Existencias Entrelazadas. Prólogo

En el mundo el bien y el mal solo eran simples palabras que se escuchaban de vez en cuando entre las personas, pero en otro plano lejos de la tierra. YooChun hijo del demonio más poderoso no aceptaba que los humanos vivieran con tanta libertad, le repugnaba el trato hacia ellos por parte de los dos bandos, el de arriba no los castigaba como debía ser y su padre no hacía nada, era injusto que él viviera como hasta ese día privado de las comodidades de los humanos. Así que buscó una forma de que esas criaturas inferiores pagaran de una vez todo lo que hacían y él se encargaría de eso, había una antigua leyenda la cual explicaba como aquellos que no pueden pisar la tierra prometida al ser humano, pudieran ingresar a esta, solo bastaba de un alma pura y un ser celestial el cual sacrificaría a esa alma para darle paso a la oscuridad, sin pensarlo armó un plan el cual lo sacaría de ahí, pero primero tenía que buscar a una criatura celestial que no estuviera conforme con la decisiones que se tomaban en el paraíso y no fue difícil, uno de los arcángeles llamado JunSu se oponía a la vida que llevaban los humanos y no solo eso, les tenía cierta envidia ya que ellos disfrutaban de todos los placeres los cuales estaban prohibidos para ellos, así que sin pensarlo y planeado, este terminó enamorado de YooChun el cual le prometía una existencia llena de todo lo que a él le prohibían, pero a JunSu no le imputaba nada de eso lo unió que deseaba era sentir ese extraño sentimiento que los humanos llamaban amor y pensaba que al lado de YooChun lo conseguiría.

Sin perder tiempo JunSu buscó por todos los rincones del planeta, buscando una alma pura la cual era difícil de conseguir en estos tiempos ya que los humanos estaban llenos de pecados por más insignificantes que eran, pero aun así quedaba una alma pura de corazón, era un joven llamado Jung YunHo el cual no conocía maldad alguna y todo estaba reflejado en su forma de vida.

Aunque ellos realizaban todo a escondidas de los altos mandos de sus respetivos planos, los líderes de cada lugar no tardaron en darse cuenta de esto y actuaron en silencio para poder atraparlos enviando a dos criaturas a cuidar del joven estudiante, ya que el equilibrio no debía ser roto ya que los altos mandos habían hecho un acuerdo dejando que la humanidad decidiera por cual camino seguir.

Del paraíso fue mandado uno de los ángeles más importantes y del inframundo a uno de los demonios de confianza con la simple tarea de proteger al humano y capturar a los que atentaban contra él.

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