Extraña Curiosidad

Titulo: Extraña Curiosidad
Autora: zzkawaizz
Pareja: MinSu
Género: Slash, Lemon
Extensión: Oneshot
N/A: si no te gusta Junsu vestido de chica no lo leas ^^
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Una tarde común y corriente…salvo el calor sofocante que se colaba en el ambiente. Todos y cada uno suspiraban abanicándose con lo que encontraban. La calefacción estaba dañada y el técnico la arreglaría mañana…

--no puede ser QUE CALOR!!—se quejó el rubio por sexta vez, tumbado en el mullido sofá que lejos de aminorarlo solo lo acrecentaba, pero aun así, seguía sentado porque otro lugar cómodo, según él no conseguiría.

--Jae por que no preparas unos refrescos bien helados…--sugirió Yoochun mientras estiraba las piernas.

--lo haría pero hace diez minutos lo preparé y ustedes se lo bebieron todo—

--no mientas hyung –dijo Changmin, levantando el polo de resaque para apaciguar su calor—solo que te lo bebiste de porrazo que ni cuenta te diste.

--aishh—suspiró frustrado, el entonces rubio. No quería levantarse ni fuerzas tenía—mierda por que tanto calor, ni que fuera el Caribe…

--estamos en Mayo la época mas calurosa y mas con este calentamiento global…que esperas hyung…

--min, por favor NO me sofoques mas…--e iba a darle una mirada severa, cuando se percató que solo los tres estaban tirados en la sala, regados por el sofá y la alfombra y ahí cayó en cuenta, que faltaba cierto pequeño revoltoso que hacia minutos no paraba de quejarse al igual que ellos y por su puesto también faltaba su líder.

--Min, en donde están Junsu y Yunho?

--ahh…--alejó la vista del techo y repaso el lugar…ni cuenta se había dado en la ausencia de ellos—no lo sé—y volvió la mirada al entretenido techo.

--Yoochun y tu?—no consiguió respuesta ya que Yoochun se había quedado dormido todo revuelto con las extremidades extendidas—¿acaso soy el único que se preocupa?…Min búscalos!

--ahh…qué?!—Changmin no creyó lo que escuchaba, como que “él” único que se preocupa, bueno si fuera así, que él mismo vaya y los busque o que (?) no tenia patitas?—deben andar por ahí haciendo el vago o… Conociendo a Junsu y con lo débil que es, tal vez se desmayo por ahí y Yunho…

--Changmin es una orden encuéntralos—lo cortó. Total podía ser que los desvaríos malintencionados del menor tuvieran en parte razón, así que lo mejor seria buscarlos, solo que estaba muy pero muy cansado que mejor sería relegar la tarea al menor.

--pero…--quiso refutar pero la mirada peligrosa de Jae lo intimidó, su hyung cuando se enojaba era irreconocible por no decir peligroso. Así que sin muchas ganas se levantó acatando la orden. Lo primero en revisar fue la habitación de Yunho que se encontraba con las ventanas abiertas y en suelo cerca de la base de la cama yacía el líder durmiendo con solo unos bóxers y con la boca toda abierta mientras un hilo de baba se escurría en la comisura de sus labios.

--ashh asco –si era masculino… y todo eso lo que dicen las fans, pero para dormir como que no tenía reparo alguno. En tal caso objetivo uno encontrado. Salió pasando por la sala, donde Jaejoong seguía abanicándose y se preguntó por qué seguía en el sofá.

--Yunho está tirado en el piso…durmiendo—Jae dejo de airarse

--entonces todo está bien—y si su Yunnie estaba tranquilo durmiendo entonces todo estaba bien, claro había olvidado que aun faltaba un integrante pero para el rubio lo principal estaba resuelto y el calor le impedía pensar más.

Changmin suspiró, a veces su hyung era demasiado transparente en hacer notar su interés. Se había olvido del delfín. Quería tirarse en la alfombra y seguir con lo suyo pero que mas daba, si echaba una checadita al delfín, total no vaya ser cierto que de verdad se cayó y está tirado por ahí , con lo frágil que parecía su amigo era mejor asegurarse.

Caminó al cuarto del delfín…

A comparación de Yunho. Junsu emanaba dulzura todo ahí recostadito con el polo ligeramente levantado y con esos pequeños y húmedos cabellos cortos que se adherían a su piel lo hacían ver tierno y sensual a la vez. Y si, para sus ojos su amigo siempre fue muy bello. Y aunque él era el menor de los cinco, solo Junsu tenía ese aura que pedía protección, como algo delicado y puro…Pero también estaba la otra cara esa que derrochaba sensualidad, que la verdad no entendía como le hacía para ser dos caras tan opuestas…o se hacía el tonto y fingía inocencia o era tan tonto, para no darse cuenta que con esos movimientos podía derretir a cualquier fans.

Y al verlo una vez más quiso llegar a saber que tan puro era, que tan sensual podía llegar a ser… y no pudo evitar dejarse llevar, alucinando un poco mas...

--sabes Junsu, siempre quise verte de mujer…estoy seguro que te verías lindo—se acercó sentándose al borde de la cama, y no estaba nada mal aquella fantasía. Solo que aun no cabía como hacerla realidad pero ya encontraría como…

Porque hubiese sido más fácil si Junsu hubiese sido chica pero que ironía verdad porque aun siendo hombre tenía un lindo trasero una linda y pequeña nariz con unos precisos labios… Sin duda hubiese sido una chica muy linda…pero aun seria Junsu? la verdad no importaba porque siendo hombre tenía todo eso… y eso lo hacía único…y todas esa cualidades llaman a lo prohibido… y lo prohibido es tentador, apetecible y sumamente pecador.

--Junsu…--lo llamó suavemente apenas un susurro muy suave para inmutar al durmiente que aun traía muestras de calor pues se agitó por el sopor –Junsu –volvió a llamarlo. Abrió pesadamente los ojos aun le costaba. Sobándose con sus manos trató de espabilar el sueño, Changmin lo miraba corroborando su teoría con cada acción que el pelirrojo le regalaba.

--Min –canturreó al verlo a su costado—tengo calor…--extendió su labios haciendo un lindo puchero como si Min pudiera arreglar su problema…

--ven…--le extendió la mano. El pelirrojo lo miraba ladeando su rostro como tratando de entender a lo que se refería Min. Quería llevarlo algún lugar? Aun con dudas y sin saber porqué recibió la mano

Y sin saberlo Changmin tomó aquello como una especie de sumisión una “fé ciega” si se podía decir. Solo era probar, que sin saber que… el pelirrojo aceptaba.

Aun con la mirada fija. Acercó sus labios a la suave y cálida mano del pelirrojo depositando un beso en ella. Junsu reaccionó al sentir aquel beso alejando instintivamente su mano—Changmin? –él le sonrió--…qué haces?

--No sé… por un momento pensé que eras una princesa.

--ahh… que tonterías estás diciendo.

--Es que dormías…solo se me vino a la mente y fui espontáneo eso es todo –Junsu lo miraba como tratando de entenderlo. Lo de “princesa” eso si que era curioso.

--Changmin ya que soy una princesa tráeme un refresco bien helado ~~--sacaría ventaja de los disparates de min.

--Por lo visto eres una princesa muy latosa…--viéndole estirar sus labios de disconformidad—ok pero con una condición.

--Cual ~

--Quiero…--se detuvo para deleite. Agregándole un toque de intriga para conseguir mayor impacto --que me ayudes en algo…--lo miró expectante, esperaba una reacción que le permitiera continuar.

--¿En qué? – esos ojos chispeaban curiosos.

--Sabes el verte así me hicieron preguntarme como seria Junsu de chica –lo había dicho, esperaba todo tipo de reacciones de una risa estrepitosa hasta un golpe. Pero estaba dispuesto a llegar hasta el final.

--¿Qué?! Te estás burlando de mí.

--No, lo digo en serio de verdad—y por la cara que ponía Junsu parecía que lo estaba perdiendo y en cualquier momento este le mandaría a freír mangos—…es que eres muy lindo, muy diferente a los demás—esperaba apelar un poco a la vanidad del pelirrojo. Y parecía que funcionó porque el ajuste de sus cejas ya no era tan intenso.

--Pero Jae es más bonito que yo…ve a decirle a él que sea chica

--Mira Su, ambos son diferentes…Sabes solo fue una idea suelta, espero que no te amargues.

--Sabes. Yo una vez me vestí de chica para un concurso –el menor lo sabía había visto unas fotos, pero mostraría ignorancia tal vez Junsu al recordarlo piense que no era la “gran cosa” vestirse de nuevo, y que hasta lo podría hacer de nuevo, bueno eso era mucho esperar ¿no?

--¿Si?—preguntó aparentando sorpresa.

--Sip…lo que pasa es que….

Y comenzó a narrar el motivo que lo llevó aquello, lo que sintió y hasta el comezón que le provocó aquella peluca. Changmin escuchaba atento importándole muy poco el vendito calor que no se iba

--¿Te vestirías de nuevo?

--No lo haría. Por qué lo haría?

--Por mí.

--Por ti? Que babosadas dices –le golpeó levemente el hombro.

--Mira obtendrías algo. Total no te costaría nada.

--mmm…--quería saber hasta dónde llegaba min—algo como qué?

--El juego “ Forbidden Impire”

--No te pases Min yo puedo comprarlo.

--Está bien que quieres.

--Tanto así quieres verme vestido de chica.

--…. —Que le decía que si! Claro tampoco podía verse como un desesperado, pero si no mostraba mucho interés el delfín no comprendería el porque su insistencia y estaría contradiciéndose a sí mismo. Qué debería responder? – Después de lo que contaste me dio más curiosidad.

--mm…--vestirse de chica para Changmin, era un poco loco. Por no decirlo extremadamente loco pero… tener un secreto y adentrarse un poco en los pensamientos del menor, era todo un misterio y algo le decía que quería saber hasta dónde llagaba el menor—Yap pero me darás lo que yo quiera.

--Depende—tampoco quería parecer desesperado. No le vaya a pedir un carro o algo por el estilo.

--Solo quiero…--lo había pensado cuidadosamente—un autógrafo con foto de Han GaIn —dijo lo último lentamente poniendo atención a la reacción de Min ya que estaba seguro que esta valdría oro y no se equivocó. La cara desencajada de Changmin valía eso y más. Sonrió para sus adentros.

--¡Estás loco!—había reaccionado más de lo que esperaba. Junsu sabía bien, que aquello era imposible. Min la admiraba o mejor dicho la idolatraba el solo estar unos metros cerca de ella lo paralizaba lo ponían nervioso por no decir inútil.

--Cuando lo consigas…haré todo lo que me pidas –Junsu se levantó oliendo a triunfo. Que había pensado que las tendría fácil, pues No.
Porque con eso, se aseguraba que nunca cumpliera su extraña y bizarra fantasía.

Changmin lo vio alejarse. Como le había podido pedir aquello, pensaba el menor. Sí que lo conocía tan bien como para saber su punto débil, aunque…

Sonrió. Junsu había olvidado un pequeño detalle…

Y es que cuando tenemos una meta, una fijación todo gira en torno a ello y lo demás pasa a segundo plano…

Y hasta acercarse a ella, ya no parecía tan difícil…



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Al entrar a la tienda CP (cosplay) notó los diferentes artículos. Todos con muy buen acabado. Sin mirar mucho, algo llamó su atención. Un pequeño traje de colegiala, una faldita muy corta, con unos lazos en el pecho. Tocó la tela, suave pero no tanto. Se acercó al mostrador, donde el dependiente se encontraba leyendo su historieta.

--Disculpe, me interesa ese disfraz.

--Ah es muy solicitado en estos días—le sonrió, apartando su revista.

--Hace a pedido…tengo las medidas.

--Claro acá todo es al servicio del cliente—le pasó las medidas, mientras el tendero las repasaba. Changmin observaba el lugar— ¿lo quiere todo completo o solo el uniforme?

--Lo quiero todo completo.

Después de escoger los mínimos accesorios. Salió. Felizmente que el tipo ni lo reconoció o si lo hizo no dijo nada, bueno que iba a decir, con lo caro que le salió la gracia, hasta estaba seguro que había una especie de “trato cliente”…

Ahora solo le quedaba esperar…



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--Esto?—repasó aquellas ropas, una corta falda, unas medias, unas botas que hacían juego con todo—oh – se sorprendió al encontrar en un paquete delicado. Una prenda intima con volados por todo la parte de atrás—Changmin estás loco si crees que me voy a poner algo así – lo soltó como si quemase.

--Todo fue hecho exclusivamente para ti – y que había pensado el menor, que con eso era suficiente para acallarlo y que cediera, pues no

--Mira Min…no pensé que fueras tan pervertido, mira ya no quiero, mejor lo dejamos ahí.

--A NO—lo sujetó de la muñeca impidiendo que se alejara—hicimos un trato yo cumplí ahora te toca a ti—su mirada no dejaba titubeos. Junsu dudó. Qué respondería?. —Dijiste, que harías caso en todo…--desvió la mirada. Él tenía razón pero…

--Está bien, pero todo queda acá, prométeme que nunca lo contaras.

--Lo prometo—Junsu suspiró. Tomó las cosas.

--Ahora vuelvo –se alejó rumbo al baño.

Changmin repasaba la vista de la ciudad. Escucho la ducha. Que hizo desviar su atención. Impaciente aguardando a lo que vería, no sabía como se le había metido la maniática idea de ver a Junsu así, pero para que negarlo, lo emocionaba y hasta imaginarlo lo excitaba. Después de un buen rato de esperar la puerta por fin comenzó a entreabrirse y lo que vio superó magníficamente a su imaginación.

Junsu de colegiala…

Nunca antes creyó verlo así, pero ahí estaba su fantasía hecha Junsu…

--Changmin no mires.

Sus mejillas sonrojadas lo hacían ver aun mas adorable, sin querer su cuerpo reaccionaba.

--Esta falda es muy corta—la estiraba entre manos tratando de cubrirse un poco más. En vano.

--Te queda muy bien.

Junsu dejó de forcejear y lo miró y descubrió a un Changmin sonrojado era extrañamente lindo ver aquello. Bajó un poco mas la vista reparando en aquel lugar intimo del menor.

Para su sorpresa Changmin se encontraba excitado. Aquel bulto en el pantalón lo delataba…

--Y quieres hacerlo así – se acercó tocando ligeramente el volado de la falda –porque me hiciste vestirme así… –acercándose—…te gusta lo que vez—

La mirada recorriendo completamente el cuerpo de Junsu lo decía todo. Sudaba. Su miembro se hinchaba debajo de sus pantalones. Junsu se percató y la vergüenza que sentía quedó rezagada y ser “el dueño” de la situación le gradaba. Avanzó mientras Changmin retrocedía hasta que el sofá lo limitó cayendo sentado en el sofá. Junsu siguió hasta detenerse al sentir las piernas de min chocar con las suyas –te pones nervioso tan solo porque me acerco—min no decía nada, el había querido aquel juego, pero ahora lo superaba. Junsu vestido de “chica” era mil veces tentador, si decía lago… si hacía algo solo sería para lanzándose al delfín olvidándose que eran solo amigos

Junsu quería jugar un poco más. Tener el control parecía tan irreal nunca vio a Changmin sin nada que hacer sin nada que decir…

Levantó su pierna colocándola encima del sofá al frente de min – Ya que pensaste en todo supongo que quieres ver como es adentro.

Changmin tragó duro. Esas pantaletas que llegaban hasta sus muslos no dejaban mucho a la imaginación y quería tocar esa pierna. Junsu levantó levemente la falda permitiendo ver ligeramente la pantaleta –¿Eso es suficiente? -- miró una vez mas a Min luego quiso retirar su pierna pero Changmin fue más rápido tomándolo de ella, jalándolo, cayendo a horcajadas encima de él. Sus manos sujetaron lo que encontraron, el pecho de min y parte del respaldar del sofá. Quiso alejarse. Pero Min al tenerlo así, agarro ambas piernas impidiéndolo—Changmin que haces?

--No tengas miedo… que no te voy a lastimar –respiraba dificultosamente, sentir la mano de Junsu lo agitaba. Sabía que su amigo tenía miedo pero aun así no lo iba a dejar. Junsu se relajó al escucharle. Poniendo inconscientemente más presión en donde estaba sentado. Changmin gimió. El trasero de Junsu rozaba su entrepierna. Aquel gemido excitó a Junsu.

Changmin lo movió encima de el. Alucinado por esa sensación electrizante que le recorría todo su ser terminando en la punta de su miembro que se erguía tomando vida.

Saltó al sentir la mano de Changmin—Min—susurró roncamente—no…no debemos—pero como si su cuerpo no le hiciera caso a sus palabras, los gemidos seguían. Changmin tanteó por encima de la pantaleta deslizándola sin quitarla. Tocó el miembro. Junsu respingó. La caliente mano de Changmin apretó suavemente su erección comenzando a masajearla
Desde arriba hacia abajo, rodeando en su punta. Junsu arqueaba su espalda al sentir como una descarga eléctrica lo recorría llegando hacia esa zona donde el deleite lo inundaba.

Mientras lo masturbaba. Changmin bajó su zipper liberando su miembro. Que empinado salió. Su punta ya comenzaba a eyacular, haber visto así Junsu, escuchar sus gemidos tenerlo encima de él disfrutando, lo habían acelerado y sentía que ya no faltaba mucho para que se viniera…

Unas cuantas masajeadas mas y fue suficiente para venirse. Su semilla se dispersó en su mano, en las prendas y ligeramente en el rostro de Junsu.

Donde lo limpió sinuosamente con sus labios mientras seguía atendiendo al delfín… que con gemidos más descarados anunciaba su pronta culminación.

Changmin apretó con el índice ese pequeño orificio donde una pequeña gota de presumen se escurría. Junsu se mordió los labios evitando gemir de placer. Era demasiado todo lo que sentía. Al sentir como aflojaba el agarre no pudo evitarlo explotando en las manos, que tan rico le hicieron sentir…


Junsu cerraba sus ojos mientras se entregaba al sin fin de sensaciones, todas placenteras que lo mareaban y confundían. El calor de su cuerpo aumentaba. Forcejeó con su mano tratando de quitarse la molesta blusa. Mas solo desató el listón y abrió los primeros botones pero eso fue suficiente para sentir una pequeña brisa que se coló, durando muy poco ya que los labios de Changmin se apresuraron besando todo a su paso. Hundiendo su rostro en el pedazo de piel que le ofrecía Junsu.


--Levántate un poco Junsu—y no sabía porque hacía caso. Se levantó ligeramente.
Changmin tomó su miembro, con rastros de semen en el. Lo acercó a la entrada de Junsu.

--Changmin?—No podía ser, Changmin lo estaba tocando en esa parte tan intima a pesar de todo tenía vergüenza, nunca pensó llegar tan lejos. Pero… tampoco pensaba detenerle.

--Necesito llegar hasta el final –una voz suave casi gutural le hicieron ver cuán excitado estaba. Sin esperar respuesta su miembro rodeo la pequeña entrada. Embetunándola. Lo estaba lubricando con su propio semen, ligeramente empujaba sin entrar. Su punta trazaba círculos a veces resbalaba pero volvía…

--Ahh—gimió sin poderlo controlar. Era malditamente erótico sentirlo así.
En parte sentía que era una anticipación de lo de sentiría cuando entrara completamente en él. Y lo ansiaba… Si se sentía así de bien.

Lo quería…

Lo quería dentro… --Changmin ya…--apenas articulo, en un susurro que parecía suplica. Y no lo hizo esperar mucho podía sentir como su entrada se dilataba al ingresar aquel duro miembro. Respingó. Cerrando los ojos. Era más grande de lo que había pensado. Pero Min se detuvo tal vez esperando que se acostumbrara. No dolía mucho. Claro aun no sabía, que solo la punta estaba adentro. El miembro de Changmin se aventuró un poco más. Junsu se estremeció “¿que aun había más?” pensó. No quería sorpresas, así que dejó caer su cuerpo auto-penetrándose.

Maldijo para sus adentros

Changmin deliró al sentir de pronto como esa rica estreches aprisionaba su hombría y vale decir que moría por la ganas de empujar y empujar. Se preguntó que tenía Junsu que hacían de ese orificio deliciosamente adictivo. Tan ajustado que enloquecía…
Mas se contuvo, vio a Junsu fruncir el ceño.

--¿Junsu-ah estás bien? –Junsu asintió. No dolía tanto como al principio pero incomodaba. Era nuevo para él sentir aquella presión. Y para acostumbrase se movió ligeramente – ahhh—gimió, la molestia daba paso al placer.

Changmin disfrutaba como aprisionaban su hombría. Aun no lo embestía pero gozaba como Junsu movía suavemente sus caderas en forma de círculos.

Por la posición en que estaban, Changmin lo cogió de las caderas incitándolo a que entrara más profundo. Las piernas de Junsu quedaron atrapadas entre los brazos de Changmin.

Mientras que su trasero se friccionaba contra los muslos internos de Changmin que con sus manos le ayudaba moviéndolo de un lado a otro dirigiendo cuan profundo entraba. Junsu lo abrazaba mientras se dejaba llevar. Sus caderas se mecían al vaivén que el moreno imponía.


Sus frentes chocaron mientras mantenían sus miradas conectadas. El miembro duro de Changmin salía y entraba en él. Junsu se sentía completo y lleno. Junsu no podía negar que aquella sensación era maravillosa nunca antes lo había sentido. Y le encantaba sentir como sus paredes se friccionaban llegando a un punto que sabe dios que sería pero se sentía deliciosamente bien.

--Más… Changmin más…

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Lo aventó a la cama. Junsu sintió un vació al no sentirlo. Se sorprendió al darse cuenta que en poco tiempo se había acostumbrado a ese pedazo de carne.

– ¿Changmin-ah? –el orificio de Junsu aun palpitaba ansiando esa presión.

--Muéstramelo –aquellas palabras lo desconcertaban que quería que le mostrase? Aun respirando dificultosamente logró articular un gemido en pregunta –ah?

--¿Me quieres adentro? –Junsu pudo observar como los ojos chocolates de Min se tornaban mas profundos, oscuros con un brillo que te atrapaba. Claro que lo quería adentro pero era vergonzante pedir aquello.


--Voltéate… muéstramelo… --“maldición” pensó Junsu. A donde se iba todo su pudor…

Se giró, poniéndose de cuatro patas. Dejando a disposición su trasero. Aun conservaba la pantaleta. Su mano izquierda ladeo la pequeña prenda intentando sacársela.

--No te la quites – Changmin respiró una vez más. Había escogido especialmente esa pantaleta. Al verla pensó en Junsu en como acentuaría sus atributos y no se equivocó, aquellos volados resaltaban su parte trasera. Se acercó. Colocó su miembro encima de esta, sintiendo debajo aquel orificio, que lo llamaba. Rozó. Junsu respingó. Golpeó unas veces encima de esta…

Y con su miembro deslizo tranquilamente aquella pantaleta, moviéndola a los costados, hasta caer…

Tanteo, aquella rosada abertura, que palpitaba ansiosa. Metió su dedo que al instante fue succionado


--Aun no se acostumbra y eso…que recién te la saque –metió otro dedo que al igual fue succionado…--…o me quieres dentro?


--Changmin-ah…--Junsu se estremecía. Sentía débiles sus piernas, sus brazos. Todo el temblaba. Sin poder mas dejó caer su rostro recostando su mejilla en la suave colcha. Aquella posición ponía en completa disposición su entrada que se entreabrió un poco más.

Changmin podía hacer lo que quiera con él.

El solo se dejaría llevar por el placer.

--Eres… muy…muy sexy Junsu – Changmin no lo podía evitar, aquella posición le excitaba. Su miembro crecía más. Dolía… pero aun quería mas, y haría que Junsu lo deseara… se convertiría en su droga. Relamió sus labios, descubriendo las ganas de probar, de saber cómo sabía el interior de Junsu. Acercó sus labios. Su lengua tocó aquella parte tan estrecha e intima…

Sus manos se posaron apoyándose en aquellas nalgas, mientras que su lengua se adentraba más, probándolo, zigzagueando y descubrió que sabía más rico de lo pensaba.

--Changmin ya…ya no puedo más…-- su cuerpo necesita más de esa embriagante sensación de estar lleno acompañado de ese placer al sentirlo dentro muy dentro… donde al llegar el punto exacto lo mareaban tocando el cielo mismo.

Changmin lo cogió de las caderas acomodándolo para su intromisión. Se introdujo suavemente no por prepararlo, si no porque su excitación era tanta que dolía y ese pasaje le exprimía tanto que en cualquier momento se vendría y no quería…deseaba hacerlo dentro de Junsu

--Es demasiado rico

Junsu gimió. Lo sentía invadiéndolo, entrando y saliendo. Como agarraba sus caderas jalándolo para él, entrando más profundo si se podía, sus envestidas erráticas se hicieron regulares lo que significaba que ya no faltaba mucho. Changmin aprisionó su hombría mientras lo masajeaba levemente, masturbándolo caóticamente, pero eso bastaba para que Junsu se viniera, arqueándose de placer…

Unas embestidas más, siendo estas más profundas, más intensas que las anteriores. Culminaron derramándose dentro. Por la fuerza del impacto en como se vino. Junsu lo sentía casi en todo su ser… fluyendo dentro de él. Así era tener a Changmin adentro, lo había llenado de él… Hasta cuando duraría esa sensación?

Ya lo averiguaría…

Cayeron ambos cuerpo rendidos, aun agitados respirando laboriosamente. Recuperándose del orgasmo… Pasaron unos minutos es silencio.

Changmin se levantó. Regresó con algo que Junsu no pudo ver. Más solo lo sintió algo húmedo y frió, que lo hizo saltar.

--Changmin que haces?

--Solo te limpio.

Solo respingaba cada vez que esa toallita húmeda lo tocaba. Lo contemplo tan absorbo en lo que hacía que parecía un sacrilegio impedirlo. Aunque se moría de vergüenza que tocara esa parte de él. No era que no la haya visto, que no lo haya tocado, que no lo haya…

La cuestión era… que ahora era diferente, no estaban haciendo nada
…bueno nada indecente…y con las mejillas sonrojadas se dejó hacer…

Una vez que terminó Changmin se recostó a su lado…

--Changmin…

--Descansa mañana hablamos.


Junsu lo abrazó mientras que su rostro descansaba en el cálido pecho del menor. Este también lo envolvió posesivamente en sus brazos, donde ambos durmieron profundamente…

El mañana les esperaría… Regalándoles el tiempo que les faltaba…

~ Fin ~