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The Royal Pet: Cap 10


El corazón aun le latía, tan solo de pensar lo cerca que estuvo aquella persona, aun cuando fue un encuentro corto, de apenas diez minutos o menos “Prometo que te explicare todo, solo dame algo de tiempo para organizar las cosas” fueron las palabras que surgieron de los labios de Jaejoong luego de deshacer un prolongado y asfixiante abrazo, antes de regresar a su motocicleta y partir, dejándolo en medio de la acera, completamente confundido. No pudo decir mucho, no pudo hacer más que balbucear, y quedarse congelado. Le había visto, lo había escuchado y todas sus preguntas se quedaron atascadas en su garganta y todas las cosas que quería decir, apenas y se formaron en pequeñas oraciones en su mente. Se percato de que había estado de pie a la entrada de su casa por varios minutos, y sacudió su cabeza para finalmente regresar a la casa y cenar con sus padres, tratando de distraerse con los quejidos y las risas, propias de una familia cenando.

Subió a su habitación luego de cenar y tomar un baño, suspirando largo cuando entro, con la toalla aun colgando de su cuello. Se tendió en la cama mirando al techo, tratando de reorganizar el concierto de pulgas que tenia en la cabeza. ¿Por qué su vida debía ser tan complicada? No entendía como un simple estudiante universitario con un cerebro decente terminaba enredado con tantas personas y tantas situaciones.

El sonido de su teléfono bailando en la mesa de noche le saco de su ensimismamiento, tembló y dio un pequeño alarido debido a la concentración que tenía en algún punto en el techo, volteando a ver el aparato para confirmar de quien era la llamada:

-Yunho –hyungnim… -susurro casi en un suspiro, tomando la llamada inmediatamente, sabiendo cuanto detestaba Yunho que no le contestaran luego del tercer tono- ¿Hola?

-¡Tu, perro! -Grito Yuhno al otro lado de la línea- ¡Quiero tu Tra-Trasero aquí inmediatamente!

La voz de Yunho, además de fuerte y ronca se oía torpe y forzada, como si le costara emular las palabras… ¿estaba borracho? Todo parecía indicar que si, aunque ese era el trato era el usual del líder para con el, por lo que era difícil distinguir con claridad cual era su estado:

-Hyungnim… es casi media noche… ¿ha estado bebiendo?

-¡¿Y a ti que cojones te importa?! ¡Ven aquí! ¡Ya! –Grita- ¡Un perro no pregunta cuando su amo lo esta llamando, solo va y ya!

Changmin suspiro un momento, mientras escuchaba los murmullos inentendibles del líder, dándose por vencido, cerró los ojos y los apretó, preparándose mentalmente para decir “Estaré allí”. Pero Yunho le colgó antes de que pudiera dar respuesta, y el solo se preparo para colocarse de vuelta la ropa de calle y dirigirse a la mansión de los Jung.

El lugar era inmenso, solo de el portón del frente y la entrada había un largo recorrido en auto, auto que fue directamente a recogerlo a casa al parecer por ordenes del lider. Llego y entro, y las sirvientas lo recibieron con caras de pánico mientras lo dirigían a la habitación, y desde el pasillo por el que caminaba podía escuchar el estruendo de cosas siendo tiradas.

Changmin entro a la habitación, encontrándose con un reguero impresionante, cosas esparcidas por el piso y las mesas, bolsas rasgadas y mas y mas objetos rotos. Había tres mucamas paradas mirando sorprendidas como Yunho estaba sentado en medio del desastre sacando el contenido de las bolsas y luego destruyéndolos con sus propias manos. Changmin también se percato de las botellas de alcohol que reposaban en el piso, viendo la causa de todo ese tornado de desorden.

El menor se acerco y le quito la bolsa que ahora Yunho tenía en sus manos, este levanto la mirada, sus ojos estaban cristalizados, prueba innegable que estaba totalmente borracho.

-¿Qué? –le pregunto cortante a Changmin-

-Hyungnim… ¿Por qué no duerme un poco? –le invito amable-

Yunho se quedo mirando el rostro sonriente del menor, coloco una mueca de molestia y dejo la bolsa un lado para levantarse y caminar hasta la cama con torpeza, a lo que Changmin les dio la confianza a las mucamas para que empezaran a limpiar todo.

El líder se quedo en silencio recostado contra el almohadón, Changmin se acerco y se poso de pie a un costado de la cama, tratando mínimamente de comprender porque Yunho estaba tan obediente. No falto mucho para que este le clavara la mirada de nuevo, y Changmin instintivamente sonrió, había estado practicando aquello y ya se le hacia rutinario sonreír a cada mirada del líder:

-¿Por qué viniste? –le pregunto en un susurro-

-Porque usted me llamo… -respondió de inmediato-

Las mucamas habían terminado de recoger todo e inmediatamente se retiraron de la habitación, dejando a Changmin y Yunho solos. El menor suspiro al ver que Yunho seguía mirándolo sin decir nada, cuando en un estado normal ya le hubiera dicho –gritado- muchas cosas:

-¿Hay algo que quiera preguntarme? –le miro-

-Alguna vez… ¿te has sentido abandonado? –le indago con un rostro triste- ¿solo?

-Puede ser –respondió- todos pasamos por eso, pero a final de cuentas siempre hay alguien ahí aunque nos neguemos a verla…

-Entonces… ¿eres tú?

-¿Eh?

-La persona que esta conmigo ahora, cuando todos los demás me abandonaron… ¿eres tú? ¿Tengo que resignarme a que seas tu? Un absoluto desconocido…

Changmin le miro sorprendido de aquellas palabras, la mirada del líder era tan pero tan triste, como si en verdad estuviera lastimado, como si algo muy grande le hubiera echo quedar totalmente desprotegido e indefenso. Era la primera vez que Yunho le daba alguna sensación de vulnerabilidad, cuando se caracterizaba por ser alguien autoritario y dictador, y con una actitud tan fuerte como un muro de roca:

-No se a lo que se refiere Hyungnim… pero en este momento, mi deber es hacer lo que usted me diga…

-…

-¿Dije algo que no debía?

-Porque te impuse esto… ahora estas aquí… -musita- solo por eso…

-¿Eh?

-… Vete a casa –le respondió, luego de un largo silencio- y no menciones nada de lo que viste aquí hoy otra vez…

Yunho se giro en su propio cuerpo y le dio la espalda a Changmin, este ultimo sintió mucha pena por el, se veía tan lastimado que por inercia se acerco y le acaricio el hombro como forma de despedida, “entonces, que descanse” le dijo. El era alguien simple, que se dejaba afectar bastante por las situaciones a su alrededor y pensó que en ese momento lo que Yunho mas necesitaba era conforte, independientemente de que el chico fuera un ser odioso. No podía odiarlo, aunque mucho quisiera, lo cierto es que se sentía agradecido con el, y esto, solo era una forma –poco ortodoxa y fastidiosa- de pagarle su bondad, si es que algún momento la tuvo.

Así, se dirigió a la salía mientras Yunho se dejaba la vuelta y miraba su espalda desaparecer, y de una forma u otra se relajo un poco mas y cerro los ojos, con la sensación de que estaría tranquilo por esa noche, sintiendo el leve contacto de la mano de Changmin en su hombro.

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A la mañana siguiente, la madre de Changmin subió a su habitación y lo levanto apresurado mientras prácticamente lo saco de la cama a jalonasos. Changmin estaba aturdido y bajo las escaleras con dificultad, viendo como de repente una enorme cantidad de bolsas con víveres estaban en la sala. Sus hermanas saltaban de la felicidad destapando las bolsas llenas de toda clase de artículos gritando que la navidad se les había adelantado; Al menor le extraño a gran manera aquel regalo repentino, subiendo de regreso a su habitación y pensando seriamente quien pudo haber sido.

No basto mucho tiempo para que su celular le diera aviso de una llamada, la contesto inmediatamente sin ver de quien se trataba, aun afectado por el sueño que cargaba encima:

-¿Estas despierto?

-¿H-Hyungnim?… No me diga que…

-Viniste a mi casa a medianoche aun cuando estabas en tu tiempo de descanso, es tu hueso, por obedecer y estar aquí.

-¿Hueso…?

-Es lo único que recibirás, así que no te ilusiones y ¡espero que estés aquí a primera hora para recogerme el lunes!

Yunho colgó antes de que Changmin pudiera decir nada, y el menor se quedo meditando si esto tendría alguna repercusión en su deuda… “es un hueso” recordó y se tranquilizo al saber que, como la ropa que le habían comprado era no mas que una compensación extra por su trabajo, y sonrió al pensar que toda esa comida podría disfrutarla también, sin remordimientos.

Por aquella tarde disfrutaría de una salida al parque, un paseo para disfrutar su vecindario de nuevo, tratando de regresar a la vida que tuvo antes de entrar a aquel edificio…

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Una invitación llego repentina a las casas de los respectivos herederos, la llegada de un importante parlamentario el país que obligaba a los jóvenes a asistir a una particular fiesta de coctel en el palacio presidencial, por supuesto, Jung Yunho siendo el único hijo del primer ministro Coreano estaba obligado a asistir, y para el no había nada mas fastidioso y tajante que este tipo de reuniones sociales y protocolarias.

Los 4 herederos se verían nuevamente luego de algún tiempo, con la finalización de los exámenes y la pronta llegada de las vacaciones no se habían visto de nuevo y aquella fiesta iba a ser el lugar elegido. Gran parte de su distanciamiento se debían a las tensiones que habían surgido entre ellos y que estaban empezando afectar su hasta entonces fuerte amistad.

Se aproximaba la hora, la limosina de los Jung paseaba alrededor del vecindario del plebeyo Changmin, hasta que este fue localizado mientras regresaba a casa, con los auriculares en los oídos y comiendo tranquilo una paleta de dulce que había comprado. El lujoso auto negro se estaciono a su lado, tan vistoso que era imposible no notarlo, e inmediatamente el aludido volteo y la ventallina trasera del auto fue abierta:

-Entra –le ordeno Yunho-

-H-Hyungnim… ¿Qué hace aquí?

-¿Eres sordo? –le menciono irritado- ¡Entra!

Changmin obedeció, entrando al auto que arranco rápidamente, mientras Yunho que se encontraba vestido con súbita elegancia de un príncipe miraba al plebeyo a su costado completamente horrorizado. Jeans desgastados, zapatos igual de desgastados, el cabello desordenado, la cara sucia de dulce y una vieja sudadera:

-¿Eres un niño? No te ordene que botaras esa basura que tenias como ropa…

-Usted dijo que no quería verla, peor no me aviso que vendría, asi que me la coloque… es mi ropa de siempre y es muy cómoda.

-¡Tsk! Te lo ordeno ahora, una vez regreses a casa botaras y quemaras todo lo que tengas que luzca igual a lo que tienes encima. No gaste todo ese dinero por nada… ¿entendido?

-… si…-hace un puchero-

-Y… -duda en hablar- Gracias… -dice muy bajo-

-¿Eh?

-¡Olvidalo! –Grita- ¡ahg! ¡Nunca escuchas nada!

A pesar de que aquel era el tono habitual, Yunho no aprecia tan molesto con el como en días anteriores había sentido, se sentía como si estuviese mas relajado con el. Y claro, aun le sorprendía el gesto que había tenido con el y su familia:

-Gracias por lo de esta mañana…

-Es un hueso –le interrumpió- No es la gran cosa.

El auto se detuvo y ambos salieron de el, Changmin fue conducido hacia una boutique, una severamente elegante en la que todos, incluso los clientes, vestían de forma muy sofisticada, por lo que, al ver entrar al menor, las miradas despreciativas no se hicieron esperar. Aunque, si hacia un recorrido de su vida los últimos acontecimientos contenían muchas de esas miradas, y le asustaba el estar acostumbrándose a ellas.

El líder dio un vistazo rápido por los colgadores, siendo seguido por Changmin casi al mismo paso, luego, Yunho apunto con un dedo el traje que deseaba, y la mujer que los recibió lo tomo y se lo mostro, el líder asintió y seguidamente la mujer se acerco hasta Changmin y con un ademan que hizo con su mano le pidió que la siguiera. El menor miro al líder y este solo se sentó en uno de los mullidos sillones mientras la mujer halaba al menor del brazo y lo hacia entrar en un vestidor.

Minutos después Changmin salió, Yunho lo miro rápidamente y con otro ademan índico que se lo llevaría, Changmin pretendía quitárselo pero Yunho lo detuvo y le miro, el menor no entendió hasta que el líder le hablo:

-Nos vamos ya, así que tienes que quedarte con el…

Paso seguido se dirigieron a un salón de belleza donde el desastre que Changmin tenía por pelo y cara fue arreglado de forma muy elegante, lo cortaron un poco atrás y le hicieron un flequillo largo y de esa forma quedo listo.

Insistió en preguntar a donde se dirigían, pero el líder solo lo mandaba a callar y le pedía que esperara, se canso y aguardo hasta que se fijo a través de la ventana que estaban dirigiéndose a la casa azul, y abrió los ojos al darse cuenta el porque de su ropa, su cambio de aspecto, la elegancia de Yunho, todo se reducía al evento de gran categoría que al parecer iba a realizarse en aquel lugar.

Changmin hizo un análisis rápido, era un evento de suma importancia, y su mente lo llevo inmediatamente al único evento comparable con este al que haya asistido, la fiesta de cumpleaños de Jaejoong, y el pensar en aquella celebración inmediatamente supo que la presencia de aquella persona era necesaria. Sintió un escalofrió tremendo ¿Cómo podía explicar su presencia allí? o mas importante que eso, su presencia, junto a Yunho. Y luego de pasar el pánico por la presencia del mayor, también pensó en los otros dos miembros, que tampoco tenían idea de la situación que lo envolvían a el y al líder.

El auto se detuvo finalmente, Yunho entro por la puerta principal bajo el flash de todas las cámaras de los reporteros y Changmin lo siguió seguro a unos metros de allí camuflándose entre las personas que no caminaban por la alfombra dispuesta. Finalmente, levanto la mirada para saber la ubicación del líder, topándose inmediatamente con la imagen perfecta del ser que sonreía ante las cámaras y se unía en un apretón de manos con Yunho… Jaejoong- Nuevamente se altero, bajando la mirada y cubriendo su rostro con sus manos mientras se escabullía más rápido…

-¿Qué sucedió? –Dice entre dientes- Creí que te quedarías mas tiempo en el extranjero –sonríe forzado-

-Para tu infortunio –aprieta su mano de forma dolorosa- ya estoy aquí, aguántatelo –susurra entre dientes-

Yunho dirigió la mirada rápida hacia un lado, percatándose de como Changmin había desaparecido totalmente, fijo la mirada en Jaejoong nuevamente, dándose cuenta inmediatamente del porque de aquella huida por parte de su mascota, y sonrió de aquella forma, tan escabrosa, como solo el podía sonreír-. El mayor le miro, dándose cuenta de aquella tétrica sonrisa y coloco una mueca de asco mientras se dio la vuelta y siguió caminando dejando al líder responder las preguntas de la prensa.

-Has llegado –le sonríe Yoochun- ¿Tantas preguntas te hicieron?

-No, me tope con Yunho en la entrada y tuvimos que hacer publicidad –dice desganado- Es raro que no viniera con Junsu…

-Sobre eso, creo que deberíamos hablar –le toma por el hombro- esos dos no están en buenos términos…

Jaejoong puso una cara de incredulidad total, tomando rápidamente una copa de vino que uno de los meseros dispuso frente a ambos, su mirada se fijo en un chico de blanco que yacía de perfil un poco lejos de él, pero en ese momento, la voz de Yoochun lo desconcentro y cuando volvió la vista ya aquella silueta había desaparecido:

-¿Me estas escuchando?

-¿Eh?.. Ah, lo siento, me distraje un poco… -le mira- ¿Yunho y Junsu en malos términos?

-¿Vamos a otro lugar? Este asunto no es para hablarlo en público…

-¿Tan grave es?

-Mucho…

El rostro de Yoochun se tenso cuando puso toda su energía en aquel “Mucho” y Jaejoong le creyó que se trataba de algo grave, y le siguió hasta que encontraron un balcón con puerta corrediza al que salieron y se encargaron de cerrar la puerta para poder hablar en total confidencia:

-Bien ¿Qué es eso tan grave?

-Junsu… termino con Yunho…

El mayor miro a Yoochun con una expresión de gracia y seguidamente se echo a reír ante aquella afirmación, luego volvió la vista a Yoochun que seguía con esa expresión de preocupación incambiable:

-¿En verdad? Pero… como… digo, desde que los conozco no han soportado estar separados ni dos horas…

Yoochun en ese momento saco su teléfono, mostrándole al mayor una fotografía, al verla, Jaejoong abrió los ojos grandemente ante la sorpresa y mirando contrariado a su compañero, la fotografía mostraba a Junsu y a Yunho, compartiendo un beso en lo que al parecer era una de las habitaciones del Golden Building, dejando bastante claro en el detalle de la foto, que su relación iba a una dirección distinta a la amistad de infancia:

-P-Pero…

-Le enviaron esta foto a los padres de Junsu, esto paso mientras estábamos en Inglaterra –dice con preocupación- Su padre lo golpeo, y le obligo a cortar toda relación con Yunho a menos que quisiera que los lazos entre las dos familias se rompieran…

-No lo entiendo ¿Quién saco esta foto? ¿Quién la envió?

-No lo se, fue un sobre dejado directamente en el buzón, sin remitente, cuidadosamente sellado…

-Imposible…

-Eso no es todo –toma un sorbo de vino- adelantaron su compromiso, incluso impusieron una fecha y el acuerdo con la familia de su prometida…

-Sabes, detesto a Yunho, pero el jamás permitiría que…

-Yunho no sabe nada de esto –le interrumpe- ni de la foto, ni de la discusión de Junsu con su padre y mucho menos de su matrimonio adelantado… -hace una pausa- Junsu tomo la decisión de dejarlo inventándole una excusa y al final termino destrozado, apenas y pudo levantarse para dirigirse acá… No ha querido comer y se que no ha dormido mucho…

-¿Qué han dicho sus padres? ¿Por qué no trata de convencerlos?

-No los ha visto, se ha estado quedando en mi casa desde entonces… No sabe si padre lo golpeara de nuevo y su madre le ignora las llamadas… Por el momento, Junsu me ha pedido que deje a Yunho fuera de esto, pero en su intento de alejarlo me incluyo a mi en el problema, Justo ahora, Yunho debe querer matarme…

-¿Incluirte?

-Junsu le dijo que estaba enamorado de mi, que por esa razón no podía seguir a su lado… -se poya en el barandal del balcón- Junsu no se merece esto, y en este momento quisiera decirle a Yunho toda la verdad…

-Yunho no haría nada –se apoya a su lado- En caso de que apoye a Junsu el señor Jung se opondrá también, sabes que Yunho jamás ha podido contradecirlo o imponerse aun cuando quisiese. Lo mismo pasa con Junsu, jamás desobedecerá a sus padres.

-¿Qué vamos a hacer?

-Por el momento, calmarnos, justo hoy debemos fingir que todo esta bien. No podemos hacer nada sin la aprobación de Junsu… tomemos su palabra y dejemos esto como esta, y concentrémonos en averiguar quien hizo todo esto.

Un suspiro ahogado se escapo de los labios de Yoochun, que tomo la palabra de Jaejoong y ambos regresaron a la recepción en donde ya el líder era acaparado por las personas. Parecía más tranquilo y complaciente que en anteriores ocasiones, pero quizás esto se debía a la contante vigilancia de su padre que estaba a algunos metros de su posición. Una vez los dos herederos se acercaron al tercero, este ultimo no hizo ningún tipo de disimulo respecto al desagrado que uno de los dos hombres le causaba, dándose la vuelta y caminando tranquilamente, siendo escoltado por un chico alto que se mantenía de espaldas a ambos, claramente tratando de esconder su rostro.

Los ojos de Jaejoong se clavaron en aquel chico, conocía tan bien las proporciones de su cuerpo que si se equivocaba respecto a quien era se podría considerar que algo iba mal con el, pero atado con la presencia de Yoochun junto a el -quien parecía estar tan preocupado por el reciente dilema que parecía no percatarse de aquel pequeño detalle- se trago su curiosidad y se quedo de pie, pretendiendo no saber de quien se trataba. Pero, era tan malo fingiendo con respecto a Changmin, que sus ojos seguían el mas mínimo movimiento de este ultimo, y basta recalcar que estaba completamente enojado, pues la presencia de el menor en aquel lugar solo podía ser obra de Yunho, y si se trataba de una obra del líder, significaba que algo había pasado entre esos dos y eso le cabreaba aun mas.

Junsu apareció finalmente una hora y media después, y se aproximo inmediatamente a los dos herederos, lucia demacrado y pálido aun por sus intentos de cubrir su falta de sueño con maquillaje. El mayor escucho como Yoochun empezaba a reclamarle a Junsu en susurros, y aprovecho aquella distracción para alejarse y salir de aquella duda que le estaba carcomiendo la mente en aquel instante, avanzando con sigilo a través del salón, con la intención de no levantar sospechas en nadie.

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Changmin se mantuvo a una distancia prudente del líder, aun no entendía el porque se encontraba allí, cuando Yunho parecía bastante ocupado y el realmente no tenia ninguna función que cumplir. Debía encontrar el momento y el lugar para marcharse en silencio, pero a cada que intentaba hacerlo, el líder se daba la vuelta y le lanzaba su mirada de “quédate donde estas” dejándolo congelado. Finalmente se aparto de la multitud, saliendo por un pasadizo que daba acceso a varios salones más privados que al parecer eran de acceso publico. No le importaba en ese momento que Yunho le reclamara luego por haberse ido, no estaba mentalmente preparado para enfrentar a cierta persona que se encontraba tan cerca y que gracias al cielo al parecer no lo había notado. ¿Cómo explicar lo que estaba sucediendo? Aun no lo sabia, y era por eso, que era mejor marcharse antes de que otro problema se le formara.

Estaba tratando de hallar la salida cuando sintió una mano que se apoyo en su hombro, pensó que había sido encontrado, y pensó rápidamente en que hacer para que el líder no le gritara en ese momento, en ese instante se viro y se quedo con el “hyungnim” en la boca mientras se percataba de quien era en realidad el que lo había detenido:

-¿Hyungnim? –le mira molesto-

-H-Hyung… ¿C-Como…?

La mirada del mayor se poso recorriendo su cuerpo lentamente notando su ropa, suspiro molesto, seguidamente lo agarro por el brazo abriendo una de las puertas de un salón vacío y entro ahí con el menor, asegurando la puerta antes de enfrentar su mirada:

-Solo preguntare algo, y espero equivocarme con lo que diré pero… ¿Estas aquí con Yunho?

Changmin se encontró enfrentado a su peor temor, y miro al piso moviendo sus manos de forma nerviosa mientras luchaba con las palabras que trataba de formular en su mente y salían en balbuceos:

-E-Esto… Hyung… es… una l-larga historia

-Pues, resúmela, antes de que empiece a sacar mis propias conclusiones.

-Solo puedo decir que, estoy bien, nada malo ha pasado y… solo…

-¡No me mientas! –dijo fuerte acorralándolo contra la pared, posando ambas manos fuertemente contra la superficie bloqueando a Changmin con sus brazos- si Yunho esta metido en esto algo tuvo que haber pasado, tu, que has pasado por bastantes por culpa de ese animal ¡¿Qué explicación puede tener todo esto?!

-H-Hyung –le mira nervioso- Confía en mi, en este momento… no puedo…

-¿No me vas a decir nada? –Dirige la mirada a un lado- Bien, le preguntare a el mismo entonces.

Jaejoong pretendió irse, pero fue rápidamente detenido por Changmin que se aferro a su brazo, supo que habría problemas, recordó la condición que el lider hizo y viendo que el mayor no parecía ceder en su pretensión de el mismo enfrentar a Yunho, busco detenerlo con la única cosa que podía usar a su favor.

Se lanzo hacia el aferrándose a su cuello y poso sus labios sobre los del mayor, algo brusco, y en ese momento este ultimo pretendió apartarlo pero sus brazos se quedaron inmóviles ante el movimiento leve y torpe de los labios del otro, dejándose envolver fácilmente por la cálida sensación que le brindaba y en poco tiempo sosteniéndolo de la cintura mientras profundizaba el beso el mismo, dejando a su lengua ser testigo luego de mucho tiempo del dulce sabor, del néctar propio que aquellos besos solo Changmin podía brindarle. Le acorralo de nuevo contra la pared mientras la profundidad del beso iba aumentando, escuchándose claramente el sonido de sus labios encontrándose, creando aberturas leves para tomar aire y retomando la tarea cuando sentían que podían respirar de nuevo.

Finalmente se separaron paulatinamente, encontrándose con la mirada de uno fija en el otro, y sus respiraciones aun mezclándose en el poco espacio que los separaba. Changmin aprovecho para abrazar a Jaejoong con fuerza, pretendiendo seguir atajándolo:

-E-Estoy trabajando con el –habla finalmente- tuve una dificultad bastante grande que me obligo a pedirle ayuda y en este momento solo trabajo como su asistente en compensación. Por favor, confía en mi Hyung.

-Si me explicas exactamente lo que paso…

-En este momento no…

El timbre del celular de Changmin interrumpió la conversación, al tiempo que sabia claramente de quien se trataba, cerro los ojos y tomo la llamada, bajo la mirada acusante y aun molesta de Jaejoong:

-¿si?

-¿Dónde diablos te metiste? -bufa Yunho molesto-

-Hyungnim… en este momento yo… r-regrese a casa…

- Pretenderé que te creo porque estoy ocupado, pero encárgate de que el imbécil de Jaejoong entienda bien las cosas, te concederé esta oportunidad para que le adviertas que no puede acercarse, si le revelas algo del contrato ¡Estas muerto!

-I-Imposible… ¿Cómo?

-¡¿Me crees idiota?!-dice en un grito- Te lo advertí, ahora has lo que te corresponde y regresa a casa, te veo el lunes en mi mansión temprano…-cuelga-

Changmin dio un resoplido, percatándose luego de la notablemente descolocada expresión de la persona cerca de el.

-Ya cumplí con mi tiempo aquí, así que vámonos, tengo una explicación que escuchar.

Jaejoong planto su mano nuevamente en el brazo de Changmin, arrastrándolo a través del pasadizo hasta llegar a la salida de emergencia de la casa azul que daba a un aparcamiento privado, caminaron un poco mas hasta llegar al auto en la que el mayor había llegado y subieron en el inmediatamente. Partiendo de la fiesta, sin percatarse de que alguien los había estado observando desde que ambos ingresaron al lugar:

-Asi que… el es Changmin –musito observando desde una de las ventanas- Tal parece que mi hijo nunca aprende…

-¿Qué quiere que hagamos, señor?

-¿Cómo llego a la Casa azul?

-Al parecer, vino en compañía del Joven Yunho, actualmente se desempeña como su asistente…

-¿Yunho? –Sonríe- Entonces, me encargare personalmente del asunto… Dejemos a mi hijo hacer lo que quiere por el momento –mira al escolta- Pro el momento creo que pediré una audiencia con el señor presidente, me será de mucha ayuda en este momento, en caso de que Yunho sea un estorbo. Nos marcharemos…

-Enseguida, señor…

5 Comentarios:

  1. andala se esta poniendo bueno, si esto fuera un drama changmin se quedaria con yunho, siempre se quedan con el maldito, pero a la vez tambien podria quesarse con jaejoong por la tipica situacion de que los padres, abuelos alguien de la familia se lo prohibe asi que no se con quien termine, yo personalmete quiero que ande con el jaejoong pero que termine con yunho

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  2. Oh! my god!!!

    valio la pena esperar me encanto este capo xD es super ^ ^ ah! pero que papà tan entrometido u.u no me gustaria un suegro asi de entrometido : ) kekeke please siguela es super genial ^ ^

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  3. Anónimo4/29/2012

    Que se quede con Yunho!!!!!!!!!!!! *O*

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  4. Anónimo5/01/2012

    Tengo entendido que la autora arruinara el final y lo dejara en JaeMin x___________x

    Si es así que mal :(

    O sea el propósito de que Yunho haya sido un mierda con Changmin no significo nada.. solo relleno y no habrá emoción... el final seria bastante predecible con JaeMin.... c_c

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