Lust Caution cap 1

Cuando entraste aquí el aire salió
Y cada sombra se lleno de duda
No se que es lo que me has hecho
Pero se que tan cierto es esto:
Quiero hacer cosas malas contigo…
[Bad Things, Jace Everett]

Al principio todo comenzó como un juego, un experimento, una revolución en nuestras hormonas de adolescentes. Algo que parecía ser solo una cosa pasajera, pero tal como alguna vez escuché comentar en la escuela..."Una vez que empieces, no podrás parar..." jamás creí que eso fuera posible, bueno...hasta que Yunho comenzó a vivir con nosotros y… perdí mi virginidad con el aquella noche. Aún lo recuerdo como si fuese ayer…

~Flash back

Ambos estamos en el sillón mirando una película de vampiros que yo había arrendado la noche anterior. Mis padres y mi hermano habían salido a visitar a algunos parientes, así que solo estábamos los dos en la casa. Yo estaba fascinado con ella, Yunho mas bien parecía algo perdido, porque no parecía prestarle mucha atención, de hecho estaba más concentrado en beber de su cerveza que en mirar la televisión.

Mientras la película avanzaba me hallaba cada vez mas envuelto en la trama, tanto que hasta lance un quejido al ver como el vampiro protagonista bebía la sangre de un joven sin piedad alguna y ante esto Yunho comenzó a reírse

“Vamos Su, no me digas que te da miedo un poco de sangre”
“Claro que no, no seas idiota” le respondo dándole un leve empujón, pero de pronto una imagen comienza a formarse en mi mente, me veo a mi mismo siendo el joven atacado por Yunho, quien bebe de mi sangre despiadadamente...el pensamiento provoca una pulsación en mi entrepierna y una ola de calor azota mi cuerpo. Mis ojos se abren como dos platos al percatarme de esto y el color comienza a subir a mi rostro. El cambio en mi es evidente, así que para evitar un incomodo interrogatorio me paro abruptamente, apagando el televisor y sin darme vuelta a mirarlo me pongo en marcha en dirección al cuarto que compartimos.
“Junsu? que pasa? te sientes mal?” lo escucho gritarme, pero no le respondo. Lo único que quiero es tirarme a la cama y olvidarme de aquel pensamiento…y por que me estoy sonrojando de nuevo? Dios, estoy cada vez peor. Lanzo un suspiro mientras me cambio a mi pijama y luego me meto a la cama, cerrando mis ojos con fuerza tratando de bloquear aquella imagen y poder dormir algo.

Al cabo de un rato escucho a Yunho entrar en la habitación. Trato de hacerme el dormido para que no pueda interrogarme porque sinceramente no tengo ganas de inventar alguna excusa para tapar lo que me esta sucediendo. Y es que hace varios días que estoy teniendo sueños extraños y pensamientos inadecuados con respecto a mi mejor amigo, cosa que me atormenta cada día más. No es que sea gay, he salido con algunas chicas y todo pero últimamente he notado que la cercanía de Yunho ha comenzado afectarme. Se que no es normal que me pase esto y es que todavía estoy confundido, pero por mas que me cráneo pensándolo no hayo la manera de dejar de tener estos pensamientos.
El sonido de su ropa cayendo al suelo me trae de vuelta a la realidad y no puedo evitar abrir lentamente mis ojos, acostumbrándome a la poca oscuridad que rodea la habitación. Lo veo de espaldas a mi cama, sin polera y solo con sus bóxers. Puedo notar como la luz de luna delinea su figura y nuevamente siento el calor invadir mi cuerpo. El se agacha a recoger su ropa para luego depositarla sobre una silla que hay cerca de su cama y acto seguido se mete a ella, sin percatarse de mis ojos vigilando sus movimientos. Agradezco a dios que no se haya dado cuenta porque realmente no tengo explicación alguna sobre lo que acaba de pasarme. Finalmente el cansancio me vence y mis ojos se cierran. El sonido de su respiración armónica me relaja, permitiéndome conciliar el sueño.

Despierto exaltado, jadeando. Siento todo mi cuerpo empapado de sudor y un calor permanente en mi entrepierna agobiándome. Me ha vuelto a pasar y esta vez ha sido la peor de todas. He soñado con Yunho besándome, tocándome, haciéndome gemir hasta no poder más y el solo hecho de recordarlo hace despertar mi erección pulsante… las imágenes de mi sueño demasiado vividas como para ignorarlas, además del roce de las sabanas con mi ropa interior haciendo todo mas difícil. Solo hay una forma de solucionar esto y maldigo internamente a mi cuerpo y a mis hormonas por traicionarme de esta manera. Procedo a quitarme la sudadera, de pronto me siento sofocado. Lanzo un suspiro, volviendo a maldecirme mientras lentamente, culpablemente mi mano baja hasta mi erección y comienzo a masturbarme…mordiendo mis labios para reprimir cualquier quejido que pueda despertar a mi acompañante, que por cierto es de sueño ligero, haciendo la tarea mucho mas exhaustiva. Mi mente vuelve a traicionarme una vez mas repitiendo las imágenes del sueño, de pronto ya no es mi mano la que me masturba sino la suya. Mi erección vuelve a pulsar con mucha mas fuerza y esta vez no puedo evitar dejar salir un gemido que invade toda la habitación. Yo me congelo al percatarme de esto, paralizado por el miedo, pero aun así abro los ojos para ver si hay señal de que Yunho este despierto y para mi mala suerte ahí esta, sentado sobre su cama mirándome inquisitivamente

“Su, que estas haciendo?” su voz tiene un tono burlesco. Claramente ya me ha visto, pero aun así me giro abruptamente, dándole la espalda y tratando de esconder mi vergüenza
“No es de tu incumbencia, vuelve a dormir” trato de sonar lo mas adulto posible, pero es obvio que fallo pues el no hace mas que reírse

“No es de mi incumbencia ah?” vuelve a reírse y yo lo único que quiero es que me trague la tierra para no tener que estar pasando por esta situación
“Junsu, te estabas masturbando, compartimos el mismo cuarto y aun así dices que no es de mi incumbencia? Insólito. Por cierto, me pregunto que habrás soñado que te tiene tan afectado…” su tono es algo confuso, tentador quizás? claro que no, estoy delirando...si supiera que la razón de mi excitación es el de seguro no tendría ese tono.

Lo escucho levantarse de su cama. Dios, definitivamente le doy asco seguro que se cambia de cuarto, pero como no escucho el ruido de la puerta me doy vuelta y casi me da un infarto cuando lo veo arrodillado cerca de la cabecera de mi cama. Su mirada es intensa, casi acusadora, como si estuviera exigiéndome una explicación

“Yunho, que haces?” trato de sentarme, pero el roce de las sabanas con mi erección me obliga a morderme el labio para evitar lanzar otro inoportuno quejido. Esto esta mal...muy mal
“Dime Junsu, que es lo que te tiene tan excitado? “ me pregunta, acercando su rostro a mi oído y al sentir su cálido aliento se me hace difícil articular palabra. El sigue mirándome con esa mirada que me esta carcomiendo hasta el alma y esa sonrisa terriblemente sexy que me hace estremecer

“Por que haces esto?” le pregunto y a pesar de que mi rostro esta completamente rojo trato de que mi mirada muestre algo de agresividad
“Hacer que?”
“Por que me coqueteas?”

“Coquetear?” Yunho lanza una risita y de pronto me siento sulfurar “Junsu, por favor...”
“Acaso acercarte y preguntarme que es lo que me tiene así no es coquetear? Que no sabes lo que me provoca esa sonrisa tuya!?” cubro mi boca al segundo después que digo esas palabras, maldiciendo mi costumbre de hablar sin pensar, pero ya es demasiado tarde y no hay vuelta atrás. Cierro mis ojos esperando lo peor: un golpe, un insulto o un portazo, pero como nada de eso sucede los vuelvo abrir, esta vez encontrándome con los ojos de Yunho mirándome fijamente. Su rostro esta mas cerca del mío y ahora puedo sentir el rastro de alcohol en su aliento. El continúa con la misma sonrisa, esa que yo odiaba y amaba a la vez.
“Lo sabia. Crees que no me he dado cuenta como me miras al desvestirme?” como si fuera posible mi rostro se torna aun mas rojo y nuevamente se me hace difícil hablar
“T-Te doy asco, cierto? Yunho lo siento, de verdad que yo-” no puedo seguir hablando porque ha puesto un dedo sobre mis labios, volviendo a sonreír esta vez maliciosamente y acercando su mano a mi entrepierna, rozando tentativamente sus dedos sobre la sabana

“Su...que es lo que quieres hacer?” me susurra al oído y casi me ahogo de la impresión, es que jamás pensé que reaccionaria de esta manera…pero continua acariciándome y de pronto ya no me siento tan inseguro. Cuando aumenta la fricción se me hace imposible reprimir un gemido y es todo… ya no puedo más, es mucho para mí. Mi mente se desconecta y comienzo a actuar sin pensar tomándolo por el cuello y azotando mis labios contra los suyos, desesperado por el contacto, después de todo esto es lo que secretamente he estado soñando y ahora que Yunho parece seguir el juego no hay nada que pueda detenerme.

Al principio se mantiene estático, sin responder al beso y siento mucho miedo. No tengo mucha experiencia en besos así que me esfuerzo por profundizarlo y cuando mi lengua delinea sus labios, abre su boca dejándome invadirlo por completo. Puedo sentir el sabor a alcohol en ella mientras nuestras lenguas comienzan una batalla por dominancia siendo evidente su victoria, porque cuando nos separamos me empuja a la cama, abalanzándose encima de mí y sujetando mis muñecas con algo de agresividad. Lanzo un quejido ante el amarre, pero cuando lo miro a los ojos y veo su mirada oscurecida decido dejarlo por la paz, ya que solo hay una palabra que pueda describir lo que transmitían: lujuria.

Yunho sonríe, puedo sentir que comienza a excitarse y como si leyese mis pensamientos besa mi cuello, descendiendo hasta mi vena yugular y mordiéndola con algo de fuerza, pero nunca al punto del dolor...’debe ser mi punto débil’ pienso, porque de pronto siento mis piernas flaquear y otro gemido escapa de mis labios sin poder evitarlo. El continua mordiéndome y en un instante suelta mis muñecas, pero justo cuando pienso que me dejara tocarlo las lleva sobre mi cabeza y las sujeta con una de sus manos mientras la otra desciende atender uno de mis pezones, erectándolo con sus dedos. El calor en mi entrepierna se hace insoportable y comienzo a retorcerme ante su amarre, pero esto parece no importarle...solo vuelve a sonreír mientras lentamente, tortuosamente su cabeza desciende hasta mis pezones, llevando uno de ellos a su boca y mordiéndolo juguetonamente.
“Ahh...E-Estas seguro que no has hecho esto antes?”

“Claro que no Su, yo lo llamo...instinto“ susurra. Su voz ronca y sexy es música para mis oídos. Siento su lengua descender hasta mi ombligo y no aguanto las pulsaciones en mi entrepierna...
“Yunho...mas abajo” es casi una súplica y es que cada segundo que pasa mi respiración se hace mas agitada y la temperatura de mi cuerpo aumenta con cada una de sus caricias
“Impaciente?” sonríe. Finalmente liberando mis manos de su amarre y al sentirlas libres comienzo acariciar su espalda mientras se encarga de bajar mis pantalones, dejándome expuesto ante el. Me siento algo avergonzado por esto, pero cuando busca mis labios de nuevo todo queda olvidado y comienzo a bajar sus bóxers, buscando frenéticamente el contacto de piel con piel.

Ambos estamos desnudos ahora y al sentir el calor irradiar de su cuerpo, siento mi propio cuerpo ardiendo…ansioso por algo que jamás pensé que desearía de esta manera. Se que prácticamente estoy rogando por su tacto, pero no puedo evitarlo…el deseo que siento me esta volviendo completamente loco y Yunho parece saberlo, porque lentamente su mano comienza a acariciar mi erección e involuntariamente muevo mi pelvis contra ella, mordiendo mis labios e incitándolo a que aumente el ritmo. Pero de pronto deja de tocarme y me mira fijamente a los ojos, adoptando una expresión seria

“Junsu, estamos yendo muy rápido…un poco mas y no creo que pueda controlarme”
El tono de su voz rompe por un momento el hechizo. Lo miro a los ojos y veo un dejo de preocupación. Me siento algo confundido por esto…no entiendo por que quiere que paremos si fue el finalmente el que me dio el vamos, así que trato de insistirle buscando sus labios nuevamente, pero vuelve a sostenerme por las muñecas, reteniéndome a la cama y manteniendo la distancia
“Hay un limite en lo que podemos hacer, pero si cruzamos la línea te vas arrepentir”
“Yunho-”
“Dime que pare”

“No…no pares” susurro. Volviendo a intentar alcanzar sus labios, pero su amarre me lo impide y solo alcanzo a rozarlos por su cuello, sintiéndolo temblar ante el contacto
“Junsu, te juro que si me dices que pare ahora vuelvo a mi cama y no se habla mas del tema”
“Yunho, yo…quiero esto” mi voz vuelve a ser casi un susurro y es que tengo que hacerlo entender que lo deseo, que esto va mas allá de mi…
“Que es lo que quieres?” su tono es mas alto y su amarre se hace mas fuerte
“Por favor…” trato de suplicarle que entienda, pero su mirada se hace más densa y esta vez me sujeta de una manera que estoy seguro, dejara marcas por la mañana
“Dilo!” exclama y puedo ver que la lujuria ha retornado a sus ojos, tornando su respiración aún mas pesada…

“DEMONIOS YUNHO, YO QUIERO ESTO! NO VES LO EXCITADO QUE ME TIENES? NO ME IMPORTA NADA, SOLO HAZLO YA! “ le grito desesperado y sonríe, soltando mis muñecas para acercarse y besarme de una manera casi bestial. Yo rodeo mis brazos alrededor de su cuello, instintivamente acercando mis caderas a las suyas y el roce de nuestros miembros erectos me hace gemir en su boca.

“Vaya…sabia que me deseabas, pero no a este punto” me susurra al separarnos y acerca su boca a mi cuello, sonriendo al sentirme estremecer

“Mm ya no puedo esperar mas...” le respondo, volteándome para exponer mi parte trasera ante el. Me abraza por la espalda, pero al sentir la punta de su erección posicionarse en mi entrada no puedo evitar paralizarme…de pronto siento miedo y es que a pesar de que quiero esto con todo mi ser, se que dolerá y mucho, así que acerco mi mano a Yunho y lo detengo
“Espera...tu debes prepararme” le digo medio sonriendo, completamente ruborizado
“Prepararte?” pregunta algo confuso y cuando lo miro a los ojos se que esta igual de nervioso que yo, porque sus manos comienzan a temblar y me mira con algo de desesperación. La fachada de agresividad y dominancia desapareciendo para revelar al adolescente inexperto y excitado que es. Mi corazón da un vuelco al sentir esto y ya no le respondo, solo acerco mi mano al velador, sacando de el un tarrito de crema. Lo destapo y vuelve a mirarme con confusión. Yo le sonrío cálidamente mientras tomo una de sus manos y hago que unte un dedo en ella, conduciéndolo a mi entrada

“Así no me dolerá tanto” le susurro y asiente, introduciendo su dedo lentamente. Lanzo un quejido ante la intromisión, se siente bastante molesto… pero luego de un rato de acostumbrarme a la sensación comienzo a gemir animando a Yunho a que introduzca otro, cosa que cumple sin protestar, golpeando esta vez un punto preciso que me hace gemir con mas intensidad.

Se lo que viene, pues ha retirado sus dedos y comienza a untar crema en su hinchado miembro. Luego siento la punta de su erección nuevamente en mi entrada y lanzo un suspiro, esperando que lo haga. Siendo el primero y estaba seguro, el único que me poseería de esta forma.

“Susu, estas seguro de esto? Yo no quiero lastimarte” su voz es dulce, casi tierna y siento como entrelaza mis manos con las suyas. Mi corazón da otro brinco porque se que es la primera vez para ambos y no puedo evitar esbozar una sonrisa
“Si Yunho, hazlo…estoy listo”

Al momento que pronuncio esas palabras siento como lentamente desliza su miembro hacia adentro y lanzo un grito, cerrando mis ojos abruptamente para evitar soltar alguna lágrima. El dolor es intenso, desgarrador, casi como si me estuvieran partiendo en dos, pero al escucharlo lanzar un ronco gemido trato de relajarme y volteo mi rostro para verlo intentando morder sus labios, evitando irrumpir de una sola estocada.

“Estas bien? Quieres que me detenga?” sonrío ante la calidez de sus palabras y es que a pesar de todo el deseo que siente, sus ojos me miran con infinita preocupación
“Solo dame un minuto para acostumbrarme”

Asiente y se mantiene completamente estático, probablemente usando todo el autocontrol que posee para evitar moverse y penetrarme como desea. Pero cuando siento que el dolor disminuye y mi cuerpo se adapta a el, muevo mis caderas en señal de que estoy listo e inmediatamente comienza a salir y entrar de mi cuerpo. Un placer que jamás había experimentando me invade por completo y ya no puedo evitar gemir reiteradamente.
“D-Dios Jun…su…que estrecho eres” su agitada respiración golpea mi cuello y siento como mi cuerpo comienza arder de una manera impresionante con cada una de sus estocadas
“Yunho…M-mas rápido, m-mas fuerte…Ahhh…se siente tan b-bien” le digo entre jadeos y el aumenta el ritmo, golpeando el punto exacto donde se nublan todos mis sentidos
“Gime mi nombre de nuevo Su” me susurra sexymente al oído mientras lleva una de sus manos a mi erección, masturbándome y sincronizando el ritmo de sus embestidas con el movimiento de su mano, causando que me apegue aun mas a el, queriéndolo mucho mas adentro
“Yunho…Yunho…Yun-ahh!!” gimo su nombre una y otra vez como si fuera un mantra. Esto parece excitarlo mas, porque intensifica su ritmo al punto de tenerme jadeando, gimiendo y haciendo ruidos que jamás pensé que podía hacer. No se cuanto tiempo habrá pasado, pero de pronto siento sus manos aferrarse a mi cadera mientras un espasmo de placer invade todo mi cuerpo y puedo sentir que su cuerpo convulsiona, derramando su semilla dentro de mi al mismo tiempo que la mía queda derramada en su mano y cae sobre el colchón.
Yunho se deja caer y luego gira su rostro para encontrarse con mi mirada. Yo le sonrío mientras mis ojos hacen un esfuerzo enorme por no cerrarse. Estaba exhausto y puedo notar como las gotas de sudor se deslizan por su frente. Me acerco a el y rodea sus brazos por mi cintura. El sonido de su latido cardiaco lentamente volviendo a la normalidad me tranquiliza y lanzo un suspiro, cerrando mis ojos mientras me acomodo entre sus brazos y dejo que el sueño finalmente se apodere de mí.

Creo estar dormido aun, bueno quizás no. Estoy entre dormido y despierto en una especie de trance, completamente inundado por un sin fin de sensaciones, recordando detalles de todo lo que había sucedido anoche. Había sido verdad o solo un sueño? definitivamente no había sido un sueño, porque siento una molestia en mi parte baja recordándome que ya no soy virgen. Dios! ya no soy virgen!, perdí mi virginidad con el y fue…increíble, mucho mejor de lo que imaginaba. Pero que pasa ahora? Habrá sido lo mismo para el? Y hablando de el…Donde esta? Por que ya no me abraza?. Abro mis ojos con mucha flojera, realmente solo quiero quedarme tumbado en la cama todo el día, pero tengo que hablar con Yunho. Se que quizás será extraño después de lo que hicimos, pero de todas formas es una cosa que no podré evitar, así que procedo a vestirme y a buscarlo por la casa. Lo encuentro en la cocina, sentado en la mesa con una taza de café. Tiene la mirada perdida y parece estar hundido en sus pensamientos.

“Buenos días” le digo suavemente al sentarme junto a el. Definitivamente no me gusta la expresión que tiene en el rostro
“De pronto se me antojó un café” susurra mecánicamente. Su voz no expresa ningún tipo de emoción

“Yunho-” “Te arrepientes Junsu?” mis ojos se abren como dos platos al escuchar sus palabras. Su mirada es dura, casi penetrante y no puedo evitar sentirme algo afligido por la pregunta
“No, no me arrepiento. Cuando te dije que quería lo que pasó anoche hablaba en serio”
“Lo siento” suspira y observo como sus manos se aferran con fuerza a la taza que sostiene “Estoy algo confundido…ayer todo sucedió muy rápido y no puedo explicar mi comportamiento. Quizás fue el alcohol, pero tampoco había bebido tanto, aunque ya sabes lo que dicen…que reduce las inhibiciones… o quizás fueron las hormonas, tu estabas tan excitado y bueno después de todo aun somos jóvenes o tal vez solo fue…”
“ Lujuria?” lo interrumpo, como si leyese su mente
“Si…quizás”

“Yunho” lanzo un suspiro, tratando de encontrar las palabras adecuadas. Se que la lujuria tiene mucho que ver en lo que sucedió anoche, pero me aterra el hecho de que pueda estar comenzando a desarrollar sentimientos por el “No quiero que las cosas cambien entre nosotros, si fue solo lujuria de una noche, entonces no tiene porque afectar nuestra relación, después de todo no me gustaría perderte…ya sabes, como amigo”
“Yo pienso lo mismo, pero no puedo evitar sentirme algo culpable por que lo que pasó. Tampoco quiero perderte como amigo Su”

“Deja de sentirte culpable, no es como si me hubieses violado o algo por el estilo” le digo algo avergonzado y lo observo mirarme con calidez
“Entonces, estamos bien?”

“Claro que si. Me preocupa verte tan serio, no va en ti” le respondo sonriendo y el se larga a reír finalmente relajándose. La atmosfera tensa se ha ido y volvemos a reír como antes.
El resto del día transcurrió de lo mejor, no volvimos a mencionar el tema y realmente creí que había quedado en el olvido, que lo de anoche había sido solo para experimentar y que no volveríamos a hacerlo…bueno, eso hasta que llegó la hora de almuerzo del día siguiente…

Estaba en la cocina preparando las cosas mientras Yunho se encontraba en la mesa leyendo.
“Perfecto” sonrío cuando logro ordenar los utensilios que necesito y me dirijo hacia el refrigerador, sacando el pescado y comenzando a cortarlo en trozos, tarareando una canción que tenia pegada desde ayer. Estaba sumido en mis pensamientos cuando escucho su voz interrumpirme

“Junsu, lo estas cortando mal tienes que hacer trozos mas pequeños, déjame ayudarte”
No supe en que momento se levantó y se acercó a mi, pero de pronto sus manos estaban sobre las mías, ayudándome a cortar. El contacto entre ambos me ruboriza y siento su cuerpo un poco mas cerca, provocando un leve roce de su entrepierna con mi trasero que inmediatamente lanza una descarga eléctrica por todo mi cuerpo…

“Ves? Así esta mejor” susurra. Su tibio aliento roza mi cuello, erizando la piel sensible
“S-Si, gracias” me cuesta hablar… y esto esta muy mal. Comienzo a desearlo de nuevo justo cuando pensaba que lo había superado

“Prueba de nuevo” dice separándose un poco de mí. Esto logra disminuir mi ansiedad, porque definitivamente me pone mal tenerlo tan cerca y lanzo un suspiro de derrota mientras vuelvo a cortar el pescado

“Mmm…no, vuelves hacerlo mal. Creí que ya habías captado la idea, déjame mostrarte como se hace una vez mas” nuevamente se acerca, esta vez pegando aun mas su cuerpo al mío. No se si lo esta haciendo a propósito, pero siento mi miembro pulsar y tengo que morder mis labios para evitar lanzar un gemido…

La cercanía entre ambos comienza a excitarme e instintivamente muevo mi parte trasera contra su entrepierna, tratando de crear algo de fricción a lo que Yunho responde con una especie de gruñido

“Parece que no te estas concentrando mucho en el pescado” susurra y sus manos dejan las mías para posicionarlas sobre mi cintura, apretándome mas a el
“Yunho…” gimo su nombre y se que tiene efecto, porque no tardo en sentir su erección punzante sobre la ropa. El acerca su boca a mi cuello y comienza a darle suaves mordiscos, haciéndome suspirar ante el contacto mientras cierro mis ojos para disfrutar la sensación, sintiendo como la fiebre de la excitación comienza a crecer dentro de mí. Apenas siento que su boca deja mi cuello me doy vuelta para besarlo con pasión, abriendo mi boca y dejando que su lengua me invada al mismo tiempo que rozamos nuestras entrepiernas de manera frenética. La excitación es demasiada y no hay palabras cuando se separa de mi y rápidamente me voltea, bajando sus pantalones al mismo tiempo que yo bajo los míos, mojando sus dedos lo mas que puede para prepararme y luego penetrarme ahí mismo en la cocina. El dolor vuelve a ser intenso, pero esta vez me cuesta menos acostumbrarme y no tardo mucho en perder la noción del tiempo mientras Yunho vuelve a nublar todos mis sentidos, teniéndome a su merced, gimiendo como un animal…y en la casa no se escucha ningún ruido mas que nuestra pasión.

~Fin del flash back

Los recuerdos son tan vividos que no puedo evitar sentir como si los experimentara de nuevo…y como olvidarlos si en esa época viví casi un sueño. Lujuria o no, después de aquello entramos en una relación física. Ninguno de los dos podía negar que nos deseábamos de una manera casi adictiva y siempre encontrábamos la manera de hacerlo y donde, jamás nos descubrieron…pero cuando entramos a DBSK las cosas cambiaron radicalmente.

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