorado de ti idiota – solloce, dándote un golpe en el pecho – desde siempre…desde que te vi…
- ¿Qué estas diciendo?
- Lo que escuchas…quiero que seas solo mío JaeJoong…me lo debes…es tu obligación, yo te cuide siempre, te aloje sin pensarlo… ¡Solo eres mío!
JaeJoong
Esa noche se me había echo eterna comparado con la perfecta noche que había pasado al lado de ChangMin, YooChun lloro como un niño pequeño horas y horas mientras repetía que yo era suyo…y lo peor era que tenia toda la razón.
Desde que nos conocimos en el instituto había estado de mi lado, sin hacerle caso a todos esos comentarios que circulaban por todo el lugar, me brindo su amistad, aun sabiendo que era de familia humilde, no le importo acompañarme a lavabo cuando por culpa de una chica me excite mas de la cuenta, de echo ni se echo a reír por mis hormonas alborotadas, el nunca me había fallado y yo…no fui capaz de ver los sentimientos que despertaban en su persona, le hice daño sin importarme nada.
- Y ahora no solo sufrirá el… - resople
El agua de la ducha me recorría todo el cuerpo al igual que los pensamientos confundidos que tenía, me sentía mal por YooChun, pero no solo por el, lo que sabia que mas me dolía en esos momentos era ChangMin.
Empecé a notar frío por todo mi cuerpo, un frío que ni la ropa pudo quitarme.
El desayuno paso con una gran tranquilidad, mi amigo dormía en su cuarto y lo preferí así, no quería verle aun, me era algo imposible, la vergüenza podía conmigo. El reloj pasaba los minutos demasiado rápido, tal como mi nerviosismo crecía al acercarse la hora de ir a clase.
- No sigas…detente
Le pedí inútilmente al reloj que como era de esperar no me hizo caso, quise atrasar la hora, no mirar mas, pero me era imposible, ya no podía faltar mas a clase porque mi beca dependía de ello y no estaba dispuesto a arruinar tantos años estudiando día y noche para estar donde estoy.
No cogí la bicicleta, prefería caminar y llegar tarde si era preciso, todo por no verle aun. No estaba preparado. Y como estarlo si en todos mis años de vida nunca me había enfrentado a una situación así, nunca había tenido problemas con las chicas pues no se me acercaron en el instituto y antes de eso era demasiado pequeño como para pensar en enamorarme, y ahora, justo ahora que había encontrado alguien que me había causado algo en mi fría existencia YooChun decidía confesarme sus sentimientos, era una casualidad demasiado cruel, por un lado tenia a mi mejor amigo, al que no podía abandonar y por otro lado a ChangMin…
el… se me ha acercado y me visto sin miedos, ni prejuicios.
No quería hacerle daño, no, no quería que llorase como lo había echo mi mejor amigo por mi despiste y mi poca madurez.
Solo podía pensar en ChangMin, por mucho que YooChun sufriese, solo era capaz de pensar en el y así llegue a la universidad, donde mi dilema mas grande me esperaba en la puerta con una enorme sonrisa. No dijo nada, solo se acerco y me besó, dejándome claro todo lo que sentía.
- Tienes mala cara – su mirada era de una total preocupación – ¿no has dormido bien?
- No demasiado – le confesé, intentando dibujar una sonrisa solo para el - ¿y tu?
- Como un bebe – rió mientras tiraba de mi brazo hacia dentro del edificio – ya pensaba que hoy no vendrías con todo lo que tardabas
- Me ha costado levantarme – pronuncia simplemente
- JaeJoong – me miro a los ojos - ¿que ha ocurrido?
Me sorprendí bastante, se había dado cuenta que algo ocurría y solo por dos estúpidas frases de mi parte, tiro con fuerza de nuevo de mi para meterme dentro de uno de los baños, que curiosamente estaba vació…seria porque todo el mundo estaba ya en clase.
- Cuéntamelo Jae – podía jurar que me estaba suplicando
- YooChun se me ha declarado
No dijo nada, se acerco con cuidado a la repisa donde descansaban los lavamanos y suspiro, luego me miro y me indico que me acercarse, estuve a punto de negarme pero cuando me vio con las intenciones se acerco y me abrazo con fuerza.
- Eso quiere decir…
- Que no podremos estar más juntos Min…
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no no jae no dejes a min porfavor no lo agas sufrirr quiero mamamammamssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
ResponderEliminarmassssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
noo..pues...yo estoi de acuerdo k jae se kede con yoochun...kyaa..asen hermosa pareja...igual con min pero pzz nocee..mejor con yoochun..!!
ResponderEliminarnoooooooooooooooo
ResponderEliminarjae porque le haces eso a min
contiiiiiiiiiiiii!
Nada! Jae se quea cn Min, como debe ser!!! JAJAJAJAJA!!
ResponderEliminar(además la autora ya dijo que es jaemin *¬*)
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa por ke jae.T-T
ResponderEliminarME DIVIDI X_X amo a las 2 parejas... las amo... pero ayy sigue
ResponderEliminarOh no no Jae....
ResponderEliminarJae:No q....?
?¿:Como puedes dejar a Min....
Jae:ahhhh... eso...
¿?: Se q Yoochun se te declaro y q sea tu mejor amigo..pero?
Jae: q es lo q puedo hacer... por un lado tengo a mi mejor amigo, al que no puedo abandonar y por otro lado a ChangMin…
?¿: Solo piensa bien lo q haces.. Jae..
Quiero la conti pronto
Yushi
odio y detesto el jaechun tanto como el yunjae!!!
ResponderEliminareste fic desd eun principio se dijo q seria jaemin!!! porq hacen esto!!!???
NOOOOOO!!!!
ResponderEliminarno creo que jae deberia dejar a min solo por yoochun, a demas siento como q el amor de yoochun solo es posesivos, pero bueno a ver como sigue la cosa.
Gracias
bye bye...
kyaaaa!!!! porqueeeeeeee noooooo, jae sigue tus sentimientooossss! chunnie es malo maloo, ojala salga todo a la luz *-*, ta bueno el fiiiiic, sigue sigue plis!!
ResponderEliminarporfavor siguela no la dejes ahi que esta en lo mas interesanteeeeeeeeeeee
ResponderEliminaresperare conti por siempre *--*
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah amo el jaemin es demasiadoooo
ResponderEliminarpobre changmin u.u por favor contiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii sigue por todas las que nos quedamos prendadas del fic *--*
qiero contiiiiiiiiiiiiiii
ResponderEliminarpor favoor ;O; sigo esperando han pasado siglos u.u
junsu <333333
Lo que yoochun siente no creo que sea sano pienso que solo es un amor enfermizo ademas se anda lanzando con una que otra zchika :P , en algun minuto pense que se aquerellaria contra el pobre jae, en todo caso aunke me guste chun prefiero que aki se quede con el lindo min *o*
ResponderEliminarprefiero que chunie se quede con... xD
Esperare loka por la actulizacion (aunk me muera en ello!!! o.O)
como que ya no podreis estar juntos
ResponderEliminarsi supieras que chunnie fue el que te alejo del mundo
ya no te le acercarias
nooooooooooooooooooo pobre my baby boo no lo dejes jae!!1 a una cos asi tan linda como te atreves T_T , inche raton ¬.¬
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