Junsu recobro la consciencia antes de llegar a casa de Jae, se sento en el asiento trasero, con cuidado de no salirse de la manta que le habia puesto y no manchar la tapiceria del lujoso coche.
Olia a cuero, y a ambientador...y a la colonia de Jae.
Miro hacia el retrovisor y se dio cuenta que este lo observaba, y que desviaba la mirada desconcertado segun se daba cuenta que este lo habia descubierto. Sonrio de manera sincera, le habia hecho gracia la respuesta a la situacion del conductor.
El resto del trayecto se lo pasaron estudiandose el uno al otro mediante furtivas miradas a traves de los espejos retrovisores del coche, cada vez se aguantaban mas la mirada, tanto que una de las veces casi pasan un semaforo en rojo, lo que hizo que Junsu se riera abiertamente,controlandose inmediantemente,pero no lo suficiente para que a Jae sintiera que habia perdido aquella "batalla". Se contuvo de dejarlo alli abandonado y simplemente dejo de mirarlo.Además ahora tenia que devolversela y con creces, era su estilo.
Aun asi sabia que Junsu seguia observandolo, y lo odiaba, odiaba ser estudiado...y menos de aquella forma tan descarada.
Freno bruscamente indicando que el trayecto habia finalizado y salio del coche encaminandose a lo que el herido intuyo era su casa. Volvio a sonreir.
-Quitate la camisa, acabemos cuanto antes-
Junsu se limito a seguir la orden, y despues de que Jae le indicara que la dejara en el suelo, se acosto en la improvisada camilla que le habia preparado, que se trataba de la mesa del comedor cubierta por una sabana blanca.
Jae comenzo a trastear en la cajita de primeros auxilios. La herida era peor de lo que se habian pensado, no es que fuera gravisima, pero si era bastante profunda.
Busco entre los armarios hasta encontrar una botella de licor de alta graduacion.
-Esto te dolera- Le dijo sin mirarle a la cara. Acto seguido dejo caer un buen chorro del liquido en la herida mientras el paciente al principio dio un respingo pero ni siquiera se quejo, volvio a su cara la sonrisa inocente, la que Jae habia identificado como "el comodin", la usaba cuando no queria que nadie supiera que pensaba. Era una tapadera perfecta.
Despues de desinfectar venia coserle la herida, donde se esmero...no podia permitirse el lujo de tener en el cuerpo una cicatriz demasiado..."desagradable". Su cuerpo era su medio de trabajo, tenia que ser lo mas perfecto e impecable posible.
Mientras lo vendaba aprovecho para espiar fugitivamente las marcas que podrian haberle dejado los clientes "efusivos", tenia miles de arañazos por el torso, chupones e incluso un par de mordiscos a medio curar...Se sorprendio, aquellas heridas, por lo menos los mordiscos debieron de haberle dolido...Tenia un aguante impresionante, definitivamente, eso nadie se lo podia quitar.
Junsu se dio cuenta de que Jae repentinamente no hacia ningun movimiento, y levantando un poco la cabeza lo sorprendio absorto, mirando una de las marcas de su cuerpo.
-¿Ya puedo irme?- Se limito en decir rompiendo su ensimismamiento.
-Tienes que...quedarte- dijo de mala gana.
-Yo no quiero quedarme-dijo mientras se sentaba, y se intentaba bajar de la mesa pese a que el dolor en el costado le estaba rompiendo por dentro y prosiguio - y evidentemente tu no quieres que me quede aqui-Recogio la camisa del suelo y mirandola nego con la cabeza -¿podrias dejarme una tuya?, te la devolvere a la noche recien salida del tinte, te lo juro- Incremento el "encanto" de su sonrisa, desconociendo aun que a Jae no le afectaba.
-No es idea mia, es de Yunho-,hizo una pausa-Quiere que te quedes un par de dias aqui-
Sin pretenderlo se descubrió mintiendo, pero derepente sintio unas desorbitadas ganas de estudiarlo mejor, necesitaba el control, y a veces sentia que Junsu se le escapaba de la atadura mental a la que tenia a todos sometidos. No podia permitirse el lujo de un "revolucionario" , no queria alguien que no supiera de antemano como iba a reaccionar...y entonces se dio cuenta que le habia salido un competidor, un competidor casi tan perspicaz como el... Y por unos segundos el panico amenazo con apoderarse de el, sentia en el estomago inquietud. En medio de su paranoia, escucho una risa que lo saco de sus pensamientos.
-¿Seguiras mucho tiempo ahi parado mirando al infinito?-
-Te quedaras en el sillon, voy por unas mantas-Se limito a darle como respuesta.
Yunho llamo a Jae preguntandole por el estado de Junsu un par de horas despues. Jae se limito a decirle que la herida era un poco mas grave de lo que parecia al principio y que preferia tener a Junsu bajo control ese tiempo, por si tenia que volver a curarle...al fin y al cabo de aquello no debia quedar sino una leve cicatriz y...
Se dio cuenta que estaba dando empezaba a dar excusas estupidas y empezaba a parecer algo que no era, asi que atajo la conversacion despidiendo tan pronto como pudo a Yunho.
¿Que era exactamente a lo que empezaba a parecer que no era?...Reparo en aquel pensamiento que se le habia pasado por la cabeza mientras hablaba con Yunho, y tan pronto como lo recordo lo deshecho, achacandole todo a la falta de descanso.
Se esforzo en creer que cuando se levantara todo habria pasado, estaria despejado y podria por fin dedicarse a comprobar que Junsu era uno mas ... y una vez lo "fichara", podria pasar pagina pudiendo volver a aislarse como hacia con todos una vez pasado el "examen".
Despues de 2 horas dando vueltas en la cama recordo porque hacia tanto tiempo que nadie entraba a su casa...no soportaba la presencia de otro ser. Manias. No podia conciliar el sueño sabiendo que otra persona pudiera campar a las anchas por alli,tan cerca suyo, que tocara sus cosas sin su consentimiento... que sin el saberlo pudiera observar mientras dormia...que pudiera descubri algo...algo personal.
Y salio del cuarto.
Paso primero por el baño se lavo la cara varias veces intentando fatigar las ansias que le destrozaban por dentro de correr al salon a ver que era de su ... "huesped".
Y sin poder evitarlo ya mas se dirigio al pasillo, y a lo lejos vio los sillones, y alli un bulto sobre ellos, y una manta mal doblada.
Y se tranquilizo, no se habia movido ni siquiera de la postura en la que lo habia dejado. Se giro, aliviado ahora con la intencion de volver a su cuarto.
Un ruido lo sobresalto, Junsu se habia movido colocandose bocaarriba cayendo la manta habia caido al suelo, de ahi el ruido.
Quiso dejarlo asi, cuando le diera frio se despertaria y se taparia...pero entonces se dio cuenta de que si se despertaba a lo mejor no seguia durmiendo...a lo mejor...y volvio a recrear aquellos pensamientos que hacian sentir que su intimidad era ultrajada.
De mala gana se acerco al sillon y con la manta en las manos se la hecho por encima...
Y sintio como la mano de Junsu agarraba con fuerza la entrepierna.
-Cuanto has tardado...-dijo con aquella sonrisa que ahora mismo ponia de los nervios a Jae, quien intento apartarse, haciendo que Junsu apretara algo mas y se lo evitara.
-!Sueltame¡- Fue el pensamiento mas inteligente que su mente pudo crear.Por un segundo perdio el control.
-¿Porque?-le dijo Junsu sin apartar aquella sonrisa de sus labios.
-No te he dado permiso para que me toques- contesto Jae, volviendo a el algo de su habitual frialdad, intentando volver a tomar el control de la situacion.
-Vamos...¡enfadate!-
La situacion se le iba de las manos...y le empezaba a dar vertigo.
-Sueltame, no te lo digo mas- Ahora ya con total control de si mismo.
Intento volver a zafarse, pero Junsu tenia mas fuerza de lo que parecia a primera vista.
Se sento en la mesa del salon con gesto resignado, no le daria el gusto de mostrarle otra cosa que indiferencia, ¿quien se creia que era para reclamarle algo mas?.
La sonrisa de Junsu se torno en desilusion, y sin soltarlo se acerco. Poniendose enfrente a el.
-Dejame verte sentir- Fueron sus palabras.
Si a Jae alguien le hubiera dicho que Junsu no habia ni siquiera planeado la mitad de las cosas que estaban pasando y que iban a pasar no lo hubiera creido.
Y todo por el deseo irresistible de ver en su mirada mas que indiferencia...que tonteria, hubiera dicho seguramente.
Pero alli estaba, Junsu se habia acercado a el, a su cara, se proponia a besarlo lo sabia, deleitandose, desplazandose centrimetro a centrimetro, milimetro a milimetro...sintiendo el aliento en su cara, y el no podia moverse, estaba clavado...ni con cuerdas lo hubieran logrado inmovilizar tambien,intento mentirse...buscar excusas...no se movia porque lo tenia agarrado ...eso era...no se movia porque sino apretaria y no podia permitirse lesion alguna en "esa zona" si...eso era...era la razon logica..., pero Junsu no queria razones logicas,a milimetros de su labios se detuvo, lo miro a los ojos y lo solto.
Dejo libre su entrepierna, y sintio en sus labios otros labios...y se mareo al darse cuenta que habia sido el quien realmente habia besado a Junsu y no al contrario.
Habia sido el quien por alguna razon inexplicable cedio a la atraccion del joven y habia caido en su juego.
-MIERDA- penso. Habia conseguido hacerle perder el control...se sintio debil. Mas aun cuando Junsu, crecido por haber conseguido aquella nueva "victoria" profundizaba el beso.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
me sorprende junsu pero en el fondo pienso que en la vida real no es tan dulce jejejejejej
ResponderEliminar