Recuerdo todo lo ocurrido aquella tarde con tanta claridad que me asombra, su calor, el dulce sabor de sus labios con ese toque a menta…permanece en mi boca y aun latente en mi memoria.
No sé cómo es que fui capaz de besarlo de esa forma, mucho menos cómo reuní el valor para tocarlo, para sentir su piel…la verdad no lo sé…pero es que desde esa tarde no he vuelto a verle y duele…duele mucho su ausencia.
En unos días me gradúo, no tengo planes, no sé siquiera si seguiré estudiando o buscaré un trabajo a tiempo completo, la razón de esto es que ya me había dado por muerto y no necesitaba preocuparme por esas cosas. Pero ahora, con éste corazón latiendo en mi pecho tengo una oportunidad, tengo vida…la vida que le robé a alguien más.
Dos meses sin saber de él, creo que realmente lo debo haber espantado, cada vez que pienso en mi forma de actuar de ese día, sonrío por lo estúpido que fui. Es que ¿Cómo se me ocurre tratar así a un chico?, es obvio que iba a salir corriendo, somos hombres. Traté de vivir, de olvidar, de seguir adelante, pero el recuerdo constante de Changmin asaltaba mis pensamientos. Sus labios, su tersa y morena piel, sus ojos con un toque burlesco, sus castaños y desordenados cabellos, su sonrisa…todas esas imágenes se han apoderado de mi mente.
Algo extraño me ocurrió una tarde de camino al trabajo, me desvié de la ruta usual y crucé un parque pequeño…y aquellas extrañas visiones regresaron. Ya no era de tarde más bien media mañana, los árboles eran diferentes, el ambiente también sin embargo seguía siendo el mismo parque. De la nada me encontraba sentado frente a Changmin en el pasto, al verle, aquel estado de monotonía se vio interrumpido por el entusiasmo y la alegría, me hacía feliz estar frente a él de cualquier manera…aun sabiendo que no era real. Nuevamente sentí que estaba mirando a través de los ojos de otra persona, pero podía comprenderle por completo…su confusión, su nerviosismo al estar cerca de Changmin…me era todo familiar, hasta los latidos del corazón.
- Minnie ah, hagamos una promesa - yo dije aquellas palabras, pero no eran mías, no era mi voz ni mi voluntad, todo se oía y veía borroso.
- Claro hyung - aquella sonrisa...no podía verle bien, pero era lo necesario para poder disfrutarla.
- Prometamos que siempre estaremos ahí el uno para el otro, para lo que sea… - poco a poco fui reconociendo la voz…era la misma, la que había comenzado a oír luego de la operación. – Jamás te dejaré solo… siempre estaré a tu lado para cuidarte, se lo prometí a tus padres y lo voy a cumplir – lo decía enserio aquella persona deseaba proteger a Changmin por siempre. Entonces sujeté la mano de Min y pude sentir su calor, supe una vez más que no era realmente yo quien lo sostenía.
La mirada de Changmin era tan diferente, tan llena de paz, de amor, de felicidad…se me acercó y me abrazó fuertemente, me dejé llevar por el momento, se apegó a mi dejando descansar su cabeza en mi hombro, podía sentirlo tan cerca y tan dispuesto a amarme…a amarlo…recordé que no me abrazaba a mí y sentí aún más dolor.
- Te amo hyung – susurró, pero lo pude oír perfectamente, palabras vacías para mí, pero que llenaban de felicidad al muchacho, a aquel muchacho que me dejaba ver a través de sus ojos.
Ya no quise seguir viendo, mis propias visiones y me dañaban de esa forma, ¿Qué era todo eso?, ¿Me estaba volviendo loco?, ¿Cómo podía hacer que se detuviesen?, ¿necesitaba ver a un psicólogo?. Cerré mis ojos, pero podía seguía viendo, seguía sintiendo, me seguía lastimando.
“Por favor para” le rogué a mi mente o a lo que fuera que estuviese provocando aquellas visiones. Y entonces de la nada, abrí mis ojos y todo volvió a la normalidad, estaba oscuro y yo sostenía mi cabeza entre mis manos, sentí como una lágrima humedecía mi mejilla y corrí, corrí con todo lo que tenía.
La visión había parecido de apenas un par de minutos, pero en realidad horas habían transcurrido, daban casi las doce de la noche y yo me encontraba apoyado en la puerta de entrada de mi apartamento, apreciando la agridulce soledad que me esperaba.
- No puedes huir – volví a oír la voz y me estremecí por completo, sentía miedo, miedo de estar loco. - No puedes escapar de mí, porque formo parte de ti – seguía oyéndole, pero por más que buscase con la mirada el lugar seguía vacío.
Entonces, a un lado de la ventana y siendo rodeado por el revolotear de la cortina, pude ver una silueta, en la oscuridad de la habitación pude distinguir a alguien y me alivié al pensar que no estaba perdiendo la cabeza.
- ¿Quién…quién eres? – luché y al fin las palabras salieron, mis manos se habían convertido en puños.
Aquel chico volteó hacia mí, no podía distinguir bien su rostro, estaba todo inundado en la oscuridad de la noche, solo podía verle gracias a la luz de la luna que me dejaba apreciar parte de sus rasgos.
-Soy Tú - me sonrió y avanzo unos cuantos pasos en mi dirección.
No podía retroceder, tenía miedo, estaba muy asustado, no por lo que me pudiese ocurrir si no porque su voz era la misma…la de mis alucinaciones.
-¡Detente! No avances un paso más… o…o… - Desvié la mirada, deseando que todo fuese un sueño.
-o…¿Qué?...¿Llamarás a los caza fantasmas? – estaba demasiado cerca y reía abiertamente.
Alcé la vista y pude verlo, era joven, de piel morena pero pálida debido a la poca iluminación, ojos oscuros pero semblante amable…era una persona común y corriente.
-¿Caza fantasmas? – Pregunté un tanto sorprendido.
-Si Jaejoong, estoy muerto, es un poco obvio ¿no? – me sonreía…de alguna forma el temor se esfumó.
-Deja de bromear…¿Muerto?...si estás muerto ¿Cómo hablas conmigo? ¿Cómo es que te puedo ver? – alcé una ceja mientras me invadían las dudas.
-Tienes algo que es mío – pude ver la tristeza en sus ojos.
-Espera…¿Cómo sabes mi nombre?...¿Eres…eres la misma persona de mis alucinaciones? Yo…- quise seguir, quería que aclarara todas mis dudas, pero me detuve al notar mi estado…las cosas habían empeorado, ahora lo veía frente a mí…a este ser que probablemente había sido inventado por mi cabeza.
-Necesito…necesito que me ayudes a cumplir aquella promesa…tu eres parte de esto, siempre lo has sido - Me miraba fijamente, pero era como si estuviese observando el vacío, su mente se encontraba en otro lugar muy lejos de ahí. – Contesta -.
-¿Qué? – Al instante comenzó a sonar el teléfono. - ¿Cómo supiste?- me volteé por un segundo y al volver la vista, él ya no estaba.
No comprendía nada, mi cabeza dolía, me sentía confundido, estaba convencido de mi locura, pensé que tal vez la persona dueña del corazón sufría de esquizofrenia o algo parecido, y por algún motivo me había contagiado…idioteces lo sé pero era lo más *cuerdo* que pude pensar.
-¿Aló? – contesté en un intento de escapatoria, no quería seguir pensando en lo ocurrido.
-¿Jae? – era Changmin.
Luego de dos meses volvía a oírlo y tenía que ser justo en ese momento, mi respiración era irregular, estaba agitado por la confusión, por los temores, me sentía mal, realmente mal, mis piernas temblaban y comenzaba a sudar frío. Luchaba con todas mis fuerzas por seguir sosteniendo el auricular del teléfono, para que no resbalara de mis manos, para poder seguir oyéndole y hablando con él, me sentía tan feliz pero tan débil.
-S…si, soy yo – traté de parecer normal.
-Suenas…extraño ¿Es un mal momento?, ¿Te llamo al rato? –
-No…dime, no estoy ocupado – apoyé mi mano libre en la mesita de la sala, para no perder el equilibrio.
-Bueno…yo, quería disculparme por…por desaparecer así – no era capaz de hablar con firmeza, parecía nervioso.
-Olvídalo, no tienes porque disculparte…en…en ese caso debería ser yo…por actuar de esa forma – trataba de respirar normalmente, cerré mis ojos para no marearme aun mas.
-Esto no es algo que debamos hablar por teléfono – pude oír su risa y me llenó por completo, la calidez en mi pecho…se sentía tan bien.
Tal vez demasiado bien, poco a poco fui sintiendo como la lucidez me dejaba, mis ideas desaparecían y mis fuerzas se iban.
-Lo siento…yo…no me siento bien – me disculpé antes de caer al suelo.
El peso de mi cuerpo se hizo valer, y caí sobre el piso de madera, vi también como caía el teléfono conmigo y pude oír la voz de Changmin por última vez a través del teléfono antes de caer desmayado. Se oía preocupado, gritaba mi nombre, sonreí y caí rendido.
No sé cuanto tiempo pasó, pero de la nada…comencé a sentir la calidez de unos brazos que me rodeaban, palabras amorosas y gentiles llenas de preocupación me eran susurradas al oído, las caricias de unas manos suaves y atentas, los besos de unos labios dulces, sentí amor…y me aferré a aquel sentimiento con todo lo que tenía.
- no me dejes, tú no…por favor tu no… - poco a poco aquellas palabras se convirtieron en sollozos, esa voz me era familiar.
Alguien las decía o ¿eran mi imaginación?, ¿Alguien estaba ahí conmigo? o ¿ya no tenía salvación?. Abrí los ojos lentamente y vi un rostro borroso, pero familiar, unos labios que ya me eran conocidos se apoderaron de mi boca y pude sentir en aquel beso el sabor de las lágrimas, de sus lágrimas.
-¿Changmin? – pregunté confundido, mirando a mi alrededor, nos encontrábamos en mi cuarto recostados en mi cama, él me abrazaba y sostenía entre sus brazos.
- ¿Estoy soñando? – mis ojos se llenaron de lágrimas al pensar que mi mundo ya no era más que un mundo irreal.
-No…estoy aquí contigo – Me abrazó con fuerzas, apegándome a él, mi cabeza descansaba en su pecho, podía oír los latidos de su corazón.
Lo rodeé con mis brazos, ya no me importaba si era una ilusión, alucinación, un sueño…una visión, si era real o irreal, solo me importaba el sentirlo cerca, tenerlo conmigo en esos momentos, sentirme vivo, sentir la felicidad, el calor, el corazón latir por su causa…ya no me importaba la realidad, él estaba ahí y esa era todo lo que importaba.
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WAOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO que ermoso esta muy interesante estonces el corazaon es de yunho si no me equibuco, bueno como sea no te tardes porfavor sigue este fic me encanta esta en mis favoritos gracias.
ResponderEliminarAhh~! T---T!
ResponderEliminarGosh el corazón es de mi Yunnie~? D: no se xq no me gusta HoMin u.ù! pero me encanta MinJae/JaeMin y me encanta tu fanfic! *u*! Espero lo continues pronto :3!
Bae~
hola
ResponderEliminarcreo que todas hemos llegado a la mismo conclusion, espero no equivocarme pero el corazon es de yuhnito.
pero hay algo que no entiendo por que le dijo a jae que es el siempre ha sido parte de todo
en fin cada vez nos enteremos de algo nuevo espero la continuacion
saludos
Yep, Yunho... o eso creemos +_+
ResponderEliminarMe encanta MUCHO este fic X:
La narración, la historia. El como va desarrollandose... Amor amor amor amor (8) ;o;
Ojala el proximo capítulo llege pronto~ me gusta mucho la historia u.u!
Continualo me muero por leer lo q sigue....
ResponderEliminarpor favoooooooooooooooooooor continúala!! está buenísima!!! eres una escritora genial !! no sé como se te ocurren todas esas cosas!! gracias!!!
ResponderEliminaroh no! esta demasiado interesante! ya no pudo aguantar la ansiedad >.< por favor haz la continuación!!!
ResponderEliminarcontinúala ... por favor!
ResponderEliminarya son más de 2 meses T-T ... por favor continúala!
ResponderEliminarcontii!! yaa! porfavooorr! moriree ;O;!!
ResponderEliminarwaaaaaaaaaaaaaaa impresionante,pobre min es el que siempre sufre mas waaa o sino mi ajecito,yq ue habra sido de junsu?!!!!!!!!!!!! dios continua continua plzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz no nos dejes con esta duda ;O estoy que muero,vaya si algo asi me pasa como lo de jae nose quehago,debe de dar un miedo increible todas las sensaciones y mucho ams las visiones waaa O:
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